Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional El pensamiento de Sócrates y sus discípulos Sócrates Era un filósofo griego muy sabio y se opuso consistentemente a los sofistas. Sócrates quería una ciudad resultado de leyes absolutas y eternas, y no relativas y subjetivas. Su posición filosófica, representada en los diálogos de su discípulo Platón, puede resumirse de la siguiente manera: la virtud es conocimiento; la gente será virtuosa si sabe lo que es la virtud, y el vicio, o el mal, es fruto de la ignorancia. Así, según Sócrates, la educación consistía en aquello que constituye la virtud y que puede conseguir que la gente sea y actúe conforme a la moral. Es importante señalar algunos elementos sobresalientes para entender el pensamiento socrático. Marco histórico: Con Sócrates Surge la ciencia ética que intenta demostrar la existencia de valores absolutos (bien y justicia) e inmutables para establecer una leyes. Bien, felicidad y leyes: De acuerdo a Sócrates, estos son valores que el hombre puede alcanzar mediante el uso de la razón, si se alcanzan el hombre es sabio y virtuoso. Intelectualismo moral: Sócrates, Identifica saber con virtud y vicio con ignorancia. Para él, para conseguir una sociedad buena, justa y virtuosa es necesaria la educación. ©Unidad de e-Learning 2015 1 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Platón De acuerdo a Platón, el bien es un elemento fundamental de la realidad. Para este filósofo, quien fue uno de los discípulos más brillantes de Sócrates, el mal no existe en sí mismo, sino como reflejo imperfecto de lo real, que es el bien. En sus Diálogos (primera mitad del siglo IV a.C.) mantiene que la virtud humana descansa en la aptitud de una persona para llevar a cabo su propia función en el mundo, que vendrá determinada por la parte del alma que domine en cada uno de los individuos. Según este pensador, el alma humana está compuesta por tres partes: 1. La concupiscente, la cual nos induce a que el placer es la ganancia ‘‘riquezas’’; 2. La irascible, nos direcciona a la dominación, a la victoria y al deseo de gloria. 3. La racional es la que siempre tiene la tendencia a conocer la verdad, sin importar la reputación y las riquezas que esto proporcione y por esta exclusividad que tiene la razón es digna de llamarla con toda justicia amante de la ciencia y del saber. Cada una de estas partes del alma, la concupiscible, la irascible y la racional se proyecta con una virtud específica en la persona y juega un papel puntual. La virtud del intelecto es la sabiduría, o el conocimiento de los fines y propósitos de la vida; la de la voluntad es el valor, la capacidad de actuar, y la de las emociones es la templanza, o el autocontrol. La virtud última, la justicia, es la relación armoniosa entre todas las demás, cuando cada parte del alma cumple su tarea apropiada y guarda el lugar que le corresponde. Platón mantenía que el intelecto ha de ser el soberano, la voluntad figuraría en segundo lugar y las emociones en el tercer estrato, sujetas al intelecto y a la voluntad. La persona justa, cuya vida está guiada por este orden, es por lo tanto una persona buena. En este orden de ideas, la justicia se equipara con la bondad y la injusticia con la maldad. Es un buen ideal, el procurar ser justos. ©Unidad de e-Learning 2015 2 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Platón que había sido discípulo de Sócrates, tenía un pensamiento ético enmarcado dentro del ámbito político y esto debido posiblemente a la influencia de este pensador por parte de su familia que eras aristocráticos. Platón se cuestionaba, que si todos los hombres son iguales ¿por qué entonces unos deben vivir mejor que otros?, y a partir de esta manera de pensar desarrollo un tipo de polis con equidad en las clases, Platón observa que los hombres poseen diversas necesidades que los llevan a constituir comunidades en las cuales se construyen modos y estilos de vida complejos ya que dependen de la manera en que el ciudadano se comporta