La Capacidad Innovadora en la Enseñanza

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La Capacidad Innovadora en la Enseñanza - Aprendizaje en el Binomio Empresa Universidad y la Gestión del Conocimiento
María Antonia Larrea Abásolo
Economista U. C. Administración de Empresas-Moderm School INC. Miami - USA.
Magíster en Desarrollo Curricular. U. C Profesor de la Cátedra de Fundamentos
Económicos (FACES) U.C.
Resumen
El presente trabajo de investigación, se propone establecer en qué medida la capacidad
innovadora en los procesos de enseñanza - aprendizaje que se dan entre la empresa y la
universidad; favorecen a la gestión del conocimiento. La investigación tuvo como escenario la
Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública de la Facultad de Ciencias
Económicas y Sociales (FACES) en la Universidad de Carabobo; específicamente, en el área de
desarrollo de Trabajos de Grado. La investigación es exploratoria y descriptiva. La metodología
fue llevada a cabo en cinco Trabajos de Grado ya aplicados en cinco empresas y tres Trabajos de
Grado en procesos tentativos a ser aplicados en tres empresas, para ello se trabajó con muestreo
probabilístico por conveniencia, estratificado; donde se aplicó un cuestionario de preguntas
cerradas empleando escala Likert. Al instrumento de validación se le determinó su confiabilidad
a través del coeficiente KR - 20 desarrollado por Kuder Richardson (1938). Para el análisis de la
información, se empleó la prueba de diferencia de media, mediante el análisis de la varianza. El
trabajo empleó los modelos de Gestión del conocimiento, propuesto por Pérez y Revilla (1996);
el Situacional contingencial, propuesto por De Faria (1996) y F.O.C.D.E.R.E., propuesto por
Páez y León (1996). Finalmente se procedió a la elaboración de conclusiones y recomendaciones
que den respuesta a los resultados obtenidos en el trabajo de campo que implica esta
investigación.
Palabras Clave: Gestión del Conocimiento. Capital Intelectual. Modelo Situacional
Contingencial. Procesos de Enseñanza - Aprendizaje. Diseño Instruccional.
Abstract
The propone of the present work of investigation, is establish in what measure the brain power
innovate in the lapse of time of teach - learner what to give between the enterprise on the
university; to favor lo the conduct of knowledge. The investigation had staged the School of
Administration Commercial and Accountant Public of the Faculty of Sciences Economical and
Socials (FACES) in the University of Carabobo, specifically, in the squire diameter of
development of Works Academic Title. The investigation is exploratory and descriptive. The
methodology to have as carry to finish in five Works of Academic Title assiduous in five
enterprise and three Works of Academic Title in lapse of time tentative to is assiduous in the
three enterprise; working with sampling probabilistic for conformity stray, where is assiduous
and cuestoso of questions close employed scale Likert. The instrument of validation had
determined the confidence to traverse of coefficient KR - 20 developed for Kuder Richardson
(1938). For the analysis of the information, had worked the test of difference of mean,
intervening the analysis of the varianza. The work to be employed the models of Management of
Knowledge, propose for Pérez and Revilla (1996); the Situational - Contigential, propose for De
Faria (1996) and F.O.C.D.E.R.E. propose for Páez and León (1996). The investigation to finish
with the conclusions and recommendations what represent the results obtainable in the work of
camp what implicate that investigation.
Key words: Management of Knowledge. Capital Intellectual. Model Situational Contingential. Lapse of Time of Teach - Learner. Sketch of Instruction.
Introducción
El presente trabajo es una oportunidad para la reflexión de la praxis docente en su papel de Tutor
Académico, en la sistematización de los aspectos teóricos y operativos de dicha actividad. La
investigación en rigor, no representa una estructura rígida de investigación pedagógica, tal como
lo aconsejará la ortodoxia. Sin embargo, no por ello se debe perder de vista que esto es válido,
toda vez que la educación al fin y al cabo es un fenómeno social por excelencia, por tanto su
tratamiento se encuadra en los aspectos de la realidad en que se desenvuelven los grupos
humanos de la sociedad.
El cambio de paradigma enfrentado por esta generación del tercer milenio, obliga a repensar los
esquemas vigentes hasta ahora, que habían servido de guía para planificar acciones y tomar
decisiones, con la convicción de ir por el cambio seguro. Sin embargo, el contexto en el cual nos
encontramos inmersos, donde la única constante es el cambio, nos lleva a cuestionar la
pertinencia de las habilidades y cualidades que se han venido desarrollando a través del sistema
educativo, así como las estrategias para lograrlas.
Es por ello que la investigadora no dudó en asumir el reto que ofrece la realización del Trabajo
de Ascenso, a fin de aspirar a la Categoría de Docente Asociado; adscrito a la Escuela de
Administración Comercial y Contaduría Pública de la Facultad de Ciencias Económicas y
Sociales (FACES) en la Universidad de Carabobo; para abordar el problema sobre la relación
capacidad innovadora, en el binomio empresa - universidad y la gestión del conocimiento.
