EL SOCIALISTA ■ — ■ ~ E S P A Ñ O L — O rgano de la Federación So cialista Española y portavoz en Francia de la U.S.E. • Le S o cialiste Espagnol » París, Febrero 1960 Año XIV, N° 125 M ENSUEL. DEBATE SOCIALISTA TÆn te jm b û -ic a n o Albert L m ovim iento so cialista internacional, que se re sien te por haberle sido des­ favorables las últim as c o n su ltas elec­ to ra le s en In g la te rra y A lem ania, pasa p o r u n período de viva discusión. Las ten d en cias que en el p a rtid o laborista, com o e n o tro s p a rtid o s tra ta n de re fo r­ m a r su d o c trin a sobre b ases m ás m ode­ ra d a s c o nstituyen u n m otivo de preocu­ pación, ace n tu a d a a n te la reciente revi­ sión del pro g ram a de la socialdem ocracia ale m an a que im plica el abandono del so­ cialism o, y a n te el hecho de las graves responsabilidades de la S.F.I.O. com pro­ m etid a en u n a política de abandono. E asfianoú- : CAMUS -r-jN el u m bral de este año nuevo, los refu g ia d o s españoles en F rancia acogen con consternación la n o ticia del accidente de autom ó vil que ha costado la vida a A lb e rt C am us. Todos n u estro s lectores conocen la fig u ra del g ran escrito r ; pero no es posible que « E l S ocialista E spañol » no una s u vos al general hom enaje que, con e sta triste ocasión, se rinde en el m u n d o entero ai desaparecido. . C am us m u ere m u y jo v e n : nació en 1913, e n A rgelia. S u origen (aquellas tierras africanas conservan una profunda huella, española) explica ya sus afinidades con lo nuestro. N o en vano su profesor, Jean G renier, hablaba <tf su « fie rté castillane ». Una rápida generalización, no ta n abu siva com o p u ­ diera parecer, p erm itiría id en tific a r su perfil, exp lica r su a c titiid vita l, diciendo de él que encarnaba y reunia la in teligencia fra n c e sa — su tilid a d y rigor — y el genio español — inclinación a |lo concreto, resp u esta viril a las in te rro ­ g a n tes insolubles y ang u stio sa s de là condición hum ana. Seria presuntuoso tra ta r d e resu m ir en u nas líneas escrita s a l correr de la plum a el sentido y el alcance de este hondo y a lto testim onio de nuestro tie m ­ po. E n lo esencial, fu é C am us un m o ra lista , y com o ta l perdurará. A lo absurdo de la condición hum ana (e l hom bre e s un via je ro con billete no sabe pa ra dónde y no sabe para q u é), a lo in ju s to d e e s te sile n c io de nwes> tro destino, cabe la respuesta de la fe , fá cil y a rbitraria, por cuanto consiste en explicarlo todo a p a rtir de Dios, que e s a su v e z inexplicable ; cabe la re s­ puesta nihilista, según la cual, puesto que nada tiene significación, « todo está perm itido », y cabe, en fin , u n a a c titu d m á s difícil y m á s valiente, que estriba en n u estra única certidum bre, a saber, que esta m o s en e ste m u n d o y querem os perm anecer en él ; a p a rtir d e lo cual, nos incum be fo r ja m o s u n p e rfil ético,' determ inado por el doble im perativo, d ifíc ilm e n te conciliable, de a su m ir nuestra circunstancia y de perm anecer fie le s a quienes som os. A su m ir su circu sn ta n d a , e s decir, sen tirse p ersonalm ente responsable de cuanto sucede en el m undo en que se v iv e ; p erm a n ecer fie l a sí m ism o, es decir, no dejarse enajenar ni saca r de quicio, no ya p o r los im pulsos v ile s del confor­ m ism o, pero ni siquiera por aquellos otros, m á s nobles sin duda, d e la entrega a una m ística, incluso a la d e la ju sticia . N o co n fo rm a rse con que h a ya v ic ti­ m as, pero rehusar, h a sta p a ra libertarlas, co n vertirse en verdugo. L a s im p li­ caciones e n lo concreto y a ctual de e sta d ifícil n o rm a so n lo b a sta n te visibles para que resulte in ú til explicarlas. Tam bién es de todos sabida la fidelidad de C am us a e ste doble im perativo. F ué m ilita n te e n los partidos obreros dura n te su ju ven tu d , co m b a tien te de les R esistencia, autorizado edito ria lista del « C om bat » de la liberación ; no hubo' causa generosa, en que estu viera n en entredicho la libertad y la dig n id a d del hom bre, que no despertara su palabra autorizada y prom oviera su acción efica z ; una y otra, no de vocinglero relum brón, sino h o n esta m en te encam inadas a m e­ jorar lo que criticaban, a su p rim ir lo que condenaban. S u s ú ltim o s años se han visto ensom brecidos y abrum ados por los acon tecim ien to s de su A rg e lia n a ta l ; a propósito de ellos term in ó por g uardar el m á s d ifícil, a to rm e n ta d o y sig n ifi­ cativo de los silencios ; silencio — ¡ cuán com prensible en su caso, se aprueben o mo sus c a u s a s y su s efecto s ! — que se p erm itiero n reprocharle algunos d e los que habían hecho b asta n te m en o s que él p a ra e v ita r que las cosas llegaran al punto en que ho y están. Pero si C am us fu é « l’h o m m e révolté » por todas las in ju sticia s, ningújna le hirió m á s hondo, ninguna le obsesionó ta n to com o aquella de la que es v ic tim a , desde hace vein te años, el pueblo español. C am us fu é ju e z y p a rte en este pleito. Ju e z por su vocación d e m o ra lista ; p a rte por su a m or a todo lo nuestro. E vocar aquí lo que hizo por nosotros sería, por exten so , im p o sib le ; desde la ayuda al m á s m odesto refugiado, h a sta otras, ta n concretas y m ás im portantes, que conviene