Desarrollo del Sector Petrolero, Químico y Petroquímico

Propuesta de Desarrollo del Sector Químico, Petroquímico y Petrolero Venezolano
SOCIEDAD VENEZOLANA DE
INGENIEROS QUIMICOS
UNA PROPUESTA DE DESARROLLO
DE
LA
INDUSTRIA
PETROQUÍMICA
Y
CONEXOS.
Junta Directiva SVIQ 2001-2003
QUÍMICA
SUS
Y
SECTORES
Propuesta de Desarrollo del Sector Químico, Petroquímico y Petrolero Venezolano
Antecedentes
Venezuela es una nación que ha sido dotada por la naturaleza con un
recurso natural no renovable de alto valor para la sociedad moderna llamado
petróleo. La explotación del petróleo le ha brindado a Venezuela una gran
fuente de ingresos de los que el estado venezolano y parte del empresariado
local se han beneficiado.
La nacionalización de la industria petrolera y petroquímica le brindó el
control a los locales de las empresas explotadoras y de servicios requeridos
por ellas. La demanda interna de bienes y servicios para una industria tan
lucrativa, ha generado el desarrollo de empresas conexas y ha estimulado el
desarrollo de una masa trabajadora de alta calificación que se vislumbra como
una de las ventajas competitivas del país en este sector.
La Junta Directiva de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Químicos
2001-2003, consciente de la necesidad de desarrollo de uno de los sectores de
mayor importancia para la generación de riquezas y exportaciones, pretende
con la presente publicación hacer un diagnóstico de las ventajas competitivas
del sector, identificar las debilidades y fortalezas y hacer propuestas concretas
que impulsen el desarrollo del sector, brindando prosperidad a la nación, sus
empresas y la población.
Propuesta de Desarrollo del Sector Químico, Petroquímico y Petrolero Venezolano
La Propuesta
La Institución Clave:
El estado Venezolano cuenta con una institución de gran valor que sería
clave para asesorar a poder ejecutivo a tomar decisiones que impacten
favorablemente la competitividad del empresariado local.
La Superintendencia para la Promoción y Protección de la Libre
Competencia, Pro-Competencia, es un organismo técnico con autonomía
funcional adscrito administrativamente del Ministerio de Producción y
Comercio, cuyo objetivo es administrar la Ley para Promover y Proteger el
Ejercicio de la Libre Competencia en beneficio de los productores y
consumidores que realizan actividades en el territorio nacional.
Pro-Competencia, realiza estudios y hace recomendaciones técnicas
con miras a aumentar las posibilidades de éxito de las empresas locales desde
una perspectiva del bien común y no con visiones particulares o de gremios
empresariales que podrían tener la tendencia a frenar la entrada de nuevos
competidores y otros factores que dinamizarían el sector y la rivalidad
empresarial.
Por ello es de altísima importancia que las políticas económicas del
poder ejecutivo estén alineadas con las recomendaciones en actividades que
inciden directamente en la competitividad del sector y que están bajo el
control del poder ejecutivo tales como: políticas fiscales, monetarias, de
privatización, incentivos a la producción, innovación científica.
Pro-Competencia, a lo largo de su corta historia ha arrojado excelentes
propuestas de desarrollo de sectores importantes de la economía venezolana.
Sin embargo sus recomendaciones no han llegado a concretarse; y por ello se
han perdido excelente recomendaciones de desarrollo.
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Proponemos la elaboración de un estudio sectorial de la industria
química, petrolera y petroquímica e implementar las políticas públicas que las
recomendaciones del estudio indiquen.
