Kurú: Revista Forestal (Costa Rica) 4(11 y 12 especial), 2007 EDITORIAL Escuela de Ingeniería Forestal, semilla de excelencia. Nueva carrera acreditada del ITCR1 La fundación de una institución de educación superior tiene como principal meta formar profesionales y generar conocimiento para impulsar e incidir positivamente en el desarrollo integral y responsable, social y ambiental de un país. Gracias a la visión de futuro del Presidente Daniel Oduber, el Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR) abrió en 1976 las carreras de Ingeniería Forestal e Ingeniería en Maderas. En 1978 se graduaron los primeros ingenieros de esas carreras y desde entonces, el ITCR ha sido uno de los principales motores del desarrollo y consolidación del sector forestal y de conservación de recursos naturales de nuestro país. Nuestros primeros egresados se toparon con el reto de crear condiciones para la reforestación comercial, el manejo y la conservación de nuestros bosques. El sector forestal no existía, lo que había era una rapante deforestación y degradación de los recursos. La industrialización de la madera era el producto de una visión de carácter minero, no se proyectaba a un desarrollo integrado y sostenible. En la otra mano, en esos mismos años, apenas se daban los primeros pasos en la conservación con la creación del Servicio de Parques Nacionales y el Servicio Forestal. En otras palabras la ruta por recorrer partía casi de cero y el camino prácticamente se abría a como se iba avanzando. Después de 30 años de la primera generación de egresados, la Escuela de Ingeniería Forestal ha sido clave en la construcción de ese camino y Costa Rica es vista como ejemplo mundial en materia de desarrollo forestal y de conservación. Costa Rica pasó a ser líder a nivel centroamericano en la reforestación comercial, integración de la industria con el bosque, la restauración de ecosistemas forestales, y líder latinoamericano en 1 Basado en el discurso del autor durante la sesión 486 del Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (SINAES), donde fue entregado el Certificado de Acreditación de la carrera de Ingeniería Forestal del Instituto Tecnológico de Costa Rica. Campus del ITCR, miércoles 5 de marzo del 2008. la creación y manejo de áreas silvestres, mecanismos e instrumentos novedosos para la conservación de bosques privados, tales como: reservas, incentivos de conservación, Pago de Servicios Ambientales, entre otros. El marco legal e institucional, que nunca se termina de mejorar, es referente para muchos países que aún enfrentan la crisis que teníamos hace 35 años. Los egresados del ITCR han sido partícipes capitales en este éxito y han acompañado el proceso desde el inicio, trabajando en los sectores público y privado, así como en las organizaciones no gubernamentales (ONG´s), la educación y la investigación, que son tan importantes en los aspectos de conservación y desarrollo sostenible. Muchos de nuestros egresados hoy ocupan puestos gerenciales o de dirección y han asumido la conducción privada o pública del sector forestal y de la conservación de los recursos naturales. A la fecha, el ITCR ha graduado un total de 560 profesionales en los campos de la Ingeniería Forestal y la Ingeniería en Maderas con el grado de bachillerato o licenciatura. Muchos de ellos han cursado sus maestrías y doctorados en las mejores escuelas forestales del mundo, sin dejar la mínima duda de la calidad de su formación académica. Algunos se han quedado a trabajar en otras naciones siendo embajadores de nuestro país y haciendo brillar nuestra alma mater. Igualmente, el ITCR ha aportado a otras naciones del mundo al formar profesionales forestales de países como Alemania, Canadá, Bélgica, Irán, Bolivia, Panamá, El Salvador, Nicaragua y Estados Unidos. Paralelo a la formación de recursos humanos, nuestra escuela ha llevado a cabo desde su inicio centenares de proyectos de educación continuada, extensión e investigación. Es sin lugar a dudas, una de las escuelas con mayor trayectoria científica y tecnológica del ITCR. Las contribuciones en estos campos han permitido al sector forestal y de conservación su consolidación en múltiples áreas. EL ITCR y su Centro de Investigación en Integración BosqueIndustria (CIIBI), son referentes obligados para el sector privado y público en materia de reforestación, manejo y conservación de recursos forestales e industrialización de la madera. Después de recorrer ese camino, podríamos resumir que el escenario forestal ha cambiado positiva y notablemente. • De una tasa de deforestación de 40 000 ha/año a finales de los años ochenta, pasamos a una tasa positiva de recuperación de bosques de 16 000 ha/año en el 2000. • La cobertura forestal pasó del 40% del territorio nacional en 1986 a más del 52% en el 2005. Lo que convierte a Costa Rica en un país de vocación forestal y de conservación. • El país reforestó más que toda Centroamérica junta durante todo este período. Llegó a la suma acumulada de más de 180 000 has de plantaciones forestales comerciales, de las cuales 40 000 se ejecutaron con pequeños finqueros y 120 000 con grandes y mediadas empresas. Muchos de los proyectos de reforestación comunitarios o empresariales se han desarrollado con modelos integrados industriales de alta tecnología y empleando sistemas se manejo silvicultural de avanzada. • Se han implementando procesos de integración bosque-industria, que hace al país un exportador de productos de madera de alta calidad y demanda a nivel mundial. • Durante este periodo el sector forestal alcanzó el 5.6% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Exporta más de 60 millones de dólares por año en productos de madera, con un balance positivo entre exportación e importación de 50 millones de dólares. • Los desechos industriales y la cosecha de madera rolliza en las fincas, como podas y raleos, son aprovechados en leña y equivalen nada menos que al 31% de la energía primaria del país. 2 • La tala o deforestación indiscriminada y degradante, se cambió por el manejo sostenido o conservación del recurso bosque. Igualmente a nivel