Resumen: H-022 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004 Estructuras y contenidos en el razonamiento ordinario Corral de Zurita, Nilda J. Proyecto “Comprensión e Inferencia” Instituto de Ciencias de la Educación - Facultad de Humanidades Av. Las Heras 727- 3.500- Resistencia- Chaco- Argentina E-mail: [email protected] - TE. 03722-427470 ANTECEDENTES En esta comunicación se reseñan resultados obtenidos en un experimento con razonamientos, que es parte de un proyecto orientado al examen de los efectos que los usos del lenguaje y la experiencia del mundo producen en el razonamiento ordinario con enunciados cuantificados. Por razones de espacio y simplicidad, la presentación no incluye el nivel explicativo del proceso inferencial general subyacente, el cual se interpreta en el marco de la teoría de los modelos mentales (Johnson-Laird, 1983, Jonson-Laird y Byrne, 1991), para concentrarse en cambio en el análisis de las características de las informaciones lingüísticas y del conocimiento general relevante. Los silogismos son razonamientos deductivos cuyo interés para la psicología del razonamiento reside en su complejidad psicológica y en su fuerte dependencia de los contextos y los contenidos. Sus premisas y conclusiones son enunciados cuantificados, cuya variación en cantidad (universal/ particular) y en calidad (afirmativo / negativo) da lugar a cuatro tipos de proposiciones que describen relaciones entre dos conjuntos: universal afirmativa (A), universal negativa (E), particular afirmativa (I) y particular negativa (O). Las premisas contienen tres términos: el término medio (denominado B) es común a ambas premisas y está ausente en la conclusión; los términos extremos (denominados A y C) se ubican uno en cada premisa y se relacionan en la conclusión. Los tres términos pueden organizarse en cuatro formas dando lugar a las figuras del silogismo. La lógica de predicados prescribe que el sujeto de la conclusión es el término extremo de la segunda premisa, pero se cuenta con amplia evidencia de que en el razonamiento ordinario las personas pueden adoptar como sujeto de la conclusión el término extremo de la primera o de la segunda premisa. Las figuras en las que uno de los términos extremos cumple la función de sujeto y el otro la de predicado dan lugar al llamado “efecto de la figura”, que consiste en la preferencia por una dirección en la construcción de la conclusión. Así, la figura A B – B C, produce una definida tendencia a producir conclusiones A- C. En cambio, la figura B A - C B da lugar a la preferencia por conclusiones C A. En numerosas experiencias se ha constatado esta notable tendencia, aunque su explicación aun se halla en discusión (Johnson-Laird y Bara, 1984; Espino, Santamaría y García- Madruga, 2000). Un factor explicativo plausible se basa en la funcionalidad sintáctica. La coincidencia del papel gramatical en las premisas y en la conclusión llevaría al razonador a tomar como sujeto de la conclusión el término que cumple la misma función en la premisa, y lo mismo respecto al predicado. El efecto de la figura derivaría entonces de las asimetrías lingüísticas que conducen al razonador a construir sus conclusiones relacionando el sujeto de una premisa con el predicado de la otra (Wetherick y Gilhooly, 1990) En cambio, en las otras dos figuras silogísticas - Figura A B – C B y Figura B A – B C – la estructura no define una tendencia en la dirección de búsqueda de la respuesta. Obsérvese que en estas figuras el término medio cumple la misma función gramatical en las dos premisas, y que la conclusión relaciona dos términos que son, o bien ambos el sujeto o bien ambos el predicado de las premisas. La expectativa, también corroborada experimentalmente, es que la actuación de los sujetos no manifestará una tendencia definida en una u otra dirección. Sin embargo, la influencia de factores de carácter semántico y pragmático pueden dar lugar a una preferencia en la dirección en que se formule la conclusión. Es decir, en estas situaciones las proporciones de respuestas en una u otra dirección serán función de estos factores y no de factores estructurales. En la experiencia que se reseña se identificaron dos tipos de efectos de esta índole, uno referido a la relación estructural entre el sustantivo y el adjetivo, como expresión de la relación entre entidad y propiedad en la experiencia del mundo, el otro referido a la organización del sistema conceptual en niveles jerárquicos MATERIALESY MÉTODOS Participaron estudiantes universitarios, quienes debían producir sus propias conclusiones desde pares de premisas presentados. Los materiales fueron cuadernillos con premisas en esta figura y con contenidos manipulados para producir variantes acordes a las