Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia “En todo lo que hacemos, tienen prioridad los niños más desfavorecidos y los países más necesitados.” – La misión de UNICEF RECONOCIMIENTOS La presente guía fue elaborada de manera conjunta por Stephen Hanmer, Especialista en temas parlamentarios y de la sociedad civil, y Malia Robinson, asesora, bajo la orientación general y supervisión de Liza Barrie, Jefa de Alianzas con la Sociedad Civil, y el Dr. Nicholas Alipui, Director de Programas. Jaclyn Tierney ofreció apoyo editorial y Susan Markisz apoyo fotográfico. Tina Johnson prestó apoyo editorial. Vicente Echerri realizó la traducción al español. Las versiones anteriores de esta guía fueron puestas a consideración de las oficinas regionales y de países de UNICEF, así como de la Sede de la organización. La publicación contiene más de 40 ejemplos provenientes de esas oficinas de UNICEF que no podrían haber sido elaborados sin el apoyo y las aportaciones de las mismas. Nuestro especial agradecimiento a las oficinas regionales y de países de Afganistán, Angola, Argelia, Bangladesh, Bhután, Bolivia (Estado Plurinacional de), Camboya, Ecuador, Egipto, El Salvador, Filipinas, Haití, India, Indonesia, Irán, Kenya, Liberia, Mauritania, Namibia, Nepal, Nicaragua, Nigeria, la Oficina Regional para África occidental y central, la Oficina Regional para América Latina y el Caribe, Perú, República Democrática del Congo, República Dominicana, República Unida de Tanzania, Senegal, Sierra Leona, Sudán, Swazilandia, Timor-Leste, Venezuela y Zimbabwe. Las siguientes divisiones de la Sede de UNICEF también suministraron observaciones: Programas (especialmente los de salud; agua y saneamiento; nutrición; VIH/SIDA; Protección de la infancia; Educación; Desarrollo en la primera infancia); Políticas y prácticas (especialmente con respecto a la comunicación para el desarrollo y las cuestiones de género y los derechos de la mujer); Programas de emergencia; e Investigación y evaluación. A fin de obtener sus respectivas aportaciones, la guía también fue compartida con aliados de diversas organizaciones externas, entre ellas American Jewish World Service, la Secretaría de Desarrollo Internacional del Arzobispado de Canterbury, Arigatou International, Better Care Network, el Colegio de Teología de la Universidad de Boston, Servicios Católicos de Socorro, Center for Interfaith Action on Global Poverty, la Red de Información sobre los Derechos del Niño (CRIN), Christian Alliance for Orphans, Churches Network for Non-Violence, la Universidad de Columbia, el Comité de Organizaciones No Gubernamentales Religiosas en las Naciones Unidas, Council for a Parliament of the World’s Religions, Socorro y desarrollo episcopal, Faith to Action, Full Circle Partners, el Centro Berkley para la ii religión, la paz y los asuntos mundiales de la Universidad de Georgetown, la Red Global de Religiones a favor de la Niñez, Global Working Group On Faith, SSDIM and HIV, el Seminario de Hartford, Interfaith Center of New York, Socorro Islámico, Islamic Society of North America, el Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), Micah Challenge International, Office of Religious Life de Princeton University, Plan International, Pastoral da Criança, Religiones por la paz, la Oficina Cuáquera ante las Naciones Unidas, el Colegio Saint Olaf, Save the Children, Search for Common Ground, la Secretaría General de la Cumbre Espiritual Islámica y el Comité Cristiano-Musulmán del Líbano en pro del diálogo, la Oficina del Representante Especial del Secretario General sobre la violencia contra los niños, Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP), United Religious Initiative, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, Viva Network, Washington Network of Children in Armed Conflict, el Banco Mundial, Día mundial de oración y acción por la infancia, y World Vision. Por intermedio del Comité Nacional pro UNICEF de Japón, Arigatou International brindó apoyo financiero a la elaboración de esta guía. © Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) Mayo de 2012 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) Alianzas con la sociedad civil, Programas 3 United Nations Plaza New York, NY 10017, EEUU www.unicef.org Para reproducir cualquier sección de esta publicación es necesario solicitar permiso.Se garantizará el permiso de reproducción gratuito a las organizaciones educativas o sin fines de lucro. A otro tipo de entidades se les solicitará que paguen una pequeña cantidad de dinero. ISBN: 978-92-806-4620-7 Diseño: CREATRIX Design Group Producción: Colorcraft of Virginia, Inc. PREFACIO Mucho antes de que UNICEF existiera, las comunidades religiosas ya se encontraban entre las entidades que con mayor intensidad defendían a los niños y niñas más necesitados del mundo, proporcionando orientación, ayuda y consuelo a millones de familias desfavorecidas. De hecho, la Convención sobre los Derechos del Niño –el tratado de derechos humanos más ampliamente aceptado en el mundo– refleja valores profundamente arraigados en las tradiciones religiosas, que defienden la dignidad inherente a todos los niños y el papel central que desempeña la familia en el fomento de comunidades sólidas. Hoy en día, las comunidades religiosas siguen siendo un aliado indispensable en la labor de UNICEF para promover los derechos de los niños y mejorar su bienestar. Estas alianzas son especialmente importantes en un momento en que hemos renovado nuestro interés en llegar a los niños y las familias más pobres, más vulnerables y más aislados. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia está destinado principalmente a fortalecer estas alianzas y lograr que sean aún más eficaces mientras trabajamos juntos para mejorar la vida de los niños. La publicación presenta información valiosa sobre las tradiciones religiosas al describir las diversas perspectivas que existen a menudo incluso dentro de una misma tradición. La guía también incluye ejemplos útiles de alianzas y mejores prácticas mediante una amplia gama de esferas programáticas que incluyen la protección de la infancia, la educación, la salud, la nutrición y el VIH/SIDA, entre otros temas. Y ofrece una gran cantidad de recursos para el personal que trabaja sobre el terreno, incluidos otros aliados en las Naciones Unidas y los organismos multilaterales, así como organizaciones de la sociedad civil en un amplio espectro de esferas de interés. Para tener éxito a la hora de lograr que nuestras relaciones con las comunidades religiosas sean aún más profundas, debemos esforzarnos no sólo para identificar los puntos que tenemos en común y aprovechar al máximo nuestras ventajas comparativas, sino también para fomentar un diálogo abierto, incluso sobre temas complejos y sensibles. Esto es especialmente cierto en el tratamiento de las actitudes y las prácticas que a veces se vinculan a las creencias religiosas y que perjudican a los niños física o emocionalmente, o les excluye de una participación plena en sus sociedades. Mucho se ha logrado ya través de la intensa colaboración entre las comunidades religiosas y UNICEF; con la publicación de esta guía, podremos aprovechar más plenamente el enorme potencial de estas relaciones. Juntos, sacaremos partido de los puntos fuertes de cada uno y conseguiremos muchos más resultados en favor de los niños. Anthony Lake Director Ejecutivo de UNICEF Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia iii CONTENIDO RECONOCIMIENTOS............................................................................................................ii PREFACIO.............................................................................................................................iii 1. PANORAMA GENERAL....................................................................................................2 2. ALIANZAS PARA LOGRAR RESULTADOS EQUITATIVOS PARA LOS NIÑOS..............6 ¿Que son las comunidades religiosas?....................................................................7 ¿Por qué conviene colaborar con las comunidades religiosas?...........................10 Valores compartidos.......................................................................................11 Autoridad moral y capacidad de liderazgo...................................................11 Redes amplias.................................................................................................12 Los niños, la religión y la espiritualidad.................................................................15 3. ALIANZAS INTEGRADAS EN DIVERSOS SECTORES PROGRAMÁTICOS.................16 Protección de la infancia..........................................................................................18 Educación..................................................................................................................22 Salud..........................................................................................................................25 VIH y SIDA.................................................................................................................29 Nutrición....................................................................................................................33 Agua, saneamiento e higiene..................................................................................36 Las cuestiones intersectoriales...............................................................................39 Desarrollo de la primera infancia..................................................................39 Acción humanitaria.........................................................................................40 Igualdad de género.........................................................................................42 Participación de los niños..............................................................................44 4. EVITAR EL USO INDEBIDO DE LA RELIGIÓN...............................................................46 5. MARCO PARA LA PARTICIPACIÓN................................................................................50 Comprender los valores y las estructuras y a los dirigentes religiosos..............51 Concentrarse en los valores compartidos y en la aplicación de un marco de referencia basado en los derechos..............................................54 Garantizar la imparcialidad......................................................................................55 Establecer cuáles son los puntos de entrada estratégicos...................................56 Integrar las alianzas en el trabajo programático...................................................60 Aprovechar la capacidad técnica y el poder de convocatoria..............................60 Garantizar la capacidad adecuada..........................................................................62 6. PLANIFICACIÓN, SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN.......................................................64 Anexos.................................................................................................................................70 Anexo 1: Los protagonistas principales.....................................................................70 Las Naciones Unidas................................................................................................70 Las organizaciones no gubernamentales...............................................................72 El sector académico y de la investigación....................................................72 Las organizaciones religiosas........................................................................73 Las organizaciones, redes y alianzas religiosas e interreligiosas...............74 Anexo 2: Recursos importantes..................................................................................80 El desarrollo general y los derechos de los niños.................................................80 La protección de la infancia.....................................................................................81 La supervivencia y el desarrollo de los niños........................................................82 El desarrollo en primera infancia............................................................................82 La educación.............................................................................................................83 VIH y el SIDA.............................................................................................................83 La acción humanitaria..............................................................................................84 Anexo 3: Modelo de marco lógico..............................................................................85 REFERENCIAS.....................................................................................................................90 FOTOGRAFÍAS....................................................................................................................94 1 PANORAMA GENERAL 2 Una persona que vive con VIH recibe un brazalete budista “bendecido” de uno de los monjes que ofrecen apoyo espiritual y emocional a los asistentes a las sesiones de grupo de autoayuda que forman parte de la respuesta del Gobierno y de UNICEF ante la epidemia (República Popular Democrática Lao). “Encontramos un sólido consenso en todas nuestras tradiciones religiosas acerca de la dignidad intrínseca de todas las personas, incluidos los niños… Nuestras tradiciones religiosas asumen una visión holística de la vida de un niño, y buscan por tanto amparar todos los derechos del niño en el contexto de su familia, su comunidad y su más amplio entorno social, económico y político. Todos los niños y las niñas poseen estos derechos por igual, y debemos garantizar que unos y otras tengan iguales oportunidades de disfrutar de estos derechos, particularmente la educación, la protección, la salud, el desarrollo social y la participación comunitaria”. — Un compromiso multirreligioso para hacer frente a la violencia contra los niños1 UNICEF y otras organizaciones de defensa de los derechos* de los niños comparten una larga historia de alianzas y colaboración con las comunidades religiosas de todos los credos con respecto a una amplia gama de cuestiones que afectan a los niños. Las comunidades religiosas ocupan una posición privilegiada cuando se trata de fomentar los resultados equitativos a favor de los niños y familias más vulnerables. La influencia moral que detentan, así como las redes amplias que controlan, les brindan acceso a los sectores más desvalidos y vulnerables de la población, aquellos a los que las organizaciones internacionales y los gobiernos tienen a veces mas dificultad para ayudar de manera eficaz. Las comunidades religiosas también se sustentan en marcos de referencia filosóficos que convierten su vocación de servicio comunitario en compromisos permanentes con la búsqueda de la paz, la justicia y la igualdad social. La Convención sobre los Derechos del Niño, que es el instrumento jurídico de protección de los derechos de los niños más amplio y más ratificado de la historia, tiene diversos componentes que reflejan valores compartidos por las principales tradiciones religiosas del mundo. Entre ellos figuran: • • • La creencia fundamental en la dignidad de los niños. • Una visión holística de los niños y una comprensión integral de sus necesidades físicas, emocionales, sociales y espirituales2. La convicción de que la familia es el ámbito más adecuado para la crianza de los niños. La alta prioridad que se adjudica a los niños y niñas y el concepto de que todos los integrantes de la sociedad tienen derechos y obligaciones con respecto a ellos. Además de los potenciales beneficios que aporta la participación de los representantes religiosos en las alianzas, la religión y la espiritualidad pueden ejercer influencias profundas en el desarrollo individual y social de los niños, además de ofrecer la posibilidad de reforzar las influencias positivas sobre ellos y fomentar su capacidad de recuperación. Las creencias, prácticas, redes sociales y recursos que ofrece la religión pueden generar esperanzas, dar sentido a las experiencias difíciles y brindar apoyo emocional, físico y espiritual. Las consecuencias pueden ser más profundas cuando las labores de defensa y promoción de los derechos de los niños se fundamentan en los aspectos protectores de las creencias y prácticas religiosas de una comunidad. A pesar de las funciones positivas que las comunidades religiosas pueden desempeñar, es importante reconocer que a veces hay ciertos motivos de preocupación a la hora de trabajar en alianza con estos grupos. A pesar de que los valores fundamentales de todas las grandes tradiciones religiosas defienden la dignidad y el derecho al bienestar de los niños, algunas creencias, actitudes y prácticas relacionadas con las religiones promueven o toleran la violencia y la discriminación contra los niños. Tanto si se trata de principios religiosos reales, como si la religión se utiliza de modo indebido para justificar creencias *E n esta guía, el término “organizaciones de defensa de los derechos de los niños” se refiere a las ONG y redes sin afiliación religiosa. Las organizaciones de defense de los derechos de los niños que guardan vínculos con diversas religiones aparecen en este documento como “organizaciones religiosas”. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 3 y prácticas nocivas, estos factores pueden violar la integridad física, emocional y espiritual del niño. También existe el temor de que las organizaciones religiosas presionen a los receptores de ayuda para convertirlos, o que se limiten a proporcionar ayuda únicamente a las personas que tienen similares puntos de vista religiosos. Algunas actitudes y comportamientos que se considera que están basados en la religión están, de hecho, enraizados en otras normas sociales y culturales. Estas distinciones son importantes, ya que los actores religiosos pueden poner en tela de juicio y rectificar las prácticas nocivas que se basan en otros valores culturales. Persisten, sin embargo, las preocupaciones válidas acerca de la colaboración con actores religiosos cuyos enfoques y prácticas están tan alejados de los principios de los derechos infantiles que la colaboración con ellos podría debilitar la integridad, la neutralidad y la eficacia de las organizaciones que trabajan para hacer realidad los derechos de los niños. Al mismo tiempo, algunas comunidades religiosas también tienen resquemores con respecto a las organizaciones de defensa de los derechos de los niños. Algunas, por ejemplo, tienen reservas con respecto a la colaboración con estructuras seculares y temen ser manipuladas o usadas con fines seculares3. En algunas comunidades religiosas existe el temor de que el lenguaje y los principios sobre los derechos de los niños contradigan sus creencias básicas y les obliguen a sacrificar sus valores. Es imprescindible comprender esas inquietudes, así como entender las razones por las que las comunidades religiosas pueden, por otra parte, aliarse con las organizaciones defensoras de los derechos de los niños. Las alianzas tienden a ser más productivas cuando se basan en la comprensión mutua, el respeto, la confianza y las prioridades compartidas entre las partes, además de un diálogo franco entre ellas. La experiencia en materia de colaboración con las comunidades religiosas pone de relieve la importancia de que quienes participen en la esfera de los derechos de los niños cuenten con los conocimientos, las aptitudes Las Naciones Unidas y las comunidades religiosas La colaboración de las Naciones Unidas con las comunidades religiosas ha aumentado de manera significativa en los últimos 20 años. Varias resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, como la Resolución 65/138 de 2010, sobre el “Fomento del diálogo, la comprensión y la cooperación entre las religiones, las culturas y las civilizaciones en pro de la paz” y la Semana Mundial de la Armonía Interconfesional, que comenzó a celebrarse en 2011, reflejan la creciente visibilidad e importancia que se otorga a la religión. Además de UNICEF, muchos otros organismos de las Naciones Unidas, como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP) y el Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), tienen una rica experiencia en materia de colaboración con las comunidades religiosas. El creciente compromiso por parte de las Naciones Unidas también se refleja en la creación en 2009 del Equipo de tareas interinstitucional sobre organizaciones religiosas y los Objetivos de Desarrollo del Milenio4, constituido actualmente por tres organismos de las Naciones Unidas, cuyo propósito consiste en garantizar la existencia de una plataforma común y de medios idóneos para compartir ideas y los resultados del compromiso del organismo internacional. ¿A qué se refiere UNICEF cuando habla de un enfoque basado en la equidad? Para UNICEF, equidad significa que todos los niños y niñas disfruten de la oportunidad de sobrevivir, desarrollarse y llegar al máximo de su potencial sin sufrir los efectos de la discriminación, los prejuicios o el favoritismo. Esa interpretación guarda coherencia con la Convención sobre los Derechos del Niño, que garantiza los derechos fundamentales de todos los niños independientemente de su género, raza, creencias religiosas, situación económica, atributos físicos, ubicación geográfica u otras características individuales. Mediante el enfoque basado en la equidad que aplica en sus programas y políticas, UNICEF trata de comprender y dar respuesta a las causas 4 profundas de la desigualdad, de manera que todos los niños, y en especial los que sufren mayores privaciones, tengan acceso a la educación, la atención de la salud, el suministro de saneamiento y agua potable, la protección y otros servicios imprescindibles para su supervivencia, crecimiento y desarrollo. Como queda demostrado en esta guía, los valores, la influencia moral y las redes amplias de las que disponen las comunidades religiosas les ponen en una situación privilegiada con respecto al logro de resultados equitativos para los niños, niñas y familias en mayor situación de necesidad. Enlaces de UNICEF en el trabajo con las comunidades religiosas La sección de Alianzas con la Sociedad Civil, Programas, sirve como punto de enlace de UNICEF con respecto al trabajo con las comunidades religiosas. Esta sección ofrece orientación técnica y presta apoyo en la sede y las oficinas nacionales y regionales que trabajan con comunidades religiosas. Uno de los principales objetivos de la sección es facilitar el intercambio de conocimientos y experiencias entre las oficinas nacionales y regionales, así como servir de enlace con las organizaciones y las iniciativas externas mundiales y regionales. Para obtener más información o para compartir experiencias pertinentes, visite <http://www.unicef.org/about/partnerships/index.php>. y las actitudes adecuadas para la colaboración. Es importante, por ejemplo, que comprendan lo inmensamente complejas y diversas que son las comunidades religiosas. Aún en el seno de las propias tradiciones religiosas se produce una contextualización de la teología moral, de su interpretación y de su implementación. Además, los dirigentes de distintas religiones pueden tener puntos de vista diversos que es necesario comprender para poder identificar puntos de entradas para el diálogo y el establecimiento de alianzas con respecto a los temas más delicados. En último término, las alianzas deberían aumentar el bienestar de los niños aprovechando los puntos fuertes de las comunidades religiosas, además de aprender de ellas a fin de establecer las prioridades programáticas. En muchos contextos del trabajo de las organizaciones defensoras de los derechos de los niños, las creencias religiosas constituyen un factor importante con respecto a las actitudes y comportamientos de las comunidades. Al elaborar sus teorías sobre el cambio, los responsables de los programas deben comprender esos procesos dinámicos, tanto los positivos como los negativos, y tener en cuenta los factores religiosos. En contextos de esa índole, no se trata de determinar si se debe lograr el compromiso de las comunidades religiosas sino más bien de qué manera se puede obtener5. También es importante tener presente que las distinciones que separan las estructuras religiosas de las seculares no son siempre claras, habida cuenta de la importancia que tiene la religión en la vida de muchas personas, incluso de funcionarios de gobierno e integrantes de la sociedad civil que trabajan en instituciones seculares. Tanto en UNICEF como en otras organizaciones defensoras de los derechos humanos trabajan personas para quienes la religión es un factor importante; estas personas pueden servir de vínculo para comprender mejor a las comunidades religiosas y lograr su participación. El objetivo principal de esta guía consiste en servir de documento de referencia al personal de UNICEF y a sus aliados (incluidas otras organizaciones defensoras de los derechos de los niños), con respecto al establecimiento de alianzas eficaces con las comunidades religiosas en general, y en particular con los dirigentes religiosos, sus redes y las comunidades religiosas locales. • En la Sección 2 se explica claramente por qué y de qué manera las comunidades religiosas pueden representar una gran ayuda con respecto a la promoción de los derechos de los niños. • En la Sección 3 se ofrecen ejemplos concretos de colaboración en las esferas principales de programas y promoción de UNICEF. • • La Sección 4 se refiere a los desafíos que presenta el uso indebido de la religión. En la Sección 5 se bosquejan diversas estrategias para lograr la participación eficaz de las comunidades religiosas. • En la Sección 6 se tratan someramente varios enfoques de planificación, seguimiento y evaluación de los programas de alianzas. • Varias secciones adicionales están dedicadas a los protagonistas principales, los recursos y la información. En un documento de trabajo separado se brinda una breve sinopsis de las principales tradiciones religiosas para que sirva de referencia en el futuro. Nota: Esta guía menciona los principios y las prácticas de las tradiciones religiosas, tal como los interpretan los actores religiosos de esas tradiciones. Estas opiniones no son interpretaciones realizadas por UNICEF. No es función de UNICEF interpretar los textos, prácticas o tradiciones religiosos. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 5 2 ALIANZAS PARA LOGRAR RESULTADOS EQUITATIVOS PARA LOS NIÑOS 6 Un líder religioso musulmán con un niño pequeño en un centro de desarrollo infantil que recibe apoyo de UNICEF (República Democrática del Congo). ¿Qué son las comunidades religiosas? El término “comunidades religiosas” se refiere en términos generales tanto a los hombres como a las mujeres religiosas y a los sistemas y estructuras que dan carácter institucional a los sistemas de creencias en el marco de las tradiciones religiosas en todos los entornos, desde los ámbitos locales hasta el ámbito mundial6. Entre ellas figuran: • • • • • • • • • Las comunidades de culto locales, como iglesias, mezquitas, sinagogas, templos, etc. Las jerarquías religiosas, como los obispos, clérigos, imanes, lamas, etc. Los eruditos, teólogos y docentes religiosos. Los misioneros. Las agrupaciones juveniles religiosas o interconfesionales. Las mujeres que forman parte de las redes de agrupaciones religiosas. Organizaciones religiosas o inspiradas en la religión. Las instituciones, asociaciones y redes confesionales, ecuménicas e intraconfesionales. Las instituciones interconfesionales. Las estructuras organizativas de las comunidades religiosas, así como la posición y estatus sociales de las mismas, son notablemente diversas y complejas.“El tamaño, la misión, las funciones, el alcance geográfico y la capacidad técnica de estas comunidades son muy variados. Algunas tienen presupuestos muy limitados mientras que otras administran más de mil millones de dólares por año… Algunas organizaciones se inspiran en términos muy generales en principios religiosos, mientras que otras están formalmente vinculadas con instituciones religiosas7”. Es importante comprender a las comunidades religiosas de acuerdo a la manera en que ellas se identifican a ellas mismas. Estructuras En su mayoría, las principales tradiciones religiosas cuentan con organizaciones y asociaciones interconfesionales (o confesionales) cuyo objetivo consiste en consolidar el poder colectivo de sus diversas ramas o denominaciones para aumentar su capacidad de impulsar las políticas y las actividades de promoción y de otra índole que beneficien o propaguen sus principios religiosos. “El grado de estructuración… varía, ya que el sector abarca tanto a las comunidades religiosas definidas con estructuras jerárquicas de conducción como a los ‘movimientos’ descentralizados de individuos que comparten principios e intereses8”. Algunas comunidades religiosas forman organizaciones, redes o instrumentos con otros fines específicos. Entre ellas, algunas de las que se destacan en los contextos del desarrollo y la ayuda humanitaria son conocidas como organizaciones religiosas en algunos casos y como organizaciones inspiradas en la religión en otros. Se trata de organizaciones que funcionan de manera muy similar a otras organizaciones no gubernamentales que apoyan el desarrollo y, en muchos casos, las respuestas de emergencia humanitaria en todo el espectro de la programación. Sin embargo, la gama completa de las comunidades religiosas abarca un número mucho mayor de agentes y estructuras que deberían ser mejor comprendidos por todos los que participan en la esfera de los derechos de los niños. Aunque se les suele pasar por alto, una buena parte del trabajo más eficaz en esta esfera lo llevan a cabo de manera discreta diversas agrupaciones religiosas de mujeres o jóvenes encabezadas por integrantes de las comunidades religiosas que pueden no cumplir funciones oficiales de liderazgo, pero que ocupan la primera línea en las labores de promoción y prestación de servicios a quienes se encuentran en situación de mayor necesidad en el plano comunitario. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 7 Las comunidades religiosas también pueden formar de manera estructurada o no estructurada redes y plataformas que no se limitan a su culto. Estos mecanismos interreligiosos aprovechan los recursos sociales, espirituales, morales y de otra índole de las diferentes comunidades religiosas para hacer frente a problemas en común y lograr cambios positivos mediante el aprovechamiento de sus puntos fuertes colectivos y complementarios9. Muchas de ellas concentran sus esfuerzos de manera específica en el fomento y la protección de los diversos aspectos de los derechos de los niños. En el cuadro que figura en la página siguiente se brinda una sinopsis de las funciones que pueden desempeñar los diversos agentes religiosos según sus características. Compromisos con las tradiciones indígenas Esta guía se refiere en un grado mayor a la colaboración con las principales tradiciones religiosas que al trabajo con las tradiciones indígenas. Sin embargo, la colaboración con las comunidades indígenas tiene suma importancia y UNICEF está elaborando una guía sobre cuestiones relacionadas con los grupos indígenas y minoritarios para que su personal pueda dar respuesta a una de las recomendaciones principales del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas. UNICEF también tiene una participación muy activa en ese aspecto a nivel de países, ya que implementa varios programas y actividades diseñados específicamente para impulsar los derechos de los pueblos indígenas. Esas actividades abarcan desde la educación bilingüe e intercultural hasta la prestación de servicios de salud adecuados a las pautas culturales de la población, la inscripción de los nacimientos y la lucha contra la violencia, el abuso y la explotación de los que son objeto los niños y niñas indígenas. Para citar un ejemplo, desde 2004 la Oficina Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe implementa por medio de 17 de sus oficinas de países un programa sobre los derechos de los niños indígenas mediante el cual genera información estratégica, potencia a los pueblos indígenas (en especial a las mujeres y los adolescentes) y colabora con la creación de capacidad del personal de UNICEF y de sus contrapartes, en su mayoría en el ámbito gubernamental. Un niño indígena de ocho años de una zona donde UNICEF apoya la capacitación de maestros y líderes comunitarios para promover los idiomas y las costumbres tradicionales (Venezuela). 8 Funciones potenciales de los diversos agentes religiosos según sus características Agente religioso Descripción Funciones potenciales ONG basadas en la religión • ONG inspiradas en la religión que funcionan en las esferas del desarrollo, tanto religiosas como seculares, lo que les exige desempeñarse de manera eficaz en ambas. • Aunque están relacionadas con congregaciones religiosas, a veces pueden funcionar independientemente de las jerarquías religiosas y desempeñarse con cierto grado de autonomía y flexibilidad. • Algunas organizaciones religiosas de mayor envergadura y de carácter internacional cuentan con complejas estructuras burocráticas dotadas de notable capacidad técnica y administrativa. • La gestión de programas, entre ellos la prestación de servicios, las labores de promoción y de investigación y análisis. • La movilización de las congregaciones religiosas para que realicen trabajo voluntario o brinden apoyo financiero o de promoción. • El establecimiento de vínculos más profundos e importantes entre las labores religiosas en el plano local y entre éstas y el conjunto más amplio de las personas y organizaciones dedicadas a las cuestiones del desarrollo. Los vínculos pueden abarcar el intercambio de conocimientos, el establecimiento de alianzas y la movilización de recursos. • La creación de capacidad de quienes llevan a cabo labores religiosas a nivel local. Redes e intermediarios basados en la religión • Funcionan a nivel nacional, regional y mundial, y se componen de miembros inspirados en la religión, que a veces representan tradiciones religiosas y perspectivas diversas. • Pueden representar a grandes grupos de creyentes inspirados en la religión. • La movilización y representación de una voz colectiva moral; la participación en las labores de promoción. • La movilización de los creyentes para que lleven a cabo trabajos voluntarios y presten apoyo financiero y de promoción. • Las labores de coordinación e intermediación entre los integrantes de las agrupaciones religiosas y entre los miembros y la comunidad más amplia de los agentes de desarrollo, incluso como plataforma donde se comparten conocimientos, se establecen redes, se llevan a cabo labores de coordinación y se movilizan recursos. • Brindan servicios de apoyo a los miembros, como por ejemplo, los de creación de capacidad, asistencia técnica, establecimiento de normas. Infraestructura de prestación de servicios basada en la religión • Abarca la infraestructura de prestación de servicios “tangibles “, como las escuelas, las clínicas y los hospitales. • Grados variables de adecuación a la infraestructura nacional de prestación de servicios. • Puede tener una larga historia de prestación de servicios en el ámbito local, una tradición de trabajo con las poblaciones marginadas y profundos conocimientos de la realidad local. • Funciona en la primera línea prestando servicios directos a las comunidades locales. • Ejerce influencia sobre los comportamientos mediante la prestación de servicios. Dirigentes religiosos internacionales y nacionales • Suele tratarse de figuras públicas visibles y respetadas. • Líderes de la opinión pública con influencia cultural y política, además de dirigentes intelectuales que interpretan los textos religiosos y propagan ideas. • Su influencia puede transcender el marco de sus religiones y fronteras geográficas. • Una voz con autoridad moral y una plataforma que pueden emplear para influir y motivar a sus seguidores, así como a otras personas. • Pueden ejercer influencia directa en sus seguidores o por medio de los dirigentes locales a través de las jerarquías religiosas, cuando éstas existan. • Desempeñan labores de promoción ante los responsables de las políticas pertinentes. Jerarquías confesionales • El grado de organización y centralización de la autoridad varía según la religión. • Pueden influir en los aspectos políticos y culturales. • Guían, coordinan y respaldan el trabajo de sus correspondientes comunidades religiosas. • Sirven de canales de comunicación para que las cuestiones que afectan a los dirigentes religiosos y laicos locales lleguen a oídos de los dirigentes religiosos en el plano nacional e internacional. • Desempeñan labores de promoción ante los responsables de las políticas pertinentes. Congregaciones y templos locales • Las congregaciones y sus dirigentes tienen profundas raíces en sus comunidades y son puntos de referencia de los creyentes. • Los dirigentes religiosos locales suelen ser personas dignas de confianza en sus comunidades que, en algunas ocasiones, pueden ejercer influencia en las políticas nacionales. • Los dirigentes religiosos locales pueden ser agentes de cambio eficaces, ya que cuentan con la capacidad de movilizar a sus congregaciones influyendo en sus actitudes y comportamientos y motivándoles para que pasen a la acción y participen en las actividades de promoción. • Los miembros de las congregaciones pueden ser movilizados en el plano local o a través de las fronteras para que hagan donaciones, realicen trabajo voluntario y lleven a cabo labores de promoción o de vigilancia en sus comunidades. • Los templos pueden ser sitios de reunión de los pobladores o servir de centros de distribución. Fuente: Extractado de Center for Interfaith Action on Global Poverty, 201010. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 9 ¿Por qué conviene colaborar con las comunidades religiosas? “El instinto de cuidar a los niños nace de lo más profundo de las enseñanzas y de la visión espiritual de todas las tradiciones religiosas, que alientan a los creyentes a comprometerse en la toma de medidas prácticas que beneficien a los niños. El cumplimiento de ese compromiso requiere la colaboración mutua de las comunidades religiosas, así como de cada una de ellas con sus aliados, porque se trata de retos que afectan a todas las religiones y que son demasiado grandes para que cada grupo los pueda superar por sí solo”. — Conferencia Mundial de Religiones por la Paz11 Los agentes religiosos mantienen profundas relaciones de confianza con sus comunidades y vínculos firmes con los integrantes más vulnerables y en situación de mayor desventaja de las mismas. Debido a ello, están especialmente capacitados para combatir las desigualdades relacionadas con factores sociales, como las normas sociales, los comportamientos y las prácticas que afectan el acceso a los servicios, alientan la discriminación o aumentan la privación, y por lo tanto influyen de manera positiva en los esfuerzos en pro de la conquista de los derechos de los más excluidos. Asistencia a los más vulnerables Las principales religiones del mundo hacen hincapié en la virtuoso o incorrupto). El Bhagavadgita (17:20) enseña que importancia de satisfacer las necesidades de las personas deberíamos ser generosos con los necesitados y hacer donaciones en instancias y lugares donde nuestro apoyo y comunidades marginadas. sea más necesario. Además, deberíamos hacerlo sin En el budismo, el karuna (la compasión o el amor por esperar que se nos dé nada a cambio13. todos los seres vivos) es, junto a la prajna (sabiduría), uno de los pilares centrales de la fe. Una de las expresiones En el Islam la justicia social es un valor sagrado y un del karuna y uno de los actos meritorios más importantes principio central de la fe. El Zakat y el sadaqa’h están (puya) es la dana (caridad), que consiste en actuar de diseñados para equilibrar las desigualdades sociales manera generosa con todas las criaturas vivas, y más y fomentar la formación de una sociedad más justa. frecuentemente con las comunidades monacales12. Los De hecho, el Corán considera que la caridad es una de las obras más virtuosas, ya que pone en cuestión las monjes y monjas, a su vez, brindan cuidados y apoyo a injusticias sociales. El Zakat, que es uno de las cinco quienes padecen sufrimientos y necesidades. pilares del Islam, es un tipo de caridad obligatoria En el cristianismo, los seres humanos son creados a mediante la cual los musulmanes deben donar imagen y semejanza de Dios y viven sus vidas siguiendo anualmente a los pobres y necesitados una porción el ejemplo de Jesús. El cuidado de los niños es un concreta de sus bienes y ganancias. El sadaqah, por otro aspecto central de la obra de Cristo (Lucas 18:16), que lado, es la donación voluntaria de sumas no determinadas enseñó que se debe considerar que quienes realizan en cualquier momento14. actos de amor sirven directamente a Dios. En (Mateo 25:35–40) se lee “Porque tuve hambre y me disteis de En el judaísmo, la obligación de cuidar a los más pobres comer; tuve sed y me disteis de beber; fui forastero y me entre los pobres aparece en diversos pasajes de la recogisteis; estuve desnudo y me vestisteis; enfermo y Tora, donde se hace especial referencia a las viudas y me visitasteis; en la cárcel y fuisteis a verme… De cierto los huérfanos. El concepto Tikkun olam, que significa os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis “la reparación del mundo”, ha adquirido en el judaísmo hermanos más pequeños, a mí me lo hicisteis”. reformado moderno el significado de “trabajo social”. Los términos Tzedakah (donación caritativa) y gemilut En el hinduismo, se alienta a los creyentes a practicar hasadim (actos de bondad) son conceptos que guardan la compasión (daya) y la generosidad (dana) por tratarse estrecha relación en los enfoque judíos progresistas de de las expresiones más elevadas del dharma (el deber las cuestiones sociales15. 