suplemento especial dedicado a la restauración del Patio de los

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ESPECIAL PATIO DE LOS LEONES
Domingo 23.9.12
LOS LEONES
VUELVEN A
LA ALHAMBRA
Los años de intenso trabajo en la restauración
del Patio de los Leones han procurado una
imagen renovada y nuevos descubrimientos
:: ALFREDO AGUILAR
Coordina: Isabel Alcántara Documentación: Amanda Martínez y Luis Arrebola
ESPECIAL PATROCINADO POR
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LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
ISABEL
ALCÁNTARA
E
l agua fluye de nuevo y los leones vuelven a dejarse ver de
cerca. Por fin. Hacía
dos décadas que el Patio de los Leones no
se podía apreciar al completo. Primero, se acotó el paso, solo se podía caminar por las galerías que lo rodean.
Más tarde, el agua dejó de discurrir
por sus fuentes. Veinte años después
del primer acontecimiento y más de
diez desde el corte del agua, el esplendor con el que fue concebido a
mediados del siglo XIV ha vuelto al
patio más famoso de Granada y, probablemente, del mundo. Pasen y dejen que todos sus sentidos se deleiten con las maravillas que este rincón de laAlhambra ofrece. No ha sido
fácil ni rápido llegar hasta aquí pero,
a la vista de lo conseguido, el esfuerzo ha merecido la pena.
«A finales del siglo XX el patio se
encontraba en un estado muy precario», comienza apuntado la directora del Patronato de la Alhambra y
el Generalife, María del Mar Villafranca. A pesar de que, según la documentación que manejan los investigadores del monumento nazarí, este lugar ha sido uno de los más
intervenidos, el paso de los siglos se
ha hecho notar en su deterioro. Desde que el sultán MuhammadV en su
segundo reinado (1362- 1391) edificó esta casa real, el palacio ha atravesado muchas etapas y sufrido otras
tantas modificaciones. En este último periodo, que podríamos decir
que empezó a cuajarse hace una década y se inauguró el pasado 27 de julio con la apertura del patio al público, se ha intentado devolver al mismo una imagen lo más cercana posible a su concepción original.
Al inicio de esta nueva fase, ni la
fuente, ni los leones, ni el circuito
hidráulico, ni la pavimentación pasaban por su mejor época. La mala
calidad del agua o los agentes climatológicos y biológicos fueron deteriorando la estancia que da nombre
a este palacio nazarí. Desde hacía
años los especialistas debatían qué
hacer con ella y su fuente. En 2002
comienzan a dar pasos, se restaura
el león número 4, «porque no era el
que estaba mejor ni peor, su restauración sirvió para fijar una metodología», señala Villafranca.
Tiempo después, se concluye la
intervención y se sacan las conclusiones. «El año 2005 es clave, muy
interesante», continúa la directora
del Patronato. Y es que es en ese momento cuando se fija el proceso de
intervención en la fuente. «Se apuesta por la autenticidad de la pieza, con
lo que se pone fin al debate de hacer
réplicas y guardar los leones originales. Se opta por la conservación ‘in
situ’ de la pieza porque es patrimonio mundial y el Patronato cuenta
con los medios y el equipo para hacerlo». Así, siguiendo los principios
de «integridad y autenticidad» que,
según explica Villafranca, fija la
Unesco para el patrimonio mundial,
se inicia este largo proceso de rehabilitación que ha durado alrededor
de diez años.
Domingo 23.09.12
IDEAL
El patio más famoso
de todo el mundo
vuelve a sus orígenes
Dos meses después de que La Alhambra reabra al
público el Patio de los Leones y tras devolver al
recinto una imagen más «equilibrada y armónica»,
los visitantes valoran más el recorrido
Mejoría notable. Cada año pasan por la ciudad palatina más de dos millones de personas y desde el pasado mes de julio ha aumentado la calidad
Domingo 23.09.12
IDEAL
Aparte de la ComisiónTécnica del
Patronato de la Alhambra, continuamente presente para velar por el monumento, para decidir sobre los trabajos en el Patio de los Leones se
constituyó una Ponencia Técnica.
Compuesta por la dirección y el Servicio de Conservación de la Alhambra, el Instituto del Patrimonio Cultural de España y el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, ha sido
la encargada de trazar los ejes de la
intervención: la restauración de la
fuente y de los leones, la rehabilitación del circuito hidráulico y la pavimentación del patio.
Trabajo por partes
Asimismo dispuso realizar una excavación para llevar a cabo un estudio arqueológico, el primero que se
ha hecho con criterios científicos, tal
y como apunta Villafranca.
