AUMENTO OSEO - Lenceria Patagonia

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Prof. DR. Osvaldo Tomas Cacciacane
Fernanda Herrera
Mariano Sapia
Gabriela Scadding
Alejandro Virgillito
Escuela Superior de Implantología- Bs. As.
Argentina
REGENERACIÓN ÓSEA
Tras una lesión, incluidas la extracción de un diente o la inserción de un implante, el
hueso puede reconstruirse por medio de procesos fisiológicos de remodelación o
cicatrización. En estos procesos pueden incorporarse materiales de aumento óseo para
favorecer o estimular el crecimiento del hueso en zonas en las que haya desaparecido como
consecuencia de procesos patológicos, traumáticos o fisiológicos. Estos sustitutos óseos
pueden actuar sobre el hueso huésped por medio de tres mecanismos diferentes:
osteoconducción, osteoinducción y/o osteogénesis.
Osteoconducción
La osteoconducción caracteriza el crecimiento óseo por aposición, a partir del hueso
existente y por encima del mismo. Por consiguiente, se necesita para dicho proceso la
presencia de hueso o de células mesenquimatosas diferenciadas. La cicatrización ósea
alrededor de un implante osteointegrado es un proceso osteoconductivo y sigue las fases
típicas de remodelación a nivel de la interfase hueso-implante.
Los materiales osteoconductivos son biocompatibles. Se pueden desarrollar tejido óseo o
tejidos blandos por aposición sobre estos materiales sin que se produzcan signos de
reacción tóxica. Los materiales osteoconductivos más utilizados en implantología son
productos aloplásticos. Los materiales aloplásticos son exclusivamente productos sintéticos
biocompatibles desarrollados para satisfacer un gran número de indicaciones. Se fabrican
en una gran variedad de texturas, tamaños de partículas y formas, que se pueden conseguir
fácilmente.
Pueden clasificarse en cerámicas, polímeros y composites. Los más empleados son las
cerámicas, que pueden ser bio-inertes (óxido de aluminio y óxido de titanio) o bio-activas
(materiales de fosfato cálcico). Las cerámicas bio-inertes no se unen directamente con el
hueso huésped y se mantienen en contacto con el mismo por medios mecánicos. Las
cerámicas bio-activas son el principal grupo de aloplastos empleados para el aumento óseo,
e incluyen la hidroxilapatita (HA) y el fosfato tricálcico beta. Se ha podido demostrar que
se produce un contacto químico entre el hueso y el material injertado.
Existen dos categorías de materiales osteoconductivos para el mantenimiento o el aumento
tisulares: no reabsorbibles y reabsorbibles.
Si se colocan bajo la piel o rodeados de tejido fibroso, estos materiales no forman hueso.
Permanecen relativamente estables, o son reabsorbidos. Podemos resumir la secuencia del
siguiente modo:
1. Aumento óseo por osteoconducción:
a. Células diferenciadas (osteoblastos) que crecen junto a la supeficie por
aposición.
b. Aloplastos (más frecuentes):
1.Sintéticos (cerámica, polímero, composite).
2.Biocompatibles:
a) i) Contacto mecánico con el hueso
ii) Osteointegración
iii) Oxido de aluminio, óxido de titanio
b) Bioactivos:
i)Cerámicas
ii)Hidroxilapatita y fosfato tricálcico (más utilizados).
iii)Contacto químico
c. Aloinjertos:
1) De la misma especie, con diferente genotipo.
a) Hueso congelado (irradiado).
La HA densa se ha convertido en un sustituto muy popular. Este material es osteofílico y
no reabsorbible cuando tiene una estructura cristalina de gran densidad. En presencia de
tejido óseo, se puede observar una interfase directa entre el hueso y la HA. Este hallazgo es
más frecuente cuando el hueso o las membranas de poros pequeños impiden el contacto
inicial del tejido fibroso con la superficie de la HA. Parece ser que la fuente de vasos
sanguíneos en desarrollo determina el tejido de contacto. El tejido fibroso puede crecer 0,5
mm diarios, mientras que el hueso puede hacerlo a un ritmo de 50 um al día; por
consiguiente, el resultado favorece al tejido fibroso.
