(Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. 2001; 48: 71-80) REVISIÓN Nicardipino intravenoso: un nuevo antagonista del calcio para uso perioperatorio L.E. Muñoz Alameda* y M. Barcina Sánchez** Servicio de Anestesiología y Reanimación. Fundación Jiménez Díaz. Clínica Nuestra Señora de la Concepción. Madrid. Resumen Nicardipino es un antagonista del calcio del grupo de las dihidropiridinas cuya formulación intravenosa ha sido recientemente comercializada y que aporta ciertas ventajas con respecto al resto de fármacos de este grupo, ya que carece de los efectos inotrópicos negativos del resto y posee una acción vasodilatadora preferente sobre los lechos arteriales coronario y cerebral. Produce un descenso de las cifras de presión arterial proporcional al valor plasmático mediante el descenso de las resistencias vasculares sistémicas producido por la relajación del músculo liso arteriolar. Se le han atribuido propiedades de protección miocárdica. Intravenous nicardipine: a new calcium antagonist for perioperative use Summary Nicardipine is a calcium antagonist belonging to the dihydropyridine group of molecules. An intravenous formulation has recently become available, offering certain advantages over other drugs in this group, given that it lacks their negative inotropic effects and its vasodilator effect favors coronary and cerebral artery beds. Nicardipine lowers arterial pressure in proportion to plasma levels by means of a reduction in systemic vascular resistance produced by relaxation of arteriolar smooth muscle. It has been suggested that nicardipine has a protective effect on the myocardium. Palabras clave: Nicardipino. Hipertensión arterial. Vasospasmo. Protección miocárdica. Key words: Nicardipine. Arterial hypertension. Vasospasm. Myocardial protection. Introducción analizar las posibles indicaciones y ventajas que puede tener en el campo de la anestesiología y reanimación. Los antagonistas del calcio y más concretamente las dihidropiridinas aportan numerosas ventajas en el tratamiento de diferentes situaciones perioperatorias como la hipertensión arterial, isquemia coronaria, arritmias cardíacas, vasospasmo cerebral o hipotensión controlada, entre otras. Nicardipino fue el primer antagonista del calcio del grupo de las dihidropiridinas comercializado en los EE.UU. para uso intravenoso1 (1982) y presenta una serie de efectos farmacológicos beneficiosos como vasodilatación arterial específica, ausencia de efectos sobre el lecho venoso, efectos antianginosos en pacientes con efermedad coronaria, ausencia de efectos secundarios en sujetos con enfermedad pulmonar obstructiva crónica y mínimos efectos sobre la conducción auriculoventricular y la contractilidad cardíaca2-5. Este fármaco, del que disponíamos en nuestro país en su presentación oral, ha sido recientemente comercializado para uso intravenoso (Vasonase®, Laboratorios Yamanouchi). El objetivo de esta revisión es *Médico adjunto. **Jefe de Servicio. Correspondencia: Dr. L.E. Muñoz Alameda. Servicio de Anestesiología y Reanimación. Fundación Jiménez Díaz. Avda. Reyes Católicos, 2. 28040 Madrid. Correo electrónico: [email protected] Aceptado para su publicación en noviembre del 2000. Estructura química y propiedades farmacocinéticas Nicardipino es un antagonista del calcio del grupo de las dihidropiridinas (tabla I) similar a nifedipino6, fármaco tipo dentro de este grupo, pero que posee una amina terciaria en posición 3 (fig. 1). A diferencia de otras dihidropiridinas es estable en solución parenteral por lo que puede ser administrado por vía intravenosa7, aunque debe tenerse en cuenta que su estabilidad varía con la solución que se utilice y con el material del recipiente; así nicardipino no es estable con soluciones Ringer lactato o con bicarbonato y sí lo es con soluciones, salinas o glucosadas. Por su parte, la estabilidad de la solución es mayor si el recipiente es de vidrio (7 días) que si es de PVC (24 h)8. Diferentes estudios farmacocinéticos en humanos han demostrado que nicardipino intravenoso se distribuye con gran TABLA I Clasificación de los antagonistas del calcio Fenilalkilaminas Dihidropiridinas Difenilalkilaminas Benzodiacinas Verapamilo Nifedipino, nimodipino, nicardipino Flunaricina Diltiazem 71 Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. Vol. 48, Núm. 2, 2001 NO3 H H2COOC CH3 COOCH2CH2CN H3C CH3 CH2 N cocinético de nicardipino se ha descrito como tricompartimental. Se ha observado una fase rápida (t1/α) de 2,7 min, una fase intermedia (t1/ß) de 44,8 min y una fase terminal lenta (t1/γ) de 14,4 h que fue detectada exclusivamente tras infusiones prolongadas. En este estudio se