10 Valores compartidos La Convención sobre los Derechos del Niño expresa una visión holística del niño que refleja y se nutre de valores compartidos por las principales religiones del mundo, como: • Una creencia fundamental en la dignidad del niño. • La alta prioridad que se otorga a los niños y el concepto de que todos los miembros de la sociedad tienen derechos y obligaciones con respecto a ellos. • Una visión holística de los niños y un entendimiento integral de sus necesidades físicas, emocionales, sociales y espirituales. “Tenemos la obligación moral de brindar a los niños un medio ambiente donde puedan explorar plenamente su potencial innato con dignidad humana, y la Convención sobre los Derechos del Niño es el principal medio para lograr ese objetivo esencial”. — Red Global de Religiones a favor de la Niñez16 • La convicción de que la familia es el ámbito más adecuado para la crianza de los niños17. Las comunidades religiosas han desarrollado estructuras y definido relaciones basándose en esos valores, y sus mandatos y sistemas de creencias alientan a sus seguidores a que defiendan y ayuden a las personas más desposeídas, marginadas y vulnerables. Sus tradiciones con respecto a la transmisión de conocimientos y valores religiosos de una generación a la siguiente ayudan a mantener y perpetuar esos sistemas. Los dirigentes religiosos abogan por la Convención sobre los Derechos del Niño Los dirigentes religiosos han ocupado un lugar de vanguardia con respecto a la necesidad de implementar la Convención sobre los Derechos del Niño. Poco antes de la presentación de la Convención en la Cumbre Mundial en favor de la Infancia de 1990, UNICEF y la Conferencia Mundial de Religiones por la Paz –que en la actualidad se llama Religiones por la paz y que consiste en una coalición mundial multirreligiosa que fomenta la acción mancomunada de las comunidades religiosas del mundo en pro de la paz– organizaron una importante conferencia llamada “Las religiones del mundo por los niños del mundo”. Esa conferencia fijó el tono de la cooperación interreligiosa en pro de la infancia y abogó por la ratificación universal de la convención recientemente aprobada. En 2002, con motivo del Período Extraordinario de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la Infancia, Religiones por la paz convocó a un foro multirreligioso de dirigentes provenientes de países en situaciones de conflicto o post conflicto. En la reunión, a la que asistieron representantes de alto nivel de UNICEF, entre ellos su Directora Ejecutiva, los participantes declararon su compromiso de abogar por “un mundo adecuado para los niños”. Influencia moral y capacidad de liderazgo Debido a su influencia moral, los dirigentes religiosos pueden influir en la manera de pensar de los miembros de sus comunidades, fomentar el diálogo y fijar prioridades. Por ejemplo, el 74% de los africanos sostiene que el sector de la población en que más confía es el de los dirigentes religiosos18. • Los dirigentes religiosos dan forma a los valores sociales y fomentan los comportamientos responsables que respetan la dignidad y el carácter sagrado de la vida humana. • Muchos dirigentes religiosos cuentan con gran capacidad de comunicación y mucha influencia, lo que les permite vincularse emocional e intelectualmente con millones de personas de una manera que no está al alcance de los agentes de ayuda humanitaria. • Debido a que tienen mayor acceso que muchos otros a las esferas familiares y personales de la población, los dirigentes religiosos pueden constituirse en importantes canales de comunicación para el logro de los cambios sociales y la transformación. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 11 • En las situaciones de conflicto, la influencia moral y la confianza de las que gozan los dirigentes de las comunidades religiosas les permiten desempeñar un importante papel en las labores de mediación y reconciliación, y abogar por que se satisfagan las necesidades especiales de protección de los niños y otros integrantes particularmente vulnerables de sus comunidades. • Los dirigentes religiosos también brindan apoyo y estabilidad espiritual, que pueden ayudar a saciar las necesidades psicosociales de los pobladores acuciados por la adversidad. Diálogos comunitarios para salvar las vidas de los niños en Nigeria En Nigeria, uno de los últimos campos de batalla de la guerra contra la poliomielitis, una serie de rumores infundados que corrieron por la región septentrional del país, de población predominantemente musulmana, acerca de los presuntos peligros de la vacuna antipoliomielítica oral interrumpieron la campaña de vacunación en la región, amenazando así con frustrar todos los avances logrados en pro de la eliminación mundial de la enfermedad. UNICEF y otros organismos aliados colaboraron estrechamente con los dirigentes religiosos de la región para combatir los rumores en sus respectivas comunidades y volver a poner en marcha la campaña de inmunización. La iniciativa contó con apoyo al más alto nivel, ya que la Oficina de UNICEF en Egipto logró que el Gran Jeque de Al Azhar diera conocer una declaración sobre la importancia de la vacunación que sirvió para comprometer y movilizar a los dirigentes religiosos en Nigeria en apoyo del programa de vacunación. En el plano local, los diálogos comunitarios fueron el componente fundamental de los esfuerzos por alentar el sentido de la propiedad y la participación de la población con respecto a los servicios de inmunización. Para lograrlo fue necesario establecer cuáles eran las comunidades más vulnerables, brindar la información necesaria a los Mai Angwa, o dirigentes tradicionales, que condujeron y facilitaron los diálogos, y garantizar que en los mismos participaran las mujeres, los dirigentes religiosos y las organizaciones locales. Los responsables locales de la prestación de servicios respondieron con información fidedigna a las preguntas que se formularon y crearon ámbitos en los que los activistas comunitarios pudieron dar respuesta a las inquietudes de la población, ya que tuvieron ocasión de explicar la relación entre los comportamientos propuestos y las normas y proverbios tradicionales. Con frecuencia se dio oportunidad a las personas afectadas por la poliomielitis de hablar sobre sus experiencias al respecto. Al final de los diálogos comunitarios, los participantes llegaban a acuerdos sobre las principales medidas a tomar, que luego recibían apoyo de los equipos de trabajadores de la salud de UNICEF. Una evaluación posterior del programa indicó que en 89 comunidades en los estados más amenazados donde se habían llevado a cabo los diálogos se había registrado un aumento del 16% en el número de niños inmunizados y en otras 54 comunidades una reducción del 60% del número de familias que habían evitado la inmunización de sus hijos. El programa de diálogos comunitarios se convirtió en el principal enfoque empleado para mejorar el aprendizaje social y aumentar los niveles de participación y del sentido de la propiedad, así como para dar los primeros pasos hacia el logro de una mayor equidad en materia de intercambio de información y participación en las comunidades. La evaluación también indicó que una de las principales lecciones obtenidas fue que cuando se logra involucrar en los esfuerzos a las redes locales, especialmente a los dirigentes religiosos, se pueden difundir mucho más ampliamente los conocimientos y las aptitudes a las familias y las comunidades y superar los comportamientos de los adultos que puedan ser vistos como perjudiciales para “nuestros” niños y “nuestras” comunidades. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Nigeria”, 200919. Redes amplias Debido a que las comunidades religiosas están integradas por casi 5.000 millones de personas, su capacidad de acción es enorme. Desde la aldea más diminuta hasta la ciudad más grande, y desde los distritos y provincias a los ámbitos nacionales e internacionales, las comunidades religiosas cuentan con una variedad de redes que pueden emplearse para el cuidado y la protección de los niños, y para salvaguardar sus derechos. A continuación, algunos ejemplos de lo que pueden hacer los agentes religiosos e interreligiosos: • Participan en la prestación de servicios sociales, como los de educación, atención de la salud y apoyo socioeconómico a las personas particularmente vulnerables. • Tienen niveles de influencia y acceso particularmente elevados en los ámbitos familiares y comunitarios, y por lo general pueden superar las barreras socioeconómicas y de clase. 12 Los derechos de los niños representados como un mandala budista Los niños ocupan un lugar central en el proceso de desarrollo de Bhután. La Oficina de UNICEF en Bhután ha representado los principios directrices de la Convención sobre los Derechos del Niño en un mandala que refleja tanto el enfoque budista de la vida como el marco de referencia básico sobre los derechos de los niños. mente pueda dejar atrás los pensamientos superficiales y concentrarse con más precisión en conceptos más valiosos, avanzando así hacia el esclarecimiento mental y espiritual. En ese contexto, el empleo del mandala ayuda a comprender mejor y lograr un acuerdo más amplio acerca de los derechos humanos de los niños estipulados en la Convención sobre los Derechos del Niño. En sánscrito, el término mandala significa círculo o centro. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, ‘Report of El centro es el sitio donde reside la realidad, y en este caso, un niño ocupa el lugar central, rodeado de una serie Work in Bhutan on the Rights of the Child’, 2006, <www.unicef. de círculos y recuadros que simbolizan los principios y las org/bhutan/mandala.htm>, consultado el 22 de julio de 2011. disposiciones de la Convención. Los mandalas se emplean tradicionalmente para la meditación, de manera que la Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 13 • Disponen de redes de voluntarios ricas en recursos humanos dinámicos y creativos. • Cuentan con canales y medios de comunicación diversos, como boletines, circulares, sitios Web y estaciones de radio y televisión. Esos medios pueden facilitar las labores de promoción y transmitir a millones de personas mensajes sobre la modificación de los comportamientos y el cambio social. • En las situaciones de emergencia, ya se trate de desastres de origen natural o causados por el hombre, suelen ser los primeros en brindar apoyo de emergencia a las comunidades. Pese al papel positivo que pueden desempeñar las comunidades religiosas, a veces puede ser un motivo de preocupación trabajar en alianza con estas comunidades, ya que conllevan problemas y desafíos muy concretos. En ciertas circunstancias y lugares, las asociaciones de ese tipo pueden no resultar beneficiosas. Por ejemplo, debido a que los enfoques y prácticas de determinados agentes religiosos no coinciden con los principios sobre los derechos de los niños. (Para ahondar sobre estos temas, consúltese la Sección 3. Evitar el uso indebido de la religión, y la Sección 4 Un marco de referencia para la participación). La alianza de UNICEF con el Consejo Episcopal Latinoamericano UNICEF y el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), que reúne a los obispos católicos de América Latina, comenzaron a colaborar a principios del decenio de 1980 con el objetivo de satisfacer las necesidades de los niños, niñas y familias más vulnerables de la región. Algunos de los puntos salientes de las labores de esa alianza han sido: firme, en 1991 se firmó un convenio de cooperación entre UNICEF y CELAM con el propósito de institucionalizar los programas de supervivencia y desarrollo integral infantil, la defensa de los derechos del niño, de la madre y de la familia en general. • En 1993 se inició una tercera etapa de cooperación mediante la renovación del Convenio de Cooperación entre UNICEF y CELAM. Como resultado de la Conferencia Mundial de Educación de 1990 (Jomtien, Tailandia), en esta nueva fase se dio prioridad al diseño de programas de educación dentro de un marco de participación comunitaria, cuyo objetivo fue la defensa y promoción integral de la mujer y de los derechos del niño y de la familia. Sobre la base de esas premisas, UNICEF y CELAM iniciaron el programa “Pastoral Social de la Infancia y Educación para la Paz, la Democracia y el Desarrollo de la Persona y la Sociedad”. En el contexto de ese programa se ubica el trabajo por el “Derecho a un Nombre y a una Nacionalidad” y la movilización por los derechos de los niños y las niñas. Como parte de la misión de atender las necesidades de • En 1986 se realizó en Londrina y Brasilia un encuentro los más pobres y de promover el mejoramiento de las de 15 obispos latinoamericanos para evaluar la acción condiciones de vida en pro del desarrollo integral de los conjunta entre UNICEF y la Conferencia Episcopal niños y adolescentes de toda la región, también se crearon Brasileña (CNBB). SELAC, la Secretaría Latinoamericana otros programas, como una Pastoral para la educación en de CARITAS, se unió a ese esfuerzo y animó a las filiales situaciones de riesgo relacionadas con el VIH/SIDA y la de CARITAS en los ámbitos nacionales y diocesanos a que prevención de la drogadicción. colaboraran y participaran activamente en el programa. • En 1983, UNICEF puso en marcha Revolución de la Salud, un programa que fue acogido con entusiasmo por la Santa Sede, que confirmó así su apoyo al compromiso histórico en favor de la salud y el bienestar de los niños. La Iglesia Católica respaldó la iniciativa, a la que ofreció su red de asistencia en diversos países del mundo, en especial en los países en desarrollo. La primera experiencia de trabajo conjunto se produjo cuando el Secretario Nacional de la Pastoral Social de Colombia elaboró el manual El camino de la Salud de los Niños y capacitó promotores en 20 jurisdicciones del país. En 1985, ambas entidades participaron en el Plan Nacional de Supervivencia Infantil, que había desarrollado el gobierno colombiano • Continuando con el éxito de los trabajos conjuntos, en 1987 • Las alianzas de UNICEF con el Programa Pastoral de la Infancia se han ampliado más allá de los países de se inauguró el Programa Pastoral de la Infancia. En el marco América Latina, a naciones como Angola y Timor-Leste. de ese programa, se elaboraron materiales educativos, se realizaron talleres de capacitación y se llevaron a cabo en varios puntos de América Latina encuentros regionales Fuente: Extractado del Consejo Episcopal Latino Americano y el y subregionales. Como parte de un compromiso más Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, sin fecha20. 14 Los niños, la religión y la espiritualidad21 “La mezquita, la iglesia o el templo suelen constituir el primer punto de contacto de los niños con sus comunidades más allá de sus vecindarios, así como con las instituciones sociales más amplias. Allí los niños aprenden no sólo acerca de la religión sino importantes lecciones sobre cuestiones morales y comportamientos sociales, y sobre su valor como seres humanos. También reciben mensajes sutiles sobre si el mundo es un mundo seguro, sobre cómo ser una buena persona y sobre cuáles son sus responsabilidades como integrantes de una agrupación religiosa. Su identidad religiosa pasa gradualmente a formar parte de una identidad colectiva más amplia que aglutina a niños y adultos como integrantes de una población que tiene conciencia de su significado colectivo y del lugar que ocupa en el mundo22”. Además de los beneficios que ofrecen las estructuras y sistemas de las comunidades religiosas a las actividades en pro de los derechos de los niños, es importante comprender el papel que desempeñan la religión y la espiritualidad en las vidas de los propios niños. La Convención sobre los Derechos del Niño contiene cuatro artículos que reconocen explícitamente que el aspecto “espiritual” forma parte del desarrollo holístico de los niños, al igual que el bienestar moral y social, el desarrollo cultural y físico y la salud mental (artículos 17, 23(3), 27(1) y 32(1)). Independientemente de su pertenencia a comunidades religiosas establecidas, todos los niños comparten un sentimiento de asombro y sobrecogimiento que puede llevarles a relacionarse con el mundo que les rodea, incluso con la naturaleza, y buscar el sentido del mismo. A medida que el niño se desarrolla, esas sensibilidades innatas comienzan a tomar formas más estructuradas bajo la influencia inicial de la familia y, posteriormente, de las comunidades en las que viven. La religión suele influir en los niños debido a que está presente en las instituciones sociales y culturales en las que participan. La profunda influencia que pueden tener la espiritualidad y la religión en el desarrollo individual y social de los niños constituye una oportunidad para reafirmar las influencias protectoras y fomentar la capacidad de resistencia. Las creencias, prácticas, redes sociales y recursos de la religión pueden fortalecer a los niños al darles esperanzas y los medios para encontrar sentido en las experiencias más difíciles, además de brindarles apoyo emocional, físico y espiritual. Cuando la lucha por los derechos de los niños se fundamenta en los aspectos protectores de las creencias y prácticas religiosas y está enraizada en una comunidad que alienta y enriquece la vida espiritual y religiosa de cada niño, los resultados pueden ser profundos y prolongados. Un niño cuyos padres son trabajadores migrantes de Myanmar asiste a una ceremonia religiosa para recordar a los ciudadanos que murieron en el tsunami (Tailandia). Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 15 3 ALIANZAS INTEGRADAS EN DIVERSOS SECTORES PROGRAMÁTICOS Unas niñas se lavan las manos en una escuela primaria católica a la que UNICEF proporcionó un tanque de agua, letrinas, material educativo 16 y capacitación para el profesorado (Rwanda). Como se mencionó en la sección previa, hay razones de peso para que UNICEF y otros organismos dedicados a los derechos de los niños colaboren de manera significativa con las comunidades religiosas para fomentar y proteger esos derechos. Esas comunidades cuentan con la ventaja fundamental de su influencia moral y su legitimidad, además del amplio radio de acción de sus redes y estructuras. Muchas ya prestan servicios directos y pueden localizar y derivar a los niños, niñas y familias vulnerables que requieran apoyo adicional. Por todo ello, las comunidades religiosas pueden desempeñar una diversidad de funciones con respecto al cuidado y la protección de los niños. UNICEF colabora desde hace tiempo con las comunidades religiosas en todas sus actividades programáticas a nivel local, nacional y mundial. En esta sección se ofrecen ejemplos de la naturaleza diversa y creativa de esas alianzas con el propósito de poner de relieve las posibilidades de acción que ofrece esa colaboración estratégica. En la Sección 5 se describen estrategias para lograr un compromiso eficaz. Los derechos de los niños en el contexto del Islam En Egipto y el Irán, UNICEF ha facilitado el diálogo y las investigaciones en colaboración con teólogos, clérigos, académicos y profesionales a fin de examinar los derechos de los niños en el contexto del Islam, buscando interpretaciones de los principios y normas de esa religión que guarden consistencia y respalden esos derechos. Esas actividades han dado lugar a la elaboración de herramientas que pueden emplearse en el marco de los esfuerzos religiosos y seculares de fomento de los derechos de los niños en ámbitos predominantemente musulmanes. Por ejemplo, UNICEF y la Universidad Al-Azhar han preparado en forma conjunta el manual Los niños en el Islam: Su atención, protección y desarrollo, que pone de relieve la importancia que otorga esa religión al cuidado, la protección y el desarrollo de los niños y niñas. El manual contiene documentos de investigación y extractos de los versos del Corán, jadiz (dichos provenientes de la tradición profética) y sunnas (prácticas consuetudinarias y normas sociales y jurídicas) que brindan orientación práctica sobre los derechos de los niños en esferas tales como la salud, la educación y la protección. La alianza de UNICEF con la Universidad Al-Ahzar ha resultado muy útil con respecto a la colaboración con los dirigentes religiosos islámicos de otros países, como el Afganistán y Nigeria, lo que pone de relieve el valor agregado que trae aparejada la participación de las instituciones religiosas y académicas de jerarquía internacional. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 17 Unos niños caminan cerca de un mural de promoción de la paz en un centro que ofrece a los jóvenes de las comunidades afectadas por la violencia un espacio seguro para actividades recreativas y capacitación para la vida práctica y la resolución de conflictos (Jamaica). La protección de la infancia Proteger a los niños significa prevenir y dar respuesta a los casos de violencia, explotación y abuso. Todos los niños están expuestos a peligros, pero para muchos niños y niñas, ese riesgo aumenta notablemente debido a su edad, su género, su origen étnico o racial, su situación económica u otras circunstancias. El enfoque de la protección de la infancia basado en la equidad hace hincapié en los sistemas de protección de los niños (las leyes, las políticas y la prestación de servicios) y en los factores sociales, entre los que figuran las normas sociales, con el objetivo de comprender la manera en que están relacionados. Estos dos “pilares” complementarios se aplican en todos los contextos, incluso en las situaciones de emergencia. Debido a que apunta a la reforma de las instituciones y sistemas de gobernanza, además de buscar la eliminación de las normas sociales discriminatorias perjudiciales, la estrategia de protección de la infancia de UNICEF se concentra en las raíces profundas de la desigualdad, empleando para ello estrategias adecuadas a los contextos que guardan coherencia con el enfoque basado en los derechos humanos23. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en favor de la protección de la infancia? La violencia contra los niños y niñas, así como su explotación y abuso, violan los principios fundamentales de las principales religiones del mundo, que sostienen la dignidad inherente a todos los seres humanos (véase recuadro). Todas las comunidades religiosas brindan cuidado y apoyo a sus integrantes, especialmente a los más pobres, marginados y vulnerables a la violencia, la explotación y el abuso. Con frecuencia, dan prioridad a las necesidades educativas de los niños vulnerables, a quienes les brindan albergue y acceso a servicios necesarios, como la atención médica y la asistencia jurídica. También dan orientación y respaldo espiritual y hablan en nombre de quienes no pueden hacerse oír por ellos mismos. Las comunidades religiosas pueden ser aliadas muy valiosas cuando se trata de proteger a los niños y niñas más vulnerables. En las situaciones de emergencia, como los conflictos armados, cuando la protección de los niños y niñas es motivo de especial preocupación, ya que están expuestos a diversos peligros, como el desplazamiento y el reclutamiento por parte de fuerzas o grupos armados, las comunidades religiosas son a veces las únicas estructuras y fuentes de recursos disponibles. Sus tradiciones y principios religiosos les impulsan a atender a los más necesitados, y con frecuencia siguen prestando servicios mucho después que, desde el punto de vista de las organizaciones internacionales, las situaciones de emergencia han quedado superadas. De esa manera, construyen los cimientos sobre los que se pueden erigir ámbitos de protección a largo plazo. 18 Las tradiciones religiosas: Los niños y la no violencia Budismo Islam La no violencia de pensamiento, palabra y obra es un elemento fundamental de la moral budista. El budismo se preocupa por el bienestar de todos los seres vivos. Si nuestras acciones se basan en la compasión, el respeto por los demás, la cortesía y la bondad, ningún niño será objeto de malos tratos. El Buda aconseja a los padres que brinden apoyo a sus hijos para que sean generosos, compasivos y responsables. Desde el punto de vista budista, la auténtica compasión puede eliminar las causas de la miseria y el sufrimiento en las vidas de las personas y conducirles a la felicidad. El Islam considera que la vida humana es un don sagrado de Dios, y en el Corán se hace hincapié reiteradamente en la santidad de la vida (hurmat al hayat). Todo individuo, independientemente de su género, edad, nacionalidad o religión, es digno de respeto. El Islam no hace distinciones entre los jóvenes y los viejos, Ni entre los hombres y las mujeres. El castigo corporal, así como otras formas de tratamiento humillante de los niños, contraviene directamente las enseñanzas del Profeta, quien recomendó que a los menores de siete años se les trate como niños empleando ternura y comprensión; a los de 7 a 14 años con cuidado y preocupación; y a los mayores de 14 años como amigos íntimos, con confianza y cooperación. El Profeta señaló: “Sed generosos, afectuosos y nobles con vuestros hijos, y educadles correctamente”. Cristianismo Los cristianos creen que los seres humanos son creados a imagen y semejanza de Dios, y deben vivir siguiendo el ejemplo de Jesucristo. Jesús trató con amor y compasión a los más vulnerables. En las instancias que constan de su interacción con niños, Jesús les trató con bondad y respeto, y sus palabras acerca de quienes hacen pecar a los niños y de las consecuencias de tales acciones (Mateo 18:6), figuran entre las más severas del Nuevo Testamento. Cuando Jesús les dijo a sus discípulos “Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de Dios es de quienes son como ellos”, (Marcos 10:14), dejó en evidencia su enorme estima por los niños. Y al bendecirles poniendo sus manos sobre ellos, Jesús les confirió dignidad y estatus (Marcos 10:16). Jainismo El jainismo es una religion cuya tradición moral se centra en la no violencia, el respeto por la vida de todas las criaturas, con el objetivo de una no violencia completa en los actos, las palabras y los pensamientos. El Jainismo cree que se debe “dispensar amor y respeto a todos los seres vivos”. El Señor Mahavir añadió el voto de no violencia a los demás votos de los monjes y monjas de su religion cuando dijo “Sabed que la violence es la causa de todas las miserias del mundo. La violencia es el nudo que nos ata a la servidumbre. No lastiméis a ningún ser vivo”. Confucianismo Judaísmo La cultura tradicional de una gran proporción de la humanidad se basa en los principios de conducta establecidos por Confucio. Pese a que esos principios son aparentemente estrictos en lo que se refiere a las obligaciones de los miembros de la sociedad, y en especial con respecto a nuestros mayores, se basan en el principio de la armonía de las partes con el todo. Si todos los integrantes de la familia, que es uno de los “todos” más pequeños, se tratan con respeto, compasión y amor, esa familia refleja la armonía del cosmos. El filósofo confuciano Mencio afirmó que cada uno de nosotros tiene un corazón que “no soporta ver sufrir a los demás” (Mencio 1.6), e ilustró ese principio con el ejemplo de que nadie soporta ver como se arroja a un niño pequeño en un pozo de agua. El nacimiento de todo niño judío es recibido con la bendición Baruch haba, B’ruchah haba’ah (Bendito aquel que llega). El Talmud advierte a los padres que no deben atemorizar a sus hijos, y para ello cita la historia de un niño que murió debido a esos temores (Semakhot 2:5-6). El Siddur, o libro de rezos, contiene oraciones de bendición que los padres que regresan de los servicios religiosos deben recitar. Los niños deben ser criados en un ambiente que fomente la tzedek (equidad) y el kevod (respeto), y deben realizar mizvoh (buenas acciones). El Talmud Babilónico comenta que “los judíos son hijos compasivos de padres compasivos” (Betzah 32a). Hinduismo Según los vedas hinduistas, nadie debe cometer un acto de violencia contra ninguna criatura, ya que todos los seres vivos tienen una naturaleza divina inmanente. Para los hinduistas, no hay bien más preciado que un niño, a quienes a veces se les considera como parientes de una vida y una encarnación anteriores. Una de las descripciones más populares de la deidad Krishna es como niño travieso, un ejemplo que indica que es posible tener conocimiento de lo divino mediante una relación con los propios hijos. Fuente: Adaptado de “Del compromiso a la acción: Lo que las comunidades religiosas pueden hacer para eliminar la violencia contra los niños”, UNICEF y Religiones por la Paz, Nueva York, 2010, página 5. Varun Soni, Deán de la Religious Life, University of Southern California, y Jeff Israel, de la New School University, ofrecieron información adicional. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 19 ¿Que pueden hacer las comunidades religiosas para proteger a los niños24? • Interpretar los principios de la protección de la infancia en un lenguaje que resulte significativo y adecuado para las comunidades a las que estén dirigidos, de manera que eleven el nivel de conciencia sobre las cuestiones relacionadas con la protección de los niños. • Emplear en los servicios religiosos, las clases de religión y las ceremonias y las actividades religiosas especiales, como los días de guardar y los ritos de iniciación, las enseñanzas de los textos religiosos que hagan hincapié en la protección de la infancia. • Utilizar medios de comunicación religiosos, como redes de radio y televisión dirigidas por organizaciones religiosas, para difundir mensajes sobre la importancia de abordar la violencia contra los niños. • Condenar tanto en sus comunidades como fuera de ellas toda forma de violencia contra los niños, como el abuso sexual de los niños y niñas. • Abogar por la prohibición del castigo físico y humillante en todos los ámbitos. • Dejar en claro que las prácticas culturales que perjudican a los niños no forman parte de las creencias y prácticas religiosas y abogar por su eliminación. • Elaborar y poner en práctica códigos de comportamiento referidos a las maneras adecuadas de relacionarse con los niños en sus templos, organizaciones, instituciones (como las escuelas y los orfanatos) y las asociaciones comunitarias. También se deben establecer mecanismos de denuncia y respuesta para las situaciones de abuso de los niños. • Promover la educación y la formación de familias, maestros y otros individuos de la comunidad sobre la importancia de abordar todas las formas de violencia contra los niños. Invitar a los profesionales (por ejemplo, profesores, médicos, trabajadores sociales) de las comunidades religiosas a que hablen con sus propios miembros durante los servicios de culto sobre los derechos del niño, el desarrollo del niño y la importancia de la crianza positiva y la disciplina no violenta. • Dar influencia moral a las campañas referidas a cuestiones de protección de la infancia y abogar en pro de cambios favorables de las políticas y leyes que mejoren y fortalezcan los sistemas jurídicos y de vigilancia para otorgar mayor protección a los niños. Las comunidades religiosas también pueden facilitar o respaldar los mecanismos comunitarios de vigilancia. • Movilizar a las comunidades para que tomen medidas prácticas de protección de los niños y niñas y evalúen sus necesidades. Por ejemplo, • Garantizando que los niños vulnerables, entre ellos los niños separados o no acompañados, reciban cuidados seguros basados en las familias. • Aumentar y mejorar el acceso a los servicios sociales esenciales, como los de orientación psicológica adecuados a los niños. • Ayudar a los padres y madres que requieran apoyo en materia de cuidado y atención de sus hijos. • Establecer y organizar espacios seguros donde los niños y niñas puedan jugar y aprender. • Dar participación a los niños en la toma de decisiones que les afecten, cuando esa participación resulte pertinente y adecuada. • Prestar apoyo material, espiritual y emocional a las familias que se vean obligadas a luchar contra la adversidad. • Vincular a los padres y otras personas encargadas de los niños con programas de “dinero por trabajo” u otras formas de apoyo a quienes tienen que ganarse la vida, a fin de garantizar que las familias dispongan de suficientes recursos financieros para atender y criar adecuadamente a sus hijos. • Abogar por la educación escolar y no estructurada de los niños y combatir el trabajo infantil. 20 • Abogar contra el reclutamiento de los niños en las fuerzas o agrupaciones armadas y por la liberación de los que se encuentren en esa situación. Los dirigentes religiosos pueden desempeñar una función muy importante de mediación entre los niños liberados o dados de baja y sus familias y comunidades, que en algunos casos pueden no ser muy receptivas a su retorno. Los dirigentes religiosos pueden ofrecer orientación espiritual, oficiar ritos religiosos o llevar a cabo sesiones de oración, mediante las cuales pueden emplear su autoridad para restablecer el sentido de dignidad y pertenencia de los niños, especialmente en el caso de las niñas, que pueden sufrir marginación u ostracismo al regresar a sus comunidades. Ejemplos de alianzas • La Oficina de UNICEF en Mauritania estableció una alianza con la Red de imanes y dirigentes religiosos en pro de los derechos de los niños para combatir el empleo generalizado del castigo corporal en las madrasas (escuelas coránicas) y en las escuelas primarias laicas, además del castigo físico en el ámbito familiar. La Red llevó a cabo un estudio para determinar si el castigo corporal está permitido por la religión islámica y llegó a la conclusión de que el Corán no avala la violencia. Como resultado de ello, se emitió una fatua25 que prohibió la violencia física y verbal contra los niños tanto en el sistema de educación como en el hogar. “Todos tenemos en claro y acatamos las pruebas de que el castigo corporal está prohibido por el Islam”, declaró Hademine Ould Saleck-Canún, Presidente de la Red26. • UNICEF y Religiones por la paz colaboran en un proyecto de varios años de duración destinado a profundizar el compromiso de las comunidades religiosas y los individuos y las organizaciones involucrados en la protección de la infancia, a fin de aumentar el grado de protección a los niños afectados por los conflictos armados. Entre los objetivos del proyecto figuran el aumento de la capacidad de las comunidades religiosas de proteger a los niños afectados por los conflictos y la elaboración de enfoques eficaces de colaboración entre las comunidades religiosas y los agentes de protección de la infancia. Entre las actividades programadas, se contempla la implementación de proyectos por países, como los que se ejecutan actualmente en Kenya, Liberia y Filipinas, y la elaboración de materiales y herramientas de orientación, entre los que figura el manual “Del compromiso a la acción: Que pueden hacer las comunidades religiosas para eliminar la violencia contra los niños” (sírvase consultar la sección Recursos Importantes). • UNICEF ha prestado apoyo a dirigentes religiosos, estudiosos e instituciones del Irán para que lleven a cabo labores de investigación teológica y debate académico con el objetivo de producir documentos que interpreten los artículos de la Convención sobre los Derechos del Niño a la luz de una perspectiva islámica (sharia). Estas actividades han dado como fruto tres publicaciones: a) Un folleto titulado “Disciplinar a los niños con bondad: Una perspectiva chiíta de la sharia”, que refleja los puntos de vista de diversos dirigentes y estudiosos islámicos sobre las maneras de disciplinar a los niños sin apelar a la violencia. y 2008 una exitosa campaña de comunicación integrada sobre la desinstitucionalización, que incluyó componentes de los medios de comunicación (TV/radio/prensa) y materiales impresos. La campaña estaba dirigida a los padres y encargados de tomar decisiones en apoyo a la reducción del número de niños que viven en instituciones residenciales. La Iglesia Ortodoxa, considerada una de las fuentes más fiables de información dentro de Moldova, fue uno de los aliados en esta campaña y, junto con UNICEF, elaboró un folleto especial promoviendo un entorno familiar para todos los niños, que la Iglesia distribuyó a todos sus sacerdotes para que lo utilizaran en sus congregaciones. • Mediante varios programas sucesivos de cooperación, la Oficina de UNICEF en Venezuela logró establecer alianzas con diversas organizaciones religiosas a fin de fomentar y proteger los derechos de los niños y adolescentes. En la última década se ha prestado particular atención a la creación en las comunidades de las regiones venezolanas fronterizas con Colombia de espacios donde se protejan los derechos de los refugiados colombianos, y se les brinde apoyo psicosocial, en especial a los niños, niñas y familias. Como parte del actual programa de país, y por medio de una alianza nacional con la Asociación Venezolana de Escuelas Católicas, se brinda a los maestros capacitación sobre los derechos humanos y los derechos de los niños. Además, UNICEF y el Vicariato Apostólico apoyan una red de comunicación que une a las comunidades indígenas jóvenes de los estados de Zulia y Amazonas. • UNICEF y otras organizaciones han estado estudiando la dinámica cultural de la mutilación/ablación genital femenina y abogando por su eliminación en países como Egipto, Etiopía, Kenya y Somalia. La Oficina de UNICEF en Egipto elaboró un fascículo sobre la mutilación/ablación genital femenina para los dirigentes religiosos que participan en los esfuerzos destinados a poner fin a esa práctica. El folleto, cuyo prólogo está firmado por el ex Gran Jeque de Al Azhar, analiza las inquietudes de los dirigentes religiosos sobre ese tema y refuta los argumentos de quienes creen que la mutilación/ablación genital femenina tiene raíces religiosas. (Para obtener más información sobre estos programas, consúltese el recuadro que aparece en la página 47). • La iniciativa del Día Mundial de oración y acción por la infancia constituye un esfuerzo mundial por movilizar a las organizaciones b) Un conjunto de materiales de promoción, que contiene un laicas y religiosas a fin de que colaboren en pro del bienestar de los folleto y diversos panfletos y carteles ilustrativos, orientados niños, además de destacar el importante papel que desempeñan a los dirigentes religiosos a fin de concienciarles sobre los las últimas con respecto al fomento de los derechos de los niños. derechos de los niños y la prevención de la violencia contra los El Día se observa todos los años alrededor del 20 noviembre, menores. Para ello se muestran los vínculos que existen entre a fin de que coincida con el Día Universal de la Infancia y el la Convención sobre los Derechos del Niño y los conceptos del aniversario de la aprobación de la Convención sobre los Derechos Islam sobre el trato a los niños. del Niño. Entre los principales aliados de la celebración figuran c) El borrador de un libro titulado “Los derechos de los niños: UNICEF, el Representante Especial del Secretario General sobre Un estudio comparativo del Islam y los instrumentos la violencia contra los niños, Pastoral da Criança, Religiones por internacionales”, en el que se ofrecen tanto la perspectiva la paz, la Red Global de Religiones a favor de la Niñez y Save chiíta como la sunita y se pasa revista a todos los artículos the Children. El tema del Día Mundial de oración y acción por la de la Convención. infancia para el trienio 2011-2013 es la violencia contra los niños, haciendo especial hincapié en los métodos de disciplina positivos, Las dos primeras publicaciones han sido ampliamente distribuidas el matrimonio precoz y la inscripción de los nacimientos. (Para a dirigentes religiosos, estudiantes e instituciones previamente obtener más información sobre el Día Mundial de oración y acción escogidos. La Oficina de UNICEF en el Irán también dio su apoyo por la infancia puede consultarse <www.dayofprayerandaction. a la primera Conferencia Interreligiosa Nacional sobre la Violencia org> En la pág. 33 aparece una sinopsis de las actividades de contra los Niños, que se llevará a cabo en 2011 en colaboración con 2010, que se concentraron en el tema de la lactancia materna). la Universidad Mofid, un importante centro de estudios islámicos que funciona en Qom. En las págs. 17, 24, 40, 42, 47, 49, 57, 59, 83 aparecen más • La Unión Europea y UNICEF en Moldova llevaron a cabo en 2007 ejemplos de alianzas con las comunidades religiosas con el objetivo de fomentar la protección de la infancia. