El casamiento judío En cada casamiento judío se ven renovadas las esperanzas de poder seguir participando en la transmisión de los valores e ideas del pueblo de Israel y en la construcción de una sociedad basada en los principios de respeto por toda la creación y solidaridad. Es por eso que no sólo el evento es importante para la familia de aquellos que se van a unir en matrimonio, sino que es relevante para toda la comunidad y también para el pueblo judío. La celebración del matrimonio está acompañada de un gran número de rituales y símbolos que ayudan a transmitir el valor de la formación de una nueva familia. Los preparativos comienzan varios días antes del matrimonio mismo. El Shabat previo al casamiento el novio es llamado a leer de la Torá y luego se invoca la bendición de D´s sobre él y sobre su novia rogando a D´s que la estabilidad de su matrimonio contribuya a la permanencia y crecimiento del pueblo judío. La novia también tiene una ceremonia especial. Por primera vez va a la Mikve, el baño ritual, y se sumerge en aguas puras, símbolo de su preparación espiritual para contraer matrimonio. El agua es el símbolo de la vida y de la pureza por excelencia en la tradición judía y de esta manera la novia toma conciencia de su responsabilidad y compromiso en mantener un hogar basado en las enseñanzas del judaísmo. Unos instantes antes de que se realice la ceremonia misma, en privado se realiza el Kinian Sudar, en la que el novio frente a la familia de la novia se compromete a cumplir con las obligaciones que la Torá establece para honrar y respetar a las mujeres de Israel. Esto se realiza tomando el novio de manos de un familiar cercano de la novia un pañuelo conjuntamente con la Ketuvá (acta matrimonial). LA CEREMONIA NUPCIAL. LA ENTRADA DE LOS NOVIOS Generalmente los novios ingresan a la Jupá (palo nupcial), acompañados de sus padres. Pero es el novio que toma a la novia y junto ingresan debajo de la Jupa que representa la intimidad del hogar que están a punto de construir. En ese momento de les da la bienvenida y se pide que la providencia divina acompañe esta unión. LAS PRIMERAS BENDICIONES Sobre la primera de las copas de vino se dicen las primeras bendiciones que declaran la santidad del matrimonio de acuerdo a las normas del pueblo judío que se encuentran en la Torá. LOS ANILLOS Tradicionalmente el novio por medio de un obsequio declara públicamente que desea tomar por esposa a su novia. Ese obsequio es un anillo. El novio coloca el anillo en el dedo índice de la novia y dice la frase legal que la convierte en su esposa. En muchas comunidades también la novia responde a las palabras del novio con una frase del “Cantar de los cantares” que dice “Ani le dodi ve dodi li” (Yo soy de mi amado y mi amado es para mi) y luego ella le coloca un anillo. Este es el momento central de la ceremonia ya que los novios por medios de este acto expresan que libremente desean unir sus vidas en matrimonio de acuerdo a la ley de Moshé y del pueblo de Israel. En la ceremonia no es obligatorio que participe un Rabino, pero si que un Mesader Jupá ve Kidushin, una persona entendida en los procedimientos del matrimonio para supervisar que todo se hace conforme a la ley. El momento del intercambio de anillos también es utilizado en muchas ocasiones para compartir una enseñanza de las fuentes judías que habla de la importancia del matrimonio, del amor mutuo, del respeto y del proyecto en común que los novios están comenzando en ese momento. LA KETUVA A continuación se lee y firma la Ketuvá, el acta matrimonial, en donde figuran entre otras cosas los nombres de los novios y sus padres, la fecha del calendario hebreo y la ciudad en donde se efectúa el matrimonio, las obligaciones de los novios y los nombres y firmas de los contrayentes y sus testigos. La Ketivá se entrega a la madre de la novia y más tarde a los novios. LAS SHEVA BRAJOT (siete bendiciones) Después de la firma de la Ketuvá se dicen las Sheva Brajot tomando una segunda copa de vino. Las bendiciones tocan distintos temas, entre ellos el recuerdo de la primera pareja, Adam y Java, la alegría de los novios, el recuerdo de la ciudad de Jerusalem, los principios con los que se debe alimentar el hogar, amor, respeto, paz, intimidad. Después de estas bendiciones cubrimos a los novios con el Talit (manto ritual del novio) y se pronuncia la bendición sacerdotal pidiendo a D´s que bendiga a este matrimonio y que la novia sea bendecida como las matriarcas de Israel: Sara, Rivka, Rajel y Lea. Antes de terminar la ceremonia, se rompe una copa de vidrio en conmemoración de la destrucción de l Templo de Jerusalem y expresando el anhelo de su reconstrucción plena como símbolo de la paz universal. Después de esto, todos los presentes dicen Mazal Tov, que sea con buena suerte y lo novios salen juntos ya transformados en una matrimonio.