Programa de cooperación técnica Agricultura y seguridad alimentaria: La contribución del OIEA El OIEA, en asociación con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ayuda a los Estados Miembros a producir más y mejores alimentos, y más inocuos, mediante el uso de la tecnología nuclear, al tiempo que promueve el uso sostenible de los recursos agrícolas. La comunidad internacional ha adoptado ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) como fundamento de las actividades de desarrollo mundial. Estos objetivos están encaminados a lograr avances importantes en la lucha contra la pobreza, el hambre, las enfermedades, el analfabetismo, la degradación del medio ambiente y la discriminación contra la mujer. Los esfuerzos por mejorar la agricultura y la seguridad alimentaria contribuyen a los ODM al aumentar la producción de alimentos y su diversidad, ofrecer soluciones a la degradación ambiental y apoyar la creación de asociaciones en todos los niveles para mantener los beneficios de la agricultura a más largo plazo. El Estatuto del Organismo Internacional de Energía Atómica estipula que el OIEA procurará acelerar y aumentar la contribución de la energía atómica a la paz, la salud y la prosperidad en el mundo entero. El objetivo estratégico del programa de cooperación técnica del OIEA se basa en este mandato, ya que promueve resultados socioeconómicos tangibles al contribuir directamente de forma rentable al logro de las principales prioridades de desarrollo sostenible de cada país. Los proyectos de CT ayudan a los Estados Miembros a aumentar la productividad agrícola y mejorar la seguridad alimentaria Las personas de todo el mundo comparten la necesidad común de alimentos inocuos, nutritivos y fiables. La agricultura tiene una importancia fundamental para los países en desarrollo, porque el buen funcionamiento del sector agrícola es esencial para garantizar la seguridad alimentaria, y los productos agrícolas son una fuente principal de ingresos nacionales. La baja productividad de los cultivos y el ganado, el aumento del costo de los fertilizantes y las semillas, y los cambios en los patrones de aprovechamiento de la tierra debido a la desertización, la salinidad y el cambio climático afectan a la disponibilidad de alimentos y aumentan sus precios, lo que puede hundir a millones de personas más en la pobreza. A través de su programa de cooperación técnica, el OIEA ayuda a los Estados Miembros a ejecutar programas modernos y competitivos de fitomejoramiento en los que se utilizan mutaciones radioinducidas y tecnologías biomoleculares y moleculares que mejoran la eficiencia, como la técnicas in vitro, los marcadores moleculares, la genómica y la genética inversa. Los esfuerzos se centran en mejorar el rendimiento y la calidad mediante el impulso de la diversificación y la adaptabilidad de los cultivos Agricultura y seguridad alimentaria: La contribución del OIEA destinados al consumo doméstico y la exportación, lo que contribuye a la generación de ingresos y al desarrollo socioeconómico. Los proyectos de cooperación técnica también ayudan a los Estados Miembros a disminuir el uso de plaguicidas y reducir las pérdidas que las plagas y las enfermedades causan a las cosechas, así como a superar los obstáculos fitosanitarios (de sanidad vegetal) al comercio. Ello contribuye a la seguridad alimentaria, a un uso más eficaz de los recursos agrícolas y al aumento de las oportunidades comerciales. El OIEA también presta asistencia a los Estados Miembros para que mejoren su seguridad alimentaria nacional mediante la mejora de la productividad de su ganadería. Los proyectos se centran en el uso eficiente de los recursos forrajeros disponibles a nivel local y la aplicación de prácticas de gestión adecuadas y programas de cría de animales autóctonos y otros animales, así como en la lucha contra las plagas y la adopción de instrumentos de diagnóstico y medidas profilácticas para el control y la prevención de enfermedades pecuarias y zoonóticas. • 925 millones de personas no disponen de alimentos suficientes, más que las poblaciones de los Estados Unidos, el Canadá y la Unión Europea juntas. • Con una población mundial que se prevé alcance los 9 000 millones en 2050, garantizar la seguridad alimentaria exige importantes avances en cuanto a productividad agrícola y competitividad. • En los próximos diez años algunos países africanos podrían ver sus cosechas reducirse hasta en un 50% debido a la escasez de agua. • A comienzos de 2011, el índice de la FAO para los precios de los alimentos alcanzó su nivel más alto desde 1990, según el cálculo