io8 tantc el mal tiempo salió á ptescnciar la tan deseada entrada de S. A. y que con vivas y aclamaciones manifestaba su regocijo , su adhesión á las nuevas insthucienes y odi.) á la tiranía : siguió al prado donde se colocó una sobervia pirámide con inscripciones alusivas al 2 de Mjyo. Continuó por la calle de Alcalá, Puerta del Sol, calle nmyor , viéndose los balcones cubiertos de gente , y al llegar á las casas consistorialcr , donde, habia otro arco triunfal se redoblaron los vivas y ac'lnmociones que no cesaron hasta su entrada en palad o : en cuyos balcones tuvo el pueblo el gusto de ver & S. A que se digno salir á ellos, condescendiendo con las súplicas de aquel. En la entrada y carrera hasta palacio precedían á S. A. los batidores de guardias de Corps, y en seguida de ellos el gobernador de esta plaza con toda la plana mayor. Caminaba lentamente tras ellos el coche de la Regencia. Iban después el pichete de guardias de Corps y una compañía de artille; ía , que escoltaban á S. A. , y los ministros de Estado y del Despacho ; en seguida la diputación provincial y el ayuntamiento de esta villa en vistosos COCÍH"=; tras de los quales marchaban el mencionado regimiento de caballería del Rey , y el de dragones del mismo título. En toda la carrera estaban formados los zapadores, artilleros , el regimiento de infantería de Logroño , y junto á pilacio una compañía de guardias Españolas. Las cjsas del tránsito ofrecían á la vista ricas y variadas colgaduras , nota idose en la casa de correos un hermoso busto de nuestro amado Monarca , y su retrato en la ácademri de lís nobles artes, en la aduana y otros tdifuios. Por la noche hubo iluminación general. NOTA. En el número anterior, art. Cambios'. lapalabra de pérdida , debe estar después de Cádiz. 4 -| á g. Eirh Oficina de D. Francisco Cándido Peyei Prieto,