en el colectivo: actividad militar para ampliar, satisfacer y defender las propiedades y las necesidades de poder de los gobernantes de las comunidades, maneras de comunicarse diversas y complejas, diferentes estrategias de moverse en el mundo de los negocios, etc. Toda esta complejidad llevó a que los gobernante desarrollaran reglamentaciones y diferentes modos para mantener el poder y en este propósito muchas veces se equivocaron tomando decisiones equivocadas, inmorales, alejadas de coherencia y sabiduría que debería ser el insumo que sostenga toda decisión ética. Esta manera de pensar maliciosa y mal intencionada dio lugar a cuatro estilos de malos gobiernos: Timocracia: En este tipo de gobierno, los gobernantes, se vuelven amantes voraces de las riquezas, honrando de manera desmedida la posesión de plata y oro y todo esto motivado por su avaricia y pensamientos viciosos. Oligarquía: En este gobierno, toma importancia los niveles de fortuna que se posea, es decir los que mandan son los que tienen más dinero, los más ricos son los que están en la cumbre del poder y los pobres prácticamente no participan. Hay una persecución desmedida e incesante de la riqueza y un menosprecio de la virtud y de la bondad. Democracia: Este es el gobierno del pueblo, en donde el gusto de las personas se expresa por consenso, pero lo malo de este régimen democrático, es que puede surgir un desorden o una anarquía, producto de una expresión colectiva consensuada que no uso el razonamiento para decidir y en donde se impuso lo cuantitativo a lo racional. Tiranía: En este gobierno, el tirano, embriagado de poder, necesita, de la adulación a hombres viciosos, sin valores morales, dispuestos a hacer cualquier cosa, que le ayuden a mantener su dictadura, sin importar mayor cosa el daño que causen en la población. ©Unidad de e-Learning 2015 3 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Ante la justificación de Platón sobre los malos gobiernos en la sociedad, queda cierta duda de que exista una salida para la equidad entre los hombres. De tal manera que para que la ética se genere en una ciudad-estado, debe estar basada en la justicia y en la recta razón de un hombre que sea sabio y justo, este hombre debe tener las cualidades necesarias para poder cimentar un gobierno, estas cualidades no le son proporcionadas por sus impulsos corpóreos, o por las pasiones que lo dominan, solamente la razón es quien da los parámetros para levantar un hombre lleno de virtudes y de sabiduría. Desde la opción de un hombre sabio y justo se abre la oportunidad para una forma de estado equitativo entre los hombres y la posibilidad del desarrollo ético. Platón, como ya se ha dicho, tiene una concepción del alma humana en forma tripartita y que cada una de estas partes son vinculantes con algún tipo de estado. De acuerdo a esto y siguiendo la lógica de Platón, diremos entonces que las partes conocidas como irascibilidad y concupiscencia no son buenas para gobernar un estado, ya que esas cualidades van a dar lugar posiblemente a gobiernos tiránicos, democráticos, oligárquico o timocrático. En este sentido Platón propone que el estado ideal debe estar gobernado por hombres fundamentados en la tercera parte, el alma racional, que les permita promover la ética, la justicia y el saber en las relaciones interpersonales. Para este filósofo, el estado ideal estaría conformado por hombres sabios, justos, en otras palabras por hombre que hagan honor a la verdad, la bondad, las buenas costumbres y procuren permanentemente el bien común. El Estado Ideal según Platón estaría conformado de la siguiente manera: Los reyes filósofos, son los que gobiernan, pues su racionalidad y coherencia les da la facultad para dirigir justamente un estado, ya que ellos tienen la virtud de la sabiduría. Los guardianes, son los que protegerán el estado, ellos tiene la virtud del valor y la fortaleza para mantener las leyes de los gobernantes. Los artesanos son los que se encargarán de mantener económicamente al