HORMONAS SEXUALES MASCULINAS

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UNIDAD VII: Endocrinología
Capítulo 67:
HORMONAS SEXUALES MASCULINAS
Nelio E. Bazán
Es importante entender la fisiología endocrina, especialmente en lo que hace a las
hormonas sexuales masculinas, ya que son tremendamente influyentes sobre algunas
variables propias de la actividad deportiva. Estos conocimientos deberán combinarse
con esfuerzos educativos dirigidos a reducir la demanda de esteroides exógenos por los
deportistas, haciendo énfasis en alternativas al uso de esteroides anabólicos, tales como
entrenamiento, dieta y suplementos nutricionales adecuados. Será importante luchar por
inculcar un sentido de ética en los deportes de competencia y a la vez un control de
dopaje estrictos para disminuir el uso de esteroides en deportes de competencia.
Órganos sexuales masculinos
Espermatogénesis
Testosterona
Efectos fisiológicos
Esteroides anabólicos exógenos
Esteroides anabólicos en el deporte
Efectos secundarios de los esteroides anabólicos
ORGANOS SEXUALES MASCULINOS
El aparato genital masculino comprende a los genitales internos y externos. Los
genitales internos incluyen testículo, epidídimo, conducto deferente, vesículas
seminales, conducto eyaculador, próstata, uretra y glándulas bulbouretrales, mientras
que los genitales externos comprenden al escroto y al pene. Está formado por
estructuras canaliculares que van a dar origen al epidídimo, los
conductos deferentes, la vesícula seminal y otras estructuras que constituyen las vías
espermáticas, que terminan a nivel de la uretra, con la anexión de la glándula prostática
las glándulas bulbo-uretrales.
Figura 67.1: Aparato sexual masculino.
Los testículos son órganos ovoides, aplanados transversalmente, su producto de
secreción externa son los espermatozoides, celulas germinales (espermatogenesis) y su
producto de secreción interna son las hormonas masculinas, en especial la testosterona
(esteroidogenesis). Los testículos se desarrollan en la cavidad abdominal del embrión
masculino y, en el hombre, descienden a un saco externo, el escroto, llevando consigo
las estructuras de la pared anterolateral del abdomen y de las regiones profundas. El
testículo ingresa a la bolsa, en el noveno mes de la vida intrauterina, la hormona
responsable de esto, es la misma testosterona. La función del escroto consiste en
mantener a los testículos en un ambiente 2-3 °C más frío que la cavidad abdominal para
el normal desarrollo de los espermatozoides. Cada testículo esta subdividido en unos
250 lóbulos, cada unos de ellos con túbulos seminíferos enrollados, que constituyen el
80 % de la masa testicular. Las células intersticiales o de Leydig constituyen el
componente endocrino fundamental y su principal producto secretor es la testosterona.
Los túbulos seminíferos, compuestos de células de Sertoli y germinales, comprenden la
mayor parte de los testículos y producen 30 millones de espermatozoides por día
durante la vida reproductiva del varón.
Ambos componentes testiculares están interrelacionados y requieren un eje hipotálamo
hipofisario intacto, para el inicio y mantenimiento de sus funciones, además de varias
estructuras genitales accesorias para la maduración funcional y transporte de
espermatozoides.
El testículo es vascularizado por la arteria testicular, rama de la arteria espermática
interna, que se desprende de la cara anterior de la aorta abdominal y que va a ingresar,
junto con el cordón espermático hacia el polo testicular. También va a dar arterias que
llegan al epidídimo. Las venas en el testículo son satélites de las arterias, pero solo las
venas espermáticas tienen valor funcional por la secreción endocrina. Existe un plexo
anterior y otro posterior, el anterior drena, a derecha, en la cava inferior y a izquierda en
la vena renal. El grupo posterior es drenado por la vena epigástrica inferior. Los
conductillos seminíferos de un mismo lóbulo se reúnen en un solo conducto colector
corto y estrecho, que ocupa la parte superior del lóbulo. Los tubos rectos son los
conductos excretores de los lóbulos testiculares que drenan hacia una red anastomótica
de conductos. El epidídimo es una estructura canalicular que va a permitir la
maduración de los espermatozoides y se ubica sobre el borde póstero superior del
testículo y lo cruza. Testículo y epidídimo están íntimamente adheridos mediante
múltiples membranas de tejido conjuntivo que van a formar los conductillos eferentes
por donde van a salir los espermatozoides para introducirse en la cabeza del epidídimo.
