Algunas consideraciones en el Impuesto sobre la Renta (ISR) sobre la condonación de intereses Autor: C.P. Juan Alejandro Solano González - Socio: Sin duda, la actual situación económica mundial ha provocado que entidades de diversos tamaños y giros, vean mermada su capacidad para afrontar el pago de deudas contratadas con distintas partes que pueden ser residentes, tanto en el país como en el extranjero, lo cual, en muchos casos, ha obligado a negociar dichas deudas a los acreedores, incorporando en algunas de esas negociaciones, la figura de la condonación de los adeudos de que se trate. En el caso específico de este tipo de negociaciones con acreedores residentes en el extranjero, en adición a los efectos fiscales que, en términos generales, se derivan de una condonación, y que más adelante se comentan, debe considerarse la obligación que normalmente existe de retener ISR aplicando una tasa específica sobre los intereses a favor del residente en el extranjero, aun cuando en muchos casos se acuerde que dicha retención sea absorbida por el deudor, incrementando con esto el costo del financiamiento que éste haya obtenido. Con respecto a lo mencionado en el párrafo anterior, cabe señalar que, en materia del ISR, tratándose del deudor residente en México, la condonación de adeudos que obtenga, será un ingreso acumulable, conforme a lo establecido en el Artículo 17 de la Ley del ISR (LISR), en virtud de que por dicho acto se genera un incremento en su patrimonio al eliminar una obligación de pago a su cargo por un bien (normalmente efectivo) que recibió, sin que medie la disminución de un activo de dicho deudor para tal eliminación. En el caso específico de la condonación de una deuda que involucre intereses devengados, en virtud de que los mismos son, en los términos de la Fracción IX del Artículo 29 de la LISR, deducibles para las personas morales, conforme se vayan devengando; el ingreso que se genere con motivo de la condonación de esos conceptos, prácticamente neutralizaría su deducción y los efectos fiscales de dichos intereses, en general, se anularían; sin embargo, debido a que como antes se indicó, la deducción de los intereses tiene lugar conforme los mismos se devengan y el ingreso por la condonación se reconoce hasta que la misma se concreta, los momentos y montos de deducción y acumulación podrían no empatar, incluso podrían ser reconocidos en ejercicio fiscales distintos; situación que, desde un punto de vista financiero, podría en ciertas circunstancias generar un beneficio para el deudor que esté en este supuesto, al anticipar una deducción. © 2010 PricewaterhouseCoopers. Todos los derechos reservados. PricewaterhouseCoopers se refiere a PricewaterhouseCoopers México, la red global de PricewaterhouseCoopers u otras firmas miembro de la red, cada una de las cuales constituye una entidad legal autónoma e independiente. *connectedthinking es una marca registrada de PricewaterhouseCoopers. En relación con lo anterior, dado que la mayoría de los intereses devengados a favor de residentes en el extranjero, están sujetos a una retención del ISR, obligación que generalmente debe cumplirse por el propio deudor, habría que considerar el efecto que sobre dicha obligación tendrá la condonación de los intereses. Al respecto, el quinto párrafo del Artículo 179 de la LISR, establece en forma general, que tratándose de pagos al extranjero, cuando en los términos de dicho Título esté previsto que se pague el ISR mediante retención, el retenedor estará obligado a enterar una cantidad equivalente a la que debió haber retenido en la fecha de exigibilidad o al momento en que se efectúe el pago; lo que suceda primero. Dicho párrafo también señala que para efectos de ese Título (residentes en el extranjero) tendrá el mismo efecto que el pago, cualquier otro acto jurídico por virtud del cual el deudor extingue la obligación de que se trate. Por otra parte, en el Artículo 195 de la LISR, se establece que tratándose de ingresos por intereses para residentes en el extranjero, hay fuente de riqueza en territorio nacional cuando en el país se coloque o invierta el capital o cuando los intereses se paguen por un residente en el país o un residente en el extranjero con