Método: Propagación por yemas axilares Se debe extraer hijos sólo de plantaciones sin presencia de virus u hongos y con pocos nematodos y picudos. Se debe marcar las plantas con racimos grandes, con muchos hijos sanos, con un tallo fuerte y un buen anclaje. Cormos de tamaño mediano (de ½ à 1 libra) se prestan a mejores resultados. Para exponer las yemas casi inperceptibles en la base de cada hoja en el cormo, hay que cortar las hojas una por una pegado al cormo. El brote central se destruye con un corte profundo en equis en el centro del pseudotallo. Dentro de una tienda de plástico, cerrada para conservar la humedad, se colocan los cormos en una cama de aserrín húmedo. Se debe mojar la cama de aserrín a menudo para mantenerla siempre húmeda. El rebrote de la yema principal debe ser eliminado en caso que aparezca, ya que impide que salgan las yemas axilares. Después de sacar los rebrotes que tengan el tamaño suficiente, se vuelve a colocar el cormo en la cama de aserrín para que salgan y crezcan nuevos rebrotes. Los brotes de las yemas axilares después de ser cortados con cuidado son trasplantados en bolsas en un vivero. El sitio del vivero debe tener un buen drenaje, tener una buena circulación del aire y fácil acceso al agua para riego. La propagación de material de siembra de calidad para mejorar la salud y productividad del cultivo: Prácticas clave para las musáceas Método: Propagación por yemas axilares Prácticas no recomendables en la producción de plantas a partir de yemas axilares No usar cormos mal pelados. Quitar demasiado poca o mucha hoja va a resultar en pocos brotes del cormo en la base de cada hoja. No dejar que se desarrolle el brote principal porque impide que salgan los brotes de yemas axilares. No mantener demasiado sombra en el vivero. No mantener muy pegadas las bolsas en el vivero. Mas espacio por planta favorece un mejor crecimiento. La propagación de material de siembra de calidad para mejorar la salud y productividad del cultivo: Prácticas clave para las musáceas