Allí dan origen al conducto deferente que se ensancha para formar la ampolla del
conducto deferente inmediatamente antes de que el conducto penetre en el cuerpo de la
glándula prostática. El conducto deferente tiene por función la conducción del esperma,
dispone de una pobre vascularización, pero posee una rica inervación. Las arterias
provienen de la arteria deferencial y las venas emergen de sus paredes para llegar a las
venas testiculares del cordón o a las venas vesicoprostáticas en su porción terminal. El
deferente está formado por musculatura lisa, de modo que sus contracciones escapan a
la voluntad. La inervación es autónoma y proviene del plexo hipogástrico. Esto es un
detalle importante ya que el hombre puede regular el flujo urinario pero no el seminal,
así que una vez iniciada la eyaculación, no puede ser detenida.
A cada lado de la próstata se localizan las vesículas seminales que se vacían en el
extremo prostático de la ampolla y junto al contenido de la ampolla, pasan al conducto
eyaculador que atraviesa el cuerpo de la glándula prostática para desembocar en la
uretra interna, en estas se añade el liquido proveniente de los conductos prostáticos. Las
vesículas seminales son reservorios bilaterales de espermatozoides situados detrás de la
vejiga y por adelante del recto. Producen el líquido seminal que corresponde a una gran
parte de volumen en el semen. Los nervios provienen del plexo hipogástrico: ramas
mucosas, sensitivas, secretoras, ramas musculares motoras. Una vez producida la
eyaculación, hay espermatozoides que al no ser eyectados y no pasar a la uretra
prostática, retroceden a las vesículas seminales. En la eyaculación siguiente, esos
espermatozoides van a salir, y al pasar por la uretra prostática, se convierten en semen.
En la eyaculación, la primera eyección seminal es de espermatozoides que se van a
aplicar a las paredes del fondo de saco posterior, de manera tal de que los
espermatozoides siguientes, tengan menos probabilidades de ser fagocitados por
macrófagos en la vagina.
Figura 67.2: Vías espermáticas. Son las vías de excreción del
esperma testicular; se extienden de los conductillos seminíferos
a la uretra.
Los conductos eyaculadores se extienden desde la terminación de los deferentes y el
origen de las vesículas seminales, a la porción prostática de la uretra donde se forma el
semen. El conducto está constituido por una pared muscular lisa tapizada por una
mucosa.
El pene es el órgano copulador en el hombre, situado por debajo de la sínfisis pubiana,
arriba de las bolsas con las cuales constituye los genitales externos. Tiene propiedad
eréctil, lo que lo hace apto para sus funciones copuladoras gracias al tejido cavernoso
eréctil que constituye su armazón.
Su forma y dirección varían según esté en estado de flaccidez o en erección. En
erección, aumenta su volumen, se pone rígido y se eleva por delante del abdomen. Tiene
forma entonces de un prisma triangular cuyos bordes son redondeados. De los tres
bordes, dos son laterales y corresponden a los cuerpos cavernosos; el tercero, anterior,
tiene una forma semicilíndrica, determinada por el cuerpo esponjoso y la uretra, que
están por debajo. Los cuerpos cavernosos, derecho e izquierdo, son cilíndricos, y se
reúnen en la cara dorsal del pene bajo la sínfisis pubiana. En el surco dorsal transcurre
la vena dorsal profunda, la arteria y los nervios dorsales del pene. En el surco inferior,
mucho más amplio, se aloja el cuerpo esponjoso que contiene a la uretra.
Figura 67.3: Cuerpo esponjoso. Mecanismo fisiológico de compresión y cierre de las
venas responsables del drenaje de los cuerpos cavernosos. Estado de flaccidez, donde
se notan las lagunas vacías (imagen de la izquierda). Estado de erección, se observan las
lagunas llenas de sangre (imagen de la derecha).
Las venas profundas drenan los cuerpos eréctiles, formando la vena dorsal profunda: es
un voluminoso colector situado bajo la fascia profunda del pene, extendido de adelante
atrás, desde el glande hasta la raíz del pene. Pasa enseguida debajo del pubis y termina
en el espacio retropubiano, en el plexo vesicoprostático de Santorini. La erección
depende de ramas provenientes del plexo hipogástrico inferior, en el cual participan los
nervios esplácnicos pélvicos (nervio erector de Eckardt), elementos del parasimpático
pelviano.
