LA INDUSTRIA DEL TELEVISOR DIGITAL EN MEXICO. RETOS ANTE LA TRANSICION TECNOLOGICA, EL APRENDIZAJE Y EL EMPLEO Alfredo Hualde y Jorge Carrillo Coordinadores El Colegio de la Frontera Norte Tijuana, 15 de Mayo del 2007 1 “Panorama mundial de la industria de los televisores” en Hualde y Carrillo (coord.) Televisión digital en la frontera norte de México. Retos ante la transición tecnológica, Ed. Miguel Ángel Porrua y Colef, México, 2007, pp.23-50 CAPÍTULO SEGUNDO PANORAMA MUNDIAL DE LA INDUSTRIA DE LOS TELEVISORES Jorge Carrillo 1. Introducción. La industria del televisor se encuentra en una importante mutación tecnológica. El ciclo de vida del televisor blanco y negro residencial llegó a su fin, y prácticamente sólo existe una baja producción en países como China para una población de muy escasos recursos económicos. La televisión análoga a color, que se desarrolló durante la segunda mitad del siglo pasado, también ha entrado en su fase de envejecimiento. Los televisores de proyección con pantalla grande están a la mitad de su fase de madurez. Por el contrario, los televisores digitales están iniciando su fase de crecimiento1 (Esquema 1). La TV análoga, que dominó el mercado desde finales de los años setentas y aún lo mantiene en la actualidad, está en franco deterioro. No obstante, la producción de TV con cinescopio (mejor conocida como televisor de color análogo) aún tiene una demanda importante tanto en los países desarrollados como en los del tercer mundo. Esto obedece al avance de la tecnología, que ha permitido que aunque mantengan un voluminoso y pesado cinescopio (CRT -tubos de rayos catódicos), ofrecen al consumidor diversos modelos, aparatos con pantallas planas, múltiples funciones, multimedia, muy diversos tamaños de pantalla, y variada tecnología2. Ello, aunado al menor costo frente a los televisores digitales de pantalla plana, ha permitido que la producción de aparatos de TV con cinescopio aún tenga un futuro promisorio, aún en mercados de alto valor en el consumo como Europa, y particularmente en Estados Unidos. Sin duda esto está cambiando constantemente, en particular con la entrada de los “canales digitales” en la televisión por contrato. Por su parte la televisión de proyección (también denominada Rear Projection TV) se encuentra en su fase de madurez. Se trata de un nicho de mercado para televisores 1 Para comprender con mayor claridad las diferencias entre el televisor análogo y digital, así como otras tecnologías consúltese la sección 5.1 del capítulo tercero, de Saúl de los Santos y Jesús Gilberto El de este libro. 2 Por ejemplo, los modelos Trinitron y Wega de Sony, o los televisores High Definition; o los televisores de proyección (con pantallas grandes). La variedad existente de tecnologías actualmente y de mezclas (con cd, dvd, video, cámara, etc.; con funciones muy diversas, etc.) hace que si bien se trata de un producto maduro y de producción masiva, al igual que en la industria del automóvil, la variedad producto-modelo y costo, aún dentro de la misma marca, sea lo que privilegia en el mercado. de gran tamaño que ha tenido éxito en mercados como el estadounidense, donde el espacio dentro de las casas y los servicios permite contar con estos voluminosos aparatos. Aquí también se observan cambios centrales, ya que las nuevas residencias desde hace varios años han ido reduciendo su tamaño. Finalmente, la televisión digital -de plasma, LCD (Liquid Cristal Display) y otras tecnologías- , conocida en términos genéricos como Flat Panel Display (FPD), se encuentra en su fase de crecimiento.3 También existen desarrollos de nuevas tecnologías y materiales que darán lugar a nuevos aparatos de televisión, como indica el Esquema 1, elaborado por la empresa ProduCen de Tijuana. El objetivo de este trabajo es presentar en forma resumida la situación general de la industria del televisor. Para ello se presenta un breve recorrido histórico, seguido del rol de las firmas transnacionales. Posteriormente presentamos la geografía de la producción, poniendo énfasis en los países subdesarrollados, para luego analizar el mercado estadounidense, la situación de México y la competencia con China. La metodología utilizada para este trabajo consiste en la revisión de documentos y reportes; el uso de fuentes secundarias de información, y entrevistas con directivos de empresas productoras de televisiones en Japón, China, Tijuana y Mexicali, durante 2004-2006. 3 Conviene aclarar que pueden existir televisores con pantallas planas y ser análogos. Y viceversa, pueden existir teóricamente aparatos con CRT y ser digitales. Es decir, lo digital no es intrínseco ni al tamaño del aparato ni a la tecnología del panel. La tecnología digital se encuentra en la electrónica e implica tarjetas impresas de circuito diferentes y la radiodifusión en formato digital. Lo que sucede es que la difusión de los nuevos televisores ha venido acompañada de tres cambios sustantivos: la tecnología digital en lugar de la análoga; la desaparición del CRT y su sustitución por pantallas planas LCD o Plasma; y la radiodifusión en formato digital. TV: Ciclo de vida del producto Embrionica Crecimiento Madurez Envejecimiento FLAT CONVEN. Ensamble en Baja California REAR PROJECTION CONVENTIONAL ANALOG T.V Black & White PLASMA LCD RP-LCD DLP DiLA CUSTOM T.V OTHER 3D T.V OLED OTHER Fuente: Producen, 2003 2. Breve Recorrido Histórico y Situación Actual. Cuando la televisión se introdujo inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, su ventaja como producto de alta tecnología la hizo ser rápidamente líder (Kenney, 2004:83). La industria del televisor está conformada productivamente por tres segmentos de la cadena del valor: el ensamble final, componentes clave y otros componentes. Aunque existen otros segmentos vinculados con esta cadena, como es el caso de los proveedores de servicios, tradicionalmente no han sido considerados en los análisis del sector. Las firmas OEMs (original equipment manufacturers) ) se dedican tanto al ensamble final como a la producción de componentes clave. El principal componente ha sido durante décadas el cinescopio, también conocido como CRT. El resto de los componentes y sub-ensambles son realizados por empresas subcontratistas (conocidas como