demostró una excelente correlación entre concentraciones plasmáticas del fármaco y descenso en las cifras de presión arterial11. La farmacocinética de nicardipino en pacientes de edad avanzada (> 65 años) no difiere significativamente de la de adultos sanos. H Mecanismo de acción Fig. 1. Estructura química de nicardipino. Ca2+ δ γ α2 α1 β SS Membrana P P Fig. 2. Canal de calcio tipo L12. (Con autorización del autor.) P: puntos susceptibles de fosforilación por una cinasa dependiente de AMPc. velocidad, es ampliamente metabolizado y se elimina rápidamente. Tras una fase de distribución rápida es metabolizado en el hígado, observándose pequeñas cantidades de fármaco inalterado en la orina. En el hígado sufre una N-desalquilación en posición 3 de la que se obtiene una amina secundaria a partir de la cual y tras una reacción de desmetilación y desaminación oxidativa se obtiene alcohol dihidropiridínico. Los metabolitos que se observan en la orina son conjugados glucurónidos de este alcohol dihidropiridínico9. El aclaramiento de nicardipino es principalmente debido al amplio metabolismo que sufre en el hígado. Nicardipino se une ampliamente (> 90%) a proteínas plasmáticas, principalmente α-glucoproteína, albúmina, lipoproteínas y proteínas de membrana eritrocitarias. La cantidad de nicardipino libre es proporcional a la concentración plasmática10. La unión a proteínas plasmáticas se relaciona con valores séricos de lípidos y pH sanguíneo. Los parámetros farmacocinéticos de nicardipino intravenoso se han descrito en un estudio realizado en voluntarios sanos tras la administración de 5, 10, 15 y 20 mg durante 30 min. Después de infusiones con varias dosis durante 48 h a 37 pacientes con hipertensión moderada, el patrón farma72 Se ha demostrado la existencia de tres tipos de canales del calcio diferentes denominados L, T y N con características cinéticas y farmacológicas diferentes. Los canales tipo N han sido aislados únicamente en tejido nervioso mientras que los tipo L y T se han identificado en músculo cardíaco y en músculo liso vascular. Los canales tipo L se activan cuando el potencial de membrana alcanza los –30 mV y se inactivan lentamente permitiendo aperturas de larga duración. Los canales tipo T se activan cuando el potencial de membrana alcanza los –80 mV y se inactivan rápidamente permitiendo aperturas transitorias del canal. Los antagonistas del calcio actúan exclusivamente sobre los canales tipo L. El canal tipo L está formado por 5 subunidades: α1, α2, ß, δ y γ (fig. 2). Los puntos de unión de los antagonistas del calcio se encuentran situados en la subunidad α1 y se han demostrado tres lugares diferentes, uno para las dihidropiridinas, otro para diltiazem y otro para verapamilo. El punto de unión de las dihidropiridinas se encuentra localizado extracelularmente y los otros dos a nivel intracelular, lo que va a influir en el mecanismo de acción del fármaco, ya que las dihidropiridinas van a actuar sobre el canal del calcio independientemente del estado en que se encuentre éste, mientras que verapamilo y diltiazem necesitan que el canal esté en estado activo para poder alcanzar su punto de unión. En el canal del calcio existen además unos filtros de selección que impiden el paso de partículas diferentes al calcio, unas compuertas de activación y de inactivación (d y f) y un sensor de voltaje que modula la apertura y cierre de las compuertas cuando se modifica el potencial de acción de membrana (fig. 3). Los antagonistas del calcio impiden el paso del ion calcio a través de los canales tipo L, disminuyendo así el nivel de calcio intracelular y limitando además la contracción del músculo cardíaco y liso12,13. Efectos hemodinámicos Los efectos hemodinámicos agudos derivados del uso de nicardipino intravenoso han sido descritos utilizando sistemas de monitorización invasivos y no invasivos en voluntarios sanos y en enfermos con afecciones cardiovasculares diversas. Efectos sobre la presión arterial La disminución de los valores intracelulares de calcio en músculo liso vascular y en músculo cardíaco que produce L.E. MUÑOZ ALAMEDA Y M. BARCINA SÁNCHEZ.