silenciar ; desde « L ’é ta t de siège », la m á s lúcida y despiadada condena del fascism o, cu ya acción, com o por casualidad, se sitú a en E spaña, h a sta su ruidosa dim isión de la U N E SC O , cuando e ste sedicente centro de cultura perdió, ju n to con la decencia, todo derecho a u su rp a r dicho título, al a d m itir en su seno a la p artida (que n o p artido) fra n q u ista . S e nos disculpará si nosotros recordam os a n te todo al hom bre que hoy p er­ dem os com o al prim ero y a l m e jo r de los republicanos españoles. D am os el pésam e a su señora, a m ig a n u e stra com o él. N o se lo dam os a F rancia, porque C am us nos pertenece tam bién, y esta m o s ta n d e luto com o su s com pa trio ta s. Pero dam os el pésam e sobre to d o a la libertad, a la dignidad y a la decencia. M udo Cam us, resultará desde hoy m ucho m á s fá cil, por ejem plo, a un prim er m agistrado de la dem ocracia am ericana tra sp a sa r e l um b ra l de la g ran ergástula que es E spaña para estrech a r la m a n o del carcelero m a yo r. H J . S-B . E sa sin g u lar concepción del socialism o que tiende a d e sv irtu a r su verd ad ero ca­ rá c te r, es n a tu ra l que inquiete a m uchos socialistas nuesto que, de p ro sp erar, pue­ de ten e r fatales consecuencias p a ra el m ovim iento obrero. Así se explica que la In tern a cio n a l h aya consagrado u n a re u ­ nión e x tra o rd in a ria ai exam en de este im p o rta n te problem a que sin d u d a se rá d iscu tid o m ás p ro fu n d am en te en el Con­ sejo que en abril se re u n irá en Israel. E sa care n cia socialista, m o tiv ad a p o r la p rá ctic a de un oportunism o concebido con m ira s a d isp u tarle s la clientela electoral a las fuerzas con serv ad o ras y clericales, que h a conducido a los socialistas alem a­ nes a in c lu ir incluso en su p ro g ram a la colaboración de la Iglesia y del E stado, es sin d u d a la razón principal de que m uchos obreros y dem ó cratas se hayan a le jad o y se alejen del socialism o, aunque n o es m enos cierto que las causas de dicho alejam ien to están , tam bién, en el abuso que se hace de un « socialism o » que p rom ete la felicidad de la h u m an id a d m ed ia n te la d ic ta d u ra del p a rtid o único. C ierto que hay que ren o v ar los m éto ­ dos de lucha, e incluso los p rogram as inm ediatos, a d ap tán d o lo s a las c irc u n s­ tan c ias y a las tran sfo rm a cio n e s de nues­ tr a época, pero renovarlos no con la idea de no a s u s ta r a los ad v ersario s de la cla se obrera, sino con la idea de g a n a r la confianza de é sta, com o tra ta n de h a c e r los lab o rista s identificados con B evan, com o el p a rtid o socialista italian o y com o el p a rtid o socialista autónom o en F ra n c ia , es decir, inspirándose en las esencias n a tu ra le s del socialism o que sin p e rd e r de v ista las conquistas in m e d iatas p a ra el c o n stan te progreso de la H u m a ­ n idad, asp ira a la com pleta em ancipación de todos los p ro d u cto res m an u ales e in te ­ lectuales m ediante la conversión de las clases sociales en u n a sola de tra b a ja d o ­ res, dueños del fru to de su trabajo. El socialism o es la concreción de la lib ertad que a sp ira a la reorganización del cuerpo social sobre la base de la m ás pu­ ra dem ocracia. Sólo teniendo p resente esta v o lu n tad de tran sfo rm a ció n rev olucionaría y sirviéndola sin desm ayos y con h o n ra ­ dez es com o el socialism o podrá afia n ­ z arse en la conciencia de la clase o b rera y en el m undo. L as v e rd ad e ras c au sas pues de su es­ tan c am ien to n o so tro s las vem os e n el a bandono de los principios que son su ra z ó n de se r. P o r eso e n el d e b ate sociar lis ta e n ta b lad o , com o e n la acción m ili­ ta n te , h e m o s de e s ta r p re sen te s to d o s los so c ialistas que no hem o s d e ja d o d e c re e r e n el id eal, p a ra d e m o s tra r y h a c e r com ­ p re n d e r que el socialism o d e m o c rático c o n stitu y e la só lid a g a ra n tia del presente y la ú n ic a esp e ra n z a p a ra el porvenir. VIDA DEL PARTIDO BURDEOS E n los locales del p a rtid o so cialista au tó n o m o de B u rd eo s tuvo lu g a r u n ani­ m ad o coloquio p re sid id o p o r el com pa­ ñ e ro C añas. F u e ro n d e b atid as e n tre los re u n id o s d ifere n te s cuestiones de in te rés p a ra la p olítica española, así com o otros tem a s so c ialistas de a ctu alid ad . Al final de la reu n ió n se hizo u n a co lecta p a ra E L SOCIALISTA ESPAÑOL. CARACAS D u ra n te s u e sta n c ia en la c ap ital de V enezuela el c o m p añ ero Alvarez del Vayo in te rv in o en u n im p o rta n te m itin de soli­ d a rid a d re p u b lica n a que congregó a u n a in m e n sa m u ltitu d de c o m p a trio ta s y de venezolanos. E l c o m p añ ero d el V ayo apro­ vechó tam b ién e sta v isita p a ra o rg a n iz ar e n C a rac as la sección d e la U nión Socia­ lis ta E sp añ o la, d e cu y a sección se h a ele­ gido p re sid e n te al c o m p añ ero M u rria y se c re ta rio a V icente B olinches. PARIS L a A grupación reg io n al de P a rís celebró asa m b lea o rd in a ria e n la que e l C om ité dió c u e n ta d e s u actu ac ió n que fu é d is­ c u tid a y o probada. La asa m b lea se ocupó tam b ién del periódico de la F ederación y de pro b lem as políticos y