Contract Manufacturers) y por empresas pequeñas y medianas. Además se cuenta con empresas proveedoras de accesorios como los empaques, controles electrónicos a remoto y manuales con instrucciones (conocidos como ‘proveedores indirectos’ o ‘proveedores locales’). Cada segmento exhibe una dinámica diferente, ya que tiene requerimientos técnicos, físicos y de personal distintos. Esta especialización dentro de la cadena permite a las firmas desarrollar una más compleja división del trabajo (Kenney 2004:83). El valor del CRT representa actualmente el 80% del valor del producto, y se caracteriza por ser un proceso intensivo en capital. Los otros accesorios significan el 15% del valor y la mano de obra representa el 5% restante.4 Si bien la industria de los televisores es una industria caracterizada por ser intensiva en mano de obra, su participación dentro del valor total es reducida. La relevancia del CRT estriba en el avance de la eficiencia y la automatización (a través fundamentalmente de máquinas de inserción automática de componentes en tablillas impresas). Ello ha reducido continuamente la demanda de trabajo en el proceso de ensamble final de la televisión y, en consecuencia, ha disminuido la participación en el valor total. Dicha automatización y simplificación de los componentes tuvo como impacto una considerable disminución del tiempo de ciclo para producir un televisor (Kenney, 2004:87). Por ejemplo, mientras que a mediados de los años setenta se necesitaban cuatro horas para construir un aparato de televisión análoga, a fines de los noventas sólo se requería menos de media hora. El desarrollo de la industria del televisor está fundamentado en las acciones y estrategias de grandes firmas productoras, como veremos más adelante. Sin embargo, diferentes autores coinciden en que las políticas gubernamentales de Japón, Corea y Estados Unidos, influyeron centralmente en el desenvolvimiento del sector (Mortimore, et al., 2000; Kenney 2004). La relación entre el gobierno y las firmas también afectó la estructura del mercado. La historia de la intervención del gobierno estadounidense, por ejemplo, en la industria de TV es muy larga, comenzando como una política en pro de la competencia para impedir que la política de RCA la limitara (Kenney 2004:82) hasta la actual política anti-dumping a los televisores producidos en China de pantalla grande. La introducción de la TV digital en Estados Unidos está directamente vinculada con decisiones en la transmisión de las señales. En Estados Unidos más de mil estaciones transmitían con señales digitales de TV en mayo del 2003 y todos los grandes mercados estaban servidos con al menos una estación de TV digital. La meta establecida por el Congreso americano para completar la transición a la TV digital fue el 31 de diciembre del 2006. Sin embargo, la fecha puede extenderse hasta que un 85% de hogares en una zona puedan ver la programación de TV digital. Hasta el momento en que se complete la transición a las estaciones de TV se les requiere que retransmitan tanto en canales digitales como en análogos. Todo indica que a finales del 2007 la transmisión será digital, lo cual modificará las decisiones de compra de los consumidores. Otro ejemplo es el de Japón. El éxito de las empresas japonesas se debió no sólo a las particularidades del sistema japonés de producción, sino al decidido apoyo que su gobierno les ofreció. De tal suerte que articularon las facilidades arancelarias y las medidas proteccionistas con un alto grado de integración en el proceso de producción y coordinación con proveedores de componentes, como medio para alcanzar considerables ventajas en costos de producción con respecto a sus competidores y obtener el apalancamiento directo con usuarios ‘río abajo’ (Mortimore, et al., 2000). 2.1 La Industria de la TV y el rol de las Transnacionales. La industria de los aparatos de televisor forma parte del sector electrónico y está clasificada como electrónica de consumo. Se trata de una industria madura, de 4 Presentación de Marco Esponda en power point, The Electric-Electronic World perspectiva, Sharp. Julio,. 2004 producción masiva, conformada por grandes transnacionales (Mortimore et al., 2000; Kenney, 2004). Después de la segunda Guerra mundial, comenzaron las ventas masivas de televisión blanco y negro, y muchas firmas nuevas entraron a la industria en Estados Unidos, Europa y Japón. Con el ascenso de la TV a color nuevamente se expandió el número de firmas, pero en menor cantidad. A las firmas japonesas, americanas y europeas, se les fue sumando con el tiempo otras asiáticas.5 El caso de Estados Unidos es ejemplar de este proceso. De 1946 a 1948, había aproximadamente 500 firmas (Teitelmann 1994:52). Para 1960 el número se había reducido a 27 empresas, y para 1976 sólo existían 12 productores con 15 establecimientos. Después de ese año se observó un descenso terminal en los emplazamientos fabriles de EE.UU. (Kenney 2004:85). Más de tres cuartas partes de las cuotas de mercado de 1988 para receptores de TV a color en Japón, se concentraron en sólo cinco firmas japonesas: Matsushita (24%), Sharp (15.5%), Toshiba (15%), Hitachi (10.5%) y Sony (10.5%). En Estados Unidos dos terceras partes de la participación de mercado en 1990 se concentraba también en cinco transnacionales: Thomson (22%), Philips (12%), Zenith (12%), Sony (7%), y Matsushita (5%) (Mortimore, et al., 2000). El Cuadro 1 muestra la concentración de la producción mundial en unas pocas firmas y su evolución en el tiempo. Las siete firmas japonesas dominan la lista seguidas de las europeas. Tan sólo Sony y Matsuchita produjeron 28.5 millones de televisores en 1997, y mantenían ventas de 60 millones de dólares en 1991. Sobresalen por su propensión en ventas al extranjero las empresas de Philips, Sony y Thomson. Las transnacionales japonesas dominan la lista de ventas de la electrónica de consumo con el 74% del total de las transnacionales. Sus únicos competidores principales eran Philips (Holanda) en la primera división, así como Thomson (Francia) y dos advenedizos coreanos, Samsung y Goldstar, en la segunda división. Las empresas japonesas controlaban el 55% de la producción mundial de la electrónica de consumo, abarcando el 99% de dicha electrónica