CRÓNICA DE SENTENCIAS CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas Letrado de la Junta de Castilla y León Francisco Salinero Román Magistrado de la Audiencia Provincial de Valladolid SUMARIO TRIBUNAL SUPREMO. Doctrina legal. Sala de lo Contencioso-Administrativo. Sala de lo Social. TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA. Salas de lo Contencioso-Administrativo. Salas de lo Social. Juzgados de lo Contencioso-Administrativo. AUDIENCIAS PROVINCIALES. Civil. Penal. REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 325 CRÓNICA DE SENTENCIAS TRIBUNAL SUPREMO DOCTRINA LEGAL ❖ Sentencia de 26 de septiembre de 2006, de la Sala Tercera del Tribunal Supremo, por la que se fija la siguiente doctrina legal: «Sin perjuicio de las facilidades que han de otorgárseles, derivadas de lo dispuesto en el artículo 14 del Tratado General de Cooperación y Amistad entre la República Oriental de Uruguay y el Reino de España, firmado el 23 de julio de 1992, los nacionales de Uruguay, ni quedan equiparados a los ciudadanos de los Estados miembros de la Unión Europea en lo que hace al régimen jurídico que regula los derechos de residencia y trabajo en España, ni dejan de estar sujetos al régimen establecido en la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre Derechos y Libertades de los Extranjeros en España y su Integración Social, y en sus normas reglamentarias de desarrollo, siéndoles de aplicación, por ende, la norma contenida en el artículo 38.1 de dicha Ley, según la cual: para concesión inicial de la autorización de trabajo, en el caso de trabajadores por cuenta ajena, se tendrá en cuenta la situación nacional de empleo». SALA DE LO CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO ❖ Sentencia de la sección cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo de 20 de octubre de 2006: litigios entre Administraciones Públicas: el artículo 44 LJCA no se aplica cuando se trata de resolver o solventar una disparidad de criterios entre Administraciones Públicas y una de ellas actúa en la relación jurídico-administrativa entablada como un particular y no como un poder publico. Hay que aplicar entonces la legislación reguladora de la actividad y procede la inter- REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 327 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román posición de recurso en vía administrativa si esa legislación lo ha previsto. La plena aplicación del artículo 44 de la Ley Jurisdiccional se produce solo cuando ambas Administraciones públicas estén actuando como poder y por tanto han dictado o pueden dictar actos administrativos. ❖ Sentencia de la sección séptima de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo de 21 de diciembre de 2006: jurisdicción contencioso-administrativa, jurisdicción penal: hay parcelas de la actuación policial, singularmente las que están directamente vinculadas con el proceso penal, cuyo control se encomienda en nuestro ordenamiento a la jurisdicción penal. Así sucede, en particular, con aquellas actuaciones relacionadas con la asistencia letrada al detenido, pues ésta no se rige por el derecho administrativo sino por la Ley de Enjuiciamiento Criminal (artículos 520 y siguientes), a la que se remite expresamente el artículo 5 de la Ley 2/1986 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Por tanto, esa concreta manifestación de la actuación policial no resulta encuadrable en el ámbito jurisdiccional delimitado en el artículo 1 de la Ley reguladora de la jurisdicción contencioso-administrativa («... actuación de las Administraciones públicas sujeta al Derecho Administrativo...»), pues se trata de una actuación de la Policía Judicial de carácter pre-procesal, o directamente vinculada con un proceso penal en curso, cuyo control corresponde en todo caso a los jueces y tribunales del orden penal a los que nuestra legislación atribuye la competencia para conocer de las causas penales y de todas sus incidencias (artículo 9 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal). ❖ Sentencia de la sección segunda de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo de 8 de enero de 2007: recurso de casación personal estatutario de la Seguridad Social: el artículo 86.2.a) LJCA exige para abrir el cauce