establecimiento permanente en el país. También señala que el ISR se pagará mediante retención que se efectuará por la persona que realice lo pagos y se calculará aplicando a los intereses que obtenga el residente en el extranjero sin deducción alguna, la tasa de ISR que corresponda, de acuerdo con la naturaleza y residencia del beneficiario, o del tipo de crédito que genere los intereses, en los términos de dicho ordenamiento. Tomando en cuenta todo lo anteriormente señalado, se desprende lo siguiente: 1. Tratándose de pago de intereses al extranjero de fuente de riqueza ubicada en México, existe la obligación de enterar un ISR equivalente al que se hubiese tenido que retener sobre el interés a favor en su fecha de exigibilidad, aun cuando no se efectúe el pago de dichos intereses en esa fecha. 2. Si antes de que se presente la fecha de exigibilidad de los intereses devengados a favor del residente en el extranjero, el acreedor condona el pago de los mismos, consideramos que no se materializaría la obligación de efectuar la retención del ISR, ya que no se presentarían los supuestos que la generan; es decir, no se presentaría la fecha de exigibilidad, obviamente no habría pago y aunque se extinga la obligación, la misma se deriva de una acción directa del acreedor, no del deudor, que es el otro supuesto que, conforme a lo antes señalado, detona la obligación de retención, al considerarse que hubo pago. © 2010 PricewaterhouseCoopers. Todos los derechos reservados. PricewaterhouseCoopers se refiere a PricewaterhouseCoopers México, la red global de PricewaterhouseCoopers u otras firmas miembro de la red, cada una de las cuales constituye una entidad legal autónoma e independiente. *connectedthinking es una marca registrada de PricewaterhouseCoopers. 3. Conforme a lo señalado en el punto 2, la condonación de intereses no daría lugar al cumplimiento de la obligación de retención del ISR, lo cual, desde una perspectiva económica, hace mucho sentido, debido a que el acreedor extranjero no tendría un ingreso de fuente mexicana sobre el cual debiera pagar impuestos en el país; al contrario, tendría una merma en su patrimonio, al perder el derecho a cobrar el monto de la deuda que hubiese condonado. 4. En su caso, si la exigibilidad de los intereses se hubiese dado antes de su condonación, y el deudor en cumplimiento de las reglas de retención citadas, hubiera enterado una cantidad equivalente al ISR que le correspondiera como retención de este impuesto a dicho concepto, habría que evaluar con más detalle sin hay elementos para que el acreedor reclamara el pago efectuado como un pago indebido, ya que con motivo de la condonación, el ingreso, objeto del gravamen, no se materializó e incluso, como antes se mencionó, la deducción de los intereses para el deudor se neutralizaría con el reconocimiento del ingreso por la condonación de esos conceptos. En relación con lo que antes se indicó, cabe señalar que en los casos en los que el residente en México, al que se le condonen los intereses, estuviera obligado como parte de los acuerdos de financiamiento correspondientes a absorber el ISR que corresponda para la retención de dicho impuesto, en términos del párrafo tercero del Artículo 179 de la LISR , el impuesto que se absorbiera, se considera ingreso para el residente en el extranjero de la misma naturaleza que el ingreso de que se trate; es decir, interés en nuestro caso y, por lo tanto, también estaría sujeto al pago del ISR, por lo cual se tendría que “piramidar” con la tasa de impuesto respectiva. Dicho excedente también podría deducirse cuando el mismo se cubra como un costo adicional, en la medida en la que su absorción fuera necesaria. En este supuesto, al momento de presentarse la condonación de los intereses, consideramos que en relación con el reconocimiento como ingreso del monto de intereses condonados por parte del deudor, éste no tendría que reconocer como una partida acumulable, la cancelación de la parte “piramidada”; es decir, el exceso del valor nominal del interés a favor del acreedor extranjero, ya que al no generarse la obligación de retención de ISR por los antes señalado, tampoco habría ingreso por el impuesto absorbido, puesto que al condonarse el interés “piramidado”, ese excedente tampoco se pagaría y tendría que ser cancelado sin que hubiese sido previamente deducible. Por otra parte, en el caso de condonaciones que se lleven a cabo entre dos partes residentes en México, no habría el componente de la retención del ISR antes señalado, y, aunque en términos generales, dicha condonación también implica el reconocimiento de un ingreso acumulable para el deudor, consideramos que la deducción de la misma por parte del acreedor sería cuestionable, en virtud de que el requisito de ser un gasto estrictamente © 2010 PricewaterhouseCoopers. Todos los derechos reservados. PricewaterhouseCoopers se refiere a PricewaterhouseCoopers México, la red global de PricewaterhouseCoopers u otras firmas miembro de la red, cada una de las cuales constituye una entidad legal autónoma e independiente. *connectedthinking es una marca registrada de PricewaterhouseCoopers. indispensable estaría en duda, ya que finalmente una condonación es una exoneración graciosa y discrecional del acreedor; por lo tanto, la figura de la condonación podría romper el equilibrio en el tratamiento de deducción/acumulación de las partidas involucradas. Por otro lado, cabe señalar que tratándose de personas morales residentes en México, en el Artículo 18, Fracción IV de la LISR, se establece que tratándose de las deudas no cubiertas por el contribuyente, el monto de las mismas se considerará un ingreso acumulable, en el mes en el que se consuma el plazo de prescripción o en el mes en el que se cumpla el plazo establecido en el segundo párrafo de la Fracción XVI del Artículo 31 de dicha LISR, para que el acreedor pueda deducir como incobrable la cuenta por cobrar de que se trate, que es de un año contado a partir de que el crédito incurra en mora. Conforme a lo anterior, tendría que reconocerse el ingreso mencionado por los créditos no pagados al momento de presentarse el supuesto citado, aun cuando subsista legalmente la obligación de pago relativa e, independientemente de que el acreedor hubiera o no tomado la deducción de dicho crédito. Por lo anterior, en caso de que con posterioridad al reconocimiento del ingreso mencionado, el acreedor condonará el pago del crédito de que se trate; el monto de dicha condonación ya no debiera de volverse a acumular, hasta la cantidad que, conforme a la regla antes citada, ya se hubiera acumulado, puesto que de lo contrario se duplicaría el efecto acumulable de dicha partida, por lo cual habrá que tener control de estos efectos; sobre todo, si los momentos de acumulación y condonación señalados se presentan en distintos ejercicios; por su parte el acreedor que efectúe la condonación, en caso de que hubiese tomado la deducción de los créditos incobrables, en los términos del Artículo 31, Fracción XVI, antes señalado, simplemente tendría que cancelar la cuenta por cobrar relativa sin un efecto fiscal adicional; sin embargo, hay que considerar que la disposición en comento, en su segundo párrafo, hace referencia a la posibilidad de deducir cuentas pendientes de cobro que cumplan con el período de un año después de que incurran en mora, tratándose de créditos cuya suerte principal al día de su vencimiento no exceda de treinta mil unidades de inversión (UDIS); es decir, por créditos mayores a este monto no podría aplicar la deducción por incobrable con el simple paso del tiempo, aun cuando el deudor hubiera tenido que acumular el monto de las cuentas por pagar, sin importar que fueran por un monto mayor a las treinta mil UDIS; situación que puede generar una inequidad en el tratamiento de estos conceptos. "El contenido de este documento es meramente informativo y de ninguna manera debe considerarse como una asesoría profesional, ni ser fuente para la toma de decisiones. En todo caso, deberán consultarse las disposiciones fiscales y legales, así como a un profesionista calificado." © 2010 PricewaterhouseCoopers. Todos los derechos reservados. PricewaterhouseCoopers se refiere a PricewaterhouseCoopers México, la red global de PricewaterhouseCoopers u otras firmas miembro de la red, cada una de las cuales constituye una entidad legal autónoma e independiente. *connectedthinking es una marca registrada de PricewaterhouseCoopers.