Costa Rica: Hablan tres ex-presidentes

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PENSAMIENTO PROPIO (Managua, Nicaragua), No. 30 (enero-­‐febrero 1986), 15-­‐18 Costa Rica: Hablan tres ex-­‐presidentes Por Andrew Reding José Figueres, Daniel Oduber y Rodrigo Carazo, tres ex-presidentes que gobernaron
Costa Rica entre 1948 y 1982, fueron entrevistados por el periodista Andrew Reding, a
fines de 1985, para el World Policy Journal. Serrán publicados por dicha revista en su
número correspondiente a Primavera de este año.
En esta edición PENSAMIENTO PROPIO ofrece una primicia de las mismas,
presentando extractos de lo expuesto por loe ex-mandatarios sobre aspectos del
importante período de transición que vive su país.
La visión de la oposición de izquierda es explicada por Javier Solís, primer candidato a
diputado parar San José, por la coalición Pueblo Unido.
JOSE FIGUERES José Figueres Ferrer encabezó la invasión armada que desató la guerra civil de 1948 en
Costa Rica. Fue fundador del Partido Liberación Nacional (PLN)—de orientación
social-demócrata—y gobernó el país en tres ocasiones: 1948-19; 1953-58; y 1970-74.
Si bien ya no volverá a ser Presidente, debido a una cláusula constitucional que él mismo
promovió para evitar el peligro del “continuismo”, sigue siendo una de las figuras
políticas más influyentes de Costa Rica.
¿MARXISMO SANDINISTA?
Claro que los Sandinistas tienen algo de marxistas, pero para mí esto responde más al
resentimiento histórico hacia los Estados Unidos que a otra cosa. Según la administración
norteamericana, el Gobierno Sandinista representa una amenaza para Estados Unidos.
Esto es absolutamente falso, al igual que la versión de que van a exportar su Revolución.
Al contrario, los Sandinistas estarían perfectamente felices con tan sólo garantizar la
sobrevivencia de su propia Revolución. Una invasión norteamericana en Nicaragua sería
un error histórico...
Yo creo que lo mejor que Washington podría hacer en éstos momentos es dejar de
financiara los contras. Es una política contraproducente—80 a 90 por ciento de todo el
pueblo Latinoamericano apoya Nicaragua. En Costa Rica, no tanto: este es el país más
pro-norteamericano de todo el continente, en parte gracias a mis propios esfuerzos. Yo
siempre he fomentado una actitud de amistad hacia Estados Unidos y todavía lo hago,
aunque no estoy de acuerdo con la actual administración.
MAS ALLA DE LA GUERRA Y LA PAZ
Contadora es un esfuerzo muy noble. Quizás no ha tenido un éxito rotundo hasta el
momento, pero sí ha podido mantener algún nivel de paz. Ha asegurado que las partes
sigan hablando y negociando. Yo creo que los problemas del istmo van más allá de la
guerra y la paz; involucran fundamentalmente el bienestar de la población. Una amplia
gama de problemas económicos y sociales está en juego y, en ese sentido, Contadora
representa un buen paso.
No creo que ha sido un error por parte de Nicaragua haberse negado a firmar el último
Acta de Paz de Contadora. Nicaragua vive circunstancias muy extraordinarias: está
siendo agredida por todos lados. El gobierno norteamericano está públicamente
financiando a los conspiradores y convirtiendo a los Centroamericanos en mercenarios.
No hay justificación para esto. Yo no estoy de acuerdo con los marxistas, con sus
soluciones a los problemas contemporáneos pero, sí, reconozco su derecho a equivocarse.
DANIEL ODUBER A Daniel Oduber—Presidente entre 1974 y 1978—le tocó profundizar el proyecto del
PLN, y bajo su gestión se desplegó la base de una industria nacional de propiedad
estatal, inusitada en la región hasta el derrocamiento de Somoza.
En la actualidad, Oduber es una de las figuras más relevantes del PLN, y uno de los
representantes de la Internacional Socialista para América Latina.
PRESTAMOS COSTOSOS
El gobierno de Monge se encuentra en la triste posición de estar en la bancarrota y sin
gozar del prestigio necesario para conseguir préstamos. Durante tres años y medio, ha
estado tratando de mejorar la imagen del país para atraer fondos. Resulta que la fuente
principal es el gobierno de Estados Unidos, pero otorgar el dinero bajo condiciones
rígidas, dirigidas a asegurar que su modelo se implemente en Costa Rica. Nosotros
estamos en contra de eso; hay que dejar que los mismos costarricenses decidan qué clase
de sociedad quieren.