Cuando se coloca HA sobre hueso cortical, el estrato inferior puede tener hueso en la
interfase, pero la mayoría del material queda encapsulado por tejido fibroso. Cuando la HA
se coloca dentro del hueso preparado o en un alvéolo dental, o se cubre con una membrana
de poros pequeños, la interfase tisular formada suele ser hueso.
La HA densa es un material inorgánico y no puede crecer o fijarse con rigidez sobre la
superficie de un implante. Además, es un producto parecido a la cerámica, muy dura y
difícil de cortar con un cuchillo o una fresa. Por consiguiente, cuando se coloca HA densa
en forma de partículas en el seno del hueso, lo que se pretende por lo general es obturar el
hueco, mantener el volumen y la forma del hueso o sustentar una prótesis removible
mucosoportada. Si se desea insertar un implante endoóseo en la región de hueso-HA, puede
ser necesaria una fresa de diamante y un torno de gran velocidad para modificar la HA.
Es corriente utilizar HA densa en partículas con implantes endoóseos en la placa facial
para mejorar la morfología de los tejidos blandos. Este material también se usa para
aumentar el reborde para la sustentación de prótesis.
El segundo tipo de material osteoconductivo se reabsorbe cuando se coloca en el interior
del hueso o los tejidos blandos. Esta especialmente indicado cuando el hueso puede crecer
primero junto al material y posteriormente sustituirlo, de modo parecido a la sustitución
progresiva que se observa en la remodelación del hueso natural.
Estos materiales suelen ser productos de HA amorfos y muy porosos o bien
combinaciones de fosfato cálcico. Conviene señalar que todos los productos de HA se
reabsorben en presencia de un PH bajo (infección) con una rapidez parecida a la de
cualquier combinación de fosfato cálcico. La HA se reabsorbe a las siguientes velocidades:
1. Estructura:
a. Densa, cristalina:
1)Reabsorción mínima.
b. Amorfa:
2)Reabsorción más rápida
2. Porosidad:
a. Densa:
1)Reabsorción mínima
b. Macroporosa
1)El 15 % de espacios porosos
2)Orificios grandes
c. Microporosa
1)El 30 % de espacios porosos
2)Orificios pequeños
3)Reabsorción más rápida
3. PH:
a. PH reducido (infección)
1) Todos los compuestos de fosfato cálcico (incluida la hidroxilapatita) se
reabsorben con rapidez
Entre los materiales osteoconductivos también existen algunos de origen orgánico como
el hueso congelado o sometido a radiaciones intensas. Los productos inorgánicos
reabsorbibles y no reabsorbibles fabricados son fáciles de conseguir, no presentan riesgo de
contaminación, reacciones alérgicas o transmición de enfermedades, ni obligan a efectuar
más intervenciones quirúrgicas, siendo los materiales osteoconductivos más utilizados en
odontología.
Osteoinducción
Un material osteoinductivo es capaz de inducir la transformación de células
indiferenciadas en osteoblastos o condroblastos en una zona en la que no cabe esperar dicho
comportamiento. Los materiales osteoconductivos contribuyen especialmente a la
formación ósea durante el proceso de remodelación. Los materiales osteoinductivos más
utilizados en implantología son los aloinjertos óseos. Un aloinjerto óseo es un tejido duro
procedente de un individuo de la misma especie que el receptor, pero de diferente genotipo.
Estos materiales eliminan la necesidad de obtener la donación del propio paciente y se tiene
la ventaja de su disponibilidad, que permite utilizarlos en grandes cantidades. Se obtienen a
partir de cadáveres, y se procesan y almacenan en diferentes formas y tamaños en bancos
de hueso para ser aplicados en el futuro. Existen tres tipos de aloinjertos: congelados,
deshidratados por congelación y deshidratados por congelación y desmineralizados.
El hueso congelado se obtiene de los cadáveres y se almacena y congela directamente.
