Privado es específicamente, la de regular situaciones vinculadas con varios ordenamientos jurídicos, en tanto que el art. 81 busca primordialmente resolver casos internos. Por consiguiente, creemos que debe primar en los casos jus privatistas multinacionales la solución dada por el art. 2619 por sobre lo dispuesto en el art. 81. b. De esta manera, se conserva al último domicilio conocido del ausente como punto de conexión principal, pero según lo señalan algunos autores la nueva norma no tiene ánimo de exclusividad para los jueces nacionales,176 tal como sí lo tenía el antiguo régimen. A falta de un domicilio conocido, asumirá jurisdicción el magistrado de la última residencia habitual del presunto ausente. Ahora bien, si tanto el último domicilio como la última residencia se desconocieran, se abre la posibilidad de recurrir al foro del patrimonio y por consiguiente asumir jurisdicción el juez del lugar donde el presunto ausente hubiera dejado bienes. Pero téngase presente que en este último caso la declaración de ausencia o muerte presunta tendrá efecto únicamente en cuanto a los bienes, lo cual se desprende de la expresión “con relación a estos”, lo cual a nuestro criterio implicaría la facultad del juez del lugar donde se encuentran los bienes para ordenar todas las medidas relativas a los mismos, tales como designar un curador que realice actos de conservación y administración, etc., pero dicha declaración de ausencia no surtirá efecto respecto de otras relaciones jurídicas vr.gr., con respecto a los efectos que produce sobre el matrimonio. Finalmente, el artículo 2619 expresa que el juez argentino puede asumir jurisdicción en caso de existir un interés legítimo en la República. Si bien resulta una innovación de trascendencia, buscándose facilitar el acceso a la justicia mediante la apertura de foros, creemos que los jueces deberán ser prudentes al momento de asumir jurisdicción en base a dicha norma, tratando de evitar un secuestro del caso. Resultará de gran importancia determinar el concepto de “interés legítimo” que habilita a la apertura del foro, a cuyos fines será necesario recurrir a los principios que informan al sistema de jurisdicción internacional, tales como 176 Mariel C. Rabino, ob. cit., pág. 853. 141