Arco reflejo genital
En el varón el arco reflejo genital posee tres aspectos:
Erección
Eyaculación
Orgasmo
La erección se produce por el llenado de sangre de los cuerpos cavernosos del pene, y es
mantenida por la compresión que sufre el sistema venoso de retorno sanguíneo por la
propia expansión del pene durante la erección. Los estímulos que la provocan pueden
ser de naturaleza psíquica (visuales, auditivos, olfativos, recuerdos), que viajan desde el
cerebro intramedularmente, excitando de forma fundamental a un centro medular
situado en los niveles T11 y T12, provocando la erección a través del plexo
hipogástrico. Otros estímulos son de naturaleza refleja por contacto genital (epitelio
anal, escroto y las estructuras perineales), excitando los nervios presacros (centro
eréctil), pudiendo integrarse en el nivel medular S2-S3-S4, provocando la liberación de
óxido nítrico, responsable último de la relajación de las llamadas arterias helicinas y de
los espacios lacunares que conforman los cuerpos cavernosos, que se van llenando de
sangre y que comprimen las venas de drenaje (mecanismo veno-oclusivo).
Una vez producida la erección, el estimulo reiterado de la mucosa del glande, excita
cada vez más y más al centro sacro y al centro dorsolumbar, hasta provocar unas
contracciones peristálticas del piso pélvico y del periné cuya misión es hacer que el
semen alcance la uretra, cerrándose oportunamente el cuello de la vejiga, y dando lugar
a la emisión seminal dentro del canal uretral. Se producen entonces contracciones
convulsivas que exprimen el canal uretral, produciendo la eyaculación. El volumen de
semen es de 2-3 ml por eyaculacion y los espermatozoides constituyen cerca del 10 %,
lo que representa aproximadamente unos 200 millones.
Próstata
La próstata es una masa glandular, que rodea la porción inicial de la uretra y es
atravesada por los conductos eyaculadores. Junto con las glándulas bulbo uretrales
segrega un líquido que participa en la formación del esperma. En los prepúberes está
poco desarrollada, pero en la pubertad crece, llegando a medir en el adulto 30 x 40 mm.
La uretra prostática posee en su cara posterior una eminencia media, alargada
verticalmente (veru montarum), a cuyos lados terminan los conductos eyaculadores
derecho e izquierdo y alrededor el cual se abren los orificios de numerosas glándulas
prostáticas supracoliculares, infracoliculares y laterocoliculares.
Las glándulas bulbo-uretrales de Mery Cowper, derecha e izquierda, están situadas por
encima del bulbo del pene, y sus conductos desembocan en la uretra. Estas glándulas
segregan un líquido claro y viscoso, que se vierte en la uretra posterior en el acto de la
eyaculación favoreciendo la aglutinación del esperma y su pasaje por la uretra.
ESPERMATÓGENESIS
La espermatogénesis es el proceso de división y diferenciación celular que conduce a la
formación de espermatozoides. La espermatocitogénesis es la fase proliferativa de la
espermatogénesis donde las células germinales primitivas se multiplican por una serie
de divisiones mitóticas seguidas por divisiones meióticas que produce el estado
haploide. La espermiogénesis es la fase diferenciativa de la espermatogénesis donde el
núcleo y el citoplasma de la célula pasan por unos cambios morfológicos para formar el
espermatozoide.
Espermatocitogénesis
En el túbulo seminífero encontramos tejido esteroidogénico, son las células de Leydig
productoras de testosterona, así como tejido gametogénico formado por células
espermatogénicas. Varios túbulos seminíferos están unidos por una membrana de tejido
conjuntivo (intersticio). Las células de Sertoli se unen unas con otras, separando dos
compartimentos: uno externo en donde están las células más inmaduras
(espermatogonias A1), y otro interno, donde están todas las demás, más evolucionadas.
En la membrana basal o germinal del túbulo seminífero se encuentran las células más
inmaduras que se van transformando y madurando de modo que cuando llegan a la parte
central ya son espermatozoides. En la parte más externa se encuentran las células de
Sertoli que cuentan con moléculas de adhesión celular, las N-cadherinas, y sirven para
la nutrición y protección de espermátidas. Las células espermatogénicas, por otro lado,
tienen moléculas de galactosil transferasa. La existencia de ambas permite la
progresión hacia la parte central del túbulo seminífero.