de Centroamérica Costa Rica es líder en los procesos certificación forestal del manejo de bosques y la reforestación. • El sector de la conservación logró avances tan notables a nivel mundial, que ha merecido varios reconocimientos internacionales. Se logró consolidar más del 12% del territorio nacional en Parques Nacionales y asegurar la protección de casi otro tanto en conservación privada con el pago de servicios ambientales y con una red de reservas privadas. Por lo tanto, el reto fue enfrentado y superado. Hoy podemos decir que la misión del ITCR se ha cumplido, que entregamos y seguimos entregando un recurso humano calificado, emprendedor e idóneo, y que acompañamos el desarrollo y la conservación con investigaciones pertinentes y de impacto. Pero hoy el destino nos sigue imponiendo nuevos retos y a nivel mundial enfrentamos amenazas que no podemos soslayar. Algunas de estas amenazas son el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad, que a su vez pone en peligro no solo el equilibrio del planeta sino también, la existencia misma y pacífica del ser humano, por la crisis de los recursos hídricos, las enfermedades y el impacto de las alteraciones climáticas como los huracanes, sequías, la desaparición de los glaciares y el aumento del nivel del mar. Estos son retos que aluden a todas las naciones del mundo, su origen se debe al estilo de desarrollo que hemos tomado y a la falta de visión y conciencia clara de los líderes políticos y sociales. En este nuevo reto, los forestales tenemos una gran contribución que aportar y esa tarea nos ennoblece en todo sentido. La conservación y manejo de nuestros recursos forestales ya no son solo un mero interés nacional, son una misión mundial a la cual debemos acometernos con más tesón desde el ITCR. ¿Que tiene que ver el proceso de acreditación con todo esto? Tiene que ver con todo. Gracias al proceso de acreditación hemos recuperado nuestra memoria institucional, hemos confrontado nuestros logros y trabajo contra las demandas históricas, presentes y futuras. Hemos reencontrado nuestra razón de ser al auto-evaluarnos y así comprender finalmente que la Escuela Forestal es y será uno de las principales razones del éxito de este pequeño país a nivel mundial; que nuestro trabajo hoy trasciende a un nivel planetario en la búsqueda de un desarrollo sostenible que desvíe la tendencia destructiva que nos lleva a la colisión total. El proceso de acreditación nos ha llevado a proponer un nuevo programa de estudios con grado de licenciatura, que responde a estos nuevos retos y hace justicia a la carga académica de nuestros estudiantes. Nuestros estudiantes recibirán una formación académica y profesional que les permitirá continuar como agentes de cambio nacional o internacional. Nuevos campos de la profesión se han visto fortalecidos en este nuevo programa: genética forestal, industria de la madera, tecnologías de información espacial como los sistemas de información geográfica y los sensores remotos, y la integración de nuevos temas como el manejo de cuencas y áreas silvestres. La acreditación no solamente nos ha permitido reinventarnos, también nos ha permitido revelar el alto nivel académico que gozamos a nivel latinoamericano. La evaluación de los pares ha ratificado que el ITCR tiene una de las mejores escuelas forestales de América Latina, y que esa distinción no ha sido casual, ha sido el trabajo de muchos académicos y administrativos de la escuela desde su creación. La acreditación nos ordena y nos deja un proceso continuo de mejora de calidad, el cual debemos de seguir fielmente. Este proceso es un compromiso de la escuela y de la institución, y es la garantía a nuestros estudiantes de que disfrutarán la mejor educación y formación profesional en el campo forestal. En adelante potenciaremos las fortalezas, tomaremos las 3 oportunidades, minimizaremos nuestras debilidades y enfrentaremos las amenazas con visión estratégica y renovada. Al recibir esta acreditación los estudiantes, los egresados y la facultad, debemos celebrar uno de los mayores logros, un logro que nos distingue y que nos compromete aún más a dar lo mejor de nosotros por nuestra querida institución y país. Igualmente toda la comunidad del ITCR debe celebrar que una escuela más ha logrado la más alta calificación, la acreditación de SINAES, y con esto se demuestra contundentemente ante la comunidad nacional e internacional, que el ITCR ha asumido responsablemente la misión que se le encomendó desde su creación. Celebremos todo el gozo de saber que hemos cumplido la tarea, que hemos sido buena semilla, que seguimos sembrando y cosechando con excelencia. Atisbamos un nuevo camino a recorrer, pero sin temor el ITCR lo transitará, la excelencia académica es nuestro mejor acervo para el éxito en este nuevo reto. Julio César Calvo Alvarado Ph.D. Director Escuela de Ingeniería Forestal Instituto Tecnológico de Costa Rica [email protected] Agradecimientos. El autor desea hacer los siguientes agradecimientos y reconocimientos: − A las instancias y personas que han asistido de manera tan profesional y que nos han animado siempre durante este proceso de acreditación. − A la Ing Mayra Alvarado Urtecho, ex-directora de SINAES, quien fue la primera persona en motivarnos para que nuestra escuela fuera acreditada. − A la Comisión de Autoevaluación de la Escuela de Ingeniería Forestal, cuyos miembros llevaron a acabo la coordinación de este arduo proceso. − Al personal docente, administrativo, estudiantes y egresados de la carrera y empleadores, por creer, comprometerse y ser partícipes de la auto-evaluación con miras a la acreditación. − Al Centro de Desarrollo Académico (CEDA) del ITCR, principalmente a los Lic. Eva Meza y Rodolfo Sánchez, por la dirección y acompañamiento durante el proceso. − Al Dr. Gerardo Meza, ex-vicerrector de Docencia, a la M.Sc. Giannina Ortiz, Vicerrectora de Docencia, al Consejo Institucional del ITCR y a nuestro Rector, M.Sc. Eugenio Trejos, quienes siempre nos apoyaron en este proceso. − A toda la comunidad del ITCR que siempre ha creído y apoyado a esta escuela. 4