sindicales, a d o p ta n d o u n a s resoluciones cuyo estu d io y trá m ite confió al Com ité. P o r o tr a p a rte el C om ité de A grupación in siste a c e rc a de los m ilita n te s p a ra que c o n te sten lo m á s rá p id a m e n te posible a c a rta s y c irc u la re s, a sí com o les ru eg a com u n iq u en los cam bios de dom icilio en c u a n to ésto s se produzcan. D espués de la a y u d a c o n stan te p re sta d a a F ra n c o p o r los E stad o s U nidos, p o r Ale­ m a n ia occid en tal y, en m e n o r cuan tía, p o r o tro s países o grupos de in te reses, e ste C om ité eleva su m á s en érg ica rep u lsa c o n tra la a c tu a l in ten sificació n d el co­ m erc io e n tre la U nión Soviética y la E s­ p a ñ a del C audillo. A este efecto debem os s e ñ a la r que, según inform aciones debida­ m e n te c o n tro la d a s, la U.R.S.S. acaba de h a c e r lle g a r a l G obierno de M a d rid 300 tra c to re s , a p a rte o tra s m erc a n c ía s diver­ sa s, g ra c ia s a la a ctiv id a d de la delega­ ción com ercial soviética en la c ap ital es­ pañ o la. N u e s tra reprobación engloba a cu an to s, se a n c u ales fu e re n la s razones a d u c id a s p a ra ello, con trib u y en al fo rta ­ lecim ien to o al so ste n im ie n to del régim en de opresión fra n q u is ta . AI m ism o tiem po, h abiendo sa b id o que, e n la re gión d e B ilbao se e stá n fab ri­ can d o co h etes a lem an es, d e stin a d o s a la R epública F ed eral y fab ricad o s b a jo la direcció n de su s técnicos, co h etes espe­ cia lm e n te acondicionados p a ra la g u erra, lla m am o s la atención de la opinión pú­ blica p a ra s e ñ a la r la re sp o n sa b ilid ad del fra n q u is m o en el re a rm e de una n a ció n a la c u al los tra ta d o s de paz im ­ piden c ie rta s fabricaciones bélicas. MENSAJE DE SIMPATIA A BEVAN El C om ité de la F ederación envió al P a rtid o L ab o rista el siguiente m en saje : « La F ed eració n S ocialista E sp añ o la en F ra n c ia h a acogido con e x tra o rd in a ria sa tisfac ció n la n o tic ia de la m e jo ría del e sta d o de sa lu d del co m pañero A neurin B evan a quien enviam os, p o r v u e stra m e­ diación, el testim o n io de n u e s tra fra te r­ n a l sim p a tía , a la vez que n u e stro s votos p o r su p ro n to y to ta l re stab lec im ie n to ». HA MUERTO FEDERICO ADLER ED ERICO A dler, q uien fué se c re tario de la In tern a c io n a l Socialista d u ra n te vario s años, h a m u e rto en Z urich, a la e d ad de 81 años. N acido en V iena e n 1879, A dler hizo su s estu d io s de física y de m atem áticas en la U niv ersid ad de Z u rich , c o n sag rán d o se después a las activ id ad es políticas. M ilita en el p a rtid o so cialista suizo, y e n 1911 desem peña el cargo de secretario del p a rtid o so cialista a u stría co . A dversario re su elto de la particip ació n de A ustriaH u n g ria en la p rim e ra g u e rra m u n d ia l, F ederico A dler, en octu b re de 1916, com ete el a te n ta d o que c u e sta la vid a a l conde S tu rg h , p rim e r m in istro a u stríaco . Conde­ n a d o a m u e rte se le c o n m u ta e sta pena por 18 años de reclusión, de los que sólo cum ple dos, puesto que fué p u e sto en lib e rta d el 1 de noviem bre de 1918. E n tre la s dos g u e rra s F ederico A dler m ilita en las filas del p a rtid o socialista a u stría c o . C uando e sta lla la se g u n d a g u e rra m u n d ia l se tra s la d a a N ueva York. L a g u e rra te rm in a d a vive d u ra n te algún tiem po en B ru selas, fija n d o definitiva­ m en te s u re sid en c ia e n Z urich d o n d e m u rió el 2 de enero últim o. F ed erico A dler e ra a n te todo u n socialista de acción p a ra quien la fidelidad a los principios lo e ra todo. Su reprobación del opo rtu n ism o claudicante, la m a n e ra de concebir u n a a ctu ació n sin debilidades fre n te a los im p e rialistas belicosos de su época y fre n te a los a d v ersa rio s d e la clase tra b a ja d o ra , su fe en la d em ocracia so cialista so n los fu n d a m e n to s d e u n a c o n d u cta que le conduce al a te n ta d o co n tra el conde S tu rg h , de cuyo suceso, y a olvidado, A lfredo R osm er, en el « M ovim iento o b re ro d u ra n te la p rim e ra g u e rra m u n d ia l », escribe el siguiente p a sa je : « La m u e rte del conde S tu rg h provoca, en el m u n d o e n te ro , u n pro fu n d o estupor. E ra el p rim e r a te n ta d o político com etid o después d e e sta lla r la g u e rra e hizo el efecto de u n a bom ba. Lo m á s d e sc o n ce rta n te es que fué perp etrad o en A u stria y que s u a u to r fu e ra u n social-dem ócrata, F ederico A dler, h ijo del líd e r m ás conocido de la social-dem ocracia a u stría c a . ¿ A qué m óviles h ab ía obedecido A dler p a ra c o m e ter u n acto ta n c o n tra rio a la s d o c trin a s y a las p rá ctic a s de la sociald e m o c rac ia ? T al e ra la cu estió n que se p lan te ab a n e n to d a s pa rte s. Del lad o d e la A lianza se a p re su ra n a d a r la explicación m ás fácil y la m ás c onform e con los sen tim ien to s p a trió tic o s del m o m en to : se tra ta , dicen, d e u n a p ro te s ta pública solem ne c o n tra la política de los gobernantes a u triaco s, p rim eros responsables de la d eclaració n del conflicto. E n los m edios social-dem ócratas se sugiere la irresp o n