en su mismo país, el 27% en Europa y el 25% en Estados Unidos. Por países también se observa una concentración importante. En 1995 los principales países europeos exportadores de TV eran, en orden de importancia, Reino Unido, Francia, España, Alemania, y Bélgica/Luxemburgo (los cuales concentraban el 27% del mercado de las importaciones a la OCDE). En Asia, los productores centrales eran Malasia, Tailandia, Japón y Corea del Sur, representando el 20% del mercado. Y en América se encontraba únicamente México con el 18%. Los diez principales países concentraban el 62.5% del toral de importaciones en ese año (Mortimore, et al, 2000) La concentración del mercado en un número reducido de compañías continúa operando en la actualidad tanto para los televisores de tecnología analógica como digital. Según The Economist, quién cita a DisplaySearch, el 60% de las ventas de televisores planos se concentraba en cuatro firmas japonesas: Matsushita, NEC, Pioneer y una alianza entre Fujitsu y Hitachi.6 5 En la década del ochenta, aparecieron productores taiwaneses de televisión, tal como Tatung y Sampo, que llegarían a ser jugadores globales. Sin embargo, a mitad de dicha década Taiwán abrió su mercado de consumo de la electrónica, y productores japoneses dirigieron las firmas locales (Kenney 2004:85) 6 The Economist, “Plasma Power. Japanese firms raise the stakes in the flat-screen television war”, 22/05/2004, Vol 371, Issue 8376 Cuadro 1 Producción, posición y ventas de las principales firmas televisores (diversos años) productoras de aparatos Producción Matsushita País de Origen Japón Toshiba Firma Posición dentro de las 10 más grandes del mundo 1978 1987 1997 (millones de unidades) 1978 1987 1997 Ventas domésticas Ventas en el extranjero (millones de dólares) porcentajes 1991 1991 1 3 2 3.6 4.7 12.7 $36.60 48% Japón 7 5 10 1.5 3.2 5.9 $26.60 29% Hitachi Japón 9 6 - 1.25 3.1 - $25.20 24% Philips Países Bajos 2 1 7 3.5 8.6 7 $23.80 94% Sony Japón 6 4 1 1.7 3.8 15.8 75% Thomson Francia - 2 4 - 6.8 10.9 $23.00 $12.60 RCA USA 3 - - 2 - - Sharp Samsung Japón - - 6 - - 7.2 Sanyo Corea del Sur Japón 5 7 10 5 9 1.95 2.5 1.8 10.5 6.9 Gruding Alemania 8 - - 1.4 - - USA 10 - - 1.2 - - Zenith USA 4 8 - 1.97 2.3 - Nokia Finland - 9 - - 2.2 SylvaniaGTE 69% - $9.70 $7.10 50% 58% $6.10 41% - - - - - - - - - - - Daewoo Korea - - 8 - - 6.8 LG-Zenith Korea - - 3 - - 12.2 - - Mitsubishi Japón - - - - - - $12.50 21% Corea del Sur - - - - - $5.00 51% LG-Lucky Goldstar Fuente: Adaptado de Kenney, 2004, Cuadros 4.1, 4.2 y 4.3 y Mortimore, et al., 2000. Cuadro 3.4. Entre los años setenta y finales de los noventas han habido cambios significativos en el liderazgo global. Como puede verse en el Cuadro 1, la presencia de productores de EE.UU. era prominente entre los 10 más grandes productores globales. Hacia 1987, las firmas japonesas eran los líderes, pero Zenith todavía estaba entre los 10 primeros. Los dos productores europeos, Thomson y Philips, habían llegado a ser los productores más grandes del mundo. Para 1997, la posición de las empresas en su cuota de mercado había cambiado otra vez, con las firmas japonesas Sony y Matsushita que llegan a ser los líderes (Kenney 2004:84). Más recientemente estas transnacionales se han visto amenazadas por una nueva ola: los productores chinos y su creciente mercado. Desde principios del presente siglo la industria de la televisión se puede dividir en seis mercados mayores: Estados Unidos, Europa, Japón, China, el resto de Asia, y el resto del mundo (Kenney, 2004:83). En estos mercados todas las firmas líderes operan globalmente. Los países emergentes que han logrado captar nuevas inversiones son el Este de Europa y China, fundamentalmente. Europa Occidental trasladó al este del continente algunas de sus inversiones, y Japón reubicó muchas plantas en China y otros países asiáticos. De acuerdo con información de CEA Market Research, y con base en proyecciones para el 2004, se calculaba que en ese año, el mercado total sería de 140 millones de unidades de las cuales 28 millones se venderían en China, 25 millones en EE.UU., 12 millones en Europa y 8 millones en Japón. La producción en 2004 se concentraba fundamentalmente en diez firmas, entre las que sobresalen Matshusita, con el 32% de la producción total, Sony y JVC con el 22% cada una y Thomson con el 15%. La empresa china más importante en la producción de TV a color es TCL. Esta firma tenía una participación cercana al 5% del mercado mundial, y se espera que aumente considerablemente su participación ya que incorporó a Thomson a su red corporativa. En el caso de la tecnología digital para televisores, esta se encuentra dominada por las mismas firmas que lideran la TV análoga. En la tecnología LCD se encuentran Philips, Samsung, LG y Sharp, que es la poseedora original de la patente y el fabricante número uno de esta tecnología, de la cual expidió licencias a las otras firmas. Por su parte, Panasonic, Pioneer, Hitachi y NEC, están apostando por la tecnología de Plasma. Sin embargo, la división entre tecnologías y mercados se caracteriza actualmente por grandes variaciones, búsqueda de alianzas y acuerdos que pueden producir en el corto plazo transformaciones importantes. Por ejemplo, recientemente se anunció la constitución de una alianza estratégica entre Sony y Samsung. Según algunas fuentes, la supremacía de Sharp puede ser momentánea ya que la tecnología de Samsung es más avanzada y varias firmas taiwanesas están tratando de replicar a la firma coreana7 La continua reducción de firmas en el mercado obedece a las altas barreras de entrada, relacionadas con la tecnología y el tamaño de escala de producción. Sin embargo, las alianzas de las OEMs con los contract manufactures taiwaneses y la tecnología disponible para producir TV análogas y digitales ha llevado a las empresas chinas a vender directamente en el mercado estadounidense, o a la venta indirecta por medio de la intermediación de empresas distribuidoras establecidas en Estados Unidos (el caso de Vizio, por ejemplo). La caída de precios en todas las tecnologías (como veremos más adelante) refleja esta fuerte competencia entre los productores por reducir costos. Asimismo, existen compañías productoras de LCD para telefonía celular, monitores de computadoras, pantallas dentro de los autos, etc., que en un futuro cercano tendrán la posibilidad de transmitir señales de televisión. Todo ello, cambiará sin duda el número de jugadores y los nombres de las marcas en la industria de TV digital, como ya puede observarse en los centros comerciales como Best Buys, Wall-Mart, Circuit City o Cosco. 