casacional que se trate del nacimiento o de la extinción de la relación de servicio de funcionarios de carrera. Es necesario, pues, que se trate de funcionarios de carrera, tal y como se define en los artículos 3 y 4 de la Ley de Funcionarios Civiles del Estado de 1964, frente al concepto más amplio de «funcionarios públicos» que empleaba la Ley de la Jurisdicción de 1956, condición estricta que no reúne el Personal Estatutario de la Seguridad Social. No a otra conclusión se llega tras el examen de la Ley 30/1984, de 2 de agosto, de Medi- 328 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias das para la Reforma de la Función Pública, que distingue claramente entre el personal funcionario de la Seguridad Social, incluido expresamente, sin perjuicio de sus peculiaridades, en el ámbito de aplicación de dicha Ley —ex artículo 1.1.º c)—, entendiéndose por tal únicamente a los numerosos Cuerpos y Escalas que se mencionan en la Disposición Adicional Decimosexta, y el resto del personal dependiente de la Seguridad Social a que se refiere la Disposición Transitoria 4.ª de dicha Ley, regulado en distintos Estatutos —ahora, fundamentalmente en la Ley 55/2003, de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud, que deroga alguno de ellos—. Normas propias éstas que, en algunos casos, contemplan la posibilidad de establecer procedimientos para integrar en la condición de «personal estatutario» a quienes presten servicios sanitarios con la condición de «funcionarios de carrera». (Disposición adicional quinta de la Ley 55/2003, de 16 de diciembre, y, antes, Disposición adicional sexta en la Ley 30/1999, de 5 de octubre, que aquélla deroga) —por todos, Autos de 24 de junio de 2004 y 3 de marzo y 21 de julio de 2005—. SALA DE LO SOCIAL ❖ Sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo de 18 de octubre de 2006: competencia territorial: la recurrente confunde dos cuestiones absolutamente diferenciables: una es el «domicilio» determinante de la competencia territorial, que no es otro que el derivado de aplicar las disposiciones del art. 41 CC; y otra el «lugar» donde pueden practicarse notificaciones, citaciones y emplazamientos, que cuando «deban entenderse con una persona jurídica se practicarán, en su caso, en las delegaciones, sucursales, representaciones o agencias establecidas en la población donde radique el Juzgado o Tribunal que conozca del asunto», tal como dispone el art. 60.2 LPL. Si bien el art. 10.1 «in fine» TRLPL establece una especialidad respecto de las demandas dirigidas contra las Administraciones Públicas, caso en el que «será Juzgado competente el del lugar de la prestación de los servicios o el del domicilio del demandante, a elección de éste» (lo que en autos conduciría a la incompetencia territorial pretendida), la regla es REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 329 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román impredicable de la «Sociedad Estatal Correos y Telégrafos, S.A.» habida cuenta de que desde el momento en que Correos y Telégrafos dejó de ser entidad pública empresarial (DA 11.ª LOFAGE) para convertirse en sociedad anónima estatal (art. 58 Ley 14/00, de 29 de diciembre), su régimen jurídico pasó a regularse por el ordenamiento jurídico privado (art. 2 LGP y DA 12.ª LOFAGE); sin perjuicio de que el sistema público de selección de puestos de trabajo (RD 364/1995, de 10 de marzo) se extienda también a las entidades públicas empresariales [art. 55.2.b) LOFAGE] y se aplique igualmente a la sociedad demandada, antes y después de su transformación. ❖ Sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo de 21 de diciembre de 2006: personal estatutario. Jurisdicción competente: a) El Estatuto Marco del Personal Estatutario de los Servicios de Salud (Ley 55/2003, de 16 de diciembre; en vigor desde el 18/12/03, conforme a la Disposición Final Tercera) califica de «relación funcionarial especial» la existente entre el personal —antes estatutario— que desempeña su función en los centros e instituciones sanitarias de los servicios de salud de las comunidades autónomas o en los centros y servicios sanitarios de la Administración General del Estado y su empleadora (art. 1). b) Después de las transferencias, este personal ya no es empleado de las