CONTRADICCIÓN DE TESIS 364/2012. ENTRE LOS CRITERIOS SUSTENTADOS POR EL SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO DEL CENTRO AUXILIAR DE LA NOVENA REGIÓN Y EL ENTONCES SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO, ACTUAL TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS DE TRABAJO Y ADMINISTRATIVA DEL MISMO CIRCUITO. PONENTE: MINISTRO SERGIO A. VALLS HERNÁNDEZ. SECRETARIO: LUIS JAVIER GUZMÁN RAMOS. ÍNDICE SÍNTESIS ............................................................................ I DENUNCIA DE CONTRADICCIÓN DE TESIS ................... 1 ACUERDO DE ADMISIÓN .................................................. 2 COMPETENCIA .................................................................. 4 CONSIDERACIONES DEL PROYECTO .......... 25 PUNTOS RESOLUTIVOS ................................................... 57 CONTRADICCIÓN DE TESIS 364/2012. ENTRE LOS CRITERIOS SUSTENTADOS POR EL SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO DEL CENTRO AUXILIAR DE LA NOVENA REGIÓN Y EL ENTONCES SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO, ACTUAL TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS DE TRABAJO Y ADMINISTRATIVA DEL MISMO CIRCUITO. MINISTRO PONENTE: SERGIO A. VALLS HERNÁNDEZ. SECRETARIO: LUIS JAVIER GUZMÁN RAMOS. TEMA DE LA POSIBLE CONTRADICCIÓN DE CRITERIOS: Determinar, por una parte, si la decisión del Congreso Estatal de no dar trámite a una denuncia de juicio político, sea que omita acordarla o que determine desecharla por improcedente, constituye o no el ejercicio de una facultad soberana y discrecional conforme a las reglas previstas en la Constitución local respectiva; y por otra, como consecuencia de lo anterior, si se actualiza o no la causal de improcedencia prevista en la fracción VIII, del artículo 73 de la Ley de Amparo, cuando en juicio de amparo indirecto se reclama esa decisión del Congreso Estatal. EL SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DE CIRCUITO DEL CENTRO AUXILIAR DE LA NOVENA REGIÓN EL ACTUAL TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS DE TRABAJO Y ADMINISTRATIVA, DEL DÉCIMO CUARTO, ANTES SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO. La Constitución Política del Estado de Sinaloa califica a las decisiones tomadas en el juicio político como soberanas y discrecionales, de ahí que resulte innegable que lo actuado o no (omisiones) dentro de él, constituyen actos discrecionales o soberanos de la Legislatura local y, en su caso, del Pleno del Supremo Tribunal de Justicia de dicha entidad, conforme a la Que no se actualiza la causal de improcedencia prevista en la fracción VIII, del artículo 73, de la Ley de Amparo, hecha valer por la autoridad responsable inconforme; debido a que dispone que el juicio de amparo es improcedente contra las resoluciones o declaraciones del Congreso Federal o de las Cámaras PROPOSICIÓN Si existe contradicción. JUICIO POLÍTICO. LA DECISIÓN DE LA LEGISLATURA ESTATAL DE NO DAR A LA DENUNCIA TRÁMITE RESPECTIVA, NO MANIFIESTA EL CONTRADICCIÓN DE TESIS 364/2012. Constitución Local, prerrogativa que tiene su ratio legis en el principio de división de poderes; de modo que ante la existencia de una facultad otorgada constitucionalmente a uno de los poderes del Estado respectivo o de la Unión en su caso, tales actos no pueden ser invalidados por otro poder, como lo sería en el caso el Judicial, pues la Ley de Amparo establece una imposibilidad jurídica de analizar ese tipo de actos mediante el juicio de control constitucional. El juicio político es un procedimiento en el que se pueden distinguir dos fases principales, cada una encomendada a un órgano distinto; ya que por un lado, el órgano de acusación que en el ámbito federal es la Cámara de Diputados y en el local la legislatura respectiva, y por el otro, un órgano denominado jurado de sentencia que a nivel federal corresponde a la Cámara de Senadores y, en la entidad federativa estudiada, al Tribunal Superior de Justicia. Así mismo, es un procedimiento en el que en todo momento se desarrollan funciones de tipo político, aunque participen órganos que regularmente no desempeñan esa clase de funciones; dado que es la unicidad del procedimiento en sí mismo considerado y, sobre todo, que la Constitución Política del Estado de Sinaloa califica como soberanas y discrecionales las decisiones tomadas por las autoridades que en él intervienen, lo que torna improcedente el juicio de