La investigación persiguió como objetivo determinar en qué medida la capacidad innovadora en
los procesos de enseñanza - aprendizaje entre la empresa y la universidad favorecen la gestión
del conocimiento. Fue llevada a cabo mediante la elaboración de un diagnóstico de la situación
actual, con relación al trabajo conjunto entre empresa y universidad en el mercado laboral a fin
de conocer cómo se dan los procesos de enseñanza - aprendizaje, y la capacidad innovadora de
los actores involucrados. Seguidamente se desarrollaron estrategias didácticas - metodológicas
que permitieron favorecer la participación conjunta entre la empresa y la universidad, aquí se
propuso un diseño instruccional que permitió visualizar estrategias didácticas - metodológicas
tendientes a la elaboración de Trabajos de Grado con el mínimo de calidad científica al que
deberán responder. Finalmente se procedió a aplicar el diseño instruccional a fin de medir su
aplicación; además de la capacidad innovadora inmersa en los procesos de enseñanza aprendizaje, que se dan en el binomio empresa - universidad, así como el impacto en la gestión
del conocimiento.
El desarrollo de la investigación permitió concluir que el diseño instruccional es en sí mismo,
una estrategia didáctica - metodológica, que se ajusta a las necesidades y requerimientos de la
Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública de la Facultad de Ciencias
Económicas y Sociales (FACES) en la Universidad de Carabobo en lo que respecta al proceso de
desarrollo y aprobación del Trabajo de Grado, como el requisito indispensable para que los
alumnos regulares puedan optar a graduarse profesionalmente.
Fundamentación Teórica - Gestión del Conocimiento
Conocido como el modo en que la organización genera conocimiento, es competencia de la
dirección el diseño e instrumentación de políticas que entiendan la organización en su entorno
como un sistema único y permitan a sus miembros adquirir, compartir, interpretar y almacenar
conocimiento para lograr mejoras organizativas. Si hay un aspecto relevante en todo este planteamiento es la gestión del conocimiento. La verdadera ventaja para la empresa reside en su
capacidad de gestionar los procesos de creación, desarrollo y difusión del conocimiento y de este
modo, desarrollar la capacidad de aprendizaje de la organización. La gestión del conocimiento es
un instrumento directivo de primera magnitud, capaz de contribuir sustancialmente al éxito y
desarrollo de la organización.
Sobre la base del modelo de aprendizaje organizativo y apoyándose en una revisión de la
literatura relacionada por los autores, Pasmore (1994), Muñoz Seca y Riverola (1997), Probst y
Buchel (1997); se puede afirmar que el modelo de gestión del conocimiento identifica tres
elementos de gestión: instrumentos de apoyo, facilitadores y diseño organizativo.
Los instrumentos de apoyo actúan directamente sobre el proceso de aprendizaje, definiendo la
eficiencia tanto del ciclo de aprendizaje individual como el organizativo. Así pues, tienen dos
centros de atención el personal y el organizativo. En el ámbito personal se destacan cuatro
elementos: creatividad, asignación de retos, resolución de problemas y comportamiento
defensivo. A un nivel organizativo, también son los elementos señalados: codificación,
transferencia, vigilancia del entorno y visión compartida.
Los facilitadores son de orden superior a los instrumentos de apoyo y delimitan el entorno en el
que éstos actúan. El modelo identifica cinco facilitadores: el liderazgo, la cultura, la tecnología,
la medición y las políticas de recursos humanos.
El diseño organizativo da soporte a los dos elementos anteriores al especificar las interacciones
entre los individuos y grupos dentro de la organización.
Del mismo modo que una organización requiere nuevas formas de hacer las cosas para adaptarse
al entorno, los principios de diseño organizativo también deben permanecer en un estado casi
continuo de cambio. La organización debe experimentar continuos rediseños y mantener
continuos cambios en sus estructuras, procesos, dominios, objetivos, etc.; e incluso, en el modo
de encarar la adaptación.
Los principios de diseño deben ser entendidos también desde el marco de un paradigma
evolucionista. Purser y Pasmore (1992), los denominan a estos principios de diseño, que se basan
en el mantenimiento de un balance entre el orden y el desorden, de sincronización dinámica.
Mientras que el orden aporta una coherencia al sistema, el desorden, caos controlado, ofrecen a
la organización la oportunidad de aprender. Ese paradójico orden a través del caos requiere el
diseño de pequeñas estructuras dentro de la organización capaces de detectar situaciones que
instiguen a la búsqueda de un orden superior.