estado y tendrán la virtud de la templanza En conclusión en el estado ideal de Platón se encuentran las virtudes y las leyes propicias para la convivencia entre los hombres, sin alguna posibilidad de desigualdad, también la ética se tomará como el sumo bien el cual será adoptado por cada hombre, hasta alcanzar la simetría de belleza y verdad. ©Unidad de e-Learning 2015 4 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Aristóteles Fue discípulo de Platón y es el primero que escribe de manera sistemática, compendios o tratados sobre la Ética. Podemos considerarlo como el gran fundador teórico de la materia, y es que este filósofo, estaba plenamente convencido de que "somos lo que hacemos". De ahí la importancia de una reflexión racional de la conducta. Abandonando el misterioso "mundo de las Ideas" de Platón, Aristóteles, apostó por el deber de buscar la felicidad aquí, en el más acá, único suelo permitido. Él decía que si vivimos una sola vez y no somos felices, hemos fracasado. Consideraba que la primera búsqueda del hombre debe ser el de la FELICIDAD (eudemonismo). La teoría aristotélica sobre la ética, se basa en el hecho de alcanzar la felicidad, pero antes de alcanzar la felicidad hay que reflexionar y determinar cómo se va a alcanzar o que procesos hay que seguir para ir constituyendo un modelo para lograr los fines y objetivos propuestos. Estos procesos se dan en la medida que el hombre tiene ciertas facultades para realizar algo, según el arte o destreza que desarrolle, por ejemplo: un carpintero, hace sillas, para hacer las sillas tiene que conseguir madera, tallarla, cortarla, lijarla, decorarla, hasta que obtiene la silla. El ejemplo anterior demuestra cómo se aplica la teoría de Aristóteles para alcanzar algún fin, pero, para alcanzar la felicidad no sólo es desarrollar las actitudes artísticas de los hombres, sino que la teoría aristotélica va más enfocada hacia un desarrollo de las virtudes, en donde sólo se alcanzan por medio de la praxis en el campo de las interrelaciones con otros hombres, es decir en el marco de las interacciones sociales. ©Unidad de e-Learning 2015 5 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Las complejas interacciones sociales, hace que el hombre tenga y maneje una normatividad que lo conduce a mantener un equilibrio entre el vicio y el exceso, es decir, “todo con equilibrio, nada en exceso”. La felicidad que es el bien es lo que cada hombre debe alcanzar en la vida, pero, para lograr la felicidad, hay que descubrir y determinar en donde se encuentra la verdadera felicidad, porque algunos hombres limitan la felicidad a los placeres, a los honores o la contemplación, lo cual es totalmente equivoco, pues la verdadera felicidad es la construcción de un camino hacia el bien supremo, pero para ser totalmente felices hay que ser hombres prudentes, justos y sabios, en todas las acciones cotidianas, es decir que cada momento en la vida nos da la oportunidad para analizar cuál puede ser el punto medio entre el exceso y el defecto, al encontrarlo se es prudente en la acción que ocurre, y esta determinación de la acción prudente hace que se surjan y se erijan hombres sabios y por consiguiente felices, por lo tanto la felicidad no es un producto individual sino colectivo según el marco de normatividad que se haya estructurado en una comunidad. El hombre que se propone continuamente alcanzar la felicidad y se esfuerza con diligencia para dicho propósito, busca de esta manera alcanzar todos los fines hasta lograr conquistar el bien supremo. Aunque el fin único y absolutamente perfecto sería el que nosotros mismos determinamos y buscamos. En el pensamiento y lógica aristotélica, el bien perfecto es el que debe siempre poseerse por sí mismo y no por una razón ajena a él. Este bien parece ser, en primer lugar, la felicidad. La buscamos, en efecto, siempre por sí misma y no por una razón ajena a ella misma, ya que la felicidad tiene un valor intrínseco. A manera de conclusión diremos que según el pensamiento