garantías por ser uno de naturaleza eminentemente política, resuelto y realizado por autoridades actuando en ejercicio de atribuciones constitucionalmente estimadas como libres y soberanas, sobre las cuales no puede interferir otro poder público. De la interpretación del artículo 134 de la Constitución del Estado de Sinaloa, en relación con la fracción VIII, del artículo 73 que lo constituyen, de las Legislaturas de los Estados o de sus respectivas Comisiones o Diputaciones permanentes, en elección, suspensión o remoción de funcionarios, en los casos en que las Constituciones correspondientes les confieren la facultad de resolver soberana o discrecionalmente; hipótesis jurídica que no se actualizó, en virtud de que la determinación reclamada no contiene pronunciamiento alguno vinculado con la elección, suspensión o remoción de funcionarios. Es decir, en la resolución reclamada, la Comisión de Justicia de la VIII Legislatura del Estado de Quintana Roo desechó por notoriamente improcedente la denuncia de juicio político en contra del Procurador General de Justicia del Estado de Quintana Roo; se declaró legalmente incompetente para conocer y resolver sobre los hechos denunciados y turnó la denuncia al Procurador General de Justicia del Estado de Quintana Roo; lo que revela claramente y sin lugar a dudas que la autoridad disconforme no se ocupó de tema alguno vinculado con la elección, suspensión o remoción de funcionarios. De manera que resulta infundado lo aducido por la autoridad responsable, pues las causales de improcedencia en el juicio constitucional deben estar plenamente demostradas y no inferirse a base de presunciones. EJERCICIO DE UNA FACULTAD SOBERANA O DISCRECIONAL SOBRE LA REMOCIÓN O SUSPENSIÓN DE SERVIDORES PÚBLICOS (ESTADOS DE SINALOA Y QUINTANA ROO). Si bien las Constituciones de los Estados de Sinaloa y Quintana Roo otorgan a las Legislaturas respectivas la facultad de resolver de manera soberna y discrecional sobre la responsabilidad política de los servidores públicos sujetos a juicio político y, por ende, sobre su remoción o suspensión, el ejercicio de esa facultad no se ve manifestada cuando a través de la comisión respectiva decide no dar trámite a la denuncia de juicio político, pues en esa fase no se realiza pronunciamiento alguno sobre la existencia de los hechos atribuidos al servidor público, ni respecto de su probable responsabilidad, sino que sólo se verifica que el servidor público denunciado sea sujeto de juicio político y que la conducta por la cual se formula la denuncia sea de aquellas que generen una responsabilidad política, en términos de las normas constitucionales respectivas. De ahí que, no se actualiza la causal de improcedencia prevista en la fracción VIII, del artículo 73 de la Ley de Amparo, cuando en juicio de amparo II CONTRADICCIÓN DE TESIS 364/2012. de la Ley de Amparo, deriva que el juicio de amparo resulta improcedente contra las determinaciones del Congreso Local, así como la de los Tribunales Superiores de Justicia de los Estados, actuando como órgano acusador y jurado de sentencia, respectivamente, dentro de un procedimiento de juicio político. Si bien es cierto, que el acto reclamando es la omisión por parte del Congreso Local del Estado de Sinaloa de dictar la resolución correspondiente a la denuncia, es claro que el “no actuar” dentro de un juicio político por parte de las autoridades que en él intervienen, también forman parte de las facultades soberanas o discrecionales que la Constitución Local del Estado de Sinaloa. Consecuentemente, si se reclama en amparo la omisión de acordar el escrito de denuncia de juicio político éste resulta improcedente, pues dicha omisión forma parte en el desarrollo de un procedimiento de juicio político donde no procede el juicio de amparo en razón de que se trata de un acto dentro de un procedimiento que en su totalidad ha sido calificado como discrecional o soberano por la misma Constitución del Estado; ya que dada la naturaleza del procedimiento y de las actuaciones de las autoridades que participan en él, cuando las constituciones correspondientes las califiquen como decisiones soberanas y discrecionales, se actualiza la causal de improcedencia establecida en la fracción VIII, del artículo 73 de la Ley de Amparo. indirecto se reclama la determinación del Congreso Estatal de no dar trámite a la denuncia de juicio político, sea porque la deseche u omita acordarla. III