presentan el número diploide de cromosomas, y que proceden

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ESTUDIOS SOBRE LAS C É L U L A S
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SEXUALES
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presentan el n ú m e r o diploide de c r o m o s o m a s , y que p r o c e d e n
verosímilmente, de mitosis, en las que los autosomas bivalentes,
aunque disociados en los elementos q u e los integran, perma­
necen en la misma célula, c u y o p r o t o p l a s m a no llega á dividirse;
en otros casos he podido observar que las células hijas, por falta
de espacio seguramente, se disponen en forma de V , soldándose
completamente por los e x t r e m o s de ésta y fusionándose los c r o ­
mosomas que ocupan cada una de ellas c o n los de la otra, cons­
tituyéndose una célula gigante con el n ú m e r o diploide de cro­
mosomas; es m u y frecuente encontrar
estas células anormales.
Durante la segunda mitosis madurativa los c r o m o s o m a s de estas
células gigantes se dividen c o m o de ordinario, y las mitades
respectivas de cada c r o m o s o m a entran en las células hijas p r o ­
ducidas (espermátidas), que llevan, por consiguiente, el n ú m e r o
diploide de cromosomas, y que dan lugar, verosímilmente, á e s ­
permatozoides gigantes, c u y a aptitud para la fecundación des­
conozco por c o m p l e t o .
El c r o m o s o m a X y los M - c r o m o s o m a s se presentan en forma
de gruesos bastones cromáticos, rectos ó en forma de V , 6 bien
como masas r e d o n d e a d a s ú ovales, distinguiéndose perfectamente
entre los autosomas.
E n la figura 8, A , represento en vista polar una metafase de
un espermatocito secundario sin c r o m o s o m a X ; el n ú m e r o d e
autosomas es 1 5 , mas el M - c r o m o s o m a , , en total 1 6 elementos
cromáticos; p e r t e n e c e este espermatocito á un cisto, que p r o c e d e
de células que llevan 33 c r o m o s o m a s . E n la misma figura B , he
dibujado una de las estrellas hijas de la anafase de esta mitosis,
que lleva el e l e m e n t o X y p e r t e n e c e al mismo cisto q u e la an­
terior; el n ú m e r o total d e c r o m o s o m a s es 1 7 . A m b a s células
vienen á confirmar la distribución normal de los c r o m o s o m a s
en los espermatocitos que llevan 33 de estos elementos. C re­
presenta una anafase final con 18 c r o m o s o m a s , de la que he r e ­
presentado solamente u n í de las espermátidas originadas y en
la que se distingue perfectamente el bivalente (p), que no se ha
disociado en los elementos que le integran, d u r a n t e la primera
mitosis madurativa; en la otra célula hija, no representada en la
figura, a p a r e c e también este bivalente, siendo p o c o probable que
Mem. E. Soc.
esp
Hist. uat.,
x,
1915.
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