2. 2 La geografía de la producción. Si bien una televisión como producto se asemeja más a las computadoras en términos de la cadena del valor y de la arquitectura de producto, su comportamiento en el mercado se parece más al de la industria automotriz (Kenney, 2004; Fujimoto, 2004). Según Kenney (2004:82-83) la industria de los televisores fue la primera gran ‘industria fordista’ en convertirse en víctima de la competencia global; teniendo que encarar la competencia brutal del precio y, desde 1980, la constante sobrecapacidad. La producción de la TV tuvo un carácter doméstico por un corto tiempo, particularmente con los aparatos en blanco y negro. Esta situación empezó a cambiar a mediados de los sesentas del siglo pasado, cuando la fase de ensamble intensivo en mano de obra fue trasladada de los países desarrollados a los subdesarrollados, tal fue el caso 7 The Economist, id. de la reubicación de plantas desde Estados Unidos hacia el norte de México a partir de 1968, o de Japón hacia los países del sureste asiático, como Malasia y Tailandia. Este fenómeno fue conceptualizado como la internacionalización de la producción e implicó una nueva división internacional del trabajo (Frobel et al., 1980). Si bien existía una división entre países, en donde unos tenían como función proveer a los otros países que consumían, el mercado era regional. Es decir, la producción en México se dirigía al mercado estadounidense; y la de los países del sureste asiático hacia Japón. Dentro de los países europeos se producían y consumían los televisores. Si bien el proceso de globalización está cambiando la división tradicional de mercados regionales, y existe una tendencia similar a la que se da en la producción de computadoras, por excelencia globalizada, el proceso no avanza tan rápido como la tecnología. Los productores regionales están presionando por mantener el comercio intraregional, a través de reglas de origen, medidas anti-dumping, estableciendo transplantes, etc.. Pero esto contrasta con las estrategias agresivas de las firmas por aumentar mercados, los avances en la tecnología y en la logística, la reducción generalizada de costos, y la mayor eficiencia en servicios como el transporte. Todo ello posibilitará que el cambio de ‘mercados regionales’ a ‘mercados globales’, y de ‘productores domésticos y regionales’ a ‘centros de manufactura mundial’ sea más rápido. Hasta antes de la primera oleada de internacionalización de la producción, la integración vertical dentro de los países productores era considerable. Con la reubicación de plantas y el proceso de globalización, el fenómeno de las aglomeraciones industriales ya no estuvo acompañado por la integración regional. La proveeduría de componentes locales, en países en desarrollo, es baja en general, aunque hay excepciones importantes. Por ejemplo, en 1995 la industria de televisores tenía en México un contenido local de sólo 4%; mientras que en Malasia y Tailandia alcanzaba el 62% y 40%, respectivamente. (Mortimore et al. 2000:65-71) Si bien esta cifra para México ha cambiado en forma sustantiva con la llegada de las empresas productoras de CRT y de componentes clave, los porcentajes aún son menores que en los países asiáticos. Con la transición de la producción de aparatos de televisión análogos a digitales el contenido local se espera que cambie nuevamente. Pero al parecer el cambio será positivo para los emplazamientos manufactureros exportadores, ya que el valor del panel, en este caso, es menor (70% contra 80%) que el del televisor análogo (véase el capítulo tercero) y actualmente toda la producción de flat panel display se realiza en Japón y Corea del Sur. Si bien las filiales y los gobiernos en los países subdesarrollados están ávidos de recibir estas nuevas inversiones, no existe ningún plan de relocalización de dichas plantas,8 con excepción de una empresa japonesa que al parecer estableció en los últimos dos años una planta productora de FPD en China. Para tener una idea, la inversión que se requiere para establecer una planta de CRTs es 150 millones de dólares, aproximadamente, mientras que una de FPD es de más de 500 millones de dólares.9 No obstante lo anterior, empresas coreanas de televisores en Tamaulipas y japonesas en Baja California han anunciado que realizarán inversiones importantes para realizar una parte adicional del ensamble del FPD. 8 Entrevistas con empresas televisoras en Japón, China y Tijuana. Jorge Carrillo, trabajo de campo durante el 2004. 9 Ibidem. La inversión de 500 millones de dólares equivale a construir una moderna planta productora de automóviles --como fue el caso de Ford en la ciudad de Hermosillo. a) Oportunidades de los países en vías de desarrollo Los países subdesarrollados han jugado un papel central en la exportación de receptores de TV a color. Su participación aumentó de un poco más del 16% de las exportaciones totales en 1980, valoradas en $5.5 mil millones de dólares, a casi el 35% de exportaciones del total de 1990, valoradas en $14.5 mil millones de dólares (Mortimore, et al. 2000). El Cuadro 2 presenta la participación por país en los mercados principales de televisores a mediados de la década pasada. México participaba con el 60% del mercado norteamericano y con el 2% del japonés. Europa era proveída por sus propios países con el Reino Unido, Alemania y Francia a la cabeza (38%). Y en el caso de Japón, Malasia concentraba el 30% de dicho mercado, Corea del Sur el 21% y Tailandia el 19%. El Cuadro 2 muestra en el tercer renglón de cada casilla el porcentaje de cambio entre 1980 y 1995. Hay países que aumentan su participación de mercado y otros que la disminuyen. México, Malasia, Tailandia y China son los países ‘ganadores’. Por el contrario, Japón, Corea del Sur y Estados Unidos son los ‘perdedores’. Aunque hay que mencionar que estos tres últimos países han apostado por el liderazgo tecnológico en