REVOCATORIA IN EXTREMIS. PROCEDENTE Reg.: A. y S. T. 3

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REVOCATORIA IN EXTREMIS. PROCEDENTE
Reg.: A. y S. T. 3, pág.241 .
Santa Fe, 12 de octubre de 2005.
VISTOS: Estos autos caratulados “SODA, Cristian A.; FERNÁNDEZ, Juan J.; BIROLLO, Carlos
R.; ROBLEDO, Jorge L. y MAROZZI, Diego H. contra PROVINCIA DE SANTA FE -R.C. A.- sobre
MEDIDA CAUTELAR” (Expte. C.C.A. 1 n/ 148, año 2005), venidos para resolver; y,
CONSIDERANDO:
1.El señor Diego Hernán Marozzi interpone recurso de revocatoria in extremis contra el punto 2
del auto de fecha 17.8.2005 (A. y S. T. 2, pág. 423; fs. 53/57), en cuanto rechaza con costas el pedido de
tutela cautelar.
Señala que el Tribunal yerra al denegar la pretensión cautelar, provocado por las postulaciones de
la demandada que, en el escrito de fojas 49/51, insiste con que el pedido debía ser declarado abstracto,
acompañando copias de resoluciones donde supuestamente la Administración accede a su pedido.
Destaca que de la lectura de la resolución 463/05 se extrae que la bonificación reconocida es la
correspondiente al título de nivel medio, siendo que posee título de nivel universitario (Médico), tal como
lo ha acreditado. Agrega que la denuncia del nuevo título se efectuó oportunamente y por la vía
administrativa correspondiente.
Precisa que en sede judicial aclaró que lo peticionado como objeto cautelar es el reconocimiento del
título universitario.
Cuestiona lo pertinente a la imposición de costas, manifestando las razones por las que no
corresponde imponerlas en el orden causado.
Aclara que jamás podría haber conocido lo resuelto por la Administración antes de la promoción de
la demanda, por cuanto la resolución que la demandada acompaña es producto de una actuación diversa a
la iniciada por su apoderada en su representación.
Entiende que la tramitación de un expediente administrativo dista mucho de la que se imprime a una
actuación judicial, en la que los expedientes no se encuentran a disposición de las partes, sino que
generalmente circulan internamente.
Reconoce la excepcionalidad del remedio intentado, el que ha sido reconocido en numerosos
precedentes del más Alto Tribunal, en circunstancias como la presente en la que el error surge patente,
siendo su análisis decisivo a la hora de revocar el fallo y no contándose con otros medios idóneos a tales
fines.
Pide se revoque la resolución de fecha 17.8.2005, ordenando se haga lugar al pedido cautelar
efectuado, con costas a la demandada.
2.Corrido el traslado pertinente, la demandada lo contesta a foja 65/vto. de autos.
Dice que, respecto al señor Marozzi, en oportunidad de contestar el pedido cautelar, acompañó la
resolución ministerial invocada considerando que al otorgarle el suplemento correspondiente a nivel de
enseñanza media, la materia había devenido abstracta.
Reconoce que le asiste razón al recurrente en cuanto a que la misma no satisface lo peticionado,
consistente en el pago de la bonificación por título universitario.
Afirma que incurrió en un yerro involuntario, encontrándose en trámite, a la fecha de su escrito de
responde, el dictado de la resolución ministerial otorgando la bonificación pretendida, ajustada al título
pertinente.
3.El recurrente interpone revocatoria in extremis a los fines de que se revoque el punt o 2 de la
resolución de fecha 17.8.2005, y en consecuencia, se haga lugar al pedido cautelar formulado.
Al respecto, este Tribunal tiene dicho que resoluciones como la impugnada no son -en principiode aquellas susceptibles de revisión por vía de revocatoria, únicamente reservada a las providencias,
decretos y autos dictados sin sustanciación, conforme está dispuesto en el artículo 344 del Código Procesal
Civil y Comercial de la Provincia, de aplicación supletoria al caso, sin perjuicio de la posibilidad de provocar
el reexamen de la cuestión cuando se revelaren entre los argumentos vertidos, vicios u errores graves que
justifiquen excepcionalmente abordar la revisión in extremis (“Revuelta”, A. T. 2, pág 123; “Lacasa”, A.
T. 3, pág. 452; “Carrasco”, A. T. 4, pág. 392; “Mascheroni Torrilla”, A. T. 5, pág. 17; “Lasave”, A. T. 7,
pág. 197, entre otros).
En el caso, habrá de hacerse lugar a lo solicitado.
En efecto, conforme sus antecedentes, se encuentran reunidos los excepcionales extremos que tornan
procedente la revisión in extremis solicitada.
La Corte Suprema de Justicia de la Provincia ha señalado que “todo medio que sirva para enervar
los efectos de un pronunciamiento notoriamente injusto resulta bienvenido malgrado su falta de regulación”
(“Malvicino”, A. y S. T. 140, pág. 416).
En este mismo sentido, el Alto Tribunal nacional ha resuelto en reiteradas oportunidades que sus
sentencias no son susceptibles de los recursos de reconsideración, revocatoria o nulidad, pero ese principio
reconoce excepciones cuando se trata de situaciones “serias e inequívocas que demuestren con nitidez
manifiesta el error que se pretende subsanar” (Fallos: 315:1413; 315: 2581; 318:2329).
Este es el caso, en el que el recurrente efectivamente solicitó, tanto en sede administrativa como
judicial, el reconocimiento y pago de la bonificación por título universitario (fs. 11/17, 26 vto., 33 vto.).
Por su parte, la propia demandada reconoce que la resolución impugnada “no satisface lo
peticionado por el recurrente consistente en el pago de la bonificación por título universitario”, y que ha
incurrido en un “yerro involuntario”, procediendo a instar el trámite pertinente para su reconocimiento (f.
65).
En estas condiciones, no sería razonable hacer cargo al recurrente de un equívoco del que es
absolutamente ajeno o en su caso, exigirle la renovación del planteo o, el ejercicio de la vía extraordinaria
para su corrección.
En este aspecto, la Corte local tiene dicho que configura “un absurdo lesivo de la garantía de defensa
en juicio, acordar firmeza a un yerro patente o imponer un engorroso trámite de alzada para su enmienda”
(“Malvicino”, citado).
En consecuencia, siendo que el caso guarda, en sus aspectos relevantes, substancial analogía con
los resueltos por esta Cámara en autos “Monje” (A. T. 4, pág. 299), “Cueva” (A. T. 4, pág. 407), “Beloso”
(A. T. 5, pág. 439), “Speranza” (A. T. 6, pág. 225), etc., a los que -mutatis mutandi- corresponde remitir,
el mismo es susceptible de ser encuadrado en el artículo 14, primer párrafo, de la ley 11.330, debiéndose
conceder provisionalmente, y para el futuro, el beneficio reclamado, con costas a la demandada.
Por todo ello, la Cámara de lo Contencioso Administrativo N/ 1 RESUELVE: Revocar el punto 2
de la resolució n de fecha 17.8.2005 (A. y S. T. 2, pág. 423) y hacer lugar, con el alcance precisado, al
pedido cautelar efectuado por el señor Diego Hernán Marozzi. Costas a la demandada.
Regístrese y hágase saber.
Fdo.: DE MATTIA. LISA. PALACIOS. Barraguirre (Secretario).
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