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PRESENTACIÓN
DEVORAR PARÍS. PICASSO 1900-1907
«Con tus pinturas, parece que quieras obligarnos a comer estopa y beber queroseno. »
(Braque a Picasso, 1907)
La exposición “Devorar París” ofrece una
mirada a la evolución de Picasso desde la
llegada del artista a esta ciudad en 1900 y
su descubrimiento de una floreciente
comunidad internacional de artistas, hasta
1907-1908 cuando alcanzó notoriedad
como principal representante de la vanguardia en la capital francesa. Ver por vez
primera obras de pintores y escultores de
la talla de Van Gogh, Gauguin, Puvis de
Chavannes, Toulouse-Lautrec, Rodin y
Steinlen fue toda una revelación para
Picasso y una inspiración a la que se
mostró de inmediato sensible como
demuestran su exploración de nuevas
técnicas pictóricas y gráficas y el empeño
que puso en abordar nuevos temas basados en sus propias experiencias ante la
vida y el arte modernos.
Algunos críticos tacharon a Picasso de
imitador de las obras de artistas que descubrió en su primer viaje a París ahora
podemos ver lo desacertado de este juicio.
Aunque Picasso no renunció a apropiarse
de los hallazgos de sus contemporáneos o
de los que descubrió en la historia del arte
para forjar su propio estilo, lo cierto es que
nunca fue un imitador (es imposible confundir una sola de sus obras con la de
ningún otro artista). En 1907 Picasso ya era
un artista mundialmente reconocido pero
durante toda su carrera utilizó los mismos
métodos de trabajo y experimentación. La
actual exposición permite apreciar este hilo
conductor.
ÁMBITO 1
El descubrimiento de París
Picasso tenía diecinueve años cuando llegó
a París, a finales de octubre de 1900, a
tiempo para ver expuesto su cuadro Últimos momentos (obra que cubrirá con otra
pintura) en el pabellón español de la Exposición Universal. Se instaló en un taller de
Montmartre con sus amigos de Barcelona,
Carles Casagemas y Manuel Pallarès. Ahí,
en la parte alta de la ciudad, los tres descubrieron una floreciente comunidad de
artistas, en su mayoría extranjeros, que
Pablo Picasso
Le Moulin de la Galette
París, 1900
Óleo sobre lienzo, 88,2 x 115,5 cm
Solomon R. Guggenheim Museum,
Nova York
Thannhauser Collection, donación,
Justin K. Thannhauser, 1978
aspiraban a hacer carrera en la capital
francesa. Picasso se marcharía en diciembre, pero a pesar de lo corto de esta primera estancia, el efecto en su obra fue instantáneo. Las obras realizadas durante su
primera visita a París y el año siguiente
indican que Picasso halló una fuente de
inspiración en artistas cuyas obras veía por
primera vez como Toulouse-Lautrec, Steinlen y Van Gogh.
Pablo Picasso
Saliendo de visitar la
Exposición Universal, París
París, 1900
Lápiz, carboncillo y lápices de color sobre
papel, 47,6 x 62 cm
Colección particular, Suiza. Cortesía
E & R Cyzer Gallery, Londres
Pablo Picasso
El abrazo
París, 1900
Pastel sobre papel, 59 x 35 cm
Museu Picasso Barcelona (MPB 4263)
© Successió Pablo Picasso, VEGAP,
Madrid 2010
ÁMBITO 2
La exposición Vollard de 1901 y las ilustraciones para revistas
El marchante barcelonés Pere Mañach, que
vivía en París, organizó en 1901 una muestra colectiva de obras de Picasso y del
artista vasco Francisco Iturrino en la prestigiosa galería Vollard. Picasso expuso en
este marco más de 65 cuadros y dibujos,
que incluían naturalezas muertas, escenas
de calle y abundantes retratos de mujeres,
una amplia gama que iba de la clientela
elegante de los cafés a prostitutas y actrices de cabaret. Como tantos otros artistas
extranjeros que vivían en el París de finales
de siglo, también realizó obra gráfica publicando dibujos de personajes del mundo del
espectáculo en revistas francesas como Le
Frou-Frou.
Pablo Picasso
Loca con gatos
Pablo Picasso
Jardin de Paris
París, 1901
Óleo sobre cartón, 45,1 x 40,8 cm
The Art Institute of Chicago.
Amy McCormick Memorial Collection
París, 1901
Tinta y acuarela sobre papel, 64,8 x 49,5 cm
The Metropolitan Museum of Art, Nova York.
Donación de Raymonde Paul, en memoria
de su hermano C. Michael Paul, 1982
Henri de Toulouse-Lautrec
Mademoiselle Eglantine’s Troupe
Pablo Picasso
La espera (Margot)
1896
Litografía a color, 61,7 x 78,9 cm
Musée d’Ixelles, Brussel·les
París, 1901
Óleo sobre cartón, 68,5 x 56 cm
Museu Picasso Barcelona (MPB 4271)
© Successió Pablo Picasso, VEGAP, Madrid 2010
ÁMBITO 3
La fama de Van Gogh en París
La celebridad de Van Gogh, que antes de
su muerte había estado confinada a los
círculos vanguardistas en Francia, fue en
aumento después de su suicidio , en julio
de 1890. Con una muestra de sus cuadros
fue inaugurada, en 1895, la Galería Vollard
en la rue Laffitte, y la galería BernheimJeune organizó en 1901 una exposición Van
Gogh con más de 70 cuadros y dibujos.