el sector electrónico y no buscan (ni pueden) competir como centros de manufactura y ensamble. Cuadro 2. Principales países productores de receptores de Televisión a Color (SITC 761) según principales mercados. Participación en el mercado de importación, 1994-5. Y porcentaje de cambio 1980-1995 Posición Norteamérica* Europa occidental* Japón* 1 60.0% México 9,230% 14.6 % Reino Unido 194% 30.0% Malasia >10,000% 2 12.2 % Malasia >10,000% 7.6 % Japón -71% 6.4 % Tailandia >10,000% 13.0% Alemania -60% 9.7% Francia 1,147% 7.9% España 1,652% 20.7% Corea del Sur -22 19.0 % Tailandia >10,000% 9.3 % Singapur 162% 4.5 % Estados Unidos -55% 3.0 % China >10,000% 2.2 % Corea del Sur -90% 1.5 % Canadá -71% 7.6% Austria 53% 7.5 % Bélgica/Luxemburgo -24% 5.9% Italia >10,000% 3.5 % Japón -70% 7.2 % Taiwán -86% 6.7% China >10,000% 2.4 % México >10,000% 1.9 % Filipinas 5,411% 3 4 5 6 7 8 9 10 10 principales Resto Total 1.0 % Singapur -69% 0.5 Taiwán -98% 98.9% 2.6% Corea del Sur 28% 2.4% Finlandia -41% 74.7% 1.9 % Estados Unidos -75% 0.5 % Bélgica /Luxemburgo -38% 99.5% 1.1% 25.3% 0.5% 100% 100% 100% % Fuente: CAN PLUS computer program of ECLAC, Tomado de Morrimore, et al., 2000. - = pérdida de participación en el Mercado durante 1980-95. El primer porcentaje es la participación den el mercado de importación. Asi por ejemplo, el primer renglón de la primera columna significa que México participó con el 60% de las importaciones de Estados Unidos. Y el segundo porcentaje el porcentaje de cambio, significa la diferencia entre el volumen de comercio de las importaciones en 1980 y 1995. Los países subdesarrollados pueden aprovechar estas oportunidades de distintas formas. Una ha sido la constitución de centros de ensamble nacional (Malasia) o regional (México). De acuerdo con un informe de la UNCTAD, en el futuro estos mismos países podrían llegar a un nivel de eficacia y calidad que les permitiera convertirse en centros globales de manufactura. La dificultad es que los actores principales, firmas transnacionales en este caso, tienen diferentes estrategias corporativas y distintos sistemas de producción integrados internacionalmente que se desarrollan a diferentes velocidades (Mortimore, et al. 2000) Los tres principales países productores de TV, México, Malasia y Tailandia, han jugado un papel importante en la reestructuración de esta industria. México participaba en 1995 con el 18.5% de las importaciones de aparatos de televisión en la OCDE, Malasia con el 7.2% y Tailandia con el 4.8%. China no era un jugador global debido a que gran parte de su producción estaba destinada al mercado doméstico. b) El mercado norteamericano Martin Kenney menciona que el mercado estadounidense “…es el ideal para entender las fuerzas globales que afectan la industria, porque él solo es el mercado más grande, y ha sido el campo de batalla competitivo dominante para los fabricantes globales” (Kenney 2004:82). En este sentido, y tomando como base el rol central de México en esta industria, revisemos la situación en Estados Unidos y la de México será tratada ampliamente en secciones posteriores. La producción de televisores en los países del TLCAN se encuentra altamente integrada. Pero mientras que uno produce otro consume. Canadá también se integra a esta plataforma como productor y consumidor pero con una cuota muy baja. Actualmente, y desde inicios de los años noventa, la mayor parte de la producción de televisores se realiza en México. Como muestra el Cuadro 3 a partir de cifras de 1998 se proyectaba que la producción en este país representaría el 98% del total de los aparatos de televisión producidos en esta región en el 2003. Por el contrario, Estados Unidos no tuvo producción a escala pero concentraba el 90% del consumo de los aparatos televisivos en la región. Cuadro 3 NAFTA: Evolución de la Producción y Consumo en la Industria de la TV Producción Consumo 1998 2003* 1998 2003* México 25,361 34,800 1,560 2,000 Estados Unidos 29,925 29,200 Canadá 400 400 1,900 2,100 TOTAL 25,784 35,200 33,385 33,300 FUENTE: Bancomext (1999) tomado de Contreras y Carrillo (2002). * Proyecciones realizadas en 1999. Las Gráficas 1 y 2 muestran la evolución de las ventas en Estados Unidos de aparatos de televisión análoga, con pantalla LCD y de Plasma. Claramente se observa en el caso de la TV análoga el ascenso desde mediados de los setentas, en particular en la década del noventa, así como el descenso de dicha tecnología a partir del nuevo milenio. Se calcula que la TV análoga, que en 1992 alcanzó ventas de 24 millones de unidades en ese país, disminuirá a menos de diez millones para el 2007. Por su parte las ventas con tecnología LCD habrán aumentado de 2 millones, aproximadamente, en el 2002, a cerca de 12 millones para el 2005, lo que representa alrededor del 10% del mercado global (CEA Market Research). Según la misma fuente, el TV de Plasma seguiría una evolución más modesta aumentando de alrededor de 100,000 unidades en el año 2002 a 1’800,000 en el 2007. En el mercado norteamericano, la firma Sony ocupa el primer lugar en ventas, seguida de Thomson (ahora TCL) y de la empresa china Apex. En cuarto lugar se encuentra Toshiba. Gráfica 1. Evolución de las ventas de televisores análogos en Estados Unidos. 30,000,000 25,000,000 20,000,000 15,000,000 CTV (Análogo) 10,000,000 5,000,000 2005 2002 1999 1996 1993 1990 1987 1984 1981 1978 1975 1972 1969 1966 1963 1960 1957 1954 0 Fuente: CEA Market Research. Con base en la presentación “The electric-electronic world perspectiva”. Trabajo de campo de Carrillo/Contreras/Hualde, Sharp-Rosarito, julio, 2004. Gráfica 2. Evolución de las ventas de televisores digitales LCD y Plasma en Estados Unidos. 