También puede irradiarse para reducir la reacción inmunitaria del receptor. Es
fundamentalmente osteoconductivo y rara vez se utiliza en implantología.
Para obtener hueso deshidratado por congelación, es necesario someterlo a un proceso
adicional de desecación. Se mantiene la matriz inorgánica, pero se necesitan los
osteoclastos para que liberen los factores de crecimiento del hueso, debido a las sales
cálcicas y fosfáticas que quedan. Los osteoclastos pueden inducir resorción ósea en la
región, con lo que el producto es menos predecible. El hueso deshidratado por congelación
funciona también fundamentalmente por un proceso osteoconductivo.
El hueso deshidratado por congelación y desmineralizado (HDDC) también se obtiene a
partir de cadáveres. El proceso para la elaboración del HDDC es muy específico, y
cualquier variación importante puede alterar los resultados. Se recoge hueso cortical y/o
trabecular de una persona completamente sana. Se lava con agua destilada y se tritura hasta
obtener partículas de 75-500 um de tamaño. El polvo se desmineraliza con ácido
clorhídrico o nítrico 0,6N durante 6-16 horas. Una vez deshidratado, se suele esterilizar con
óxido de etileno y desecar por congelación para reducir aún más su antigenicidad. Se
efectúan varias pruebas para valorar la seguridad del proceso; el proceso de
desmineralización con ácido destruye cualquier virus y microorganismo patógeno
conocido. Mediante el proceso reductor con ácido, se eliminan del hueso las sales de calcio
y fosfato. El hueso que queda después de este tratamiento todavía conserva los factores
orgánicos de crecimiento osteogénico en la matriz necesaria para la formación ósea,
incluidos la proteína morfogénica ósea (PMO), el factor de crecimiento de origen
plaquetario y el factor de crecimiento de transformación. El hueso cortical contiene la
mayor parte de la PMO del hueso. Al eliminar las sales del hueso, las proteínas insolubles
pueden pasar a su entorno sin necesidad de la actividad osteoclástica. Debido a ello, es
posible transformar en osteoblastos más células indiferenciadas, y el proceso de formación
de hueso es osteoinductivo.
Si se coloca bajo la piel un material osteoinductivo, este será sustituido por pequeñas
cantidades de hueso. Por consiguiente, se utiliza cuando el entorno no favorece la síntesis
ósea. También se puede emplear con materiales autógenos u osteoconductivos, con lo que
se consigue formar más tejido óseo que sin el HDDC.
Osteogénesis
La osteogénesis hace referencia a los materiales que pueden formar hueso, incluso sin la
presencia de células mesenquimatosas indiferenciadas locales. Los materiales de injerto
osteógenos están formados por células óseas vivas, que producen grandes cantidades de
factores de crecimiento para el hueso. En la actualidad, el hueso autógeno es el único
material osteógeno disponible. Las zonas donantes más utilizadas son los injertos óseos
autógenos de cresta illíaca o injertos óseos locales de la tuberosis maxilar, la rama
ascendente o la sínfisis mentoniana. El hueso medular o trabecular contiene las mayores
concentraciones de osteocitos. Estas células deben almacenarse en suero salino estéril,
lactato de Ringer o solución estéril de dextrosa al 5% y agua para mantener la vitalidad
celular. Esta contraindicado el uso de agua destilada para este cometido, y la sangre venosa
no es tan eficaz como el suero salino o la dextrosa con agua.
Dado que el material de injerto debe obtenerse mediante una intervención quirúrgica
adicional, se emplea cuando las condiciones para el crecimiento del hueso son malas y/o
junto con los otros materiales si se necesita volumen.
El hueso autógeno tiene una matriz inorgánica, formada fundamentalmente por HA, que
contiene osteocitos, osteoblastos, osteoclastos y proteínas osteógenas. El hueso
membranoso obtenido de la sínfisis mandibular representa una excelente fuente de hueso
autógeno, con muy buenas propiedades, como la revascularización precoz, el gran potencial
de PMO y el gran número de células vivas. Con este método se pueden aumentar zonas
reducidas de uno a cuatro dientes.