– Nicardipino intravenoso: un nuevo antagonista del calcio para uso perioperatorio TABLA II Efectos hemodinámicos de los fármacos antagonistas del calcio DHP Extracelular Nicardipino Nifedipino Verapamilo FS SV d SV Intracelular f Ca2+ Verapamilo Diltiazem Reposo Ca Ca Activo Aumento del flujo coronario Disminución del espasmo coronario Aumento de la capacitancia venosa Descenso de la poscarga Rápido inicio de acción Corta duración de acción Posibilidad de administración intravenosa ++++ ++++ 0 ++++ ++ +++ ++++ +++ +++ 0 +++ – ++ 0 + + 0 ++ ++ ++ ++++ Activación Ca Inactivo Reactivación Inactivación Fig. 3. Canal de calcio tipo L12. Estructura y lugar de actuación de los diferentes antagonistas del calcio. (Con autorización del autor.) En el panel superior se observa que consta de sensores de voltaje (SV), unos filtros de selectividad (FS) que impiden el paso de partículas con diámetro superior a 6 Å y de dos compuertas, una de activación (d) y otra de inhibición (f). Además, se representan los sitios de unión para las dihidropiridinas (DHP) y para diltiazem y verapamilo. En el panel inferior se exponen las diferentes posiciones de las dos compuertas que determinan que el canal se encuentre en uno de los siguientes estados: reposo, activo o inactivo. Obsérvese que tras la inactivación, el canal debe volver al estado de reposo (reactivación) antes de poder ser activado de nuevo. nicardipino producirá una vasodilatación y disminución de las resistencias vasculares sistémicas; de esta forma, se produce un descenso en las cifras de presión arterial que habitualmente viene acompañado de una taquicardia refleja aunque menos intensa que con otros antagonistas del calcio. En un estudio realizado en voluntarios sanos a los que se les administraron 0,5-20 mg de nicardipino por vía intravenosa se encontró un descenso dependiente de la dosis de las cifras de presión arterial. Al administrar 20 mg se obtuvo un descenso del 7,5% en las cifras de presión arterial diastólica y del 18% en las cifras de presión arterial sistólica14. Este descenso dependiente de la dosis se aprecia también en enfermos con hipertensión arterial15. Kishi et al16 administraron nicardipino en bolo a 14 enfermos anestesiados para cirugía vascular, y encontraron que dosis de 0,5 mg producen un descenso de la presión arterial sistémica de aproximadamente el 17%. Dosis de 1 y 2 mg producen un descenso aproximado de presión arterial sistólica y diastólica del 35%. El máximo efecto fue observado 2,5 min después de la administración, y la duración del efecto fue de 7 min después de 0,5 mg, de 19 min después de 1 mg y de 23 min después de 2 mg. La administración en bolo ha sido utilizada con eficacia en enfermos sometidos a cirugía cardíaca, obteniéndose descensos de 32-36 mmHg en la presión arterial sistólica y de 21-24 mmHg en la presión arterial media tras la administración de 0,5-1 mg17. La disminución de presión observada en enfermos con cardiopatía isquémica crónica (insuficiencia cardíaca izquierda o angina estable) varía del 16 al 36% con un rango de dosis de 5 a 10 mg18. Efectos sobre la frecuencia cardíaca Se han publicado aumentos de frecuencia cardíaca de 10 a 20 lat/min tras la administración de nicardipino por vía intravenosa. Este aumento de la frecuencia cardíaca se atribuye a un estímulo simpático reflejo a la caída de las resistencias vasculares sistémicas19,20. Éste parece ser más evidente en pacientes despiertos que en pacientes anestesiados debido a la abolición parcial de la respuesta simpática en enfermos bajo anestesia general21. En pacientes con enfermedad coronaria se puede observar un aumento de la frecuencia cardíaca del 13 al 26% tras la administración de nicardipino por vía intravenosa22. Efectos sobre otros parámetros hemodinámicos La administración intravenosa de nicardipino se ha demostrado que aumenta el índice cardíaco tanto en voluntarios sanos como en pacientes sometidos a diferentes cirugías. Esta acción se atribuye a un descenso en las resistencias vasculares sistémicas. La relación entre el aumento del índice cardíaco y la reducción de las resistencias vasculares sugiere que la reducción de la poscarga del ventrículo izquierdo podría ser la responsable de la mejoría en la función contráctil ventricular23. Estos mismos resultados se han observado en enfermos con cardiopatía isquémica24. Nicardipino parece tener un efecto beneficioso en pacientes con disfunción moderada o grave del ventrículo izquierdo25. La administración intracoronaria de nicardipino no empeora la función contráctil del ventrículo izquierdo en enfermos coronarios a diferencia de otros antagonistas del calcio (tabla II), como nifedipino, que son claramente cardiodepresores. Sin embargo, existen también estudios que atribuyen a nicardipino un ligero efecto cardiodepresor26. Cuando se analiza su efecto sobre el lecho vascular pulmonar y se compara con otros vasodilatadores se concluye que nitroglicerina presenta mayor poder vasodilatador sobre el lecho vascular pulmonar, disminuyendo las resistencias vasculares pulmonares en mayor proporción que nicardipino o nitroprusiato sódico27. Por otra parte, su administración simultá73 Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. Vol. 48, Núm. 2, 2001 TABLA III Efectos electrofisiológicos de los antagonistas del Ca+ Parámetro Nicardipino Nifedipino Intervalo R-R Intervalo QRS Intervalo P-R PRE auricular PRE del NAV PRF del NAV PRE His-Purkinje Tiempo de recuperación SA – 0 – ↑↓ ↑↓ ↑↓ – ↑↓ ↓ 0 0 0 ↑↓ ↑↓ 0 0 Diltiazem Verapamilo ↑↓ 0 ↑ 0 ↑ ↑ 0 0 ↑↓ 0 ↑ 0 ↑↑ ↑↑ ↑↓ 0 0: sin efecto; ↓: descenso; ↑: aumento; ↑↓: efecto variable; PRE: período refractario efectivo; PRF: período refractario funcional. nea junto a bloqueadores beta parece tener también un efecto beneficioso ya que contrarresta el aumento de las resistencias vasculares y los efectos cardiodepresores de los segundos, incluso en enfermos con cardiopatía isquémica28,29. Nicardipino es también un importante vasodilatador coronario como lo demuestra el aumento del flujo coronario y el descenso de las resistencias vasculares coronarias en pacientes con cardiopatía isquémica. Produce un descenso en la producción de lactato en el seno coronario en pacientes con angina, mejorando por tanto la perfusión y el metabolismo aeróbico en pacientes con isquemia crónica30. La administración intracoronaria en pacientes sometidos a angioplastia reduce la producción y acelera la extracción de lactato, lo que indica cierto efecto protector miocárdico del fármaco en cuestión31. Los efectos hemodinámicos de nicardipino fueron comparados con verapamilo, y se observó que ambos fármacos disminuían la presión arterial y las resistencias vasculares sistémicas; sin embargo, las presiones de llenado del ventrículo izquierdo eran mayores con verapamilo que con nicardipino32. Efectos electrofisiológicos Los efectos más significativos de los antagonistas del calcio ocurren sobre el nodo sinusal y el nodo auriculoventricular. Estudios experimentales realizados en humanos sugieren que nifedipino y nicardipino presentan efectos similares y diferentes de verapamilo y diltiazem33. En un estudio electrofisiológico que incluía a 26 pacientes con diferentes tipos de trastornos del ritmo se observó que la administración de 0,02 mg/kg por vía intravenosa producía los siguientes efectos: a) ausencia de cambios en período refractario auricular y ventricular, y b) acortamiento significativo en el tiempo de recuperación del nodo sinusal, período refractario efectivo y período refractario funcional del nodo auriculoventricular34 (tabla III). Existe la posibilidad de que alguno de los efectos de nicardipino sobre el sistema de conducción cardíaco sea enmascarado por el potente efecto vasodilatador y el aumento en el tono reflejo simpático que produce el propio fármaco. Efectos intracraneales En condiciones normales la concentración de calcio intracelular (10–7) es muy inferior a la extracelular (10–3). Ello es Descenso del flujo sanguíneo cerebral Respiración anaerobia Aumento de lactato Descenso pH Cadena isquémica Despolarización de la membrana (canales voltaje-dependientes) Liberación de neurotransmisores (ácido glutámico y noradrenalina) Lugar de acción de nicardipino Entrada de calcio Activación de canales receptor-dependientes 74 Fig. 4. Mecanismo de lesión neuronal isquémica. Lugar de actuación de las dihidropiridinas. L.E. MUÑOZ ALAMEDA Y M. BARCINA SÁNCHEZ.– Nicardipino intravenoso: un nuevo antagonista del calcio para uso perioperatorio el resultado de tres mecanismos: el intercambiador Na+ –Ca2+ , la ATPasa dependiente de Ca2+ y la captación de calcio en estructuras intracelulares como retículo endoplásmico liso o mitocondria. Durante la isquemia neuronal, el calcio extracelular pasa al interior de la célula como consecuencia de la apertura de los canales dependientes del voltaje. El aumento del calcio intracelular disminuye los valores de ATP y activa el sistema ATPasa dependiente de Ca2 + que producirá un mayor descenso de los valores de ATP. Dicha disminución conducirá a la inhibición de la ATPasa dependiente de Na+/K+ y consecuentemente se producirá una mayor entrada de calcio en la célula por fallo en el intercambio iónico. Por otra parte, se producirá una liberación del calcio presente en la mitocondria y el retículo endoplásmico liso al espacio libre intracelular. Se ha descrito que el calcio entra en las células a través de dos tipos de canales: los dependientes del voltaje y los dependientes del receptor. Mientras los primeros responden a cambios de voltaje, los segundos lo hacen a cambios químicos. Durante la primera fase de la isquemia al producirse cambios en el potencial de membrana actuarán los primeros mientras que los segundos se activan con la liberación de neurotransmisores, principalmente ácido glutámico (fig. 4). El movimiento de calcio