Los Monopolios del sector:
Desde la nacionalización del petróleo, el estado venezolano ha
reservado las actividades petroleras y petroquímicas para sí. Durante la fase
de crecimiento y consolidación del sector esta política generó grandes
beneficios para el sector y permitió que se formara una clase trabajadora
altamente especializada y motivada que se ha convertido en una de las
mayores ventajas competitivas del sector. Sin embargo el monopolio estatal
del sector y sus políticas fiscales están frenando el desarrollo del sector
actualmente pues no permite la instalación de nuevas empresas sin la
participación del estado; lo que desmotiva el desarrollo de estrategias
empresariales
de
innovación
y
generación
de
verdaderas
ventajas
competitivas como la diferenciación de los productos, etc.
El sector requiere ser liberado para darle paso a la iniciativa privada
pero con especial cuidado de no trasladar el monopolio del estado a
monopolios privados; lo que sería aún más perjudicial para el sector y lo
condenaría al estancamiento y pérdida de ventajas competitivas. Por ello, el
monopolio estatal debe ser roto, dando paso a diferentes rivales locales y
permitiendo la participación de empresas extranjeras para aumentar la
rivalidad de los competidores.
Las Regalías de los recursos naturales
La disponibilidad de la materia prima es la primera ventaja competitiva
que ha permitido el desarrollo de la industria petrolera y petroquímica.
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Debido a las particularidades del crudo venezolano, hay muchos tipos de
petróleo y su procesamiento implica el uso de diferentes tipos de tecnologías.
En ocasiones los crudos venezolanos requieren procesos especiales para
cumplir con los estándares de calidad que exige el mercado; trayendo como
consecuencia menores ganancias que las obtenidas por competidores en el
extranjero. Como consecuencia, el esquema actual de regalías en petróleo
crudo desestimula el desarrollo de proyectos de explotación de crudos pesados
que representa la mayor proporción de las reservas del subsuelo venezolano.
Por ello, se debe flexibilizar la estructura de cobro de regalía en función de la
calidad del crudo a explotar; y de esta forma permitir ingresos al estado
proporcionales a las ganancias que generan las operaciones con la materia
prima.
La innovación
El sector en Venezuela, hay contado con excelentes desarrollos
tecnológicos que le han brindado ventajas competitivas en los mercados
internacionales. Gracias a que la materia prima en ocasiones representa una
desventaja ha habido innovaciones que
han puesto a la industria en una
posición favorable. Sin embargo el proceso de innovación nunca puede
detenerse es por ello que se propone tomar las siguientes iniciativas para
dinamizar la generación de ventajas competitivas impulsadas por la
innovación:
1. Brindar incentivos fiscales a la investigación y desarrollo: el proceso de
innovación puede resultar largo y tortuoso para las empresas; es por ello
que muchas empresas censuran sus ideas de innovación que dependen de
la investigación y desarrollo a favor de generar mayores ganancias para sus
accionistas en el corto plazo. Por ello un sistema de incentivos fiscales de
largo plazo a la investigación y desarrollo empresarial o con la
colaboración de universidades locales, promovería la asunción de riesgos
de las empresas en miras de conseguir ventajas competitivas avanzadas.
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2. Reactivar incentivos de premios empresariales: en el pasado el
reconocimiento obtenido de certificaciones como El Sello Norven,
probaron que alimentaban la rivalidad de los competidores locales. La
instalación de sistemas de reconocimiento empresarial ayudará a impulsar
el sector y frenará la cooperación entre competidores que podría frenar la
posible formación de monopolios.
3. Incentivar la base técnica: como parte imprescindible del proceso de la
innovación, la masa de trabajadores debe contar con una base científica
rica y actualizada. Por ello, se debe incentivar la actividad de sociedades
profesionales y la circulación de publicaciones técnicas. En la actualidad el
Ministerio de Ciencia y Tecnología cuenta con un plan de apoyo financiero
a publicaciones técnicas con mayor tiempo de circulación a dos años a
través del FONACIT; sin embargo la gran tarea a realizar es la promoción
de nuevas sociedades y publicaciones técnicas que amplíen la base técnica
del sector e impulse el desarrollo de ventajas competitivas superiores del
sector.