hipótesis de trabajo. Para cada variante, un problema fue ubicado en un cuadernillo y su correlato con las premisas invertidas lo fue en otro. Los problemas experimentales fueron ubicados entre otros de relleno para evitar efectos de arrastre. Los cuadernillos incluyeron instrucciones básicas sobre el razonamiento silogístico, limitadas a los cuatro modos en que pueden aparecer las premisas y las conclusiones del silogismo, al papel del término medio, y a la posibilidad de concluir que no hay respuesta válida. Resumen: H-022 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004 EFECTOS SEMÁNTICO- PRAGMÁTICOS EN LA ESTRUCTURA INFERENCIAL A B – C B. Esta estructura se caracteriza por los siguientes rasgos: a) el término medio (B) cumple la función de predicado gramatical en ambas premisas; b) los términos extremos (A y C) cumplen la función de sujeto gramatical en ambas premisa; c) en consecuencia, la construcción de la conclusión no puede apoyarse en la funcionalidad sintáctica mencionada en el punto anterior. I- De entidades y propiedades Las palabras se organizan según su tipo o categoría, entre ellas las categorías de sustantivo y adjetivo. El sustantivo se conceptualiza como un ente, el adjetivo en cambio no perfila un ente, sino una relación entre éste y alguno de sus atributos. A los términos que designan clases o conjuntos les corresponde la categoría gramatical de sustantivos, que tanto pueden cumplir la función de sujeto como de predicado de la oración (Ejemplo: los canarios son pájaros). En cambio, los términos adjetivales si cumplen la función de predicado no pueden cumplir la de sujeto (Ejemplo: los canarios son amarillos). En la lógica de predicados la intercambiabilidad entre el sujeto y el predicado es estrictamente necesaria, de otro modo el silogismo resultaría imposible. Cuando un predicado es un concepto adjetival, es sustantivado de modo que se conceptualiza como un ente para cumplir la función de sujeto de la oración. Pero en el lenguaje natural la sustantivación implica un cambio en la interpretación específica del contenido. Entre las categorías de sustantivo y de adjetivo hay cierta relación estructural invariante, que refleja la relación entre las entidades y sus propiedades en la experiencia del mundo. Se trata entonces de una categorización semántico - pragmática Partimos de la hipótesis general de que la actuación, siempre que resulte posible, tenderá a preservar esta diferenciación, dando lugar a la tendencia a formular la conclusión en la dirección que ella indique (Corral de Zurita, N. 2004). La estructura argumental B A - B C permite generar razonamientos con contenidos adecuados a esta diferenciación , y producir diversas variantes en la situación inferencial. Las hipótesis de trabajo atienden a la identificación de distintas situaciones inferenciales que pueden darse en esta figura poniendo en juego la diferenciación semántico - pragmática entre estas categorías Primera variante La primera premisa es en el modo universal afirmativo (Todos) y la segunda premisa es en el modo particular afirmativo (Algunos), el concepto adjetival se ubica en la primera premisa o en la segunda premisa. Ejemplo con el concepto adjetival en la segunda premisa: Todos los oficinistas son empleados/ Algunos oficinistas son eficientes. Segunda variante La primer premisa es en el modo particular afirmativo (Algunos) y la segunda en el modo universal afirmativo (Todos), el concepto adjetival se ubica en la primera premisa o en la segunda premisa. Ejemplo con el concepto adjetival en la segunda premisa: Algunos felinos son animales domésticos/ Todos los felinos son ágiles En todos los problemas con estas características la tendencia fue producir conclusión en la dirección sustantivo – adjetivo, cualquiera fuese el modo de la premisa en que se hallaba el concepto adjetival y cualquiera fuese su ubicación (primera o segunda premisa) Tercera variante Combina una premisa en el modo universal afirmativo y otra en el modo particular afirmativo. El contenido se mantiene idéntico para cada cuadernillo, pero cambiando la ubicación de las premisas (primera o segunda). Estos contenidos se caracterizan porque admiten dos interpretaciones igualmente plausibles. El razonador puede interpretarlos, o bien como relación de intersección entre los miembros de dos conjuntos, o bien como relación entre los miembros de un conjunto y una propiedad adscribible a ellos. Ejemplo: Todos los cordobeses son argentinos / Algunos cordobeses son montañeses Si el razonador interpreta el argumento como relación de intersección, es decir como relación entre dos conjuntos que comparten sólo algunos de sus elementos, puede preverse que la distribución de las respuestas en dirección A C o en dirección