Entidades Gestoras o Servicios de las mismas, sino de la Comunidad Autónoma correspondiente, y ya no se rige por aquellos estatutos de personal, sino por el nuevo Estatuto Marco. c) La Disposición Derogatoria Única de la referida Ley 55/2003 preceptúa que quedan «derogadas, o se considerarán, en su caso, inaplicables (...), cuantas disposiciones de igual o inferior rango se opongan o contradigan a lo dispuesto en esta ley». d) En la nueva normativa no hay específico precepto que venga a perpetuar la anómala situación vigente con anterioridad —art. 45 LGSS/74—, atribuyendo a la jurisdicción social el conocimiento de cuestiones relativas a quienes no son trabajadores en el sentido laboral del término, sino funcionarios, y se rigen por normas administrativas. e) Conforme a ello habrá de entenderse tácitamente derogado el art. 45.2 LGSS/74 [vigente tras la publicación de la LGSS/94, a virtud de su 330 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias Disposición Derogatoria Única a).1], que era el precepto que atribuía al Orden social de la jurisdicción la competencia para conocer de las cuestiones contenciosas suscitadas entre las EE.GG. y su personal. Y por su virtud (derogación) habrá de entenderse que tras la entrada en vigor de la Ley 55/2003 la competencia de que tratamos corresponde a la jurisdicción contencioso-administrativa, de conformidad a los arts. 9.4 LOPJ y 1 Ley 29/1998 (de 13 de julio) [SSTS de 16/12/05 —rec. 39/04 y Sala General—; 16/12/05 —rec. 199/04 y Sala General—; 21/02/06 —rec. 4756/04—; 04/10/06 —rec. 4384/04—; 06/10/06 —rec. 3026/05—; 09/10/06 —rec. 1503/05—; 09/10/06]. TRIBUNALES SUPERIORES DE JUSTICIA SALAS DE LO CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO ❖ Sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de Valladolid del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León de 21 de noviembre de 2006: excedencia por violencia de género: confirma la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo núm. 2 de Valladolid de 6 de marzo de 2006, que realiza un completo examen de las circunstancias en que procede reconocer la situación administrativa de excedencia por violencia de género. Argumenta que no se da ninguno de los elementos de la violencia de género, contemplada como supuesto de hecho en el artículo 93 de la Ley 7/2005, en forma análoga con la establecida en el artículo 20.8 de la Ley 30/1984, de Medidas para la Reforma de la Función Pública. • Así el tipo penal en el que se tipifica la conducta del autor no era el 173.2 del CP, sino los tipos comunes de amenazas, coacciones, resistencia o faltas de lesiones. • Entre sujeto pasivo del delito, la funcionaria recurrente y el autor de los hechos, no mediaba relación conyugal y otra relación similar de afectividad. • Las medidas cautelares adoptadas previamente a la sentencia no fueron las específicas de violencia de género del artículo 544 ter del Código Penal, sino las genéricas del artículo 544 bis. REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 331 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román • No existe por lo tanto violencia de género, sino que aun existiendo situaciones coactivas o de amenaza, las mismas son subsumibles en los tipos comunes del Código Penal que regulan estos supuestos, y por tales tipos fue condenado el autor. De esta forma no cabe en ningún caso entender que se da el supuesto de existencia de violencia de género previsto en el artículo 93 de la Ley 7/2005, para el otorgamiento de la excedencia por tal concepto prevista en la norma. Dada la concepción estatutaria de la relación funcionarial en el que los derechos y obligaciones de los funcionarios son los que en cada caso derivan de la normativa vigente, no pueden integrarse en el supuesto de hecho previsto en la norma otros distintos a aquellos, por más que se pueda buscar algún tipo de conexión fáctica entre aquel supuesto y otras hipótesis, como puede acontecer en el caso analizado. Nos encontramos ante supuestos muy específicos de otorgamiento de excedencias, que conlleva una suspensión de la relación funcionarial, con el trastorno que conlleva para el servicio público la interrupción de la relación funcionarial, y la ley ha buscado ante las circunstancias sociales existentes de