El mecanismo de crecimiento óseo con hueso autógeno incluye los tres métodos.
Las células vivas, fundamentalmente de la región trabecular, pueden vivir y formar
realmente un producto osteoide. Sin embargo, el suministro sanguíneo y el número de
células influyen notablemente en el resultado. Este proceso de efectos osteógenos
disminuye al cabo de 4 semanas. Al reabsorberse el hueso, puede liberar PMO y otras
proteínas para formar hueso por el proceso osteoinductivo. Este comienza
aproximadamente al cabo de 6 semanas y se puede prolongar durante 6 meses.
El hueso cortical es la principal fuente de estas proteínas. Una gruesa capa cortical sobre
el injerto puede impedir que el tejido fibroso invada la zona, y actúa como una membrana
de poros pequeños, dirigiendo la regeneración. El andamio del injerto óseo autógeno
también puede formar tejido óseo por el efecto osteoconductivo al ir formándose nuevo
hueso mediante sustitución progresiva. (1) (2) (14)
Plasma Rico en Plaquetas
La estimulación de la regeneración de tejidos del organismo ha sido uno de los retos más
perseguidos y anhelados por los especialistas en variadas áreas terapéuticas. En el ámbito
de la implantología oral, con la aparición del Plasma Rico en plaquetas se cuenta con una
técnica que permite la regeneración ósea mediante una sustancia autóloga, propia del
individuo.(3)
Desde que los implantes intraóseos roscados tipo tornillo se impusieron mayoritariamente
a las demás formas de implantología , se buscó la forma de potenciar su grado de adhesión
mediante tratamientos superficiales, de la rosca principalmente. Así tenemos el
revestimiento del implante por plasma de titanio, que aumenta la superficie del cuerpo de 6
a 7 veces( Steinemann, 1988, Testh, 1991, Kirch y col. 1986). El revestimiento de
hidroxiapatita, que en diversos estudios se demostró que se asocia a buenos resultados por
espacio de aproximadamente 5 años, periodo de respuesta favorable en un 95% (Kirch,
1991; Kent y col, 1990; Krauser, 1989) (5)
Otras técnicas de tratamiento de las superficies de los implantes son técnicas de
sustracción, en contraposición a las anteriores que son de adhisión. Estas son arenado,
grabado ácido, tratamiento con laser.
Los últimos adelantos en implantología para aumentar la adhesión implante-hueso, es
decir la oseointegración, se dirigen a aumentar o mejorar los mecanismos intrínsecos de
respuesta celular, centrándose en un elemento nuevo: la sangre y sus componentes.(3) (5)
De esta manera se llega al plasma rico en plaquetas (PRP)
Los investigadores han identificado sustancias biologicamente activas, que promueven la
reparación del tejido afectado. Estos agentes han sido denominados factores del
crecimiento( F.C). (11)
Estos FC comparten una serie de características que son comunes:
- Son glucoproteinas que afectan el comportamiento celular uniéndose a receptores de
membrana plasmática de alta afinidad.
- Actúan en su mayoría en forma localizada y pueden ser clasificados como factores
parácrinos cuando son producidos por una célula para estimular a otra, autócrinos
cuando son producidos por una célula para ser autoestimulada y endocrinos cuando
tienen acción sistémica.
- Los FC ,afectan a varios eventos celulares, además de tener actividades mitogenicas, de
diferenciación y de migracion celular.
