SergueiBubka DietmarMoegenburg se necesitauna poca degra cia, y otra cosita, y arriba, y arri ba Para subiralcielose necesitaotra cosita, efectivamente.Se necesita una pértigamuylargao unaspiernas también muylargasy muypotentes que disparena suposeedorhacialos límitesde lo increíble.Yen estoesta mos, O en eso están,al menos,los componentesde la elite mundialde los saltosverticalesque,díatras día. año trasaño,arañancentímetros ala ley delagravedadparasituarellistón un poquito más alto. Pero.¿hasta dónde es capaz de llegaresta pro gresiónaritméticaque pareceno te ner fin? Hay innumerables estudiossobre el terna, efectuadospor los más prestigiosostécnicosmundialescon la ayudade lascomputadoras.Pero incluso el estudiomás fiablese ha visto en ocasionessuperadopor la realidad.Estamoshablandodel rea lizado por un equipo soviéticoen 1960, que cifrabanlos récordspara 1984 en 2.40m en saltode alturay 5.85 en saltocon pértiga,Y si en el primer casoseha cumplidocasima temáticamentela predicción (Zhu .iianhua poseeel récrodal aire libre en 2.39 desde1964y DietmarMoe genburg el de pista cubiertacon la misma alturadesdehace un par de meses),en el segundolas previsio nes soviéticasquedaroncortas,por que un compatriotasuyo, Sorguei Bubka, saltó nadamenosque 5.94 m el año pasado,superandoincluso los 5.90pronosticados para1988,el año delosJuegosOlímpicosdeSeúl. Superadapuesya labarreradelos 5.90 enpértiga,y próximalade 2.40