C A no presente diferencias significativas, cualquiera sea la ubicación de las premisas. Pero si el razonador interpreta que se trata de un conjunto y una propiedad predicada, operará la diferenciación entre palabras que designan entidades y palabras que expresan propiedades adscribibles a ellas influyendo en la dirección de la conclusión. Los resultados obtenidos mostraron que esta última fue la interpretación privilegiada, produciendo una proporción de respuestas significativamente mayor en la dirección entidad – propiedad (argentinos - montañeses) Resumen: H-022 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004 Cuarta variante Ambas premisas en el modo universal afirmativo (Todos) La particularidad de los contenidos reside en que los términos A y C expresan atributos predicados de un conjunto denotado por el término medio Todos los objetos de cristal son transparentes/ Todos los objetos de cristal son frágiles La conclusión debe vincular dos términos que son conceptos adjetivales, carece por lo tanto de una entidad de la que se prediquen tales atributos (qué es transparente y frágil?). El razonador puede producir conclusión mediante el recurso de sustantivar uno de los términos (por ejemplo algunas cosas transparentes son frágiles), y efectivamente, aproximadamente el 20% promedio de las respuestas en estos problemas correspondió a esta opción. Pero la escasa significatividad y el carácter pragmáticamente extraño de esta situación, explican los altos porcentajes de respuestas “no puede concluirse nada válido”. Debe tenerse en cuenta que en las instrucciones se enfatizó que el término medio no debía aparecer en la conclusión, sin esta restricción es probable que las respuestas incluyeran el término medio como sujeto del que se predican ambos atributos (Todos los objetos de cristal son transparentes y frágiles) II- Niveles jerárquicos en el sistema conceptual organizado Los acuerdos del lenguaje y la experiencia organizando información que refiere a entidades que mantienen entre sí igual, mayor o menor nivel de agregación o generalidad, pueden también ejercer su influencia en la preferencia por una determinada dirección en la conclusión. La figura B A - B C permite también manipular contenidos que permiten que el razonamiento se apoye en el conocimiento de las relaciones organizadas entre conceptos Se identifican dos tipos de variantes posibles en esta estructura inferencial y con ambas premisas en el modo universal afirmativo. Esta figura y modo tiene conclusión válida en el modo particular afirmativo y en dirección C – A. Sin embargo usualmente produce altos porcentajes de respuesta universal afirmativa. Sostenemos la hipótesis de que estos resultados son consecuencia de los contenidos utilizados en situaciones experimentales, contenidos que expresan generalizaciones contingentes y que inducen una determinada interpretación (Corral de Zurita, 2003), por lo que incluimos como tercera variante premisas con este tipo de contenidos. Primera variante Cuando el termino B designa un subconjunto incluido en un conjunto (denotado por el término A o por el término C), que a su vez está incluido en un supraconjunto (denotado por el término A o por el término C). Ejemplo: Todos los rosales son arbustos/ Todos los rosales son plantas La conclusión “Algunas plantas son arbustos” es normativamente válida y empíricamente verdadera. En cambio, la conclusión en dirección contraria “Algunos arbustos son plantas”, aunque verdadera en el significado lógico del cuantificador particular, es pragmáticamente extraña si el razonador sabe que todos los arbustos son plantas. La hipótesis es que cuando el razonador puede optar entre dos conclusiones verdaderas, una que expresa una relación conjunto - subconjunto (Algunas plantas son arbustos) y otra que expresa una relación subconjunto incluido en un conjunto (Todos los arbustos son plantas), tenderá a preferir esta última por su mayor informatividad y pertinencia. Es decir, a ubicar el término de menor nivel de generalidad como sujeto de la conclusión, cualquiera sea la ubicación de la premisa que lo contiene (primera o segunda) Segunda variante Cuando el término B designa un conjunto incluido en un conjunto (A o C) y también en otro conjunto (A o C), conjuntos que no mantienen entre sí relaciones de mayor o menor jerarquía, sino que tienen el mismo nivel de generalidad y comparten entre sí sólo algunos de sus elementos. Ejemplo: Todos los búhos son aves rapaces/ Todos los búhos son animales nocturnos Las conclusiones “Algunas aves rapaces son animales nocturnos” y “Algunos animales nocturnos son aves rapaces” son ambas verdaderas e igualmente informativas. Estas características permiten anticipar que el tipo de relación que