sab ilid ad , u n a crisis sú b ita d e a b erra ció n m en ta l provocada p o r las m iseria s de la g u e rra , de la que A dler e ra testim onio im potente, sin o tra significación política. L a a c titu d p o lítica d e F ederico A dler n o ay u d a tam poco a d e sc u b rir la s v e rd a d e ra s razo n es de s u acto. A ntes de la g u e rra n o p a rticip a acti­ v am en te e n la vid a de la social-dem ocracia a u stría c a ; viv ía en Suiza, hacien d o su c a rre ra u n iv e rs ita ria e n Z u rich . E n tra en V iena en Julio de 1914, haciéndose c arg o de la dirección d e la re v ista te ó ric a del p a rtid o « E l Com bate ». D urante la g u e rra , la social-dem ocracia a u stría c a p a rec ía seg u ir dócilm ente a la m ayoría de la social-dem ocracia a le m an a , y la oposición que p u d iera e x istir n o se m an i­ fe sta b a públicam ente. F ué n e ce sa rio que lle g a ra el proceso p a ra conocer la v e rd ad . Ante su s jueces, F ed erico A dler expone c la ra y sim plem ente las razones que lo h a b ía n - conducido a e je c u ta r a l je fe del gobierno. E l conde S tu rg h e ra el blanco, m ás a quien se a p u n ta b a e ra a la d irección social-patriota del p a rtid o so cialista au stría co . E n A u stria m á s que e n o tr a p a rte , el a te n ta d o h a b ía c au sad o asom bro y em oción. « Acto de u n loco », se a p resu ra b a n a d e cir y a escrib ir ; pero en m enos de u n a se m a n a la situ ac ió n h abía c am b iad o p o r en tero , la fo rm ació n de u n nuevo gobierno, y sin d u d a tam b ién la reflexión — la m ay o ría estab a n can sad o s d e la g u e rra y se deseaba a rd ie n te m e n te la paz — h a b ía n provocado u n cam bio de la opinión. Así, e n el proceso, el fiscal se lim ita a u n a acusación ate n u ad a , cuyo a rg u m e n to principal es que u n a p ro lo n g ad a expatriación h a b ía hecho p e rd e r a F ed erico A dler el se n tim ien to d e la p a tria ». « L a b u rg u e sía a u s tría c a no es p a trió tic a, replica Adler, sino nacio n alista. Y hem o s v isto a so cialistas plegarse a la política im p e rialista de la burguesía. E n el liceo — p rosigue A d ler — h e ap ren d id o que el m ay o r de todos los pecados, el pecado c o n tra el e sp íritu hu m an o , es el m ás frec u e n te en A ustria. Fué el estado d e e sp íritu de M e tte m ic h en el p asado, y hoy es el de ese L uger quien dice : « ¿ P o r qué el ho m b re h a de te n e r n e cesid ad de u n p ro g ram a ? Todo en política no es m á s que negocio ». S i q ueréis sa b e r qué es lo que m e h a conducido aquí, es el hecho de que ese e sp íritu de m e n tira h a p en etrad o en m i partid o , representado p o r el d o c to r K a rl R e n n er, quien ha' in tro d u c id o e n n u e stro p a rtid o el esp íritu d e traició n h a c ia n u e stro s principios, y los so cialistas p a sam o s p o r la gran v ergüenza de se n tir que eso pese sobre n o so tro s. Y A dler a ñ ad e : D u ra n te esta crisis, h e tra ta d o siem pre p o r m i p a rte d e d eso lid arizarm e, de situ a rm e en opo­ sición con quienes h a n traicio n a d o los fu n d a m e n to s de n u e stro partid o . H e ahí la s c au sas v e rd a d e ra s d e m i acto. F u é u n a p ro te s ta — u n a de las p ro testa s — c o n tra e sa m e n tira que se in filtró en n u e stro p a rtid o haciéndole p e rd e r to d a fra n ­ queza, to d a h o n e stid a d p a ra consigo m ism o ; n o se tr a ta m á s que de e sto y eso es lo que m e h a c onducido aquí... » « ...Es cierto que yo qu ería h a c e r u n a d em o stració n p o r u n a paz sin indem ni­ zaciones de g u e rra y sin anexiones. H e querido h a c e r u n a dem ostración en favor de la tác tic a revolucionaria. P orque he sido u n revolucionario d u ra n te to d a mi vida. H e c o n sid erad o la política com o u n m ed io p a ra lle g a r a la revolución y no la revolución com o p u ra fra se de b a ja política. Desde que pienso p olíticam ente he puesto to d as m is esperanzas en los fru to s de u n a g u e rra de clases, que existe tam b ién en e ste m undo... No im p o rta que sea In g la te rra o A lem ania quienes lleguen a te n e r la hegem onía del p o d e r m u n d ia l, o tra s g u e rra s seg u irán , m as la lu ch a de clases que sostiene la In tern a cio n a l e stá p o r encim a de todo eso puesto que de ella depende el p o rv e n ir de lo s pueblos, la id e a de la h u m an id a d . » A dler te rm in a su d escargo cita n d o y com en tan d o el p ensam iento de Goethe, según el c u al « quien e n tiem po de paz d esea d e nuevo la g u e rra pierd e p a ra siem pre to d a esperanza ». L a conclusión de e ste d ra m a político que su b ra y a la p e rso n alid ad de F ederico A dler, e stá en la breve declaración fin al del proceso, en la que dice : « Soy u n a d v e rsa rio de todo a sesin ato , lo que explica la s d ificultades y la re p u g n an cia que he tenido que v e n ce r p a ra llev ar a cabo m i acto. P ero vivim os en u n a época de b a rb arie que nos fu e rz a a m a ta r h o m b res ». F Salidas de tono ^ A io t ic ia t o espahoU • Según la re v ista « N ew sw eeh », el p re sid en te E isenhow er e n la s 18 h o ra s que pasó en E sp añ a fué im presionado : p or el conocim iento que tiene el gen eral F ra n ­ co de los asu n to s e x tra n je ro s ; porque n o hay clim a