Kanter (1989), plantea acerca de las cuestiones relativas a la agilidad y flexibilidad organizativa
empiezan a ser consideradas de suma importancia. El diseño organizativo, más que intentar
congelar la organización en un determinado estado de equilibrio, debe aprender a sincronizar
dinámicamente el movimiento de sus actividades, fases, procedimientos, valores de acuerdo con
las exigencias del proceso de transformación y materialización del conocimiento. En esta línea
Kanter (1989), ha mostrado cómo la organización tradicional del trabajo es ineficaz para el logro
de organizaciones que aprenden, por estar dirigida fundamentalmente al seguimiento y asumir
que los problemas pueden ser resueltos como piezas aisladas asignadas a expertos. El problema
fundamental radica en que desde la departamentalización clásica no se anima a compartir los
modelos mentales, ni a tomar decisiones que tengan en cuenta múltiples perspectivas y, como
consecuencia, no se reduce la incertidumbre y la ambigüedad. Tal enfoque no contempla la necesidad que deriva las relaciones de interdependencia, muestra las actividades que confluyen en un
desarrollo de productos a realizar continuos ajustes redefinidos.
Plantean Purse y Pasmore (1992), que como resultado de éstas y otras criticas, el centro de
atención de las organizaciones que aprenden se desplaza hacia formas organizativas más
autónomas y descentralizadas. En este sentido, las estructuras orgánicas, caracterizadas por una
reducida formalización, escasa centralización en la toma de decisiones y unas estructuras de
planificación y control más participativas que jerárquicas son preferibles a las mecánicas. Tales
formas, al ser más flexibles, se adaptan mejor a las situaciones cambiantes y a los requisitos
imprevistos.
Para triunfar la organización debe conciliar dos tendencias conflictivas: continuidad y cambio
rápido. Acorde con March y Simón (1985), esta ambivalencia directiva exige organizaciones
capaces de adaptarse a la evolución del entorno y, por tanto, de generar conocimiento, pero a la
vez, eficientes. Se cree que toda organización debe armonizar dos fenómenos distintos: (1)
individuos y grupos que garanticen la estabilidad del sistema, en definitiva, el orden; (2) un
proceso dinámico que conforme a unos mecanismos de inducción, permita integrar información
procedente de sucesos complejos o experiencias inusuales, explorar las implicaciones de esta
nueva realidad y generar conocimiento. A un nivel práctico, esto significa crear foros donde las
nuevas ideas y las viejas experiencias se integren en la adopción de decisiones. Expresan
también; que la dificultad esencial de este tipo de planteamiento radica en elevar la rutina
organizativa, la cultura de cambio, del dinamismo y por ende, la del aprendizaje. Aprender a
convivir con situaciones cambiantes, exige a la empresa legitimar el dinamismo y la flexibilidad.
Análogamente al modo en que formas de hacer dirigidas a conseguir elevados grados de
eficiencia aparecen profundamente enraizadas en la organización - institución, la organización se
ve abocada a institucionalizar otra serie de prácticas y formas de actuación encaminadas a
garantizar la flexibilidad.
El propósito que se persigue con la legitimación de ciertas formas de comportamiento es clara,
ofrecer una comprensión común del comportamiento que es considerado adecuado para una
determinada situación, de modo que, al hacerle comprensible y predecible, puede repetirse con
un mínimo esfuerzo y facilitar su coordinación. La actual exigencia de cambio y flexibilidad, por
lo general, viola la mayor parte de las prácticas en vigor en una organización - institución,
fundamentalmente dirigidas hacia la eficiencia, requiriendo formas de actuar impensables, no
legitimidas muchas veces por la organización.
Capital Intelectual
Según Brooking (1997), el capital intelectual es el principal activo de las empresas del tercer
milenio. La gestión del conocimiento y la creación de memorias corporativas constituye el
proceso de identificación auditoria y registro del capital intelectual dentro de las organizaciones.
Este proceso debe contener métodos apropiados para lograr agrupar los activos materiales que
poseen las organizaciones. Estas deben buscar un método coherente para crear esas memorias
corporativas, pues para ello todavía hay mucho que investigar. Dentro de este contexto, las
organizaciones que han de triunfar en el tercer milenio, serán sustentadas por sus activos
inmateriales; es decir, que estas empresas en la actualidad, ya están formando sus equipos de
capital intelectual. Asimismo, la auditoria del capital intelectual conforma el sustento principal
de la salud y vida de las empresas de la postmodernidad; donde el futuro es inmaterial.
El capital intelectual de la empresa puede dividirse en cuatro categorías:
Activos de mercado: Lo constituyen el potencial derivado de los bienes materiales que guardan
relación con el mercado. Se incluyen las marcas, la clientela y su fidelidad, la repetitibilidad del
negocio, la reserva de pedido, los canales de distribución, contratos y acuerdos tales como
licencias, franquicias, entre otros.
Activos de propiedad intelectual: incluyen los secretos de fabricación, las patentes y diversos
derechos de diseño, así como también las marcas de fabricación y de servicios. La propiedad
intelectual es el mecanismo legal destinado a la protección de innumerables activos corporativos.
Los inventos o sus componentes se pueden proteger mediante una o más patentes. Los secretos
de fabricación se protegen a través de acuerdos de ausencia de divulgación, exceptuando los
terceros, expresamente identificados en el acuerdo.
Activos centrados en el individuo: Comprenden la pericia colectiva, la capacidad creativa, la
habilidad para resolver problemas, el liderazgo y la capacidad empresarial y de gestión;
encargados en los empleados de la organización. No se debe contemplar al individuo como un
ente completo para el desempeño de una función, sino como una entidad dinámica que puede
adaptarse a diversos trabajos a lo largo del tiempo.