14,000,000 12,000,000 10,000,000 8,000,000 LCD 6,000,000 PLASMA 4,000,000 2,000,000 2002 2003 2004 2005 2006 2007 Fuente: CEA Market Research. Con base en la presentación “The electric-electronic world perspectiva”. Trabajo de campo de Carrillo/Contreras/Hualde, Sharp-Rosarito, julio, 2004. En relación a México, el crecimiento de la industria de la televisión convencional fue un resultado directo de los cambios en esta industria en Estados Unidos; primero con la implementación de transplantes asiáticos10 en aquel país y luego con la reubicación de las plantas hacia la frontera norte de México. Tres factores críticos para el éxito japonés en Norteamérica fueron la tasa de cambio favorable del yen ante el dólar, el bajo costo de la mano de obra japonesa en los años sesentas y setentas, y el sistema de producción japonés. Debido a que el ensamble de televisiones requiere abundante mano de obra, el factor costo desde sus inicios ha sido un factor importante en la relocalización de las inversiones. A finales de la década de 1970, el papel de México había evolucionado de ser un suministrador de partes para convertirse en un exportador de televisores a color. Compañías como RCA, Sylvania, y Zenith establecieron sus plantas mexicanas desde fines de los años sesentas en la frontera de Ciudad Juárez. Esta decisión fue determinada parcialmente por las restricciones de importación que requerían los productores de EE.UU. para reunir el producto final en ese país y evitar tarifas altas. (Kenney 2004:97) El Cuadro 4 muestra los transplantes japoneses en Estados Unidos. Resalta el movimiento hacia la frontera mexicana para establecer o expandir sus actividades de maquila, y la selección del sur de California como localización principal para actividades de coordinación e investigación y desarrollo. Para mediados de los ochentas la mayoría de los productores americanos fueron empujados a abandonar el sector por parte de las transnacionales europeas y, principalmente, asiáticas. La firma francesa Thomson compró las plantas de General Electric y RCA. Thomson posteriormente fue adquirida por una firma China. Philips, de Holanda, adquirió las marcas de Sylvania y Magnavox. Matsuchita de Japón, compró Quasar. Posteriormente, la empresa coreana LG 10 Así se le denomina a las fábricas, en este caso asiáticas, establecidas fuera de su país de origen. Electronics compró las operaciones de Zenith. Este proceso de concentración produjo una industria de televisores dividida principalmente entre transnacionales europeas con plantas de producción en Estados Unidos (las cuales controlaban cerca del 34% del mercado estadounidense en 1990), y un rápido crecimiento de los transplantes principalmente japoneses, los cuales invirtieron en la creación de un cluster de aparatos de televisión en la ciudad de Tijuana, cuya cercanía al puerto de Long Beach, California, facilita las importaciones procedentes de Asia. El complejo del televisor del norte de México empleaba en el año 2000 a más de 90,000 trabajadores y producía cerca de 30 millones de aparatos al año (Contreras y Carrillo, 2002). De acuerdo con proyecciones del Banco Mexicano de Comercio Exterior (Bancomext) en el 2003 el consumo de televisores nuevos en Estados Unidos se habría estabilizado en unos 29 millones al año, en tanto que la región de América del Norte en su conjunto estaría consumiendo un total de 33 millones de aparatos (Cuadro 3). Para entonces, la producción de televisores en México habría superado la demanda de la región norteamericana y estaría abasteciendo a otros mercados como Centroamérica y Sudamérica. De hecho empresas como Sony y Sansumg habían empezado desde hacía varios años la exportación hacia esas regiones. Pero este pronóstico no tomó en cuenta otros factores: (a) la entrada de un agresivo país productor como China que desde los ochenta era un productor importante de TV, (b) el cambio sustantivo en el mercado de Estados Unidos y Canadá del CRT TV a la TV digital11, (c) la preferencia por televisores de gran tamaño, y (d) el ciclo de vida del producto del color análogo. Por tanto, las proyecciones no fueron alcanzadas. Cuadro 4. Plantas Japonesas de Ensamble de Televisores en Estados Unidos (1999) Inicio de operación 1972 Tipo de operación Nueva (Startup) Empleos 1999 n.d. Empleos 1998 1,500 Franklin Park, IL 1974 Adquisición n.d. Sanyo Forrest City, AR 1976 Adquisición Mitsubishi Santa Anna, CA 1977 Toshiba Lebanon, TN 1978 Firma Sonya Localización San Diego, CA Matsushita 11 Productos TVs, CTRs, monitores Maquila Si Operaciones TV ensamble movió a maquila 800 TVs, PTVs Si Cierre, movió a maquila 400 400 TVs, Si Nueva n.d. 550 PTVs Si Mayoría producción en maquila Fusión con planta Georgia Nueva 900 600 TVs, & microondas ovens Si & Expansión maquila En entrevista con directivos japoneses en uno de los corporativos electrónicos en Tokio se mencionó que los últimos show’s de exhibición en Las Vegas por parte de importantes firmas comercializadoras de electrónicos, no se presentó ningún aparato de TV análago, todos eran plasma y LCD. La cadena COSTCO en la Unión Americana exhibe para su venta, por primera vez y desde el 2004, TV digitales de tamaño pequeño hechos en China. en Hitachi Anaheim, CA 1979 Nueva n.d. 900 TVs & VCRs Si Cierre, movió a maquila Sharp Memphis, TN 1979 Nueva 900 770 TVs, & microondas ovens No Expasión maquila JVC Elmwood Park, NJ 1982 Nueva n.d. 100 TVs Si Cierre, movió a maquila NEC McDonough, GA 1985 Nueva n.d. 400 TVs No Cierre Matsushita Vancouver, WA 1986 Nueva 250 200 VCR-TV Combo Si Estable Mitsubishi Braselton, GA 1986 Nueva n.d. 300 Si Cierre, movió a maquila Orion Princenton, IN 1987 Nueva 110 250 TVs celulares telefonos TVs No Estable Pioneer Chino, CA 1988 Nueva 100 n.d. PTVs No Estable Sony Mount Pleasant, PA 1992 Nueva 800 n.d. TVs & CRTs Si Pantallas grandes & Fuente: Tomado de Kenney (2004), Table 4.4. No obstante lo anterior, las expectativas de crecimiento de la industria del televisor en la región aún son promisorias. Toda vez que la mayoría de las plantas de manufactura han sustituido gran parte de la producción de televisores convencionales por la de televisores digitales, como se verá en la siguiente sección. Entrevistas del autor en los corporativos de las empresas electrónicas en Japón demuestran que en la mayoría de estas firmas existe el proyecto por desarrollar el ensamble de TV digital en México a través de sus transplantes, y su posible manufactura en un futuro cercano, aunque no hay planes específicos.12 En cuanto a las plantas de CRT, éstas aún tienen importancia en la medida que los aparatos televisores análogos sigan vendiéndose en Estados Unidos. Según Kenney esas fábricas están condenadas al cierre en la próxima década. (Kenney 2004:105) De acuerdo con este autor, en el 2001 había sólo veintitrés firmas productoras de CRTs de cualquier tipo. Con excepción del sudeste asiático, Taiwán, Corea y China, no había centros líderes en la fabricación de CRT en países en desarrollo. Aunque al final de la década del noventa los fabricantes coreanos y Mitsubishi habían empezado las operaciones en el noroeste de México. En este aspecto los objetivos de Samsung fueron especialmente ambiciosos al construir en Tijuana la fábrica más grande de CRT en el mundo. (Kenney 2004:105-106) c) El caso de China. 