durante la isquemia neuronal es el motivo que justifica la utilización de antagonistas del calcio aunque no debe olvidarse que estos fármacos sólo actúan sobre los canales dependientes del voltaje. La neuroprotección que ejercen los antagonistas del calcio se produce durante la fase reversible de la isquemia, por lo que la eficacia de este tratamiento se relaciona con la precocidad de su instauración. Aunque existen numerosas publicaciones que demuestran la eficacia de los antagonistas del calcio35, principalmente nimodipino y nicardipino36, durante la isquemia cerebral aguda no ha de olvidarse que el aumento del flujo sanguíneo cerebral viene acompañado de un aumento de presión de líquido cefalorraquídeo37 y, consecuentemente, de la presión intracraneal38, lo que sumado al efecto hipotensor de estos fármacos va a disminuir la presión de perfusión cerebral, que puede convertirse en un efecto adverso importante de este grupo de fármacos en algunas situaciones concretas. Aplicaciones en anestesia clínica Debido a sus propiedades vasodilatadoras, nicardipino podría sustituir a diferentes fármacos utilizados en la actualidad como nitroprusiato sódico, nitroglicerina, nifedipino sublingual, urapidilo, esmolol y otros. En la tabla IV se muestran algunos posibles efectos terapéuticos de nicardipino tanto en el período intraoperatorio como en el postoperatorio. Hipertensión postoperatoria La hipertensión en el período postoperatorio inmediato es una complicación que aparece con incidencia variable y puede alcanzar el 75% según las series39. Las causas son va- TABLA IV Posibles efectos terapéuticos de nicardipino 1. Control de hipertensión postoperatoria 2. Control de hipertensión en pacientes diagnosticados de feocromocitoma 3. Disminuir los efectos hemodinámicos de la laringoscopia 4. Hipotensión controlada 5. Prevención y tratamiento del vasospasmos cerebral tras hemorragia subaracnoidea 6. Reducción de la poscarga ventricular 7. Tratamiento de la toxicidad por anestésicos locales 8. Protección miocárdica durante la derivación cardiopulmonar 9. Preservación de la función neuronal posterior a la hipoxia cerebral TABLA V Diferentes fármacos antihipertensivos Vasodilatadores venosos Vasodilatadores arteriales Antagonistas del calcio Bloqueadores beta Antagonistas 5HT2 Mecanismo de acción híbrido Nitroglicerina Nitroprusiato sódico Nicardipino y nifedipino Labetalol, esmolol Ketanserina Urapidilo riadas e incluyen dolor postoperatorio, ansiedad, elevación de catecolaminas endógenas, disfunciones del sistema renina-angiotensina, etc. Existen diferentes fármacos y con distintos mecanismos de acción (tabla V) utilizados para su tratamiento. Las características del antihipertensivo ideal en el período intraoperatorio son: titulación sencilla, ha de ser factible su administración por vía intravenosa, rápido inicio de acción y vida media corta. Halpern et al40 evaluaron la eficacia de nicardipino para el tratamiento de hipertensión en el postoperatorio comparando nicardipino con placebo y comprobaron la eficacia del mismo. Posteriormente el mismo autor comparó la eficacia de nicardipino con nitroprusiato sódico41. No hubo diferencias significativas en la respuesta al tratamiento (el 86% respondió a nicardipino y el 88% a nitroprusiato). Sin embargo, sí hubo diferencias en la rapidez de acción (14 ± 1 min en el nicardipino frente a 30,4 ± 3,5 min en el nitroprusiato). En cuanto a los efectos secundarios observados apareció un caso de taquicardia supraventricular en el grupo del nitroprusiato y 2 casos de taquicardia sinusal en el grupo del nicardipino. Vecht et al42 distribuyeron aleatoriamente a 20 pacientes que recibieron nicardipino o nitroglicerina para control de presión arterial tras ser sometidos a cirugía cardíaca. La infusión comenzó en el quirófano y fue mantenida hasta 20 h del postoperatorio manteniendo la presión arterial sistólica por debajo de 110 mmHg. Se registraron las medidas de presión arterial sistólica que fueron mayores de 110 mmHg y se observó que este número era superior en enfermos tratados con nitroglicerina. Además, 5 pacientes del grupo de nitroglicerina presentaron cifras mayores de 120 mmHg y tres de estos pacientes necesitaron añadir nitroprusiato sódico a su tratamiento para conseguir controlar las cifras de presión arterial. Con estos resultados los auto75 Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. Vol. 48, Núm. 2, 2001 res concluyen que nicardipino es más eficaz que nitroglicerina para controlar la hipertensión arterial en enfermos sometidos a cirugía de revascularización coronaria y además presenta un efecto inotrópico positivo que no aparece con