Invernaderos cultivos de verano Guía de manejo JAVIER SANZ DE GALDEANO JUAN ANTONIO DEL CASTILLO AMAYA URIBARRI GREGORIO AGUADO SALOMÓN SÁDABA y a nadie cuestiona que el manejo de los invernaderos resulta fundamental para obtener rendimientos. Cosa diferente es que se realice de la forma correcta. Para ello es preciso conocer las razones que justifican cada una de las maniobras de manejo. Y por este afán de informar, acometemos seguidamente la presente guía para el manejo del invernadero en verano con cultivos de fruto. El tema de las temperaturas es generalmente mejor comprendido y por lo tanto mejor manejado. Conceptos como el de luminosidad e intensidad de la misma, parecen no estar completamente asumidos. El de humedad relativa (HR) es con frecuencia mal interpretado. El temor al exceso de humedad, como causante de enfermedades, condiciona a menudo el manejo. Y sin embargo, es necesario diferenciar entre el exceso como situación puntual o como situación habitual. Lo mismo con situaciones de baja HR puntuales o de conducción habitual. Y por lo tanto, valorar y conducir el invernadero dentro de los límites requeridos por el cultivo. Tan convencidos estamos de la importancia de un manejo adecuado, que entendemos que, en aquellos supuestos en que por tener el invernaderista otra dedicación no pudiera atender debidamente el invernadero, sería aconsejable que no se realizaran estos cultivos de verano, y en su lugar efectuara siembras para biofumigación y posterior solarización. NAVARRA AGRARIA En resumen, resulta del todo necesario una mejor comprensión de todos estos factores y la relación entre ellos, para entender bien las diversas situaciones, eliminar miedos y por lo tanto procurar un manejo correcto de los invernaderos en verano. En la presente guía pretendemos marcar objetivamente, con números, los límites entre los que deben moverse los distintos factores climáticos que condicionan el manejo. 33 INVERNADEROS V SITUACIÓN CLIMÁTICA en ERANO Consecuencias en los invernaderos urante parte de la primavera, a lo largo del verano y durante parte del otoño, llega un exceso de energía solar que perjudica el buen funcionamiento de las plantas. D Esta energía, que penetra en el interior del invernadero, se traduce en: ● Excesiva intensidad de luz durante muchas horas. ● Excesiva temperatura durante muchas horas. ● Muy baja humedad relativa (HR) durante muchas horas. ● Como consecuencia, en los invernaderos se crea un clima adverso que: ● Frena o anula el crecimiento del cultivo. ● Las plantas funcionan mal, se debilitan, son fácil presa de plagas y enfermedades. En definitiva, producen menos y de peor calidad. ● ● Caen flores y pequeños frutos. Estas condiciones de clima favorecen el desarrollo de plagas y enfermedades. Mala fructificación por baja temperatura. Las flores se fecundan y fructifican mal. Qué debe hacer el invernaderista n todo momento hay que manejar el invernadero de forma que su clima se acomode en lo posible a las necesidades de los cultivos en él implantados. E Control climático. El clima del invernadero se ve muy afectado por el clima exterior. Por ello, el invernaderista debe modificar el clima interior para conseguir otro más adecuado a las necesidades del cultivo. Para ello: 1º. Aportará agua al ambiente del invernadero. Lo hará, por el riego de micro aspersión. (Mejor por un sistema de humidificación). Con ello conseguirá: ➨ Evitar temperaturas excesivamente altas. ➨ Controlar durante muchas horas las bajas HR. Sombreará el invernadero. Lo hará, con carácter general, para San Isidro colocando malla de sombreo o blanqueando: ■ Con malla, colocada exteriormente, respetando las ventilaciones y preferentemente de color blanco. ■ Blanqueando el exterior de la cubierta, manteniendo el pintado durante los meses de mayo - junio, hasta mediados - finales de septiembre. Con el sombreo conseguirá: ➨ Evitar que entre en el invernadero demasiada luz. ➨ Que se caliente demasiado el invernadero. ➨ Frenar algo la bajada de la HR. 34 2º. 3º. En todo momento manejará adecuadamente las ventilaciones. Con todo ello logrará renovar el aire del invernadero; regulando el exceso de temperatura, el exceso de HR, normalizará la concentración de CO2 …Y así facilitará la fotosíntesis, la transpiración, la absorción radicular. En definitiva, el desarrollo óptimo de las plantas. Por el contrario, dificultará la implantación de plagas y la aparición de enfermedades. En resumen, favorecerá la producción y calidad de la cosecha. En caso de duda se decidirá por ventilar, antes que por mantener cerrado el invernadero. MARZO - ABRIL 2006 Arab Parámetros de temperatura, luminosidad y humedad relativa a considerar para cultivos de verano Las estructuras bajas ofrecen mayores dificultades para lograr un buen manejo climático que las estructuras