retrospectivo del índice. • La mosca tsetsé transporta la enfermedad denominada tripanosomiasis, que amenaza a unos 60 millones de personas y causa la muerte de tres millones de cabezas de ganado cada año, y cuesta a la industria agrícola en el África subsahariana unos 4 750 millones de dólares. • El uso óptimo de los fertilizantes permite ahorrar al menos 6 000 millones de dólares cada año. • La degradación de la tierra amenaza a casi 1 000 millones de personas en unos 100 países, y se estima que aproximadamente un tercio de la superficie terrestre se está desertizando.1 • Los modelos climáticos en África muestran que 600 000 km2 clasificados como con limitaciones moderadas de agua sufrirán restricciones de agua severas. Para 2020 se proyecta que entre 75 y 250 millones de personas en África padezcan un mayor estrés hídrico por efecto del cambio climático.2 1 Centro de noticias del PNUMA, http://www.unep.org/Documents.Multilingual/Default.asp?D ocumentID=589&ArticleID=6219&l=en 2 Cuarto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC): Cambio climático 2007, Informe de síntesis. Programa de cooperación técnica Control y erradicación de las plagas de insectos Las plagas de insectos amenazan tanto al ganado como a cultivos de frutas y hortalizas de alto valor. Un componente estratégico importante para mejorar la productividad y promover la seguridad alimentaria mundial es la inversión en prácticas de gestión de plagas que mantengan el equilibrio natural y reduzcan la dependencia de los plaguicidas. La tecnología nuclear puede contribuir al control eficaz e inocuo para el medio ambiente de las plagas de insectos. El OIEA trabaja en colaboración con sus asociados en la elaboración de enfoques integrales para la supresión, contención y erradicación de las plagas. Una técnica nuclear de gran éxito es la técnica de los insectos estériles (TIE), que se ha utilizado en el marco de un enfoque integrado de gestión de plagas en muchas partes del mundo contra plagas de insectos como la mosca de la fruta, las polillas, la mosca del gusano barrenador y la mosca tsetsé. La técnica es una forma de control biológico del nacimiento de las plagas, que incluye la cría en masa, la esterilización y la suelta sistemática de enormes cantidades de insectos macho. Los machos estériles compiten con los insectos en la naturaleza, y al aparearse con hembras silvestres, contribuyen a reducir el número general de plagas. Aumento de la productividad pecuaria La ganadería desempeña un papel esencial en las economías del mundo en desarrollo. La mejora de los piensos y de las prácticas de reproducción ayudan a esos países a proteger sus recursos pecuarios de las enfermedades y plagas y a aumentar la productividad pecuaria. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA se centran en aumentar aún más la productividad pecuaria. Estos proyectos pueden incluir la selección de animales con rasgos fenotípicos ventajosos que produzcan más carne y leche, resistan a las enfermedades o toleren el calor y maximicen el potencial de reproducción. Las aplicaciones nucleares y las técnicas isotópicas tienen un papel importante y a veces imprescindible en la gestión de la nutrición, reproducción, cría y salud de los animales. • Diagnóstico y prevención de enfermedades Las enfermedades de los animales entorpecen el comercio de productos agrícolas, lo que afecta a la economía de los países en desarrollo. La elevada sensibilidad y especificidad de las técnicas isotópicas y moleculares ofrece ventajas significativas en relación con otros métodos de diagnóstico, control y erradicación de enfermedades que afectan a la productividad pecuaria y entorpecen el comercio. Las tecnologías nucleares y conexas son utilizadas para identificar las enfermedades con precisión y rapidez, y permiten vigilar la eficacia de los programas de control y erradicación de enfermedades. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA proporcionan a los Estados Miembros capacitación, conocimientos técnicos e instrumentos como protocolos y Agricultura y seguridad alimentaria: La contribución del OIEA procedimientos normalizados para el diagnóstico de las enfermedades de los animales. • Vigilancia y mejora de la nutrición La baja calidad de los piensos es un obstáculo principal para la producción pecuaria óptima. Asegurar la calidad de la nutrición del ganado constituye un reto para muchos países. Las tecnologías nucleares pueden emplearse para medir la ingesta de nutrientes o el equilibrio energético de los animales, elaborar dietas equilibradas y lograr un crecimiento y una producción eficientes. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA tratan de mejorar la productividad del ganado sin afectar negativamente al entorno, y se centran en la mejora de las estrategias de alimentación, la mejora de la gestión de los desechos de nutrientes en las granjas y la reducción de las emisiones de metano. Los proyectos también mejoran las condiciones de nutrición y salud del ganado ya que permiten identificar forrajes disponibles localmente y desarrollar estrategias de alimentación de bajo costo que mejoran la eficiencia y productividad de la producción láctea y vacuna y generan mayores rendimientos para los agricultores. • Mejora de la reproducción Un enfoque integrado que incluye técnicas nucleares apoya la mejora de la reproducción del ganado. Se utilizan métodos isotópicos para el seguimiento de la situación reproductiva en apoyo de la gestión del mejoramiento genético. La inseminación artificial puede aumentar la eficacia de la cría de ganado y reducir los costos para el agricultor, así como la probabilidad de transmisión de enfermedades entre animales. El cruzamiento puede aumentar la producción vacuna y láctea. La medición de los niveles de progesterona permite diagnosticar la inexistencia de embarazo y la ultrasonografía puede emplearse para el diagnóstico y tratamiento de la infertilidad y los trastornos de la capacidad reproductora. Las actividades de cooperación técnica del OIEA apoyan un enfoque integrado para mejorar la reproducción animal. Las mejoras de la productividad del ganado se traducen en mayores ganancias para los agricultores y un aumento de la disponibilidad de carne y productos cárnicos para el público. Mejora de los cultivos y de la gestión de la tierra y el agua El uso eficiente de la tierra y los suelos sanos son importantes para la seguridad alimentaria. Las prácticas integradas de gestión de la tierra y el agua mejoran la producción agrícola y la productividad de los suelos, así como su resistencia frente a la desertización y otros efectos del cambio y la variabilidad climáticos. Para que los países en desarrollo se beneficien de variedades de cultivos mejoradas y de mejores prácticas en cuanto a fertilidad del suelo, es esencial una gestión sostenible de los fertilizantes, los suelos y el agua. Programa de cooperación técnica Los proyectos de cooperación técnica del OIEA ayudan a los Estados Miembros a mejorar los cultivos. También sirven para apoyar la conservación de los suelos y optimizar el uso de fertilizantes. • Mejora de las variedades de cultivos Muchos países en desarrollo disponen de recursos de agua para riego limitados y son propensos a sufrir problemas ambientales como la sequía o niveles elevados de salinidad del suelo. Las restricciones hídricas también se han visto acentuadas por el cambio climático y los cambios en las pautas del viento. Las mutaciones inducidas mediante el empleo de técnicas nucleares pueden servir para desarrollar cultivos mejor adaptados a esas dificultades. Las mutaciones inducidas aceleran el proceso natural de cambio espontáneo que se produce en las plantas y dan lugar a variedades mejoradas que son, por ejemplo, tolerantes a las temperaturas máximas y mínimas irregulares, resistentes a plagas o enfermedades, o capaces de prosperar en suelos salinos o durante las sequías. Mediante su programa de cooperación técnica, el OIEA facilita a los Estados Miembros los instrumentos y los conocimientos especializados necesarios para producir plantas mejoradas, adaptables y de alto rendimiento, así como las capacidades para aplicar prácticas mejoradas en materia de suelos, agua y cultivos que aumentan la producción. Actualmente, las variedades mejoradas resultantes de la inducción de mutaciones se cultivan en todo el mundo. El beneficio económico en términos de ingresos adicionales anuales para los agricultores representa un total de varios miles de millones de dólares al año. • Reducción de la erosión de los suelos La degradación y erosión de los suelos amenazan la productividad agrícola, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad ambiental. Aunque el agua o los vientos erosionan los suelos de forma natural, su erosión “acelerada”, es decir, la pérdida de suelos con mayor rapidez de la que se forman, es resultado de las deficientes prácticas en materia de suelos, agua y cultivo. Las técnicas de radionucleidos y de isótopos estables pueden utilizarse para estudiar la erosión de los suelos y los problemas de degradación de las tierras. La tecnología nuclear también puede ayudar a los países a evaluar y mejorar sus prácticas de gestión de los suelos y el agua. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA ayudan a los Estados Miembros a mejorar la fertilidad de los suelos y el rendimiento de los cultivos, y a crear capacidades para la conservación de los suelos, la planificación del uso de la tierra y la adopción de decisiones al respecto, y la promoción de las técnicas de conservación de los suelos. • Optimización del uso de los fertilizantes y el agua Los fertilizantes y el agua son muy importantes para la producción agrícola, pero su uso excesivo o aplicación inapropiada dañan el medio ambiente y pueden contaminar el suministro de agua. Los proyectos del OIEA utilizan elementos trazadores inocuos para el medio ambiente para determinar de modo efectivo el lugar y el momento óptimos en que deben emplearse los fertilizantes o el agua, definir prácticas de gestión de los residuos de los cultivos, y averiguar qué cantidad de nitrógeno pueden captar las plantas de la atmósfera en una determinada Agricultura y seguridad alimentaria: La contribución del OIEA rotación de cultivos. Los proyectos del OIEA también prestan asistencia a los Estados Miembros en materia de fertirrigación, esto es, el suministro de agua y nitrógeno fertilizante mediante sistemas de riego que optimizan el uso de los limitados suministros de agua, ahorran dinero a los agricultores, y mantienen los suelos sanos al limitar los daños al medio ambiente derivados de la contaminación por nitrógeno. Inocuidad de los alimentos La contaminación alimentaria puede constituir una amenaza para la inocuidad de los alimentos y poner en peligro la salud humana. Los peligros de contaminación química en la cadena alimentaria agrícola pueden tener su origen en los residuos de los productos agroquímicos (como los medicamentos veterinarios y los plaguicidas), las toxinas naturales (por ejemplo, las micotoxinas) y los radionucleidos. La contaminación microbiológica de los alimentos por microorganismos nocivos transmitidos por los alimentos como la salmonella y la e.coli también es peligrosa para la salud humana. Las autoridades necesitan instrumentos para detectar, vigilar y controlar esos contaminantes y determinar el origen de los productos alimenticios y los contaminantes de alimentos a fin de definir y aplicar medidas correctoras. Las aplicaciones nucleares y las técnicas isotópicas constituyen una ventaja en el desarrollo de metodologías analíticas en materia de rastreabilidad de alimentos y garantía de calidad. Los radioisótopos son trazadores ideales para investigar los contaminantes de los alimentos y pueden utilizarse como instrumentos para mejorar los programas de gestión y control de laboratorio. • Control de los contaminantes de los alimentos Los esfuerzos por aumentar la producción de alimentos se han traducido en un mayor uso de productos agroquímicos como los medicamentos veterinarios y los promotores del crecimiento. Para que los productos de origen animal sean seguros y comercializables, es preciso que los países puedan detectar la presencia de residuos de medicamentos en los animales destinados a la producción de alimentos y sus productos. Una amplia variedad de alimentos y piensos puede resultar contaminada por toxinas naturales, como las micotoxinas, entre las que se incluyen algunas de las toxinas más venenosas para el ser humano que se conocen. Para que los gobiernos puedan detectar la presencia de aflatoxinas en los productos nacionales e importados, los laboratorios precisan de métodos de análisis y toma de muestras sensibles, precisos y exactos. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA ayudan a los países a determinar el origen de los alimentos, detectar la adulteración y demostrar la autenticidad de los productos alimentarios, controlar los residuos de contaminantes químicos, como los medicamentos veterinarios y los plaguicidas, y detectar la presencia de micotoxinas. Esto ayuda a los Estados Miembros a garantizar la inocuidad de los alimentos y la confianza de los consumidores, así como a cumplir los requisitos de calidad y rastreabilidad del comercio internacional. Programa de cooperación técnica • Irradiación de alimentos La irradiación de los alimentos después de las cosechas puede destruir los microbios que transmiten enfermedades, reducir los riesgos para la inocuidad de los alimentos y también prolongar la duración de los alimentos. La irradiación también puede utilizarse para controlar plagas de insectos en cuarentena, lo que reduce la necesidad de emplear productos químicos nocivos. Los proyectos de cooperación técnica del OIEA incluyen la colaboración en la elaboración de normas para