Contrapoder sindical Etnografía, crítica e investigación aplicada en las organizaciones sindicales - Beltrán Roca Martínez - (c) Beltrán Roca Martínez, 2013 (c) Fundación Anselmo Lorenzo, 2013 Maquetación: Marcel S.C. Portada: Marcel S.C., sobre una idea de Enrique López Marín Fundación de Estudios Libertarios Anselmo Lorenzo C/Peñuelas, 41 28005 Madrid ESPAÑA [email protected] http://www.fal.cnt.es/ twitter: @FAnselmoLorenzo Primera edición: noviembre de 2013 ISBN: 978-84-86864-40-8 Depósito Legal: M-30739-2013 ÍNDICE Introducción: etnografí�a, crí�tica y sindicalismo 9 Capítulo I. Poder y representatividad sindical Preámbulo: las Sección Sindical en la el ordenamiento jurí�dica de España Representatividad sindical en Europa: tres grandes modelos El sistema sindical español Cambiar las “reglas del juego” 15 18 21 29 Capítulo II. Desmovilización y sindicalismo de Estado: etnografía de un conflicto sindical Preámbulo Democracia y sociedad civil Etnografí�a de una lucha sindical Reunión con el Sindicato Provincial de Trabajadores de la Salud Reunión de la Comisión Permanente de la Sección Sindical Asamblea de Trabajadores convocada por el Sindicato Provincial Las movilizaciones pro-Bolsa Asamblea del 11 de marzo de 1997 Encierro de delegados en la sede del SAS Gobernabilidad democrática y sindicalismo de Estado Repensando las relaciones democracia-sociedad civil 33 36 39 39 41 45 48 49 50 55 61 Capítulo III. Sindicalismo, acción directa y cambio social Una mañana de huelga Unos papelillos de nada: el sentido de la acción directa Polí�tica prefigurativa y sindicalismo de oposición 63 70 74 Capítulo IV: ¿Ley de hierro de la oligarquía? Posibilidades para la revitalización del sindicalismo combativo La ley de hierro de la oligarquí�a Ofensiva al sindicalismo Una imagen de los sindicatos muy negativa Sindicalismo de oposición y revitalización sindical Algunas propuestas para el sindicalismo combativo 81 85 88 98 100 Abreviaturas y siglas 113 Bibliografía 107 Beltrán Roca Martínez INTRODUCCIÓN: ETNOGRAFÍA, CRÍTICA Y SINDICALISMO E n los últimos años, el estudio del sindicalismo ha sido visto como algo propio de tiempos pasados. La influencia de las ideas neoliberales, los cambios en la estructura productiva y el mercado de trabajo, la globalización y el paso a una sociedad postindustrial, son factores que hacen que muchas personas perciban a los sindicatos como supervivientes dinosaurios del pasado que poco a poco van perdiendo relevancia social. Sin embargo, la realidad desmiente una y otra vez esta creencia. Huelgas generales, movilizaciones masivas, conflictos laborales y acciones directas espectaculares como las expropiaciones de supermercados del SAT en Andalucí�a, reflejan la centralidad del trabajo y el importante papel social del movimiento sindical. La vigencia del sindicalismo se refleja en las ampollas que aún levanta. Puede decirse, sin temor a equivocaciones, que existe en la actualidad una fuerte ofensiva social hacia los sindicatos utilizando los medios de comunicación de masas. Una crí�tica muy frecuente se refiere a la falta de representatividad de los sindicatos. Se critica, no sin parte de razón, la baja tasa de afiliación —algo fomentado por la importancia que la ley confiere a las elecciones sindicales como elemento legitimador y la alta cobertura de la negociación colectiva—. Relacionado con lo anterior, se cuestiona que numerosos sectores sociales no están representados por los sindicatos: trabajadores precarios, parados, autónomos, empleados en pequeñas y medianas empresas, etc. Así�, los enemigos del sindicalismo insisten en que las organizaciones sindicales defienden los intereses de una minorí�a de la población. A esto hay que contestar que mediante la concertación social los sindicatos han renunciado a mejoras laborales a cambio de polí�ticas sociales que protegieran a parados, pensionistas Otra crí�tica va dirigida a la ideologí�a que inspira a los sindicatos. Según sus crí�ticos, el socialismo y la lucha de clases son algo obsoleto. Alegan que 9 Contrapoder sindical nos encontramos en una etapa del capitalismo en que las contradicciones de clase han desaparecido y los intereses entre empleados y empleadores prácticamente confluyen. La hegemoní�a del dogma neoliberal contribuye a difundir este tipo de visiones a lo largo del cuerpo social, incluso en personas pertenecientes a clases subalternas. También