- El efecto de los FC en el proceso regenerativo, probablemente sea una acción
combinada, con otros FC. (12)
Los factores de crecimiento están en las plaquetas. En ese concentrado de plaquetas que
nosotros le estamos colocando al paciente en un determinado lugar, de esas plaquetas se
liberan los factores de crecimiento que están dentro del citoplasma, dentro de la misma
célula, y son los encargados de producir la formación de hueso en ese lugar. De hueso, de
fibras, es decir, la producción de células en un sentido determinado(8)
Las plaquetas o trombocitos son los encargados de formar factores de crecimiento en las
etapas iniciales de la cicatrización de una herida. En una etapa posterior, los macrófagos
segregan citoquinas, completan el proceso. Diversas investigaciones demuestran que un
aumento en la disponibilidad de los factores de crecimiento reduce los tiempos de
cicatrización mejorando los resultados (10) (4) Acorta los tiempos de epitelización de los
colgajos disminuye las posibilidades de infección y minimiza las molestias del paciente (1)
Los factores de crecimiento plasmático son unas proteínas que desempeñan un papel
fundamental en la migración, diferenciación y proliferación celular. Los más conocidos
son:
 PRGF alfa: factor de crecimiento derivado de las plaquetas, liberados por gránulos
alfa plaquetarios.
 TGF-Beta: factor de crecimiento transformado tipo beta.
 FGF: factor de crecimiento fibroblástico.
 VEGF: factor de crecimiento vascular endotelial.
 BMP: proteína morfogenética ósea
 IGF: factor de crecimiento de tipo insulínico tipo I, II
 EGF: factor de crecimiento epidérmico (6) (3) (9) (12) (14)
Efectos del PRP:
Veamos una secuencia grafica de un proceso de reparación ,en una cavidad provocada en
un tejido sano:
- Luego de producido el daño se genera una zona necrótica, por el corte de los vasos
sanguíneos y la obliteración de los capilares y por el hematoma, se detiene la
circulación en los limites de la lesión, llenándose la cavidad con un coagulo.
- Al no tener vasos sanguíneos hay un menor gradiente de oxigeno condicionando el
primer estimulo que es la hipoxia, con el consiguiente aumento del anhídrido carbónico
y el descenso del PH.
- Las plaquetas presentes liberan factores de crecimiento PDGF y TGF beta.
- El PDGF tiene varias acciones:
-Osteoconductiva: dirigiendo las Stem a células osteoprogenitoras.
-Mitógenas: aumentando la proliferación de células en reparación.
-Angiogeneticas: aumentando por mitosis continuas brotes vasculares.
- El TGF beta actúa sobre:
-El pre osteoblasto, induciéndolo a la mitogenesis.
-EL osteoblasto, para que secrete matriz osteoide.
-El osteoclasto ,inhibiendolo.
-El fibroblasto ,estimulando su crecimiento, y favoreciendo la neoformacion osea.
- Hasta aquí es igual la cicatrización para los tejidos blandos que para el hueso, pero este
ultimo necesita un tejido de soporte
- Comienza la proliferación capilar dentro del coagulo ,con lo que aumentarían los
macrofagos ,para el descombro de deshechos. Estos macrófagos liberan Factores
angiogenéticos macrofagicos (MDAF) y factor de crecimiento macrofagico (MDGF),
que continúan con los efectos de los factores plaquetarios que son de vida corta.
- En dos semanas se restablece el Ph y el gradiente de oxigeno ,las Stem formaron nuevos
núcleos óseos alrededor de vasos y fibras neoformadas.
-
Se disuelve el coagulo, se degradan los tejidos necróticos por medio de linfocitos,
macrófagos y osteoclastos, que reabsorben los restos de virutas óseas liberando BMP,
un ácido insoluble presente en la matriz orgánica, que continua la función de osteo
conducción que habían comenzado los FC. (11)
La acción de cada uno de los factores de crecimiento en los defectos óseos es múltiple. En
momentos diferentes ellos inducen actividad, proliferación, diferenciación y quimiotáxis en
diferentes células blanco, como lo pueden ser macrófagos y osteoblastos. Además los
factores de crecimiento estimulan la angiogénesis. La mayor acción de activación de un
“cocktail” en comparación con cada uno de los factores individualmente se deja ver en el
ejemplo de la proliferación in Vitro de los osteoblastos. (9)
Proliferación de osteoblastos bajo la influencia de uno o varios factores de crecimiento.
Por medio de la disponibilidad de los factores de crecimiento propios del paciente se
desencadena la cascada de la cicatrización y con ello la nueva formación de hueso.