La espermatogénesis comienza con la migración del espermatogonio desde la
membrana basal hacia el lúmen. El espermatogonio es activado para formar el
espermatogonio activo tipo A que cuando se divide pueden dar espermatogonias A2 y
A1 (que se pueden volver a dividir para dar A2 y A1) y se denominan células cepa.
Cuando son A2, siguen dividiéndose en A3 y éstas en A4. Las A4 pasan a un tipo de
célula más diferenciada, la espermatogonia intermedia que se dividen para formar
espermatogonios tipo B que proceden a la última división mitótica para formar
espermatocitos primarios. El espermatogonio tipo A contiene dos o más nucleolos
mientras que el espermatogonio tipo B contiene un solo nucleolo.
Los espermatogonios tipo B pasan por una serie de divisiones para formar 16
espermatocitos primarios de cada espermatogonio. Proceso que dura alrededor de 15
días. Cada espermatocito primario se divide para formar dos espermatocitos
secundarios cambiando el número de cromosomas a haploides. Luego los
espermatocitos secundarios forman dos espermátidas cada uno (en 1 o 2 días).
Figura 67.4: Espermatogénesis. T, en el corte del testículo se observan las túbulos
seminíferos donde los espermatozoides maduran. TS, corte transversal de un tubo
seminífero. E, proceso de diferenciación de los espermatocitos.
Espermiogénesis
La espermátida es una célula redonda cuyas organelas se transformarán formar una
unidad funcional del espermatozoide maduro cundo se produzca la inversión de la
espermátida de forma que la cola se queda hacia el lumen del túbulo seminífero. Toda la
espermatogénesis dura en el hombre 74 días.
La pared celular se retiene como la cobertura externa del espermatozoide y el
citoplasma emigra gradualmente a lo largo del núcleo hacia el extremo distal donde se
pierde dejando solo pequeños remanentes del citoplasma original. El núcleo se alarga y
se achata pero se mantiene relativamente constante en tamaño y forma, ocupando la
mayor parte de la cabeza del espermatozoide.
El aparato Golgi forma, a través de una serie de eventos, el acrosoma de la cabeza. Este
es una especie de capuchón que se encuentra en la parte anterior del núcleo, por debajo
de la membrana plasmática y que contiene enzimas que digerirán las cubiertas externas
del ovocito cuando se produzca la fecundación. Las mitocondrias forman un elemento
espiral alrededor del filamento axial para formar la pieza media del espermatozoide
(axonema). A partir del centríolo de la espermátida comienza a desarrollarse el flagelo
con la colaboración de la proteína AKAP82 en la cubierta mucosa de los
espermatozoides que se sintetiza cuando es haploide. A lo largo de la cola se encuentran
9 pares de microtúbulos periféricos y uno central. Cada microtúbulo contiene
protofilamentos formados por dos dímeros de tubulina (α1, α2 o también α, β), y
dineína: que es una ATPasa que actúa sobre el ATP de las mitocondrias. Los
espermatozoides se mueven por un mecanismo oscilador alternando los movimientos
oscilatorios derecho e izquierdo de los microtúbulos de la cola. El metabolismo del
espermatozoide es aerobio y los iones Cl y Mg favorecen la motilidad. El movimiento
comienza en la porción más proximal de la cola (axonema) y va hacia el final. La vaina
proteica controla el batido de la cola, evitando movimientos bruscos.
Una vez que los espermatozoides salen a la luz del tubo seminífero, deben recorrer el
epidídimo y luego la uretra a una velocidad de 35 a 50 micras por segundo. Durante el
recorrido por el epidídimo, adquieren motilidad gracias a glándulas accesorias que son
fundamentales para la maduración de los espermatozoides. Estas glándulas (vesículas
seminales y glándulas prostáticas, entre otras) sintetizan el líquido seminal, donde viven
los espermatozoides en condiciones ideales, debido a que tiene sustancias nutritivas,
iones y un pH adecuado (7.5).
Figura 67.5: Espermatozoide. La célula madura lleva la carga de ADN condensada en
el núcleo. Las mitocondrias proporcionan la energía para su movimiento.
TESTOSTERONA
Figura 67.6: Molécula de testosterona. Representación tridimensional.
