Escuela para padres Cómo lograr que los hijos se 12 preocupen por su salud Por Graciela Medina Aguilar Escuela para padres Cómo lograr que los hijos se preocupen por su salud El proceso de formacin de una persona incluye una serie de variables que regularmente se separan para comprenderse mejor pero que en realidad se encuentran fusionadas en el ser humano. Por una parte, los aspectos fsico y biolgico u orgnico, constituidos en un cuerpo, son el soporte concreto que sostiene al ser. Por otra parte, el rea psicolgica comprende dos elementos generales que determinan el comportamiento de una persona: el terreno de los pensamientos y el terreno de las emociones o afectos. De la relacin entre esos dos factores se desprenden todas las funciones psicolgicas de las personas, como las actitudes, el aprendizaje, la inteligencia, la memoria y el juicio. Otro aspecto de las personas es el terreno espiritual, que constituye la morada de la fe, la moral, los principios, las virtudes y la tica. El aspecto social, finalmente, es la base de nuestras competencias para relacionarnos con otras personas, de nuestra conciencia social y ciudadana as como de la posibilidad de desempearnos en un ambiente laboral o de servicio a otros. Si enfocamos nuestra atencin a todos estos aspectos podemos notar que son muy amplios, que abarcan muchas funciones, que estn muy relacionados unos con otros y que es difcil establecer los lmites entre ellos. Dados todos los anteriores aspectos de los seres humanos, al plantearnos la pregunta de cmo lograr que nuestros hijos se preocupen por su salud cabe cuestionarnos primeramente qu es salud y de qu salud estamos hablando en relacin con los aspectos arriba enumerados. El tema de la salud es tratado con suma cautela por los profesionales de dicha rea quienes, al explicarlo, no pueden prescindir de su par antagnico: la ÒenfermedadÓ. La Organizacin Mundial de la Salud define salud como un estado de completo bienestar fsico, mental, espiritual, emocional y social, y no solamente como la ausencia de enfermedades; de acuerdo con esta definicin, las personas saludables son aquellas que tienen todas sus necesidades cubiertas: las afectivas, las sanitarias, las nutricionales, las sociales y las culturales. El rol de padres se va aprendiendo sobre la marcha; no hemos nacido con esa sabidura, sino que la vamos adquiriendo en el contacto con nuestros hijos, en la solucin de los problemas cotidianos. El nico marco de referencia que poseemos para formar a nuestros hijos es nuestra propia persona, que fue construyndose gracias a la relacin con nuestros padres o con las personas cercanas que facilitaron nuestro desarrollo. De alguna manera, de ellos aprendimos a cuidarnos, a atendernos para mantener todas las reas de nuestra persona en equilibrio, en salud. Si no tenemos clara nuestra capacidad de influir en la salud de nuestros hijos desde el momento en que nacen, podemos desperdiciar las mltiples situaciones que da con da propician su aprendizaje en el cuidado de s mismos. El principal recurso que podemos y que debemos proporcionar a nuestros pequeos es el amor. El sentirse amados garantiza que se genere en los seres humanos el gusto por formar parte de la vida, por aferrarse a ella, por buscar siempre un lugar en ella, sin sentimientos de soledad o de vaco o sin la actitud negativa de preguntarse: ÒÀA qu vine a esta vida?Ó. Si observamos a los jvenes que se drogan, que delinquen o que atentan contra s mismos podemos fcilmente interpretar que le estn gritando al mundo: ÒÁNo tengo un lugar aqu! ÁNo tengo amor suficiente para m ni para dar a otras personas!Ó Lamentablemente el amor no lo es todo. Los humanos nos guiamos no slo por los afectos o las emociones sino tambin por las razones. Procuramos constantemente explicarnos los sucesos, desde los ms insignificantes hasta los ms trascendentes. Recurrimos a las ideas para tranquilizar nuestro espritu sobre aquello que nos preocupa o llama nuestra atencin. Por eso es importante proporcionar informacin oportuna y relevante a nuestros hijos. Cada etapa del desarrollo de nuestros hijos requiere que les brindemos explicaciones o que le acompaemos en su bsqueda. Si guiamos con prudencia a nuestros hijos generaremos en ellos la suficiente confianza en s mismos para que recurran a su inteligencia y resuelvan por ellos mismos sus dudas o adquieran el conocimiento que requieren sobre algunos temas. As, cuando lleguen a la adolescencia podrn discernir entre lo que es bueno y lo que es malo para s mismos y para los dems. Comprendern tambin que su conducta tiene repercusiones en la vida de los dems y que, como seres humanos, tienen responsabilidades no slo para consigo mismos sino para con sus semejantes. Adems de los ingredientes del amor y del razonamiento, hay otros que se enlazan con ellos y se relacionan con la salud de los individuos, como son las virtudes y los valores. As, por ejemplo, la prudencia, la responsabilidad y el respeto intervienen tambin en la salud de los individuos, no como un agregado sino como parte de ella, por lo que no debemos descuidarlos. En muchas ocasiones los padres, por diversas circunstancias, intervienen tardamente para tratar de que sus hijos se cuiden. Aunque es cierto que el aprendizaje sobre el cuidado de la salud empieza desde que los hijos son pequeos, nuestra influencia como paps siempre tendr efectos. Por eso no debemos desistir nunca en procurar que ellos atiendan su cuerpo, su mente, su espritu y su entorno social. La calidad de las relaciones interpersonales que ellos establezcan ser un indicador muy preciso de cmo se conciben y cmo se sienten consigo mismos. 13 La autora realiz sus estudios en la Universidad Autnoma de Nuevo Len, donde obtuvo el ttulo profesional de Licenciada en Psicologa, y los grados acadmicos de especialidad y maestra en Psicologa Clnica. Se dedica a la docencia desde hace 24 aos y a la capacitacin de profesores desde hace 15. Obtuvo el Premio a la Labor Docente y de Investigacin en el Tecnolgico de Monterrey en 2006. Es integrante del Consejo Consultivo de las carreras de Educacin y Psicologa de la Universidad Regiomontana. Actualmente cursa la Maestra en tica Aplicada en la Universidad Virtual del Tecnolgico de Monterrey. Es Directora de Atencin a Alumnos de la Escuela de Biotecnologa y Salud del Campus Monterrey del propio Tecnolgico de Monterrey.