Los mejores resultados se observan al aplicarlos en forma combinada. (9)
Forma de obtención:
Reseña histórica:
A partir de los años 90, un grupo de investigadores dirigidos por Marx R.E. (1998),
estudiando el comportamiento del elemento de la sangre responsable de la reparación
celular, las plaquetas, encontraron al menos tres factores de crecimiento.
Para la obtención de los factores de crecimiento se colocaba un catéter venoso central,
extrayendo de 400 a 450 ml de sangre, se agregaba un anticoagulante: C.P.D. ( citarte
phosphate dextrose ). En una proporción de 1 ml de C.P.D. por cada 5 ml. de sangre.
Centrifuga a 5.600 rpm con una velocidad de obtención de 50 ml por minuto. Se separaba
así los tres componentes sanguíneos: capa eritrocitaria abajo, P.R.P. ( plasma rico en
plaquetas) también llamado buffy coat en el centro y P.P.P. ( plasma pobre en plaquetas)
arriba.
Figura 1
Figura 1 : Tubo de ensayo mostrando los tres componentes sanguíneos.
Se obtenía 200 ml de P.P.P., sobre 70 de P.R.P., y sobre 180 de hematíes. Una vez
recogida la capa de P.P.P. se bajan las revoluciones de la centrifugación a 2.400 para
conseguir una separación precisa del P.R.P. y la serie roja. El resto de la extracción , P.P.P.,
y serie roja es reintroducido al paciente por el mismo catéter ó a través de una vía
periférica. (5)
Para aplicar el P.R.P. se requiere iniciar el proceso de coagulación con una mezcla de 10
ml. de cloruro cálcico al 10% con trombina bovina tópica de 10.000 unidades (Gentrac).
El protocolo para utilizar el P.R.P., requiere usar jeringas individuales para cada mezcla,
que contiene del orden de 6 ml, de P.R.P., 1 ml. de la mezcla de cloruro cálcico y trombina
y 1 ml. de aire para completar el proceso. La jeringa se agita durante 6-10 segundos para
homogeneizar el producto de forma que el P.R.P., ahora en forma de gel, se pueda añadir
con el material de relleno ó con el injerto para que el cirujano remodele la
reconstrucción.(5)
Anitua.E.(1999) utilizaba P.R.G.F. (plasma rico en factores de crecimiento)como
preparación de futuros lechos para implantes. Dicho P.R.G.F. lo obtenía extrayendo 20 ml
de sangre de cada paciente usando tubos de 5 ml. conteniendo el 10% de citrato trisódico
como anticoagulante.
Los tubos eran centrifugados a 160 G durante 6 minutos a temperatura ambiente. La
sangre era así separada en sus tres elementos básicos. La serie roja abajo, el plasma rico en
factores de crecimiento, en el centro y el plasma pobre en factores de crecimiento arriba.
Uno de cada cinco ml de plasma pobre era desechado.
El plasma restante era recogido incluyendo 1-2 ml de células rojas de la parte superior y
transferido a tubos Eppendorf, donde le añadían 50 µL. de cloruro cálcico al 10% . Después
de 15-20 minutos adquiría la consistencia de gel. El tiempo de aplicación se estandarizó
entre 5 y 10 minutos. (5)
De este modo se simplificó la técnica, acortando tiempos, necesitando menos cantidad de
sangre del paciente y abaratando costos.
Técnica actual:
 Se extraen entre 10 y 50 cc de sangre del paciente, obteniendo un volumen proporcional
al caso quirúrgico, siendo suficiente 50 cc para los senos maxilares.
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Una vez extraída la sangre se coloca en un recipiente estéril de plástico o vídrio
siliconado, junto a una solución de citrato de sodio como anticoagulante.
Se centrifuga durante 7/8 minutos obteniendo tres capas de sedimentación.
Se pipetea la capa superior ambar transparente, obteniendose el Plasma Pobre en
Plaquetas. (PPP).
Se pipetea la parte media y un poco de la roja porque ahí están las plaquetas mas
jóvenes, y se obtienen Plasma Rico en Plaquetas (PRP).
La inferior, donde están los glóbulos rojos, se descarta.