nitroglicerina. Hipertensión intraoperatoria Durante el período intraoperatorio existen diferentes situaciones en las que puede ser necesario un control estricto de las cifras de presión arterial. Nicardipino ha sido utilizado para el tratamiento de la hipertensión arterial intraoperatoria en diferentes procesos quirúrgicos y con diferentes técnicas anestésicas, demostrando su eficacia para controlar las elevaciones de la presión arterial presentando además ciertas ventajas con respecto a otros antihipertensivos. Wezel et al43 compararon nicardipino con nitroprusiato para tratar la hipertensión arterial en pacientes sometidos a revascularización coronaria. Dividieron una muestra de 120 pacientes en tres grupos: control, nicardipino (ritmo inicial 3 µg/kg/min) y nitroprusiato sódico (ritmo inicial 1 µg/kg/min). Las infusiones fueron ajustadas hasta obtener un descenso del 20% del valor inicial. Los requerimientos fueron 2,9 ± 0,9 µg/kg/min para nicardipino y 1,7 ± 0,5 µg/kg/min para nitroprusiato. Con excepción de la taquicardia refleja que apareció en un 30% de los pacientes tratados con nitroprusiato, el resto de los parámetros hemodinámicos no evidenciaron diferencias entre ambos tratamientos. La administración de nicardipino en bolos también ha resultado eficaz en el control de la hipertensión en enfermos bajo anestesia general para diferentes intervenciones de cirugía cardiovascular16. Nicardipino ha demostrado su eficacia en el control de hipertensión arterial también en cirugía no cardíaca44,45. Goto et al46 evaluaron su eficacia en 32 pacientes sometidos a gastrectomía. En este trabajo los autores demostraron un aumento del flujo urinario en pacientes tratados con nicardipino y un aumento en la excreción de fosfatos, lo que sugiere efecto del fármaco en el túbulo proximal. Existen diferentes estudios que demuestran la eficacia de nicardipino para controlar la hipertensión arterial que se produce durante el tratamiento quirúrgico del feocromocitoma47-49. Proye et al50 publicaron su experiencia con nicardipino realizando la premedicación con nicardipino por vía oral (60-120 mg/día) durante los 8 días previos a la extirpación quirúrgica del feocromocitoma. Durante la cirugía se administraron 2,5-7,5 µg/kg/min por vía intravenosa. Con estas dosis las cifras de presión arterial fueron controladas sin añadir otros fármacos hipotensores. Los autores postularon que nicardipino podía inhibir la liberación de catecolaminas por parte del tumor. Esta afirmación se basa en que la liberación de catecolaminas por parte de las terminaciones nerviosas simpáticas requieren calcio y, por tanto, los antagonistas del Ca2 + inhiben la liberación por parte de la médula adrenal. Sin embargo y a pesar de que el control de las cifras de presión arterial eran adecuadas, se comprobó que durante la manipulación quirúrgica los valores de catecolaminas circulantes aumentaban, por lo que finalmente se sugirió que las propiedades hipotensoras de nicardipino se deben a su acción vasodilatadora y no al descenso de los valores de catecolaminas. 76 Crisis hipertensivas La elevación brusca de las cifras de presión arterial sistólica y/o diastólica es una situación grave que amenaza el correcto funcionamiento de determinados órganos diana51 (corazón, cerebro o riñón) y que requiere medidas terapéuticas inmediatas. Nicardipino ha demostrado ser una alternativa a los tratamientos clásicos como nitroglicerina, nitroprusiato, labetalol, esmolol, diazóxido o urapidilo en este tipo de situaciones tanto en pacientes adultos52 como en niños53-55. Hipotensión controlada El descenso controlado de las cifras de presión arterial sin llegar a límites que comprometan la perfusión de órganos vitales es una técnica anestésica utilizada con el fin de disminuir las pérdidas sanguíneas durante la cirugía y las necesidades de transfundir hemoderivados. Bernard et al56 compararon la eficacia de nicardipino frente a nitroprusiato sódico en 24 pacientes sometidos a recambio de cadera, observando que ambos eran igualmente eficaces y las pérdidas de sangre fueron similares; sin embargo el tiempo de recuperación de las cifras basales fue mayor con nicardipino. Estos mismos autores repitieron un estudio similar en pacientes sometidos a fijación vertebral obteniendo los mismos resultados57. La eficacia de nicardipino en este campo de acción ha quedado demostrada también en diferentes procesos de cirugía maxilofacial y ortopedia pediátrica58,59. Protección miocárdica El efecto beneficioso sobre miocardio que ejercen los antagonistas del calcio se basa en algunas de sus propiedades farmacológicas: aumento del aporte de oxígeno60, disminución