de m iedo en E sp a ñ a ; p or la belleza de M adrid, y porque to d o el m u n d o le h abló librem ente. Lo que, p o r lo visto, n o le im presionó al presidente E isen h o w er fu e ro n las m e­ d id as policíacas que p re p a ra ro n su v iaje precedido de 11.000 detenciones preventi­ vas, n i las m anifestaciones y m en sajes de p ro te sta que le lleg aro n de to d as partes. N o h a y p e o r so rd o que el que n o quiere oír. • E l g o b ernador de Logroño n a m an i­ festad o h a b er sido ya a d ju d ic ad a s las o b ras del c an al de alim en tació n del p a n ­ tan o « González L acasa », y que la « Di­ rección g eneral de P risiones h a facilitado u n batallón de tra b a ja d o re s que h a rá n posible su rá p id a realización ». B atalló n de tra b a ja d o re s a la m an era nazi, com o los que d isfru táb a m o s en F ra n ­ cia bajo el régim en de Petain. • E l d ip u ta d o lab o rista E d w ard s, que recientem ente fué d etenido p or la policía de M adrid, d u ra n te once h o ra s, cuando fué con el propósito de a s is tir com o ol> se rv ad o r al consejo de g u e rra celebrado c o n tra 17 jóvenes españoles a cusados de rebelión, h a declarado que la em b ajad a fra n q u ista en L ondres tiene un servicio en carg ad o de v ig ila r a los exilados cons­ tan te m e n te , así com o tam bién a o tra s per­ sonas conocidas p o r su h o stilid a d al íégim en fran q u ista. A nálogas m anifestaciones hizo tam bién con a n te rio rid a d M r. T horpe, diputado liberal inglés, aunque es bien sabido que los espías fran q u ista s vienen a ctu an d o desde antiguo b a jo la protección de sus em bajadas. R ecuérdense los servicios prestad o s en P a rís p o r el in sp e cto r U rra ca , a quien se debe la detención de Com panys, Zugazagoitia, Peyró y o tro s exilados que luego fu e ro n fu silad o s en E spaña. • Una n o ta publicada p o r el Gobierno republicano español en el exilio com en­ tan d o la e n tre v ista de E isen h o w er con el d icta d o r F ranco, dice que hay que robus­ tec er n u e s tra resolución de c o n tin u a r lu­ ch an d o p o r la lib e rta d y el derecho del pueblo, prosiguiendo así n u e s tra obra, la cual n o deberá s e r p rincipalm ente crítica, sino fu n d a m e n ta lm e n te c o n stru ctiv a y co­ lectiva. • L a re sp u esta de Ju a n X X III a un m ensaje del g eneral F ran co es re sa lta d a e n la p re n sa fran q u ista con este títu lo : « E l catolicism o ro b u sto de E spaña — dice el P apa — nos proporciona p articu ­ la r consuelo y gozo ». P a ra que luego se diga que la Iglesia n o e stá del lad o de los débiles y oprim i­ dos. • E l boicot c o n tra « La V a n g u ard ia », cuya reso n an cia h abía llegado h a s ta el e x tra n je ro , sin que la p ren sa de E spaña d ije ra u n a palab ra, h a sido p o r fin alu­ dido p or el in fo rtu n a d o G alinsoga con la publicación de u n articu lo sollozante en el que niega los insultos que se le atrib u y en y que son la cau sa del boicot que h a cos­ tad o al periódico la b a ja de m á s de 15.000 abonados. N o v a lía la pena de que el señ o r Ga­ linsoga se m o stra ra ta n a rro g a n te e n sus m anifestacio nes si fin alm en te h ab ía de te rm in a r haciendo p iruetas. • E l consejo de g u e rra que se h a ce­ lebrado hace unos días en M ad rid c o n tra tre s españoles y un fran cés, es el sexto CARDENAL DESTEMPLADO Y EMBAJADOR IRRITADO E L c ard e n al O ttaviani h a puesto el g rito e n el cielo p orque el p re sid en te de la R epública ita lia n a , se ñ o r Gronchi, se propone i r a M oscú. Y, con el p en sam ien to fijo en los h o m b res del K rem lin, se p re g u n ta b a e n u n se rm ó n si u n católico pitgde e stre c h a r la m an o de u n tira n o . La re sp u esta es bien sencilla. S u em i­ nencia n o tenia m á s que d irig ir la m i­ ra d a h acia E spaña. Allí tiene al d icta d o r F ra n c o a quien la Iglesia no sólo e strec h a la m ano, sino que le condecora con la O rden de C risto y lo p asea b ajo palio en la s procesiones com o a u n dios. Y, a d em ás, ¿ quién p ro teg ía a l ra c ista c ro a ta A nte P anvelich, refu g iad o e n u n convento y re cien te m e n te fallecido en E spaña, quien en m enos de c u atro años e xterm inó a un o s 500.000 servios, 46.000 ju d ío s y 25.000 zíngaros ? P ero los je ra rc a s de la Ig lesia tienen co stu m b re de v e r la p a ja e n ojo a jen o sin ap ercib irse de la viga que lle v a n en el suyo. Así se explica que, c u a n d o todo el m u ndo, ansioso de u n a ex isten cia pa­ cífica, cobra confianza a n te la p erspectiva d e u n a inteligencia h u m an a , el se c re tario del S a n to Oficio salga con su v iru le n ta adm onición h o stil a u n e n te n d im ien to en­ tre los pueblos, y que, al m ism o tiem po, el ó rgano del V aticano, el « O sservatore R om ano », se d e sa te e n a n atem a s c o n tra el socialism o. E s irrem ed iab le que la Iglesia, v incula­ d a p o r n a tu ra l vocación a la política y a las fo rm as de gobierno m ás re accio n arias, tom e a ctitu d e s com o e sta de a h o ra que tiene a ire s d e u n a nueva c ru zad a, ponien­ do de m an ifiesto , u n a vez m ás, su s a n a ­ cró n ic as concepciones teocráticas. L as am biciones te rre n a le s de la Iglesia n o tie n e n lím ite. N o co n te n ta con pene­ t r a r e n la fam ilia, en