La organización de un buen director consiste en asegurar que cada activo humano tenga
oportunidades que permitan al empleado desarrollar al máximo sus potencialidades dentro de la
organización.
Para los efectos de la presente investigación, la cual está relacionada con la actividad académica,
son los más importantes a considerar.
Activos de infraestructura: Son aquellas tecnologías y procesos que hacen posible el
funcionamiento de la organización. Se incluyen la cultura corporativa, la fuerza de venta, la
estructura financiera, la base de datos y los sistemas de comunicación. Es decir, los elementos
que definen la forma de trabajo de la organización. Los activos de infraestructura son
importantes porque aportan orden, seguridad, corrección y calidad a la organización.
De acuerdo a Stewart (1997), el capital intelectual es material intangible (conocimientos,
información, propiedad intelectual, experiencia) que se puede aprovechar para crear riqueza. Es
fuerza cerebral colectiva. Es difícil de identificar y aun más, de distribuir eficazmente. Pero
quien lo encuentra y lo explota triunfa. Esta definición la llama Stewart organizaciones de
servicios, y las refiere como el conjunto de actividades realizadas y coordinadas por un número
determinado de personas, mediante un esfuerzo físico necesario para lograr producir bienes y
servicios de un área determinada.
Capacidad Innovadora
Es la aptitud con la que cuenta una persona para originar cambios en una determinada situación o
en el medio que lo rodea.
Nelson (1997), la define como el talento o la disposición para comprender las cosas que se están
haciendo y la habilidad para alterarlas introduciendo novedad en ellas. La innovación es el
instrumento específico del empresario innovador. Para ellos, la innovación consiste en la acción
de dotar a los recursos humanos con una buena capacidad de producir riquezas. La innovación
crea un recurso. Cualquier cambio en el potencial productor de riqueza ya existente, también es
innovación. La gerencia de las empresas, tiene como principal fundamento el conocimiento útil
que confiere al hombre la capacidad para impulsar a las personas, aunque posean un distinto
potencial y distintos grados de conocimiento, mediante el trabajo organizacional.
La teoría de la innovación fue elaborada por Schumpeter (1934), donde la define como la
introducción de combinaciones nuevas de los factores de producción que pone en práctica el
empresario y modifica profundamente el sistema productivo anterior. Esto lleva consigo la
ruptura del estado estacionario y el inicio de un proceso de desarrollo. A dichas combinaciones
Schumpeter las denominó innovaciones, definidas como cambios históricos e irreversibles en los
procedimientos productivos, considerando cinco tipos fundamentales: (1) fabricación de nuevos
bienes, o de una nueva calidad de un bien existente; (2) introducción de un nuevo método de
producción derivado o no de un descubrimiento técnico; (3) apertura de un mercado,
independientemente de que éste exista o no con anterioridad; (4) conquista de una fuente de
oferta de materias primas o productos semielaborados; (5) realización y establecimiento de una
forma de organización de la producción.
La tarea de construir una aptitud y una capacidad de innovación exige un compromiso a largo
plazo. No hay ninguna capacidad más importante que la capacidad que posee una empresa para
el cambio en sí mismo. La más urgente tarea de una empresa será por consiguiente, aprender a
dar la bienvenida a la innovación venga de donde venga.
Crear una capacidad innovadora básica significa producir un flujo continuo y torrencial de
nuevos proyectos y servicios. Requiere también la cría y protección de un número adecuado de
apasionados, y a veces molestos líderes de la innovación. Significa también que debe evaluarse a
los dirigentes según la cantidad de innovación que han inducido a crear. Pero el compromiso
personal con la innovación necesita ampliar su base más allá de los estamentos directivos. Todos,
y en todas las funciones de la empresa, deben perseguir constantemente la innovación; la
capacidad general media para la innovación de la empresa debe incrementarse radicalmente.
Diseño Instruccional
Las teorías de instrucción y su finalidad en el proceso de enseñanza - aprendizaje, pueden
definirse como un cuerpo organizado de conocimientos los cuales son susceptibles de
sistematización, en el que las leyes y principios dan significación e interpretación al fenómeno
instruccional. Estas teorías juegan un papel relevante en el proceso de enseñanza - aprendizaje,
por cuanto toman los fundamentos teóricos de las teorías psicológicas del aprendizaje y los
desarrollan, con diferentes metas y contenidos, de acuerdo con el ambiente escolar y los
contextos sociales en que éste se encuentra.
Muchos autores plantean que no existe una teoría de instrucción; sin embargo, los diferentes
enfoques que se han manejado pueden agruparse en función de dos grandes corrientes de
aprendizaje, el conductismo y la gestalt, la primera concibe el aprendizaje como el proceso
mediante el cual se adquieren cambios de conducta más o menos permanentes; considerando que
toda conducta es aprendida en tanto se trabaje con objetivos y eventos observables; de allí que en
la relación sujeto - objeto se hace énfasis en el objeto. La segunda corriente, considera que el
aprendizaje está dado por la interacción existente entre el individuo y su medio ambiente,
partiendo de la estructura cognitiva del aprendiz, que viene a conformar un factor determinante
en el aprendizaje, garantizando así la retención significativa de los nuevos conocimientos.