se cuestiona la alta dependencia respecto a las subvenciones del estado. La base de la crí�tica de los medios de comunicación, no se centra en la falta de independencia respecto a los poderes públicos, sino en el alto coste que tiene para los contribuyentes mantener el ingente entramado sindical. Se ignora, por desconocimiento o deliberadamente, hacer referencia al alto coste que también supone en edificios, subvenciones y liberaciones las organizaciones empresariales. El problema de los fondos conecta con las denuncias de corrupción. Desde los medios de comunicación se está creando una imagen del sindicalista como persona corrupta, que utiliza el sindicato como vehí�culo para el enriquecimiento personal y que a menudo recurre a prácticas ilegales. Los frecuentes escándalos de corrupción a través de EREs fraudulentos y cursos de formación con financiación pública, que salen a la luz (no todos, por supuesto, ciertos), contribuyen a crear esta imagen. Otras criticas apuntan a que los sindicatos carecen de democracia interna o que actúan como correa de transmisión de determinados partidos polí�ticos. Hay algo de cierto en todas estas crí�ticas, sin embargo es necesario hacer algunas apreciaciones. En primer lugar, no se pueden extender estas crí�ticas a todos los sindicatos. Hay sindicatos alternativos que no reciben subvenciones y sindicatos en los que las subvenciones son sólo una parte pequeña de sus ingresos. La mayor parte de estas crí�ticas no son extensibles a los sindicatos combativos, minoritarios. En segundo lugar, en muchas ocasiones no serí�a justo aplicar estas crí�ticas a las bases de los sindicatos mayoritarios. Existen decenas de miles de sindicalistas honestos en España que no merecen muchas de las crí�ticas que los medios de comunicación difunden irresponsablemente. Puede decirse, en definitiva, que la mayor parte de las crí�ticas sólo pueden atribuirse a las cúpulas y estructuras de los sindicatos mayoritarios (y a aquellos minoritarios que emulan a los mayoritarios), pues existen otras maneras de hacer sindicalismo. La creencia en la gradual desarticulación del movimiento sindical es responsable de que su estudio no se encuentre en la actualidad entre las prioridades de muchas instituciones dedicadas a la investigación. En esto tiene que ver las perspectivas de análisis que se han aplicado. El estudio 10 Beltrán Roca Martínez del sindicalismo se ha hecho predominantemente desde dos enfoques. Por un lado, la mayor parte de los estudios se realizan desde el ámbito del derecho. Se reflexiona, por ejemplo, sobre las consecuencias de tal o cual marco legislativo sobre el mundo del trabajo. Por otro lado, una parte de las investigaciones se han realizado desde la sociologí�a o la ciencia polí�tica. El enfoque que ha predominado en éstas ha priorizado el sindicato como agente polí�tico, como grupo de presión, que actúa a favor o en contra de determinadas polí�ticas públicas. Como Anza (2011) ha puesto de manifiesto, desde estos enfoques se llega a la misma conclusión: la globalización conlleva la pérdida de poder social de los sindicatos. A pesar de ello, las personas y las organizaciones no estamos determinadas por los contextos sociales. A través de una perspectiva metodológica que se centre en el estudio interno de las organizaciones sindicales y sus prácticas, será posible encontrar sus fortalezas y debilidades. Reconocer qué funciona y qué no funciona, y formular sugerencias para potenciar el poder social de los sindicatos. La etnografí�a puede ser una buena herramienta para dicha empresa. Muy pocos antropólogos, sin embargo, han situado sus lentes sobre las organizaciones sindicales. Entre las pocas obras publicadas podemos encontrar la tesis doctoral de Félix Talego (1996) sobre el proceso polí�tico de Marinaleda impulsado por el SOC; el libro de Fernando Ventura (2004) desgranando el sistema sindical español a partir de la etnografí�a de unas elecciones sindicales en el Hospital Universitario Virgen del Rocí�o de Sevilla; o el estudio en el que participé sobre el papel del movimiento sindical en el astillero de Puerto Real durante la segunda reconversión industrial a mediados de los años ochenta del pasado siglo (Florido, Gutiérrez y Roca, 2009). Pensamos que el estudio del movimiento sindical desde la antropologí�a aún no ha dado los frutos que puede dar. Ese es precisamente el objetivo de