El rol del instructor en el Aprendizaje Integrado Ponente: Darío R. Pinus Aprendizaje integrado es la integración de tecnología en el aprendizaje, en la enseñanza, en la educación. Comúnmente es conocido en inglés como blended learning y se lo traduce de varias maneras: aprendizaje mixto, mezclado, semipresencial, etc. Pero en esta ponencia lo llamaremos Aprendizaje Integrado para comprender mejor el sentido. Sin embargo cuando integramos tecnología en el aula, no es sólo eso, va mucho más allá: también es la integración de alumnos con alumnos y del profesor con alumnos. En algunas instituciones prefieren tener un aula aparte denominada "laboratorio" en donde están las computadoras, proyectores, videocámaras, y otros elementos tecnológicos. Por lo tanto así denominaremos ese espacio tecnológico. En esta ponencia se analiza brevemente la diferencia entre el aula tradicional y el aula de Aprendizaje Integrado, en la cual los alumnos trabajan en grupos. Y aquí es donde el rol del instructor juega una importante función en el desarrollo del programa integrado en una institución educativa. Su meta como instructor de laboratorio es el de guiar al alumno para que éste desarrolle el trabajo de ejercitación o práctica por medio del cual logrará desarrollar sus habilidades, según la materia a investigar y estudiar. Este rol de guía o mejor dicho, de "entrenador", es diferente al rol tradicional que realiza el maestro frente a un aula llena de alumnos, donde él es el centro de atención de los mismos. La tecnología que se utiliza hoy en día, basada en computadoras, tiene como fin el utilizar una herramienta que facilite la comunicación entre los seres humanos; y no el de comunicar a personas con máquinas; es por esto que el rol del instructor juega una importante función en el desarrollo del programa integrado en una institución educativa. Su meta como instructor de laboratorio es el de guiar al alumno para que éste desarrolle el trabajo de ejercitación o práctica por medio del cual logrará desarrollar sus habilidades, según la materia a investigar y estudiar. Este rol de guía o mejor dicho, de "entrenador", es diferente al rol tradicional que realiza el maestro frente a un aula llena de alumnos, donde él es el centro de atención de los mismos. Entrenador vs. Educador La experiencia del alumno dentro de un laboratorio debe ser muy diferente a sus experiencias en las aulas tradicionales. En el laboratorio, el énfasis es en la práctica intensiva con ayuda de la tecnología en donde la experiencia educativa es personalizada y mucho mejor monitoreada por el docente. El rol del instructor también cambia; es por ello que en esta área es preferible denominarlo con el título de “educador” para definir el rol del instructor en el aula presencial y el título de “entrenador” para describir el rol del instructor en un laboratorio. Por ejemplo: Consideremos el caso del educador de música: Éste introducirá a los alumnos las notas musicales, les dirá de qué manera pueden combinarlas para crear música y luego aplicarlas a un instrumento musical para eventualmente dar un concierto. Éste también presentará a los alumnos los instrumentos con los cuales podrán ejecutar sonidos, la forma de utilizarlos, etc. En cambio el entrenador guiará la práctica. Él hará que la teoría se convierta en algo real y práctico utilizando los instrumentos musicales de manera apropiada. El entrenador hará que la práctica sea constante hasta que logre que las notas aprendidas de forma escrita puedan ser ejecutadas correctamente, convirtiéndolas en una agradable melodía que presentarán en un concierto. Veamos otro ejemplo con la enseñanza de idiomas: El educador tendrá bajo su responsabilidad, en el aula, la enseñanza de la gramática. Enseñará los aspectos teóricos de la lengua: sus funciones gramaticales, la conjugación de verbos, y la escritura y lectura. En cambio el entrenador logrará convertir esta teoría en algo que el alumno utilizará de manera práctica. Ensayará con el alumno tantas veces como le sea posible para que éste emplee la gramática aprendida y así logrando hablar el idioma que se enseña. El entrenador hará que el estudiante se ejercite de muchas maneras identificando los sonidos que escucha a través de la multimedia y practicando en repetirlos hasta que adquiera la destreza de hablar el idioma de modo casi instintivo. El laboratorio de idiomas es un lugar para la práctica constante de dos habilidades principales: escuchar y hablar. El sistema de multimedia garantiza el éxito del alumno si se aplican sesiones de 20 a 40 minutos, tres a cuatro veces por semana, y a su vez se realizan dos clases semanales en el aula. Allí el alumno practicará tantas veces como sea necesario para adquirir las destrezas de escuchar y hablar, del mismo modo que el tocar un instrumento, jugar bien un deporte, por ejemplo. En el laboratorio el maestro entrenador guiará al estudiante a utilizar y aprovechar las herramientas para su práctica: micrófonos y audífonos con la repetición continua de sonidos. Esta práctica debe ser constante, y es recomendable que se aplique en cada sesión de laboratorio. Lo mismo se puede hacer en cualquier disciplina: historia, geografía, física, etc. De manera que el aprendizaje sea a través de la práctica, la investigación y la experimentación. Es importante que podamos entender bien los roles del profesor, de educador en el aula y de entrenador en el laboratorio; si bien es el mismo docente, los roles se combinan cuando comienza a integrarse la tecnología. Aplicar correctamente estas funciones ayudará a que el alumno esté cómodo sintiendo que es entrenado de un modo personal por su maestra o maestro, lo cual hará que sienta mayor entusiasmo de aprender. Entrenando en el aula Estamos viendo que el rol del profesor pasa a ser un "entrenador ", por lo tanto tendrá ahora la tarea de entrenar en el aula. ¿De qué modo entrenar? Es muy importante el trabajo en grupos, de 3 ó 4 alumnos, que puedan realizar su trabajo de investigación y práctica. El entrenador tendrá la misión de ir de grupo en grupo y guiar a los estudiantes a realizar sus trabajos. Es importante hacer notar a los alumnos de que ellos son investigadores, porque de hecho lo son: tendrán la tarea de buscar información, procesarla, editarla para luego ser presentada. El entrenador guiará a los investigadores a realizar este proceso utilizando las herramientas que ya tienen en mano. Recordemos que el aula ya se ha convertido en un "laboratorio" en donde nuestros investigadores procesarán la información encontrada y será analizada hasta dejar aquello que realmente les sirva. En este proceso, el entrenador también forma parte del equipo guiándoles cuál es el mejor método de información por medio de fotos, videos, audio, base de datos, cálculos, etc. El entrenador podrá disponer en internet de un foro por cada grupo (que puede ser creado en alguna red social) en donde pueden volcar todo el contenido investigado para hacer análisis en línea o hacer comentarios extras sobre el proceso de investigación. El siguiente paso será de guiar a los investigadores a hacer una clasificación de la información, dejar aquella que sea relevante y eliminar la que no será de utilidad. La siguiente etapa será la de crear el lugar en donde se hará la presentación, ya sea un blog, página web, video, diapositivas, etc. El punto es que el entrenador sabrá dar a cada grupo la guía necesaria para que los alumnos desarrollen su trabajo aprovechando los elementos que tengan a mano de la mejor manera. En resumen: El rol del docente es muy importante. No seamos docentes pasivos con una enseñanza tipo “profesores céntricos”, sino más bien “alumno céntrico”; que el alumno sea el protagonista, nosotros docentes los entrenadores, quienes vamos a ayudarles a aprender, a investigar. Por lo tanto animo a los colegas a que vayamos al lugar de entrenamiento que es nuestra aula con nuestras herramientas tecnológicas a entrenar a nuestros alumnos investigadores y a integrarnos con ellos junto con la tecnología