mantienen los términos extremos en el sistema conceptual organizado no ejercerá influencia en la dirección de la conclusión, que tanto podrá ser A - C como C - A. Los resultados obtenidos con estos contenidos y en ambas variantes, dan apoyo a las hipótesis formuladas. En el primer caso la proporción de respuestas del tipo “ todos los...” fue significativamente mayor que la de respuestas “algunos...son.” En el segundo caso, predominaron las respuestas del tipo “Algunos...son” formuladas en ambas direcciones. Tercera Variante Cuando las premisas son generalizaciones contingentes, que describen relaciones estrictamente circunstanciales o estados de cosas eventuales. Estos contenidos no permiten apoyar el razonamiento en el sistema conceptual organizado. La hipótesis que sostenemos es que la competencia lingüística y el conocimiento de como se organizan los acontecimientos del mundo permiten al razonador ordinario advertir el carácter de conjunción ocasional entre los elementos de los conjuntos, favoreciendo la interpretación de conjuntos en relación de coordinación circunstancial, porque esta es la estructura relacional propia de este tipo de situaciones en la experiencia del mundo. En consecuencia, la tendencia será producir conclusiones en el modo universal afirmativo en una o en otra dirección. Ejemplo: Todos los magistrados son ornitólogos/ Todos los magistrados son banqueros Resumen: H-022 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2004 Contenidos con estas características son los utilizados en las experiencias realizadas por Johnson-Laird y sus colaboradores para poner a prueba las hipótesis sobre el proceso inferencial subyacente (Bara, Bucciarelli y JohnsonLaird, 1995, Bucciarelli y Johnson-Laird, 1999). Nuestros resultados al utilizarlos son similares a los obtenidos en aquellos experimentos, manifestando la tendencia a producir conclusión no válida en el modo Todos, tanto en una como en otra dirección. CONCLUSIONES El conjunto de resultados reseñados pueden entenderse como indicativos de tendencias originadas en la imbricación de la estructura del argumento, las relaciones semántico - pragmáticas entre los términos del problema y sus referentes en el mundo, señalando una vez más la complejidad de los vínculos del razonamiento humano con las informaciones lingüísticas y con los conocimientos previos movilizados por esta información. Muestran sólo algunas de las múltiples restricciones a que está sujeto el razonamiento no orientado por la normativa lógica, y sugieren un campo amplio y fructífero de investigación, orientado a la identificación de patrones de actuación relativamente estables originados en la conjunción de las estructuras de los problemas, los significados en el lenguaje natural, y el conocimiento previo relevante. Los efectos que se han descrito pueden resultar obvios una vez enunciados, pero podrían influir inadvertidamente la actuación de los sujetos en situación experimental; efectivamente, es posible encontrar en la literatura especializada la utilización inadvertida de conceptos adjetivales. REFERENCIAS BIBIOGRÄFICAS Bara, B. G., Bucciarelli, M., Johnson-Laird, P. N. (1995). Development of syllogistic reasoning. American Journal of Psychology. Vol 108, Nº 2, 157-193. Bucciarelli, M., Johnson-Laird, P. N. (1999) Strategies in Syllogistic Reasoning.Cognitive Science. Vol.23 (3), 247303. Corral de Zurita, N. (2003) “Efectos Lingüísticos y pragmáticos en la conformación de patrones argumentales”. II Jornadas “La Creatividad Lingüística”. PROYCO y Secretaría de Ciencia y Técnica de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de San Luis. Publicación Electrónica: D/:jornadas/HTML/2/descripciones. Jornadas/htm SIN 1667-4634 , Pág. 1- 10 Corral de Zurita, N. (2004) “Significados y experiencia del mundo en los procesos inferenciales”. Memorias de las XI Jornadas de Investigación. Psicología, Sociedad y Cultura. Secretaría de Investigaciones de la Facultad de Psicología. Universidad de Buenos Aires. Dpto. de Publicaciones de la Facultad de Psicología. SIN 1667-6750. Tomo II: 384 – 387. Espino, O. Santamaría C., García-Madruga, J. A. (2000) La influencia de la figura y el contenido semántico en tareas silogísticas. Cognitiva (11) 2, 133-150. Johnson-Laird, P.N. (1983) Mental models. Towards a Cognitive Science on Language, Inference, and Consciousness. Cambridge University Press. Johnson-Laird, P. N. y Bara , B. G. (1984). Syllogistic inference, Cognition, 16, 1-61 Johnson-Laird, P. N. y Byrne, R. M. (1991) Deduction . Hove, UK: Lawrence Erlbaum Wetherick, N. y Gilhooly, K. (1990) The figural effect in syllogistic reasoning. In Gilhooly, Keane, Erdos (eds.) Lines ofthought: Reflections on the psychology of thinking (Vol. 1). London: Wiley