del consumo de oxígeno, efecto antiarrítmico (principalmente verapamilo y diltiazem), mejoría del metabolismo del miocardio61, efecto antiagregante plaquetario62, efecto antihipertensivo y dudosas propiedades antiaterogénicas63. La administración intravenosa de nicardipino, ya sea en perfusión continua o en bolo, produce un aumento en el gasto cardíaco64 y una disminución del número y la intensidad de los episodios de isquemia perioperatoria comparado con nitroglicerina65,66. Koolen et al67 administraron nicardipino por vía intravenosa previo al pinzamiento aórtico en pacientes sometidos a cirugía de revascularización coronaria y valoraron sus efectos midiendo parámetros hemodinámicos coronarios, parámetros metabólicos miocárdicos y función ventricular mediante ecocardiografía transesofágica. Mientras que no apreciaron diferencias en pacientes con función sistólica normal antes de la circulación extracorpórea sí observaron una mejoría en los enfermos con función ventricular alterada y que recibieron nicardipino. No hubo diferencias en el flujo sanguíneo en seno coronario, en las resistencias vasculares coronarias ni en el consumo de oxígeno miocárdico, tampoco en el número de pacientes que requirieron soporte ionotrópico ni en valores postoperatorios de CPK, número de infartos, arritmias o mortalidad. L.E. MUÑOZ ALAMEDA Y M. BARCINA SÁNCHEZ.– Nicardipino intravenoso: un nuevo antagonista del calcio para uso perioperatorio Hanet et al68 evaluaron el efecto protector del nicardipino intracoronario durante la angioplastia transluminal percutánea. Se obtuvieron valores de lactato miocárdico como marcador de glucólisis anaerobia, hipoxantina como marcador del descenso de valores energéticos en forma de ATP y eicosanoides antes y después del inflado del balón. Tras la administración de nicardipino (0,2 mg) en la arteria coronaria distal al lugar de inflado del balón se observó que los casos en los que se administró nicardipino las concentraciones de lactato y de hipoxantina eran menores a pesar de no haber diferencias en el flujo sanguíneo coronario. Aunque el mecanismo protector miocárdico exacto no se conoce, sí que se ha demostrado que los antagonistas del calcio, y entre ellos nicardipino, reducen la isquemia durante la angioplastia, disminuyen la lesión por reperfusión69 y a largo plazo pueden disminuir la incidencia de reestenosis70, aunque son necesarios nuevos estudios para confirmar estos datos71. Mori et al72 evaluaron el posible efecto protector de nicardipino en cirugía cardíaca pediátrica. Estos autores añadieron nicardipino a la solución cardiopléjica. El estudio incluyó 33 pacientes de los cuales 13 recibieron solución cardiopléjica con potasio y otros 20 que recibieron solución cardiopléjica clásica a la que se añadió nicardipino (0,25 mg/l). El índice cardíaco medido por termodilución fue significativamente mayor en las primeras 24 h del postoperatorio en pacientes que recibieron nicardipino. Fue también significativo el descenso en cifras de presión capilar pulmonar en pacientes tratados con nicardipino, lo mismo ocurrió con los valores de CPK medidos en el postoperatorio. Neuroanestesia y vasospasmo cerebral El potente efecto vasodilatador de los antagonistas del calcio, y más concretamente nimodipino y nicardipino, hace que tengan un papel importante en el tratamiento del espasmo vascular cerebral siguiente a la hemorragia subaracnoidea73,74 y al traumatismo craneoencefálico75, disminuyendo la lesión cerebral y la incidencia de infartos cerebrales. Ha sido empleado con buenos resultados en el control de la presión arterial durante cirugía de aneurismas cerebrales permitiendo un buen control hemodinámico y una mejora en el flujo sanguíneo cerebral76-78. La infusión intracarotídea de 1 µg/kg/min durante 10 min a 9 pacientes normotensos con hemorragia subaracnoidea a las 48 h de la hemorragia resultó en un incremento del diámetro de la arteria carótida y del flujo sanguíneo telediastólico sin modificaciones significativas en los parámetros hemodinámicos79. Atenuación de la respuesta adrenérgica a la laringoscopia e intubación La respuesta hiperdinámica que acompaña a la laringoscopia y a la intubación y que se presenta como hipertensión arterial y taquicardia puede aumentar la morbilidad e incluso la mortalidad de enfermos con cierto compromiso en su función cardiovascular, por lo que en los últimos años se han administrado diferentes fármacos para abolir o dismi- nuir esta respuesta; entre éstos están fentanilo80, esmolol81, nitroprusiato sódico82, lidocaína83 y más recientemente antagonistas del calcio como verapamilo84 o diltiazem85. Nicardipino ha demostrado ser