Se conserva a temperatura ambiente durante 6 horas o 24 horas en movimiento,
mientras que por congelación, mucho tiempo.
Activación: Se realiza con cloruro de calcio al 10% para proporcionar el calcio que
neutralizo el citrato de sodio. Se formando un tapón gelatinoso y muy consistente, fácil
de manipular. Cuando se activa comienza la transformación de las plaquetas liberando
los factores de crecimiento por eso se debe hacer unos 10 minutos antes de su
utilización, pudiéndose acortar los plazos con un baño térmico a 37 grados centígrados.
Obteniéndose un gel consistente amarillo rosado PRP y mas transparente PPP se
pueden mezclar con sustitutos autólogos o sintéticos, permitiendo un fácil manejo de las
partículas que quedan incluídas en el gel.(11)
Figura 3
Figura 3: En la imagen se observa la sustancia viscosa en que se convierte el plasma rico en
factores de crecimiento una vez que ha coagulado gracias al calcio. Esta masa es la que se
colocaría directamente en el lecho quirúrgico. (3)
Figura 4
Figura 4: Material extracción sanguínea, sistema vacutainer (3)
El primer campo donde se ha puesto en práctica esta técnica ha sido en la cirugía oral.
Con esta estrategia se ha conseguido que una extracción dentaria cicatrice en menos de la
mitad de tiempo y de forma más indolora, disminuyendo notablemente los riesgos de
infección en fumadores, diabéticos, etc. También se utiliza para corregir defectos óseos
alrededor de implantes dentales. (3)
A pesar de que el PRP se restringe a pequeñas reconstrucciones, para mejorar la calidad
del hueso cuando se practica un injerto en zonas concretas, los experto no descarta la
posibilidad de que en el futuro se use para grandes reconstrucciones. No obstante, se
ensayan otras posibilidades de obtener factores de crecimiento óseo, como la proteína
morfogenética ósea (BMP). (4)
No obstante, los especialista considera que la técnica puede llegar a emplearse en
numerosos campos. Ya se ha conseguido estimular la osteogénesis después de la
extirpación de quistes gracias al empleo del plasma rico en factores de crecimiento.
Además, puede resultar de gran ayuda en la fijación de implantes de cadera y rodilla, al
crear una interfase proteica entre el hueso y la prótesis . Otras posibles aplicaciones de la
técnica serían la consolidación de fracturas y la cicatrización de quemados. (3)
Resultados:
Los resultados obtenidos por Anitua en un estudio con 1.800 implantes demuestran que el
empleo de esta sustancia autóloga mejora un 136 por ciento la aposición ósea a los dos
meses, es decir, la adherencia del hueso es 2,6 veces superior a lo normal en el mismo
periodo de tiempo. Además, los resultados en los dos años en los que se lleva estudiando
han sido del 99 por ciento de casos exitosos. (3)
Otro artículo, que lo publicó el doctor Robert Marx, en la revista de la triple O (ORAL
SURG ORAL MED ORAL PATH, 1998). Hizo un estudio con 88 pacientes donde añadió
el concentrado de plaquetas al injerto óseo en una cirugía reconstructiva mandibular y
demostró clínica e histológicamente que realmente existía un crecimiento óseo y una mejor
densidad de hueso transcurridos seis meses después de la realización del estudio. De esta
forma, la tasa de formación ósea con PRP fue de 1,62 a 2,16 veces mayor, que sin PRP. La
densidad de hueso estudiada con controles radiológicos densitométricos a los seis meses fue
del 74 por ciento con PRP y del 55 por ciento de producción de volumen óseo sin PRP. Así
que el incremento promedio que también obtuvo de plaquetas fue de 3,38 veces. Este es el
único estudio clínico con pacientes que documenta el efecto del incremento plaquetario en
el resultado clínico. (7)
Ventajas:




Sin riesgos de transmisión de ningún tipo de enfermedad (plasma autólogo).
Preparación de forma inmediata 15-20 minutos.
Nulo efecto antigénico.