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 21 Una niña escribe en la pizarra de una mezquita que sirve de escuela informal basada en la comunidad a la que UNICEF ofrece capacitación para el profesorado, libros de texto y otros materiales (Afganistán). Educación La educación es uno de los derechos fundamentales de todos los niños. La educación básica de buena calidad dota a niños y niñas de los conocimientos y las aptitudes que necesitan para adoptar modos de vida saludables y desempeñar un papel activo en la toma de decisiones sociales, económicas, y políticas durante su paso de la adolescencia a la edad adulta. Los adultos que han recibido educación de calidad tienden a tener menos hijos, a estar mejor informados acerca de las prácticas adecuadas de crianza de los mismos y a enviarles a la escuela. “… la mayoría de los dirigentes religiosos, así como de las tradiciones y escrituras confesionales, están profundamente comprometidos con la educación. Su historia es la historia de la educación, y su compromiso frecuentemente anunciado con la dignidad humana y el desarrollo del potencial humano constituye la esencia de la educación28”. El enfoque de UNICEF consiste en garantizar que todos los niños, independientemente de su género, origen étnico, situación socioeconómica u otras circunstancias, disfruten de acceso a la educación de buena calidad. Al hacer hincapié en la equidad, se trata de un enfoque que pone de relieve la importancia que tiene la educación en todas las sociedades como herramienta básica de potenciación y transformación y el papel fundamental que desempeña con respecto a la eliminación de los ciclos intergeneracionales de pobreza y privación. A lo largo del tiempo, en todo el mundo ha quedado demostrado que la educación, y en especial la educación de las niñas, es una condición indispensable para mejorar las vidas de todos los niños de maneras diversas, como la reducción de la mortalidad infantil y la desnutrición y el mejoramiento de la salud materna27. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en favor de la educación? La educación ha sido un aspecto integral de todas las tradiciones religiosas, y los establecimientos de enseñanza religiosos han servido de base para el movimiento de las escuelas modernas, además de haber figurado entre las primeras instituciones que ofrecieron educación básica a las niñas29. La transmisión de las enseñanzas de los profetas, los mensajeros y otros fundadores de las tradiciones religiosas constituía, en esencia, un proceso de educación. El hincapié que se hacía en el aprendizaje de los textos sagrados, la interpretación de la jurisprudencia religiosa y las aportaciones al caudal de conocimientos que poseía cada religión exigió sistemas de aprendizaje que fueron estructurándose gradualmente. En la actualidad, los cientos de miles de escuelas del mundo que están a cargo de comunidades religiosas representan un importante segmento de la educación mundial, aunque en muchos sitios las organizaciones dedicadas a los derechos de los niños mantengan muy pocos vínculos con ellas debido a consideraciones políticas o de otra índole. En muchos países, las escuelas religiosas o inspiradas en la religión suelen ser las instituciones que ofrecen los diversos componentes de protección social de la educación, como la matrícula escolar a costo reducido, los programas de crédito o préstamos para las familias de escasos recursos y los programas de alimentación en las escuelas30. Por todo ello, los establecimientos de enseñanza religiosos desempeñan un papel importante en los países de escasos recursos, ya que pueden brindar a los niños mayor acceso a la 22 La educación en el Islam Históricamente, en el Islam se ha otorgado enorme importancia a la educación. El primer verso del Corán que fue revelado a Mahoma, el Profeta, (pbuh) indica la importancia que tiene la educación para esa religión, ya que comienza con la palabra “Iqr’a”, que en árabe significa el imperativo “Leed” e implica los conceptos de “aprendizaje”, “exploración” y “búsqueda de la iluminación espiritual”. Esto demuestra que la lectura (el saber) es la manera correcta de acercarse al Creador de todas las cosas. El verso 96/1-5 del Corán dice: “¡Lee! En el nombre de tu Señor, Quien creó todas las cosas. Creó al hombre de un cigoto. ¡Lee! Que tu Señor es el más Generoso. Enseñó [la escritura] con el cálamo. Y le enseñó al hombre lo que no sabía”. Por lo tanto, los musulmanes creen que Alá creó a la humanidad y le ordenó que buscara el saber para afirmarse en su fe. Otros versos del Corán hacen hincapié en el papel importante que ocupan quienes son sabios o tratan de serlo. Fuente: Abuarqub, 2009 31. educación y a esos servicios sociales. “Los modelos pertinentes de las diversas religiones, como ‘Fe y Alegría’ y ‘Cristo Rey’ en el marco del cristianismo, o el movimiento Gulen y los diversos sistemas islámicos en Indonesia, el Pakistán y la India, son ejemplo de las funciones constructivas que pueden desempeñar las instituciones religiosas cuando se trata de prestar servicios a los sectores más pobres de la población32”. Sin embargo, pese a lo importante que resulta poner de relieve el papel positivo que pueden desempeñar las escuelas religiosas, también se deben señalar sus posibles aspectos negativos. Por ejemplo, en algunos de ellos el aprendizaje puede limitarse a la memorización de textos religiosos o los alumnos pueden ser objeto de castigos corporales. En los contextos predominantemente religiosos, aún cuando se trabaje con las escuelas públicas o laicas, establecer y mantener relaciones con las comunidades religiosas puede constituir un paso importante hacia la colaboración en el desarrollo de programas de educación eficaces. Los teólogos y educadores religiosos, especialmente por tratarse de líderes de opinión pública, pueden ponerse al frente de los esfuerzos por elaborar programas de estudios e interpretar en un lenguaje que se adecue a sus comunidades los conceptos fundamentales sobre los derechos de los niños y el acceso a la educación para todos en un plano de igualdad, especialmente para los niños más marginados y vulnerables. ¿Que pueden hacer las comunidades religiosas para promover la educación? • Hacer hincapié y aplicar las enseñanzas religiosas que recalcan la preocupación por los integrantes más pobres y marginados de las comunidades a fin de lograr un mayor grado de equidad en materia de acceso a la educación. Por ejemplo: • Combatir la discriminación por razones de género, que a veces se manifiesta en una preferencia por la matriculación escolar de los varones en desmedro de la educación de las niñas. • Ejercer funciones de mediación en las comunidades cuando quede en evidencia que algunos niños o niñas tienen dificultades para obtener servicios de educación, ya sea en establecimientos laicos o religiosos. Entre los niños afectados pueden figurar los que tienen discapacidad, los que pertenecen a determinados sectores étnicos, raciales o religiosos y otros en situación de especial vulnerabilidad. • Elaborar y poner en práctica códigos de conducta que rijan las interacciones con los niños y que contengan mecanismos de denuncia y respuesta ante los casos de abuso de menores. • Poner en práctica programas de educación que abarquen desde la educación escolar estructurada, incluso del nivel terciario, hasta programas no estructurados como los de alfabetización y capacitación laboral de los niños y niñas que carecen de acceso a los sistemas de educación estructurados. • Realizar campañas de promoción para ejercer influencia sobre las políticas de educación en el ámbito nacional y en el plano local. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 23 • Emplear los medios religiosos, como la radio, la televisión y las publicaciones, para brindar educación a distancia a las comunidades apartadas que no dispongan de servicios de educación de buena calidad. • Utilizar de manera provisional los templos y otras instalaciones religiosas como lugares de enseñanza cuando la infraestructura de educación haya sufrido daños graves durante las situaciones de emergencia. Ejemplos de alianzas • En el Afganistán, los organismos de desarrollo y ayuda humanitaria colaboran estrechamente con los dirigentes religiosos para dar apoyo a programas fundamentales, entre los que figuran los de educación de las niñas. Los imanes recorren el país periódicamente para fomentar la matriculación escolar de las niñas durante los oficios religiosos de los viernes. En las regiones donde no se dispone de suficientes instalaciones escolares, se usan las mezquitas como aulas y centros de actividades infantiles. • En Bolivia, UNICEF y el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) elaboraron programas sustitutivos de educación para los niños y adolescentes que trabajan en las calles, y brindaron capacitación sobre temas conexos a maestros de escuelas públicas y privadas. En colaboración con la Iglesia Católica, UNICEF apoyó diversos programas de educación sustitutiva para niños, niñas, adolescentes, mujeres y adultos, en especial de las comunidades indígenas, en los que se hizo hincapié en la adquisición de conocimientos y en el diálogo y el respeto por los derechos humanos. 24 • Con el apoyo de la UNESCO y UNICEF, Arigatou International, preparó la publicación Aprender a vivir juntos: Un programa intercultural e interreligioso de educación ética. Se trata de una guía con la que los educadores y dirigentes jóvenes del mundo pueden ayudar a los niños a entender y respetar a las personas y pueblos de otras culturas y religiones. • La campaña “Ma’An (juntos) por escuelas más seguras” que puso en marcha en 2009 la Oficina de UNICEF en Jordania con el objetivo de combatir la violencia de los maestros de escuela contra sus alumnos empleó una estrategia triple compuesta por actividades basadas en las escuelas para alentar a los educadores a emplear métodos nuevos de disciplina; reuniones, celebraciones y actividades religiosas en las que se educa a las comunidades acerca de la importancia de no tolerar ese tipo de violencia las escuelas; y el uso intenso y frecuente de los medios de comunicación para difundir la campaña y sus objetivos. Al respecto, en la campaña también se emplean canales tradicionales de comunicación, como las mezquitas, los mensajes de los dirigentes religiosos y las representaciones teatrales, para difundir los mensajes a las familias y comunidades. It is a grave sin for one to neglect a person whom he is responsible for sustaining. — (Muslim hadith referring to the life and health of the child) Un bebé recién nacido duerme en el Hospital de Maternidad Princess Christian (Sierra Leona). Salud “En África subsahariana... por ejemplo, las instalaciones sanitarias dependientes de las comunidades religiosas prestan un 70% de la atención de la salud de la región... en otras partes del mundo, las organizaciones religiosas tienen a su cargo entre un 10 y un 30% de los sectores nacionales de la salud. Se calcula que más de un 90% de los programas basados en las instalaciones y en las comunidades de las organizaciones religiosas ofrecen servicios de salud a las madres y a los recién nacidos33”. Los programas de salud han sido uno de los componentes principales de las labores de UNICEF desde la fundación del organismo, que ha logrado grandes avances con respecto a la inmunización, la provisión de rehidratación oral que permite salvar las vidas de los lactantes con casos graves de diarrea, el fomento y la protección de la lactancia materna y la elaboración de métodos adecuados y eficaces de educación sobre la salud. En materia de salud, UNICEF tiene una amplia y destacada presencia mundial y mantiene alianzas firmes con gobiernos y ONG, entre ellas las organizaciones religiosas, tanto a nivel comunitario como nacional. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en favor de la salud? Prácticamente todas las religiones importantes consideran que la vida es un don sagrado de un creador o una fuerza creadora de origen divino. En muchas tradiciones religiosas, el fomento y el mantenimiento de la buena salud de los niños no es solo una prioridad sino una obligación. Las madres y los padres están obligados a cuidar la salud de sus hijos, que no pueden cuidarse por ellos mismos. “Es un grave pecado no atender las necesidades de una persona a la que uno tiene obligación de mantener”. –– Jadiz musulmán referido a la Las tradiciones sobre curaciones aparecen en muchas religiones, desde las curaciones milagrosas realizadas por seres divinos o profetas hasta los enfoques médicos elaborados como el ayurveda de las culturas de Asia meridional. Muchos monasterios y templos budistas prestan servicios de atención de la salud tradicional a los integrantes de las comunidades circundantes. Desde los inicios del Islam, los hospitales de grandes 34 vida y la salud de los niños dimensiones que prestan atención gratuita han sido una de las características de la sociedad musulmana35. En 12 países africanos hay una vasta plataforma de asociaciones cristianas dedicadas a la salud que suministran en sus respectivos países entre un 30% y un 40% de las plazas para pacientes que requieren internación en clínicas y hospitales, y un 15% de todos los servicios de atención de la salud, como los que prestan los curanderos tradicionales, los de automedicación y los de farmacología36. Muchas comunidades religiosas ofrecen servicios directos de atención de la salud por medio de una variedad de establecimientos que cubren desde las pequeñas clínicas comunitarias hasta los grandes hospitales, en los que se presta especial atención a los servicios de salud prenatal, neonatal y pediátrica. Aunque algunas religiones hacen hincapié en la salud física y la prevención de las enfermedades, muchas tradiciones reconocen también la importancia de la salud mental y emocional y alientan diversas prácticas para mantenerla o mejorarla, como la meditación, que de una manera u otra aparece en todas las tradiciones religiosas, especialmente en el hinduismo y el budismo, y la oración. Ese enfoque holístico del bienestar de las personas puede constituir una importante base sobre la que es posible generar programas de salud multidireccionales. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 25 “La fe, la oración y la solidaridad ofrecen consuelo a los niños y niñas cuyas vidas están llenas de dolor... Cuando comparten sus oraciones con otros que sufren similares vicisitudes, sus espíritus se elevan y se reducen sus ansiedades y su depresión. ¡Cuando se suman proporciones similares de oración, fe y apoyo social se reaviva la esperanza!”. — Jean Webster, Zimbabwe Orphans through Extended Hands37 Las alianzas con dirigentes religiosos para eliminar la poliomielitis en la India Más de un 80% de los niños de la India que sufrieron poliomielitis en 2002 tenían menos de dos años de edad y eran mayoritariamente varones y predominantemente musulmanes. Un 80% de los casos se registró en Uttar Pradesh, en la región septentrional del país. Los datos obtenidos por la Organización Mundial de la Salud y el Gobierno de la India demostraron que los niños y niñas de la zona occidental de Uttar Pradesh, y principalmente los de las comunidades musulmanas de esa región del país, no habían sido vacunados durante los días nacionales y subnacionales de inmunización ni como parte de los programas de vacunación sistemática. • Campamentos de salud de un día de duración en los que se brindó atención curativa general y servicios de inmunización a los niños, así como orientación sobre medicina preventiva a los padres y madres. • Reuniones con “personas influyentes”, como imanes, maestros, doctores y activistas locales, a fin de mejorar la calidad y eficacia de la interacción con las familias, lo que con frecuencia se logró mediante visitas domiciliarias. Lecciones obtenidas La combinación de los enfoques de promoción, movilización social y comunicación para la modificación del comportamiento dejó un saldo de valiosas lecciones con respecto a diversos enfoques prácticos: Esa situación se debió a razones múltiples y complejas. En materia de atención general de la salud, la población de esa región ya estaba en gran medida subatendida; muchos • El apoyo de los dirigentes religiosos, las personas notables padres no creían que fuese necesario vacunar a todos los y las autoridades médicas, entre ellas los agentes de salud niños contra la poliomielitis y consideraban que la vacunación tradicionales, ayudaron a superar la resistencia generadas no era eficaz; y en su mayoría creían que la poliomielitis por los rumores infundados. podía curarse mediante el suministro de “medicamentos adecuados”. También había en la población altos niveles • Los cambios de opinión logrados mediante la interacción de temor y desconfianza. La población musulmana de la local con las familias opuestas a la vacunación sólo tuvieron región occidental de Uttar Pradesh ya había sido objeto de carácter sostenible cuando contaron con el respaldo de varias iniciativas de control de la natalidad y sus integrantes opiniones similares en ámbitos mas amplios, especialmente consideraban que los reiterados ciclos de vacunación gracias a la participación de los dirigentes religiosos, cuyas antipoliomielítica constituían un nuevo intento de control de opiniones eran muy respetadas por las comunidades a las su crecimiento demográfico. que estaba dirigida la campaña. A fin de aclarar esas impresiones equivocadas, y dar respuesta a los temores, las sospechas y la desconfianza, UNICEF se alió con los principales líderes de la opinión pública, profesionales y personas influyentes en las comunidades afectadas. Tres universidades musulmanas con redes amplias de instituciones religiosas, académicas y profesionales, y numerosas organizaciones estrechamente vinculadas a las comunidades se aliaron para llevar a cabo labores de promoción y difusión y para planificar e implementar las campañas de vacunación. Los aliados que constituyeron el Equipo de Tareas del Distrito, encabezado por el Magistrado de Distrito, que en la India es el título de la máxima autoridad gubernamental a nivel de distrito, llevaron a cabo intensas actividades de difusión social y comunitaria. Posteriormente, los movilizadores comunitarios realizaron una serie de actividades durante los 15 días previos a cada ciclo de vacunación. Entre esas actividades figuraron: • Reuniones vecinales y de madres para difundir información sobre la poliomielitis, responder a las dudas acerca de la reiteración de las dosis, los efectos secundarios y otras inquietudes, como los presuntos peligros de vacunar a los niños que tenían fiebre. • La presencia de trabajadores de la salud tradicionales y dirigentes religiosos en todos los vecindarios revistió una enorme importancia para el éxito de las labores de difusión y para la localización de los niños y niñas que no habían recibido suficientes dosis de vacunas. • La dependencia de salud del gobierno del distrito reconoció el valor de la participación de la red de Jamia Millia Islamia en la planificación, coordinación y ejecución de la campaña. • Las declaraciones y los llamamientos que se realizaron desde importantes centros islámicos como los de Darul Uloom y Miftaul Uloom Deoband resultaron de enorme importancia con respecto a la modificación de los comportamientos de las familias musulmanas que no aceptaban hasta entonces la vacunación. • También tuvo una importancia fundamental con respecto al logro de la cooperación de muchas instituciones musulmanas y el respaldo de muchos líderes de la opinión pública un folleto de promoción que se había elaborado a tal fin. • La fluida coordinación entre esas instituciones y sus redes locales ayudó asimismo a lograr un alto nivel de participación en ambos días y a obtener resultados muy positivos en la búsqueda domiciliaria de niños y niñas sin inmunizar. Fuente: Adaptado de “When Every Child Counts”, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia 200438. 26 ¿Qué pueden hacer las comunidades religiosas para promover la salud infantil? • Examinar y convalidar los fundamentos de las intervenciones de salud escogidas a la luz de sus sistemas de creencias. • Incorporar información y mensajes sobre la atención de la salud de los niños en los servicios, festivales y ritos religiosos infantiles. Una de las maneras en que se puede destacar la importancia de esa información y esos mensajes es mediante el uso de oraciones especiales y la lectura de los textos religiosos referidos a los vínculos entre la religión y la buena salud. • Organizar grupos de apoyo a los nuevos padres y madres a fin de que reciban educación sobre la salud e información sobre servicios de salud para sus hijos. • Combatir las actitudes de rechazo a las intervenciones de salud de los niños que se basen en las pruebas, como la conveniencia de los alumbramientos en los hospitales, la inmunización y la lactancia materna. Alentar y apoyar la modificación de esas actitudes y prácticas. • Educar al personal médico y a los trabajadores sociales a fin de que integren en su trabajo las prácticas médicas, religiosas y culturales que resulten adecuadas. • Emplear los medios de comunicación de las organizaciones religiosas, como la radio y la televisión, para difundir mensajes sobre la seguridad y la importancia de las intervenciones de salud infantil, como la inmunización y la prevención del paludismo. • Prestar amplio apoyo a las iniciativas de inmunización y suministro de suplementos de micronutrimentos, así como las referidas a todo otro aspecto importante de la salud de los niños, mediante el aprovechamiento de la autoridad moral y las redes amplias de las que disponen las comunidades religiosas. • Durante las situaciones de emergencia, movilizar rápidamente las redes comunitarias para prestar servicios de salud vitales, como los de primeros auxilios, inmunización y prevención del paludismo y de respuesta a esa enfermedad. • Colaborar con el desarrollo de políticas nacionales de salud mediante las labores de promoción y asistencia técnica, y ayudando a aclarar conceptos erróneos, como que determinadas prácticas tradicionales perniciosas forman parte de las enseñanzas religiosas. Alianza con los dirigentes religiosos para fomentar la salud pública en Bangladesh Históricamente, los imanes de Bangladesh no sólo son fuente de orientación religiosa para la población sino que también ayudan a promover y mantener la salud pública, las actividades del desarrollo, la paz social y la armonía comunitaria. La población, y en especial la población rural, suele dar gran importancia a las instrucciones y directivas de los imanes. UNICEF se ha aliado con los dirigentes religiosos de ese país de diversas maneras, como por ejemplo: • Colaborando con los dirigentes islámicos y budistas en apoyo de las campañas de vacunación de base comunitaria contra el sarampión que se incorporaron en los servicios religiosos, como las sesiones semanales de oración. • Estableciendo una alianza estratégica con la Fundación Nacional Islámica, logrando el apoyo de los imanes en materia de difusión de mensajes saludables y positivos para los niños y sus familias y la promoción de los derechos de las niñas a nivel nacional y local. El Representante de UNICEF participa periódicamente en las reuniones del Conferencia Nacional de Imanes para tratar las cuestiones relacionadas con los niños y solicitar el apoyo de los dirigentes religiosos con respecto al fomento de comportamientos que protejan, cuiden y salven las vidas de los niños. Entre los temas en los que se ha hecho mayor hincapié han figurado el fomento del lavado de manos con jabón, la lactancia materna, la educación sobre la salud y otros comportamientos relacionados con la salud. Asimismo, se han distribuido en las comunidades folletos que contienen esos importantes mensajes, además de valiosa información. La participación de los dirigentes religiosos ha garantizado que un número cada vez mayor de creyentes se lave las manos con jabón antes de las abluciones y en los momentos adecuados del día. Algunas comunidades donan jabón a las mezquitas. • Movilizando a los imanes y a los monjes budistas de los distritos afectados por los virus H5N1 y H1N1 para que respalden los comportamientos preventivos y de respuesta. A fin de garantizar una comunicación fluida con los dirigentes religiosos, especialmente a nivel de comunidades, UNICEF creó una base de datos que contiene las direcciones y los números de teléfonos móviles de los dirigentes religiosos locales. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Oficina en Bangladesh, 201139. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 27 Ejemplos de alianzas • En 2010, UNICEF estableció una alianza en la República Democrática del Congo con cinco importantes comunidades religiosas cristianas, musulmanas y tradicionales que cuentan con una red combinada de más de 30 millones de creyentes. El objetivo de la alianza consistió en fomentar prácticas fundamentales para la salud de las familias, como el amamantamiento y la inmunización. Las cinco comunidades religiosas fueron escogidas con criterio estratégico por el grado de confianza que tenía en ellas la población, así como por su capacidad de fomentar y lograr cambios sociales y de comportamiento, además de contar con la adhesión de más de la mitad de los 65 millones de habitantes del país. En la vecina República del Congo se lleva a cabo un programa similar. de dos pertenecientes a la población kayin y chin, respectivamente). UNICEF también publicó un Manual del proyecto de liderazgo budista para capacitadores budistas laicos en 2006. • Durante la epidemia de cólera de 2010 en Haití, UNICEF estableció una alianza con una coalición interreligiosa, la filial haitiana de Religiones por la paz, en la que participaron católicos, protestantes, musulmanes y creyentes del vudú. La alianza brindó información sobre el cólera y atención médica de emergencia a miles de pobladores amenazados. Más de 4.000 integrantes de las varias comunidades religiosas recibieron capacitación en materia de prevención y respuesta ante el cólera, y éstos, a su vez, llevaron a cabo labores de movilización social en las que participaron casi dos millones de haitianos, o un 20% de la población del país. • En la región nororiental del Ecuador, el Vicariato Apostólico de Esmeraldas y UNICEF se aliaron para • En Kenya, en colaboración con el Consejo Interreligioso brindar apoyo principalmente a las comunidades de ese país y el Ministerio de Salud Pública y indígenas y rurales de la zona en materia de (a) atención Saneamiento, UNICEF puso en marcha en 2009 una serie primaria de la salud, especialmente de salud y nutrición de iniciativas para promover siete intervenciones de salud maternoinfantil; (b) capacitación docente y elaboración maternoinfantil de amplia repercusión. Los dirigentes de materiales de educación culturalmente pertinentes; y religiosos cristianos, musulmanes e hinduistas se aliaron (c) enseñanza de conocimientos prácticos para la vida a para dar prioridad a esas intervenciones y difundirlas los adolescentes y jóvenes vulnerables. El Gobierno del mediante mensajes que contuvieron referencias a la Ecuador encomendó la prestación de esos servicios al Biblia, el Corán y el Gita. El producto final fue un Manual Vicariato Apostólico de Esmeraldas debido a la influencia para las Comunidades Religiosas de apoyo a la salud y el amplio radio de acción con que cuenta ese organismo maternoinfantil en Kenya. Por medio de los organismos religioso en esa zona altamente inestable del país. religiosos de coordinación que funcionan en los 47 condados del país, el programa se aplicará en las ocho • En 2009, UNICEF y los ministerios de Salud y Asuntos provincias de Kenya y servirá para brindar capacitación Religiosos de Argelia llevaron a cabo una serie de a unos 27.000 dirigentes religiosos. Se calcula que cada sesiones de capacitación para las mourchidates, o dirigente capacitado compartirá a su vez la información predicadoras, que estuvieron dedicadas al fomento y la sobre la atención de la salud maternoinfantil con un millar protección de la salud de las mujeres y los niños. Más de de integrantes de su congregación, por lo menos. 30 mourchidates ya han recibido capacitación en el marco de ese programa que está dirigido a unas 300 predicadoras • Durante la guerra civil de El Salvador, la Iglesia Católica de todo el país. El programa brinda a las mujeres llevó a cabo las negociaciones necesarias para lograr un conocimientos básicos sobre la comunicación en pro cese del fuego que posibilitó la inmunización de los niños de la modificación del comportamiento, y les suministra y niñas de todo el territorio nacional. Posteriormente se información esencial sobre la salud maternoinfantil lograron treguas similares que posibilitaron la vacunación haciendo hincapié en el destacado papel que cumple la en otros países afectados por los conflictos armados, comunicación con respecto al fomento de la salud. como Sri Lanka y el Sudán. • En la República Dominicana, UNICEF prestó en 2009 • Antes de anunciar que Egipto se había librado de la asistencia técnica y financiera para que se prolongara el poliomielitis, la oficina de UNICEF de esa nación solicitó programa Pastoral Maternoinfantil de la Iglesia Católica, al Gran Mufti que promulgara una fatua para movilizar y que brinda a las madres capacitación en materia de alentar a los padres, madres y otras personas encargadas salud y nutrición, dinámica de grupo y comunicaciones, de niños a que participaran en las campañas intensivas de además de visitas domiciliarias. Gracias en parte al vacunación contra la poliomielitis. apoyo de UNICEF, el programa fue incorporado en el Presupuesto Público de la Nación, de manera que fuera • UNICEF se alió con el Consejo Interreligioso de Sierra más sostenible desde el punto de vista financiero. Leona, una red nacional que cuenta con representación en todos los distritos del país, con el propósito de • La Oficina de UNICEF en Myanmar llevó cabo en más fomentar las prácticas familiares esenciales y otras de 50 poblados unas 400 sesiones de capacitación sobre prácticas beneficiosas para el desarrollo y la supervivencia Para la Vida, en las que se hizo hincapié en las cuestiones de los niños. Como parte de esa alianza se elaboró relacionadas con la gripe aviar. Para lograrlo, contó un memorando de entendimiento entre ambas con el apoyo de seis agrupaciones religiosas y étnicas organizaciones mediante el cual se estableció una (budista, católica, musulmana y protestante, además colaboración más estrecha y de carácter más estratégico. 28 Una mujer sostiene a su sobrino, que vive con VIH y a quien cuida desde que su madre murió de SIDA (Zambia). VIH y SIDA La prestación de ayuda a los sectores más pobres y marginados y menos atendidos de la población ha sido uno de los componentes más importantes para el éxito de los programas de lucha contra el VIH y el SIDA. Se trata de un enfoque que adquiere aún más relevancia en una época de recursos estáticos y prioridades cada vez más complicadas y opuestas. La eliminación de las nuevas infecciones de VIH pediátrico, así como las muertes de niños debidas al SIDA, es una meta viable, pero para lograrla es necesario contar con una visión, capacidad de liderazgo, mejoras integrales en materia de prestación de servicios de atención de la salud y apoyo a los vínculos con las familias y las comunidades, además de cambios sociales profundos y la implementación constante de las prácticas más adecuadas. La integración de las intervenciones en los sistemas ya existentes (sin que por ello se pierda la capacidad de satisfacer las necesidades específicas de los niños afectados por el SIDA) constituye un importante desafío en las cuatro esferas prioritarias de Únete por la niñez, únete con la juventud, únete para vencer al SIDA, que son la prevención de la transmisión de la madre al niño; la prestación de atención y tratamiento pediátrico; la prevención de las infecciones de los adolescentes y jóvenes; y la protección y el apoyo a los niños y niñas afectados por el VIH/SIDA40. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas para hacer frente al VIH? “Contamos con la notable ventaja de nuestra presencia e inserción en las comunidades. Contamos con valiosos programas y estructuras ya instalados y en funcionamiento. Estamos a disposición de quienes nos necesiten y somos confiables. También tenemos carácter sostenible. Estábamos allí mucho antes de la llegada del SIDA y seguiremos estando allí después que el SIDA haya desaparecido”. — Canon Gideon Byamugisha41 Los principios fundamentales de las principales tradiciones religiosas —el amor, la compasión, el respeto por la dignidad de todas las personas y la caridad hacia los menos afortunados— forman la base del trabajo relacionado con el VIH de todas las comunidades religiosas. Los dirigentes religiosos son la brújula moral de las comunidades de fe y pueden auspiciar respuestas incluyentes y compasivas a la situación de sus integrantes afectados por la enfermedad. Las comunidades religiosas ocupan un lugar de avanzada en las labores de prevención y respuesta ante la pandemia, especialmente en el plano comunitario. Se calcula que “en 2006 los voluntarios de las organizaciones religiosas de África realizaron contribuciones financieras destinadas a la lucha contra el VIH por valor de unos 5.000 millones de dólares, lo que equivale a la totalidad de los fondos asignados para similares actividades por todos los organismos bilaterales y multilaterales combinados42”. Cuando concentran sus esfuerzos en sus comunidades, las organizaciones religiosas pueden responder y adaptarse rápidamente a las cambiantes circunstancias y necesidades. Los integrantes de las comunidades señalan Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 29 que lo que les parece más valioso sobre la manera en que los agentes religiosos prestan servicios en materia de VIH es su capacidad de brindar apoyo espiritual y psicosocial, que estiman más aún que los servicios médicos, pese a que éstos son más tangibles43. El reconocimiento del importante papel que desempeñan las comunidades religiosas en la prestación de una amplia gama de servicios relacionados con el VIH, aceptando al mismo tiempo que hay aspectos sobre los que podrían responder de manera más eficaz si se les brindara apoyo adecuado, ha dado lugar a la elaboración de la Asociación con organizaciones confesionales: Marco estratégico del ONUSIDA. El objetivo del marco consiste en alentar una colaboración más estrecha entre el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), los aliados como UNICEF y las organizaciones “La contribución más importante religiosas para lograr los objetivos del acceso universal a la prevención, que pueden hacer las iglesias el tratamiento y la atención del VIH, así como el apoyo a las personas afectadas. El logro de esos objetivos requiere la integración de las en el marco de la lucha contra organizaciones religiosas en las respuestas nacionales contra el SIDA. la transmisión del VIH es la eliminación del estigma y la Pese a todo lo que hacen las comunidades religiosas en pro de las personas discriminación…”. afectadas por el VIH y el SIDA, hay situaciones en las que el estigma que — Consejo Mundial de Iglesias44 conlleva vivir con el VIH puede generar una cultura de silencio en el seno de las comunidades religiosas, con frecuencia alentada por creencias que inspiran temor y cubren a la enfermedad y a los enfermos con un manto de vergüenza. Debido a ese silencio y esos temores, muchas personas afectadas no solicitan ni el tratamiento ni el apoyo emocional que necesitan. Además, muchas de las personas más amenazadas por el contagio del VIH, como los trabajadores sexuales, los hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres y las personas que se inyectan drogas, llevan a cabo actos a los que se puede considerar tabú. Los dirigentes de las comunidades religiosas pueden desempeñar un importante función en lo que respecta al cambio de actitudes y a la eliminación del estigma, la vergüenza y los temas tabú si se concentran, en cambio, en los valores relacionados con la dignidad, el respeto y la compasión que comparten sus respectivas religiones. Ejemplos de alianzas respuesta a la cuestión del VIH/SIDA”. En el libro se hicieron • Por medio de la Iniciativa del liderazgo regional budista Sangha recomendaciones basadas en referencias coránicas y chiítas. Metta (“monjes compasivos”), UNICEF ha colaborado con las En 2008, el documento fue distribuido a las principales autoridades de gobierno y los dirigentes budistas en labores de organizaciones religiosas del país. También se llevan a cabo prevención y atención del VIH y el SIDA en Bhután, Camboya, en el Irán actividades de promoción de alto nivel orientadas a China, la República Democrática Popular Lao, Mongolia, concienciar a los principales dirigentes religiosos acerca de los Myanmar, Tailandia y Viet Nam. Los programas que se temas relacionados con la lucha contra el VIH y el SIDA. implementan como parte de la Iniciativa varían de país en país. Entre los mismos figuran los programas de prevención • En 2009, la Oficina de UNICEF en el Chad se alió con diversas dirigidos a los jóvenes, los de orientación y curación espiritual, organizaciones de la sociedad civil, como la Alianza de los de educación comunitaria en los templos y los de apoyo organismos religiosos contra del VIH/SIDA y otras pandemias, a las familias y los niños vulnerables afectados por el VIH y el con las que creó un grupo de estudio y una dependencia SIDA. UNICEF prestó su apoyo a un proceso mediante el cual de acción y logró un compromiso formal por parte de los los dirigentes budistas elaboraron un enfoque e capacitación dirigentes religiosos de dar respuesta activa al problema del que adecuó una serie de enseñanzas fundamentales sobre VIH/ SIDA y a otras cuestiones relacionadas con la educación, respuestas ante el VIH a sus propias creencias religiosas la protección de la infancia, y la supervivencia y el desarrollo acerca de las Cuatro Nobles Verdades. Ese enfoque resultó de los niños. esencial para que el grueso de los dirigentes budistas se sumara a la Iniciativa. • En Nicaragua, UNICEF se alió en 2010 con el Centro Intereclesial de Estudios Teológicos y Sociales y con Acción • En colaboración con ONUSIDA y Religiones por la paz, Medica Cristiana para alentar la reflexión teológica pastoral UNICEF elaboró una guía para dirigentes religiosos de sobre la epidemia del VIH. De esa manera se logró movilizar varias comunidades confesionales sobre cómo emplear su a las iglesias, especialmente las de la costa del Caribe, con influencia, su autoridad moral y sus recursos en pro de los relación a los derechos de las personas que viven con el VIH. niños afectados por el VIH y el SIDA. Varios teólogos nicaragüenses prominentes elaboraron un libro sobre las bases teológicas de la participación de la Iglesia en • En 2007, la Oficina de UNICEF en el Irán y varios catedráticos la respuesta nacional ante la epidemia. Los educadores de 10 religiosos de la Universidad Imam Sadeq analizaron los instituciones bíblicas y los dirigentes religiosos de 200 iglesias retos prácticos que involucra la vigencia de los derechos de Nicaragua han recibido capacitación sobre el enfoque de los niños y el logro de su bienestar en un libro titulado teológico de la epidemia del VIH. “Qué podemos hacer los dirigentes religiosos para dar 30 Las mujeres religiosas desempeñan importantes funciones tanto brindando cuidados a las familias afectadas por el SIDA como participando en las labores de prevención del VIH. Pese a que no suelen ocupar lugares visibles en las estructuras de conducción de las comunidades religiosas, las mujeres son protagonistas fundamentales a la hora de hacer frente a las consecuencias de la pandemia y a las cuestiones “Los dirigentes religiosos cuentan con la conexas, como la salud reproductiva y sexual y la violencia por inestimable capacidad de romper ese silencio razones de género. Es importante realizar todos los esfuerzos si reconocen el sufrimiento y extienden posibles por darles el reconocimiento que merecen y apoyarles en una mano compasiva a los excluidos y sus funciones del liderazgo. rechazados. En su poder está el poner Resulta inevitable que en algunas esferas de colaboración fin a la culpa, la negación, el estigma y la existan desacuerdos sobre enfoques específicos. Por ejemplo, discriminación y abrir la senda que conduzca la distribución de condones como medida de protección del a la reconciliación y a la esperanza, al saber y VIH puede no contar con el respaldo de algunas comunidades a la curación, a la prevención y al cuidado45”. religiosas. Sin embargo, es posible no estar de acuerdo sobre ciertos aspectos del trabajo y colaborar de cualquier manera en actividades con las que se está de acuerdo, como la lucha contra el estigma y la discriminación de los niños y niñas afectados por el VIH. El marco del ONUSIDA bosqueja las funciones y responsabilidades de los organismos de las Naciones Unidas y las organizaciones religiosas aliadas en las actividades de respuesta al SIDA y puede constituir un punto de partida importante para las negociaciones acerca de los aspectos más polémicos de las intervenciones contra el VIH y el SIDA. ¿Que pueden hacer las comunidades religiosas para dar respuesta al VIH/ SIDA? Con relación a los temas que se enumeran a continuación, las comunidades religiosas pueden remitirse a los textos sagrados, las escrituras y las investigaciones académicas para fomentar la compasión, la curación y otras medidas y acciones que respeten la dignidad y el carácter sagrado de todos los seres vivientes. Dependiendo de cuáles sean las condiciones epidemiológicas, las organizaciones pueden también movilizar sus considerables recursos humanos, como los voluntarios y las agrupaciones de jóvenes y mujeres, para la realización de labores de promoción y educación comunitaria específicas o en gran escala. Prevención de la transmisión del VIH de madre a hijo • Alentar el diagnóstico precoz en los lactantes cuando sus madres estén infectadas con el VIH. • Brindar apoyo a las labores de mejoramiento del acceso y las remisiones a establecimientos y servicios de salud. • En conformidad con las políticas y los protocolos nacionales, fortalecer los servicios de prevención de la transmisión del VIH de madre a hijo en los hospitales y centros médicos confesionales, en especial los de las regiones rurales, y garantizar la coordinación con los sistemas nacionales de salud dedicados a la prevención del VIH y el tratamiento de las enfermedades relacionadas con el SIDA y con el tratamiento antirretroviral de quienes lo necesiten. Prestación de tratamiento y atención pediátrica • Ofrecer atención, tratamiento y orientación psicológica, especialmente en las comunidades rurales y desposeídas. Entre esos servicios deben figurar los de atención paliativa y los de cuidado residencial al final de la vida. • Garantizar la coordinación con los sistemas nacionales de salud y la adhesión a los planes y protocolos nacionales sobre la prevención del VIH y el tratamiento de las enfermedades relacionadas con el SIDA. • Asignar los recursos caritativos a las actividades de prevención y atención que estén basadas en las pruebas, entre ellas las de diagnóstico precoz en los lactantes y las de seguimiento. • Capacitar y educar a los familiares de las personas que viven con el VIH o que tienen enfermedades relacionadas con el SIDA, así como a quienes les cuiden, brindándoles información acorde con sus creencias religiosas. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 31 Prevención de las infecciones de los adolescentes y jóvenes • Difundir y debatir las enseñanzas que promuevan los comportamientos y las prácticas seguras y saludables para prevenir la infección y la transmisión sexual y no sexual del VIH. • Prestar apoyo sin emitir juicios de valor a los sectores de la población más amenazados por el VIH, a fin de que cuenten con mayor acceso a los servicios de prevención del VIH y de tratamiento, atención y apoyo a las personas infectadas. Protección y apoyo a los niños afectados por el SIDA • Aprovechar la influencia moral de los dirigentes religiosos para combatir el estigma y la discriminación, y alentar el diálogo en sus comunidades con el objetivo de modificar la actitud de rechazo de las personas que viven con el VIH o el SIDA, y transformarla en una actitud de aceptación y apoyo. • Participar en iniciativas más amplias de apoyo, incluso las de vinculación con los sistemas nacionales ajenos a sus respectivas comunidades religiosas, a fin de lograr cambios políticos y legislativos y modificar percepciones en general. • Asignar recursos caritativos, tanto en efectivo como en especie, a las actividades de atención y apoyo basadas en la familia, en particular a las que alienten estrategias y políticas de protección social, tengan en cuenta los factores relacionados con el SIDA y traten de satisfacer las necesidades de éstos y otros sectores vulnerables de la población. • Facilitar el acceso a los servicios sociales y de salud y fomentar la protección y educación de los hijos de las personas con VIH o SIDA. • Brindar capacitación y educación a los familiares de personas que viven con VIH o SIDA, así como quienes les cuiden, suministrándoles información aplicable a sus creencias religiosas. • Brindar orientación espiritual a los individuos y las comunidades con el propósito de alentar su aceptación de los niños y niñas afectados por el SIDA. Ayuda a los marginados por medio de las redes de las iglesias de Namibia Namibia es uno de los países del mundo más afectados por el VIH y el SIDA, y debido al contexto de inseguridad alimentaria y a los altos niveles de pobreza que afectan a la población, también es una de las naciones donde el número de huérfanos y niños vulnerables aumenta más velozmente. La Church Alliance for Orphans (CAFO), una organización de redes interconfesionales cuya misión consiste en brindar a esos niños atención y apoyo, fue fundada en 2002 con financiación inicial de UNICEF y la Fundación Ford. niñas vulnerables resultaron beneficiados por el apoyo que recibieron de sus congregaciones pertenecientes a la alianza. CAFO ha continuado desempeñando una valiosa función en las labores de promoción, ya que vincula a las comunidades a través de las iglesias con los organismos y organizaciones de servicios, tanto de la sociedad civil como del gobierno. La Alianza también ha desempeñado un papel fundamental en los debates sobre políticas. Debido a que forma parte del Equipo permanente de tareas sobre los huérfanos y niños vulnerables, que depende del gabinete de gobierno, CAFO ha participado en la elaboración de normas sobre CAFO, que se estableció bajo los auspicios del Consejo de la prestación de servicios, así como de políticas, planes y Iglesias de Namibia, aplica un enfoque ecuménico que le proyectos de ley de alcance nacional. También organizó una permite aprovechar la vasta influencia de la que disfrutan Caminata por los Niños de amplia difusión con el propósito las iglesias del país. La alianza ha ayudado a aumentar y de concienciar a la población acerca de la situación de los fortalecer la capacidad de las comunidades religiosas de involucrar a sus integrantes en las actividades de protección, niños y niñas vulnerables. atención y apoyo a los niños y niñas vulnerables. Mediante sus subvenciones, cursos de capacitación y proyectos basados en la comunidad, y en colaboración Para 2010, CAFO estaba a cargo de la gestión de con sus aliados de la sociedad civil y el gobierno, CAFO subvenciones por un total de 600.000 dólares anuales que demuestra la manera en que las comunidades religiosas se distribuían a unas 539 congregaciones que participaban pueden cumplir significativamente su obligación de prestar en la alianza. Las congregaciones recibían capacitación y ayuda a los niños y niñas vulnerables. ayuda técnica en materia de gestión de diversos proyectos y de seguimiento y presentación de informes sobre los Fuente: Oficina del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia resultados de los mismos. Ese año, más de 20.000 niños y en Namibia, 2011. 32 Unas niñas rezan antes del desayuno en la Casa de Gobierno para los niños afectados por el tsunami, que ofrece atención, vivienda, educación básica y actividades recreativas para huérfanos y otros niños vulnerables, la mayoría de los cuales proceden de pueblos de pescadores (India). Nutrición La nutrición adecuada es un derecho fundamental de todos los niños, ya que hace posible que comiencen sus vidas de la mejor manera posible. Las intervenciones de nutrición de elevada repercusión se concentran en la alimentación de los lactantes y niños de corta edad; el suministro de suficientes micronutrimentos, como la vitamina A y el yodo; la seguridad nutricional durante las situaciones de emergencia; y los aspectos de la nutrición relacionados con el VIH y el SIDA. En esas intervenciones se emplea un enfoque de ciclo vital y se hace hincapié en las alianzas y las intervenciones integradas con el objetivo de aumentar al máximo su eficacia. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en pro de la nutrición de los lactantes y niños de corta edad? “Tanto el mundo vivo como el inanimado se mantienen con alimentos. La vida proviene del alimento, y esto es algo que se observa en todos lados y sobre lo que no puede haber dudas... Quien otorga alimento otorga vida, y otorga también todo lo demás. Por lo tanto, quien desee el bienestar en este mundo y en el más allá, debería dedicarse especialmente a otorgar alimento”. — Mahabharata 4 6 El alimento, indispensable para la vida, no sólo desempeña un papel importante de nuestras vidas biológicas sino también en nuestra existencia cultural y social. El papel destacado que desempeñan los alimentos en las religiones y tradiciones indígenas se menciona en los textos y cuentos y en las tradiciones orales que describen la manera en que la comida alimenta a la vida, une a los integrantes de las comunidades y representa la vida terrenal y espiritual. Los dirigentes religiosos respaldan el amamantamiento exclusivo Diecinueve oficinas de países de UNICEF tomaron parte en 2010 en la iniciativa del Día mundial de oración y acción por la infancia, que movilizó a las comunidades religiosas en pro de un temario común referido a la salud materna y la supervivencia de los niños, haciendo especial hincapié en el amamantamiento exclusivo. En Argelia, por ejemplo, se destacaron los temas de los derechos de los niños y la importancia de la lactancia materna en los sermones pronunciados en las 15.000 mezquitas de ese país; y en la República Democrática del Congo, cuatro de las principales agrupaciones religiosas del país, que cuentan entre todas con más de 30 millones de creyentes, se pusieron a la cabeza de una campaña de una semana de duración sobre la importancia de las prácticas adecuadas de salud familiar, como la lactancia materna y la inmunización47. (Consúltese la pág. 21 para obtener más información sobre el Día mundial de oración y acción por la infancia). Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 33 Sin embargo, la desnutrición no es sólo resultado de no contar con suficiente alimentos sino de la combinación de diversos factores, como la insuficiencia de proteínas, energía y micronutrimentos; las infecciones o enfermedades frecuentes; la atención deficiente y las prácticas de alimentación inadecuadas; la carencia de servicios de salud suficientes; y la falta de saneamiento y agua potable. “Las madres amamantarán a sus hijos durante dos años enteros, en el caso de quienes deseen completar la lactancia materna, pero cada padre deberá hacerse cargo del costo de los alimentos y la vestimenta de la madre de manera equitativa”. — Al-Baqara, verso 233 48 Muchas tradiciones religiosas imponen restricciones en materia de régimen alimentario, como el vegetarianismo, la prohibición de determinados alimentos a los que se considera impuros y ciertas directrices sobre la preparación de algunos alimentos, como, por ejemplo, los halal de los musulmanes y los kosher de los judíos. Conocer y comprender esas normas religiosas y culturales sobre la preparación y distribución de los alimentos puede resultar muy útil cuando se trata de garantizar la alimentación adecuada de los lactantes, y niños de corta edad, y de sus madres. Ejemplos de alianzas • En 2009, UNICEF comenzó a colaborar con los imanes • En Madagascar, UNICEF comprobó la importancia que de Darfur del Norte, en el Sudán, a fin de fomentar tienen los dirigentes religiosos y comunitarios, así como la lactancia materna y otras cuestiones relacionadas las estaciones de radio locales y las agrupaciones de con la nutrición de los lactantes y niños de corta edad. jóvenes periodistas, cuando se trata de movilizar a las Tras recibir capacitación especial, más de 100 imanes comunidades en favor de los derechos de los niños y de comenzaron a integrar en sus servicios religiosos la prestación de servicios vitales, como los de protección información y mensajes sobre la importancia del de la infancia y los exámenes de niveles de desnutrición. amamantamiento en los primeros dos años de vida de • En 2009, la Oficina de UNICEF en Kirguistán llevó a los niños y niñas. A tal fin, muchos imanes incluyeron cabo reuniones de orientación con dirigentes religiosos referencias al Corán y a otras enseñanzas islámicas. y representantes de todos los niveles de gobierno para Debido a que se dirigían a un público constituido informarles sobre un programa de enriquecimiento de exclusivamente por hombres, los religiosos también los alimentos complementarios para niños de 6 a 24 incorporaron mensajes sobre la importancia de atender meses de edad. y cuidar a las esposas e hijos. El éxito del programa quedó registrado en el significativo aumento del número • La Oficina de UNICEF en Argelia llevó a cabo gestiones de niños y niñas a los que sus madres llevaron a los ante el Ministerio de Asuntos Religiosos y Waqfs centros de salud para que se les realizaran exámenes con el propósito de alentar la participación activa de de nutrición y se les diera tratamiento con suplementos los dirigentes religiosos en el fomento y respaldo a la nutricionales. Muchas mujeres indicaron que el cambio lactancia materna. de actitud se debió a los mensajes que los hombres recibieron de los imanes. 34 ¿Que pueden hacer las comunidades religiosas para fomentar la nutrición de los lactantes y niños de corta edad? • Incorporar mensajes e información sobre la importancia de la nutrición en los servicios, oficios y festivales religiosos, así en como los ritos religiosos de los niños y niñas. Los teólogos y educadores pueden respaldar los mensajes sobre la nutrición citando pasajes pertinentes de las escrituras y otros textos religiosos. • Ofrecer a los padres y madres educación sobre la nutrición e instrucción sobre la preparación de los alimentos, poniendo especialmente de relieve la importancia que reviste el consumo de micronutrimentos y el amamantamiento exclusivo durante los primeros seis meses de vida y la continuación de la lactancia materna complementada con otros alimentos hasta que los niños cumplen dos años. También pueden combatir las actitudes y normas que se opongan a la lactancia materna o a la alimentación inicial de los recién nacidos con el calostro de sus madres. • Emplear los medios de difusión, como la radio y la televisión, para difundir mensajes sobre la importancia de que los lactantes y niños de corta edad reciban una nutrición óptima. Por ejemplo, los mensajes acerca del valor del amamantamiento exclusivo durante los primeros seis meses de vida de los niños y la continuación de la lactancia materna complementada con otros alimentos hasta que cumplan dos años, y aún más adelante. • Apoyar las labores de distribución de alimentos durante las épocas de inseguridad alimentaria empleando como centros de distribución los templos, iglesias, mezquitas y otras instalaciones religiosas. Los dirigentes religiosos pueden recalcar el mensaje de que en las situaciones de emergencia no se deberían distribuir sustitutos de la leche materna, productos lácteos y biberones, y que la leche en polvo y sus derivados sólo deberían distribuirse en combinación con otros alimentos básicos molidos para evitar la tentación de emplearlos como sustitutos de la leche materna. • Suministrar información sobre las necesidades de las comunidades que las organizaciones humanitarias puedan tener dificultades para obtener. • Mediante el uso de sus amplias redes y apelando a su influencia moral, llevar a cabo labores de promoción de las campañas de inmunización o suministro de suplementos de micronutrimentos y de otras intervenciones de salud infantil. • Asesorar a las organizaciones humanitarias acerca de las restricciones alimentarias de sus comunidades, así como sobre otros principios y normas que puedan atentar contra la eficacia de las intervenciones de nutrición convencional. En algunas comunidades religiosas, por ejemplo, puede no resultar aceptable el empleo de los suplementos de micronutrimentos en cápsulas de gelatina, que pueden ser reemplazados, sin embargo, por las de glicerina vegetal y las halal. Una niña junto a otros niños que reciben comida y practican actividades en un centro para niños vulnerables dirigidas por monjas católicas (República Centroafricana). Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 35 Un niño bebe agua de una bomba de mano (Bangladesh). Agua, saneamiento e higiene La carencia de acceso adecuado a los servicios de agua potable y saneamiento, combinada con las prácticas de higiene deficientes, afecta diariamente a millones de niños que sufren enfermedades, pobreza, falta de oportunidades de desarrollo pleno o la muerte. Cuando las escuelas no cuentan con instalaciones sanitarias privadas y decentes, se está negando a los niños, y muy especialmente a las niñas, el acceso a la educación. El tiempo que deben dedicar los padres a obtener agua, sumado a las limitaciones que les imponen las enfermedades, reducen sus posibilidades de satisfacer adecuadamente las necesidades de sus hijos. Dadas esas circunstancias, UNICEF se concentra en brindar apoyo a las actividades destinadas a cambiar el comportamiento con respecto al saneamiento ambiental y la higiene, además de respaldar las labores de mejoramiento del acceso al suministro de agua. Diversos estudios indican que los sectores más pobres de la población tienen más probabilidades de carecer de agua potable y saneamiento, y en especial de este último servicio, cuyo suministro se caracteriza por estar distribuido en el mundo de manera muy poco equitativa. Esa inequidad que caracteriza el acceso al agua y el saneamiento ambiental se agrava aún más durante los desastres humanitarios y en contextos de inestabilidad. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas para la implementación de los programas de agua, saneamiento e higiene? “Pese a que la relación entre la religión y la construcción de instalaciones de suministro de agua y retretes en las escuelas no resulte muy obvia, no por eso deja de ser importante. El agua desempeña un papel importante en muchas religiones y creencias del mundo, ya que es fuente de vida y representa el nacimiento y la resurrección. El agua limpia el cuerpo, y por extensión, lo purifica. Y esas dos cualidades le confieren un carácter altamente simbólico, y en algunos casos sagrado. Por ello, el agua es un elemento esencial de muchas ceremonias y ritos religiosos. Esto se refleja en la manera en que la gente usa el agua y diseña sistemas para su suministro y distribución, así como en la necesidad de contar con acceso al agua para higienizarse después de ir al baño o para lavarse las manos49”. El agua es el elemento más esencial de la supervivencia humana y ocupa, por lo tanto, un lugar prominente en muchas de las tradiciones religiosas del mundo. La limpieza con agua es una metáfora casi universal de la purificación espiritual, y se manifiesta en el baño ritual de los hinduistas en el río Ganges, en las abluciones previas a la oración en “El agua simboliza la presencia de las mezquitas y en el bautismo de la tradición cristiana. Dios, y es por eso que Krishna dice: ‘Yo soy el sabor del agua”. El agua pura es la base de la higiene y el saneamiento, que muchas — Bhagavad Gita 7:8 5 0 tradiciones religiosas alientan mediante preceptos sobre la eliminación de los excrementos y los ritos de purificación previos a las actividades espirituales. En la sociedad hindú, por ejemplo, los creyentes deben “defecar a una distancia de sus hogares igual a la que cubre una flecha disparada desde un arco, y jamás en el predio de un templo,a orillas de un río, estanque o manantial, o en un lugar público. Cuando defecan, los musulmanes no pueden 36 dirigirse a la Meca, mientras que los hindúes no pueden estar de frente a cuerpos celestiales, templos, sacerdotes o árboles sagrados51.” La ley mosaica establece prácticas específicas sobre el lavado de las manos y la eliminación de los excrementos humanos52. Consultar a las autoridades religiosas para saber cuáles son las actitudes y comportamientos adecuados con respecto a las prácticas en materia de agua, saneamiento e higiene puede resultar muy beneficioso para la elaboración y aplicación de sistemas adecuados. “Dado que el 64% de los establecimientos escolares del mundo tienen carácter confesional, la vinculación del aprendizaje espiritual con el aprendizaje acerca del agua, saneamiento e higiene y el medio ambiente, así como con el mejoramiento de las instalaciones de saneamiento en las escuelas puede ofrecer inmejorables oportunidades y beneficios53”. La disponibilidad de instalaciones adecuadas de agua, saneamiento e higiene en las escuelas, además de la enseñanza sobre esos temas, resulta esencial para facilitar el acceso de los niños y niñas a esos servicios vitales y para garantizar su derecho a la educación. Las ausencias a clases debidas a la diarrea, los parásitos intestinales y otras enfermedades causadas por el agua contaminada y la higiene deficiente afectan gravemente el aprendizaje y desarrollo de los niños. Las niñas y las maestras también pierden días escolares si los establecimientos carecen de instalaciones adecuadas para sus necesidades de higiene durante la menstruación. Teniendo en cuenta que, como se ha señalado, la mayoría de las escuelas es de carácter confesional, es imprescindible que las comunidades religiosas equipen sus establecimientos de enseñanza con instalaciones adecuadas de agua, saneamiento e higiene, y que ofrezcan educación sobre esos temas. Ejemplos de alianzas • En Indonesia, los dirigentes religiosos colaboraron en la elaboración e implementación de un proyecto sobre higiene y salud llamado Campaña de los viernes de higiene, que contó con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), el Instituto estatal de religión islámica Ar-Raniry, CARE International, el Johns Hopkins School of Public Health y el Johns Hopkins Center for Communication Programmes. Los ulama (dirigentes religiosos) desempeñaron un papel esencial con respecto a la elaboración de mensajes sobre la salud vinculados con los versos coránicos y las enseñanzas islámicas en materia de higiene y aseo personal. Los dirigentes religiosos difundieron esos mensajes destinados a cambiar el comportamiento de los integrantes de sus comunidades en las plegarias de los viernes, durante las reuniones comunitarias y en sus discursos y sermones54. • En 2009, durante un brote de cólera en Zimbabwe, se registró un elevado número de defunciones de integrantes del culto apostólico, que no acepta los tratamientos de la medicina moderna. UNICEF dirigió una campaña de promoción destinada a generar mayor aceptación de esos tratamientos. También brindó capacitación a 96 dirigentes religiosos y produjo un programa de televisión dedicado al cólera presentado por una popular animadora. El programa fue difundido por la televisión nacional y visto por unas 300.000 personas que recibieron beneficiosos mensajes sobre la higiene. • En 2009, la evaluación del Proyecto de Religión y Salud de Bhután indicó que ese proyecto de agua y saneamiento ambiental estaba logrando sus objetivos de mejorar y fomentar la salud, la higiene y el saneamiento de las instituciones religiosas y las comunidades circundantes. En el marco de ese proyecto se brindó capacitación a los trabajadores de la salud religiosos, a fin de que pudieran mantener las mejoradas condiciones de salud e higiene en las escuelas religiosas. • En 2010, la Alianza de Religiones y Conservación, que trabaja con las tradiciones religiosas más importantes para desarrollar sus propios programas ambientales sobre la base de sus enseñanzas, creencias y prácticas básicas, se unió a la llamada a la acción de la campaña “WASH en las escuelas”, dirigida por UNICEF para lograr la visión de que todos los niños vayan a la escuela y todas las escuelas ofrezcan un entorno seguro, sano y confortable, donde los niños puedan crecer, aprender y prosperar. Como parte de la campaña, se ha recopilado una biblioteca virtual mundial de las experiencias de WASH en las escuelas gracias al liderazgo de la alianza y con la asistencia voluntaria de profesionales de WASH en las Escuelas en 39 países. Está disponible en <www.unicef. org/wash/schools>. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 37 ¿Qué pueden hacer las comunidades religiosas para promover el suministro de agua, saneamiento e higiene? • Destacar la importancia del agua en las tradiciones religiosas, especialmente en lo que se refiere al culto y los ritos, como la limpieza, la purificación, el bautismo, etc. Los dirigentes religiosos pueden aprovechar tales oportunidades para hacer hincapié en la necesidad de contar con agua potable y saneamiento adecuado y combatir las actitudes y prácticas contrarias a las normas correctas de saneamiento e higiene. • Contar en los templos, escuelas religiosas y otros sitios relacionados con el culto con agua potable e instalaciones de saneamiento y lavado de manos que alienten a la comunidad a adoptar prácticas adecuadas de higiene. En las situaciones de emergencia, esos sitios pueden ser usados como centros de almacenamiento y distribución de agua. • Integrar en los programas de estudios de las escuelas religiosas o basadas en la religión lecciones acerca de la importancia del agua, el saneamiento y la higiene, así como de las prácticas conexas. • Llevar a cabo campañas de concienciación sobre la importancia de las prácticas adecuadas de empleo del agua, el saneamiento y la higiene. Las campañas también deberían abarcar las demostraciones prácticas y, en el caso de los jóvenes, llevarse a cabo mediante el enfoque de la educación entre pares. • Emplear los medios de las comunidades religiosas, como la radio y la televisión, para difundir mensajes y educar a la población acerca de la importancia de las prácticas adecuadas en materia de agua, saneamiento de higiene, como, por ejemplo, el lavado de manos, la higiene de los inodoros y retretes y el suministro de agua potable, especialmente en las escuelas y otros sitios a los que acuden niños y niñas. • Integrar la educación sobre el agua, el saneamiento y la higiene en el culto, los ritos y los servicios de los días festivos, especialmente con la ayuda de las organizaciones religiosas basadas en la comunidad dedicadas a la salud. • Asesorar a las organizaciones comunitarias sobre los principios y prácticas de sus respectivas comunidades referidas al agua –como el lavado de las manos, el saneamiento y las normas de higiene relativas a la defecación, la higiene durante la menstruación, etc.— a fin de que puedan elaborar intervenciones adecuadas y eficaces. 38 Como parte de una iniciativa de liderazgo budista que recibe apoyo de UNICEF, un monje visita a una mujer que cuida de su nieta huérfana (Camboya). Las cuestiones intersectoriales Desarrollo en la primera infancia Los años iniciales de la vida de un niño son los más importantes para su desarrollo posterior. Cuando los niños reciben alimentación y atención de la salud adecuada, así como apoyo emocional y social y cuidados, tienen posibilidades de prosperar física, mental y emocionalmente. Sin embargo, cuando carecen de ese apoyo y no cuentan con oportunidades de aprendizaje suficientemente estimulantes, su desarrollo puede sufrir graves consecuencias, lo que no sólo afecta el futuro del niño o la niña sino también el de su familia, su comunidad y la sociedad en que vive. La pobreza es la causa subyacente de tales situaciones, y entre las maneras más eficaces de interrumpir el ciclo de la pobreza figuran las intervenciones en la primera infancia que emplean un enfoque holístico para fomentar el bienestar de los niños. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en pro del desarrollo de los niños en la primera infancia? Como se indicó anteriormente, las principales religiones del mundo hacen hincapié en el carácter sagrado de la vida y en la dignidad de todas las personas, incluso de los niños. De esos preceptos religiosos se desprenden tanto la importancia que se otorga al bienestar de los niños como las perspectivas holísticas acerca de cómo garantizar ese bienestar. Si se comprenden y se respetan esas creencias, y si se las emplea como base, se pueden fortalecer aún más los programas integrados y orgánicos de desarrollo en la primera infancia. Los dirigentes religiosos cuentan con acceso a la unidad social más íntima, que es la familia, donde va tomando forma la primera infancia. Esos dirigentes pueden resultar aliados fundamentales para el suministro de información, orientación y apoyo a las familias de los niños y niñas de corta edad y respaldar de esa manera el derecho al desarrollo saludable de todos y cada uno de los niños. ¿Qué pueden hacer las comunidades religiosas para promover el desarrollo de los niños de corta edad? • Brindar educación a los niños de corta edad, o apoyar esa educación temprana, garantizando que la misma contenga componentes que alienten y posibiliten el desarrollo físico y emocional saludable, además de fomentar la paridad de género, especialmente en el caso de los niños y niñas pobres o marginados que quizá no disfruten de ninguna otra oportunidad similar de aprendizaje. • Asegurarse de que los programas de educación en la primera infancia contengan enseñanzas sobre la educación para la paz y el respeto por los demás. • Transmitir información importante sobre el desarrollo la primera infancia en el ámbito familiar, haciendo hincapié en la obligación de la familia de mantener a los niños de corta edad, brindando información sobre cómo lograrlo y dando apoyo a sus integrantes cuando éstos confronten dificultades para hacerlo. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 39 • Integrar en los servicios religiosos, sesiones de estudios, y en particular en los eventos especiales, como los ritos de iniciación de la infancia, referencias a las escrituras, plegarias especiales y debates acerca de los elementos más importantes del desarrollo de los niños de corta edad. • Organizar grupos de educación entre pares para mujeres y asociaciones de hombres en los que se difunda y comparta información acerca del desarrollo en la primera infancia, y apoyar a los integrantes de estos grupos cuyos hijos no reciban servicios adecuados. Por ejemplo, mediante la remisión de casos o la ayuda financiera. Ejemplos de alianzas • En Jordania, en el marco del Proyecto para la mejor crianza de los hijos, UNICEF colaboró con los imanes jordanos en la producción de un folleto titulado Guía de los Imanes sobre el Desarrollo en la Primera Infancia, mediante el cual los padres pueden adquirir aptitudes para la crianza de sus hijos y alentar activamente el desarrollo temprano de los niños. El folleto contiene “Doce sermones de los días viernes”, referencias a pasajes pertinentes del Corán y citas del Profeta, como “Quien no ama a un niño no tiene corazón”. Muchas sesiones se llevan a cabo en las mezquitas, lo que ha hecho posible difundir los mensajes a un gran número de hombres. menores de cinco años. Forman parte de esa alianza las 10 religiones más importantes del país, el Ministerio de la Familia, una comisión intersectorial integrada por representantes de otros ministerios (como el de Salud y Bienestar Social) e instituciones gubernamentales, como el Instituto Nacional de las Niñas. Los integrantes de la alianza pondrán en efecto un plan integrado de comunicación y movilización social mediante el cual difundirán mensajes fundamentales sobre la salud maternoinfantil, la higiene, la nutrición, el desarrollo la primera infancia y la prevención de la violencia. El objetivo fijado para 2013 consiste en brindar capacitación a más de 10.000 dirigentes comunitarios y religiosos mediante el empleo de conjuntos de materiales multimedios (folletos, un álbum musical y episodios breves de radioteatro). El objetivo final de la iniciativa consiste en transmitir esa información a más de un millón de familias en las 18 provincias de Angola. Durante su visita al país de 2011, Anthony Lake, Director Ejecutivo de UNICEF, participó en la ceremonia oficial de creación de la Alianza. En 2013 se llevaron a cabo evaluaciones para medir los resultados de las intervenciones, especialmente con relación a los avances logrados en materia de conocimientos, actitudes y prácticas. • Debido a que los niños musulmanes de familias de baja condición socioeconómica de África oriental tenían acceso limitado a la educación en la primera infancia, ya que buena parte de la educación de los niños de corta edad era impartida por educadores cristianos, en 1986 se inauguró en Kenya el Programa de desarrollo en la primera infancia de las madrasas, que contó con el apoyo de la fundación Aga Khan. Gracias a ese programa, los niños musulmanes de las comunidades marginadas han estado recibiendo a un costo asequible educación de buena calidad que tiene • Durante 2009, el Programa de Educación de la Oficina carácter sostenible y que es culturalmente adecuada. Tras el de UNICEF en Filipinas continuó prestando apoyo a un éxito logrado en Kenya, el programa se comenzó a ejecutar programa experimental de educación en la primera infancia también en Uganda y Zanzíbar. Diversas evaluaciones han de contenido islámico que se ejecuta en 17 guarderías demostrado que los niños que participan en el mismo tienen que funcionan en zonas afectadas por el conflicto. Varios un desempeño igual o mejor que los que estudian mediante programas que se ejecutarán en el futuro a nivel subnacional otros programas más antiguos y estructurados. El Programa ayudarán a crear modelos de educación de buena calidad de desarrollo en la primera infancia de las madrasas ha sido para los niños de corta edad, en especial para los que se tan exitoso que en el mismo se matriculan ahora niños que no encuentran en situación de mayor desventaja. Entre los son musulmanes55. objetivos de esos programas figura la intención de convencer • En Angola, UNICEF estableció una alianza con organismos a los responsables de las políticas de educación nacional de y organizaciones religiosas y gubernamentales con el que amplíen la iniciativa a otras regiones del país. Otra meta objetivo de incrementar los conocimientos y alentar los de los organizadores consiste en abogar por la aplicación de comportamientos positivos de las familias con respecto a programas de educación en la primera infancia de orientación la supervivencia, el desarrollo y la protección de los niños islámica fuera de las regiones afectadas por el conflicto. Acción humanitaria Las situaciones de emergencia, como los conflictos armados y los desastres naturales, exacerban en gran medida los desafíos a los derechos de los niños y obstaculizan de manera significativa su vigencia. Durante las situaciones de emergencia, los niños son especialmente vulnerables a las enfermedades, la desnutrición, la violencia y la separación de su familia u otras personas que les tengan a su cargo. También puede 40 “Si un hermano o una hermana en interrumpirse su educación debido al desplazamiento o a la pérdida de la infraestructura de enseñanza. En esas circunstancias, aumenta el la fe necesita alimentos o ropa, peligro de la violencia sexual o por razones de género, lo que expone y le decimos: Mira, vete en paz. a los niños, niñas y mujeres a situaciones de riesgo especial de lesiones Come bien y entra en calor, pero físicas y emocionales. no le proveemos de ropa ni de comida, ¿qué provecho sacará de Los Compromisos básicos para la infancia en la acción humanitaria nuestras palabras? Esa fe que no son las principales directrices políticas del trabajo de UNICEF en produce obras buenas no tiene situaciones de crisis, ya se traten de naturaleza súbita o de desarrollo ningún valor. Es una fe inútil, que gradual, de desastres naturales o de situaciones de conflicto. Según está totalmente muerta”. los Compromisos básicos para la infancia en la acción humanitaria, ésta comprende la preparación y la respuesta,y un componente importante — Santiago 2: 15–17 de ésta es la recuperación temprana. En las situaciones de emergencia, UNICEF colabora con sus aliados locales e internacionales para garantizar la prestación integral y eficaz de ayuda humanitaria que posibilite la implementación de la vasta gama de programas necesarios para dar respuesta adecuada a todas las necesidades en materia de derechos de los niños. Las alianzas constituyen una base fundamental del éxito de la acción humanitaria. Sin embargo, en determinados contextos, y en especial los que están signados por los conflictos armados, las violaciones de los derechos humanos y los disturbios políticos, las alianzas confrontan desafíos específicos que deberían ser tomados en cuenta. Lo que resulta más importante aún, cuando se presta ayuda humanitaria en situaciones de conflicto, todas las actividades de todos los participantes deben ajustarse a los principios humanitarios de neutralidad, imparcialidad y humanidad56. Eso es algo que debería tenerse en cuenta al establecer alianzas con las comunidades religiosas, además de llevarse a cabo un análisis de los riesgos de toda posible alianza referida a un contexto específico. ¿Por qué aliarse con las comunidades religiosas en las situaciones de emergencia? En las situaciones de emergencia, las funciones que desempeñan las comunidades religiosas pueden resultar específicamente ventajosas en lo que concierne a la prestación de apoyo inmediato y sostenible a la población afectada. • El amplio radio de acción de las comunidades religiosas suele significar que cuentan con estructuras y sistemas en funcionamiento en muchas zonas que resultan inaccesibles a las organizaciones humanitarias. Esto también les da a las comunidades religiosas capacidad de movilizar los recursos comunitarios. • En su mayoría, las comunidades religiosas son organizaciones prestadoras de servicios basadas en las comunidades que ofrecen atención y apoyo a las personas vulnerables, como la colocación en hogares de guarda y otras formas de cuidado de los niños que carecen de atención familiar, además de apoyo de emergencia, como la nutrición y el albergue. • Además de contar con presencia física en sus comunidades, los dirigentes religiosos disfrutan de la confianza de las mismas, de manera que tienen facilidades para brindar apoyo espiritual y estabilidad durante las circunstancias difíciles. También es importante tener en cuenta las creencias y prácticas tanto religiosas como culturales de las comunidades cuando se planifican las actividades de respuesta de emergencia. Cuando se trata de establecer cuáles son las necesidades de una comunidad en materia de alimentos y albergues, o a la hora de diseñar refugios o instalaciones de agua, saneamiento e higiene, se deberían tomar en consideración, en la medida de lo posible, los códigos de conducta religiosa de la población local a fin de poder emplearlos de manera eficaz. Pese a que las diferencias religiosas se usan para justificar y fomentar algunos conflictos, eso no debería ser razón para evitar la colaboración con los dirigentes religiosos. Resulta esencial contar con suficiente sensibilidad, así como mejores conocimientos, tanto acerca de las dimensiones socioeconómicas y políticas de un conflicto como de las religiosas. En esas situaciones, los mecanismos o asociaciones interreligiosas pueden ser muy Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 41 Garantizar que las donaciones caritativas sean adecuadas Inmediatamente después del terremoto y el tsunami de Aceh, comenzaron a llegar a esa región de Indonesia donaciones de prendas de vestir provenientes de todo el mundo. Muchas de esas prendas no sólo no eran adecuadas para el clima tropical de la región sino que no eran aceptables para la cultura conservadora musulmana, de manera que resultaron inservibles. dejaron de funcionar las tiendas, la ausencia de pañuelos de cabeza fue motivo de enorme preocupación. También fue causa de inquietud la carencia de los ingredientes básicos necesarios para preparar los dulces tradicionales de una inminente festividad musulmana. Las mujeres de Aceh comentaban que querían recuperar la normalidad y celebrar la fiesta como siempre lo habían hecho. Casi ninguna organización externa tuvo en cuenta que las mujeres afectadas necesitaban pañuelos de cabeza o vestimentas más recatadas. Para esas mujeres, cuyos hogares habían quedado destruidos, y en especial las de las comunidades rurales donde también desaparecieron o Esos artículos elementales, además de las alfombras de rezos, que también fueron pasadas por alto inicialmente por las organizaciones no musulmanas extranjeras, habrían constituido una contribución inmediata al bienestar y la capacidad de recuperación de los damnificados. eficaces con respecto a la generación de espacios para la ayuda humanitaria, ya que la confianza de la que disfrutan los dirigentes religiosos y espirituales puede capacitarles para desempeñar importantes funciones en las labores de mediación y reconciliación. También es importante comprender que en las situaciones en las que los conflictos se relacionan directa o indirectamente con la religión, las organizaciones o personas dedicadas a la protección de los niños pueden desempeñar un importante papel como facilitadoras de la coordinación interreligiosa al actuar como convocantes imparciales con respecto a las cuestiones e iniciativas centradas en la niñez. Para obtener información sobre otros ejemplos de la colaboración de las comunidades religiosas con UNICEF y otras organizaciones humanitarias en situaciones de emergencia, sírvase consultar ejemplos de programas específicos. Igualdad de género La discriminación por razones de sexo o género niega a los niños y niñas la oportunidad de desarrollarse y disfrutar de sus derechos básicos, además de privar al mundo de los muchos y comprobados beneficios que nos pueden brindar a todos la igualdad de género. Aunque “El objetivo de la labor que UNICEF lleva la discriminación por razones de género puede afectar de a cabo con sus asociados en busca de diversas maneras a los niños y hombres, en la mayor parte del mundo sus consecuencias recaen de manera desproporcionada la igualdad entre los géneros y de la sobre las niñas y mujeres, a las que les impide el acceso a igualdad de derechos para las niñas y la educación, la atención de la salud, la participación en el los niños es ayudar a reducir la pobreza gobierno y en la toma de decisiones, así como a la protección y a conquistar los ODM, por medio ante la violencia y el abuso. Los efectos de la discriminación no de acciones efectivas, coordinadas y se limitan a los individuos sino que se propagan a sus familias, basadas en resultados, que fomenten sus comunidades y las sociedades en que viven, ya que la protección, la supervivencia y el impiden que las personas afectadas logren un desarrollo pleno desarrollo de las niñas y los niños en en la vida. Si no es posible obtener avances en pro de las niñas igualdad de condiciones57”. similares a los de los niños, será imposible lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio. UNICEF integra el componente de la igualdad de género en todos los aspectos de sus programas, así como en los compromisos que establece con sus aliados en todos los niveles. Fomentar el avance en un plano de igualdad de los niños y las niñas es uno de los objetivos de todas las alianzas, algunas de las cuales están orientadas exclusivamente a lograr esa meta. Cuando sus aliados no tienen un compromiso suficientemente firme con la igualdad de género, UNICEF apoya los esfuerzos y actividades orientados a profundizar ese compromiso y a aumentar la capacidad institucional de que se cristalice en resultados concretos58. 