Por ejemplo, en vez de canalizar préstamos blandos a los bancos nacionales, los canalizan
exclusivamente hacia los bancos privados. Quieren destruir la participación estatal en la
economía. Es la misma política imperialista de siempre... En los años 60, teníamos la
Alianza para el Progreso, que nos asistió con la Reforma Agraria y el fortalecimiento del
Estado. De repente, otro grupo viene a la Casa Blanca y los préstamos están
condicionados a que destruyamos lo que habíamos logrado gracias a la Alianza para el
Progreso. A nosotros no nos gusta eso. Somos capaces de orientar nuestro propio
desarrollo.
JUSTICIA SOCIAL: LA MEJOR ARMA
Hace falta más y mejor entrenamiento así como mayores sueldos para nuestra Guardia
Civil. Soy partidario de que se les dé un entrenamiento de policía pera no militar. La
diferencia principal es que al soldado se le enseña a disparar, mientras que al policía se le
entrena para no disparar... Creo que fue un error haberlos entrenado tan cerca de la
frontera con Nicaragua, se podía haber hecho aquí, en San José. En todo caso, aunque la
Embajada norteamericana está presionando para que nuestra Guardia Civil se convierta
en una fuerza profesional y permanente, estamos convencidos de que es mejor que se
quede como fuerza civil.
Estamos preocupados por el peligro del expansionismo marxista-leninista en la región,
pero no creemos que éste debe servir de justificación para la intervención extranjera en
nuestros países. Para mí, hay que fomentar, entre los costarricenses, la necesidad de
defender el sistema democrático que ellos han elegido. Esto solamente se puede hacer a
través de la justicia social. Por lo tanto, luchando por la justicia social en Costa Rica, de
hecho, estoy luchando contra el comunismo.
EL MONOPOLIO DE LOS MEDIOS
Todos los dueños de los medíos de comunicación son de derecha y siguen la línea del
gobierno norteamericano. De hecho, son extremistas en el sentido que, siempre, van más
allá de la posición oficial de Washington. Gracias a ellos, lo de Nicaragua se convirtió en
uno de los temas principales de la campaña electoral, buscando aislar y derrotar el PLN.
La libertad de prensa en Costa Rica es bastante buena en relación al resto de América
Latina. Sin embargo, la prensa aquí se utiliza de acuerdo a las ideas y necesidades de los
dueños de los periódicos, y no en base a las necesidades objetivas de la población
costarricense... En muchas ocasiones, hemos intentado establecer medios alternativos—
periódico, radio, o televisión—y siempre fracasamos. El problema es que los dueños de
los medios pertenecen al mismo grupo económico que saca los anuncios y sin anuncios,
ningún medio puede sobrevivir.
RODRIGO CARAZO Rodrigo Carazo Odio, se desligó del PLN y fundó el Partido Renovación Democrática.
Una coalición de partidos opositores, aglutinados alrededor de posiciones demócratacristianas, lo llevó a la presidencia del país entre 1978 y 1982. Bajo su gobierno se
contrató aproximadamente la mitad de la deuda externa actual de Costa Rica.
¿PROYECTO ECONOMICO ALTERNATIVO?
¿Qué hacer en nuestra parte del mundo? Básicamente un cambio estructural que nos
permita competir en servicios. Es cierto que se tiene que buscar la justicia en los precios
de nuestros productos de exportación pero ni con precios más justos podríamos
sobrevivir. Es urgente que nosotros tengamos acceso a la preparación de nuestros propio
“software”, que tengamos posibilidades de usar nuestro propio espectro electromagnético
(satélites). Nosotros tendríamos posibilidades, sin duda, de prestar servicios en una gran
cantidad de actividades. No sólo parra nosotros, sino para los países desarrollados...
Yo no creo en el FMI, porque sus enfoques son monetaristas, no de carácter social. El
FMI hace más daño que todas las revoluciones de América Latina: puede acabar con la
estabilidad social por defender los intereses financieros de sus socios.
Nada le pasaría a los Estados Unidos si busca una solución a la deuda externa. Los
señores de la administración norteamericana no nos entienden porque no nos conocen. A
mí me dijo un funcionario importantísimo—que tenía relación con América Latina—y
que conocí en un “cocktail party”: “Algún día voy a llegar a su bella isla”. Y yo le dije:
“Bueno usted se va a perder en el camino, porque Costa Rica no es una isla”.