el control de plagas en plantas y productos vegetales. Los seminarios educativos y los cursos de capacitación, concebidos particularmente para participantes encargados de establecer las políticas y los programas de control reglamentario a nivel local, ayudan a los Estados Miembros a aplicar las normas internacionales relativas a los alimentos. Los proyectos de cooperación técnica también ayudan al establecimiento de laboratorios nacionales y regionales de control de los alimentos y a mejorar las capacidades de preparación y respuesta para casos de emergencias nucleares y radiológicas en los niveles nacional e internacional. Qué ofrece el programa de cooperación técnica del OIEA Los proyectos de cooperación técnica prestan ayuda a los Estados Miembros en forma de asistencia de expertos, capacitación y equipo para el uso seguro de la radiación con fines agrícolas, que van desde la esterilización de plagas de insectos al diagnóstico de enfermedades de los animales, y del análisis de los piensos al desarrollo de cultivos de alto rendimiento. En el marco de la asistencia de expertos, expertos reconocidos imparten capacitación in situ en los países. Las misiones de expertos pueden durar algunas semanas o abarcar un año entero. Las becas de capacitación preparan a personal local para aplicar las técnicas nucleares en el sector alimentario y agrícola nacional. Los becarios son enviados al extranjero para recibir capacitación integral en una institución adecuada durante períodos de entre varios meses y varios años. Se celebran conferencias, simposios y seminarios diseñados para apoyar el intercambio de ideas entre expertos y especialistas de distintos países. El equipo y los materiales suministrados por el OIEA se utilizan para establecer o ampliar las actividades en materia de seguridad agrícola y alimentaria en los Estados Miembros. Cuando se suministra equipo complejo a un país, el proyecto suele incluir la visita de un experto para capacitar al personal en el funcionamiento y los aspectos técnicos del instrumento. Agricultura y seguridad alimentaria: La contribución del OIEA Asociaciones Los proyectos de cooperación técnica entrañan la colaboración entre los gobiernos y los asociados y Estados Miembros del OIEA, teniendo presente las necesidades nacionales de desarrollo prioritarias en las que el OIEA desempeña un papel singular, en las que la tecnología nuclear tiene una ventaja comparativa o en las que el OIEA puede agregar valor a los servicios prestados por otros asociados para el desarrollo. El OIEA se esfuerza por establecer asociaciones y relaciones de trabajo mediante consultas e interacciones con organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y otros posibles asociados. El trabajo en colaboración garantiza la coordinación y optimización de las actividades complementarias y permite que las organizaciones pertinentes de las Naciones Unidas estén informadas sobre los efectos que tiene el programa de cooperación técnica para el desarrollo. El OIEA se ocupa de la producción agrícola a través del Programa Conjunto FAO/OIEA de larga data y altamente eficaz, que se centra en la integración de las tecnologías nucleares y las biotecnologías conexas con las técnicas convencionales. En asociación con la FAO, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), el OIEA coordina las actividades estratégicas y aplicadas de investigación y desarrollo orientadas a desarrollar y validar las técnicas nucleares. A través del OIEA y la FAO, los proyectos de cooperación técnica aseguran la aplicación de programas nacionales, regionales y mundiales integrados destinados a crear capacidad para aumentar la producción agrícola sostenible y la seguridad alimentaria de los Estados Miembros. El programa de cooperación técnica aprovecha plenamente las redes regionales y mundiales establecidas desde hace tiempo. Se han establecido alianzas con la Unión Africana, el Grupo Consultivo para la Investigación Agrícola Internacional (CGIAR), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), el Programa contra la Tripanosomiasis Africana (PCTA), la Organización Árabe para el Desarrollo Agrícola (OADA), la Campaña panafricana de erradicación de la mosca tsetsé y la tripanosomiasis de la Unión Africana (UAPATTEC), el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), las organizaciones regionales de protección fitosanitaria (ORPF), el Fondo Fiduciario de las Naciones Unidas para la Seguridad Humana (UNTFHS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Colaboración Internacional (UNFIP). Para obtener más información, visite: http://tc.iaea.org