Bruner (1973), concibe la instrucción como la exposición de nuevos planteamientos de un
problema o de un cuerpo de conocimientos que en el aprendiz aumenta su capacidad para captar,
transferir o transformar lo que aprende. El fin último de la instrucción es la transferencia del
aprendizaje. La planificación de la instrucción debe realizarse tomando en cuanta el
descubrimiento como un factor determinante que involucra diversos eventos como son: (1)
activación del aprendizaje; (2) análisis de la estructura del material; (3) secuencia; (4) provisión
de refuerzo y feedback. En cuanto a evaluación, de acuerdo a este autor, los resultados de ésta
deben ser conocidos inmediatamente por el aprendiz, no sólo en términos cuantitativos, sino
cualitativos, haciéndose énfasis tanto en el éxito de sus respuestas como en las dificultades
presentadas por éste en el aprendizaje.
Muchos son los autores que han escrito acerca de este tópico; pero se podría decir que cualquiera
de las teorías instruccionales es aplicable para los fines previstos en esta investigación; además
que permiten trabajar con combinaciones de ellas siempre y cuando se logre un proceso de
enseñanza - aprendizaje con sentido de coherencia, pertinencia social, que permita lograr la
eficiencia del proceso de instrucción que se ha plantado como meta. Tratando de globalizar estas
teorías, se puede decir que un diseño instruccional es un sistema integral de planificación del
aprendizaje que comprende la definición de objetivos, estrategias, recursos y procesos de
evaluación.
Diagnóstico de la Situación Actual, con relación al trabajo conjunto entre Empresa y
Universidad en el Mercado Laboral
El sistema educacional a través de sus nuevos profesionales debe proponerse formar individuos
capaces de adaptarse a las cambiantes condiciones tecnológicas - laborales y a las
transformaciones de toda otra índole que aparecerán en el transcurso de su vida. En lugar de
tender a producir individuos completamente formados, el sistema de educación debe orientarse
hacia la formación de individuos educables, vale decir, capacitados para continuar instruyéndose
y perfeccionándose. Puede decirse que en el momento actual no es tan importante enseñar
conocimientos, sino desarrollar en los educandos la habilidad para adquirir nuevos
conocimientos e información. Esto implica que las metodologías de enseñanza sean las apropiadas para despertar en ellos el interés por las ciencias y la investigación científica y para
desarrollar las aptitudes y habilidades intelectuales necesarias para fomentar el espíritu de
creatividad, innovación, crítica y experimental.
Hoy la sociedad reclama la recuperación de un profundo sentido político de la educación al
servicio de un determinado modelo de país, consensualmente admitido, que afiance una
estructura institucional efectivamente democrática, que genere y renueve horizontes, que
garantice una redistribución más equitativa de los bienes y servicios, que reconozca que la
educación es ya algo bastante más abarcadora que un derecho; por haberse transformado en una
necesidad social, cuya satisfacción debe contribuir a asegurar el mejoramiento progresivo de los
niveles de bienestar material y espiritual de toda la población.
La sociedad y el Estado, demandan una educación basada en el desarrollo sustentable. Ya que la
reciente declaración de las Naciones Unidas sobre el establecimiento de un nuevo orden
económico internacional propone un nuevo concepto de desarrollo que tenga en cuenta la
satisfacción de las necesidades de todos los ciudadanos de la tierra, la plusvalía de sociedades y,
el equilibrio armónico de la humanidad y del medio y es aquí, donde la influencia de la
institución universitaria, deberá apoyar al crecimiento económico de las naciones sin
repercusiones nocivas sobre la población, influyendo positivamente en beneficio de la
humanidad a través de investigaciones, proyectos, implantaciones de programas llevados a cabo
por las referidas instituciones universitarias preocupadas por la calidad de vida del entorno que la
rodea. La preservación de la disponibilidad y la racionalización del uso de los recursos naturales,
humanos y físicos figuran entre las necesidades más urgentes que enfrenta el individuo, y la
institución universitaria; donde ésta finalmente, colabora en parte, solventando estas necesidades;
a la vez que contribuye con la sociedad y el Estado. Cabe destacar en el manejo del desarrollo
sustentable, que deberá contextualizarse como un triángulo formado por tres elementos, que no
pueden funcionar sin la presencia de uno de ellos: (1) sustentabilidad ecológica: se refiere al
aprendizaje del mantenimiento o aumento de la capacidad de los ecosistemas; (2) sustentabilidad
social: que plantea el mantenimiento, bienestar y participación de la población, de forma tal que
se asegure educación, salud y otras condiciones esenciales de vida para los humanos como parte
integrante del sistema productivo; (3) sustentabilidad económica: que asegura que las actividades
económicas benefician a los que de una forma u otra, están involucrados en el proceso
productivo.
