Administración Nacional de Educación Pública Consejo de Educación Primaria Inspección Nacional de Educación Especial Inspección Departamental de Pando Escuela Nº 198 Especial para Discapacitado Intelectual – Centro de Recursos “TRAZO, CUERPO Y ESCRITURA” Ensayo para continuar aprendiendo. 1 “TRAZO, CUERPO y ESCRITURA “ Ensayo para continuar aprendiendo. 1- EN EL ORIGEN: El presente trabajo surge en la confluencia de múltiples determinaciones: 1- La realización de una reunión periódica (mensual) de coordinación – orientación en Escuela Especial No 198, con Maestros de Apoyo y Maestros de Apoyo Itinerante de Escuelas Especiales N° 198 y N° 212 Jurisdicción Canelones-Centro, en el marco del Plan de Supervisión e integrando el funcionamiento de las Escuelas Especiales como Centro de Recursos. 2- La necesidad de responder a interrogantes emergentes de la práctica respecto a las dificultades para aprender de los alumnos que reciben apoyo, con el propósito de usar lo observado y aprendido como insumo para construir las mejores estrategias, mediaciones e intervenciones pedagógico-didácticas. 3- El enriquecimiento de todos los docentes participantes de esta iniciativa, del intercambio con Mtros. Inspectores y Docentes de Educación Común, Práctica e Inicial en intervenciones colaborativas, y en especial el trabajo con colegas de Educación Inicial. 2 4- La jerarquización dada al tema del “gesto gráfico” así como el valiosísimo y generoso aporte de la Mtra. Inspectora de Educación Inicial Sra. Loreley Paradizo con quien se realizaron dos talleres conjuntos. 5- El convencimiento de que asistimos a cambios en la subjetividad de educandos y educadores que requiere del fortalecimiento de una actitud investigativa y aprendiente que fundamente nuestra práctica. Como el recorte de la escritura de los niños sobre el que nos preguntamos, estos escritos, no pretenden ser el resultado de una Investigación, sino apenas unos trazos de la actitud investigativa necesaria para enseñar y aprender… 2- LAS PREGUNTAS, LAS VARIABLES…… LA PREGUNTA. En el acceso a la lectura y escritura son múltiples las dificultades que los niños van mostrándonos a la manera de “otro código” a ser leído para, a partir de ello, planificar itinerarios didácticos acordes a los requerimientos y necesidades de cada alumno. Leyendo de este modo, nos encontramos con alumnos que pueblan el espacio blanco del cuaderno con trazos que se deslizan con facilidad; otros parecen apenas contactar con la hoja; mientras algunos presionan de tal forma su superficie frágil que con frecuencia las formas de las letras se angulan y la fatiga y lo trabajoso de la escritura contribuye al displacer resultante. Existen finalmente también otros que realizan notorias variaciones en la presión del trazo. 3 4 Nos preguntamos: ¿Qué condiciona esta forma de funcionamiento? ¿Cómo afecta ello la escritura no sólo en los aspectos formales sino también en los expresivos? El trazo es la huella del gesto sobre una superficie. Formalmente se relaciona con el movimiento que realiza una parte del cuerpo, la mano direccionada por la totalidad del sujeto. Visto desde el acto motor, la calidad del trazo se relaciona (aunque no únicamente), con el tono muscular y éste posee al menos dos componentes, uno orgánico y otro emocional. Cuando pensamos en el componente orgánico lo hacemos desde el saber que todos aquellos niños que manifiestan afecciones neurológicas importantes pueden presentar dispraxias o dificultades motrices de diversa índole. En muchas ocasiones, circunstancias relacionadas con la mala nutrición determinan dificultades de aprendizaje y no en pocas situaciones, trastornos motrices asociados. Sin embargo, también sabemos que un componente muy importante del tono muscular son las emociones, siendo fácilmente comprobable que situaciones de stress, fatiga, preocupaciones, etc. afectan el mismo. 5 Por otra parte, nuestra mirada a los niños nos ha permitido constatar que muchos alumnos que presentan alteraciones en la presión del trazo no lo manifiestan en todas las circunstancias, descartándose en estas situaciones componentes neurológicos de significación. Nuestra hipótesis es, que las dificultades en los aspectos expresivos del lenguaje escrito correlacionan de modo significativo con las dificultades en la presión del trazo y ésta con aspectos emocionales y neurológicos que dificultan la construcción del “cuerpo”(como registro emocional y cognitivo) en el niño y su relación con el medio. Tomamos como indicadores para intentar confirmarla manifestaciones y producciones del niño que evidencian aspectos importantes en la construcción del cuerpo: - La conducta en sus manifestaciones disruptivas, de impulsividad, etc., así como de inhibición. - La postura corporal como indicador entre otros, de la seguridad personal a través de una postura más o menos cerrada o abierta. - La imagen y el esquema corporal pensado desde la producción gráfica del niño. - El deseo de aprender mirado en la manifestación del investimiento de las tareas de aprendizaje. 