Una vez aclarados los pasos, un
equipo multidisciplinar se puso manos a la obra. Además, se contó con
la ayuda de especialistas de la Escuela Superior de Ingenieros de Sevilla
y el departamento de Sistemas y Lenguajes Informáticos de la Universidad de Granada.
Mientras que los once leones que
faltaban por restaurar fueron enviados al taller para ser intervenidos, «la
fuente se realizó ‘in situ’ porque era
muy arriesgado sacarla», puntua-
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
liza Villafranca. Del conjunto se han
retirado gruesas costras calcáreas,
elementos metálicos o adherencias
muy perjudiciales como el cemento. Asimismo, se han arreglado las
grietas y roturas. El meticuloso trabajo sobre los felinos ha permitido
conocer que son diferentes unos de
otros, pues sus pelajes, fauces, garras,
ojos o posición varían. «Se trata de
una obra de taller en la que probablemente intervinieron más de tres personas», apostilla la directora del Patronato. De igual manera, se sabe que
la inscripción que bordea la taza, un
poema de Ibn Zamrak, alaba al sultán creador del Palacio de los Leones
y alude al funcionamiento de la fuente. Ésta, según Villafranca, parece
que fue concebida más como un manantial, con el agua brotando, que
como un surtidor, echándola hacia
arriba.
El arquitecto Pedro Salmerón ha
sido el encargado del proyecto y la
dirección de la obra de restauración
del sistema hidráulico, así como de
la pavimentación del patio. La primera intervención ha supuesto recuperar el discurrir del agua por todas las fuentes que se reparten por
la estancia: las de las galerías, los pabellones de Levante y Poniente, la
Sala de Dos Hermanas y la de los
Abencerrajes y la central, así como
por los doce leones. Se han sustitui-
do las canalizaciones, se ha hecho un
circuito cerrado y autónomo y han
procurado un avanzado sistema de
control de la temperatura y condiciones del agua para que, el mantenimiento del nuevo sistema hidráulico y la conservación de las fuentes,
sea óptima. Igualmente se han adecentado las fuentes de piso y los canales que van por la superficie y que
conforman el resto del sistema.
Previa a la colocación de la nueva
solería, se llevó a cabo el estudio arqueológico del patio. Antonio Malpica Cuello, catedrático de Historia
Medieval, dirigió la primera excavación que se ha hecho en el recinto
con criterios científicos. En ella también ha participado Ángel González,
miembro de su equipo de investigación. Mediante varios sondeos ha
aparecido una galería cubierta por la
que, antes de que se construyera el
Palacio de los Leones, fluía el agua.
«Atraviesa la Sala de los Reyes y lle-
Mar Villafranca
Directora General del Patronato
de la Alhambra y el Generalife
«Se ha buscado acercarlo
lo máximo posible a su
concepción palaciega
original y que toda la
obra sea integradora,
armónica y auténtica»
de la visita al Patio de los Leones considerablemente, que se puede recorrer por completo . :: ALFREDO AGUILAR
ga hasta el mismo patio», apunta el
catedrático. El segundo hallazgo revela que el Palacio de los Leones se
edificó, en parte, sobre otro palacio
con jardín, perteneciente al quinto
sultán y abuelo de MuhammadV, Ismail I (1313- 1325). También es relevante el enorme y brusco desnivel
que hay bajo el patio, «de cerca de
tres metros en diagonal», puntualiza Malpica Cuello. Para el director de
la excavación, según los descubrimientos, no sirve la teoría de que los
reyes iban construyendo tal y como
se les antojaba, sino que «en la estructura original de la Alhambra se
concibió hasta las formas en que se
iba a desarrollar como ciudad palatina», por lo que el crecimiento de esta
fue según se pensó al principio.
El último paso, «la decisión final»,
como relata María del Mar Villafranca, fue el de pavimentar el suelo con
losas de mármol blanco. El proyecto lo dirige Salmerón y se le adjudica por concurso público a Construcciones Otero; las losas proceden de
las canteras de Cosentino de Almería. «Se decidió pavimentar el suelo
con criterios de conservación y de
mejora de la funcionalidad cultural
del espacio. Además es coherente
con la investigación y los documentos que nos han llegado», explica la
directora del Patronato que a la vez
apunta que ha sido imposible deter-
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minar con total certeza si verdaderamente Muhammad V colocó una
solería así en el patio. Por aquel entonces, también abundaban los suelos de cerámica, no obstante, según
Villafranca, el mármol procura mayor armonía al espacio. Y aunque no
hay ni imágenes ni documentos que
lo atestigüen, el relato del cronista
Jerónimo Münzer, el primero que
se tiene que habla de ello, sí alude
a un suelo de estas características.