este trabajo. Este libro pretende conectar la aproximación antropológica con la reflexión polí�tica y la investigación aplicada al sindicalismo. No se trata de estudiar los sindicatos desde una perspectiva meramente académica, sino de hacerlo para ofrecer claves para la teorización y la acción polí�tica y sindical. El objetivo último es encontrar las claves que permitan al sindicalismo de oposición ocupar un lugar destacado dentro del mundo del trabajo. Así�, el autor no escribe desde una torre de marfil, desde un despacho universitario que permanece indemne a lo que ocurre en el exterior. Se escribe desde el doble rol de investigador y sindicalista. Desde la convicción de que es preciso cambiar muchas cosas en el movimiento sindical, romper con ciertas “reglas del juego”, para regenerar 11 Contrapoder sindical un sindicalismo de oposición, un sindicalismo capaz de transformar las estructuras sociales que generan la injusticia. El libro está dividido en cuatro capí�tulos e incluye tanto capí�tulos inéditos como revisiones de textos publicados entre 2009 y 2012 en varias revistas cientí�ficas. El primer capí�tulo, “Poder y representatividad sindical”, es una versión revisada de un artí�culo titulado “Representatividad y poder sindical. Elementos para el debate” publicado en 2012 en el número dos de la revista Estudios. Este capí�tulo analiza el sistema español de relaciones laborales comparándolo con otros modelos existentes en Europa. Ofrece, además, diversas reflexiones sobre la necesidad y las posibilidades de cambiar las “reglas del juego” para potenciar las secciones sindicales y el sindicalismo combativo. El segundo capí�tulo, “Desmovilización y sindicalismo de Estado: etnografí�a de un conflicto sindical”, es una versión actualizada de un artí�culo escrito con Fernando Ventura Calderón y publicado en 2009 en una obra colectiva titulada Contemporary Studies in Ethnography. En él se incluye una descripción etnográfica muy detallada de un conflicto sindical en un hospital de Sevilla. La etnografí�a se utiliza para analizar el papel desmovilizador del “sindicalismo de Estado”, un sindicalismo, como veremos, basado en elecciones sindicales y subvenciones estatales. Este tipo de sindicalismo, se argumentará, es el resultado de los procesos polí�ticos y sociales ligados a la Transición en España, y tiene el efecto de producir una determinada forma de gobernabilidad y de relación entre el estado y la sociedad civil. El tercer capí�tulo se titula “Sindicalismo, acción directa y cambio social”. Es una versión revisada de un artí�culo publicado en 2009 en el número de la revista Nómadas bajo el tí�tulo “Acción directa y sindicalismo. Una etnografí�a de combate”. En esta parte describimos un conflicto sindical protagonizado por el sindicato CNT. Se utiliza la etnografí�a para teorizar sobre las caracterí�sticas del sindicalismo de acción directa, aplicando conceptos provenientes del estudio de los nuevos movimientos sociales, como el de “polí�tica prefigurativa” o “carnaval”. El cuarto y último capí�tulo, “¿Ley de hierro de la oligarquí�a? Posibilidades para la revitalización del sindicalismo combativo”, comienza explicando cómo las teorí�as de Michels sobre la oligarquí�a en las organizaciones sirven para explicar la crisis de legitimidad sindical. Posteriormente, se analizan la ofensiva mediática contra el movimiento sindical. El capí�tulo se detiene en examinar y desmontar muchas de las ideas erróneas y prejuiciosas que los medios de comunicación difunden sobre las organizaciones sindicales. A continuación se estudia la posición 12 Beltrán Roca Martínez del sindicalismo de oposición dentro del actual debate sobre revitalización sindical. Por último, se formulan una serie de propuestas generales que, se piensa, el sindicalismo combativo deberí�a tener en cuenta de cara a recobrar su papel y su poder social. Este trabajo no habrí�a sido posible sin la inestimable ayuda de Fernando Ventura, cuyas revisiones, sugerencias y, en ocasiones, entretenidos comentarios, han contribuido a la redacción de algunas partes. Además, es preciso tener en cuenta que él es coautor del segundo capí�tulo. También quisiera agradecer los conocimientos que mis maestros, Isidoro Moreno y Félix Talego, me han transmitido a largo de los años, algunos de las cuales han sido empleados para escribir este libro. A todos ellos va dedicado este trabajo. 13