aristotélico, el hombre ético, ha de ser un hombre prudente, sabio y justo, que mide las consecuencias en las actividades diarias de la vida y que mantiene un género de vida en la razón, la cual es la guía perfecta para conseguir los bienes, este género de vida consiste en la actividad del alma conforme a la virtud, si ello es así suponemos que lo peculiar del hombre es una forma de vida, acompañada de acciones razonables, ya que en el hombre perfecto todo se hace según el bien, lo bello y lo honesto, realizándose cada uno de estos actos perfectamente, según su virtud peculiar. ©Unidad de e-Learning 2015 6 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Escuelas helenísticas Escuelas Helenísticas Circunscribir en el tiempo éste período siempre ha resultado un poco difícil, difuso y complejo, dado que en lo que respecta a los hitos de inicio o finalización del período los historiadores aún no se ponen de acuerdo. No obstante, nos enmarcaremos en el tiempo circunscrito entre la muerte de Alejandro Magno en el 322 ó 323 a.C., (año también de la muerte de Aristóteles) para el inicio y su terminación la ubicaremos a finales del s. III d.C., para ser exactos en el año 270 d.C. cuando sobrevino la muerte de Plotino. Se considera helenismo propiamente al fenómeno y proceso de difusión de la cultura griega en el ámbito del mundo oriental, difusión que supone una universalización de esta cultura, dentro de un proceso histórico de descomposición del imperio macedónico, que pasa por las fases de desmembración, conquista de Grecia por Roma y el surgimiento del imperio romano. Esta época de profundas transformaciones sociales está marcada por varios elementos significativos: a. Aparición de las llamadas escuelas helenísticas b. Florecimiento de la ciencia griega c. Decadencia de la ciencia helenística (Diccionario de Filosofía Herder, 1998). Las Escuelas de éste período que más se relacionaron con el desarrollo de la ética son: los cínicos (quienes ya se abordaron entre las escuelas socráticas menores), el epicureísmo y el estoicismo. Epicureísmo Este es un movimiento filosófico conformado por el conjunto de doctrinas desarrolladas y establecidas por Epicuro de Samos (341 ó 342 – 270 a.C.) y por sus discípulos: Colotes, Timócrates, Hermarco Idomeneo, Hedeira, Leonteso y principalmente Metrodoro. Sostiene esta escuela, el mismo pensamiento y doctrina que los cirenaicos en torno al placer, al que consideran el valor supremo, al cual se subordinan todos los demás. Para ello, seguían la regla de conducta práctica de “procurar el máximo de placer con el mínimo de dolor” (Gutiérrez Sáenz, 1996, pág. 141). Pero a diferencia de la concepción hedonista de Aristipo que para él la felicidad era la suma de todos los placeres, Epicuro trata de mejorarlo, apoyándose en la noción de naturaleza. El placer es visto como algo propio de nuestra naturaleza humana, sin embargo, hace una distinción entre los diferentes placeres, invitando aspirar y alcanzar a aquellos que fueran elementales para la vida y cuya práctica no fuera motivo de escándalo. Según Escobar Valenzuela (2001, pág. 150) Epicuro desarrolla una clasificación de los placeres y los establece de la siguiente manera: a. Placeres naturales y necesarios: Son aquellos que dan bienestar y paz al alma y evitan daños al cuerpo, como el comer y el beber moderadamente. b. Placeres naturales pero no necesarios. Los que nos permiten escoger, variar y preferir ciertos placeres a otros, como comer peras en lugar de manzanas, pan en vez de pescado. c. Ni naturales ni necesarios. Éstos son insaciables, como la ambición y la sensualidad que son fuentes del mal. El hombre sabio y prudente debe alejarse de ellos. ©Unidad de e-Learning 2015 7 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Hay que sumar a la anterior clasificación, la tesis de Metrodoro (íntimo amigo y discípulo predilecto de Epicuro), sobre el placer catastemático, estos son los placeres naturales y necesarios propios de la entereza de ánimo, que se