la escuela, en la p re n sa, en la ra d io y e n la vid a de los pueblos influenciados p o r ella, se a rro g a , tam bién, el derecho de d ic ta r pública­ m en te la c o n d u cta política a se g u ir a los h om bres d e E stad o católicos. L a co sa e stá c la ra : su opción p o r un com bate clerical en p rim e ra línea, ren u e­ v a v iejas querellas que se c reían cad u ­ cad as. E s u n sín to m a y u n a a d v erten c ia que debe te n e r su ju s ta c o rrespondencia del lad o de todos los que n o se sien tan dispuestos a som eterse a la tu te la de u n a potencia que, prom etien d o la felicidad ce­ lestial, es aquí abajo alia d a e in stru m e n to de los rico s y de los déspotas, la s dos plagas m ayores d e la H u m an id ad . OCOS días después de h a b e r denun­ ciado la re v ista « B ohem ia », de La H abana, u n a sin g u la r m an io b ra polí­ tic a del e m b a jad o r fran q u ista , se ñ o r Lojen d io , u rd id a p a ra a p o rta r la adhesión de los frailes españoles residentes en Cuba al g eneral F ranco, el presidente Fi­ del C astro, e n u n a s m anifestaciones tele­ v isad as, hizo alu sió n a la com plicidad del m ism o e m b a jad o r en fa v o r de enem igos del gobierno cubano. ¿ Cóm o se atrev e Fidel C a stro a tal a cusación ? P a ra el re p re se n tan te del C audillo, que es uno de los productos m ás selectos del despótico régim en fran q u ista, eso es intolerable. Y, con m enosprecio de los finos m odales de la diplom acia, el se ñ o r L ojendio se in tro d u ce en el estudio de la televisión cubana, do n d e e stá h a ­ blando Fidel C astro, con la pretensión de con trad ecirle. ¿ De qué se inso len ta el e m b a jad o r fra n q u ista ? ¿ Acaso n o son conocidas de todo el m u n d o las afinidades y las connivencias del fran q u ism o con los dic­ tad o re s reaccio n ario s en pie o d e rrib a ­ dos de A m érica L atina y de o tra s la titu ­ des, así com o los ascos que siente hacia la revolución cu b an a ? A cusar a F ranco o a su s servidores de com plicidad con los a d v ersa rio s del gobierno de Fidel Cas­ tro y del pueblo cubano no es m ás que c a n ta rle las verd ad es al franquism o. L a a c titu d del irac u n d o e m b a jad o r no sólo le h a valido su expulsión in m ed iata de Cuba, sino que h a servido, adem ás, p a ra que la opinión cubana d ije ra públi­ cam ente, en u n a m anifestación im ponen­ te, su aversión c o n tra la d ic ta d u ra de F ranco. E sa b a n d era republicana que los m ani­ fe sta n te s de L a H ab an a izaron en el balcón de la em b a jad a fra n q u ista es el sím bolo de un o s derechos abolidos en E sp a ñ a desde que el general F ranco u su r­ p a el poder. E sos derechos dem ocráticos ios españo­ les querem os reivindicarlos p a ra que los re p re se n tan te s de n u e stro país lo sean de v e rd ad , y p a ra que e n nom bre de la ver­ d a d e ra E sp a ñ a se re h ag a n u n o s lazos de a m ista d que sean a la vez fe cu n d a coope­ ració n h a cia el progreso. E stam o s convencidos de que el testim o­ nio de so lid arid a d republicana de Cuba n o q u e d a rá sin eco. O tras dem ostraciones de sim p atía al pueblo español llegarán sin d u d a de las repúblicas hisp an o am erican as que, com o n u e stro país, conocieron los u ltra je s de la opresión. ju icio c o n tra p ersonas a cu sad a s de pre­ p a r a r la h u eg la del 18 de ju n io que no llegó a te n e r efecto, lo que no h a sido inconveniente p a ra d ic ta r sentencias en­ tre las que fig u ra u n a de 23 anos de prisión. yW W W VSAAAAAAAAAA/VW * • La p re n sa anu n cia que p a ra septiem ­ b re irá a E sp a ñ a el circo de M oscú. Con p e rm iso del c a rd e n a l O ttaviani. • A gradeciendo el hom enaje que los republicanos españoles le trib u ta ro n , en ocasión de su reciente v isita a Venezuela, el P re sid e n te de México, S r. López M ateos, d ijo : « U stedes saben m uy bien que la política de México es inflexible e n c u an to a no reco n o cer el régim en de F ranco, pues sea cual sea el sen tim ien to de u n m an d a tario , y el m ío es bien conocido, lo que im pera es el c rite rio y deseo del pueblo m exi­ cano, el cu al es el m ás solidario de todos con ustedes, porque sien te com o propia la c au sa rep u b lican a ». Directeur-Gérant : JORGE MORENO. Société P a risien n e d 'Im p ressio n s, 4, ru e S au ln ier, P a ris 9* P q N uevam ente hem os de d irig irn o s ai <,n u e stro s am igos y com pañeros p ara re-i A cabar de todos ellos u n a solidaridad i 1ique nos es indispensable. i EL SOCIALISTA ESPAÑOL no cuen-i ( t a con o tro s re cu rso s que las a p o rta -< ciones v o lu n ta rias g ra cias a las c u a le s1 h a podido a se g u ra r su aparición h a s ta 1 ah o ra. Si hoy re itera m o s en este lia-1 a ta m ie n to la in tensificación de la ayu-1 d a económ ica en fa v o r de n u e stra pu-' blicación es precisam ente porque nos e n co n tram o s bien necesitados de ella y, adem ás, porque estim am o s que la, c o n tin u id ad de n u e stro portavoz puede, s e r ú til a la lu ch a que tenem os em-, p e ñ ad a c o n tra la d ic ta d u ra y a las, id ea s so cialistas que defendem os. ( A todos los sim patizantes, a los co-i rresp o n sales, a los com ités de las agru-i paciones y a los m ilita n tes en general! les ex h o rtam o s a que se esfuercen pon a p o rta r su