Síntesis
Los principales esteroides en la función reproductiva masculina son la testosterona,
dihidrotestosterona y estradiol. Cuantitativamente el principal andrógeno secretado por
el hombre, capaz de diferenciar y desarrollar los caracteres sexuales masculinos, es la
testosterona. Las células testiculares de Leydig de los testículos (estimuladas por las
gonadotrofinas LH y FSH) son esteroidogénicas y sintetizan el 95% de la producción
total (5-10 mg/día), el resto se produce en la corteza suprarrenal y el cerebro. Los
testículos secretan cantidades pequeñas de dihidrotestosterona, dehidroepiandrosterona
(DHEA) y androstenediona. También algo de estradiol, estrona, pregnenolona,
progesterona, 17 alfa-hidroxipregnenolona y 17 alfa-hidroxi progesterona. La
dihidrotestosterona y el estradiol se originan parcialmente por secreción testicular
directa (20 %) y en su mayor parte por conversión periférica (80%), de los precursores
de andrógenos y estrógenos secretados por testículos y suprarrenales.
Se genera a partir del colesterol generado en las células de Leydig por síntesis de novo
desde el acetato pero también es tomado por endocitosis mediada por receptores de las
lipoproteínas plasmáticas (LDL).
Figura 67.7: Testosterona y dihidrotestosterona. Vías de síntesis testicular de
andrógenos y estrógenos.
En la membrana mitocondrial interna, el complejo enzimático P450scc, convierte el
colesterol (27 carbonos) en ∆5-Pregnenolona (21 carbonos). Desde la pregnenolona
existen dos vías alternativas cuyas enzimas se encuentran en membranas del reticulo
endoplásmico liso:
1. Vía de la progesterona. Sucesivamente se forman progesterona, 17(alfa)-OHprogesterona, androstenediona (17C) y testosterona.
2. Vía de la deshidroepiandrosterona. Se forman 17(alfa)-OH-pregnenolona,
deshidroepiandrosterona (17C), androstenediol y testosterona.
Los testículos de un adulto liberan entre 4 y 12 mg de testosterona por día. Casi la mitad
de la hormona es transportada por la (beta) globulina fijadora de esteroides sexuales
(gran afinidad), el resto forma complejos con otras proteínas, principalmente albúmina
(menor afinidad, gran capacidad de transporte). Existe una pequeña fracción libre (2 %)
que es la forma biológicamente activa.
Regulación
La síntesis y secrecion de testosterona es activada por la hormona estimulante de celulas
intersticiales (LH) de la adenohipófisis. La FSH estimula la espermatogénesis, pero no
la producción de andrógenos. La GnRH hipotalámica, estimula la secreción de LH, y la
testosterona la inhibe actuando directamente sobre las células gonadotropicas
(retroalimentación negativa). La LH se secreta de manera intermitente, cada 2 horas y
en impulsos de mayor amplitud por la mañana y de igual modo, la secreción de
testosterona es intermitente y diurna. El valor más elevado se suele observar durante la
madrugada, de 6 a 8 de la mañana y el valor más bajo suele ocurrir al anochecer (8
p.m.). La concentración media de testosterona total en suero en un hombre adulto puede
oscilar entre 3.5 a 12 ng/ml, en la mujer entre 0.3 a 0.9 ng/ml, en la post menopáusica
0.08 a 0.35 ng/ml y en los prepúberes de 0.1 a 0.2 ng/ml. La testosterona urinaria es de
30 a 150 µg/24 horas en el hombre y de 5 a 15 µg/24 horas en la mujer. La testosterona
biodisponible en suero es de 1.2 a 6.3 ng/ml en el hombre y menos de 0.3 ng/ml en la
mujer.
Figura 67.8: Eje hipotálamo–hipófisis–testículo. T, testosterona, DHT,
dihidrotestosterona, ABP, proteína fijadora de andrógenos, E2, estradiol.