Ahora se permite, en oposición a lo
que ocurría con la grava que había
anteriormente, que los visitantes
paseen por todo el recinto. Solo una
pequeña catenaria rodea la fuente
de los leones para asegurar una mejor conservación.
Conservación preventiva
En palabras de la directora del Patronato, con esta última restauración
de uno de los rincones más relevantes del conjunto nazarí y por tanto
de Granada, se ha perseguido «devolver al patio su carácter áulico». Acercarlo lo máximo posible a su concepción palaciega original y que toda la
obra sea «integradora, armónica y
auténtica».
El gran reto para el organismo está
ahora en la conservación preventiva del recinto. Se cuenta con la última tecnología para controlar el
comportamiento, por ejemplo, de
los elementos y los nuevos materiales en el microclima del patio. Sin
embargo, la parte más importante
viene de la mano de los visitantes,
que han de respetar el entorno y concienciarse de que la Alhambra está
edificada con materiales muy frágiles. Villafranca cuenta que el servicio de visita pública del Patronato ha
reorganizado la circulación y el itinerario procurando evitar aglomeraciones y que la calidad de las mismas sea el principal criterio a tener
en cuenta. De hecho, y aunque todavía lleva poco tiempo abierto totalmente al público, es notable la mejora de la percepción.
En cuanto a la repercusión que
esta intervención ha tenido, sobra
decir que ha dado la vuelta al mundo. Y es que, la Alhambra en general
y su Patio de los Leones en particular acaparan las miradas de millones
de turistas de todos los rincones. María del Mar Villafranca apunta que
todavía es pronto para notar un aumento de visitantes al monumento
con motivo de la reapertura del patio, sin embargo, no duda en que a
medio plazo será palpable. «Este año
estamos teniendo un poco menos de
visitas que el anterior, pero porque
2011 fue récord con 2.310.000 visitantes». No obstante el comportamiento normal es que crezca o disminuya en torno a un 2%, por lo que
habitualmente la afluencia al monumento se mantiene muy estable.
Con mucho trabajo por delante
para mantener lo que se ha conseguido y continuar en una interminable tarea para hacer perdurar la
ciudad palatina, la conclusión a la
que llega Villafranca es que «toda intervención en patrimonio es también un proceso de conocimiento».
Y es que esta restauración, además
de devolver a la Alhambra y a Granada uno de sus espacios más simbólicos, ha aportado nuevos conocimientos que sirven para arrojar más
luz sobre cómo era la capital de Reino de Granada.
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Domingo 23.09.12
IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
«Dentro de 500 años esta solería seguirá ahí
y la habrá puesto Construcciones Otero»
José Enrique Otero Administrador de Construcciones Otero
:: I. ALCÁNTARA
GRANADA. La primera vez que José
Enrique Otero pisó la Alhambra tenía solo 16 años. Había venido a la
provincia porque su padre, EligioOtero, el fundador de Construcciones
Otero, estaba realizando unas obras
de la zona regable de Motril y Salobreña. Aquella primera visita le entusiasmó y en estos cincuenta años
que han pasado desde entonces, ha
recorrido el monumento nazarí decenas de veces. Hoy, en su móvil tiene como fondo de pantalla una imagen del renovado Patio de los Leones, que ahora ha adquirido un significado muy especial para él. Su empresa, con él y sus hijos al frente, ha
sido la encargada de colocar la nueva solería del patio más famoso de la
Alhambra.
–No son pocas las veces que usted
ha paseado por los palacios nazaríes, pero ¿alguna vez se imaginó
que su empresa iba a pasar a formar parte de su historia?
–He ido cientos de veces, soy un forofo de la Alhambra y no, nunca me
imaginé que yo intervendría en ella
de esta manera. Habíamos trabajado
ya allí porque habíamos hecho la remodelación del Paseo de los Nogales y el de los Cipreses del Generalife, y también unas obras en un edificio del Patronato de la Alhambra.
Pero, aunque por el Generalife también pasa mucha gente, la obra en el
Patio de los Leones no tiene nada que
ver.
–En la rehabilitación del patio ha
habido muchas manos, ¿puede
detallarnos para qué fueron elegidas las de Construcciones Otero?
–Nosotros fuimos a reponer la solería y rehacer, por debajo de ella, el
sistema hidráulico de recogida de
aguas pluviales. En cuanto a envergadura, ha sido una obra pequeña,
pero de una importancia tremenda.
Hemos enviado allí a gente muy especializada y, por su puesto, esa obra
tenía prioridad absoluta. En nuestros
trabajos prevalece siempre la calidad
sobre el beneficio, y si ya lo hacemos
con todas las obras, más aún con la
Alhambra. Allí no se trataba de ahorrar dinero en absoluto, sino de hacer la obra lo más perfecta posible.