violencia de género, ante las que existe un alto grado de concienciación social, dar una especial protección a las víctimas de dicha violencia, mas no puede darse una interpretación extensiva a este supuesto, buscando analogías o puntos de conexión con hipótesis similares que desdibujarían completamente la aplicación de la norma, pudiendo, por otro lado, tales hipótesis tener otras específicas respuestas en nuestro ordenamiento jurídico. ❖ Sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de Burgos del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, de 5 de enero de 2007: discordancia objetiva entre lo pedido en vía administrativa y lo interesado en vía jurisdiccional: no admite el proceso contencioso-administrativo la desviación procesal producida al formularse en vía jurisdiccional cuestiones nuevas, sobre las que la Administración no tuvo ocasión de pronunciarse, no procediendo en consecuencia hacer pronunciamiento alguno sobre las mismas, al ser peticiones que no fueron objeto de las resoluciones administrativas impugnadas, sin que sea óbice a ello lo dispuesto en los artículos 43.1 y 69.1 de la Ley Jurisdiccional, ya que si tales normas permiten nuevas alegaciones o motivos nuevos, en modo alguno 332 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias autorizan que puedan modificarse, alterarse o adicionarse a las peticiones instadas en vía administrativa otras nuevas en esta vía jurisdiccional no formuladas ni cuestionadas ante la Administración, puesto que si nuestra ley jurisdiccional admite la alteración de los fundamentos jurídicos aducidos ante aquella, de modo que en el escrito de demanda, dejando incólume la cuestión suscitada ante esa vía previa, puedan integrarse razones y fundamentos diversos a los expuestos en el expediente administrativo antecedente de la litis, no cabe que se produzca una discordancia objetiva entre lo pedido en vía administrativa y lo interesado en vía jurisdiccional. ❖ Sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de Burgos del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, de 12 de enero de 2007: desigualdad en la aplicación judicial de la ley: una reiterada doctrina constitucional viene poniendo de relieve que las Secciones de un mismo Tribunal son órganos jurisdiccionales con entidad diferenciada suficiente para desvirtuar una supuesta desigualdad en la aplicación judicial de la ley. Es decir, que «...ni el principio de igualdad ni su configuración como derecho subjetivo permiten asegurar un tratamiento idéntico uniforme o unificado por los distintos órganos judiciales, ya que el repetido principio ha de hacerse compatible con el principio de independencia de los mencionados órganos» (SSTC 200/90 y 183/91). En definitiva, pues, cada órgano jurisdiccional sólo puede compararse consigo mismo: la identidad del órgano jurisdiccional es presupuesto para realizar la comparación que toda discriminación en la aplicación judicial de la ley lleva consigo (STC 168/89). SALAS DE LO SOCIAL ❖ Sentencia de la Sala de lo Social de Valladolid del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, de 6 de noviembre de 2006: incapacidad temporal: el criterio para determinar la Entidad Gestora responsable del abono de las prestaciones por Incapacidad Temporal en caso de cambio durante la vigencia de dicha situación de la Entidad Gestora que cubra la contingencia es distinto según se trate de contingencias comunes o de contingencias profesionales; en este último caso es criterio reiterado del Tribunal REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 333 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román Supremo que puesto que las técnicas de protección se aproximan o asemejan a las propias del Seguro Mercantil será responsable del abono de las prestaciones la Entidad Gestora que cubría la contingencia en el momento del hecho causante viniendo por tanto obligada a continuar satisfaciendo su abono incluso aunque, antes de producirse la extinción de la situación de Incapacidad Temporal, se hubiere producido un cambio de la Entidad Gestora que cubra dicha contingencia profesional; criterio distinto es el aplicable al caso de las contingencias comunes, cuya protección no obedece a técnicas similares a la del seguro privado sino al sistema