Por otro lado, vienen aquí los especialistas que nos recomiendan la iniciativa para la
Cuenca del Caribe (ICC), pero se apoyan en la gente que en este país ha sido favorecida
por todos los beneficios y privilegios, y que no está dispuesta a compartir nada con la
población de base. Vea los programas que están haciendo aquí en Costa Rica: un pequeño
grupo de intermediarios se benefician de las exportaciones, marginan a los productores.
¿Qué pagan a los propios pobres pescadores? Yo soy amigo de la ICC, pero debe estar en
manos de quienes quieran resolver problemas sociales. Creo que el FMI podría ser mejor
si se fijara un poco en el ser humano.
MILITARIZACION: ENFERMEDAD CONTAGIOSA
Estos batallones (entrenados por los Boinas Verdes) tienen que ser disueltos cuanto antes,
porque el espíritu militarista es como la enfermedad contagiosa: afecta inclusive a
cuerpos sanos. Y Costa Rica es un cuerpo sano, ajena al desarrollo militar.
Yo siempre he dicho que en Centroamérica tenemos un problema: un elefante en el barrio
que se nos mete de vez en cuando. Me estoy refiriendo a Estados Unidos que quiere
resolver las cosas según sus intereses. Ahora el Presidente Reagan nos quiere meter otro
elefante—la Unión Soviética—para, entre los dos, resolver el problema de América
Central. Lo que pueden hacer es destrozarnos América Central. Entonces, yo no estoy de
acuerdo con que los Estados Unidos intervengan militarmente, ni tampoco que ningún
régimen de Centroamérica pida ayuda militar. Yo no estoy de acuerdo con que se pida
ayuda militara la Unión Soviética, y en ese sentido, no estoy de acuerdo con los
sandinistas. Pero, tampoco estoy de acuerdo con que se pida ayuda militar a los Estados
Unidos, y estoy en desacuerdo con lo que ha hecho El Salvador. No me parece que
Honduras deba ser un país ocupado. Y no estoy de acuerdo con que vengan asesores
militares a Costa Rica, porque creo que todo eso complica el cuadro e impide la solución.
“YO HABRIA ENTRADO A CONTADORA”
Si Contadora hubiera nacido cuando yo era Presidente de Costa Rica, ¿sabe lo que habría
hecho? Meter a Costa Rica entre los de Contadora. No la dejo metida entre los que
generan el conflicto. Habría sido mediador, y no mediado. Porque Costa Rica no tiene
nada que ver con el conflicto de Centroamérica. Y el Presidente de Costa Rica (se refiere
a Monge) dice todos los días que quiere seguir siendo neutral. Bueno, pero los neutrales
están en Contadora.
LA IZQUIERDA “Proponemos la vía inversa” Andrew Reding también entrevistó al ex-sacerdote Javier Solís, primer candidato a
diputado de la coalición Pueblo Unido, por San José, la capital. Solís se convirtió en una
persona reconocida—querida y odiada—por distintos sectores costarricenses, cuando,
en los años setenta, dirigió el popular diario El Pueblo.
Expone las posiciones de Pueblo Unido frente a los temas cruciales que enfrentará el
nuevo Gobierno.
ANDREW REDING: ¿Cuáles son los orígenes de los problemas económicos actuales del
país?
JAVIER SOLIS: Son varios, por supuesto. Internamente, nuestros recursos son todos
primarios. Son todos recursos agrícolas: tierra, minerales inexplotados. Lo mismo sucede
con nuestros productos de exportación: carne y postres (azúcar, banano y café), cuya
productividad es bajísima.
El segundo factor de estancamiento es la igualmente ineficiente productividad de la
industria de ensamblaje, porque no hay industria autóctona total, sino que necesita
importar materias primas y da muy poco valor agregado. Por lo tanto, ni crea empleo en
este país, ni consume materias primas nacionales. Además, esta industria de ensamblaje
se ha convertido en la carga fiscal más grande que tiene el país, porque está exonerada de
prácticamente todos los impuestos, y todas son patentes extranjeras y compañías
multinacionales que dejan la ganancia en el extranjero. La industria de ensamblaje, que
fue el proyecto del Mercado Común Centroamericano, ha sido una fuente de
empobrecimiento nacional.
El Estado, por su parte, recurrió a adquirir préstamos, a llevar éstos a sumas
astronómicas, que ahora representan para nosotros el principal problema de arranque de
un modelo de producción, de desarrollo. Los cuatro mil 500 millones de dólares de
nuestra deuda externa nos consume sólo en intereses: dos terceras partes de nuestras
exportaciones anuales.