Cuando Picasso y otros artistas extranjeros
se instalaron en la capital francesa, la obra
de Van Gogh, sobre todo sus grandes
pinceladas con empastes y los colores
vivos, comenzaba a hacer adeptos. «Picasso, joven y desinhibido, debió de reconocerse de inmediato en la imagen imperante
de Van Gogh, la del genio y artista visionario que, desde su altar solitario, lo había
sacrificado todo por su arte.»
(Nienke Bakker, «La reputación de Vincent
van Gogh en París alrededor de 1900», p.
93).
Vincent van Gogh
Trigal
Arlés, 1888
Óleo sobre lienzo, 54 x 65 cm
Van Gogh Museum, Amsterdam
(Vincent van Gogh Foundation)
ÁMBITO 4
Picasso simbolista
A finales de 1901, las pinceladas enérgicas
de Picasso y sus animadas escenas de la
vida parisiense dieron paso a una paleta más
evocadora y a temas cargados de simbolismo. El mismo artista atribuyó la adopción del
azul en su pintura al suicidio en París, en
febrero de ese año, de Carles Casagemas. La
reducción de su paleta sin duda le permitió
concentrarse en la forma, además de evocar
atmósferas poéticas, y las obras de este
periodo, centradas en las condiciones de los
pobres o las presas recluidas en SaintLazare, son abordadas con la misma dignidad que en Van Gogh, Gauguin y Puvis de
Chavannes, cuyos murales en el Panteón
sobre el tema de la caridad Picasso estudió
detenidamente. Picasso también acudió a la
escultura en búsqueda de soluciones formales —por ejemplo, a los bronces de Rodin—
para plasmar sus ideas sobre el volumen y
explorar las diferentes posibilidades expresivas de las formas tridimensionales.
Pablo Picasso
Casagemas en su ataúd
Auguste Rodin
Celle qui fut la belle heaumière
París, 1901
Óleo sobre cartón, 72,5 x 58 cm
Colección particular.
Cortesía James Roundell
1883
Bronce, 50,5 x 31 x 23 cm
Colección particular. The Edelweiss Trust
Pierre Puvis de Chavannes
Caridad
Pablo Picasso
La mujer de la cofia
1894
Óleo sobre lienzo, 91,4 x 71 cm
Midred Lane Kemper Art Museum,
Washington University, St. Louis
París, 1901
Óleo sobre lienzo, 41 x 33 cm
Museu Picasso Barcelona (MPB 112.750)
© Successió Pablo Picasso, VEGAP, Madrid 2010
ÁMBITO 5
Picasso en el Bateau-Lavoir
Picasso se trasladó definitivamente a París
en 1904, y se instaló en un taller en la última
planta del Bateau-Lavoir que antes había
ocupado el escultor vasco Paco Durrio. Esta
laberíntica construcción de madera estaba
habitada por una abigarrada comunidad de
pintores, escultores, escritores y modelos, en
buena medida responsable del enriquecedor
marco en el que las ideas artísticas de Picasso germinaron rápidamente en muy pocos
años. Fernande Olivier, que trabajaba como
modelo para artistas, vivía con Ricard y
Benedetta Canals en el Bateau-Lavoir, y fue
aquí donde en 1904 conoció a Picasso, con
quien compartiría su vida hasta 1912.
Pablo Picasso
Acróbata a caballo
Henri de Toulouse-Lautrec
La bebedora o Resaca
París, 1905
Óleo sobre cartón, 100 x 69,2 cm
Virginia Museum of Fine Arts,
Collection of Mr. and
Mrs. Paul Mellon,
Richmond, Virgínia.
1889
Tinta negra y lápiz sobre papel, 49 x 63 cm
Musée Toulouse-Lautrec, Albi
Pablo Picasso
Retrato de la señora Canals
París, 1905
Óleo y carboncillo sobre lienzo, 90 x 69,5 cm
Museu Picasso Barcelona (MPB 4.266)
© Successió Pablo Picasso, VEGAP, Madrid 2010
ÁMBITO 6
El gran salto
El Picasso que llegó a París en 1900 era un
joven pintor español de formación provinciana; en 1907, se había convertido en un puntal
de la vanguardia francesa. En el medio artístico parisiense no dudó en adoptar los hallazgos de sus contemporáneos, además de los
que extrajo de la historia del arte, para forjarse su propio estilo. En 1906-1907, sus fuen-
tes de inspiración eran muy variadas, y abarcaban de Cézanne y Matisse a la escultura
ibérica y el arte africano. Los cuadros y
dibujos de esta última sección ilustran el gran
salto que dio Picasso en la creación de
nuevas formas y composiciones, un progreso
que cambiaría el curso del arte en el siglo XX.
Pablo Picasso
Autorretrato con paleta
Vincent van Gogh
Autorretrato como pintor
París, 1906
Óleo sobre lienzo, 91,9 x 73,3 cm
Philadelphia Museum of Art.
A. E. Gallatin Collection
París, 1888
Óleo sobre lienzo, 65,2 x 50,2 cm
Van Gogh Museum, Amsterdam
(Vincent van Gogh Foundation)
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