general y solidario propio de la Seguridad Social en el que la cotización no cumple una función de capitalización sino de solidaridad en la financiación de la cobertura de las contingencias comunes con todo el colectivo asegurado, resultando por ello irrelevante quién fuera la Entidad Gestora responsable de la cobertura en el momento de la baja médica que inicia el proceso de Incapacidad Temporal porque quien debe satisfacer las prestaciones propias de la Incapacidad Temporal derivada de enfermedad común es la Entidad Gestora que en cada momento tenga cubierta dicha contingencia. ❖ Sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Canabria, de 1 de diciembre de 2006: valoración de la incapacidad permanente: Es reiterada doctrina de esta Sala, concordante con la establecida por la Sala de lo Social del Tribunal Supremo (SS. 11-11-86, 9-2-87, 28-12-88), que la valoración de la incapacidad permanente ha de realizarse atendiendo fundamentalmente a las limitaciones funcionales derivadas de los padecimientos del trabajador, en cuanto tales limitaciones son las que determinan la efectiva restricción de la capacidad de ganancia. Conforme con el precepto y la regulación general de la incapacidad permanente en su modalidad contributiva, resulta necesario establecer: a) Un diagnóstico médico de la enfermedad, su carácter permanente y, especialmente, las alteraciones y disminuciones funcionales objetivas y previsiblemente definitivas (o de curación incierta o a largo plazo) que genera. b) Un conocimiento de las tareas que la persona debe realizar en su actividad laboral o profesional. 334 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias c) Una correlación entre aquellas limitaciones y los requerimientos físicos y psíquicos de tales tareas. d) Una determinación de otros elementos que puedan originar la incapacidad, como es la existencia de riesgo propio o para terceros. En el concreto supuesto litigioso, la actora presenta una limitación de la movilidad y disminución de fuerza en la extremidad superior derecha en estudio, con fenómeno de Raynand también en estudio. Como hemos expuesto, el hecho de que se haya practicado una prueba médica (RMN) no demuestra que el estudio esté completado ni mucho menos que las dolencias estén cronificadas. En consecuencia, no habiendo agotado la incapacidad temporal deberá continuar en dicha situación mientras se finaliza el estudio y se fija su tratamiento, por lo que al no ser previsiblemente definitivas sus dolencias físicas y psíquicas, no cabe analizar el carácter invalidante de las mismas. JUZGADOS DE LO CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO ❖ Sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo núm. 1 de Valladolid de 4 de octubre de 2006: Fondo de Acción Social: Aunque fuera cierto que no consignó sus datos en el apartado VII de la solicitud (autorización a la Administración para obtener los datos correspondientes a los ingresos económicos del solicitante) por un olvido o por error no se está en el supuesto de proceder a la subsanación al amparo del art. 71 de la LPA, el cual está previsto para completar solicitudes o completar documentación pero no cuando, como en el presente supuesto, la no consignación de determinados datos tiene determinado significado, en este caso y como claramente indicaban las bases, que no se autorizaba la investigación de los datos económicos de la solicitante. La Administración ante esta falta de cumplimentación lo interpretó, como indicaban las bases, en el sentido de que no había autorización, escapando de su ámbito de conocimiento si dicha falta de cumplimentación era debido a un acto voluntario o involuntario de la interesada. Por lo tanto no se está ante un supuesto de subsanación de ningún defecto sino de un silencio que tienen determinado efecto. REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 335 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román AUDIENCIAS PROVINCIALES CIVIL ❖ Audiencia Provincial de LEÓN. Rollo núm. 256/2006. Sección 2.