Secreción a lo largo de la vida
En el primer trimestre de vida intrauterina hay secreción de testosterona, el principal
factor en la diferenciación sexual, estimulada por la gonadotropina coriónica humana de
la placenta. Al principio del segundo trimestre el valor es cercano al que se observa a la
mitad de la pubertad (250 ng/dl). La producción entonces disminuye pero hacia el
nacimiento el valor es nuevamente 250 ng/dl, por la estimulación de las células de
Leydig fetales por la hormona leuteinizante (LH) de la hipófisis fetal. Las cifras vuelven
a descender en los primeros días después del nacimiento, pero aumentan y alcanzan un
máximo a los 2 o 3 meses, luego disminuyen a menos de 50 ng/dl hacia el sexto o
séptimo mes, cifra que se mantendrá durante la niñez (hiato prepuberal). Se estima que
la elevación en el primer año de vida tiene que ver con la maduración del sistema
nervioso central. En el inicio de la pubertad, los valores de testosterona intratesticular
muestran un pico de concentración muy elevado, similar al de un hombre adulto, que
coincide con un aumento del volumen testicular. La testosterona actúa primero a nivel
intratesticular, sobre los túbulos seminíferos y luego al aumentar el nivel circulante, lo
hace sobre el vello y los genitales externos. Desde los 10 a 12 años y hasta los 17 años,
la concentración sérica de testosterona en varones aumenta más que en mujeres. La
concentración sérica oscila entre 500 a 700 ng/dl en varones contra 30 a 50 ng/dl en
mujeres. Luego de los 50 años, con el envejecimiento, las concentraciones séricas de
testosterona disminuyen gradualmente, hasta llegar a los 80 años con una disminución
del 20 al 50 % del valor máximo.
Figura 67.9: Secreción de testosterona. A lo largo de la vida, se observan lo picos
intrauterinos, en el primer año, y luego en la pubertad.
Metabolismo
La vida media de la testosterona es de apenas 12 minutos. Es metabolizada, en el
testículo y en mayor proporción en otros órganos efectores androgénicos hacia dos
esteroides activos: dihidrotestosterona (DHT) y estrógenos (estradiol). La testosterona
por acción de la 5(alfa) –reductasa, dependiente de NADPH, cataliza irreversiblemente
la conversión a DHT en hígado, piel (folículos pilosos) y órganos accesorios de la
reproducción. Se han identificado dos formas de esta enzima, la tipo I se encuentra en
piel no genital y en el hígado, y la tipo II, predomina en el tejido urogenital en varones,
y en la piel genital en varones y mujeres. El 8 % del total de testosterona secretada es
metabolizada a DHT, que posee el doble de actividad de la testosterona. Actuando con
gran eficacia en la expresión de genes.
La producción de estrógenos (estradiol) a partir de testosterona comprende una serie de
reacciones (hidroxilacion, oxidación, remoción del carbono 19, y aromatización del
anillo A) catalizada irreversiblemente por la enzima aromatasa, complejo inserto en
membranas del retículo endoplasmico, que incluye NADPH-citocromo P450 reductasa.
La aromatasa se encuentra en las células de Sertoli y en diversos tejidos, especialmente
hígado y tejido adiposo. Así se origina el 85 % circulante en varones, el resto se secreta
de forma directa en testículos, por las células de Leydig.
La testosterona es convertida en hígado, en diversos metabolitos: androsterona,
etiocolanolona y dehidroepiandrosterona, sin actividad biológica, que se excretan en
orina como 17-cetoesteroides. La testosterona se reduce en el grupo cetona del carbono
3 y se satura la doble ligadura del anillo A del ciclopentanoperhidrofenanatreno. Una
mínima parte se excreta como testosterona. La DHT se metaboliza a androsterona,
androstenediona y androstendiol.
Efectos fisiológicos
La testosterona puede actuar en forma directa al unirse al receptor de andrógenos o de
modo indirecto, mediante conversión en DHT. También puede actuar como un
estrógeno por medio de su conversión en estradiol.
Testosterona: Desarrolla los genitales internos. Estimula el desarrollo de los
conductos de Wolf durante la gestación, la espermatogénesis en los túbulos
seminíferos y la maduración de la espermátida en espermatozoide. Madura los
espermatozoides en su paso por el epidídimo y los conductos deferentes.
Crecimiento del músculo estriado y de los huesos largos en la pubertad, con
aumento de estatura. Aumento de la síntesis de proteínas. Incrementa la
retención de nitrógeno, sodio, cloro, agua, fósforo y potasio. Estimula la
eritropoyesis. Determina un comportamiento más agresivo. La testosterona y la
DHT inhiben en el hipotálamo la producción GnRH. Posee efecto
anticatabólico al interferir sobre el receptor de cortisol.