42 Los preceptos religiosos sobre la igualdad y el respeto por las mujeres y niñas La fe Baha’í sostiene el principio de igualdad entre hombres y mujeres en la religión. Bahá’u’lláh, fundador de la religión Baha’í, afirmó que “las mujeres y los hombres siempre han sido y siempre serán iguales ante los ojos de Dios”. Los baha’í creen que todos los seres humanos forman parte de una misma raza, de manera que cualquier agresión contra un individuo afecta el bienestar de toda la familia humana. El Señor Mahavira aportó una visión esclarecida sobre las mujeres al jainismo al afirmar que en el interior de todo individuo, ya se trate de hombre o mujer, brilla la luz universal. En esa religión, las mujeres desempeñan su propia función en la liberación y disfrutan de igualdad espiritual con los hombres. El judaísmo enseña que tanto los hombres como las mujeres son creados a imagen y semejanza de Dios, de manera que ambos deben ser estimados y valorados por igual. Las mujeres valientes, instruidas y piadosas son abundantes en los textos e historias judíos. En los tiempos modernos, las mujeres judías han estado a la vanguardia de la acción política en favor de la igualdad de género y con frecuencia se han Los cristianos creen que los seres humanos fueron creados a basado en fuentes profundas de la tradición judía en busca de imagen y semejanza de Dios, que exige respeto por la dignidad inspiración y apoyo. y los derechos inherentes de las mujeres y las niñas. La fe El gurú Nanak Dev, fundador del sijismo, enseñó que las cristiana se basa en el ejemplo de la vida de Jesucristo, que demostró su aprecio por la inviolable dignidad de las mujeres a mujeres son tan dignas de encomio como los hombres. Ese punto de vista es un elemento importante de esa quienes trató con respeto y encomendó con su misión. religión. Según Sri Guru Granth Sahib, “Ella constituye lo Entre las principales religiones del mundo, el hinduismo más noble de toda la familia. Ella aconseja y orienta a los es la única que adopta lo divino femenino (Shakti), que está mayores y a los jóvenes. Ella es la que gobierna y Dios nos considerado como la fuerza creadora que anima el universo. ha hecho sus cortesanos”. Con una tradición básica basada en la Deidad femenina (Devi), el hinduismo enseña que las mujeres y las niñas son divinas, y El zoroastrismo no establece distinciones entre los hombres y las mujeres, y sostiene que los unos y las otras fueron que hay que tratarlas con el mayor respeto y afecto. creados por la misma fuerza, y desde el punto de vista En el Islam se otorga gran valor a la igualdad entre los religioso deberían ser considerados iguales. hombres y las mujeres, “y el Corán, y numerosos jadiz en particular, alientan a los musulmanes a tratar a los niños –tanto Fuente: Adaptado de Religions for Peace, Restoring Dignity, 2009. El pasaje sobre el Islam pertenece a Browning y Bunge, a las niñas como a los varones– con justicia e imparcialidad 60 indiscriminada...”. En un jadiz narrado por Ali Ibn al-Ja`d de Abu 2009 . Varun Soni, Deán de Religious Life, University of Southern California, y Jeff Israel, de la New School University, ofrecieron Huraya se afirma que “el mejor de ustedes ante los ojos de Dios es el mejor en materia de moral, y el mejor de ustedes es información adicional. el que mejor se comporta con sus hijas y esposas”. Las fuentes budistas de la igualdad para las mujeres incluyen antiguas historias de mujeres que lograron la iluminación plena junto a los hombres, y la enseñanza del Buda de que la calidad moral de la mente de uno es fundamental, independientemente del género o la casta. La colaboración con las comunidades religiosas puede ofrecer valiosas oportunidades de confrontar la discriminación y alentar la igualdad de resultados para las niñas y los niños. Apelando a los valores más profundos de dignidad y carácter sagrado de la vida que comparten casi todas las religiones, los aliados religiosos pueden movilizar sus recursos en favor del cambio de manera que las organizaciones de defensa de los derechos de los niños no podrían hacer por sí solas. Es importante tener en cuenta la preocupación que causa que muchas religiones y comunidades religiosas discriminen a las mujeres y les marginen de los templos y otros ámbitos religiosos. “Muchas tradiciones religiosas son de carácter patriarcal y les niegan a las mujeres puestos de liderazgo en sus organizaciones. A menudo, las mujeres están imposibilitadas de acceder a las funciones clericales superiores o a obtener la educación que les permita interpretar con autoridad sus tradiciones religiosas59.”Los dirigentes religiosos casi siempre justifican esos obstáculos, que corresponden a normas sociales y creencias culturales que suelen ser anteriores a las tradiciones religiosas, basándose tanto en los textos escritos como en las prácticas tradicionales. El diálogo con los dirigentes y educadores religiosos puede resultar muy útil para desenredar y aclarar esos conceptos complicados, que se caracterizan por sus sutilezas. También es importante tener en cuenta la manera en que las mujeres de las diversas comunidades religiosas hacen valer sus derechos o manifiestan sus puntos de vista, lo que pueden hacer por medio de sistemas paralelos a los de los hombres o por canales establecidos por sus tradiciones religiosas como medios de expresión de las mujeres. Por ejemplo, pueden tener atributos nominales de conducción en algunas instancias y funciones importantes en otras61. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 43 Entre las consideraciones que se deben tener en cuenta al fomentar la igualdad de género en las comunidades religiosas figuran las siguientes: • ¿De qué manera comprenden y se refieren a la discriminación por razones de género los diversos sectores de integrantes de una comunidad religiosa, como las mujeres, los hombres, los jóvenes, los niños, los dirigentes, los laicos, etc.? ¿Se trata de un tema que realmente se discute en ese ámbito? • ¿Cuales son los valores, principios, preceptos y enseñanzas de la comunidad religiosa con respecto a las funciones y expectativas que se asignan a las personas en razón de su género, y las relaciones entre los géneros? • ¿Se basan las normas sociales predominantes en la cultura y las tradiciones o en determinadas interpretaciones de la religión? • ¿Cómo se manifiestan esos valores en el funcionamiento cotidiano de la comunidad religiosa? ¿Es evidente la igualdad de género en las estructuras y los sistemas de la comunidad; por ejemplo, en el grado de acceso de hombres y mujeres a los puestos de liderazgo y a los servicios que se prestan? • ¿Cuenta la comunidad religiosa con códigos o procesos administrativos para garantizar la igualdad de género en su funcionamiento y en los servicios que presta a sus integrantes? • ¿Cuáles son los puntos de entrada estratégicos para plantear la cuestión de la igualdad de género y garantizar que tenga un papel destacado en las labores de la alianza? • ¿Existen en la comunidad religiosa grupos o individuos que pongan en marcha políticas y prácticas que tengan carácter incluyente en materia de género? • ¿Implementa la comunidad religiosa programas que sean ejemplos de la igualdad de género en acción, o que podrían llegar a serlo si contaran con apoyo? Por ejemplo, que contengan componentes de capacitación y asesoramiento sobre la diversidad, o programas que demuestren resultados iguales para niños y niñas en las esferas de la educación, el VIH o el desarrollo en la primera infancia. • En muchas religiones, el número de hombres que ocupan cargos jerárquicos es desproporcionadamente elevado. ¿Qué estrategias podrían elaborarse para hacer frente a esa situación y cómo se las podría integrar en el proceso de fomento de la igualdad de género? (Consúltese en las págs. 31, 57 y 58 para obtener información sobre la participación de las mujeres de las redes religiosas, y las págs. 21 y 47 para conocer ejemplos de colaboración con comunidades religiosas en la lucha contra la mutilación/escisión genital femenina). Participación de los niños62 La participación de los niños puede tener una importancia fundamental en lo que concierne al aumento de su protección contra la violencia. Mediante su participación, los niños y niñas pueden crear mayor conciencia acerca de las violaciones que sufren sus derechos así como realizar aportaciones positivas a la prevención de la violencia y el abuso. “La fe de los niños crece a medida que los La participación ofrece oportunidades de aumentar la capacidad de los niños y adolescentes de protegerse ellos mismos, de niños van creciendo. Los adultos que sirven hacer frente a la discriminación y de lograr acceso a medios que de ejemplo de esa fe y les brindan a los les permita mejorar sus vidas y las de otros niños. Mediante la niños oportunidades de participar de manera participación, los niños adquieren mayor capacidad de recuperación positiva en sus comunidades religiosas y pueden ayudar a otros niños y niñas en ese proceso. Además, ejercen una importante influencia con es importante tener en cuenta los puntos de vista y las opiniones respecto a la futura participación del niño en de los niños y adolescentes para garantizar que las políticas, las prácticas religiosas, en la educación, en programas y servicios pertinentes se adecuen a sus necesidades. las funciones de custodios y en el servicio al prójimo. Si deseamos cultivar y nutrir a la Las comunidades religiosas están integradas por creyentes que pertenecen a diversas generaciones y están especialmente Iglesia del futuro, los principales participantes capacitadas para alentar la participación de los niños, ya que pueden deben ser los niños”. — Consejo Nacional de crear oportunidades para que éstos expresen sus pensamientos, Iglesias de los Estados Unidos63 44 ideas y soluciones con respecto al fomento y la protección de sus derechos. La participación de los niños no sólo posibilita el desarrollo saludable de éstos sino que beneficia a la comunidad religiosa en su totalidad. Cuando se fomenta una cultura de colaboración en los ámbitos donde los adultos han ocupado generalmente puestos de poder con respecto a los niños, se puede generar un espacio en el que los puntos de vista y las experiencias de éstos sirvan en gran medida para encontrar soluciones a los problemas que les afectan. Esto tiene implicaciones especiales para los niños y niñas de muy corta edad y para los que tradicionalmente han sufrido marginación o exclusión de los procesos de toma de decisiones, como las niñas, los niños con discapacidad y los que pertenecen a sectores minoritarios de la población. Para ellos, la oportunidad de compartir sus opiniones de manera significativa con personas respetadas en sus comunidades religiosas puede ser una experiencia muy constructiva. Entre las consideraciones que se deben tener en cuenta cuando se colabora con las comunidades religiosas en pro de la participación significativa de los niños pueden figurar las siguientes: • ¿Cuáles son las maneras en que los niños participan en sus comunidades religiosas? • ¿Desempeñan papeles definidos en los servicios, rituales y festividades religiosas? • ¿Participan los niños y jóvenes en la educación religiosa de los niños de menor edad? • ¿Qué obstáculos se interponen ante la participación de los niños en sus comunidades religiosas? • ¿Cuál es el motivo de esos obstáculos? Por ejemplo, las enseñanzas religiosas, las estructuras y sistemas administrativos, las opiniones personales de los dirigentes adultos. • ¿Qué preparación y apoyo se requieren para que los niños participen de manera significativa? • ¿Con qué capacitación y apoyo cuentan los adultos que les ayuden a facilitar la participación significativa de los niños en sus comunidades religiosas? A continuación, algunas sugerencias acerca de las medidas que se pueden tomar en colaboración con las comunidades religiosas para aumentar el grado de participación significativa de los niños: • Suministrar a los adultos en las comunidades religiosas información, apoyo y capacitación que posibilite su colaboración con los niños y jóvenes de manera tal que se respete la edad, el grado de desarrollo, la seguridad y el bienestar de los niños. • Dar apoyo a las iniciativas orientadas a capacitar a los niños para que estén adecuadamente informados acerca del contenido de la Convención sobre los Derechos del Niño y aumentar el nivel de conciencia y los conocimientos de los adultos con respecto a ese tratado. Para lograrlo, se deberían llevar a cabo debates sobre la manera en que los valores religiosos influyen en la forma en que se entienden los derechos de los niños consagrados en la Convención. • Brindar a los niños las condiciones necesarias para que elaboren ideas propias y lleven a cabo actividades relacionadas con los temas de importancia para ellos. La participación de los jóvenes en pro del fomento de la cooperación religiosa en las situaciones de conflicto En la región de Molukus, en Indonesia, donde los conflictos religiosos han fracturado a las comunidades y han generado intolerancia y desconfianza, una coalición de ONG musulmanas y cristianas se aliaron con UNICEF en 2002 para establecer un Parlamento de los Niños, a fin de que se pudieran escuchar sus opiniones y crear oportunidades para la interacción de los menores de diferentes religiones. No sólo se trató del primer Parlamento de los Niños realizado en Indonesia, sino que fue la primera actividad de importancia que logró derribar las barreras religiosas. La iniciativa dio lugar a la realización de cursillos prácticos sobre los derechos de los niños en diferentes regiones del país afectadas por el conflicto y de actividades de consolidación de la paz que contribuyeron a la implementación de una iniciativa de pacificación en Molukus. Como parte de esa iniciativa se integró en el sistema de educación provincial un programa de estudios sobre la paz. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Monografías sobre experiencias en la elaboración de programas para los adolescentes durante los conflictos y las situaciones posbélicas, 2004 64. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 45 4 46 EVITAR EL USO INDEBIDO DE LA RELIGIÓN Un líder religioso musulmán se dirige a un grupo de mujeres para hablarles sobre los peligros de la mutilación/ablación genital femenina (Egipto). “Debemos reconocer que nuestras comunidades religiosas no han cumplido plenamente con sus obligaciones de proteger a nuestros niños contra la violencia. Por omisión, renuencia y silencio, a veces hemos tolerado, perpetuado e ignorado la realidad de la violencia infantil en hogares, familias, instituciones y comunidades, y no hemos confrontado activamente el sufrimiento que causa esa violencia. Pese a no haber vivido plenamente a la altura de nuestras responsabilidades en este aspecto, creemos que las comunidades religiosas deben ser parte de la solución para erradicar la violencia infantil, y nos comprometemos a asumir el liderazgo en nuestras comunidades religiosas y en la sociedad en general”. — Un compromiso multirreligioso para enfrentar la violencia infantil 65 Pese a que las principales tradiciones religiosas del mundo otorgan valor fundamental a la dignidad y el bienestar de los niños, algunas creencias, actitudes y prácticas vinculadas a determinadas religiones alientan o toleran la violencia y la discriminación contra los niños. Tanto cuando se trata de preceptos reales de esas religiones o del empleo indebido de la religión para justificar creencias y prácticas dañinas, las mismas pueden violar la integridad física y emocional de los niños. Algunas prácticas, como la mutilación/ablación genital femenina y el matrimonio precoz, se llevan a cabo en algunas ocasiones en nombre de la religión, aunque generalmente se fundamentan en tradiciones culturales más antiguas. En esas circunstancias, la colaboración con los principales agentes religiosos puede ser sumamente importante para combatir y eliminar las tradiciones violentas y abusivas mediante la aclaración de que no se ajustan a los principios religiosos. También puede ocurrir que se considere que esas prácticas y otras, como la creación de orfanatos en lugar de otras formas sustitutivas de cuidado de los niños basadas en la comunidad, son beneficiosas para los niños desde el punto de vista de la comunidad, y que se basan en los valores religiosos de ésta. Las investigaciones demuestran que cuando se responde a muchas prácticas perjudiciales, y especialmente aquellas que están enraizadas en sistemas de creencias culturales, el empleo de enfoques antagónicos o que causen vergüenza a los contrarios suelen ser inútiles y, a veces, contraproducentes. Si se establece primero que lo que se comparte es el interés superior del niño, es posible confrontar y explorar las implicaciones de las actitudes y prácticas en cuestión con el objetivo de lograr la vigencia de los derechos de los niños. La diferencia entre las prácticas culturales tradicionales y las obligaciones religiosas La mutilación/ablación genital femenina se practica ampliamente en Egipto por razones culturales y religiosas. Durante mucho tiempo, los esfuerzos por eliminar esa práctica se concentraron en la difusión de mensajes sobre el aspecto sanitario de la misma y al apoyo a las normas jurídicas que la penalizan, en general con poco éxito. Lo que no se entendía bien y no se aceptaba era la importancia que otorgaban quienes apoyaban esa práctica al cumplimiento de las obligaciones religiosas y a la convicción de que se trataba de una práctica conveniente para las niñas, ya que les otorgaba estatus social y las convertía en mejores candidatas para el matrimonio. Diversas evaluaciones llevadas a cabo por UNICEF y el Centro de Investigación Innocenti de UNICEF demostraron que se puede lograr el abandono a nivel comunitario de la mutilación/ablación genital femenina de manera rápida y eficaz mediante la combinación de procesos de diálogo en las comunidades, en los que se analice la fusión de esa práctica en un contexto sociocultural y se logre consenso en contra de la misma y la afirmación por parte de los dirigentes espirituales de que la práctica carece de fundamento religioso, lo que constituye una expresión de apoyo al abandono de la misma. Se trata de un ejemplo de la manera en que los valores, las creencias y las normas culturales y religiosas suelen superponerse y entrelazarse de manera sutil. También pone de relieve la importancia de participar en los procesos mediante los cuales se aclaran las distinciones para poder dar respuesta adecuada a los desafíos más difíciles en materia de defensa de los derechos de los niños. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Centro de Investigación Innocenti, 2010 66. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 47 Aún en los casos en que no se maltrate intencionalmente a los niños, en algunas comunidades religiosas pueden existir vacilaciones a la hora de abordar cuestiones especialmente delicadas referidas a los derechos de los niños, como la de la violencia sexual o por razones de género contra los niños y niñas, u otros temas a los que se pueda considerar tabú en el correspondiente contexto sociocultural. Puede tratarse de cuestiones relacionadas con la salud reproductiva de las mujeres; con la higiene durante la menstruación; con la sexualidad, especialmente la homosexualidad; con el uso indebido de drogas; con el trabajo sexual; etc. Pero resulta fundamental tratar esos temas para poder promover el acceso en un plano de igualdad a los servicios sociales y “Si no se logra la participación de salud y educación, como los de respuesta ante el VIH con enfoques de las comunidades y los basados en las pruebas. El silencio y el estigma que se suelen asociar con dirigentes religiosos, no se esos temas tan importantes atentan contra los programas basados en los puede abordar el tema de los derechos humanos y pueden complicar rápidamente las relaciones con las tabús y prejuicios que atentan comunidades religiosas y reducir la confianza en las alianzas. contra la igualdad y los Es importante tener en cuenta que las comunidades religiosas no derechos de las mujeres67”. son homogéneas ni estáticas. Incluso en el seno de las propias denominaciones, la teología, su interpretación y la manera en que se implementa en la práctica dependen de los contextos, y sus dirigentes pueden tener perspectivas diversas que, en muchos casos, servirán como puntos de partida necesarios para el diálogo y el establecimiento de alianzas con respecto a las cuestiones más delicadas. Otras estrategias, como la colaboración entre los agentes religiosos y los integrantes afectados de las comunidades religiosas —como las personas que viven con el VIH, las mujeres y los jóvenes— podrían prevenir posibles desacuerdos o recelos. También es importante tener presente que trabajar con las comunidades religiosas para transformar determinadas prácticas locales puede requerir mucho tiempo. El logro de ese objetivo implica la adopción de un enfoque multidimensional, ya que requiere la colaboración con los dirigentes teológicos a fin de comprender las maneras en que las prácticas religiosas se aplican a las normas locales, la transformación de las enseñanzas de los dirigentes y lograr que padres e hijos comprendan las bases de esa práctica para que puedan tomar “Las iglesias pueden desempeñar decisiones en pro del cambio con conocimiento de causa. Para una función importante con lograr la transformación sostenible de la comunidad a largo plazo es respecto a la creación de necesario que las comunidades religiosas tengan una participación plena y sostenida68. modelos de comunidades que tengan carácter incluyente y Finalmente, se debe tener en cuenta que las personas que profesan libre de estigmas. Pero para determinada religión no siempre son fieles a sus creencias y lograrlo, es necesario que los pueden comportarse de manera contraria a los preceptos de la teólogos y especialistas en misma. Entre los ejemplos de los comportamientos de esa índole cuestiones de ética aborden figuran el abuso físico y sexual de los niños y niñas al cuidado de los temas relacionados con el instituciones religiosas. pecado, las relaciones sexuales En la siguiente sección se recalcan algunas consideraciones a y la sexualidad, que son las tener en cuenta a la hora de decidir cuándo y de qué manera se cuestiones fundamentales del pueden establecer alianzas con las comunidades religiosas, y se carácter moralista y prejuicioso sugieren ideas sobre cómo dar respuesta a algunos de los desafíos que le ha dado a la religión una que puedan suscitarse. También se tratan varios temas que reputación tan negativa con determinarán en qué casos no se debería tratar de entablar alianzas respecto a la respuesta mundial ya que éstas no siempre resultan convenientes para los programas de prevención del VIH69”. de defensa de los derechos de los niños. 48 La iniciativa Faith to Action fomenta las prácticas positivas de cuidado de los niños huérfanos y vulnerables Numerosas iglesias y organizaciones cristianas de los Estados Unidos han respondido a las necesidades de los niños vulnerables que no reciben cuidados adecuados de sus padres mediante el establecimiento de orfanatos, principalmente en África. En 2004, un estudio sobre las respuestas de las organizaciones religiosas ante las necesidades de los niños huérfanos y vulnerables de seis países de África indicó que se estaban creando orfanatos con creciente frecuencia y en muchas ocasiones gracias al apoyo de las comunidades cristianas extranjeras. Pese a las buenas intenciones de esas comunidades, los establecimientos de ese tipo son costosos y sólo pueden atender a un número muy reducido de niños. Además, en los orfanatos se separa a los niños de sus familias y comunidades y por lo general no se pueden satisfacer las necesidades de los niños en materia de desarrollo. Además, pueden ser causa de un mayor debilitamiento de las familias, ya que cuando hay orfanatos disponibles un número mayor de niños son entregados a los mismos para que allí reciban servicios que sus familias no pueden costear, como los de alimentación y educación. En respuesta a ese desafío se puso en marcha la iniciativa Faith to Action. La iniciativa reúne a dirigentes cristianos estadounidenses y expertos en atención y cuidado de los niños, junto a otras partes interesadas de todo el mundo, para integrar las normas internacionales de protección de la infancia y unas mejores prácticas con la exigencia basada en la fe de servir las necesidades de los niños huérfanos y vulnerables. Como parte de esta iniciativa, por ejemplo, un estudio multinacional sobre las prácticas más prometedoras de las iglesias cristianas de los Estados Unidos destacó alternativas eficaces a la construcción de orfanatos, así como los recursos sobre prácticas adecuadas para quienes inician labores en beneficio de los huérfanos, normas y principios para la atención de los niños albergados en instituciones, así como directrices para el establecimiento de relaciones con las comunidades e iglesias africanas. Fuente: The Better Care Network, sin fecha70. Promover la protección y el bienestar de los niños entre los líderes religiosos, los medios de comunicación y el gobierno En el Senegal, como parte de una campaña nacional de promoción y comunicación contra el maltrato infantil dirigida por el Ministerio de la Familia y la Infancia, con el apoyo de UNICEF, prominentes líderes y redes religiosos islámicos llevaron a cabo un estudio que puso de relieve la importancia que se da en el Corán y otros textos islámicos a la protección y el bienestar de los niños. Durante el mes del Ramadán, los canales religiosos en la televisión y la radio a nivel nacional debatieron el tema para crear conciencia sobre las consecuencias negativas de la mendicidad infantil, la explotación y los castigos corporales, y para poner de relieve el hincapié del Corán en la crianza positiva, la disciplina positiva, la educación y la protección de la infancia. Estas emisiones incluyen un programa de llamadas para involucrar al público en el debate. Fuente: Oficina en Senegal del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, 201171. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 49 5 MARCO PARA LA PARTICIPACIÓN 50 Unos niños afectados por el terremoto de una escuela cristiana evangélica, que estudian en un aula levantada en una tienda de campaña, ubican su país en un globo terráqueo inflable suministrado por UNICEF junto a otros materiales de enseñanza y aprendizaje (Haití). “El valor de una alianza reside en su capacidad de combinar las aportaciones y puntos fuertes complementarios de dos o más partes a fin de crear sinergia y lograr efectos más profundos que los que pueden obtener las partes por separado, contribuyendo de esa manera a la obtención de mejores resultados para los niños y para la promoción de sus derechos72”. Como puede verse en los ejemplos de la Sección 3, existe una larga historia de alianzas con las comunidades religiosas en todo el mundo y en todas las esferas de programación, incluso en las labores de promoción y la prestación de servicios directos. Las alianzas con las comunidades religiosas, al igual que las que se establecen con otros participantes de la sociedad civil, deberían concentrarse en la obtención de resultados positivos para los niños y sus familias. Las alianzas deben suministrar un valor agregado claramente definido a los esfuerzos que se realicen por lograr resultados concretos y deben ajustarse a los principios de equidad, obligación de rendir cuentas y transparencia en todos los ámbitos y niveles73. Teniendo en cuenta la enorme diversidad de las comunidades religiosas, los procesos mediante los cuales se logrará la participación eficaz de cada una dependerán de las características de cada comunidad, del nivel de organización en el que se debe llevar a cabo la colaboración y en el tipo de programa que se implemente (promoción, prestación de servicios directos, coordinación, etc.), así como de otros factores sociales, culturales y políticos. La decisión de aliarse o no con una organización religiosa debería supeditarse al resultado que se trate de obtener y al valor agregado que represente la colaboración con esa organización con respecto al logro de ese resultado. Es importante tener en cuenta las razones por las que a las comunidades religiosas les puede interesar aliarse con organizaciones de defensa de los derechos de los niños. En esta sección se presentará un bosquejo de los siguientes elementos básicos de un marco de referencia para la colaboración eficaz con las comunidades religiosas: • • • • • • • Comprender los valores y las estructuras, y a los dirigentes religiosos. Concentrarse en los valores compartidos y en la aplicación de un enfoque basado en los derechos. Garantizar la imparcialidad. Establecer cuáles son los puntos de entrada estratégicos. Integrar las alianzas en el trabajo programático. Aprovechar la capacidad técnica y el poder de convocatoria. Garantizar la capacidad adecuada. Comprender los valores y las estructuras y la capacidad de liderazgo Las comunidades religiosas difieren enormemente en cuanto a su tamaño, su localización geográfica, sus estructuras y sus capacidades operativas y técnicas. Aún dentro de una misma organización religiosa existen diferencias sobre los aspectos teológicos en los que se hace hincapié, las inclinaciones políticas y las influencias culturales. Las características de los diversos dirigentes también pueden determinar variaciones en sus comunidades. Algunas comunidades religiosas son poco formales, tienen carácter predominantemente voluntario y están impulsadas por la pasión que genera la fe de sus creyentes. Se trata de organizaciones que carecen de los sistemas administrativos y de gestión con que normalmente se espera que cuenten los aliados. Al mismo tiempo, es importante recordar que la complejidad que caracteriza a las organizaciones defensoras de los derechos de los niños, entre ellas UNICEF, representará un desafío similar para los potenciales aliados Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 51 Los beneficios de la colaboración Mediante la colaboración es posible Por los siguientes medios Ampliar la cobertura de las intervenciones • Acrecentado la cantidad de recursos disponibles (humanos, financieros, materiales). • Coordinando la implementación, a fin de garantizar la cobertura de los sectores excluidos o subatendidos de la población. Aumentar el grado de eficacia con relación a los costos • Captando las economías de escala y aprovechando el poder de adquisición colectivo. • Aumentando el rendimiento específico por medio de una infraestructura de distribución o prestación de “costo fijo”. Ampliar las labores de promoción y comunicación • Sumando números crecientes de participantes para poder ejercer más influencia en las decisiones políticas. • Reforzando las campañas de mensajes públicos a varios niveles (local, nacional, internacional) y de varias fuentes (religiosas, seculares). Catalizar el aprendizaje • Dando carácter sistemático a la obtención de datos e información. • Facilitando el intercambio de conocimientos y de las lecciones obtenidas acerca de las prácticas más adecuadas. Generar confianza y tolerancia • Sentando las bases necesarias para establecer relaciones y generar respeto mutuo. Facilitar la participación intersectorial • Estableciendo plataformas “políticamente neutras” para que las entidades seculares entablen relaciones de cooperación con el sector religioso (en lugar de aliarse con comunidades religiosas específicas). • Reduciendo el costo de las transacciones que pagan los donantes, los gobiernos y las ONG seculares mediante la consolidación de los puntos de contacto. Fuente: Extractado de Interfaith Action on Global Poverty, 2010 74. en las comunidades religiosas. Por lo tanto, ambas partes deben realizar todos los esfuerzos necesarios para aclarar a sus contrapartes cómo funcionan las estructuras de sus organizaciones, así como los sistemas conexos, para poder establecer los enlaces que se adecuen mejor para desarrollar una colaboración eficaz. Es importante que en el marco de cualquier evaluación se garantice la inclusión de información sobre la presencia, estructura, influencia y relaciones con los organismos que gobiernan las comunidades religiosas, especialmente las de los agentes religiosos, los dirigentes juveniles y de agrupaciones de mujeres y las estructuras en el ámbito comunitario, que tienden a ser pasadas por alto cuando se llevan a cabo valoraciones o análisis de las partes interesadas, con la consiguiente pérdida de oportunidades de implementar intervenciones altamente orgánicas y sostenibles. Esto es particularmente frecuente cuando se trata de religiones tradicionales o indígenas. Las organizaciones de defensa de los derechos de los niños deberían conocer los conceptos y principios básicos y las enseñanzas fundamentales de las tradiciones religiosas con las que colaboran. Esa información no sólo puede obtenerse mediante la lectura sino, lo que resulta igualmente importante, solicitándosela a los integrantes de las comunidades religiosas. También hay creyentes que trabajan en UNICEF y otras organizaciones de defensa de los derechos de los niños que pueden ayudar a sus colegas a comprender mejor las tradiciones religiosas y a colaborar más estrechamente con las comunidades religiosas. En algunos países hay organismos gubernamentales que cuentan con información sobre las comunidades religiosas a los que se puede consultar. 52 Estructuras y sistemas • ¿Cuáles son las religiones predominantes (y su distribución geográfica, cuando corresponda)? Es importante recordar que entre esas religiones pueden figurar las tradicionales o animistas, que no cuentan con estructuras formales o evidentes a simple vista. • ¿Cuáles son sus estructuras y sistemas básicos de organización (por ejemplo, casas de culto, ceremonias y celebraciones oficiales y no oficiales? ¿Existen organismos de gobierno responsables de las cuestiones religiosas, como ministerios de Culto o de Cultura? • ¿Cuáles son las relaciones entre las diversas comunidades religiosas, o dentro de una comunidad religiosa en particular, que puedan estar caracterizadas por otros factores (técnicos, económicos, políticos) que podrían afectar la colaboración programática? –– ¿Que servicios o iniciativas de promoción llevan a cabo los agentes religiosos en relación con los derechos de los niños? ¿Se ajustan los mismos a las directrices y normas nacionales pertinentes? –– Algunos pueden ser de apoyo a estructuras de la comunidad en general, como la gestión de establecimientos de salud, los servicios de difusión, los programas comunitarios de radio y televisión y la ejecución de programas de educación. –– También pueden existir mecanismos mediante los cuales las comunidades religiosas prestan asistencia a integrantes o sectores especialmente vulnerables de sus comunidades, como el zakat en las comunidades musulmanas o los fondos que obtienen las iglesias de las donaciones o el diezmo. –– Algunas formas de ayuda pueden tener carácter no estructural o prestarse con fines específicos provisionales, como el uso de los templos y otros lugares de culto para actividades comunitarias o de educación o como refugio durante las situaciones de emergencia. • ¿Con qué experiencia o aptitudes técnicas relevantes cuentan los agentes religiosos, como el conocimiento de códigos sistemáticos de prácticas adecuadas o las pautas de comportamiento correcto o ético con los niños? • ¿Con qué recursos financieros cuentan las estructuras religiosas para llevar a cabo las actividades previstas? Si necesitan apoyo financiero adicional, ¿cuentan con la capacidad organizativa necesaria para administrar eficazmente los insumos financieros y cumplir con los correspondientes requisitos de presentación de informes? • ¿Qué grado de participación e influencia tienen las comunidades religiosas con respecto a las estructuras políticas y sociales locales, regionales o nacionales, especialmente en lo que concierne a la satisfacción de las necesidades de los niños, niñas y familias más marginados? ¿Depende esa influencia de las estructuras ya establecidas de las comunidades religiosas o del carisma o la influencia de uno o más de sus dirigentes? Liderazgo Para iniciar una alianza exitosa, es imprescindible comprender las estructuras de liderazgo y gestión, así como establecer quiénes son los coordinadores que cuentan con autoridad para establecer alianzas y poner en marcha la colaboración. Cuando se trata de una comunidad religiosa nueva o no muy conocida, ese puede ser un proceso especialmente difícil. Es importante, por lo tanto, obtener cierta información, como: • De qué manera define el liderazgo la comunidad religiosa? • ¿Cuenta la comunidad religiosa con un sistema centralizado, estructurado o jerárquico de dirigentes, o se trata de una estructura descentralizada cuyos líderes conviven más de cerca con sus comunidades? • ¿Hay en los diversos niveles de la estructura religiosa, y especialmente en el nivel de base, personas que pueden no contar con estatus formal de liderazgo pero a quienes, de cualquier manera, se considera líderes de opinión, como mujeres, ancianos o jóvenes (por ejemplo, un anciano de la comunidad, un maestro de escuela, un individuo que organiza por su cuenta grupos dentro de la comunidad en torno a cualquier tema social)? Estos individuos a menudo educan, reflexionan y Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 53 movilizan a los miembros de la comunidad de una manera que puede resultar importante para la aplicación de un programa determinado75. • ¿Quiénes son las personas responsables de la toma de decisiones acerca de la alianza, así como de su ejecución en la práctica y de la supervisión de los programas (puede no tratarse de las mismas personas)? • Si se trata de un sistema altamente estructurado de toma de decisiones que demande diálogos en diversos niveles, ¿puede movilizarse a los responsables de la toma de decisiones en niveles comparables de las organizaciones de defensa de los derechos del niño para que participen en ese proceso? Eso puede resultar muy importante para demostrar respeto y adhesión a los procedimientos de la comunidad religiosa, lo que profundizará en gran medida los sentimientos de alianza y colaboración. Concentrarse en los valores compartidos y en la aplicación de un enfoque basado en los derechos Si se mantienen los derechos de los niños y las esferas conexas de programación como punto de referencia de las alianzas es posible contribuir a evitar tensiones y dificultades inesperadas que podrían surgir del conflicto entre objetivos incompatibles o programas encontrados. La Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 establece que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”, concepto que se refleja también en el principio de no discriminación que establece el Artículo 2 de la Convención sobre los Derechos del Niño76. Las comunidades religiosas aportan a las alianzas estratégicas con organizaciones de defensa de los derechos de los niños muchos valores sociales, espirituales y materiales que pueden enriquecer las labores de ambas partes en pro de la satisfacción de las necesidades de los niños, niñas y familias más vulnerables. Al evaluar y seleccionar posibles aliados se debería dar prioridad a esas contribuciones que pueden realizar los agentes religiosos a los programas referidos a los derechos de los niños. Al mismo tiempo, algunas agrupaciones religiosas han manifestado inquietud acerca de los objetivos de las organizaciones de defensa de la infancia, ya que en algunos casos consideran que amenazan o compiten con el derecho de los padres a criar a sus hijos como deseen. Un paso inicial importante consiste en determinar de qué manera interpretan los potenciales aliados religiosos los principios fundamentales relacionados con los derechos de los niños, y cómo se relacionan con los mismos. Para lograrlo se pueden dar los siguientes pasos: • Llegar a un acuerdo acerca de los puntos en común entre las partes y, cuando resulte pertinente, establecer si alguna de las actividades que se llevan a cabo puede servir de base o punto de partida de la colaboración. Entre esos puntos de partida pueden figurar los valores compartidos acerca de la dignidad inherente de los niños, el valor de la familia en la vida de los menores y la importancia de prestar ayuda a los más pobres entre los pobres. • De descubrirse motivos de preocupación o diferencias, tratar de establecer cuáles son las causas. ¿Se deben a diferencias de comprensión del lenguaje que se emplea para explicar las creencias religiosas o los derechos humanos? ¿Se deben a convicciones fundamentales y profundas que son incompatibles con los principios sobre los derechos de los niños? ¿Se fundamentan esas creencias en enseñanzas religiosas básicas o derivan de otros factores culturales? ¿Se deben a la carencia de información o de recursos (humanos, financieros)? Los principios humanitarios y los instrumentos de derechos humanos deben seguir siendo los marcos de acción y establecer las pautas que definan qué constituye una alianza aceptable. Sin embargo, si no se presta atención a la manera en que se expresan los valores y creencias socioculturales y religiosas profundamente enraizados en las comunidades aliadas, y si el lenguaje que se emplea para referirse a los derechos de los niños no se adecua a esos valores y creencias, puede aflorar en las comunidades religiosas una sensación de alienación y de imposición de ideas extrañas, a pesar de que el enfoque de los derechos humanos se base intrínsecamente en esos profundos valores. Por lo tanto, el lenguaje y enfoque que se apliquen serán componentes fundamentales del proceso de establecimiento y profundización de las alianzas significativas. 