Especies 1

RIOS DE BIZKAIA
Peces (1)
Tanto por su valor ecológico como
porque constituyen un apreciado
recurso, los animales vertebrados
más importantes en la fauna fluvial
son los peces.
En cualquier tramo de un río que
se mantenga en condiciones naturales,
nadando en el agua o sobre el fondo se
encuentran peces de diferentes
especies, según la zona.
Hay grupos de peces que necesitan
aguas agitadas, frías y bien
oxigenadas, como la trucha; otros
prefieren condiciones de corriente más
débil o incluso aguas retenidas,
más cálidas y soportan
concentraciones de oxígeno
más bajas.
La fauna de peces fluviales se estudia mediante técnicas
de pesca eléctrica. Después de medir la talla y pesar
los ejemplares capturados, se devuelven al río
donde se encontraban.
Ejemplar de trucha autóctona de un río de Bizkaia.
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RIOS DE BIZKAIA
Los factores ambientales del lugar donde habita
una especie de pez tienen que encontrarse dentro de
unos límites, máximo y mínimo, por fuera de los cuales
no puede vivir. Si se sobrepasan, las poblaciones de
peces mueren (muy rápidamente o poco a poco, según
su tolerancia). Así hay peces que no soportan aguas
cálidas (y con poco oxígeno); otros, en cambio, encuentran su óptimo ecológico en temperaturas altas aunque
el agua esté peor oxigenada. En general aguas alcalinas
(pH>9) o ácidas (pH<5) son mortales para estos animales.
Otros factores igualmente importantes son las
sales disueltas (los nitritos y el amoniaco no ionizado
son altamente tóxicos para los peces), la corriente y el
caudal del río, el tipo de fondo y la vegetación acuática,
-que proporcionan abrigos y lugares de puesta de huevos (freza) y de desarrollo de juveniles-, así como la
presencia depredadores (otros peces; aves, mamíferos,
etc.) y el alimento (principalmente macroinvertebrados).
Los peces necesitan comer mucho (más de la mitad de
su peso corporal por día, cuando están creciendo); pueden ser depredadores, omnívoros ramoneadores (raspan
alimento sobre piedras) u omnívoros filtradores (aspiran
agua cercana al fondo, que arrastra alimento).
Los tramos habitados por las
truchas son de aguas limpias,
frescas y bien oxigenadas, con
buena corriente y cauce bien
sombreado, como el de la foto
de la derecha.
Tramo fluvial alto,donde habita la trucha.
La zona de barbo está aguas abajo, con aguas
más tranquilas y en zonas, por lo general, más
modificadas por la actividad humana.
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Por desgracia con frecuencia se dan hoy situaciones de degradación de los ríos tan graves que no permiten la vida de los peces. Las causas son complejas,
pero principalmente provocan que el oxígeno disponible
sea insuficiente, que las aguas sean anormalmente ácidas o muy turbias (con partículas que destrozan las
branquias: desgarran los tejidos o los cubren, imposibilitando la respiración). Cuando estas situaciones se presentan los peces que pueden huyen a otras zonas no
afectadas (si las hay y si tienen tiempo) o mueren.
RIOS DE BIZKAIA
Próximas a la desembocadura en el mar se
encuentran otras especies de peces, como los
mubles y la platija.
A lo largo del río las condiciones van modificándose de forma gradual. Esto se refleja también en la
fauna de peces que se encuentra en cada zona. A efectos
prácticos (según legislación de la UE) se distinguen
aguas salmonícolas y aguas ciprinícolas. Las salmonícolas (tramos altos, zona de trucha) permiten la vida normal (con reproducción) del salmón y de la trucha. La
concentración de oxígeno disuelto debe ser superior a
los 9 mg/l en un 50% de los casos y nunca inferior a 7.
En las ciprinícolas (hábitat idóneo para los ciprínidos)
se admiten valores no inferiores a 4 mg/l. También se
consideran temperatura y concentración de amonio
(CEE 78/659).
Un río es un sistema agitado que arrastra todo
aguas abajo. Los peces son los únicos animales que
pueden mantenerse quietos en una posición o remontar
la corriente, gracias a la cola típica de vertebrados que
es un sistema de propulsión altamente eficaz para ello.
Algunos peces son emigrantes: del mar al río para
reproducirse, como el salmón, o al contrario, como la
anguila, la platija y el muble.