En el Patio de los Leones la solería es
muy peculiar, un puzzle, no hay dos
losas iguales. Por lo tanto, se tuvo
que hacer despacio, ir midiendo, etc.
Todas las semanas íbamos con los técnicos del monumento a Almería a
supervisar las losas que se iban a cargar para traerlas, y hasta hubo algunas que se rechazaron y se quedaron
allí. El control de calidad por todas
las partes implicadas ha sido muy exhaustivo, y es que esas losas tienen
que durar siglos, hay que pensar que
por allí van a pasar millones de personas. Desde aquí, a Cosentino, la
José Enrique Otero en el Patio de los Leones, su empresa ha realizado la nueva pavimentación. :: PATRONATO DE LA ALHAMBRA Y EL GENERALIFE / PEPE MARÍN
empresa de mármoles, le quiero agradecer el interés y la paciencia que ha
tenido.
–Y ¿cuál ha sido el mayor reto
para su empresa en esta obra?
–El transporte de las losas por la Alhambra. Eran enormes, la más pequeña pesaba 50 kilos y la más grande, hasta 400, y algunas de ellas medían casi dos metros de largo por un
metro y medio de ancho. Moverlas
ha requerido mucho trabajo y el traslado por dentro de la Alhambra sin
tener que tirar ninguna pared ni tapia supusieron un problema resuelto satisfactoriamente. Tuvimos que
diseñar una máquina especial con
unas ventosas y una gruita para transportarlas, colocarlas, poder moverlas si alguna había quedado mal nivelada....
–La empresa fue fundada por su
padre en 1956 y desde entonces
no ha parado de trabajar, lleva a
sus espaldas centenares de obras
por toda España, pero ¿qué supone para Construcciones Otero haber formado parte de la última
rehabilitación del Patio de los
Leones?
«El transporte de las losas
por el interior de la
Alhambra ha sido
muy complejo»
–Es un orgullo haber participado en
la transformación de este lugar tan
emblemático, un placer inenarrable.
La obra, de presupuesto, quizá es de
las más pequeñas que hemos hecho;
pero es de una satisfacción... Y es que
es inmortal, dentro de 500 años esta
solería seguirá ahí y la habrá puesto
Construcciones Otero. Hemos realizado obras muy importantes, pero
no tan emblemáticas como esta por
la repercusión social y mediática que
tiene y por la cantidad de personas
que van a venir a la Alhambra y van
a pasar por esas losas.A partir de ahora siempre figurará el Patio de Leones en nuestro catálogo de trabajos.
Agradezco muchísimo al Patronato
de la Alhambra y a su directora, María del MarVillafranca, que en su momento decidieran confiar en nosotros. Yo creo que han quedado muy
satisfechos.
–Como usted dice, nunca habían
intervenido un lugar tan significativo, sin embargo, están acostumbrados a que sus trabajos
sean útiles a miles de personas
porque la trayectoria de Construcciones Otero está ligada a las
obras públicas, especialmente a
las hidráulicas. ¿Qué otras actuaciones han sido especialmente
significativas?
–Muchas. Por ejemplo, en Tabernes
del Valldigna, en Valencia, en los
años sesenta, hicimos una intervención de transformación de regadío
que durante veinte años fue la obra
piloto del entonces llamado Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario.
De intervenciones más recientes
tengo un recuerdo especial de un encauzamiento que hicimos en Málaga, y que evitó que se inundara una
barriada en las lluvias torrenciales
del año 1989. Hemos trabajado mucho en todaAndalucía, donde somos
un referente en obras hidráulicas,
aunque en la actualidad también realizamos obras en otros ámbitos, entre las que me gustaría destacar nuestra participación en el Metro de Gra-
nada y la ejecución de nuestra nueva sede, concebida como un edificio
sostenible y de alta calificación energética, que tenemos previsto inaugurar el próximo año.
–Para Construcciones Otero quedará la obra del Patio de los Leones como un hito, ¿algún otro lugar especial en el que a la empresa le gustaría trabajar?
–Independientemente del lugar, lo
que nos gusta es intervenir en proyectos de calidad, que contribuyan
a la mejora y el desarrollo sostenible
del entorno en que se ubican. Las
obras públicas son siempre muy especiales porque ayudan a mejorar la
calidad de vida de muchas personas,
por lo que estamos siempre abiertos
a trabajar con todas las administraciones. Aunque las licitaciones son
cada vez más complejas y, además,
en los últimos años ha disminuido
sensiblemente. Hasta ahora, aproximadamente, el 75% de nuestro trabajo era obra pública y el 25 %, privada, pero últimamente se está invirtiendo la tendencia y, en la actualidad, en torno al 40% de nuestro trabajo es en el ámbito privado.