54 Cuando se trata de comprender los sistemas de valores religiosos, resulta importante tener en cuenta que la religión es uno de los componentes de un proceso de interacción dinámica entre los factores sociales y otros factores culturales. Las actitudes y los comportamientos a los que se atribuye una índole religiosa a menudo se deben a otras normas sociales y culturales. Esa diferencia, que a veces suele ser muy sutil, puede tener una importancia notable cuando se tratan cuestiones relacionadas con los derechos de los niños a las que se vincula con valores religiosos y que en realidad pudieran deberse a valores culturales que los agentes religiosos pueden ayudar a modificar. Sin duda, existirán esferas de trabajo en las que no se logrará acuerdo acerca de enfoques específicos. Un ejemplo, que se mencionó anteriormente, es el de la distribución de condones como medida de prevención de la transmisión del VIH, que puede no contar con el apoyo de algunas comunidades religiosas. Pero se puede estar en desacuerdo con respecto a un tema como ése y colaborar, de cualquier manera, en esferas de interés común. Por ejemplo, alentando y fomentando las pruebas del VIH, abordando la discriminación de los niños afectados por ese virus, brindando atención y prestando apoyo a los huérfanos y otros niños vulnerables. La decisión de aceptar ese tipo de disensión debería tomarse con una actitud de respeto mutuo y se debería evitar toda acción que denigre al otro78. Además, es necesario dejar la puerta entreabierta para un posible diálogo aún en los casos donde no se haya establecido una alianza activa. Sin embargo, cuando las diferencias se refieren a cuestiones fundamentales del mandato o los valores de uno o más aliados no se debe, y a veces no se puede, entablar alianzas. Desde el punto de vista de los derechos de los niños, ese sería el caso de cualquier práctica o enfoque que contravenga los derechos humanos fundamentales y los derechos de la infancia. Por ejemplo, no sería aceptable colaborar con una organización religiosa que tratara de convertir a las personas que reciben ayuda o que supeditara la prestación de asistencia a las opiniones o prácticas religiosas de quienes las reciben. Esto no es lo mismo que la colaboración entre las organizaciones defensoras de los derechos de los niños y los agentes religiosos con el objetivo de fomentar y promover las cuestiones relacionadas con los derechos de los niños en sus comunidades religiosas. Por ejemplo, el suministro de información y la prestación de apoyo a dirigentes religiosos a fin de que puedan elaborar mensajes a sus comunidades sobre la importancia de cuidar y atender a los niños a la luz de sus textos sagrados. “Por haber ocupado el cargo de Comisionado de la Comisión de Derechos Humanos del Reino Unido siempre he sostenido que ‘el enfoque basado en los derechos humanos’ es el pariente más joven del enfoque religioso inspirado en la dignidad humana. Me parece que la premisa de la dignidad humana es un campo de juego filosófico bien nivelado que pueden compartir en un plano de igualdad los activistas religiosos y de la causa de los derechos de los niños”. — Reverendo Joel Edwards, Director de Micah Challenge International 77 Garantizar la imparcialidad Teniendo en cuenta que en muchos contextos la religión es o puede ser una cuestión de carácter altamente político, es importante que los esfuerzos que se lleven a cabo para lograr la participación de las comunidades religiosas sean imparciales y no partidistas. Esto reviste una importancia crítica cuando las diferencias religiosas pueden ser usadas para alimentar conflictos o la competición por el poder político. En tales circunstancias, se requiere la mayor trasparencia en la comunicación con las diversas partes involucradas, o dar prioridad a la colaboración con un organismo interreligioso reconocido que haga posible las labores en la esfera de los derechos de los niños sin que éstas estén supeditadas de ninguna manera al logro de otros objetivos. En esos casos, quizá sea necesario llevar a cabo actividades de promoción de alto nivel, además de las negociaciones y discusiones en los ámbitos más cercanos al trabajo práctico. Al hacer hincapié en su neutralidad política y su mandato, las organizaciones de defensa de los derechos de los niños pueden crear espacios para la realización de actividades de fomento de esos derechos y cultivar una base de apoyo más amplia que la que podrían lograr quienes buscan fines partidistas. Ese apoyo suele llegar también a los más altos niveles de las comunidades religiosas, que tenderán a dar mejor acogida a las organizaciones de defensa de los derechos de los niños que demuestren neutralidad política y religiosa. En algunos contextos, puede resultar más conveniente no involucrar a los agentes religiosos en las labores programáticas. Tal es el caso de los lugares donde la religión está tan politizada que cualquier colaboración con una estructura religiosa podría poner en peligro la neutralidad de la organización de defensa de los niños, Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 55 o su imagen de neutralidad. Lo mismo puede ocurrir en ciertos contextos donde las creencias y prácticas de una comunidad religiosa en particular están tan alejadas de los principios sobre los derechos de los niños y el mandato de la organización de defensa de sus derechos que cualquier forma de colaboración entre ambas podría poner en duda la legitimidad y la buena reputación de la última. Evidentemente, tales situaciones deben ser evaluadas detenida y cuidadosamente para garantizar que las oportunidades que ofrece la colaboración superen siempre los posibles riesgos. Obstáculos a la colaboración Factores sociales Factores operacionales Factores estructurales Falta de conocimiento – Carencia de conocimientos acerca de los puntos fuertes y el potencial estratégico del aliado. Normas operacionales diferentes – Por ejemplo, las diferencias de los enfoques sobre la ejecución de los programas, el seguimiento de los resultados y el control de las finanzas. Fragmentación de las partes involucradas^^ – Hace más engorrosa y difícil la coordinación de las tareas con las estructuras organizativas débiles. Preconceptos y estereotipos – Por ejemplo, suposiciones infundadas acerca del nivel de compromiso o la calidad del trabajo del aliado potencial. Prioridades divergentes – Puntos de vista antagónicos (y a veces cambiantes) sobre cuáles son los enfoques que deberían recibir prioridad. Competencia** – Rivalidad entre los participantes con relación a los recursos o al reconocimiento. Sospechas y desconfianza** – Temor acerca de posibles motivos ocultos, como las intenciones de hacer proselitismo o una historia de tensiones entre ambos grupos. Carencia de un lenguaje común* – Diferencias de léxico y terminología técnica de empleo común. Interés en mantener los límites – La preocupación de los agentes religiosos por no ser manipulados o usados, así como la preocupación de los protagonistas seculares sobre el peligro de cruzar los límites de la esferas religiosa y la estatal. Capacidad desigual – Preocupación por las diferencias en materia de aptitudes (conocimientos técnicos, capacidad administrativa, seguimiento y evaluación) o las aptitudes para la administración de fondos.+ Exclusión de los participantes^ – Representación inadecuada o exclusión sistemática de los mecanismos de colaboración de algunos de los participantes. * Marshall, K. y Van Saanen M., “Development and Faith,” Banco Mundial, 2007. + Por ejemplo, algunos críticos del suministro de fondos a organizaciones religiosas por parte del Plan de Emergencia del Presidente de los Estados Unidos de América para luchar contra el SIDA hicieron hincapié en la “limitada capacidad de algunas organizaciones religiosas indígenas para absorber subsidios importantes y emplear los fondos de manera eficaz”. Centro Berkley, “Mapping the Role of Faith Communities in Development Policy: The US Case in International Perspective,” 2007. ^^ Por ejemplo, un estudio sobre las alianzas de lucha contra el VIH/SIDA en Kenya, la República Democrática del Congo y Malawi comprobó que la fragmentación entre las entidades cristianas y los grupos de donantes constituían una barrera para la colaboración eficaz. Haddad B., et al. “The potential and perils of partnerships,” ARHARP, 2008. ^ Karam, A., “Concluding Thoughts on Religion and the United Nations, Redesigning the Culture of Development,” CrossCurrents, septiembre de 2010. ** Haddad B., Olivier J., De Gruchy S. 2008. The potential and perils of partnership: Christian religious entities and collaborative stakeholders responding to HIV and AIDS in Kenya, Malawi and the Democratic Republic of Congo. Estudio encargado por Tearfund y ONUSIDA, Informe provisional de Programa africano de recursos religiosos para la salud (ARHAP). Fuente: Extractado de Center for Interfaith Action on Global Poverty, 201079. Establecer cuáles son los puntos de entrada estratégicos La participación en las cuestiones relacionadas con los niños es, en sí misma, un punto de entrada compartido, ya que se trata de una esfera en la que la mayoría de las comunidades religiosas se sienten cómodas y motivadas desde el punto de vista teológico. Mediante un análisis de los resultados de las evaluaciones se podrán establecer puntos de partida para las relaciones de colaboración con las comunidades religiosas. Esos puntos de contacto iniciales pueden parecer muy modestos y limitarse a una expresión de interés en el diálogo o una invitación a participar en una actividad religiosa dedicada a los niños. Pero es importante reconocer las posibilidades que ofrece todo punto de contacto de establecer relaciones más firmes que, con el correr del tiempo, podrían dar lugar a alianzas más exitosas. Establecer relaciones firmes tiene una importancia fundamental para la mayoría de los agentes religiosos, ya que éstas son imprescindibles para lograr un compromiso eficaz. 56 Pese a que el cultivo de las relaciones reviste importancia fundamental, si la alianza no adquiere eventualmente carácter institucional, pueden surgir complicaciones. Por ejemplo, pueden cambiar las personas que representan a las comunidades religiosas o el personal que integra las organizaciones de defensa de los derechos del niño, especialmente el personal internacional, que con frecuencia deja en manos del personal nacional situaciones que a veces pueden ser muy complejas y presentar retos graves. El punto de entrada de la colaboración puede haber sido establecido por individuos, pero en definitiva, la alianza debe afianzarse en las instituciones para las que trabajan los individuos. Cuando se individualizan agentes religiosos con quienes aliarse resulta fundamental garantizar que cuenten con el respeto de las comunidades en las que se desarrollará el trabajo conjunto. Porque pueden presentarse situaciones en las que un protagonista del sector religioso puede estar dispuesto a participar sin contar para ello con legitimidad suficiente en su comunidad. Los líderes de las comunidades religiosas Los sacerdotes, los obispos, los rabinos, los imanes, los clérigos, los abades, las monjas y los chamanes, así como los dirigentes laicos y los dirigentes de los organismos de coordinación y las asociaciones interreligiosas, pueden resultar valiosos aliados en las labores de promoción de los derechos de los niños al más alto nivel nacional e internacional. Los dirigentes religiosos hablan con autoridades en nombre de sectores importantes de la población y aportan autoridad y legitimidad a las labores de defensa de los derechos de los niños, a las que se puede percibir en algunos casos como cuestiones principalmente seculares, en especial cuando se concentran en las reformas jurídicas o políticas. Es importante establecer cuál es el nivel de liderazgo religioso cuyo compromiso se debe lograr en favor de un programa determinado (a nivel local, de distrito o nacional, por ejemplo), en especial cuando se colabora con comunidades religiosas muy estructuradas. Alianzas para la promoción de los derechos infantiles Sobre la base de una firme cooperación en materia de promoción con organizaciones cristianas y comunitarias de Botswana que se había puesto en marcha en 2008, UNICEF respaldó la aprobación del Acta sobre la Infancia de 2009. Ese apoyo posibilitó el fortalecimiento de las alianzas con diversas organizaciones religiosas y dio lugar a la preparación de 37 publicaciones con 13 comunidades religiosas, entre ellas la baha’i, la musulmana, la adventista del séptimo día y varias denominaciones ecuménicas. Estas publicaciones incluyen libros infantiles para su uso durante la Escuela Dominical (o equivalente), notas para sermones y materiales de capacitación sobre una amplia variedad de temas, incluyendo el registro de nacimientos, el desarrollo infantil, la nutrición y el VIH y el SIDA. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Informe Anual de la Oficina de UNICEF de Botswana, 2009. Redes de mujeres creyentes Las redes de mujeres creyentes de todas las comunidades realizan esfuerzos para prestar cuidados a los niños y niñas vulnerables, así como a los integrantes de sus familias, entre ellos los huérfanos, las personas que viven con VIH y las sobrevivientes de la violencia por razones de género. Para amplios segmentos de la población femenina, las dirigentes de las mujeres creyentes constituyen la voz de la conciencia y las encargadas de dar a conocer sus necesidades en materia de salud reproductiva, sexualidad y otros tópicos a los que los dirigentes religiosos varones pueden considerar temas tabú. Muchas mujeres creyentes que desempeñan sus labores en la periferia de las estructuras religiosas formales “desempeñan funciones importantes en sus lugares de culto y en la vida religiosa de sus familias... ya que dan forma a las tradiciones religiosas de manera menos evidente pero igualmente influyente80”. Las agrupaciones de jóvenes Muchas comunidades religiosas cuentan con agrupaciones de jóvenes que canalizan el enorme caudal de energía de los jóvenes creyentes, que conocen por experiencia propia tanto las necesidades como los puntos fuertes de los niños y niñas y adolescentes y pueden colaborar en materia de defensa de los derechos de los niños con conocimiento de causa y autenticidad. Sin embargo, es importante asegurarse de que esas agrupaciones tengan carácter incluyente y ofrezcan oportunidades de participación a los sectores marginados de la juventud. Los jóvenes no constituyen un grupo homogéneo, de manera que estas agrupaciones deben brindar a todos la oportunidad de participar en un plano de igualdad, sin ningún tipo de discriminación. La colaboración con esos Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 57 La Red mundial de mujeres creyentes de Religiones por la paz La Red mundial de mujeres creyentes hace posible que mujeres de religiones y culturas diversas coordinen estrategias y compartan recursos y capacidad para cooperar en pro de resultados que a sus integrantes les resultaría difícil, sino imposible, obtener sin la colaboración de las demás. La Red consiste en más de 1.000 organizaciones de mujeres budistas, cristianas, hinduistas, judías, musulmanas, sij, zoroastrianas y pertenecientes a religiones indígenas. La Red funciona a nivel mundial y también mediante redes regionales que cubren África, Asia, Europa, América Latina y el Caribe, América del Norte y Oriente Medio. También existen redes nacionales de mujeres creyentes en más de 30 países. La Red les ofrece a las mujeres de todas las religiones una valiosa oportunidad para comunicarse y aprender las unas de las otras, así como para establecer vínculos y alianzas entre las organizaciones religiosas de mujeres, los organismos internacionales más importantes y las Naciones Unidas. Entre los temas prioritarios de las tareas de colaboración figuran el establecimiento, ampliación y fortalecimiento de las redes; la paz y la seguridad, la función de las mujeres creyentes como agentes de transformación de los conflictos; las cuestiones de género; la pobreza, y la salud. Uno de los objetivos principales de la Red mundial de mujeres creyentes consiste en combatir y eliminar la violencia contra las mujeres y las niñas. La Red también tiene como meta la creación de un mundo más seguro y saludable para todos, y para lograrlo cuenta con la ayuda de mujeres y hombres comprometidos con esa causa que provienen de diversas tradiciones religiosas. Fuentes: Religiones por la paz, ‘A Guide for Building Women of Faith Networks’, 2009 8 1. Dos organizaciones religiosas cooperan siguiendo las pautas de la respuesta humanitaria En 2006, mientras en la parte oriental de Sri Lanka se desarrollaban violentos combates, dos organizaciones religiosas –el Comité Metodista Unido de Auxilio y Socorro Musulmán– prestaban apoyo a una gran cantidad de personas desplazadas provenientes de las comunidades musulmanas que buscaban refugio en las zonas predominantemente cingalesas. Entre esos grupos ya existían graves tensiones étnicas y religiosas. En la zona trabajaban muy pocas ONG, de manera que tanto el Comité Metodista Unido de Auxilio como Socorro Musulmán debieron dedicarse rápidamente a prestar servicios de socorro. Inmediatamente se percibió que la cooperación entre ambas organizaciones rendía beneficios que no se limitaban a la colaboración logística y al suministro de ayuda. Ambas organizaciones coordinaron sus tareas con sus correspondientes líderes y organismos religiosos y comunitarios y lograron la movilización de miles de voluntarios que abastecieron de alimentos y otros artículos de primera necesidad a los campamentos de refugiados y a los centros de distribución. Socorro Musulmán colaboró con los imanes, el Consejo de coordinación de teólogos musulmanes y sus correspondientes comunidades, a las que les explicó que las labores humanitarias tenían carácter imparcial y garantizó la neutralidad del personal del Comité Metodista Unido de Auxilio. Los debates se centraron en la importancia imperativa que le daban ambas religiones a la prestación de ayuda humanitaria y a la reducción de las penurias de las personas y comunidades en situación de desventaja. Para ello emplearon conceptos al alcance de todos, y con los que todos podían relacionarse. El personal del Comité Metodista Unido de Auxilio hizo algo similar con los ministros metodistas en las zonas cristianas y con los religiosos hinduistas a los que conocía. En poco tiempo, el personal humanitario del Comité Metodista Unido de Auxilio y sus colegas de Socorro Musulmán fueron recibidos con los brazos abiertos por los pobladores de aldeas donde pocas semanas antes se les había amenazado con armas de fuego y habían sufrido agresiones. Ambos aliados también colaboraron con los dirigentes de la comunidad budista que se sumaron a los esfuerzos interreligiosos. Posteriormente, el Comité Metodista Unido de Auxilio y Socorro Musulmán otorgaron carácter formal a su alianza a nivel internacional y hoy en día mantienen esa colaboración en las actividades de socorro interreligiosas. Fuente: Hovey y Saleem, 2008 82. grupos también ofrece la posibilidad de lograr la colaboración de dirigentes religiosos juveniles destacados cuya influencia puede ser determinante para el logro de cambios importantes. Las organizaciones religiosas 58 Las organizaciones religiosas están estructuradas de manera similar a otras ONG, aunque sus actividades se basan en los principios y valores de una religión específica. Tanto las organizaciones religiosas internacionales, como, entre muchas otras, Visión Mundial, Socorro Islámico y Servicios Católicos de Socorro, como las nacionales y locales ofrecen credibilidad y autoridad ante las comunidades religiosas locales y, en muchos casos, siguen prestando apoyo aún después de la finalización de los proyectos específicos. Además, muchas organizaciones religiosas disponen de redes de operaciones con conexiones locales que pueden movilizar para dar respuesta a circunstancias específicas. Por ejemplo, Servicios Católicos de Socorro lleva a cabo todos sus programas de desarrollo y de emergencia por medio de la red mundial de Caritas, de la Iglesia Católica; las arquidiócesis nacionales y locales; y otras estructuras conexas. Mediante esas redes, las organizaciones religiosas pueden responder de forma eficaz y sostenida y prestar ayuda a las comunidades de maneras que con frecuencia no están al alcance de las ONG seculares. En situaciones de tensión religiosa, las organizaciones religiosas de diversos cultos pueden facilitar mecanismos de cooperación mediante la colaboración de las unas con las otras y con las organizaciones seculares. Así pueden facilitar los procesos de mediación y respuesta que de otra manera resultaría imposible poner en marcha. La colaboración de UNICEF con los imanes del Sudán En el Sudán, UNICEF ha podido abordar cuestiones tan delicadas como el abandono de los lactantes y las formas sustitutivas de cuidado familiar debido a que se granjeó el apoyo de diversos imanes muy prominentes. Al respecto, el Consejo de Fatuas del Sudán emitió una directiva de carácter religioso en la que se afirmó que en el contexto islámico se debe considerar huérfanos a los bebés abandonados, y por lo tanto con derecho pleno al apoyo estatal y comunitario. Esa fatua también declaró que el embarazo por sí solo no es prueba de adulterio y que las madres sujetas a procesos judiciales no deben ser separadas de sus hijos, como había sido la práctica hasta entonces. El programa tuvo un éxito significativo con respecto al establecimiento de formas de cuidado basados en la comunidad de los niños que se encontraban alojados en instituciones públicas, además de obtener la aprobación de leyes más adecuadas de protección de los niños. Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Sudán, 2007 83. Teólogos y educadores Los teólogos y educadores cumplen funciones importantes con respecto a la articulación y difusión de las creencias y enseñanzas de las comunidades religiosas, y por ello despiertan un respeto enorme. Pese a que los teólogos y educadores que sostienen opiniones o puntos de vista extremos o radicales pueden tener efectos alienantes, y hasta perpetuar prácticas perniciosas, los teólogos más convencionales ejercen influencias poderosas con respecto al cambio de actitudes y comportamientos. En su carácter de educadores —y de juristas en el marco de algunas tradiciones— pueden estudiar e interpretar conceptos y principios básicos sobre los derechos de los niños (como los del derecho internacional, los principios fundamentales y los documentos directrices) y demostrar “La cooperación multirreligiosa es una la importancia de los mismos para las comunidades religiosas y manera muy eficaz de integrar los sus sistemas de creencias. También son protagonistas principales componentes sociales, espirituales y con relación a la modificación de las normas sociales que resultan morales de los recursos religiosos para perjudiciales para los niños pero que pueden parecer de carácter mejorar la seguridad compartida y combatir religioso a los ojos de algunos integrantes de sus comunidades. En el abuso de la religión. Esa cooperación los contextos donde los teólogos se desempeñan también como puede resultar más poderosa, tanto juristas, cuentan con el poder de crear sistemas jurídicos que simbólica como prácticamente, que los propicien la vigencia de los derechos de los niños. esfuerzos de las agrupaciones religiosas que actúen por cuenta propia84”. Mecanismos interreligiosos Cada comunidad religiosa aporta a la alianza a la que pertenece un conjunto de recursos o activos que contribuyen a garantizar el bienestar de los niños. Cuando se aprovechan la energía y los recursos colectivos de varias de estas comunidades es posible obtener resultados aun mejores. • Los enfoques interreligiosos de las alianzas en pro de los derechos de los niños pueden ampliar la base de valores compartidos y dar de esa manera mayor sustento a los principios subyacentes del trabajo de las organizaciones de defensa de los derechos de los niños para que puedan difundirse a sectores más amplios de la población. • Tales alianzas establecen modelos de actitudes y comportamientos de cooperación que pueden tener efectos positivos en la percepción que tienen las comunidades de las labores en pro de los derechos de la infancia. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 59 • En las situaciones de conflicto, especialmente en las que las cuestiones étnicas o religiosas forman parte de los temas en disputa, la cooperación interreligiosa puede erigirse en un convincente ejemplo del poder positivo y unificador que tiene la religión para las comunidades donde las diferencias han adquirido carácter divisivo. Cuando se trata de contextos en los que el conflicto religioso es un componente fundamental de un conflicto más vasto, el trabajo en pro de la satisfacción de las necesidades de los niños puede servir para unificar a las partes que en otras circunstancias se rehúsan a tratar las unas con las otras. Integrar las alianzas en el trabajo programático Los procesos necesarios para edificar alianzas firmes no son independientes de los procesos correspondientes al desarrollo e implementación de los programas. Las alianzas deberían ser vistas como parte de una estrategia orientada a aumentar el éxito programático aprendiendo de las comunidades religiosas la manera de establecer prioridades programáticas y compartiendo y aprovechando los puntos fuertes de los aliados. • El éxito de las alianzas es el resultado de una serie de esfuerzos prolongados e intencionales que deben ser integrados en la planificación de las labores y en los ciclos de financiación. • Las estrategias de colaboración con las comunidades religiosas deberían ser explicitadas en los planes de acción de los programas de países y en los planes de trabajo anuales de las secciones de programas, garantizando que las comunidades religiosas se involucren en los foros de planificación y de políticas nacionales, especialmente cuando desempeñan un papel importante en materia de prestación de servicios en ese sector. • También se deberían hacer esfuerzos por facilitar los planes de desarrollo nacionales, garantizando la participación de las comunidades religiosas en los procesos nacionales. • Es necesario que en el diseño, el presupuesto, la gestión y la vigilancia de todos los programas se integren el trabajo, el tiempo y los recursos requeridos para lograr una participación eficaz. • Es importante que en el marco del proceso constante de aprendizaje acerca de la definición y el establecimiento de alianzas eficaces con las comunidades religiosas se mantenga un registro sistemático de las experiencias (en especial del valor agregado de las alianzas compartidas) y se evalúe lo actuado. De esa manera será posible elaborar nuevas metodologías que den lugar a formas de colaboración más eficaces y sostenibles. Aprovechar la capacidad técnica y el poder de convocatoria Poder de convocatoria Las organizaciones como UNICEF, a las que se reconoce y respeta a nivel mundial por el papel destacado que ocupan con respecto a la defensa de los derechos de los niños, cuentan con un importante poder de convocatoria en todos los niveles de los sectores público y privado. Debido a ello, pueden desempeñar un papel catalizador en la formación de colaboraciones eficaces relacionadas con las iniciativas centradas en los niños. Para ello pueden: 60 • Aprovechar su prestigio y legitimidad para convocar a diversas agrupaciones religiosas manteniendo constantemente la atención en las cuestiones e iniciativas referidas a los derechos de los niños. • Garantizar que los aliados religiosos que realizan aportaciones significativas en relación a las cuestiones que afectan a los niños participen activamente en la elaboración de los programas nacionales, regionales y mundiales. • Invitar a los dirigentes de mayor jerarquía de las religiones más importantes a debatir y lograr acuerdos sobre iniciativas de promoción que aumenten los efectos políticos mundiales del trabajo de las organizaciones de defensa de los derechos de los niños. • Emplear su influencia para convocar a los responsables de la toma de decisiones en representación de las comunidades religiosas menores y de los integrantes de las mismas que no logran que sus dirigentes les presten atención con respecto a temas importantes relacionados con los derechos de la niñez. El objetivo, en este caso, consiste en lograr la participación de esos dirigentes en iniciativas importantes. Capacidad técnica y presencia sobre el terreno Debido a su vasta experiencia técnica y a que están presentes sobre el terreno, las organizaciones como UNICEF han adquirido considerable capacidad en todos los aspectos de la programación. Al contar con un amplio radio de acción en el terreno, tienen más facilidades para difundir y aplicar conocimientos, datos y políticas en las comunidades religiosas. Herramientas y acuerdos para la colaboración Como se señaló anteriormente, la colaboración con las comunidades religiosas puede tener efectos positivos en todos los aspectos de la programación, ya se trate de los de promoción, prestación de servicios directos, coordinación, elaboración de políticas, etc. Esa colaboración puede adquirir formas diversas y variar desde los acuerdos contractuales hasta las relaciones no estructuradas de prestación de asesoramiento. El contexto específico, los objetivos programáticos y la presencia y el interés de los aliados potenciales determinarán cuáles son las estrategias y los enfoques más eficaces en cada caso. Además, el carácter de las alianzas puede modificarse con el correr del tiempo y adquirir grados mayores de formalidad a medida que aumenta la confianza mutua y se presentan nuevas oportunidades. En algunos casos, se pueden llevar a cabo labores conjuntas sin que medien acuerdos escritos. “Los acuerdos de colaboración informales representan una valiosa modalidad de participación en todos los niveles de UNICEF, y, por lo tanto, deberían ser respetados y valorados cuando corresponda”. Establecer cuál es el tipo de alianza más adecuado es un proceso que depende en gran medida de la existencia de objetivos claros, de la evaluación minuciosa de los aliados potenciales y de la valoración honesta de la capacidad de realizar aportaciones a las diversas facetas de la alianza con que cuenta la organización de defensa de los derechos de los niños. También es importante saber cuál es la condición jurídica de los agentes religiosos con respecto al establecimiento de acuerdos y la transferencia de fondos. Resumen de las herramientas y acuerdos de UNICEF Tipo Objetivo principal Otras características Memorando de entendimiento Expresar y acordar objetivos e intereses comunes. No implica la transferencia de efectivo o suministros. Acuerdo de cooperación sobre programas Un acuerdo de colaboración en pro de objetivos comunes, y riesgos, responsabilidades, recursos y beneficios compartidos. Los acuerdos de cooperación sobre programas se basan en presupuestos y planes de trabajo elaborados de manera conjunta. Se pueden transferir recursos al aliado para ayudarle a desempeñar las funciones que le correspondan. El aliado cuenta con capacidad o ventajas específicas para el desempeño de las funciones que le corresponden según el acuerdo de cooperación sobre programas. Mecanismo de apoyo limitado a organizaciones locales o de base y a otras organizaciones de la sociedad civil. Los fondos asignados no pueden superar los 20.000 dólares. Flexible, con un formato de planificación y requisitos en materia de presentación de informes altamente simplificados. Dos formas de acuerdos, los “simples” y los “más complejos”, según sea la escala, la naturaleza, el nivel de riesgo estimado y el grado de complejidad de la alianza. Acuerdo de financiación en pequeña escala (SSFA) Fuente: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, diciembre de 2010 85. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 61 Entre esas actividades pueden figurar: • Definir el papel y las aportaciones de las comunidades religiosas en las diversas esferas programáticas a fin de fomentar la integración en la planificación y programación a nivel nacional. • Fortalecer las aptitudes técnicas que los agentes religiosos aportan a sus labores en materia de salud, educación, nutrición, protección de infancia, agua, saneamiento e higiene y VIH/SIDA. • Suministrar información basada en las pruebas que puedan difundirse de tal manera que se obtengan los resultados deseados en las comunidades religiosas. • Compartir información sobre las prácticas y directrices adecuadas, como los códigos de comportamiento para las labores de protección de la infancia, que las comunidades religiosas pueden adecuar a las estructuras de sus organizaciones. Garantizar la capacidad adecuada Las alianzas exitosas se basan en la confianza, el respeto mutuo, una visión común y valores compartidos. Mediante la comunicación eficaz se logra una mejor comprensión de la manera en que cada aliado aborda las cuestiones que se deben resolver, aunque inicialmente puedan parecer opuestas a las de la otra parte. Resulta importante, por lo tanto, que el personal de las organizaciones de defensa de los derechos de los niños que se desempeña en todas las esferas de la programación adquiera los conocimientos, las aptitudes y las actitudes necesarias para colaborar con las comunidades religiosas de manera constructiva. Por ejemplo, que comprenda cuáles son sus puntos fuertes, las funciones que desempeña y su metodología de trabajo de forma tal que se facilite la comunicación y se disponga de puntos de entrada eficaces para la cooperación. Algunos de los pasos que deben darse para lograr ese objetivo requieren ciertas actitudes, conocimientos y aptitudes. Actitudes • Aborde todos los aspectos de las religiones y tradiciones espirituales con los que trabaje con interés y curiosidad y sin prejuicios. • Manténgase atento a sus sentimientos y prejuicios potenciales con respecto a la religión, la espiritualidad y las personas que se identifican con una tradición religiosa concreta. • Acepte la diversidad de las tradiciones religiosas y evite todo preconcepto sobre lo que una religión u otra pueda significar para los derechos de los niños. • Trate de establecer cuáles son los valores y principios de su trabajo que comparten las comunidades religiosas con las que usted colabora. • Demuestre respeto mediante el empleo de vestimenta, formas de salutación y normas de protocolo adecuadas cuando trate con los integrantes de la comunidad a fin de mejorar el proceso de colaboración y de ganarse el respeto de éstos. Conocimientos 62 • Aprenda los conceptos básicos, los principios y las enseñanzas de las tradiciones religiosas que se relacionen normalmente con su trabajo. Para lograrlo, no basta con leer sino que resulta muy importante obtener información de los integrantes de las comunidades religiosas. • Invite a los representantes de las comunidades religiosas (incluso las mujeres, los jóvenes y los ancianos) a que compartan sus opiniones acerca del trabajo que se está llevando a cabo. • Comprenda las razones por las que las comunidades religiosas pueden estar interesadas en aliarse con las organizaciones de defensa de los derechos de los niños. • Averigüe y trate de entender cuáles son los temas referidos a los derechos humanos y a los niños que pueden resultar polémicos o potencialmente divisivos en la interacción con las comunidades religiosas y busque la manera de abordarlos sin alienar o alejar a los aliados potenciales. • Incorpore esa información en los materiales y actividades de orientación dirigidos a los nuevos integrantes del personal. • Asegúrese de que los análisis de situación y las evaluaciones contengan información sobre las comunidades religiosas y de su participación en los procesos comunitarios. • Confirme cuáles son las funciones que ya cumplen las comunidades religiosas en materia de fomento y protección de los derechos de los niños. Aptitudes • Escuche, aprenda y demuestre respeto por los valores tradicionales. Cuando los mismos le parezcan contrarios a sus puntos de vista sobre los derechos de los niños, trate de encontrar puntos en común entre su perspectiva y la de las tradiciones religiosas mediante la mediación y la negociación. • Aprenda a expresar y transmitir de manera convincente los conceptos sobre los derechos de los niños a través de las enseñanzas y creencias de las comunidades religiosas que sus creyentes comprendan con más claridad (por ejemplo, tal vez hablando de los derechos sin emplear esa palabra, que en algunos casos pueden provocar una inmediata falta de interés por parte del oyente). • Adquiera las aptitudes necesarias para facilitar los procesos interactivos que permitan compartir e integrar los conceptos principales de la religión y de la causa de los derechos de los niños. • Haga frente de manera respetuosa pero directa a los retos que les puedan presentar las comunidades religiosas en materia de derechos de los niños. En una mesa redonda sobre la eliminación de la violencia contra los niños organizada con Religiones por la Paz en la sede de UNICEF (de izquierda a derecha): el obispo Gunnar J. Stålsett, obispo emérito de Oslo y Moderador del Consejo Europeo de Líderes Religiosos; Su Excelencia el Jeque Shaban Ramadhan Mubaje, Gran Mufti del Consejo Supremo Musulmán de Uganda y Co-moderador del Consejo Africano de Líderes Religiosos; y el Gran Rabino David Rosen, presidente del Comité Judío Internacional para Consultas Interreligiosas. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 63 6 64 PLANIFICACIÓN, SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN Unas niñas trabajan en un proyecto de artesanía en un taller de arte de la Escuela Primaria Al Madraza Al Jadida, que recibe asistencia de UNICEF (Marruecos). Es de crítica importancia evaluar sistemáticamente de qué manera contribuye la colaboración con las comunidades religiosas en el logro de los resultados deseados. “Planificación, seguimiento y evaluación” se refiere a una serie de acciones que se llevan a cabo a fin de elaborar una base de pruebas para medir la calidad y el éxito de los programas, así como los retos que se les anteponen. Mediante el empleo de sistemas eficaces de planificación, seguimiento y evaluación es posible mejorar los métodos de rendición de cuentas (a las comunidades, los gobiernos y la sociedad civil), el aprendizaje (tanto de los aliados como de otros participantes) y los resultados de las intervenciones. En cada fase sucesiva se obtienen y analizan datos para determinar la manera en que se debería implementar un programa (su diseño) y cómo medir los resultados obtenidos en relación con los objetivos del programa (seguimiento) y decidir si el mismo ha logrado esos objetivos (evaluación). Estos datos contienen información cualitativa y cuantitativa obtenida de manera objetiva. Para que la planificación, el seguimiento y la evaluación sean eficaces, lo más importante es garantizar que el proceso tenga carácter realista y que sea viable en el tiempo disponible y con los medios financieros y humanos con los que se cuenta, además de involucrar de manera significativa a todos los aliados y las partes interesadas, especialmente los niños. A continuación se presenta un análisis simplificado del proceso de planificación, seguimiento y evaluación. Pese a que en este caso se concentra en las comunidades religiosas, se trata de un proceso que puede aplicarse al trabajo en otras esferas. También se ofrece en el anexo 3 un modelo de marco lógico referido a las alianzas con los dirigentes religiosos para combatir el castigo físico. El marco lógico es una técnica que se emplea para elaborar el diseño general de un programa de desarrollo, mejorar el seguimiento y fortalecer la evaluación poniendo de relieve los componentes básicos del proyecto en las diversas fases de su ciclo86. Al contrario que la mayoría de las organizaciones de defensa de los derechos de los niños, las comunidades religiosas, en especial las locales, pueden carecer de la experiencia técnica requerida para trabajar de esa manera y necesitarán apoyo y capacitación para poder tomar parte en los procesos de planificación, seguimiento y evaluación realizando aportaciones significativas a los mismos87. Planificación Como se indicó en la Sección 4, el punto de partida para decidir si resulta conveniente o no aliarse con un agente religioso debería basarse en los datos que demuestran claramente el valor específico que puede tener esa colaboración con respecto al logro de los resultados deseados. Una vez tomada la decisión de colaborar en una intervención, el diseño del programa creado en forma conjunta debería reflejar el valor agregado como un componente integral y mensurable del marco del programa. El objetivo, que consiste en los cambios a largo plazo que se espera que logre la intervención en cuestión, se concentrará en el tema de los derechos de los niños. Uno de los objetivos –el resultado fundamental que debería obtenerse al final del ciclo del programa que conducirá a la conquista de esa meta– puede concentrarse en los logros mesurables del aliado religioso que destaquen las aportaciones de éste a los logros generales del programa. A fin de poder medir los avances y logros, la implementación del programa debería comenzar con un proceso de obtención de información para la línea de base, el punto de partida de los conocimientos, las expectativas, las actitudes y los comportamientos del aliado y de la comunidad. Eso se logra por lo general mediante la realización de encuestas y entrevistas personales y a grupos que constituyan una muestra representativa de la comunidad. Una vez que se haya obtenido y analizado la información resultará útil establecer indicadores Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 65 pertinentes y mensurables de los logros, incluso de las contribuciones realizadas por los aliados a los resultados y consecuencias del proyecto. Esa información pasará entonces a ser el punto de referencia de las labores de seguimiento y evaluación. Tanto las evaluaciones de las necesidades y recursos como los análisis de situación deberían explorar las funciones que desempeñan los agentes religiosos, así como la influencia que ejercen en sus comunidades con respecto a los temas que se tratan. Con la información obtenida se pueden contestar preguntas como: • ¿Qué influencia tienen los dirigentes religiosos en el proceso de toma de decisiones a nivel individual, familiar y comunitario? ¿A cuántas personas, familias y comunidades afecta esa influencia? • ¿Considera la comunidad que los agentes religiosos contribuyen de manera positiva o negativa con respecto a los temas de interés comunitario? ¿Cuáles son sus funciones en relación con los problemas sociales, los conflictos y otras cuestiones importantes? • ¿Qué función cumple la fe en la formación de las normas sociales? ¿Les cabe alguna parte de esto a los dirigentes religiosos? Seguimiento Cuando se cuenta con una línea de base precisa se puede observar el progreso de la implementación y medir los cambios mientras van ocurriendo. Observar el desarrollo del proyecto a medida que tiene lugar constituye la labor de seguimiento y posibilita la realización de cambios programáticos inmediatos cuando una estrategia no obtiene los resultados inicialmente deseados. El seguimiento consiste en la obtención y el análisis constante y sistemático de datos relacionados con indicadores específicos. Un indicador es una variable o un factor cuantitativo o cualitativo que brinda un medio simple y confiable de medir los logros o reflejar los cambios ocasionados por una intervención. Mediante la comparación de los indicadores en distintos puntos en el tiempo se logra evaluar los cambios. El seguimiento suministra información sobre cuánto se ha avanzado hacia el logro de los objetivos previstos y sobre el uso adecuado de las aportaciones. El proceso de seguimiento se concentra generalmente en el rendimiento, o en los resultados inmediatos de las actividades. Por ejemplo, ¿se desarrolló el taller práctico de capacitación de la manera en que había sido planificado? Más adelante en la implementación de un programa es posible medir su rendimiento de alto nivel, o los cambios más sustanciales que hayan provocado las actividades que se pusieron en práctica —como en los comportamientos, por ejemplo— debido a la ejecución sostenida del programa y la realización de diversas actividades. El seguimiento debería formar parte integral de los programas. Tanto las inspecciones sobre el terreno y la verificación de informes y documentos como las conversaciones con el personal, los aliados y los integrantes de la comunidad son actividades de seguimiento. La documentación es un aspecto fundamental del seguimiento, aunque no debería ser una actividad excesivamente onerosa. En el modelo de marco lógico del programa que aparece en el anexo 3 en referencia a una alianza entre dirigentes religiosos y organizaciones de defensa de los derechos de los niños orientada a combatir el castigo físico, figuran indicadores referidos específicamente a los resultados que uno podría querer medir en materia de actitudes, conocimientos y desempeño del aliado, ya que se supone que éstos pueden contribuir a que el programa tenga consecuencias positivas. Consúltese, por ejemplo, Esfera de resultados 1.1: Las comunidades religiosas demuestran sus conocimientos acerca de las consecuencias del castigo corporal en el desarrollo y el bienestar de los niños (pág. 86). Al inicio de la alianza programática, y en el marco del análisis de situación, será necesario comprender qué opinan los aliados religiosos acerca de los temas relacionados con el castigo físico. ¿Consideran que se trata de “un castigo” o de un ejercicio positivo para el desarrollo adecuado de los niños? ¿Apoyan sólo ciertos métodos de esa forma de castigo o están a favor de que se le emplee en determinadas circunstancias? ¿O, lisa y llanamente, lo rechazan de manera total? 66 Un beneficio de esto es que posibilita que los activistas de los derechos de los niños midan cuán estrechamente se vinculan (o no) los conocimientos y las actitudes con los principios de las prácticas adecuadas basadas en las pruebas. También hará posible una mejor comprensión de la forma en que las creencias religiosas de los aliados influyen en sus prácticas y su capacidad de comprensión, lo que contribuirá a que las intervenciones sean más creativas y, en teoría al menos, más eficaces. El conocimiento, las actitudes y los comportamientos pueden ser evaluados de maneras diversas88. Se pueden emplear, por ejemplo, las encuestas sobre conocimientos, actitudes y prácticas. Éstas exigen un cierto nivel de aptitudes técnicas y a veces requieren mucho tiempo. Los grupos de discusión, a cuyos integrantes se entrevista de manera estructurada, permiten cierta flexibilidad en cuanto a los temas a tratar. Cuando se planifican intervenciones de creación de capacidad, como las de capacitación orientadas a impartir conocimientos, es muy importante medir el grado de conocimientos sobre los temas y las cuestiones que se van a tratar (examen previo), y repetir la prueba después del ejercicio (examen posterior) a fin de constatar si los cambios inmediatos en materia de conocimientos pueden deberse al ejercicio. En referencia una vez más al modelo de marco lógico y la Esfera de resultados 1.2: Las comunidades religiosas diseñan e implementan actividades, una vez que las labores de creación de capacidad propuestas están en marcha, el programa requiere que los dirigentes de las comunidades religiosas apliquen lo que han aprendido mediante la incorporación de información correcta y precisa en sus labores, como los servicios religiosos, la educación y la orientación. Esos dirigentes también organizarán y supervisarán debates sobre el castigo corporal en sus comunidades. Es necesario que las organizaciones de defensa de los derechos de los niños otorguen a sus aliados religiosos la oportunidad de elaborar mensajes y enfoques que se adecuen mejor a las características de sus comunidades religiosas. Sin embargo, el seguimiento de esas actividades es fundamental para garantizar que: • • La información que ofrecen sea cierta y objetiva. Las estrategias de presentación de la información sean correctas y se ajusten a las prácticas adecuadas de protección de la infancia. Por ejemplo, en una actividad religiosa como un servicio de culto, el dirigente religioso puede dedicar cierto tiempo a la discusión de los efectos negativos del castigo físico. A tal fin, puede ofrecer información cierta y precisa (uno de los resultados positivos de las actividades de creación de capacidad) pero, sin haber consultado a nadie previamente, puede pedirle a una niña que comparta con los participantes sus experiencias en materia de castigo físico. Aunque la convocatoria a la niña puede ser bien intencionada y tener como objetivo dar una dimensión práctica a la discusión, también puede resultar una experiencia muy dolorosa y vergonzosa para la niña. Lo que indicaría esta acción es que los participantes no aprendieron o comprendieron cabalmente toda la información que se les dio en las sesiones de capacitación. El activista de los derechos de los niños puede prevenir la repetición de situaciones similares, además de respaldar los esfuerzos del dirigente por convertirse en un defensor de los niños más eficaz, si responde de inmediato a la situación tratándola de manera individual con el dirigente religioso en cuestión. Los posteriores cambios positivos de comportamiento por parte del aliado serán reflejo de un resultado positivo de esa gestión89. Entre los métodos de seguimiento de la ejecución de las actividades de los aliados figuran la observación directa de esas actividades y las entrevistas con los integrantes de la comunidad acerca del contenido de las presentaciones o debates. Las entrevistas, que pueden llevarse a cabo al finalizar los servicios, ritos o festivales religiosos, deben contar con la participación de los niños, niñas y jóvenes. De esa manera será posible obtener información sobre la frecuencia con que el tema aparece en las actividades religiosas habituales y sobre las percepciones de la comunidad con respecto a la información y los métodos empleados para su difusión. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 67 Evaluación Las evaluaciones, que se llevan a cabo al final o después del final de los ciclos de programación, sirven para medir las consecuencias a largo plazo de los programas (objetivos) y de los logros de esos objetivos. Cuando se trata de proyectos de muy larga duración, que en algunos casos se prolongan durante muchos años, es habitual llevar a cabo un examen de mitad de período con vistas a la eventual rendición de cuentas y para verificar que el proceso avance según lo previsto. Los proyectos se evaluarán teniendo en cuenta, por ejemplo, las actitudes y los comportamientos actuales en comparación con los que se registraron anteriormente en la línea de base. De esa manera se pueden determinar los resultados generales de la estrategia de implementación. ¿Se han modificado las actitudes y los comportamientos? ¿Han cambiado las actitudes pero no los comportamientos? Mediante la integración de las relaciones entre los aliados, la creación de capacidad y las intervenciones en el marco del programa, resulta posible medir los aspectos de la alianza que se relacionan directamente con la programación. Además de observar los cambios registrados en los conocimientos y actitudes de los aliados con respecto a las cuestiones relacionadas con los derechos de los niños que corresponden al programa (rendimiento) y las medidas que tomaron para implementar las actividades de manera eficaz (resultados), la evaluación se llevaría a cabo para verificar que la participación de los aliados causó efectos mensurables en el programa. Pese a que esa relación entre participación y resultados no siempre es directa, siempre resulta mucho más fácil detectarla y analizar las tendencias si se cuenta con datos respaldados por pruebas provenientes de la fase de diseño del programa y por medio del seguimiento y la evaluación rigurosas. Volviendo al ejemplo del caso programa sobre castigo corporal, como parte del mismo se han llevado a cabos labores de seguimiento con regularidad. Al finalizar el programa, debería examinarse la línea inicial de datos de base que se haya obtenido en relación con los indicadores de los objetivos y la meta del programa. Entre las preguntas que se deberían formular figuran, por ejemplo: • ¿Se difundió de manera adecuada información sobre los efectos negativos del castigo corporal? • ¿Se ofrecieron demostraciones de medidas y comportamientos positivos de protección de la infancia? • ¿Cuáles fueron los resultados concretos de los debates y discusiones en la comunidad que facilitaron los dirigentes religiosos? • ¿Se complementaron e implementaron las acciones que se decidió poner en práctica? El objetivo de una evaluación minuciosa debería consistir en volver a obtener la información de la base de referencia (suponiendo que aún se considere pertinente), evaluarla con relación a la base de referencia y analizar luego esos resultados junto a los resultados más significativos que se hayan obtenido mediante el proceso de seguimiento. Finalmente, están los aspectos organizativos de las alianzas que no pertenecen a la esfera de programación directa aunque influyan sobre la misma. Las propias alianzas tienen sus procesos y resultados de carácter interno. Para poder comprender los procesos dinámicos que pueden fortalecer o debilitar las alianzas es necesario vigilar y evaluar los aspectos de las mismas que se relacionan con su gobernanza. En este caso, las mediciones deberían concentrarse en los valores, la capacidad, la comunicación y los procesos. A continuación, algunos indicadores generales de los principios de gobernanza adecuada90: 68 • Legitimidad: la medida en que las partes interesadas pertinentes están involucradas en las principales decisiones de gobernanza y gestión. • Obligación de rendir cuentas: la medida en que se define, acepta o pone en práctica la obligación de rendir cuentas a lo largo de la cadena de mando. • Responsabilidad: la medida en que el programa acepta y ejerce responsabilidad ante las partes interesadas que no están directamente involucradas en la gestión del programa. • Equidad: la medida en que los aliados y participantes que ocupan posiciones similares disfrutan de las mismas oportunidades de influir en el programa y obtener beneficios del mismo. • Transparencia: la medida en que los procesos de toma de decisiones, presentación de informes y evaluación de un programa están a la vista y a disposición del público en general. • Eficacia: la medida en que el programa ha transformado económicamente —o se espera que transforme— sus recursos y aportaciones (como los fondos, la capacidad, el tiempo, etc.) en resultados a fin de lograr los máximos rendimientos, resultados y efectos posibles. • Rectitud: la medida en que todas las personas en puestos de conducción cumplen con las exigentes normas éticas y de conducta profesional más allá del cumplimiento de las reglas y regulaciones que gobiernan la ejecución del programa. Como parte del Día de Oración y Acción para los Niños, cuyo objetivo es movilizar a las comunidades religiosas para promover los derechos de la infancia, el obispo de Dili se reunió junto a unos niños e invitados especiales frente de la catedral para lanzar globos que representan la esperanza de un mejor entorno de protección para los niños (Timor-Leste). Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 69 ANEXO 1: PROTAGONISTAS PRINCIPALES NACIONES UNIDAS Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas, <www.unaoc.org> Esta iniciativa del Secretario General de las Naciones Unidas tiene como objetivo mejorar la comprensión y la cooperación entre las naciones y los pueblos de culturas y religiones diversas, y ayudar a contrarrestar las fuerzas que impulsan la polarización y el extremismo. La Alianza recibe apoyo del Grupo de Amigos, una comunidad constituida por más de 35 países y organizaciones y organismos internacionales. La Alianza, que desempeña sus labores en colaboración con los gobiernos, las organizaciones internacionales y regionales, las agrupaciones de la sociedad civil, las fundaciones y el sector privado, respalda una amplia gama de proyectos e iniciativas orientados a estrechar los vínculos entre culturas y comunidades diversas. Equipo de tareas interinstitucional de las Naciones Unidas sobre organizaciones religiosas y los Objetivos de Desarrollo del Milenio El Equipo de tareas interinstitucional brinda apoyo al trabajo del personal de las Naciones Unidas mediante una colaboración estratégica, informada y sostenida con las principales organizaciones religiosas aliadas a fin de respaldar los esfuerzos individuales y colectivos con miras al logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. El Equipo de tareas interinstitucional constituye también una plataforma compartida para la reflexión y el intercambio de experiencias, así como un centro de recursos referidos a las alianzas con las organizaciones religiosas dedicadas a las labores de desarrollo, tanto para los organismos de las Naciones Unidas como para sus contrapartes externas especializadas en el desarrollo. Entre las organizaciones de las Naciones Unidas dedicadas al desarrollo que participan en el Equipo de tareas interinstitucional figuran la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas (UNAOC), el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales Internacionales (DESA), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), el Servicio de enlace con las organizaciones no gubernamentales, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), <www.unaids.org> ONUSIDA, que está formado por la Secretaría del ONUSIDA y 10 organismos copatrocinadores, es responsable del desarrollo de orientación política y técnica sobre las cuestiones relacionadas con el VIH y el SIDA, y de su promoción. Bajo ese mandato, ONUSIDA trabaja sobre una amplia gama de temas culturales, económicos y de salud conexos, entre ellos los derechos humanos, las cuestiones de género, las respuestas de emergencia y humanitarias, la orientación psicológica y la realización del examen del VIH, la prevención del contagio con ese virus, su tratamiento, el apoyo y la atención de las personas afectadas, la salud sexual y reproductiva y diversos temas científicos y de investigación. 70 ONUSIDA reconoce el papel significativo que desempeñan las comunidades religiosas en el marco de la respuesta al VIH, como la prestación de servicios relacionados con el virus, aunque también tiene presente que existen esferas en las que se les debería prestar más apoyo para que puedan responder de manera más eficaz. Esto ha llevado al desarrollo del Marco estratégico de alianza con las organizaciones religiosas, cuyo objetivo consiste en fomentar asociaciones más firmes entre la familia de ONUSIDA y las organizaciones religiosas, a fin de lograr el acceso universal a la prevención del contagio con el VIH, su tratamiento y el apoyo y la atención de las personas afectadas, que conlleva la integración de las organizaciones religiosas en las respuestas nacionales integrales a la amenaza del SIDA. Sírvase consultar: <http://data.unaids.org/pub/BaseDocument/2009/ jc1786partnershipwithfaithbasedorganizations_en.pdf>. Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), <www.undp.org> El PNUD es la red mundial de desarrollo de las Naciones Unidas. Se trata de un organismo que fomenta el cambio y el acceso de los países a los conocimientos, la experiencia y los recursos necesarios para que sus pobladores disfruten de vidas mejores. El PNUD lleva a cabo sus actividades en el terreno en 177 naciones, colaborando con sus gobiernos para que encuentren soluciones propias a los desafíos mundiales y nacionales en materia de desarrollo. Mediante la red del PNUD se vinculan y coordinan los esfuerzos mundiales y nacionales para lograr esas metas. El PNUD se concentra en ayudar a los países a encontrar y compartir soluciones a los desafíos que presenta el gobierno democrático, la reducción de la pobreza, la prevención de las crisis y su recuperación, los retos en las esferas de la energía y el medio ambiente y el VIH y el SIDA. Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), <www.unesco.org> La misión de la UNESCO consiste en colaborar en pro de la consolidación de la paz, la erradicación de la pobreza, el desarrollo sostenible y el diálogo intercultural mediante la educación, las ciencias, la cultura, la comunicación y la información. Dentro de un marco más amplio del diálogo intercultural, que también abarca el diálogo interreligioso, se presta especial atención a fomentar el pluralismo cultural y desalentar las expresiones de extremismo. Las esferas de programas que utiliza la UNESCO para ello incluyen: publicaciones sobre historias generales y regionales; Rutas del Diálogo, como el Proyecto “La Ruta del Esclavo”; y el dispositivo intersectorial sobre la contribución al Diálogo entre Civilizaciones. Además, la UNESCO cuenta con una red bien establecida las “Cátedras UNESCO sobre el diálogo intercultural y entre religiones”. La red es una alianza entre los centros académicos internacionales reconocidos por su experiencia en este campo y reúne a profesores, investigadores y especialistas de la historia de las religiones que están personalmente comprometidos con el logro del diálogo entre religiones. Véase <www.unesco.org/en/unitwin/access-by-domain/culture/intercultural-interreligious-dialogue/> Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP), <www.unfpa.org> El FNUAP es un organismo internacional de desarrollo que defiende el derecho de toda mujer, hombre y niño a disfrutar de buena salud e igualdad de oportunidades en la vida. El FNUAP brinda apoyo a los países para que empleen los datos demográficos para combatir la pobreza y garantizar que todos los embarazos sean deseados, todos los nacimientos sean seguros, todos los jóvenes estén libres del VIH y todas las niñas y mujeres sean tratadas con dignidad y respeto. El FNUAP colabora con los gobiernos y con otros organismos y la sociedad civil en general en tres esferas básicas, la salud sexual y reproductiva, las estrategias de población y desarrollo y la igualdad de género y la potenciación de la mujer. El 20 y 21 de octubre de 2008, el FNUAP llevó a cabo en Estambul el Foro Mundial de Organizaciones Confesionales, en el que participaron más de 100 organizaciones de fe y un gran número de dirigentes de las principales religiones y regiones del mundo. En el Foro se elaboraron prácticas exitosas y nuevas maneras de lograr avances en esas tres esferas básicas mediante alianzas con el FNUAP. El Foro Mundial también dio lugar a la Red interconfesional sobre población y desarrollo, que constituye un acuerdo con las comunidades religiosas de todo el mundo acerca de los principios de la colaboración entre las mismas y con el FNUAP, con el objetivo de combatir la mortalidad materna, el SIDA y la pobreza en todo el mundo, y abordar las cuestiones relacionadas con la violencia contra las mujeres, los desafíos de la juventud y las migraciones. Para obtener más información sobre la Red y los documentos conexos, sírvase consultar a <www.unfpa.org/culture/fbo.html>. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 71 Otros organismos de las Naciones Unidas que colaboran con las comunidades religiosas son la Organización Internacional del Trabajo (OIT), <www.ilo.org>; la Organización Mundial de la Salud (OMS), <www.who.org>; el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales Internacionales de las Naciones Unidas (DESA), <www.un.org/en/development/desa/índice.html>; y el Banco Mundial <www.worldbank.org>. Organizaciones no gubernamentales Organizaciones y organismos académicos y de investigación Programa africano de recursos religiosos para la salud (ARHAP), <www.arhap.uct.ac.za> ARHAP es un organismo internacional de investigación dedicado a los vínculos entre la religión y la salud pública, que hace especial hincapié en los aspectos relacionados con África. ARHAP tiene como objetivo elaborar una base de conocimientos sistemáticos sobre los activos de salud religiosos en África subsahariana a fin de coordinar y mejorar las labores de los dirigentes religiosos especializados en cuestiones de salud, los responsables de la toma de decisiones políticas y otras personas dedicadas a los temas de la salud que colaboran para combatir enfermedades como el VIH y el SIDA y para promover la atención sostenible de la salud, especialmente para quienes viven en situación de pobreza o marginación. Centro Berkley sobre la religión, la paz y los asuntos mundiales, <berkleycenter.georgetown.edu/home> El Centro, que tiene su sede en la Universidad de Georgetown , en Washington, DC, ofrece programas interdisciplinarios orientados a generar conocimientos, fomentar el diálogo y respaldar las actividades en la esfera fundamental donde confluyen la religión y las cuestiones que afectan al mundo. Entre las esferas programáticas del Centro figuran la religión y el desarrollo mundial; la religión, los conflictos y la paz; la globalización, las religiones y el mundo secular; y el pluralismo religioso en las cuestiones mundiales. Center for Spiritual Development in Childhood and Adolescence, <www.spiritualdevelopmentcenter.org> El Centro para el desarrollo espiritual en la niñez y la adolescencia es una iniciativa mundial cuyo objetivo consiste en fomentar la investigación y la práctica del desarrollo espiritual de los niños, niñas y adolescentes mediante la realización de investigaciones interculturales de carácter cualitativo y cuantitativo acerca de la naturaleza, los procesos y los resultados del desarrollo espiritual en la infancia y la adolescencia. También tiene como meta la creación de una comunidad en línea de académicos e intelectuales y de una base de datos sobre la literatura referida al desarrollo espiritual disponible en todo el mundo; y elaborar las herramientas, los recursos y las alianzas que ayuden a los padres y educadores, así como al personal que trabaja con los jóvenes, a nutrir de manera más eficaz la vida espiritual de los niños, niñas y adolescentes. Patheos, <www.patheos.com> Este sitio Web es una fuente de recursos para quienes desean aprender más acerca de las diversas religiones y tomar parte en productivos debates moderados acerca de los temas de actualidad más mencionados y discutidos. Patheos cuenta con una amplia biblioteca con información sobre la mayoría de las principales religiones del mundo que desarrollan y actualizan teólogos y académicos. 72 Religions and Development Research Programme (RaD), <www.religionsanddevelopment.org> Este Programa sobre las religiones y la investigación para el desarrollo de la Universidad de Birmingham, en Gran Bretaña, es una alianza internacional dedicada a la investigación sobre las relaciones entre las principales religiones del mundo, el desarrollo en los países de bajos recursos y las actividades de reducción de la pobreza. Las investigaciones se centran en la India, Nigeria, el Pakistán y la República Unida de Tanzania, donde su equipo de expertos investiga el cristianismo, el Islam, el hinduismo, el sijismo, el budismo y las creencias tradicionales africanas, que constituyen las principales religiones mundiales. El programa también colabora con investigadores de otras instituciones británicas y de los países donde lleva a cabo sus estudios. The Center for the Study of Law and Religion, The Child in Law, Religion and Society Program, de la Universidad de Emory, <cslr.law.emory.edu/research/the-child-in-law-religion-and-society> Este centro cuenta con un programa de investigación interdisciplinaria dedicado principalmente a los nacimientos, la identificación y el crecimiento de los niños; los derechos y ritos de la infancia; el abuso, la pobreza y el desamparo de los niños; y la delincuencia juvenil, la violencia, las respuestas en materia de política pública y las reformas de las mismas. The Pew Forum on Religion & Public Life, <pewforum.org> El objetivo del Foro consiste en fomentar una mayor comprensión de las cuestiones relacionadas con la esfera de contacto entre la religión y los asuntos públicos. El Centro lleva a cabo encuestas, análisis demográficos y otras actividades de investigación social sobre aspectos importantes de la religión y la vida pública en los Estados Unidos y el resto del mundo. También ofrece un espacio neutral para el debate de temas de actualidad por medio de mesas redondas y presentaciones de informes. Las organizaciones religiosas Las organizaciones religiosas, a las que en algunas oportunidades se denomina organizaciones inspiradas en la religión, figuran entre los principales agentes religiosos en los contextos humanitarios y del desarrollo y funcionan de manera muy similar a la de otras ONG que prestan ayuda para el desarrollo y, en muchos casos, implementan iniciativas humanitarias en situaciones de emergencia que abarcan toda la gama de la programación. Las organizaciones religiosas, que se inspiran en los preceptos y valores de su fe, suelen contar con autoridad y con la confianza de las comunidades religiosas locales y, en muchos casos, disponen de redes operativas con conexiones locales que pueden ser movilizadas para dar respuesta a situaciones específicas. Esas redes pueden hacer posible que las organizaciones religiosas den respuestas eficaces y sostenidas y tengan acceso a las comunidades de maneras que no están al alcance de las ONG seculares. Entre las organizaciones religiosas internacionales más importantes figuran Adventist Development and Relief Agency, <www.adra.org>; Red de Desarrollo Aga Khan, <www.akdn.org>; American Friends Service Committee, <www.afsc.org>; American Jewish World Service, <www.ajws.org>; Caritas Internacional, <www.caritas.org>; Catholic Overseas Development Agency, <www.cafod.org.uk>; Servicios Católicos de Socorro, <www.crs.org>; Servicio Mundial de Iglesias, <www.churchworldservice. org>; Compassion International, <www.compassion.com>; Socorro y Desarrollo Episcopal, <www.er-d. org>; Habitat for Humanity, <www.habitat.org>; International Orthodox Christian Charities, <www.iocc. org>; Socorro Islámico, <www.islamic-relief.com>; Servicio Jesuita para los Refugiados, <www.jrs.net>; Federación Luterana Mundial, <www.lutheranworld.org/lwf/>; Lutheran World Relief, <lwr.org>; Mercy Corps, <www.mercycorps.org>; Socorro Musulmán, <www.muslimaid.org>; Organismo de socorro de la Iglesia de Noruega, <www.kirkensnodhjelp.no/en>; Ejército de Salvación, <www.salvationarmy.org>; World Service Office, <www.sawso.org>; Tearfund, <www.tearfund.org>; Comité Metodista Unido de Auxilio, <new.gbgm-umc.org/umcor>; Visión Mundial, <www.worldvision.org>; Asociación Cristiana de Jóvenes, <www.ymca.net>; y Asociación Cristiana Femenina, <www.worldywca.org >. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 73 Las organizaciones, redes y alianzas religiosas e interreligiosas Accord, <www.accordnetwork.org> Accord es una red de iglesias cristianas evangélicas y de 60 organizaciones dedicadas a la eliminación de la pobreza. Acción Conjunta de las Iglesias (ACT), <www.actalliance.org> Acción Conjunta de las Iglesias es una alianza mundial de iglesias protestantes dedicadas a las labores humanitarias y del desarrollo. Consejo Africanos de Dirigentes Religiosos (ACRL), <www.acrl-rfp.org> La misión del Consejo Africano de Dirigentes Religiosos consiste en fomentar la cooperación multirreligiosa en pro de la paz y el desarrollo sostenible en África. El Consejo también destaca, apoya y vincula las labores de los consejos interreligiosos de los diversos países africanos que integran Religiones por la paz. Anglican Alliance, <www.anglicanalliance.org> La Anglican Alliance crea enlaces y capacidad para las labores de desarrollo, socorro y promoción que llevan a cabo las iglesias de la comunidad anglicana mundial. Arigatou International, <www.arigatouinternational.org> Arigatou International es una ONG religiosa internacional que fomenta la cooperación interreligiosa en pro de los derechos de los niños, haciendo especial hincapié en la potenciación y participación de los niños, niñas y jóvenes. Entre las iniciativas que respalda figuran la Red Global de Religiones a favor de la Niñez, que ofrece una plataforma mundial de cooperación en favor de los niños; Learning to Live Together: An intercultural and interfaith programme for ethics education, una guía para dirigentes juveniles y educadores de todo el mundo orientada a enseñar a los niños a comprender y respetar a las personas de otras culturas y religiones; y el Día mundial de oración y acción por la infancia, que moviliza a los integrantes de las diversas comunidades religiosas para que mejoren la vida de los niños mediante la oración y la prestación de servicios prácticos. Catholic Peacebuilding Network, <cpn.nd.edu/about_us.htm> Esta red de profesionales voluntarios del sector de la salud, académicos, clérigos y laicos de todo el mundo se dedica a ampliar y profundizar el estudio y la práctica de la consolidación de la paz, especialmente en el plano local. La Red católica de consolidación de la paz también se propone profundizar los vínculos de solidaridad de los creyentes católicos involucrados en esa causa, compartir y analizar prácticas adecuadas para el logro de ese objetivo, ampliar el poder pacificador de la Iglesia en las zonas de conflicto y alentar la profundización de una teología de paz justa. 74 Center for Interfaith Action on Global Poverty (CIFA), <www.centerforinterfaithaction.org> El Centro fue creado con el propósito de colaborar con las instituciones religiosas que durante siglos han sido las principales prestadoras de cuidados y servicios a los más pobres entre los pobres del mundo. CIFA está comprometido a aprovechar las posibilidades que ofrece el sector religioso para crear una fuerza positiva en pro del desarrollo mundial mediante una mayor coordinación interreligiosa, el intercambio de conocimientos sobre modelos y prácticas adecuadas, nuevas formas de movilización de recursos y diversas formas de promoción que influyan en los gobiernos y el público en general. CIFA cuenta con un sitio Web que ofrece diversos recursos, entre ellos: • Enlace a muchas organizaciones e iniciativas con base religiosa: <www.centerforinterfaithaction.org/initiatives/other-faith-based-global-efforts.html> • Una base de datos sobre actividades interreligiosas de colaboración en las esferas del socorro y el desarrollo: <www.centerforinterfaithaction.org/initiatives/database.html> Christian Alliance for Orphans, <christianalliancefororphans.org> La Alianza cristiana por los huérfanos está integrada por más de 80 organizaciones cristianas y una red de iglesias que implementan iniciativas para estimular y ayudar a aumentar el compromiso de las comunidades cristianas con la adopción, los hogares de acogida y el cuidado mundial de los huérfanos por parte de las iglesias locales. Churches’ Network for Non-Violence (CNNV), <www.churchesfornon-violence.org> CNNV es una red de apoyo, información y recursos prácticos que ayuda a las iglesias y comunidades a respaldar las formas de disciplina positiva y no violenta. En su sitio Web se pueden descargar publicaciones y recursos. El sitio también cuenta con enlaces con diversas organizaciones multirreligiosas. <www.churchesfornon-violence.org/links.html> Comité de Organizaciones No Gubernamentales Religiosas en las Naciones Unidas, <www.trunity.net/rngo> El Comité es una coalición de representantes de organizaciones nacionales e internacionales acreditadas ante las Naciones Unidas cuyas labores se definen como religiosas, espirituales o éticas. El Comité tiene dos objetivos principales. Por una parte, es un foro de información y educación sobre los retos del mundo actual y sobre la función constructiva que pueden desempeñar las Naciones Unidas con respecto a esos desafíos. Por otro lado, el Comité constituye un foro de intercambio y promoción de valores religiosos y éticos compartidos en el marco de las deliberaciones de las Naciones Unidas. Council for a Parliament of the World’s Religions, <www.parliamentofreligions.org> El Consejo, cuyo objetivo principal es la creación de un parlamento mundial de religiones, se creó con el propósito de cultivar la armonía entre las comunidades religiosas y alentar su participación con el mundo y sus principales instituciones a fin de lograr un futuro pacífico y sostenible. Cada cuatro años, el Consejo organiza la mayor reunión interreligiosa del mundo con la participación de comunidades religiosas y espirituales de todo el planeta, de sus dirigentes y sus creyentes, en la que se discuten y analizan las cuestiones relacionadas con la paz, la diversidad y la sostenibilidad en un contexto de comprensión y cooperación interreligiosa. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 75 Alianza Ecuménica de Acción Mundial (EAA), <www.e-alliance.ch> La Alianza Ecuménica de Acción Mundial es una red internacional de iglesias y organizaciones religiosas comprometidas a llevar a cabo campañas conjuntas sobre temas de interés común. Las actuales campañas que realiza la Alianza se refieren al VIH y el SIDA y la alimentación. Entre las actividades que lleva a cabo la Alianza también figuran la concienciación y generación de un movimiento en pro de la justicia en el seno de las iglesias, además de la movilización de los creyentes para que ejerzan presión sobre los gobiernos locales y nacionales, las empresas y las organizaciones multilaterales. Consejo Europeo de los Líderes Religiosos, <www.rfp-europe.eu> El Consejo es una coalición de dirigentes de alta jerarquía de las religiones históricas de Europa (el cristianismo, el judaísmo y el Islam), así como de los budistas, hinduistas, sijs y zoroastrianos de Europa que se han comprometido a cooperar para prevenir los conflictos, en pro de la coexistencia pacífica y la reconciliación, y para alentar a los integrantes de sus respectivas comunidades a que hagan lo mismo. El Consejo Europeo de los Líderes Religiosos es uno de los cuatro consejos interreligiosos regionales de Religiones por la paz. Iniciativa Faith to Action, <www.faithbasedcarefororphans.org> Esta iniciativa fomenta el diálogo entre las iglesias y organizaciones religiosas cristianas y las personas que tratan de dar respuesta a las necesidades de los huérfanos y otros niños y niñas vulnerables en los países de África subsahariana. El objetivo central de la Iniciativa consiste en ofrecer a las comunidades religiosas estadounidenses los recursos necesarios para que tomen con conocimiento de causa medidas compasivas por los niños que en número cada vez mayor sufren las consecuencias del VIH y el SIDA en África. La iniciativa aboga por el empleo de enfoques sostenibles de apoyo a la familia y la comunidad no sólo como parte de la respuesta inicial y la atención institucional sino como solución temporal y definitiva. Red Global de Religiones a favor de la Niñez (GNRC), <www.gnrc.net/en> Esta red es la única organización interreligiosa mundial dedicada exclusivamente a la defensa de los derechos de los niños y otras cuestiones relacionadas con la infancia. Global Working Group on Faith, SSDIM & VIH Este grupo de trabajo reúne a diversos dirigentes y comunidades religiosas y a organizaciones religiosas y teológicas para dar respuesta a la epidemia del VIH/SIDA en África oriental, central y meridional. Interfaith Youth Core (IFYC), <www.ifyc.org> Interfaith Youth Core se propone generar respeto mutuo y una atmósfera de pluralismo entre jóvenes de diferentes religiones preparándoles para trabajar juntos en servicio de los demás. 76 Interfaith Center of New York, <www.interfaithcenter.org> El objetivo del Centro consiste en aumentar el nivel de respeto y comprensión mutua entre las personas de distintas tradiciones religiosas, étnicas y culturales, y resolver los problemas sociales comunes mediante el fomento de la cooperación entre las diversas comunidades religiosas y las organizaciones civiles. Entre sus programas figuran los de educación, capacitación y servicios de divulgación a las comunidades inmigrantes. Para desarrollar y poner en práctica sus programas, el Centro mantiene alianzas con organizaciones religiosas de base, dirigentes comunitarios y universidades. Islamic Society of North America (ISNA), <www.isna.net> La Sociedad Islámica de América del Norte es una asociación de organizaciones e individuos musulmanes que constituye una plataforma común para presentar esa religión a la sociedad en general, prestar apoyo a las comunidades musulmanas, elaborar programas sociales y de educación y divulgación, así como para fomentar las relaciones positivas con otras comunidades religiosas y organizaciones de la sociedad civil y de servicios. Micah Challenge International, <www.micahchallenge.org> Micah Challenge International es una coalición mundial de cristianos que piden a los gobiernos que rindan cuentas de sus promesas de reducir a la mitad la pobreza extrema para 2015. Mediante el respaldo y fomento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, Micah Challenge tiene como objetivo potenciar a los creyentes cristianos para que demanden justicia y pasen de la compasión a la acción. NetsforLife, <www.netsforlifeafrica.org> Una asociación de empresas, fundaciones, organizaciones no gubernamentales y organizaciones religiosas unidas por su compromiso con la eliminación del paludismo en el África subsahariana, NetsforLife está gestionada y supervisada por la Episcopal Relief & Development en 15 países y Christian Aid en dos. Los programas son ejecutados por diócesis locales, iglesias y grupos religiosos anglicanos que incluyen redes de mujeres y jóvenes. ONE Episcopalian Campaign, <www.episcopalchurch.org/ONE> En 2006, la Convención General de la Iglesia Episcopal declaró que los Objetivos de Desarrollo del Milenio constituían la prioridad máxima de la misión de esa religión. La campaña ONE Episcopalian es el resultado de una alianza entre la Iglesia Episcopal y la Campaña ONE con el objetivo de poner fin a la pobreza extrema y lograr los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio establecidos por las Naciones Unidas y ratificados por todas las naciones del mundo. Religiones por la paz, <www.religionsforpeace.org> Religiones por la paz es la coalición multirreligiosa más grande y representativa del mundo dedicada a la causa de la paz. La red mundial de Religiones por la paz comprende un Consejo Mundial de dirigentes religiosos superiores de todas las regiones del mundo; seis organismos interreligiosos regionales y más de 70 organismos interreligiosos nacionales; además de la Red mundial de mujeres creyentes y una Red mundial de jóvenes. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 77 Tanenbaum Center for Interreligious Understanding, <www.tanenbaum.org> El Centro Tanenbaum es una organización secular y no sectaria que se inspira en la labor del fallecido rabino Marc H. Tanenbaum, un destacado activista y estudioso de las relaciones interreligiosas. El Centro elabora programas que alientan y fomentan la comprensión y el diálogo interreligioso. Esas actividades se concentran en la diversidad religiosa en los lugares de trabajo, la atención de la salud y la educación, así como en la solución pacífica de los conflictos. Tony Blair Faith Foundation, <www.tonyblairfaithfoundation.org> Esta fundación tiene como objetivo fomentar el respeto y la comprensión de las principales religiones del mundo y demostrar la manera en que la fe puede convertirse en una fuerza poderosa en pro del bien en el mundo moderno. La Fundación brinda apoyo a programas de educación orientados a que los jóvenes adquieran más conocimientos religiosos e investiga la manera en que la religión puede beneficiar a la comunidad mundial. También brinda apoyo a los programas de acción social en las esferas de la atención de la salud y la eliminación del paludismo. El Foro Humanitario, <www.humanitarianforum.org> El Foro Humanitario es una red de organizaciones dedicadas a las labores humanitarias y al desarrollo de los países musulmanes tanto donantes como recipientes, así como de las naciones occidentales y las redes multilaterales. El Foro mejora las vidas de las personas necesitadas, además de las relaciones entre las comunidades, mediante el establecimiento de vínculos y la acción humanitaria tanto en el plano internacional como el local, empleando para ello una red mundial de pares. También aboga por un medio ambiente seguro, constructivo y libre de prejuicios que haga posible que esas organizaciones se desempeñen al máximo de su capacidad operativa. United Religions Initiative, <www.uri.org> Esta comunidad mundial está comprometida a fomentar y apoyar la cooperación interreligiosa constante y permanente y a eliminar la violencia debida a razones religiosas. En su sitio Web se ofrecen enlaces a otros sitios en línea dedicados a los niños, niñas y jóvenes. Viva Network: Together for Children, <www.viva.org> Se trata de una red de iglesias dedicada a brindar seguridad y atención de la salud a los niños vulnerables, además de ofrecerles oportunidades de aprender y de desempeñar un papel activo en la formación de su futuro. La red Viva funciona en 14 países mediante alianzas en las que participan desde grandes organizaciones filantrópicas internacionales hasta pequeñas iniciativas comunitarias. Por medio de redes que funcionan en 22 ciudades, Viva brinda apoyo a diversos proyectos que benefician a niños y niñas. Women, Faith, and Development Alliance (WFDA), <www.wfd-alliance.org> Esta alianza de organizaciones especializadas en los temas de las mujeres, la religión y al desarrollo tiene como meta desencadenar esfuerzos mundiales para reducir la pobreza mediante la afirmación de la voluntad y la práctica política orientada a aumentar las inversiones en las actividades de potenciación de las niñas y las mujeres en todo el mundo 78 Consejo Mundial de Iglesias (WCC), <www.oikoumene.org/en/home.html> El Consejo Mundial de Iglesias es una confederación de 349 iglesias de prácticamente todos los cultos cristianos en más de 120 países, cuyo objetivo es la unidad, el testimonio común y el servicio cristiano El Consejo Mundial de Iglesias puso en marcha el “Decenio para superar la violencia (2001-2010), las iglesias en busca de reconciliación y paz”, un movimiento mundial para fortalecer las actividades y redes de prevención y eliminación de la violencia y para alentar la realización de nuevos esfuerzos similares: <overcomingviolence.org>. El Consejo Mundial de Iglesias también inició un proyecto llamado “Acompañar a las iglesias en situación de conflicto”, de apoyo a las iglesias que hacen frente a la intolerancia religiosa, la discriminación y los conflictos, y promueve la cooperación interreligiosa, la dignidad humana, los valores permanentes y las relaciones justas. El Consejo hace hincapié en esos aspectos en todas las religiones que fomentan la armonía entre las comunidades y que ayudan a las personas a vivir su fe individual con integridad mientras conviven con otras cuyas religiones respetan y aceptan, <www.oikoumene.org/en/programmes/ interreligiousdialogue/churches-in-situations-of-conflict.html>. Día mundial de oración y acción por la infancia (DPAC), <www.dayofprayerandaction.org> La iniciativa del Día mundial de oración y acción por la infancia es un esfuerzo mundial de movilización de las organizaciones religiosas y los sectores seculares a fin de que colaboren por el bienestar de los niños. La iniciativa también recalca el papel importante que pueden desempeñar las comunidades religiosas con respecto a la protección de los derechos de los niños. El Día mundial de oración y acción por la infancia es una actividad anual que se lleva a cabo en la semana del 20 de noviembre, de manera que coincida con el Día Universal del Niño y el aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño. Alianza Evangélica Mundial, <www.worldevangelicals.org> La Alianza Evangélica Mundial es una red de Iglesias evangélicas de 128 países y de más de 100 organizaciones internacionales que a las que pertenecen más de 600 millones de cristianos evangélicos. World Faiths Development Dialogue (WFDD), <berkleycenter.georgetown.edu/wfdd> WFDD es una ONG cuyo trabajo se desarrolla en el espacio que comparten la religión y el desarrollo mundial. La organización tiene como objetivos principales fortalecer, destacar y difundir las sinergias y el propósito común de las religiones y las instituciones dedicadas al desarrollo que abordan el problema de la pobreza; y estudiar los temas sobre los que se ha logrado poco consenso y con respecto a los cuales existe poco acuerdo entre las diversas religiones y entre las comunidades religiosas y las organizaciones dedicadas al desarrollo. WFDD apoya formas de diálogo que se proyecten en el futuro y que se refieran a alianzas orientadas a la acción entre las instituciones interesadas en el desarrollo que estén inspiradas en la religión y aquellas que tengan carácter secular, como la Tony Blair Faith Foundation, el Center for Interfaith Action on Global Poverty y el programa sobre Religión y Desarrollo del Centro Berkley. Asimismo, WFDD brinda apoyo parcial a las labores de análisis necesarias para evaluar la eficacia de esas alianzas. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 79 ANEXO 2: RECURSOS IMPORTANTES El desarrollo y los derechos de la infancia Universidad Al-Azhar y Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Children in Islam: Their care, protection and development, Centro islámico Internacional de Estudios e Investigación, Universidad Al-Azhar, El Cairo, 2005, <www.unicef.org/egypt/Egy-homepage-Childreninislamengsum%281%29.pdf> (Resumen en inglés y versión impresa en árabe) y <www.churchesfornon-violence.org/links.html> (texto completo en inglés y árabe, avanzar hasta el título “Egypt”). Centro Berkley, ”Challenges of Change: Faith, gender and development”, Berkley Center Reports, Washington, DC, 2008, <berkleycenter.georgetown.edu/wfdd/publications/challenges-of-change-faith-genderand-development>. 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Religiones por la paz, Care, Commitment, and Collaboration: The role of religious communities in creating a World Fit for Children, informe sobre los resultados de una reunión multirreligiosa que se llevó a cabo con motivo del Período extraordinario de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la infancia, Conferencia Mundial de Religiones por la Paz, Programa de la niñez, Nueva York, 6 y 7 de mayo de 2002, <religionsforpeace.org/resources/reports/care.html>. 80 Religiones por la paz, La fe en acción: Trabajando hacia los Objetivos de Desarrollo del Milenio-Una carpeta de información para líderes y comunidades religiosas, Segunda edición, Nueva York, 2010, <religionsforpeace.org/resources/toolkits/faith-in-action.html>. (La primera edición está disponible en árabe, español, francés e inglés. Esa edición consiste también en un manual de capacitación en inglés. La segunda edición en inglés será traducida en breve a los demás idiomas). 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Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 81 La supervivencia y el desarrollo de los niños African Religious Health Assets Programme, ‘When Religion and Health Align: Mobilizing religious health assets for transformation,’ documentos de trabajo y ponencias de la Conferencia del Programa africano de recursos religiosos para la salud (ARHAP) de 2009, Ciudad del Cabo, Sudáfrica, 2009, <www. arhap.uct.ac.za/conference2009.php>. (Los documentos de las conferencias anteriores pueden descargarse en <www.arhap.uct.ac.za/conference2009.php>). Alliance of Religions and Conservation, Faith in Water, colección de documentos de la conferencia sobre religión y agua que se llevó a cabo en Sarum College, Salisbury, Reino Unido, del 5 al 7 julio de 2009, <waterschools.wordpress.com/2010/10/06/so-many-stories-about-water/> y <www.arcworld.org/news. asp?pageID=406>. 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Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 83 Acción humanitaria Abuarqub, Mamoun e Isabel Phillips, A Brief History of Humanitarianism in the Muslim World, Islamic Relief Worldwide, Birmingham, Reino Unido, julio de 2009, <www.islamic-relief.com/Indepth/ Default.aspx?depID=6>. (En este sitio Web también se pueden encontrar otros análisis sobre religión y trabajo humanitario). Comité Permanente entre Organismos, Guía del IASC sobre Salud Mental y Apoyo Psicosocial en Emergencias Humanitarias y Catástrofes, IASC, Ginebra, 2007. Guarda particular interés “Lista de acciones 5.3: Facilitar las condiciones para prácticas terapéuticas cultural y religiosamente apropiadas”, págs. 106–109, <www.humanitarianinfo.org/iasc/pageloader.aspx?page=content-subsidi-commondefault&sb=5>. Oxford Department of International Development, ‘Islam, Human Rights and Displacement’, Forced Migration Review (Suplemento), Oxford, enero de 2009, <www.fmreview.org/human-rights.htm>. Religiones por la paz, “Faith-Based Organizations Forum on Multi-religious Cooperation for Humanitarian Relief, Development and Peace: Report and recommendations”, informes sobre los foros de 2007, 2008 y 2009, <www.religionsforpeace.org/initiatives/faith-based-forum/>. 84 ANEXO 3: EJEMPLO DE MARCO LÓGICO En la página siguiente figura un ejemplo de un posible marco lógico si una organización de defensa de los derechos de los niños considerara la posibilidad de una intervención programática como resultado de su preocupación por el uso de castigos corporales en una comunidad determinada. La organización de defensa de los derechos de los niños lleva a cabo en primer lugar un análisis de situación que demuestra que muchos integrantes de la comunidad creen firmemente que la disciplina severa, incluso el castigo físico, resulta beneficiosa para el desarrollo del niño. Las entrevistas y los grupos de discusión revelan que las enseñanzas religiosas contienen muchas referencias en favor de tales prácticas. Lo que también se desprende de los datos obtenidos es que los dirigentes religiosos ejercen una notable influencia en muchos aspectos de la vida cotidiana en la comunidad. Los entrevistados afirman que se trata de personas en las que la comunidad deposita mucha confianza. Las entrevistas con los dirigentes religiosos permiten percibir que éstos tienen puntos de vista divergentes con respecto al castigo físico, que van desde el apoyo al mismo hasta el rechazo decidido de su empleo. Unos pocos dirigentes indican que desean abordar el tema pero que no saben cómo hacerlo. Sobre la base de los resultados del análisis de situación, las organizaciones de defensa de los derechos de los niños comprenden que existe la oportunidad de colaborar con algunos dirigentes religiosos que pueden emplear sus influencias y sus redes para tratar el tema en el plano familiar y comunitario. De manera conjunta con los dirigentes religiosos, se diseña un programa para suministrarles información, apoyo y capacitación, que luego emplearán en su trabajo con sus respectivas comunidades religiosas, en las que se referirán a la importancia de no perjudicar a los niños y a la búsqueda y empleo de otros métodos disciplinarios no violentos. Debe notarse que para que tenga validez, el marco lógico del programa debería contar con información sobre la línea de base y los objetivos, y que los indicadores tendrían que ajustarse al criterio SMART. Es decir, ser específicos, mensurables, realizables, pertinentes y de duración determinada. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 85 Meta Objetivos declarados Indicadores Reducción mensurable del uso de castigo corporal en la comunidad X. Porcentaje de cambio del número de niños que denuncian haber sufrido castigos físicos en la escuela o el hogar. Línea Meta de base Supuestos Porcentaje de cambio del número de padres que opinan que el castigo físico resulta aceptable en la escuelo o el hogar. Objetivo 1 Esfera de resultados 1.1 Actividad 1.1.1 Ejemplos de subactividades 86 Participación efectiva de los dirigentes religiosos en acciones orientadas a reducir el uso del castigo corporal en sus comunidades. Modificación mensurable de las actitudes y expectativas con respecto al castigo corporal que los adultos de la comunidad atribuyen a la influencia de los dirigentes religiosos. Las comunidades religiosas demuestran conocimientos acerca de los efectos del castigo físico en el desarrollo y bienestar del niño. Modificación mensurable de los conocimientos acerca de las cuestiones referidas a la violencia contra los niños, como el castigo físico. Actividades de creación de capacidad adecuadas a las características específicas de las comunidades religiosas. Número de actividades. Desarrollo de métodos de análisis de situación y de evaluación de conocimientos y actitudes. Herramientas y metodologías desarrolladas. Es probable que no existan metodologías específicas y que sea necesario desarrollarlas usando para ello la experiencia obtenida y examinando las metodologías similares de las que se pueda disponer. Realización del análisis de situación. Informe sobre el análisis de situación. La comprensión plena de la situación, los puntos fuertes y los desafíos aumentarán el grado de eficacia del programa. Evaluación de los conocimientos y actitudes de sectores designados de la población. Informe sobre las actividades de evaluación. La evaluación eficaz posibilitará la creación de capacidad adecuada y eficaz. Modificación mensurable de los conocimientos acerca de las consecuencias negativas del castigo corporal que los adultos de la comunidad atribuyen a la influencia de los dirigentes religiosos. Capacidad comprobada de comunicar información veraz sobre el castigo físico y la violencia contra los niños. Número de participantes, tanto varones como mujeres. Las comunidades religiosas y los activistas dedicados a la protección de la infancia pueden colaborar para combatir el castigo corporal, y están dispuestos a hacerlo. La modificación de las actitudes y los comportamientos posibilitará la toma de medidas más eficaces. Las actividades de creación de capacidad posibilitarán un aumento mensurable de los conocimientos, las actitudes y los comportamientos. … continuación Objetivos declarados Ejemplos de subactividades Indicadores Análisis de los resultados de la evaluación y elaboración de recomendaciones sobre las actividades y los recursos de asistencia técnica propuestos que se necesitan. Informe final sobre la evaluación y recomendaciones. Elaboración de una estrategia de creación de capacidad y de un plan de implementación. Documento sobre el plan estratégico de implementación. Elaboración de materiales para la creación de capacidad, como los materiales de capacitación. Cantidad y tipo de materiales. Implementación de las intervenciones sobre la creación de capacidad. Número y tipo de actividades. Número de participantes varones y mujeres. Documentos correspondientes a la línea de base. Línea Meta de base Supuestos El plan reflejará cabalmente las necesidades, los recursos y los intereses de las partes interesadas, y tendrá en cuenta las aportaciones de las mismas. La ayuda técnica no siempre se brindará mediante cursillos prácticos, ya que probablemente existan métodos más eficaces de creación de capacidad. Los integrantes de las comunidades religiosas, los dirigentes tradicionales y los jóvenes desean y pueden adquirir los principios correctos de las prácticas adecuadas en materia de protección de la infancia, así como investigar de qué manera pueden participar en las labores eficaces de protección de los niños. Seguimiento actual de las diversas actividades. Informes de seguimiento. Los programas requieren seguimiento y evaluación constante para garantizar su calidad. Las actividades de seguimiento y evaluación deberían ser transparentes y tener carácter participativo. Evaluación al finalizar la intervención, haciendo hincapié en las lecciones obtenidas. Informe de evaluación, análisis comparado con la línea de base. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 87 … continuación Objetivos declarados Indicadores Línea Meta de base Supuestos Esfera de resultados 1.2 Las comunidades religiosas diseñan e implementan actividades. Número de actividades planificadas que se llevaron a cabo. La implementación de acciones acordadas que se desprenden del diálogo facilitado contribuirá a aumentar la participación de las partes interesadas en posteriores diálogos más eficaces. Actividad 1.2.1 Actividades orientadas a facilitar las discusiones y debates acerca del castigo corporal en su comunidad. Número de debates y discusiones que se llevaron a cabo. Las actividades previstas podrán ponerse en práctica debido al ámbito de operaciones existente, los recursos disponibles, el interés por participar de la comunidad, etc. Elaboración de una metodología para el proceso de facilitación. Herramientas y metodologías desarrolladas y acordadas. Ya se dispone de las metodologías, aunque éstas deben ser adaptadas y aceptadas por todos los aliados. Labores de comunicación con los dirigentes comunitarios y los jóvenes a fin de organizar sesiones de diálogo. Informe sobre las actividades de diálogo. La presentación sólida de informes hará posible la realización de intervenciones más adecuadas y eficaces. Análisis de los resultados de los diálogos y las medidas concretas propuestas. Informe final sobre los diálogos. Planificación de actividades complementarias de las medidas concretas resultantes de las sesiones de diálogo. Documento sobre el plan estratégico de implementación. El plan reflejará cabalmente las necesidades, los recursos y los intereses de las partes interesadas, tendrá en cuenta las aportaciones que realicen los participantes y se adecuará a la situación imperante. Implementación de las medidas concretas resultantes de las sesiones de diálogo. Número y tipo de actividades. Las condiciones y la motivación posibilitarán la implementación de la manera prevista. Seguimiento actual de las diversas actividades. Informes de seguimiento. Ejemplos de subactividades Número de participantes desagregados por edad y por género. Número de grupos de hombres y mujeres participantes (dirigentes tradicionales y religiosos, jóvenes, padres, etc.). Los programas requieren seguimiento y evaluación constante para garantizar su calidad. Las actividades de seguimiento y evaluación deberían ser transparentes y tener carácter participativo. 88 … continuación Objetivos declarados Ejemplos de subactividades … continuación Actividad 1.2.2 Subactividades Indicadores Línea Meta de base Supuestos Evaluación al finalizar la intervención, haciendo hincapié en las lecciones obtenidas. Informes de evaluación, análisis comparado con la línea de base. Incorporación de mensajes sobre el castigo corporal en las actividades religiosas, como servicios de culto, ritos y rituales, fiestas y festivales, etc. Número y tipo de actividades. Evaluación de las prioridades de los mensajes. Línea de base de las creencias, actitudes y conocimientos de los integrantes de la comunidad. Desarrollo de estrategias y actividades específicas referidas a los mensajes. Documento sobre el plan estratégico de implementación. Elaboración de materiales para la campaña de promoción. Cantidad y tipo de materiales. El plan reflejará cabalmente las necesidades, los usos y los intereses de las partes interesadas, tendrá en cuenta las aportaciones que realicen los participantes y se adecuará a la situación imperante. Realización de actividades relacionadas con la difusión de mensajes durante el lapso especificado. Número y tipo de actividades. Se dispone de recursos adecuados. Seguimiento actual de las distintas actividades. Informes de seguimiento. Las condiciones permitirán la implementación de acuerdo con lo planificado. Evaluación de las actividades. Informes de evaluación. El programa requiere seguimiento y evaluación constante para garantizar su calidad. Las campañas de promoción adecuadas y bien planificadas ayudan a mejorar la protección de la infancia. Las actividades de promoción se adecuarán al contexto y se desarrollarán de manera representativa y participativa. Número de participantes varones y mujeres. La evaluación eficaz hará posible la realización de intervenciones más adecuadas y eficaces. Documentos de la línea de base. Las actividades de seguimiento y evaluación deberían ser transparentes y tener carácter participativo. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 89 REFERENCIAS 1 2 3 4 90 “Declaración de Kyoto: Un compromiso multirreligioso para enfrentar la violencia infantil”, Octava Asamblea Mundial de Religiones por la paz, Kyoto, Japón, agosto de 2006. La Declaración de Kyoto fue adoptada por casi 1.000 dirigentes religiosos de todos los credos que participaron en la Asamblea Mundial. Volkmann, Christian Salazar, “Why and How UNICEF Cooperates with Religious Leaders in Iran’’, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Teherán, documento inédito, febrero de 2008, págs. 1–2. Center for Interfaith Action on Global Poverty, Many Faiths, Common Action: Increasing the impact of the faith sector on health and development, CIFA, Washington, DC, 2010, pág. 8, <www.centerforinterfaithaction.org/ images/stories/GIFHD/strategic-framework-report.pdf>, acceso el 7 de julio de 2011. Para saber cuáles son las organizaciones de las Naciones Unidas dedicadas al desarrollo que participan, consúltese la sección Protagonistas principales. Para más información sobre el rol de la religión en las Naciones Unidas y algunos ejemplos de las labores realizadas por organismos de las Naciones Unidas, consúltese Karam, Azza y Mathew Weiner (eds.), “Religion and the United Nations”, en CrossCurrents, vol. 60, no. 3, septiembre de 2010. Para acceder a los informes de las consultas, consúltese <www.unfpa.org/public/pid/1352> y <www. unfpa.org/public/publications/pid/4974>. 5 Reverenda Rachel Carnegie, Secretaria del Arzobispo de Canterbury para el Desarrollo Internacional, comunicación personal, 26 de julio de 2011. 6 Para la Iglesia Anglicana y la Iglesia Católica, la frase “comunidades religiosas” hace referencia a determinadas redes históricas de monjas, monjes y órdenes laicas que viven de acuerdo con un lema o una regla de vida específica (como los benedictinos, los jesuitas, los franciscanos, los dominicanos, etcétera) y que también efectúan labores humanitarias. Se las conoce históricamente por administrar hospitales, escuelas y otras instituciones, además de participar de manera activa en cuestiones relacionadas con la infancia. (Abagail Nelson, Agencia episcopal de alivio y desarrollo, comunicación personal, 21 de julio de 2011). Sin embargo, a los fines de este documento, la frase se empleará en su sentido amplio para denominar a la mayor parte de los agentes y sistemas religiosos. 7 Center for Interfaith Action on Global Poverty, op. cit., pág. 3. 8 Ibid. 9 Adaptado de Religiones por la paz, “Plan estratégico: Religiones por la paz. Diferentes creencias, acción común”, Religiones por la paz, Nueva York, diciembre de 2007, pág. 21. 10 Extractado de Center for Interfaith Action on Global Poverty, op. cit., Anexo 2, págs. 31–32. 11 Conferencia Mundial de Religiones por la Paz, “Care, Commitment, and Collaboration: The role of religious communities in creating a World Fit for Children – The outcome report of a multi-religious gathering on the occasion of the United Nations Special Session on Children”, Nueva York, 6 y 7 de mayo de 2002, pág. 7. 12 Bowker, John (ed.), “Dana”, The Concise Oxford Dictionary of World Religions, Oxford University Press, 2000, <www.oxfordreference.com/views/ENTRY. html?subview=Main&entry=t101.e1799>, consultado el 23 de septiembre de 2010 [trad. esp.: Diccionario abreviado Oxford de las religiones del mundo, Barcelona, Paidós, 2006]. 13 Profesor Anant Rambachan, director del Departamento de estudios religiosos de Saint Olaf College, comunicación personal, 14 de julio de 2011. 14 Abuarqub, Mamoun e Isabel Phillips, A Brief History of Humanitarianism in the Muslim World, Socorro Islámico, Birmingham, Reino Unido, julio de 2009, pág. 3. Otra persona que aportó comentarios sobre el párrafo fue Mohammad Sammak, secretario general de la Cumbre espiritual islámica y de la Comisión libanesa para el diálogo cristiano-musulmán,comunicación personal, 20 de julio de 2011; y Sohaib N. Sultan, Capellán musulmán de la Office of Religious Life de Princeton University, comunicación communication, 16 de septiembre de 2011. 15 Adaptado del sitio web My Jewish Learning, “Tikkun Olam: Repairing the world”, <www.myjewishlearning. com/practices/Ethics/Caring_For_Others/Tikkun_ Olam_Repairing_the_World_.shtml>, acceso el 17 de septiembre de 2010. 16 Red global de religiones a favor de los niños, “Declaración de la Red global de las religiones a favor de los niños (GNRC) en ocasión de la Sesión especial sobre los niños de la Asamblea General de Naciones Unidas”, 8 de mayo de 2002, < http://www.gnrc.net/es/documents/ statement_unga.html >, acceso el 25 de julio de 2011. 17 Volkmann, op. cit., págs. 1–2. Oficina de prensa de la BBC, “World Service/Gallup International Poll Reveals Who Runs Your World”, 15 de septiembre de 2005, <www.bbc.co.uk/pressoffice/ pressreleases/stories/2005/09_september/15/world. shtml>, consultado el 3 de diciembre de 2010. 30 Ibid. 31 Abuarqub, Mamoun, Islamic Perspectives on Education, Socorro Islámico, Birmingham, Reino Unido, julio de 2009, pág. 6. 19 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Nigeria: Communication for social change and civic engagement – Community dialogues to save children’s lives”, UNICEF, Nueva York, 20 de mayo de 2009. 32 20 Extractado de Consejo episcopal latinoamericano y Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Breve resumen de actividades de la Iglesia y UNICEF: América Latina y el Caribe”, CELAM y UNICEF, n.d., <http:// www.unicef.org/spanish/media/files/CELAM.pdf>, acceso el 25 de julio de 2011. 21 Adaptado de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Religiones por la paz, op. cit., págs. 21–23. Marshall, op. cit., pág. 274. Una evaluación realizada por el Banco Mundial en 2010 demostró el buen desempeño de las escuelas Fe y Alegría en América Latina (ParraOsorio, J. C. y Q. Wodon, Escuelas religiosas en América Latina: Estudios de caso sobre Fe y Alegría, Estudios del Banco Mundial, Washington, DC, 2011). Las investigaciones efectuadas en otras regiones también señalan que las escuelas religiosas con frecuencia llegan a los sectores pobres de la población y suelen presentar un buen desempeño (Barrera-Osorio, F., H. A. Patrinos y Q. Wodon, Emerging Evidence on Vouchers and FaithBased Providers in Education: Case Studies from Africa, Latin America, and Asia, Directions in Development, Banco Mundial, Washington, DC, 2009). 22 Wessells, Michael y Alison Strang, “Religion as Resource and Risk: The double-edged sword for children in situations of armed conflict”, en A World Turned Upside Down: Social ecological approaches to children in war zones, compilado por Neil Boothby et al., Kumarian Press, Bloomfield, CT, 2006, pág. 205. 33 23 Extractado de Sede del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Re-focusing on Equity: Questions and answers”, UNICEF, Nueva York, noviembre de 2010. 24 El texto de esta subsección ha sido adaptado en parte del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Religiones por la paz, op. cit. 25 Una fatwa es una opinión religiosa proveniente de una autoridad islámica sobre algún tema específico del derecho islámico y su interpretación o aplicación 26 Oficina del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en Mauritania, 2009. Chand, Sarla y Jacqui Patterson, Faith-based Models for Improving Maternal and Newborn Health, Agencia de los Estados Unidos para el desarrollo internacional y Programa Access, Washington, DC, 2007. Nótese que existen ciertas diferencias con las cifras proporcionadas por el Banco Mundial que, por ejemplo, señalan un índice menor de servicios de salud basados en la religión en África. De acuerdo con un estudio realizado por el Banco Mundial en el año 2011, en varios países de África subsahariana las instalaciones sanitarias dependientes de las comunidades religiosas proporcionan entre un 30% y un 40% de las camas de hospital, aunque dicho porcentaje disminuye si se contemplan en los datos totales sobre los sectores nacionales las cifras obtenidas de las encuestas de hogares que reflejan otros tipos de atención sanitaria. Véase Olivier, J. y Q. Wodon, Estimating the Market Share of Faith-Inspired Health Care Providers in Africa: Comparing facilities and household survey data, copia mimeografiada, Banco Mundial, Washington, DC, 2011. 27 Extractado de Sede del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, op. cit., pág. 15. 34 28 Marshall, Katherine, “Education for All: Where does religion come in?”, en Comparative Education, vol. 46, no. 3, agosto de 2010, pág. 285. Universidad Al-Azhar y Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Children in Islam: Their care, protection, and development, Centro internacional islámico para la investigación y los estudios demográficos, Universidad Al-Azhar, El Cairo, 2005, pág. 29. 35 29 Tietjen, Karen, “Multi-sectoral Support of Basic and Girls’ Education”, en SAGE Technical Report No. 2, Strategies for Advancing Girls’ Education (SAGE), Washington, DC, 2000, <www.aed.org/Publications/upload/TietjenBook. pdf>, acceso el 8 de julio de 2011. Para más información sobre las donaciones religiosas conocidas como waqf en el Islam y su aporte al desarrollo de un sistema universal de salud en los primeros tiempos de la cultura musulmana, consúltese Abuarqub y Phillips, op. cit., pág. 6. 36 Olivier, J., y Q. Wodon, Estimating the Market Share of Faith-inspired Health Care Providers in Africa: Comparing Facilities and Household Survey Data, copia mimeografiada, Banco Mundial, Washington, DC, 2011. 18 Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 91 37 Olson, Kerry, Zanele Sibanda Knight y Geoff Foster, From Faith to Action: Strengthening family and community care for orphans and vulnerable children in sub-Saharan Africa, Fundación Firelight, Santa Cruz, CA, sin fecha, pág. 14. 47 Para obtener más información sobre el Día mundial de oración y acción por la infancia 2010 y las iniciativas específicas por país, consúltese <www.unicef.org/ childsurvival/index_57123.html>. 38 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, When Every Child Counts: Engaging the underserved communities for polio eradication in Uttar Pradesh, India, documento de trabajo, Oficina regional de UNICEF para Asia meridional, Nepal, 2004. 48 Del Al-Baqara, versículo 233, citado en Universidad AlAzhar y Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, op. cit., pág. 18. 49 Mooijman, Annemarieke y Christine Sijbesma, “Faith in Water: Water supply, sanitation and hygiene facilities and related education in faith-based schools”, ponencia presentada en el encuentro Faith in Water, Sarum College, Salisbury, Reino Unido, 5 al 7 de julio de 2009, pág. 2. 50 Prime, Ranchor, “The Dharma of Water: Hindu water principles”, en Faith in Water, compilación de ponencias presentadas en el encuentro Faith in Water, Sarum College, Salisbury, Reino Unido, 5 al 7 de julio de 2009, pág. 41. 51 Mooijman y Sijbesma, op. cit., pág. 1. 39 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Bangladesh, comunicación personal con la oficina de UNICEF en el país, 4 de marzo de 2011. 40 Adaptado de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, La infancia y el SIDA: Quinto inventario de la situación, 2010, informe producido por UNICEF, Programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA, Organización Mundial de la Salud, Fondo de Población de las Naciones Unidas y Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Nueva York, 2010, pág. 4. 41 42 43 92 52 Schmid, B., E. Thomas, J. Olivier y J.R. Cochrane, “The Contribution of Religious Entities to Health in Sub-Saharan Africa”, estudio encargado por la Fundación Bill & Melinda Gates, informe inédito, Programa africano de recursos religiosos para la salud (ARHAP), Sudáfrica, 2008, pág. 9. Véase Goldsmith, Mirele B., “Water, Hygiene and Sanitation in Jewish Tradition”, en Faith in Water, op. cit., pág. 67. 53 Mooijman y Sijbesma, op. cit., pág. 11. 54 Tearfund, “Faith Untapped: Why churches can play a crucial role in tackling VIH and AIDS in Africa”, Teddington, Reino Unido, 2006. Citado en Iniciativa conjunta de aprendizaje sobre los niños y el VIH/SIDA (JLICA), Home Truths: Facing the facts on children, AIDS and poverty. Informe final de la Iniciativa conjunta de aprendizaje sobre los niños y el VIH/SIDA, 2009, pág. 28. Agencia de los Estados Unidos para el desarrollo internacional, “The Role of Religious Leaders and Communities in Development Efforts in Asia and the Middle East”, en USAID Issue Brief, Washington, DC, noviembre de 2009, pág. 6. 55 Mwaura, Peter y Bishara T. Mohamed, “Madrasa Early Childhood Development Program: Make a difference”, en Africa’s Future, Africa’s Challenge: Early childhood care and development in sub-Saharan Africa, compilado por Marito García, Alan Pence y Judith L. Evans, Banco Mundial, Washington, DC, 2008, págs. 389–405. 56 La resolución 46/182 de la Asamblea General de las Naciones Unidas enuncia los principios de la asistencia humanitaria, pero no los define. En los contextos de conflicto armado, violaciones de los derechos humanos y/o levantamientos civiles o políticos, la neutralidad se define como “el compromiso a no tomar partido en las hostilidades y evitar participar en controversias de naturaleza política, racial, religiosa o ideológica”. El principio de neutralidad no equivale al principio de imparcialidad, que consiste en garantizar que todas las personas que sufren reciban asistencia relacionada con sus necesidades y sus derechos, en pie de igualdad y sin que medie ninguna forma de discriminación. En términos de la Convención sobre los Derechos del Niño, la imparcialidad se vincula más estrechamente con el principio de no discriminación. Para obtener más información, consúltese la Sección de Cuestiones Humanitarias, Oficina de Programas de Emergencia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (EMOPs). Iniciativa conjunta de aprendizaje sobre los niños y el VIH/SIDA, op. cit., pág. 28. 44 Comunicado del Consejo Mundial de Iglesias de 2001, citado en Patterson, Gillian, Stigma in the Context of Development: A Christian response to the VIH pandemic, Progressio, Londres, 2009, pág. 3. 45 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Religiones por la paz y Programa conjunto de las Naciones Unidas sobre VIH/SIDA, What Religious Leaders Can Do About HIV/AIDS: Action for children and young people, UNICEF, Nueva York, 2003, pág. 8. 46 De El Mahabharata, citado en Bajaj, J.K. y M.D. Srinivas, “The Indian Tradition of Growing and Sharing Food”, en India Together, <www.cpsindia.org/art_food.html>, acceso el 29 de septiembre de 2010. 57 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Trabajar por un futuro de igualdad: Política de UNICEF sobre igualdad de género y empoderamiento de las mujeres y las niñas”, UNICEF, Nueva York, mayo de 2010, pág. 4. 58 Para obtener más detalles sobre políticas y alianzas en materia de igualdad de género, véase ibíd., págs. 11–12. 59 Marshall, Katherine y Susan Hayward, Women in Religious Peacebuilding, United States Institute of Peace, Washington, DC, 2011, pág. 12. 60 Adaptado, con la excepción de la referencia al Islam, de Religiones por la paz, Restoring Dignity: A toolkit for religious communities to end violence against women, Religiones por la paz, Programa de movilización de la mujer, Nueva York, 2009, pág. 15. El pasaje sobre el Islam está citado de Browning, Don S. y Marcia J. Bunge, Children and Childhood in World Religions: Primary sources and texts, Rutgers University Press, Nueva Jersey, 2009, págs. 174–175. 67 Declaraciones de Thoraya Obaid citadas en “A Discussion with Thoraya Obaid, Executive Director of UNFPA”, entrevista realizada por Katherine Marshall del Centro Berkley para la religión, la paz y los asuntos mundiales en la Universidad de Georgetown, 24 de noviembre de 2010, <berkleycenter.georgetown.edu/ interviews/a-discussion-with-thoraya-obaid-executivedirector-of-unfpa>, acceso el 25 de julio de 2011. 68 Abagail Nelson, Agencia episcopal de alivio y desarrollo, comunicación personal, 21 de julio de 2011 69 Paterson, Gillian (ed.), Prevención del VIH: Una conversación teológica global, Alianza ecuménica de acción mundial, Ginebra, 2009, pág. 28. 70 The Better Care Network, “Faith to Action Initiative”, <www.faithbasedcarefororphans.org>, acceso el 15 de julio de 2011. 71 Oficina del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en Senegal, comunicación personal, octubre de 2011. 72 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Acuerdos de cooperación para programas (PCA) y Acuerdos de financiación a pequeña escala (SSFA) de UNICEF con las organizaciones de la sociedad civil”, UNICEF, Nueva York, diciembre de 2009,’ (Attachment 3) pág. 38. 61 Daisy Francis, asesora sobre cuestiones de protección, Servicios Católicos de Socorro, comunicación personal, 9 de julio de 2011. 62 Adaptado de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Religiones por la paz, op. cit., págs. 45–47. 63 Concilio Nacional de Iglesias de Estados Unidos, “The Church and Children: Vision and goals for the 21st century”, declaración de políticas adoptada por la Asamblea General del Concilio Nacional de Iglesias de Cristo de Estados Unidos, St. Louis, Missouri, 11 de noviembre de 2004, pág. 4. 73 Para obtener más detalles sobre los principios rectores de UNICEF en materia de alianzas, consúltese ibíd., págs. 38–39. 74 Extractado de Center for Interfaith Action on Global Poverty, op. cit., págs. 7-8. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Monografías sobre experiencias en la elaboración de programas para los adolescentes durante los conflictos y las situaciones posbélicas”, UNICEF, Nueva York, 2004, págs. 37–46. 75 Matthew Weiner, Deán Adjunto de la Office of Religious Life en Princeton University, comunicación personal, 19 de septiembre de 2011. 76 Extractado de Sede del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, op. cit. 77 Reverendo Joel Edwards, comunicación personal, 6 de julio de 2011. 78 Reverendo Canon Dr. Gideon B. Byamugisha, comunicación personal, 7 de julio de 2011. 79 Extractado de Center for Interfaith Action on Global Poverty, op. cit., págs. 7–8. 80 Marshall y Hayward, op. cit., pág. 14. 64 65 66 Declaración de Kyoto, op. cit. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Centro de Investigación Innocenti, “The Dynamics of Social Change: Towards the abandonment of female genital mutilation/cutting in five African countries”, UNICEF, Centro de Investigación Innocenti, Florencia, 2010. Alianzas con las comunidades religiosas en favor de la infancia 93 81 Religiones por la paz, “A Guide for Building Women of Faith Networks”, Religiones por la paz, Nueva York, 2009. 87 Reverenda Rachel Carnegie, Secretaria del Arzobispo de Canterbury para el Desarrollo Internacional, comunicación personal, 26 de julio de 2011. 82 Hovey, Guy y Amjad Saleem, “Faith, Relief and Development: The Sri Lanka experience”, en Forced Migration Review, vol. 30, abril de 2008, pág. 66. 88 83 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Sudán, “Technical Briefing Paper 1: Alternative family care”, UNICEF, Jartum, agosto de 2007. La sección de Comunicación para el desarrollo de UNICEF está elaborando pautas concretas para la evaluación del conocimiento, las actitudes y el comportamiento. 89 Dado que la mayoría de las actividades se desarrolla sin que estén presentes los aliados en la defensa de los derechos de los niños (por ejemplo, debido a limitaciones en la cantidad de personal, a las grandes distancias o a la existencia de múltiples demandas concurrentes), puede resultar de utilidad incluir mecanismos comunitarios de comunicación de resultados, por ejemplo, mediante el uso de teléfonos celulares comunicados con un punto central o localmente para proporcionar a las personas que participaron en actividades respaldadas por representantes religiosos la oportunidad de compartir lo que les gustó y lo que no les gustó, además de proponer alternativas. 90 Adaptado de Grupo de Evaluación Independiente y Banco Mundial, op. cit., pág. 13. 84 Religiones por la paz, 2001, op. cit., pág. 14. 85 Adaptado de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, “Acuerdos de cooperación para programas (PCA) y Acuerdos de financiación a pequeña escala (SSFA) de UNICEF con las organizaciones de la sociedad civil”, UNICEF, Nueva York, diciembre de 2010. 86 Adaptado de Grupo de Evaluación Independiente y Banco Mundial, Sourcebook for Evaluating Global and Regional Partnerships: Indicative principles and standards, IEG-Banco Mundial, Washington, DC, 2007, págs. 75–78, <siteresources.worldbank.org/ EXTGLOREGPARPROG/Resources/sourcebook.pdf>, acceso el 7 de julio de 2011. 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