12 Entrevistas realizadas en Japón por Jorge Carrillo y Akihiro Koido entre 23 de febrero y el 20 de marzo del 2004. en Todo indica que China está tratando de seguir afanosamente el proceso del ‘catching up’ de los países del sudeste asiático (Corea del Sur, Hong Kong y Taiwán principalmente):13 promoción y atracción dinámica de inversión extranjera directa, agresivas inversiones conjuntas con capital estatal y privado, desarrollo de marcas propias como las empresas gigantes Midea y TCL, e inversión en el extranjero (por ejemplo, maquilas de origen Chino en México), etcétera. Además, los chinos han desarrollado intensamente las copias tanto de productos artesanales y de baja tecnología como intensivos en tecnología -por ejemplo artesanía mexicana, cerámica italiana, motocicletas italianas, autos japoneses, etc., lo que obviamente ha generado múltiples controversias sobre propiedad intelectual. China ha logrado atraer un considerable volumen de inversión extranjera directa 3.2 veces más que México en el año 2000 y 4.3 veces en el 2002. En el periodo 19922002 China captó 370 miles de millones de dólares de inversión extranjera convirtiéndose en el lugar preferido para la inversión extranjera. Diferentes industrias con distintos niveles tecnológicos en China ya están compitiendo directamente con las exportaciones mexicanas en el mercado estadounidense. México ha perdido mercado frente a China. Mientras que en 1995 representaba el 66% de las importaciones a Estados Unidos de aparatos de televisores, para el 2002 el procentaje bajó al 47%. Por el contrario China aumentó su participación del 3% al 8% en el mismo período (Cuadro 5). Para el 2005 China había superado a México en las exportaciones al mercado estadoundense (Gráfica 3). Una muestra de la fuerte competencia entre las distintas firmas quedó reflejada en la guerra comercial entablada por el gobierno de Estados Unidos contra las empresas chinas acusadas de dumping. Según dicha demanda, las empresas de este país vendían sus productos hasta en un 120% más bajos que su precio de producción en otros países debido a los subsidios otorgados por el gobierno chino. Sin embargo, la resolución de la demanda se tradujo en 2003 en la prohibición a China de exportar televisores mayores de 20 pulgadas. Dicha resolución supuso en la práctica un respiro para las firmas que se disputan el mercado estadounidense. Más aún, recientemente la principal empresa china de televisores, TCL, anunció que dadas las prácticas anti dumping invertirá en la frontera norte de México con el fin de producir para el mercado norteamericano. Gráfica 3. Importaciones de EE.UU. TV y otros equipos de video 13 Hobday (1995) para Taiwán y Gereffi para Hong Kong (1994) describen cómo un conjunto de firmas aprendieron y se movieron a lo largo de tres estadios: (i) manufactura de equipo original, (ii) producción de diseños propios, y (iii) creación de marcas propias. Incluso lograron convertirse en nodo (hub) central de comercio y transferencia de inversión extranjera directa. 12,000,000 Miles de dlls. 10,000,000 8,000,000 CHINA MEXICO 6,000,000 4,000,000 2,000,000 0 2001 2002 2003 2004 2005 . Fuente: U.S. Census Bureau. Foreign T rade Statistics Cuadro 5. Importaciones de TV de EE.UU. provenientes de China y México. (millones de dólares) México Valor de las importaciones en EE.UU. 2002 % de las importaciones totales en EE.UU. % de las importaciones totales en EE.UU. Valor de las importaciones en EE.UU. 2002 China % de las importaciones totales en EE.UU. % del total de importaciones en EE.UU. Producto 1995 2002 1995 2002 Aparatos de Televisión, incluye monitores y proyectores de video 4,797 65.6% 47.5% 860 2.6% 8.5% Fuente: International Trade. Mexico’s Maquiladora Decline Affects U.S.- Mexico Border Communities and Trade; recovery Depends in Part on Mexico’s Actions, GAO, July 2003, page: 64, Table 6 China alcanzó una población de 1,300 millones de personas en el año 2003. Se menciona -y se puede observar claramente- que tiene una clase media en expansión y un segmento ‘pequeño’ pero con una gran capacidad de consumo. Si tomamos en cuenta el tamaño de escala en China, se trata de grandes dimensiones, lo que equivale a que estos ‘pequeños’ estratos sociales signifiquen en la realidad varios millones de personas.14 En cuanto a la producción de aparatos de televisión en China, este país alcanzó los 40 millones en el 2003 y --de acuerdo a entrevistas del autor-- en su gran mayoría fueron destinados para el consumo doméstico.15 Si bien muchas de las compañías establecidas en China son las tradicionales transnacionales japonesas, coreanas y europeas (4 firmas japonesas, 2 coranas y 1 europea están en este país), la participación en el mercado de empresas de origen de capital chino es importante en la producción de televisores de gran pantalla, y ciertamente dominante en el de aparatos televisores con cinescopio, como lo muestran las Gráficas 4 y 5. En el caso de las televisiones análogas las empresas chinas concentran cerca del 75% de la producción total, y en el caso de las TV de proyección su participación disminuye a un poco más del 30%. Es decir, de las 40 millones de TV las compañías chinas producen 30 millones de aparatos, aproximadamente!. Esta producción está concentrada en seis firmas chinas, además de otras de segundo nivel, entre las que sobresalen en orden de importancia, TCL, Konka y Changhong. No cabe duda que este crecimiento meteórico de las empresas chinas posiblemente redundará en que buena parte del ensamble de aparatos de TV LCD y Plasma lo hagan ellas mismas. Además este proceso avanza a pasos agigantados, particularmente con la reciente alianza en el 2003 de la compañía francesa de televisiones Thomson y la firma china TCL. La empresa francesa no había entrado en el mercado chino, pero es una consolidada plataforma de exportación desde México a Estados Unidos. Esta adquisición ha convertido a TCL en la compañía más grande del mundo productora de TV. Por tanto, el patrón de 14 15 Se calcula que ambos representan 100 y 200 millones de personas. Trabajo de campo de Jorge Carrillo en empresas en China, Septiembre del 2004. concentración de la producción en transnacionales japonesas, coreanas y europeas, seguramente cambiará en un futuro próximo, al incorporar a las firmas chinas. Gráfica 4. Participación por empresa según origen de capital en el mercado de 65 ciudades chinas. Industria del Televisor análogo. 