La sociedad venezolana está enfrentando las nuevas realidades del mundo moderno de hoy que
se plantee cambios sociales, políticos, económicos, morales y científicos - tecnológicos. Estos
cambios a su vez, demandan una revisión de lo que sus instituciones fundamentales están
haciendo por el desarrollo del país. Esto implica un cambio institucional en el escenario de las
universidades autónomas como respuesta a las exigencias que se les hace a las universidades del
país de cumplir con su misión de formar el recurso humano en armonía con los requerimientos
estratégicos de las regiones, el país y el mundo competitivo de hoy.
En este contexto de análisis se concibe la gerencia como la principal palanca de cambio que es
necesario activar en las universidades para lograr la productividad institucional, y asumir el reto
con el entorno que en materia curricular se refiere; y que se convierta en la oportunidad de
mejora que permite la aplicación de un enfoque gerencial moderno para lograr la convergencia
en la universidad (proveedor) y el entorno (cliente), en una relación bidireccional, de ganancia
mutua y fertilización cruzada.
El cambio de la sociedad mundial dentro del contexto de las relaciones económicas marcadas por
la globalización hace necesario pensar en cambios de fondo en el Perfil de Carrera de la
institución universitaria; que respondan al entorno y adecuarlo mediante la actualización seria
con una frecuencia que sólo viene dada por las exigencias de ese entorno. Por otra parte, también
deberá preguntarse si el profesional venezolano, puede incursionar en mercados laborales que
responden a convenios técnicos - comerciales como: Grupo Tres, Pacto Andino, Comunidad
Económica Europea; etc.. Esto pone en evidencia, que la integración regional va más allá de la
reducción de aranceles para facilitar el intercambio de mercancías: implica la libre circulación de
personas y mensajes, la elaboración conjunta de programas educativos y comunicacionales. En
síntesis se deberá redefinir el mapa de las competencias económicas y culturales nacionales, de
los argumentos e intercambios entre los países y las regiones.
Lo expresado induce a pensar en la necesidad de un Perfil de Carrera internacionalizado y acorde
con una filosofía de apertura de fronteras, en el contexto social, económico, político, cultural;
donde la educación ejerce su papel protagónico. El Perfil del Egresado del siglo XXI deberá
responder a variables del entorno como: competitividad, empleo, política cultural, dentro del
marco de la globalización. Al respecto, es importante resaltar que para activar el motor del
cambio es necesario tener presente que son las personas que integran las organizaciones las que
se conectan a los cambios y las que asumen los roles, desde los límites y posibilidades de sus
medios de conexión al mundo y a los sistemas que lo integran.
En el siglo XXI los ciudadanos confrontarán un escenario de acelerado cambio social. Los
efectos de los últimos desarrollos tecnológicos se dejarán sentir en un refuerzo de carácter
descendente de las identificaciones sociales y un fortalecimiento ascendente de la
mundialización de la economía. Ambas tendencias conllevarán a elementos de incertidumbre y
condicionan las transformaciones territoriales en curso. En este contexto se denota un
desencajamiento e hibridación, en diversos grados y medidas de lo preexistente, lo propio y lo
ajeno.
La generación de hoy es la del cambio constante, la de la caída de los sistemas, la de la
volatilidad en las estructuras y la del caos como expresión externa de las transformaciones. Es
también la de la imaginación y realizaciones consideradas como imposibles. Nunca se había
inventado tanto en tan poco tiempo. Se vive un período que anuncia oportunidades sin límites
para quienes interpretan las señales de los tiempos y se hacen cargo de construir su propio
contexto.
La redefinición del Perfil de Carrera del Administrador Comercial y el Contador Público, de
(FACES) en la Universidad de Carabobo, que deberá trabajar en este milenio, reconocerá que la
duración de las organizaciones va a perdurar con distintas señales que nos llegan del entorno que
hoy día se ha vuelto global, como un recurso analítico interconectado con distintos aspectos que
producen transformaciones fundamentales afectándolas en cambios con ambientes de distinta
índole, siendo estos: (1) entorno socio - económico: caracterizado por el paso de una economía
de competidores a una economía de adversarios; (2) entorno socio - técnico: cambios en los
factores de la producción, mediante el uso de la inteligencia, información y expresión de ideas;
(3) entorno socio - político: Este se encuentra influenciado por la marcha y aceleración del curso
de la historia.
La propuesta curricular del mundo de la imagen apunta a la implementación de un aula de
tecnología de información, donde se recree un ambiente informativo, donde el docente explote el
recurso didáctico y el alumno se beneficie del recurso tecnológico.
Esto hace suponer un Perfil del Egresado en Administración Comercial y Contaduría Pública, de
(FACES) en la Universidad de Carabobo, el de un individuo de elevada competencia, con una
base sólida en el área de administración y gestión de información, capaz de ser un agente de
cambio en la solución de problemas empresariales; a través del uso y manejo de tecnologías de
gestión de información que contribuyan a la productividad de las organizaciones e identificación
de nuevas ventajas competitivas, empleo, cultura en el mundo de la globalización; como única
salida al incremento del PTB como variable fundamental del crecimiento económico y por ende
del desarrollo sustentable.