Principales especies de
Peces en Bizkaia
En los ríos vizcaínos (como es caso común
hoy) la fauna de peces no es la original, sino resultado
de modificaciones producidas por el hombre a lo largo
de la historia. Se han introducido especies no nativas
para su consumo o como trofeo de pesca. Ya lo hacían
los romanos, para tener pescado vivo en piscinas (de
piscis, pez). Accidentalmente o no gran parte de estas
especies han llegado a los ríos y se han asilvestrado,
desplazando y eliminando a veces a las especies
autóctonas.
Los Pirineos son una importante barrera
biogeográfica que es límite de muchos peces europeos
(lota, rutilo, acerina, etc.), o separa especies hermanas
muy próximas, como las del barbo. Sin embargo los
peces peninsulares tienen gran interés faunístico, y
especialmente la fauna del País Vasco que es zona de
encuentro y paso entre áreas bien distintas (europea,
ibérica, cantábrica, etc.).
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RIOS DE BIZKAIA
Descripción y biología de
las principales especies de
Peces en los ríos de Bizkaia
Trucha arcoiris, introducida
como recurso pesquero.
Trucha común, nativa de ríos europeos.
TRUCHAS (Familia Salmónidos).
La trucha de río común (Salmo trutta fario) es
uno de los peces más apreciados de nuestros ríos, donde
se encuentran ejemplares de longitud media de unos 25
cm y hasta de algo más de 40 cm, con pesos de casi 1
kg. De coloración muy variable (entre plata, verde y
pardo) con flancos manchados con ocelos oscuros
bordeados por un aro claro, a veces con coloración
rojiza central, se caracteriza por una segunda aleta
dorsal adiposa.
Esta trucha autóctona, -abundante en lagos y
ríos de aguas limpias, frescas y bien oxigenadas, con
fondos de grava y guijarros- es una forma más pequeña,
sedentaria, que proviene de la trucha marisca o reo.
Cada individuo habita durante toda su vida en una zona
concreta del río y no se desplaza al mar como hacen
otras especies de su grupo (reo, salmón). La trucha se
encuentra en los tramos altos y medio altos de los ríos.
En Bizkaia las truchas maduran sexualmente a
los 2 o 3 años de edad. La época de reproducción es de
octubre a febrero: los adultos buscan lugares idóneos
con corriente fuerte y fondos de grava (frezaderos). Los
huevos son esferas anaranjadas de 4-5 mm de diámetro,
agregadas en grupos de 100 a 500 unidades, que son
cubiertas con grava.
La subespecie originaria es la trucha marina,
marisca o reo (Salmo trutta trutta), que emigra al mar
sin alejarse mucho de la costa y que entra en los ríos
para reproducirse. En Bizkaia aparece citada
ocasionalmente en Urdaibai.
La trucha arco-iris, americana, (antes Salmo
gairdneri; su nombre correcto es Oncorhynchus mykiss)
se encuentra en ríos (Kadagua, Arratia, etc.) por
repoblación o procedente de fugas de piscifactorías. Sus
poblaciones no suelen ser esta bles por su
comportamiento migrador y por las dificultades de
aclimatación que tiene en el río libre.
BARBO (Familia Ciprínidos}.
El barbo común de los ríos del norte de la
Península Ibérica es Barbus graellsi. Tiene un tamaño
relativamente grande (25 cm de longitud media, hasta
más de 40 cm), con pesos de 80 a 800 g (280 g de
media). Vive sobre el fondo del que recoge comida con
su boca ventral, que lleva dos pares de barbas largas. Se
alimenta de algas filamentosas que engulle junto con
sedimento y animales invertebrados: larvas de
quironómidos y otros insectos, moluscos como
Potamopyrgus jenkinsi, abundantísimo en deteminadas
zonas de los ríos vizcaínos.
El barbo, habitante de aguas limpias con
fondos de arena y limo en tramos menos pendientes que
los trucheros, caracteriza una segunda zona fluvial
(zona de barbo; aguas ciprinícolas). Alcanza en Bizkaia
la madurez sexual con 3-4 años, una talla de 23 a 25 cm
y un peso de unos 150 g.
La trucha es depredadora: captura larvas y
adultos de insectos (moscas, ninfas) y también foxinos
y otros vertebrados de menor tamaño. El valor
bioindicador de la trucha es muy grande: su presencia
sirve para definir la llamada “zona de trucha”.
Barbo común,
muy abundante en algunos tramos medios de los ríos vizcaínos.
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