A.R.: ¿Cómo se podrían solucionar estos problemas?
J.S.: Nuestra hipótesis, por supuesto, es contraria a la que quiere imponer el FMI. La
fórmula del FMI está basada en producir para el mercado externo. Producir para los
restaurantes de Florida, de California o Wyoming, y no lo que demanda ha alimentación
básica de nuestro pueblo.
Nosotros proponemos ha vía inversa. Primero, reforzar el valor adquisitivo de la
población y luego, un plan de producción, fundamentalmente de alimentos para toda la
población. Una segunda fase de nuestro programa de desarrollo está en una agresivísima
política exterior en el campo comercial. Buscar primero las alianzas políticas con otros
países parecidos al nuestro, para romper el orden económico actual, y cambiar los
términos de intercambio.
Creemos que podemos tener intereses comunes no sólo con los pequeños países
centroamericanos, sino también con países como Perú, Venezuela, Bolivia, inclusive
Colombia que están experimentando cambios políticos.
A.R.: Los batallones que son entrenados por los Boinas Verdes en El Murciélago, ¿son
un ejército incipiente?
J.S: Sí. Son un ejército incipiente cuyo propósito es supuestamente mantener una fuerza
de defensa temporal y relámpago en caso de una invasión nicaragüense, mientras Costa
Rica solicita el apoyo militar necesario para su defensa. Sirve también para mantener la
tensión nacional contra Nicaragua como país agresor, y contra quien hay que desarrollar
una defensa.
Más allá, a largo plazo, la militarización y la profesionalización de las fuerzas policiales
costarricenses tienen el objetivo de reprimir al pueblo. Esto, sin duda, porque el régimen,
la economía de “supply-side economy”, no se podrá mantener en un país con la tradición
democrática de Costa Rica, si no es a base de represión popular porque el precio que
tiene que pagar el pueblo va hacer crecer el descontento.
A.R.: Hace dos años que el Presidente Monte emitió una proclama de neutralidad. Pero
parece que el presidente Monge se puso al lado de la administración Reagan en su
política centroamericana. ¿Por qué? ¿Queda algo de la proclama, en la realidad?
J.S.: Yo creo que la proclamación por parte de Monge fue sincera. Creo que Monte tiene
sinceras convicciones democráticas y que ha tratado, sobre todo en los momentos más
críticos de ser consecuente con ese principio, en varios niveles. Ante todo, de frente a las
presiones intensas de la administración Reagan sobre Centroamérica, Monge no ha
permitido el acceso de Marines, no ha permitido la ocupación de la frontera norte, y no ha
estado de acuerdo con la presencia de asesores militares él personalmente,
individualmente. Fue durante un viaje suyo que esos asesores fueron traídos sin que él
supiera. Creo que el Presidente Monge no es del todo culpable de lo que ha pasado con la
proclama de neutralidad y con la posición de Costa Rica.
El principio de neutralidad militar es un principio que interpreta en forma totalmente fiel
el sentimiento, la voluntad, de la inmensa mayoría del pueblo costarricense. Pero, ¿qué ha
pasado? Las presiones y chantajes de todo tipo, en medio de la tremenda crisis de
producción, de la recesión económica, la falta de empleo, la inflación, han puesto al
gobierno de Costa Rica en una total posición de debilidad. No puede negociar porque
perdería la inyección financiera que representa el apoyo dc la administración
norteamericana. En este momento, el país recibe un promedio de un millón 300 mil
dólares diarios en préstamos y donaciones. Es un gobierno prácticamente hipotecado a la
USAID. Segundo, estas presiones han producido la tolerancia de ha contrarrevolución en
el territorio nacional. Y no sólo de los contras nicaragüenses en el campo político, sino
también armado.
Por lo tanto, la proclama de neutralidad ha sido neutralizada. Ha sido vaciada de
contenido. Esto ha hecho perder credibilidad al gobierno y a la política exterior
costarricense. Los únicos países que hacen causa común con Costa Rica son Honduras y
El Salvador—dos países ocupados por el ejército de los Estados Unidos—además de
Haiti y Paraguay. En los foros internacionales nadie apoya las tesis costarricenses. En el
mundo internacional el desprestigio del país es total—tanto, que el Presidente Monge no
fue a la Asamblea General de las Naciones Unidas, durante el cuadragésimo aniversario
de su fundación.
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