altas (foto central). Es fundamental contar con aparatos indicadores de humedad y temperatura en el interior. Y A. LUMINOSIDAD TEMPERATURA. ■ C, especialmente si son muchas horas diarias y durante varios días. ▲ Temperaturas superiores a los 30º C. Y muy perjudiciales a partir de los 35º C, especialmente si la subida es brusca o / y ocurre en un momento en que la HR sea baja; menos del 50 %. Luminosidad: Es perjudicial: ■ Un exceso de luminosidad. Razón por la que hay que sombrear. ■ Una falta de luminosidad. Razón por lo que no hay que sombrear excesivamente. En ambos casos, no será perjudicial si se trata de situaciones puntuales. ■ diurna: 15º C. ▲ Máxima, 30 a 35 ºC, siempre que la a) Para hortícolas: entre el 30 y 35%. HR supere el 60%. Si ésta fuera menor, la temperatura deberá ser más baja. b) Para otros: entre el 40 y 45 %. Si se utilizara una pantalla térmica, controlar para que el sombreo no sea excesivo y además durante demasiadas horas. En caso de lavado por lluvias, se volverá a blanquear. ■ Temperaturas nocturnas: Las menores de 10º C, que persistan durante horas. No resultarán perjudiciales si son casos puntuales. NAVARRA AGRARIA ¡EXCESIVO CALOR! CALUROSO ADECUADO B. ¡ FRÍO ! TEMPERATURA Y HUME DAD RELATIVA, (HR). Hay que conceder igual importancia al exceso de temperatura, como a las bajas humedades relativas. Y se debe perder el miedo a utilizar, para controlarla, el riego por micro aspersión. Eso sí, se vigilará que, al atardecer, el cultivo esté seco. FRESCO ■ A partir de una HR inferior al 30% durante varias horas al día, durante unos días seguidos, los daños son claros y altos. La HR baja impide el funcionamiento normal de la planta (alimentación). Facilita enfermedades como el oidio; la implantación de plagas, arañas, etc; así como la aparición de anomalías, como la mala polinización, fructificación y caída de flores y frutos pequeños. Temperaturas de producción: ▲ Mínima de producción: Nocturna y Se aconseja, reducir la intensidad: Son perjudiciales: do sea menor del 50 %. Especialmente si persiste durante varias horas, situación muy normal en verano. ▲ Temperaturas por debajo de los 13º El exceso de luminosidad provoca el exceso de temperatura. Estamos más acostumbrados a controlar la temperatura pero, para ello, hay que comenzar por evitar el exceso de luminosidad. Temperatura: Temperaturas diurnas: Humedades relativas bajas: ■ Será baja cuando llegue al 60%. ■ Y comenzará a ser perjudicial, cuan- Humedades relativas altas: ■ Diurnas: ▲ Es alta cuando alcanza el 90%. ▲ Hay que considerarla peligrosa, cuando permanece más de 3 ó 4 días por encima del 95%. La HR alta impide igualmente el funcionamiento normal de la planta (alimentación). Facilita enfermedades como botritis, mildius, cladosporium … y favorece anomalías como la mala polinización, fructificación… En verano no tiene porqué existir situaciones de HR altas, pero sí en primavera y otoño. ■ Nocturnas: ▲ Lo normal y deseable es que duran- te la noche se alcance una HR del 100 %, o cercana. 35 P INVERNADEROS SITUACIÓN CLIMÁTICA en RIMAVERA En primavera la climatología es muy cambiante. A días de fuerte calor y luminosidad, secos, le suceden días oscuros, húmedos, fríos. Las temperaturas del suelo y del ambiente varían fuertemente y las plantas soportan mal estos cambios bruscos. Qué debe hacer el invernaderista ermanecerá atento a los cambios climatológicos para actuar en consecuencia. P ■ A MODO DE RESUMEN: En el manejo del Riego: ▲ Será cauto en el volumen de los 1º. El invernaderista sombreará el invernadero, con carácter general, para San Isidro. riegos. A días calurosos pueden suceder días fríos y/o nublados, con temperaturas más bien bajas, tanto en ambiente como en suelo. 2º. Aportará agua al ambiente del invernadero. ▲ Los riegos serán más frecuentes que copiosos, pero no diarios. 3º: En todo momento manejará adecuadamente las ventilaciones. 4º. Ante la duda se decidirá por ventilar, antes que por mantener cerrado el invernadero. 5º. En primavera estará atento a los cambios bruscos y vigilará los riegos excesivos. 6º.- Vigilará las posibles tormentas de verano para evitar roturas de ventanas. 36 ■ Manejo del invernadero en primavera: 1º - En los días veraniegos: ▲ Aportará agua al ambiente. 2º - En los días invernales: ▲ No descuidará la ventilación del invernadero. Ventilará. ▲ Se preocupará de que el cultivo llegue seco al atardecer. 3º - En períodos de mucha humedad ambiente: ▲ Realizará barridos de humedad del ambiente. Si la HR fuera demasiado alta, deberá sacar el aire húmedo del invernadero al exterior. Para ello, forzará la ventilación del invernadero en los momentos de vientos secos y/o en las horas centrales del día, momentos en los que el aire del invernadero contiene más humedad que el aire exterior. MARZO - ABRIL 2006