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LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
1863. Imagen de Jean Laurent del Pabellón de Levante del
Patio de los Leones, de la muestra ‘Luz sobre papel’. :: R. L. P.
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IDEAL
1894. El Patio de los Leones en una fotografía tomada hace más de un siglo. :: ARCHIVO
Años 60. Turistas visitando el Patio de los Leones en la década de los 60 del siglo XX. :: TORRES MOLINA
Las mil caras
de los leones
Primera década del siglo XX. El rey Alfonso XIII durante una
visita al recinto monumental de la Alhambra. :: ARCHIVO
Un recorrido gráfico por parte de la
historia de este emblemático rincón
muestra cómo ha evolucionado
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IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
2007. Restauración de la taza del patio ‘in
situ’. :: RAMÓN L. PÉREZ
1934. La cúpula exótica del templete de Levante lucía así desde
1866 que hasta Leopoldo Torres Balbás la sustituyó. :: ARCHIVO
2012. Los visitantes estrenan el ‘nuevo’ patio
inmortalizando el momento. :: ALFREDO AGUILAR
1935. Estado del Patio de los Leones con el tejado a cuatro aguas
con el que Torres Balbás sustituyó la anterior cúpula. :: ARCHIVO
Finales de 1934. Obras de sustitución de la
cúpula vidriada del templete de Levante del
Palacio de los Leones. :: ARCHIVO
1775. Grabado del viajero Henry Swinburne realizado en 1775 en el que muestra el Patio de Los
Leones con un enlosado. :: ARCHIVO
2007. Traslado de los once leones de la Alhambra que faltaban por ser restaurados cuando se decidió rehabilitar al completo el recinto. :: GONZÁLEZ MOLERO
2010. Trabajos de remodelación del Patio de los Leones para
colocar el nuevo enlosado. :: FERMÍN RODRÍGUEZ
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IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
Las losas del Patio listas para ser transportadas. :: IDEAL
Nuevo aspecto del Patio de los Leones solado con mármol. :: IDEAL
Operarios desembalando las enormes losas en el patio antes de colocarlas. :: IDEAL
Cosentino ‘viste’
de blanco el patio
La empresa almeriense ha
suministrado 250 losas de mármol
de Macael para la nueva
pavimentación del recinto
:: I. A.
GRANADA. Uno de los cambios
más significativos que se ha producido en el Patio de los Leones tras su
restauración ha sido, sin duda, su
nuevo pavimento. Ahora ha quedado ‘vestido’ de blanco, con losas de
mármol procedentes de la localidad
almeriense de Macael. La empresa
Cosentino, líder mundial en la producción y distribución de piedra natural, con sede en Cantoria, ha sido
la encargada de abastecer con lo mejor de sus canteras y fábricas al patio
más célebre de la Alhambra.
La última vez que se cambió el pavimento fue en 1987. No hace tanto si se piensa que este palacio nazarí tiene ya más de 600 años. Entonces se optó, tal y como queda reflejado en la cronología de intervenciones del Patronato de la Alhambra y
el Generalife, por poner grava –anteriormente también hubo tierra–.
Lamentablemente, este suelo de gra-
va propiciaba la dispersión de pequeñas piedras por el resto del palacio.
Por lo tanto, poco tiempo después y
por motivos obvios de conservación,
se prohibió el acceso al Patio de los
Leones. Durante las dos últimas décadas solo se ha podido pasear por las
galerías y apreciar este rincón desde
el perímetro habilitado al efecto. La
sustitución de la grava por el mármol permite a los visitantes acceder
de nuevo al patio y poder recorrerlo en su totalidad.
Así, con estos trabajos de solado
culminó este verano el proceso de
rehabilitación, que recordemos se
inició hace ya diez años. La pavimentación fue diseñada por el arquitecto Pedro Salmerón que para su estudio se documentó en los patios árabes coetáneos del siglo XIV. Asimismo, el arquitecto granadino se encargó de dirigir la obra. El trabajo se
le adjudicó a Construcciones Otero,
y se confió en Cosentino como el me-
jor proveedor de la tipología, especificaciones y labores necesarias en lo
relativo al mármol blanco requerido
para la restauración. Por otro lado, la
empresa Cuéllar Arquitectura del
Mármol realizó diversos trabajos específicos para aportar la inclinación
adecuada a las baldosas elaboradas
para la obra.