basan en la privación del dolor físico y moral. En oposición al estoicismo sostiene que la virtud no es sino un medio subordinado al placer. Estoicismo Zenón de Citio (333 – 263 a.C.), fue el fundador de esta escuela. Los estoicos, consideraban a la ética como la tercera parte de la filosofía (la lógica y la física eran las dos primeras). La concepción de la ética se construye en torno a la doctrina intelectualista del determinismo cósmico, ya que todo el universo se encuentra, según ellos, regido por el logos, palabra que viene del griego legein, se traduce habitualmente como razón, aunque también significa discurso, verbo y palabra. En cierta forma, pues, significa razón discursiva que muestra su sentido a través de la palabra (Diccionario de Filosofía Herder, 1998). Esta escuela sostiene, que el uso adecuado de la razón, ha de permitir a los hombres equilibrar y armonizar la naturaleza humana con la naturaleza cósmica, pues es ésta la que ha de permitir la adquisición de las virtudes y con ello poder acceder a la felicidad. En este sentido, el sabio, es quien somete a la razón los impulsos de las pasiones (consideradas nocivas para el ser humano). Por tales pensamientos y aseveraciones, muchos pensadores, consideran las proposiciones de ésta escuela como un simple idealismo ético. Los grados más elevados de la vida estoica están sellados por la impasibilidad, que es un equilibrio y serenidad completos enfrente de los afectos, las pasiones y las contradicciones de la vida. El estoico tiene que renunciar a los placeres y soportar los dolores y penalidades propias (Gutiérrez Sáenz, 1996, pág. 140). ©Unidad de e-Learning 2015 8 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional CONCLUSIÓN Hemos echado un vistazo de manera breve, al recorrido histórico que ha tenido que transitar la ética en sus orígenes para germinar, desarrollarse y lograr convertirse en el pensamiento estructurado y sistematizado de hoy día. Hemos constatado la estrecha relación de la ética con el mismo aparecimiento de la filosofía y como ésta es parte constitutiva de la misma. En los posteriores años del esplendor y difusión de la cultura griega, su influencia permanente y significativa posibilitaron el surgimiento de variadas corrientes filosóficas que permitieron concebir nuevos sistemas éticos, tales como: la ética formal de Kant, el utilitarismo, el determinismo, el vitalismo, el emotivismo moral, el decisionismo, el consecuencialismo, el intuicionismo, el naturalismo, la ética marxista, la ética del superhombre, la ética axiológica, la ética comunicativa, la ética de la liberación, entre otros. Por todo el aporte cultural de los griegos, es que son considerados como la cuna de la cultura occidental. ©Unidad de e-Learning 2015 9 Sesión 3 – Unidad 2 – Ética Profesional Actividad de evaluación Actividad Descripción Nombre de la actividad Tipo de actividad Objetivo Resumiendo Instrucciones Pasos a seguir para realizar la actividad Individual Fomentar en el estudiante el desarrollo de la capacidad de síntesis. • Cada uno de los estudiantes del curso deberá construir un mapa mental en el que incorpore los elementos más sobresalientes de las temáticas vistas en esta semana. • El mapa mental deberá ser elaborado en mindmeister que es una herramienta que les permitirá desarrollar el contenido de su tarea, el mapa mental deberán dejarlo como público para tener acceso a él. Recursos de apoyo: Que es un mapa mental, como crearlo, etc. Mindmeister ( Herramienta para la creación de mapas mentales) Video tutorial para utilizar Mindmeister (https://www.youtube.com/watch?v=KjgprJzTupk) Fecha de entrega Criterios de evaluación Al finalizar el mapa mental deberán compartir el enlace (dirección) del mapa en el foro correspondiente a esta semana Tienes hasta las 11:55pm del domingo de la semana en curso. • Ortografía 2 pts. • Originalidad del contenido: 3pts. • Nivel de la síntesis: 5pts. Recursos complementarios "Ética para Amador" de Fernando Savater ©Unidad de e-Learning 2015 10