El egresado en Administración Comercial y Contaduría Pública, deberá responder como un
profesional formado con una visión global sobre el rol de líder en los diferentes niveles
organizacionales, sirviendo de facilitador en el proceso de toma de decisiones y mejoramiento de
los sistemas de gestión y control, utilizando para ello enfoques sistémicos, modelos estratégicos
y herramientas prácticas que hagan posible el diseño, implantación, conducción, control y
desarrollo de los procesos administrativos y de apoyo operativo; los cuales dinamizan e impulsan
los lineamientos competitivos de las organizaciones, considerando el entorno en el cual se
encuentran inmersos; dentro del contexto de desarrollo nacional en el mundo sin fronteras.
El hecho de tomar en cuenta estos planteamientos, dentro del contexto del Perfil de las Carreras
en Administración Comercial y Contaduría Pública de (FACES), vigente en la Universidad de
Carabobo desde 1985, además de las modificaciones hechas oficialmente hasta la fecha; supone
moverse en un modelo educativo que considere el aprovechamiento del talento tanto de los
alumnos como de los docentes, ambos de vital importancia para la gestión educativa; donde los
elementos resaltantes a considerar serían: (1) Preparación para el desempeño del trabajo; (2)
Estudiantes empresarios de su propio aprendizaje; (3) Estudiantes como profesionales en proceso
de formación; (4) Realización de proyectos con efecto social y con sentido económico; (5)
Apertura para la realización de pasantías asociadas a proyectos elaborados en forma conjunta con
la universidad y el entorno; donde los Trabajos de Grado, adquieren su papel protagónico; (6)
Gerencia pertinente a la labor educativa; (7) Trabajos de Grado asociados a proyectos elaborados
en forma conjunta con la universidad y el entorno; (8) La universidad como escenario en
constante cambio y evolución.
El modelo educativo deberá ofrecer a los estudiantes, la posibilidad de ejercer un papel
protagónico en el proceso de formación profesional "ser empresario de su propio aprendizaje" y
deberá ser una cualidad común (Perfil Común), sin importar si se trata del Administrador
Comercial o del Contador Público.
La institución universitaria deberá enfatizar a lo largo de los estudios que exige para la
formación de profesionales, en las diferentes disciplinas que responden a un Diseño de Perfil de
Carreras; la preparación para el desempeño en el trabajo y el desarrollo de habilidades asociadas
a labores profesionales, entre las cuales se encuentran: (1) el ejercicio de la iniciativa; (2) retos
creativos; (3) tareas de innovación tecnológica; (4) trabajo en equipo; (5) uso eficiente del
tiempo; (6) manejo de situaciones de incertidumbre.
La Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (FACES), Escuela de Administración Comercial
y Contaduría Pública, debería repensar el Modelo de Diseño Curricular; a fin de formar
estudiantes empresarios de su propio aprendizaje, considerándolos profesionales en proceso de
formación e inmersos en un escenario cambiante. O sea, un estudiante emprendedor que asume
ser empresario para ser empresa multiproducto.
Conclusiones y Recomendaciones
La concreción de las exigencias metodológicas en la planificación educativa, deberá tomar en
cuenta los siguientes puntos de referencia: (1) partir de las experiencias de los alumnos, es decir,
plantearse como meta a lograr un equilibrio en el aprendizaje de conceptos, procedimientos y
actitudes; (2) la introducción de la globalización y la interdisciplinariedad entre universidad empresa o universidad - entorno; (3) la orientación del aprendizaje hacia la solución de los
problemas generados por el contexto del alumnado, en el propio devenir del desarrollo de
Trabajos de Grado conjuntamente con la empresa tanto privada como pública, según sea el caso;
más que hacia la adquisición estricta de saberes; (4) la actividad tutorial, puede resultar de gran
utilidad a fin de darse la interacción entre facilitadores (empresa - profesores - estudiantes);
siempre teniendo en cuenta, que la elaboración de un Trabajo de Grado es una labor que exige un
equipo multidisciplinario; donde todos aprenden de todos y donde la fusión de los tres tipos de
facilitadores es fundamental; esto favorecería sustancialmente a la formación de capital
intelectual y la consecuente gestión del conocimiento de la institución universitaria; además de la
formación de capital intelectual que se daría a título personal para cada uno de los actores que
participan en el proceso.
La elaboración de Trabajos de Grado, en equipos multidisciplinarios (empresa - universidad) no
es contraria a la reglamentación legal exigida por el Estado; en lo referente a la Constitución
Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, la Ley de Universidades, y la Ley Orgánica
de la Educación; ya que cumple con la búsqueda del conocimiento a través de la investigación
científica, humanística y tecnológica, para beneficio espiritual y material de la Nación; donde las
empresas se beneficiarían del trabajo puntual que representaría el Trabajo de Grado; porque se
revertirían en beneficios económicos para la empresa, que a su vez se convertirían en beneficios
tributarios para el Estado. La institución universitaria, se vería beneficiada del proceso de
enseñanza - aprendizaje que se daría entre Tutores Empresariales y Tutores Académicos; dentro
del cumplimento del artículo 109 de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de
Venezuela, que consagra la autonomía universitaria para planificar, organizar, elaborara y
actualizar los programas de investigación, docencia y extensión.