ª Sentencia núm. 259/2006, de 27 de diciembre de 2006. Ponente: Don Antonio Muñiz Díez. Precario en cesión de vivienda de los propietarios a favor de un hijo y de su esposa cuando en el proceso de separación entre el hijo de los propietarios y su esposa se asigna el uso de la vivienda que constituye el domicilio familiar a la nuera y a la nieta de los titulares de la vivienda. Capacidad de la menor para comparecer en el proceso de precario instado por los abuelos propietarios representada por su madre al no advertirse entre ellas intereses contrapuestos que hubiesen justificado el nombramiento de un defensor judicial para la menor. ❖ Audiencia Provincial de LEÓN. Rollo núm. 304/2006. Sección 2.ª Sentencia núm. 1/2007, de 2 de enero de 2007. Ponente: Alberto Francisco Álvarez Rodríguez. Hijo no del marido. Acreditada la verdadera filiación reclamación del marido contra la esposa y el verdadero padre por daño moral por la pérdida de la relación afectiva con la que hasta entonces había considerado como su hija. Conducta dolosa de los progenitores (esposa y tercero) frente al marido al que ocultaron la verdadera filiación de la niña a sabiendas. Daño patrimonial del marido frente al verdadero padre por cuya cuenta vino abonando los alimentos de la menor en la creencia de que era su obligación. Cobro de lo indebido y enriquecimiento injusto. ❖ Audiencia Provincial de BURGOS. Rollo núm. 497/2006. Sección 3.ª Sentencia núm. 27/2007, de 17 de enero de 2007. Ponente: Don Juan Francisco Sancho Fraile. Derecho al honor y a la propia imagen. Fotografía de una mujer y sus hijas comprando en rebajas en un centro comercial que se publica en un periódico. La imagen de las demandantes reflejada en la fotografía litigiosa corresponde a un acto de la vida ordinaria y privada de estas personas, que, en sí mismo, carece de relevancia 336 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias informativa y entra en el ámbito de lo normativamente tutelado, como un derecho subjetivo propio e independiente de la eventual afectación del honor de la persona afectada; actuación enjuiciada que no se legitima por una autorización genérica para tomar fotografías en el establecimiento correspondiente, porque lo que interesa es la concreta fotografía captada y la afectación de personas determinadas, como objeto directo y principal de la misma, en un primer plano y no de forma accesoria, lo que excluye la salvedad del art. 8.2.c) de la Ley Orgánica 1/1982, manteniéndose la integra virtualidad jurídica del criterio legal principal establecido en el art. 7.5 de la ley mencionada, cuando dispone que tendrá la consideración de intromisión ilegítima «5. La captación, reproducción o publicación por fotografía de la imagen de una persona en lugares o momento de su vida privada o fuera de ellos, salvo los casos previstos en el Art. 8.2». Cuantía de la indemnización relacionada con la mayor tirada por haberse publicado en un periódico del domingo. ❖ Audiencia Provincial de VALLADOLID. Rollo núm. 355/2006. Sección 1.ª Sentencia núm. 384/2006, de 19 de diciembre de 2006. Ponente: Don José Ramón Alonso-Mañero Pardal. Falta de legitimación activa del Registrador de la Propiedad para impugnar en vía judicial las resoluciones de la Dirección General de los Registros y del Notariado. Art. 328 de la Ley Hipotecaria reformado por Ley 24/2005, de 18 de noviembre. ❖ Audiencia Provincial de PALENCIA. Rollo núm. 380/2006. Sentencia núm. 331/2006, de 30 de noviembre de 2006. Ponente: Don Ignacio Javier Rafols Pérez. Nulidad de actuaciones por falta de traslado a las partes para alegaciones de prueba documental admitida y cuya aportación había de diferirse en el tiempo. ❖ Audiencia Provincial de ZAMORA. Rollo núm. 301/2006. Sentencia núm. 272/2006, de 30 de noviembre de 2006. Ponente: Doña María Esther González González. Régimen de visitas con los abuelos. Lugar de recogida de la menor. Se decidirá teniendo en cuenta el interés superior de la menor y especialmente en este caso la pérdida de contacto de la niña con sus abuelos, por REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 337 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román lo que deberá llevarse a acabo en un entorno que a la menor no le resulte extraño debiendo proceder los abuelos a su recogida y reintegro en el domicilio del padre. PENAL ❖ Audiencia Provincial de VALLADOLID. Rollo núm. 749/2006. Sección 4.