A finales del pasado mes de abril
se dieron los pasos previos a la colocación de la solería, entre ellos, proteger el exterior de la fuente –lucía
al completo, con los leones, desde
hacía varios meses– y cortar el sumi-
Las losas que con las que
se ha pavimentado el
Patio de los Leones son
todas diferentes y pesan
entre 50 y 400 kilos
nistro de agua. Paralelamente, desde Cosentino se prepararon diferentes materiales de muestras y trabajos previos con el mármol Blanco Macael, principalmente una serie de bloques aserrados en cuatro centímetros de grosor, y varias tablas con acabado apomazado y cepillado. Las
necesidades específicas marcadas por
el arquitecto responsable y el Patronato de la Alhambra para este espacio singular, tanto de formato de las
placas, acabado, veteado y tonalidades de blanco, han requerido un importante trabajo previo tanto sobre
el material extraído de las canteras
de Cosentino, como en los talleres
de elaboración.
Última tecnología
Las tareas de pavimentación tuvieron el apoyo además, de un equipo
especializado de última tecnología,
con instrumentación para la toma
de registros y análisis, una estación
meteorológica para evaluar comportamientos de los bienes en el microclima del lugar, y un sistema de seguridad avanzado.
El solado en sí se inició a mediados del mes de mayo con la colocación de la primera losa de mármol,
con un peso de 156 kilos, en el cuadrante uno. Los citados trabajos se
llevaron a cabo bajo un entramado
de cuadrículas, repartidas entre las
cuatro zonas principales del espacio. Recordemos que el Patio de los
Leones se extiende sobre una planta rectangular dividida en cuatro
partes diferenciadas. En torno a él
corre una galería, más estrecha en
los pasillos largos y mayor en los anchos. Además, en los extremos se
abren dos cenadores que penetran
en el rectángulo que dibuja el patio.
La galería está sostenida por 124 columnas también de mármol blanco
de Macael.
Para enlosar por completo la composición del mismo, se han colocado un total de 250 piezas de mármol
que han cubierto una superficie de
casi 400 metros cuadrados de suelo.
Todas las losas tienen medidas y pesos diferentes, que oscilan entre los
50 y los casi 400 kilos, con características especialmente diseñadas para
el espacio.
Con esta intervención, el Patio de
los Leones trata de aproximarse a la
que podría ser su imagen original.
Además, tal y como subraya Cosentino, está documentado que el primitivo patio fue también pavimentado con piedra natural arrancada y
transportada hasta allí desde las canteras almerienses de Los Filabres.
Ahora, siglos después, las nuevas
piezas han llegado a la Alhambra
previamente cortadas y tratadas por
Cosentino. Tras la restauración de
los leones, la fuente y el sistema hidráulico, la colocación de suelo de
mármol puso la guinda a la rehabilitación del patio más simbólico de
la Alhambra.
UNOS ALMERIENSES
INTERNACIONALES
En la actualidad, el almeriense
Grupo Cosentino es líder en la
extracción y distribución de
piedra natural. Cuenta con seis
fábricas, quince centros de fabricación de encimeras de cocina y baño, más de setenta centros integrales de distribución y
2.200 trabajadores repartidos
por todo el mundo. El grupo distribuye sus productos y marcas
en más de sesenta países, y controla y gestiona de forma directa, desde su sede central en Almería, instalaciones e infraestructuras propias en 17 países
como son Estados Unidos, Brasil, México, Australia, Suecia,
Reino Unido o Noruega, entre
otros. Actualmente, el 80% de
su facturación se genera en los
mercados internacionales.
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IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
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LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
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IDEAL
PEDRO
SALMERÓN
ESCOBAR
Arquitecto
L
a última y reciente
intervención por la
que ha pasado el patio más popular de la
Alhambra ha sido
meticulosamente
pensada. Nada ha sido fortuito y
cada uno de los pasos que se han
dado han tenido su, bien fundamentada, razón de ser. Hagamos
un análisis más profundo de qué
han supuesto estos diez años de
trabajo.
El punto de partida: la
restauración del león nº 4.
En 2002 se decide la restauración
del león nº 4 que lleva aparejados
estudios científicos y analíticos de
calado para apoyar los trabajos; esta
etapa culmina con la exposición
del mismo en 2005. El trabajo recibe una amplia aceptación y permite admirar, por primera vez, la
relación entre la anatomía del león
y el mármol Macael de la variedad
Anasol que compone las famosas
piezas, cuyas vetas pronunciadas
de tonos grisáceos, verdes y blanquecinos van marcando los rasgos
y volúmenes del conjunto escultórico aportando unos valores plásticos desconocidos hasta ese momento.