apoyo m ate ria l al perió-i dico. i I Los donativos, a E L SOCIALISTA! ESPAÑOL : CC postal, P arís, núm ero i 1286183. ( yVWWWVAAAAAAAAAAAAAA.' PRO Y CONTRA La colonización de nuestro tiempo per Elena de la Souchère A in d u s tria esp añ o la sigue p rotegida hoy e n día, e n la m ay o ría de los ca­ sos, p o r con tin g en tes o aran c ele s, lo cu al le proporciona u n plazo p ru d en cial p a ra re n o v a r su s in stala cio n es y colocar a su pro d u cció n en línea con los dem ás países d el occidente. P e ro cabe te m e r que las restriccio n es de c réditos, la c o n tra c ­ ción del p oder adquisitivo de la m asa c o n su m id o ra y la p re v ista dism inución de las im p o rtacio n es de m aq u in a ria s, hag an im posible la n ece sa ria renovación técnica. Si no in te rv ien e en brevísim o plazo una m o dificación ra d ic a l de las n o rm a s eco­ n ó m icas, se m a lo g ra rá el plazo de adap­ tac ió n concedido ai país por los o rg a n is­ m os europeos ; y el d ía e n que E spaña ten g a que c u m p lir con sus obligaciones d e m iem bro de la O .E.C.E., h acien d o ex­ tensivas a to d o s los sectores de la pro­ d u cción la liberalización de las im p o rta ­ ciones y re b aja de las ta rifa s a ran c ela ­ ria s, la s e m p resas n acio n ales con sus a ju a re s c a d a vez m á s a n tic u ad o s y sus condiciones de tra b a jo antieconóm icas, re s u lta rá n incapaces de re s is tir e n su pro­ pio m e rc a d o la com petencia d e la s m er­ can c ía s e x tra n je ra s. E se día, las quiebras y suspensiones de pagos que se h a rá n exten siv as a todos los secto res de la in ­ d u s tria n acional tra e rá n com o consecuen­ cia la rá p id a ex ten sió n d el p a ro forzoso. P o r o tr a p a rte , a n te s del vencim iento d el plazo se ñ a la d o p o r la O .E.C.E., las e m p resas nacionales te n d rá n que enfren­ ta rs e con u n a com petencia e x tra n je ra n a ­ c id a e n tie rra española, g ra cias a las leyes recién p ro m u lg ad as con objeto de a tra e r las inversiones e x tra n je ra s. Sabido es, pues, que los portavoces de la O.E.C.E. exigieron la abrogación de las leyes fa­ lan g ista s lim ita n d o las ap o rtacio n es ex­ tra n je ra s al 25 */% del capital de las em ­ p re sas españolas objeto de las inversio­ nes. E n ese aspecto, las exigencias e x tra n ­ je ra s c o incidían con los deseos y necesi­ d ad es del equipo gubernativo. Los vario s aspectos de la nueva política económ ica del régim en re su lta n , pues, archi-intrincados. L a adopción de u n plan de a u ste ­ rid a d en u n n ais su b d e sa rro lla d o que está concluyendo la p rim e ra fa se de su pro­ ceso de in d u stria liz ac ió n , significa en re a ­ lid a d u n a to m a de conciencia por las ca­ pas d irig e n te s de la im posibilidad de llev ar a d elan te su p ro g ram a de desarro llo in d u stria l sin u n a previa m odificación de la e s tru c tu ra ecónom ico-social ; y m ien­ tra s c o n tin u e en el p o d e r el a ctu al equipo gubernativo, q u e d ará d e sc a rta d a las hipó­ tesis de cu alq u ier re fo rm a que pueda per­ ju d ic a r los in te reses creados. A hora bien, la re n u n cia im p lícita al au to -d e sa rro llo im plica lógicam ente el lla m am ien to a las inversiones e x tra n je ra s. E n el o rd e n in te rio r, las nuevas em presas c o n stitu id a s con la p a rticipación del ca­ pital e x tra n je ro d a rá n sensación de acti­ vidad y lim ita rá n la extensión del paro forzoso, ofreciendo nuevos destinos a los o p erario s desocupados. E n el o rd e n exte­ rio r, el déficit crónico de la balanza de com ercio q u e d ará com pensado en p arte, en los p rim e ro s años venideros, con las a p o rtacio n es de d iv isas de los inversio­ n ista s e x tra n je ro s. S abido es que en el m es de diciem bre de 1958, u n p rim e r decreto-ley au to rizó el estab lecim ien to en tie rra h isp an a de so­ c ie d ad e s p e tro lera s e x tra n je ra s, en cuyo capital no fig u rab a nin g u n a participación española.. A fines d e la p rim a v era , el IN I em pezó a v en d er a sociedades e x tra n je ­ ra s sus p articipaciones en e m p resas de p referen te in te rés económ ico c re a d a s con c réd ito s e statale s. Siguen oponiendo obs­ tác u lo s a p a re n te s a la colonización eco­ L n óm ica de E sp a ñ a los decretos-leyes del pasad o m es de ju lio re g u la n d o las inver­ siones de cap ital e x tra n je ro en las em ­ presas nacionales. Con a rre g lo a esos textos, la participación e x tra n je ra no de­ be exceder del 50 ’/ t del cap ital de d ichas sociedades y el derecho de tra n sfe re n c ia de beneficios ai e x te rio r queda lim itad o al 6 •/• a n u a l del capital invertido. P ero las em presas calificadas de p referen te in­ terés económ ico por acuerdo del C onsejo de M inistros p o d rá n a d m itir capitales e x tra n je ro s sin lim itació n alg u n a y goza­ rá n del d erech o de tra n sfe re n c ia a l exte­ rio r de su s beneficios sin lim itaciones c u an tita tiv a s, lo cu al significa que cu al­ q u ier sociedad e x tra n je ra que cuente en­ tre los m iem bros de su consejo de a d m i­ n istrac ió n a u n o o vario s je ra rc a s de la situación, conseguirá la calificación de em p resa de p referen te in te ré s económ ico y e sta rá e n condiciones de e x p o rta r la to ta