ª Sentencia núm. 433/2006, de 21 de diciembre de 2006. Ponente: Don Ángel Santiago Martínez García. Art. 227.1 del Código Penal. Impago de las prestaciones económicas establecidas por convenio judicialmente aprobado o resolución judicial en los casos de procedimientos matrimoniales por separación, divorcio o nulidad del matrimonio. La finalidad de dicho castigo es la protección de los miembros económicamente más débiles de la unidad familiar frente al incumplimiento de deberes asistenciales por el obligado a prestarlos. Sin embargo no todo impago ha de resultar punible por aplicación del citado artículo 227.1, sino que el reproche penal ha de restringirse a aquellos incumplimientos que, cumplidos los requisitos de temporalidad exigidos por el tipo penal, sean imputables a una voluntad maliciosa, por injustificada, del obligado al pago. Esta es la interpretación que ha de hacerse del delito de impago de pensiones, a pesar de que en el tipo penal nada se exija acerca de la conducta maliciosa del incumplidor, por ser la interpretación más acorde con el principio de culpabilidad que se recoge en el artículo 10 del Código Penal. ❖ Audiencia Provincial de SEGOVIA. Rollo núm. 15/2006. Sentencia núm. 9/2006, de 8 de noviembre de 2006. Ponente: Don Andrés Palomo del Arco. Delitos contra la salud pública. Requisitos: a) La concurrencia de un elemento de tipo objetivo, cual es la realización de algún acto de producción, venta, permuta o cualquier forma de tráfico, transporte, tenencia con destino al tráfico o acto de fomento, propaganda o formulación de ofertas de dichas sustancias; 338 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 CRÓNICA DE SENTENCIAS Crónica de sentencias b) Que el objeto material de esas conductas sea alguna sustancia de las recogidas en las listas de los Convenios Internacionales suscritos por España, los que tras su publicación se han convertido en normas legales internas (artículo 96.1.º CE); y, c) El elemento subjetivo del destino al tráfico ilícito, que en ocasiones no será obtenible por prueba directa, sino deducible del conjunto de sus acciones. Contraindicios de no actividad preordenada al tráfico: a) La cantidad intervenida de droga se encontraba en un solo envoltorio. b) El imputado, conforme la documental de la Cruz Roja y la pericial del Doctor Forense derivada del examen personal y del análisis de los folículos capilares practicada, es consumidor y drogodependiente a derivados opiáceos. c) La cantidad de sustancia ilícita intervenida, en términos de pureza, que es la que debe ponderarse conforme a reiterada jurisprudencia, aun ponderando todos los integrantes de la mezcla, era mínima: 0,62 gramos de heroína (17,81 gramos al 3,5%); 0,2 gramos de monoacetilmorfina (17,81 gramos al 1,1%); 0,03 gramos de papaverina (17,81 gramos al 0,2%); y 0,14 gramos de noscapina (17,81 gramos al 0,8%); en total menos de un gramo, que en principio sólo cubre el consumo de un solo día de un drogodependiente medio (cfr. Acuerdo no jurisdiccional de la Sala Segunda de fecha 19 de octubre de 2001, que se basa a su vez en el informe del Instituto Nacional de Toxicología de 18 de octubre de 2001). ❖ Audiencia Provincial de LEÓN. Rollo núm. 257/2006. Sección 3.ª Sentencia núm. 149/2006, de 14 de diciembre de 2006. Ponente: Don Luis Adolfo Mallo Mallo. Responsabilidad Penal de menores. Momento idóneo para que el acusado conozca la acusación y no se le genere indefensión. Conclusiones provisionales y definitivas. Se pueden introducir las modificaciones fácticas y jurídicas demandadas por la actividad probatoria, siempre que se respete la identidad esencial de los hechos que han constituido el objeto del proceso. La posibilidad de que en las conclusiones definitivas de la acusación se operen cambios, incluso relevantes, se deduce con toda claridad del art. 788.3 y 4. REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007 339 CRÓNICA DE SENTENCIAS Rafael Guerra Posadas y Francisco Salinero Román Si las partes recurrentes, conocida la calificación alternativa, no hicieron uso de la opción que les confiere el citado art. 788.4 LE Criminal, ni realizaron advertencia alguna es porque se encontraron en condiciones de contestar dialécticamente a las peticiones de la acusación pública, no pudiendo ahora ir contra sus propios actos procesales. 340 REVISTA JURÍDICA DE CASTILLA Y LEÓN. N.º 12. ABRIL 2007