EL MENSAJEDE..FANNY BLANKERS.KOEN . “El deporte.ha cambiado; yO nohay ningún atleta que sonría” En LosAngeles estó promoéiónóndo Amsterdam-92 Los Angeles,27. (Morley Myers,de UPI.) Londres, 1948.Era el tiempoen que los atletas corrían sólopor el puroplacerde hacerlo...Para divertirsey nopor dinero.Díasen que losdepor tistas no utilizabanlas drogaspara mejorarsus actuaciones,díasen que sólo loszoólogosefec tuaban controlesde sexo,ya que éstosno eran usados todavíapara determinarla feminidadde las competiaoras...Era también el tiempo de Fanny Blankers-Koen,la mujerque se convirtió en la mástriunfante atleta que ha conocido la historia olímpica. Sí, porque desde los días gloriososde Lon dres-48, muchos años han transcurrido, y el mundo recuerdatodavíala gestadeaquellamu jer que, a los 30 años, cuandoera ya madre de dos hijos, ganócuatro medallasde oro en prue bas de atletismoy también, por supuesto, un puesto en la historia,con su maravillosaactua ción en aquellosJuegosOlímpicosque, después — de 12 años, simbolizabanpara la humanidadel retorno ala normalidad,despuésdelos horrores de la SegundaGuerraMundial. Nuestra protagonistahabía conseguidoen las Olimpiadaberlinesade 1936 un magnífico sexto puesto en salto de altura... Después,la guerra la mantuvoenlaoscuridad.Por eso;sería en Londresen 1948cuandoibaa ofrecera todos los amantesdeldeportela verdaderamedidade sus posibilidades. Porque la holandesaBlankers-Koen,que ob tuvo seis récordsdel mundo,entre ellos los de salto dealturay saltode longitud,pruebasenlas que no participóen Londres,se alzó conlasme dallas de oro en 100y200 m libres,en 100m va llas, y, además,contribuyóen gran medidaal triunfo de Holandaenlos relevos4 x 100. La grancampeona,que,despuésde los días dorados de Londres,fue duramentecastigada por laslesiones,y, aunqueparticipóén la Olim piada de Oslo de 1952,no revalidósus títulos y se retiró de la competicióndos añ después, está hoyenLos Angeles,promocionandolacan didatura de Amsterdampara organizarlosJue gos de 1992.Recuerdavivamenteaquellosmo mentos gloriosos.La parece todavíaque todo aquello sólo fue un hermososueño.A su alrede dor, ve un mundototalmentedistinto al de aque llos días.Ella,bajo ladirecciónde suesposoJan, entrenaba cuatrohorasa la semana.Hoy,lasat letas entrenansiete horascada día. Sabe bien que el progresoha cambiadomuchascosas,y piensa queentonces,a pesarde lasrivalidadesa nivel deportivo,“todos formábamos una gran familia. Eramos amigos...”. “Los tiempos han cambiado”, dice, y en cierto modo, esto la en tristece, porque la gran triunfadorade Londres de 1948estáconvencidade que ahora,36 años depués, “nadie parecesonreír...”