Este hecho pone de manifiesto
una realidad palpable: la capa que
cubre los leones no es la pátina del
tiempo, sino el resultado de la acumulación de estratos calcáreos y
suciedad provenientes del agua de
la Acequia Real que alimenta el circuito hidráulico. La evolución de
la fuente se vincula con la calidad
del agua, aspecto que se suma a las
difíciles condiciones ambientales
de la ciudad de Granada que tiene
un clima extremado con altas oscilaciones térmicas. Al mismo tiempo, el mal funcionamiento de la
fuente, que ya presenta graves dificultades para que el agua circule
por su interior, determina en 2000
la interrupción del suministro de
agua a los leones.
El curso de los acontecimientos
cambia de forma radical a partir del
Proyecto integral de conservación
y restauración de la Fuente de los
Leones (2007) que permite acometer su intervención desde parámetros científico-técnicos, agrupando a un excelente plantel de profesionales que se coordinan a través del Patronato de la Alhambra
y el Generalife con la colaboración
el Instituto del Patrimonio Cultural de España y el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico. A partir de este momento, los leones son
trasladados al taller de restauración, que se instala en la propia Alhambra, y la taza permanece en el
patio para ser restaurada in situ, ya
que su tamaño y peso (2.400 kilos)
hacen poco aconsejable su desplazamiento. La restauración constata el mal estado en el que se encuentran los leones, pero también
persigue y asienta un denominador común que inspira todos los
trabajos: la recuperación de la fuente original en su lugar adoptando
Operarios de Bados Navarro mueven parte de la fuente para restaurar el circuito hidráulico. :: PATRONATO DE LA ALHAMBRA Y EL GENERALIFE / PEPE MARÍN
Historia de una
restauración a fondo
La rehabilitación ha tenido como base la
documentación histórica y los principios científicos,
analíticos y técnicos, ingredientes fundamentales
para desarrollar el proyecto más perfecto posible
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IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
formaciones operadas en las últimas décadas. Los resultados de esta
investigación constatan que el sistema presenta una obstrucción considerable, ya que entre un 85 y 90
% de las secciones de los conductos
está ocupado por los sedimentos de
las aguas que circulaban años atrás.
Se trata de una red reciente (siglo
XX) de hierro y de plomo, según los
casos, que requiere una sustitución
prácticamente completa.
Los estudios de composición del
agua y del ataque biológico a los elementos del patio por los que circula el agua demuestran la fragilidad
de los materiales pétreos ante el elemento primordial que constituye la
razón de ser del propio lugar, lo que
obliga a plantear una renovación de
la red y un uso de agua potable, abandonado la idea inicial de usar el agua
de la Acequia Real.
El patio no era un jardín
Uno de los momentos más delicados de la intervención fue mover parte de la fuente. :: P. MARÍN
todas las medidas preventivas que
aseguran su conservación y su pleno disfrute por parte del público.
Más que un conjunto
escultórico
La restauración de los Leones desvela la finura de la talla que ya se había hecho evidente en el león nº 4
y también sus significados simbólicos a través de los rasgos de las esculturas. Estos últimos determinan
relaciones entre ellas, y las emparentan con otras manifestaciones
artísticas similares del mundo oriental y occidental. La taza de gran belleza, hecha de una sola pieza en la
misma variedad de mármol Macael
Anasol con la veta dispuesta horizontalmente, también destaca sus
valores ante los ojos de los visitantes que pueden contemplar los trabajos de restauración realizados en
el taller temporal instalado en el
centro del patio.
Pero el conjunto de la fuente con
los míticos leones tiene que funcionar de nuevo con el agua manando
por sus fauces. Para responder a este
requerimiento se inicia un largo pro-
ceso de recuperación de su funcionalidad con la realización del proyecto de restauración del circuito
hidráulico en 2009 que tiene como
objetivos fundamentales conseguir
un equilibrio hidráulico de las fuentes y surtidores del Patio de los Leones y aportar sostenibilidad al sistema, partiendo del uso de agua potable reciclada y sometida a tratamientos controlados. El patio lo
componen la Fuente de los Leones,
y otras diez fuentes más a nivel de
suelo: las de las salas de Abencerrajes y Dos Hermanas y las ocho pequeñas fuentes situadas en las galerías y templetes. Es un conjunto
armonioso que se completa con las
cuatro canales que surcan y vertebran el patio haciendo que el rumor
del agua se extienda a todo el espacio dominado por el rugido de los
leones, cuyos chorros repican sobre
la canal perimetral.