100% 80% 60% Chinas Europeas 40% Coreanas Japonesas 20% 0% mayo 2003 julio sep nov enero 2004 mar may Fuente: Documento interno proporcionado por una empresa del televisor. Trabajo de campo de Jorge Carrillo visitando plantas de TV en China, Septiembre del 2004. Gráfica 5. Participación por empresa según origen de capital en el mercado de 65 ciudades chinas. Industria del Televisor de proyección . 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Chinas Europeas Coreanas Japonesas mayo 2003 julio sep nov enero 2004 mar may Fuente: Documento interno proporcionado por una empresa del televisor. Trabajo de campo de Jorge Carrillo visitando plantas de TV en China, Septiembre del 2004. Diversas personas entrevistadas en las OEMs de Baja California manifestaron que no hay presión por la competencia china al interior de sus corporativos, y manifestaron tener una ventaja comparativa para el aprovechamiento del mercado norteamericano por su ubicación geográfica, ya que mencionaron no es conveniente traer TVs de China de más de 20” por los costos de transporte. Por otra parte el traslado de las TVs de Plasma y LCD es muy delicado por lo que es más conveniente que el proceso productivo se realice cerca del mercado de consumo final. En este sentido no hay riesgo para México de que se de un éxodo masivo de plantas o líneas de producción hacia China. Por el contrario, todo parece indicar que vendrán plantas Chinas y Taiwanesas a establecerse en la región. Algunas empresas como Hitachi están previendo esto por lo que aumentaron su nivel de salarios. En la Gráfica 6 se puede apreciar la disminución en la participación de mercado de las CRT TVs, las PTVs, la estabilización de las Plasma y el crecimiento de las LCD en el mercado norteamericano. Finalmente en la Gráfica 7 se aprecia la caída generalizada de los precios en todos los tipos de TVs durante agosto del 2005 y julio del 2006, por lo que se hace necesaria la estrategia de disminución de costos, más que de diferenciación de producto. Gráfica 6. Participación de mercado de las distintas tecnologías en Estados Unidos. Market Share % 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Aug-05 Sep-05 Oct-05 Nov-05 Dec-05 Jan-06 Feb-06 Mar-06 Apr-06 May-06 Jun-06 Jul-06 50% 55% 55% 57% 52% 51% 49% 54% 53% 52% 48% 44% 3% 6% 11% 10% 13% 16% 19% 17% 20% 23% 31% 35% Micro PTV 35% 32% 27% 29% 29% 30% 29% 26% 24% 22% 20% 21% CRT PTV 12% 7% 7% 4% 6% 3% 3% 3% 3% 3% 1% 1% Plasma TV LCD TV Fuente: NPD TechWorld. Gráfica 7. Evolución del precio promedio de ventas de las TV. $4,000 ASP $3,000 $2,000 $1,000 $0 LCD TV Aug-05 Sep-05 Oct-05 Nov-05 Dec-05 Jan-06 Feb-06 Mar-06 Apr-06 May-06 Jun-06 Jul-06 $4,084 $3,303 $3,249 $3,162 $3,076 $3,156 $2,954 $2,953 $2,845 $2,708 $2,465 $2,411 Plasma TV $2,445 $2,232 $2,282 $2,137 $2,266 $2,269 $2,198 $2,179 $2,134 $2,082 $2,014 $1,954 Micro PTV $1,815 $1,724 $1,801 $1,659 $1,751 $1,714 $1,701 $1,702 $1,661 $1,610 $1,429 $1,372 CRT PTV $1,002 $944 Fuente: NPD TechWorld. $1,013 $996 $985 $1,055 $1,028 $1,037 $1,066 $1,043 $705 $694 3. A Manera de Conclusión. La transición en la que se encuentra la industria del televisor a nivel mundial está implicando importantes reestructuraciones en los países productores y consumidores. Como hemos visto, la geografía de la producción también se ve afectada por el proceso de globalización y por la emergencia de nuevos mercados de consumo,. Los tradicionales países productores de televisores compiten no sólo por mantener su participación en sus mercados de exportación, sino en los propios mercados domésticos. Las cuotas de participación por firma disminuyen, como en el caso de China. Las firmas líderes en la electrónica de consumo se ven también amenazadas por nuevos competidores, lo que está orillando a nuevos arreglos entre grandes conglomerados, que respetan cada vez menos el país de origen para hacer negocios entre corporativos. La mayor parte de ellas son grandes corporativos con una cartera de negocios diversificada en la cual los televisores no suelen ser la parte más rentable. Como se explicaba a propósito de las reestructuraciones del grupo francés Thomson. El grupo, mencionaba una revista, tendrá que convencer a la Bolsa de que no es un simple fabricante de electrónica de consumo, sino un grupo tecnológico de alto valor agregado centrado en las imágenes.16 En este contexto, países como México han logrado mantener su importante participación. Este país aún conserva el predominio como principal productor mundial de televisores, pero su participación disminuye considerablemente ante las exportaciones principalmente chinas hacia Estados Unidos. Además, nuevas empresas asiáticas hacen su aparición en la región fronteriza del norte de México. Los aparatos de televisión digital se distribuyen crecientemente en las tiendas electrónicas y departamentales en los mercados principales. Pero los televisores con cinescopio se resisten a desaparecer, aunque no por mucho tiempo más. Las preferencias del consumidor final, último eslabón de la cadena productiva, y las regulaciones en las señales de telecomunicación, serán las que marquen el tiempo de vida de la televisión análoga. Mientras tanto, actores locales en las distintas regiones se preparan para la nueva etapa tecnológica que ya llegó. 16 Soula, Claude “Ce que Thomson veut faire de ses télés”, Le nouvel observateur, pp. 72-74, 19-2 junio del 2003. En el reportaje se muestra una gráfica en la que se observa que las ventas de televisores representan actualmente para la firma el 31% de sus ventas, mientras que el “Tratamiento de la imagen” es el 38%