lid a d de sus beneficios en concepto de u tilid ad e s o re serv as. V arias em presas inglesas, fra n c e sa s y estad o u n id en ses es­ tán esp eran d o ya el re su lta d o de las ges­ tiones iniciad as con objeto de conseguir ese régim en privilegiado, p a ra tra s la d a rs e a E sp a ñ a con su capital, su s a ju a re s, téc­ nicos y c u a d ro s de m ando. Lo que Ies in te resa es la perspectiva de u n ir las ven­ ta ja s del bajo nivel de los jo rn a le s espa­ ñoles con los de la producción m o d ern a e n serie p a ra re b a ja r su s costos, lo cual h a de tra d u c irs e en u n in crem en to de las ventas y beneficios. L as posibilidades de v e n ta en el in te­ rio r q u e d ará n lim ita d a s por las escasas fa cu ltad es ad q u isitiv as de la m asa consu­ m id o ra. P ero no c u en tan con el m ercado español. E n el discu rso p ronunciado el 29 de ju lio a n te las lla m ad a s « C ortes del Reino », declaró el propio S r Ullas'.res : « Los em p resario s e x tra n je ro s v en d rán sobre todo a e x p o rta r ». De m odo que en E sp a ñ a no q u ed ará n a d a : n i productos ni beneficios. B a sta e ch a r un vistazo a las R epúblicas h isp a n o a m e ric a n a s p a ra p rever el resu l­ tad o de dichas m edidas. L a m ay o r pa rte de ellas su fre n a n u alm en te verdaderos d e rra m e s h em orrágicos de divisas. Las sociedades estad o u n id en ses establecidas en su s respectivos territo rio s perciben be­ neficios que alcan zan el 14 o el 20 '/% del capital invertido, de ta l fo rm a que a los 15 o 20 años de in ic ia r sus actividades y habiendo recobrado c u atro o cinco veces el capital invertido, siguen exportando c u an tio sas u tilid ad es. Con u n a balanza de com ercio siem pre favorable, se c ie rra to­ dos los años la balanza de pagos de esos in fo rtu n a d o s países con u n saldo deudor cad a vez m á s a tte ra d o r, que Ies deja sin recu rso s p a ra d e sa rro lla r su econo­ m ía y elev ar el nivel de vida de la m asa tra b a ja d o ra . M ien tras m ás tra b a ja n , m ás d eu d as c ontraen. E so es el po rv en ir en que ten ía que desem bocar fa ta l y necesariam ente el larg o reinado de u n régim en que desde hace veinte años se em peña en m an te n er u n a a n tic u ad a e s tru c tu ra económ ica. Al in g re sa r a p are n te m en te en el grupo occi­ d e n ta l europeo, la v ieja m etrópoli im pe­ rial, d u e ñ a en rem otos tiem pos de tan ta s tie rra s y pueblos u ltra m a rin o s, d e jó de p ertenecer a la fam ilia de las naciones independientes y cayó en el proletariado de los pueblos su jeto s a la colonización económ ica e x tra n je ra : la v e rd ad e ra co­ lonización de n u estro tiem po. ELENA DE LA SO UCHERE. ¿iimiiiiiiimimiimiiiimiiiiiiiiimiiiiiiiimmiiiiiiimiiiimiiiiiiiiiiiiiiiiiíiiiiiiiiiiimiimiiL | CuaxtiCCa internacional J L a a y u d a a dos p a ís e s su bdesaiíoddados ~ y—iZj te m a de la a yu d a económ ica a los países subdesarrollados adquiere 2 — 2 sm 2 J-> m a y o r im portancia a -medida que en A sia y en A frica, naciones som etidas h a sta ahora a fo rm a s m á s o m en o s colonialistas, v a n conquistando independencia. S in em bargo, el siste m a de a yu d a económ ica bilateral elegido preferen2 tem en te p o r las grandes potencias, representa, en cierto m odo, una am etuiza 2 para la independencia de los países necesitados de dicha ayuda, questo que 2 éstos se ven exp u esto s a caer den tro de determ inadas zonas de influencia. Cuando la a yuda económ ica e s acordada de m anera bilateral, suele ir — acom pañada de la condición, a p a ren tem en te razonable, de un control, por 2 parte de la nación concesionaria, sobre el uso d e esa ayuda. E ste control' “ puede ten er la form a de u n acuerdo sobre el destino que haya de darse 2 o te inversión de los fo n d o s, sobre los in stru m en to s económ icos o técnicos 2 sirviendo a su utilización y sobre las contrapartidas de orden financiero o 2 com ercial reservadas al cedente. 2 N o o bstante, ese control económ ico suele, tam bién, ir por extensión 2 nías allá (siem p re con el p retexto de ev ita r una dilapidación de la a y u d a ) — hasta la in tervención en los d estin o s políticos del país, influencia esencial2 m e n te apreciada en el dom inio internacional. D e ta l su erte que, siendo d ifícil 2 d istin g u ir lo estra tég ico d e lo económ ico en u n m undo dividido en dos blotz ques m ilita res opuestos, la asistencia económ ica bilateral contiene im plícita2 vien te la p erspectiva de u n a alianza. Im sola m anera d e sa tisfa cer o b jetiva m en te la necesidad de inversiones 2 e x tra n jera s en los p aíses m á s atrasados, y g a ra n tiza r a l m ism o tiem po su 2 propia independencia, consiste en crear las condiciones que hagan in ú til la 2 a yuda de m a n era bilateral, m ed ia n te la fundación de un organism o interna2 otoñal encargado de esta m isión. O rganism o que. bajo el control de la ONU, 2 escaparía a la in flu en cia directa o indirecta de las grandes potencias y 2 evitaría las dependencias p olíticas y m ilita res que se desprenden de la si2 tuación m a teria l en que se encuentran las naciones económ ica y técnica2 m en te subdesarrolladas. = 2 — 2 2 2 2 — 2 = 2 2 2 2 2 2 — 2 2 2 = 2 2 2 2 E 2 — 2 — 7miiiiiiimmimiiiiiimimimimiiiiiiiiiiiiimiiiiiiiiiHiiiiimiimimimiiiiiiimiiiimiiiiiiil