Para intervenir en el circuito hidráulico se formula un proyecto interdisciplinar basado en tres vertientes fundamentales: la historia, la arquitectura y la ingeniería hidráulica. La investigación histórico – do-
cumental conectada con el proyecto permite constatar la evolución de
la fuente, que cambia su composición de manera importante, y se repara constantemente a lo largo del
tiempo. Se puede afirmar que la
fuente recibe atención de forma continua y los primeros documentos
correspondientes al último tercio
del s. XVI ya hablan de reparaciones, sustitución de caños y mantenimiento. Las visitas reales como
las de Felipe IV y Felipe V implican
la atención y reparación del conjunto de fuentes, ya que se procura que
mane agua reforzando el atractivo
y el exotismo del palacio musulmán.
Todo indica que la fuente tiene problemas constantes y, de hecho, muchas de las fotografías que captan el
patio desde la segunda mitad del s.
XIX presentan una fuente sin agua.
El proyecto se completa con un
reconocimiento e información de
las condiciones físicas de la hidráulica de la Fuente de los Leones y del
patio en su conjunto, se realizan catas y se entrevista a operarios de la
Alhambra que conservan una memoria viva del lugar y de las trans-
En la cultura hispanomusulmana
una de las grandes aportaciones son
las huertas y jardines, creadas para
el deleite y el suministro de los habitantes del extenso territorio de AlAndalus en la Edad Media. Huerta
y jardín establecían un vínculo creativo que tenía un protagonista común: el agua. Hasta el punto que un
jardín, esencial en este universo tan
exquisito, podía justificarse solamente con la presencia del agua dando vida a un espacio, preferentemente un patio.
El Patio de los Leones ha permanecido unido a la idea de un jardín
con tierra surcado por canales que
lo dividen en cuatro partes o cuadrantes y al que se han atribuido
plantas y frutales, a modo de vergel,
entre los pabellones de columnas y
yeserías. La investigación arqueológica que se ha desarrollado durante 2011 ha desvelado que el patio no
era un jardín. El afloramiento muy
alto del terreno Alhambra ha demostrado la imposibilidad de la existencia de un jardín, debido a la escasez
de suelo útil para esa función.
El estudio histórico-documental
que se realiza para estudiar la configuración del pavimento del patio
demuestra que estuvo pavimentado, con distintas soluciones, desde
el siglo XV hasta el siglo XIX. Durante la ocupación francesa, se destruye el pavimento cerámico existente, se remueve parte del subsuelo y se realiza una pequeña elevación del perímetro para colocar plantas ornamentales. A partir de ese
momento, aumentan exponencialmente los problemas del Palacio de
los Leones porque las humedades
se extienden con facilidad a los mu-
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ros y estancias circundantes iniciándose un proceso paulatino de degradación que no logran corregir las intervenciones del siglo XX. Durante este periodo se construyen unas
grandes artesas de hormigón para
recoger las aguas bajo un pavimento de chino drenado con grava de
distintos tamaños. El patio se aleja
de forma definitiva de la visión áulica que le corresponde en el conjunto palatino de la Alhambra.
Una visión contemporánea
En 2011 se pone en marcha el Proyecto de pavimentación del Patio
de los Leones, que recoge los aspectos más importantes derivados de
la investigación histórico-documental y arqueológica, proponiendo la realización de un pavimento
de mármol de Macael que enlaza
con la tradición restauradora del
monumento durante todo el siglo
XX, que va recuperando lentamente una visión de los Palacios Nazaríes con el mármol blanco como
gran protagonista de estancias y de
patios, y que ya estaba presente en
el propio Patio de los Leones con
el mármol a manta colocado en las
galerías por el arquitecto Leopoldo Torres Balbás.
El trabajo realizado en el primer
semestre de 2012 ha supuesto la
pavimentación del patio que tiene
una superficie de 347 metros cuadrados, excluidas las canales y el
espacio ocupado por la fuente, para
lo cual se han empleado algo más
de 350 tableros de mármol Macael
de 4 centímetros de espesor elegidos uno a uno en las canteras de Almería y colocados con una traba
irregular que acentúa los valores
geométricos de la traza del patio.
El patio puede contemplarse
ahora con el agua surcando por
fuentes y canales y recorrerse por
primera vez en muchos años, pero
el rasgo distintivo de esta nueva
etapa es la recuperación de su funcionalidad, que en la actualidad
está relacionada con el uso cultural y turístico del monumento, y
que originalmente con un pavimento, evocado por el proyectado,
fue un lugar de ensoñación conmemorativo de la conquista de Algeciras por el ejército musulmán
de Muhammad V.
· Pedro Salmerón Escobar:
Autor de los proyectos y
dirección de obra
correspondientes a la
Restauración del Sistema
Hidráulico del Patio de Los
Leones y a la pavimentación de
dicho espacio
Domingo 23.09.12
IDEAL
LOS LEONES VUELVEN A LA ALHAMBRA
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