6 7 Estos indicadores surgen de considerar el cuerpo diferenciado del organismo en tanto el primero habla de la especie y el segundo de la persona. Siguiendo a D. Calmels: “los primeros aprendizajes del niño están estrechamente vinculados con el cuerpo, al mismo tiempo que lo construyen. Cuerpo que se construye desde el “sostén, acompañamiento y provocación del adulto que ejerce las funciones de crianza.” “El cuerpo está sometido y sostenido en una coyuntura cultural” al tiempo que implica una materialidad dependiente de un organismo, pero traduce en signos las señales de lo orgánico, y de la experiencia interna y externa. Es una construcción con otros y entre otros. El cuerpo es la síntesis del ser y del saber. Y expresa sobre él D. Calmels “El organismo se domestica, se acostumbra, se medica, el cuerpo se ensaya, se equivoca, se corrige, APRENDE” . LA OBSERVACIÓN: La observación se realizó sobre una población escolar de 437 alumnos atendidos por Maestros de Apoyo de las Escuelas Comunes de la Jurisdicción Canelones Centro y Maestros de Apoyo Itinerante de las Escuelas Especiales No 212 y 198 durante el último trimestre del año. Se tomó como base las observaciones realizadas por los Maestros a sus alumnos y producciones en el transcurso de la práctica pedagógica. No requirió de la aplicación de pruebas especiales. 8 LOS RESULTADOS: EXPRESIÓN ESCRITA REPRESENTACIÓN DE LA FIGURA HUMANA INVESTIMIENTO DEL APRENDIZAJE POSTURA CORPORAL (CERRADA O SEMICERRADA) INHIBICIÓN CONDUCTA DISRUPTIVA DIFICULTADES OBSERVADAS EN: ALTA 156 61 37 55 53 72 99 BAJA 47 8 15 23 16 18 26 INESTABLE 107 33 38 46 39 30 45 Subtotal 310 102 90 124 108 120 170 NORMAL 127 18 23 26 26 15 30 TOTAL 437 120 113 150 134 PRESIÓN DEL TRAZO 9 135 200 El registro precedente es un resumen del perfil de los alumnos de apoyo y en él quedan desdibujadas las individualidades. En las observaciones realizadas por cada docente es posible observar la presencia de más de una dificultad en cada alumno. No obstante, su consideración en la tabulación presentada, escapa a las posibilidades del presente trabajo el cual fue efectuado en situación de desempeño de las respectivas funciones docentes por parte de todos los participantes. De la lectura del registro precedente se concluye que: - Del total de los alumnos apoyados (437), el 71% (310) presenta alteraciones en la presión del trazo y el 46% (200) manifiesta dificultades en la expresión escrita. - Del total de alumnos con dificultades en la expresión escrita (200), un 85 % (170) presenta alguna alteración en la presión del trazo. Poseen asimismo alteraciones en la presión del trazo: - El 85% de los alumnos con conductas disruptivas. (102 de 120) 10 - El 80% de los alumnos con inhibición. ( 90 de 113) - El 83 % de los alumnos con alteración en la postura corporal. (124 de 150) - El 81% de los alumnos que no invisten el aprendizaje. (108 de 134) - El 89% de los alumnos que presentan dificultades en la representación de la figura humana. (120 de 135) - El 63% (de 156- 99) de los alumnos que presentan una elevada presión en el trazo, el 42% de los alumnos con inestabilidad en el trazo y el 55 % de los alumnos con baja presión del trazo, manifiestan dificultades en la expresión escrita. Sin embargo, sólo un 24% de los alumnos en los que no se observan alteraciones en la presión del trazo, presenta dificultades en la expresión escrita. Por último, se observa que todas las variables seleccionadas correlacionan con las dificultades en la expresión escrita. 11 Tomando el número total de alumnos con dificultades en la escritura (200); se observa: - Un 60 %(120) con conducta disruptiva. - Un 57% (113) con inhibición. - Un 75% (150) con alteración en la postura corporal. - Un 67% (134) con dificultades en el investimiento del aprendizaje. - Un 68% (135) con dificultades en la representación de la figura humana. Estos resultados permiten comprobar nuestra hipótesis, que “las dificultades en los aspectos expresivos del lenguaje escrito correlacionan de modo significativo con las dificultades en la presión del trazo y esta con aspectos emocionales y neurológicos que dificultan la construcción del “cuerpo” (como registro emocional y cognitivo) en el niño y su relación con el medio.” Estas conclusiones tienen implicancias didácticas importantes en tanto demandan profundizar y