eficaz en disminuir de modo significativo esta respuesta86. Cuando se compara con algunos de los fármacos utilizados habitualmente se puede comprobar su eficacia aunque presenta como inconveniente la taquicardia refleja que produce87. Atlee demostró, cuando lo comparó con esmolol y con la combinación de ambos, que ni esmolol ni nicardipino por sí solos son capaces de controlar la respuesta hipertensiva mientras que sí lo es la combinación de ambos88. Otras aplicaciones A medida que avanza la experiencia con nicardipino surgen nuevas aplicaciones e indicaciones del fármaco. Una de éstas puede ser la prevención de toxicidad cardíaca por anestésicos locales. Matsuda et al89 evaluaron los efectos cardioprotectores de nicardipino en un modelo animal al que administraban bupivacaina intravenosa. Se estudió una muestra de 30 ratas que se dividió en dos grupos; al primero se le administraron 30 µg/kg de nicardipino antes de la administración de 5 mg/kg de bupivacaína y al segundo solamente 5 mg/kg del mismo anestésico local. En el primer grupo la supervivencia fue del 86% y en el segundo, del 26%. La administración de nicardipino directamente en la arteria pulmonar ha sido utilizada para tratar el edema agudo de pulmón aparecido durante la cateterización cardíaca. El mecanismo parece ser la rápida reducción de la precarga y poscarga ventriculares y el aumento del gasto cardíaco en enfermos con mala función sistólica del ventrículo izquierdo90. La utilización de la arteria radial para la revascularización coronaria requiere la administración de un fármaco que evite el espasmo arterial. Nicardipino parece ser una alternativa a la utilización clásica de nifedipino90. Interacciones con otros fármacos anestésicos Las interacciones entre los diferentes agentes anestésicos y los antagonistas del calcio son poco conocidas a pesar de que cada día son sometidos a procesos quirúrgicos más pacientes que están en tratamiento con estos fármacos ya sea de modo agudo o crónico. Parece que las alteraciones que producen los agentes anestésicos sobre el calcio intracelular son las responsables de sus efectos hemodinámicos. Éste es el mecanismo teórico por el que ambos grupos de fármacos actúan de manera sinérgica91-93. Los efectos producidos por nicardipino también varían dependiendo del anestésico que se esté utilizando. Si bien no se han realizado estudios con propofol, sí que existe una clara interacción con los anestésicos inhalatorios. Se ha comprobado cuando se comparan diferentes gases anestésicos que los descensos de la presión arterial son mayores con sevoflurano que con isoflurano; sin embargo, la duración de estos descensos, la taquicardia refleja y el aumento en los valores de catecolaminas plasmáticas es mayor con isoflurano94. 77 Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. Vol. 48, Núm. 2, 2001 Las necesidades de relajantes neuromusculares no despolarizantes y despolarizantes está disminuida en pacientes que están siendo tratados con antagonistas del calcio95-97. Además, el inicio de acción de los primeros parece ser más rápido cuando se administra nicardipino intravenoso98. Esta potenciación de los bloqueadores neuromusculares no parece producirse, sin embargo, en pacientes que son sometidos a tratamiento crónico con antagonistas del calcio99. Efectos secundarios Los efectos secundarios más frecuentes son los descritos para el resto de antagonistas del calcio: cefaleas, náuseas, rubefacción facial, hipotensión, taquicardia refleja, edemas maleolares en tratamientos prolongados y flebitis en el lugar de administración cuando la infusión se mantiene aproximadamente 12 h o más. Debido a su efecto vasodilatador va a producir inhibición de la vasoconstricción pulmonar hipóxica produciendo un aumento del shunt intrapulmonar que puede dificultar la oxigenación en enfermos con patología pulmonar previa. Ha de utilizarse con precaución en pacientes neurológicos o neuroquirúrgicos con alteraciones de la compliancia intracraneal, ya que producen un aumento de la presión intracraneal que sumado a su efecto hipotensor disminuirá la presión de perfusión cerebral. BIBLIOGRAFÍA 1. Tobias JD. Nicardipine: applications in anesthesia practice. J Clin Anesth 1995; 7: 525-533. 2. Levy JH. The ideal agent for perioperative hypertension and potential cytoprotective effects. Acta Anaesthesiol Scand 1993; 99 (Supl): 2025. 3. Lambert CR, Grady T, Hasimi W, Blakely M, Panayioutou H. Haemodynamic and angiographic comparison of intravenous nitroglycerin and nicardipine mainly in subjects without coronary artery disease. Am J Cardiol 1993; 71: 420-423. 4. 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