El Diseño Instruccional propuesto en la investigación, se ajusta a las necesidades y
requerimientos de la Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública de (FACES) en
la Universidad de Carabobo, en lo que respecta al proceso de desarrollo de Trabajos de Grado;
como requisito indispensable para que los alumnos regulares puedan optar a graduarse
profesionalmente.
La aplicación del Diseño Instruccional evidencia que el mismo es viable tanto en la empresa
como en la institución universitaria; siendo los Trabajos de Grado los que ofrecen un
componente de activos centrados en el individuo de gran utilidad para el binomio empresa universidad; que posiblemente se convertiría en un activo de mercado, en activos de propiedad
intelectual y/o activos de estructura; según sea el caso.
La cohesión en el equipo multidisciplinario conformado por Tutor Académico, Tutor
Empresarial y Alumnos es evidente, así como también se cohesiona el conocimiento que se está
dando durante el proceso de elaboración de un Trabajo de Grado, con su consecuente efecto
multiplicador tanto individual como colectivo; ya que todos en el equipo fungen como
facilitadores del proceso de enseñanza - aprendizaje, sobre todo cuando se analiza prensa,
bibliografía especializada, o bien se ejemplifica con ejercicios, datos oficiales; los cuales
contribuyen a visualizar resultados que bien pueden aportar a la institución universitaria en el
área de investigación. Todo esto contribuye en gran medida con la formación del capital intelectual, a partir de la gestión del conocimiento manejada en forma interactiva entre Tutores y
Alumnos.
La investigación ha puesto de manifiesto la necesidad de trabajar conjuntamente Tutor
Académico - Tutor Empresarial y Alumnos bajo la supervisión de un Tutor Metodológico; lo
cual le daría un carácter científico al Trabajo de Grado; como producto terminado que se genera
en la universidad; que a su vez dentro del contexto de matriz insumo - producto; este producto
terminado, representa producto en proceso para otras investigaciones posteriores. El proceso de
tutelaje planteado de ésta manera, contribuye en forma significativa en el desarrollo del Trabajo
de Grado, en la medida en que se vayan mejorando los resultados obtenidos en cada asesoría
donde se manifieste el proceso de enseñanza - aprendizaje, permitiendo a su vez manejar la
evaluación diagnóstica tanto en forma individual como conjunta entre Tutores; lo cual abre la
posibilidad de reducir la dispersión entre lo real y lo esperado, de cada avance al que el Alumno
deberá responder.
Se sugiere a la institución universitaria, el uso y exigencia de Diseños Instruccionales para el
desarrollo y asesoría de Trabajos de Grado que actualmente conforman la asignatura obligatoria
del Pensum de Estudios, ya que este instrumento mejoraría sustancialmente la calidad de la
educación, en cuanto a procesos de enseñanza - aprendizaje se refiere.
En las sesiones de asesoría por parte de los Tutores, se deberá tender a un proceso de
mejoramiento continuo de las estrategias metodológicas, a fin de continuar mejorando los
resultados obtenidos en cada sesión de asesoría, teniendo esto en cuenta durante el proceso de
elaboración de los Trabajos de Grado de hoy día y más adelante, en el futuro venidero;
asimismo, se debe estar en continua evaluación diagnóstica del proceso de enseñanza aprendizaje propuesto en el Diseño Instruccional, comparando los resultados obtenidos con los
propuestos y los Tutores conjuntamente; deberán estar diseñando nuevas y mejores estrategias
metodológicas, a fin de reducir la dispersión entre los avances esperados de los Alumnos .y los
que realmente han obtenido. No obstante, no se debe olvidar adicionar elementos nuevos al
proceso de enseñanza - aprendizaje, siempre teniendo presentes los siguientes puntos: (1) la
interacción entre Tutores Académicos, Empresariales, Metodológicos y Alumnos; (2) las
necesidades del mercado laboral que son fundamentales para la debida elaboración de un Trabajo
de Grado que aporte aprendizajes significativos, y además permita satisfacer necesidades del
sector empresarial, cuyos problemas se adscriben a las líneas de investigación presentadas en la
Oferta Investigativa, que ofrece la Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública de
(FACES) en la Universidad de Carabobo; (3) la evaluación diagnóstica; la cual permite medir
hasta qué punto el Alumno trae a cada asesoría un conocimiento de la realidad del entorno, que
sirve como terreno fértil para la gestión del conocimiento, requerida durante el proceso de
elaboración y aprobación de un Trabajo de Grado; (4) la predisposición de enseñar y aprender en
forma multifocal, o sea desde los puntos donde se da la gestión del conocimiento.
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