revisar las estrategias de enseñanza de la escritura en los aspectos expresivos, así como jerarquizar el acceso al gesto gráfico, atendiendo también a la implicancia de la construcción del “cuerpo” en el camino hacia la simbolización y los aprendizajes que la escuela propone al niño. 12 13 Este equipo docente, enfatiza el trabajo en Educación Corporal como mediador para el logro de aprendizajes significativos; destacando la importancia de los valores personales: autoestima, poder de escucha, comprensión, éxito en sus producciones, integración, disfrute, comunicación, independencia personal, desarrollo de la sensibilidad, la expresión y la creatividad, el sentido ético y estético y el respeto por el individuo en relación a la sociedad y su mutua interacción; la valoración del proceso además del producto. Estas cualidades se pueden desarrollar en procesos de enseñanza y aprendizaje de todos los contenidos disciplinares. Nuestra forma de existencia es corporal; nuestro cuerpo siempre expresa, aunque sea la inexpresividad. Nos expresamos corporalmente desde que nacemos, incluso desde que fuimos concebidos. La herencia biológica, genética, confluye con la cultura y modela determinadas formas de desplazarnos, mirar, abrazar, tomar los cubiertos, comer, vincularnos con los objetos de nuestra cultura, y todas aquellas acciones que progresivamente vamos desplegando al establecer todo tipo de vínculo con los demás, con los objetos de la naturaleza y los objetos e instrumentos de nuestra cultura. 14 “La evolución humana ha ido del acto al pensamiento. Toda actividad psíquica ha comenzado a través de la praxis, de la interacción del sujeto con el mundo, el propio movimiento se ha ido interiorizando y formando imágenes que, paulatinamente se han ido distanciando de la praxis. Pero, para seguir enriqueciéndose, necesitan constantemente de ella.” (Wallon, 1964) El cuerpo en movimiento es un instrumento valioso de conocimiento, aprendizaje y educación integral. El vivenciarlo en el espacio debe anteceder a cualquier registro y a la vivencia de las trayectorias en el papel. Lo realmente educativo es el proceso que da lugar al gesto gráfico y no el trazo en sí. E necesario trabajar a partir del conocimiento que posee el Maestro del niño y de las etapas del desarrollo psicomotriz en coherencia con el desarrollo del programa Importa que el niño vivencie el gesto corporalmente a través del movimiento en tres dimensiones y en distintos planos del espacio, para luego plasmarlo en el papel, en un encuentro con el jugar y el crear. El maestro podrá desplegar distintas estrategias de enseñanza a través del jugar, vivenciar la música, crear, imaginar, descubrir… Se requiere que el niño en su proceso de maduración lleve de su espacio tridimensional a su espacio bidimensional, una continuidad en su labor, y en la expresión de su mundo interno que descubra que la expresión gráfica es la continuación del lenguaje hablado. 15 16 Asimismo es importante la intervención oportuna del docente, a través de la interpretación oral del niño de su gesto gráfico, sin la emisión de juicio de valor al respecto. La jerarquización de estas constataciones referidas a la importancia de la construcción del cuerpo en el niño en los procesos de enseñanza y aprendizaje es un desafío ya iniciado y en proceso, pero estando sobre el final del año lectivo 2008, su profundización será retomada y continuada con ímpetu renovador, confiamos, a partir del precedente trabajo. Bibliografía: “Expresión corporal y el niño” Patricia Stokoe “¿Qué es la expresión corporal?” Déborah Kalmar “Sensopercepción” Déborah Kalmar y Marina Gubbay “La psicomotricidad en el Jardín de Infantes” Alicia Esparza y Amalia Petroli “La educación psicomotriz en la escuela primaria” Jean Le Boulch “La educación por el movimiento en la edad escolar” Jean Le Boulch “Movimiento, juego y comunicación” Mercedes Olivito y Dalia Zilberberg “Cuerpo y saber” Daniel Calmels 17 Docentes participantes: Maestra Inspectora de Educación Especial: Psicóloga Carmen Castellano Maestra Directora de Escuela Especial No 198: Sra Mirela Regina. Maestros de Apoyo Itinerante: Estela Vargas Esc. Especial Nº 198 (Pando) Rita Saldivia Esc. Especial Nº 198 (Pando) Fabiana Díaz Esc. Nº 212 (Suárez) Maestros de Apoyo: Dinora García Esc. Nº 113 (Migues) Adriana Rodríguez Esc. Nº 129 (Toledo) Silvia Álvarez Esc. Nº 130 (Barros Blancos) Gladys Pérez Esc. Nº 165 (San Isidro) Rosario Gravi Esc. Nº 176 (San Andrés) Gisselle Rivoir Esc. Nº 178 (Los Aromos) Verónica Belo Esc.Nº 187 (Villa Universitaria) Martha Salineri Esc. Nº 196 (Villa Castellana) Ketty Frachia Esc. Nº 227 (Barros Blancos) Virginia Pereira Esc. Nº 267 (El Tejado) 18