El costo por tratamiento no supera los 4 euros.($15)
Indicado en:






áreas post-extracción
regeneración alrededor de implantes
elevación de seno
defectos periodontales
siempre que tengamos que compactar un injerto óseo
siempre que queramos utilizar fibrina autóloga. (6)
Regeneración ósea: importancia de la preservación del tejido óseo luego de una
extracción dentaria.
A
B
C
A: Descripción de la competencia entre células potenciales por un defecto óseo luego de
una extracción dentaria.
B: La cresta alveolar se presenta menos apta para la colocación de implantes debido a la
reabsorción ósea.
C: Descripción de la regeneración ósea lograda gracias a la colocación de e-PTFE como
barrera, favoreciendo la proliferación de las células progenitoras óseas.
Defectos óseos provocados al colocar implantes en un reborde con reabsorción
avanzada.
Colocación de un implante en una cresta
Alveolar delgada, causando un defecto óseo.
Fenestración ósea causada por la
colocación de un implante. (13)
Colocación de Implantes con membranas y relleno óseo
Colocación de implante y membrana.
Membrana colapsada.
Colocación de membrana, se mantiene el
espacio, evitando que la misma colapse.
Colocación de implantes, con relleno y membranas PTFE, debido a defectos óseos.
(13)
Bibiografía
1) “Implantología contemporánea”
Carl E. Misch Año 1995
Editorial Mosby Doyma Libros
2) “Posgrado en cirugía y traumatología bucomaxilofacial”
Juan Yuri Turanza Febrero de 2000
Imprenta Gráfica, Comodoro Rivadavia.
3) “Nueva técnica de regeneración ósea con una sustancia autóloga”
Diario Médico. Eduardo Anitua-Gabriel Lopez.
http://www.diariomedico.com/edicion/noticia/0,2458,87322,00.html
4) “El plasma rico en plaquetas mejora la consolidación del injerto óseo”
Julio Acero, Servicio de Cirugía Maxilofacial del Hospital Gregorio Marañón, Madrid
http://www.diariomedico.com/cirmaxilofacial/n060601.html
5) Evaluación de la adherencia de células hematológicas periféricas a implantes dentales de
titanio sistema Intri. Estudio in vitro.
ARRUGA ARTAL, Alberto: Odontólogo e inventor del sistema intri
GOMEZ CASAL, Francisco : Hematólogo
MORENO CHULILLA, José Antonio: Hematólogo
MARIN MELERO, Sonia: Odontóloga y periodoncista
CATIVIELA OTAL, Encarnación : técnico de laboratorio
http://www.aiip-online.com/articuloTxt.html
6) PRGF System: técnica de obtención de plasma rico en factores de crecimiento.
http://www.gacetadental.com/marzo2001/productos/12.htm
7) Controversia en torno a los factores de crecimientos: Estudios realizados
Prof. Dra. Elena Sánchez Fernández
http://profesional.medicinatv.com/webcast/muestra.asp?idfg=0&idwc=2499
8) Factores de crecimiento, ¿qué son exactamente?
Prof. Dra. Elena Sánchez Fernández
http://profesional.medicinatv.com/webcast/muestra.asp?idfg=0&idwc=2499
9) Factores de Crecimiento: factores muy importantes en la cicatrización ósea
http://www.curasan.de/espanol/productos/prp_factore.shtml
10) PRP - Plasma Rico en Plaquetas:Para mejorar la cicatrización de tejidos blandos y
óseos. http://www.curasan.de/espanol/productos/prp_factore.shtml
11) “Implantología del nuevo milenio”
Ranalli, Oscar Alberto. 2002
12) “Principios Fundamentales de Regeneración Ósea; su aplicación para implantes
endooseos”
Fernández Bordereau, Enrique.
Revista AOA- Ene/Feb 2001.
13) “Implants in Dentristry”
Michael S. Block- John N. Kent- Luis R. Guerra.
1997- W.B. Saunders Company.
14) “Bases para el tratamiento implanto-protético”
Osvaldo Tomás Cacciacane.
INFOMED-2003
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