Dihidrotestosterona: Produce la diferenciación de los genitales externos durante
la gestación y maduración durante la pubertad, crecimiento del escroto, pene y
glándulas secretorias sexuales. Aumenta el peso y crecimiento testicular.
Estimula el crecimiento y aumento de folículos pilosos durante la pubertad.
Proliferación de las glándulas sebáceas y engrosamiento de la piel. Hipertrofia
de la laringe y producción de una voz grave permanente. Distribución del vello
masculino en: pubis, tronco, extremidades y barba.
Estradiol: Estimula la libido. Produce el cierre de las placas epifisarias y
cartílago de conjunción. Si el varón carece de la enzima aromatasa el
crecimiento de los huesos
desarrollándose osteoporosis.
largos
continúa
por
tiempo
indefinido,
Figura 67.10: Mecanismo de acción de los andrógenos. Rn, receptor nuclear, Rc,
receptor citoplasmático. La testosterona y DHT actúan por medio de un receptor común,
luego el complejo ligando-receptor se une por medio del dominio de unión a ADN del
receptor, a ciertos genes con capacidad de respuesta estimulando la expresión de genes.
Figura 67.11: Dedos de zinc. Representación esquemática de un receptor de
testosterona.
Efectos de los andrógenos en diferentes etapas de la vida
En útero. Hacia la octava semana de gestación los testículos fetales, estimulados
por la GnRH, empiezan a secretar testosterona se estimulan los conductos de
Wolf cercanos para que se diferencien hacia los genitales interno masculinos:
epidídimo, conducto deferente y vesículas seminales. La DHT origina el
desarrollo de los genitales externos: pene, el escroto y la próstata.
Lactancia. El incremento de la secreción de testosterona por los testículos
durante los primeros meses de vida podría estar relacionado con la maduración
del sistema nervioso aunque también se estima en esta etapa de elevado
crecimiento es necesaria para el desarrollo de la fuerza muscular por ejemplo
para vencer la fuerza de gravedad.
Pubertad. En varones comienza alrededor de los 12 años, con un incremento de
la secreción de FSH y LH. Este incremento aumenta el tamaño de los testículos
y el desarrollo de los túbulos seminíferos, que producen espermatozoides
maduros. El falo aumenta de longitud y anchura, el escroto se torna arrugado, y
la próstata empieza a producir su secreción. La piel se torna más áspera y oleosa
debido al incremento de la producción de sebo, lo que contribuye a la aparición
de acné. Empieza a crecer el vello púbico y axilar, en la parte baja de las piernas
y la cara. La aparición completa del vello facial puede aparecer luego de 10 años
después del inicio de la pubertad, y marca su final. La masa y la fuerza
muscular, especialmente de la cintura escapular, aumentan, y la grasa
subcutánea disminuye. Se acelera el crecimiento óseo epifisario, lo que da por
resultado la fase de aceleración del crecimiento puberal (explosión puberal),
pero la maduración de las epífisis da por resultado la una lentificacion del
crecimiento y luego el cese del mismo. Los huesos se tornan más gruesos. Tanto
el aumento de la masa muscular como de los huesos ocasionan un incremento
pronunciado de peso. La eritropoyesis aumenta, la laringe se engruesa, (voz de
tono mas bajo o más ronca). Aparece la libido.
Adultez. Aparición gradual de calvicie con distribución masculina, que empieza
con recesión del pelo en las sienes, vértex o en ambas. Hiperplasia prostática
benigna durante la adultez mediada por la DHT.
Senescencia. A medida que los varones envejecen, la concentración sérica
declina de manera gradual, y la de la globulina de unión a la hormona sexual
aumenta de modo gradual. A los 80 años, la concentración total de testosterona
es de 80 % o menos del pico de los 20 años y la testosterona libre es del 40 %.
Esta disminución contribuye al decremento de energía, la masa y fuerza
muscular, densidad mineral ósea y libido.
Desarrollo de la fuerza muscular
La testosterona libre entra en las células del músculo mediante un mecanismo de
difusión a través de membrana y ya en el citoplasma se une a proteínas receptoras de
andrógenos formando un complejo testosterona-receptor. Este complejo se dirige hacia
el núcleo de la célula muscular, donde interacciona con el ADN, produce ARNm
específico y provoca el aumento de la síntesis de proteínas. La acción de la hormona en
el músculo es de dos tipos:
Acción directa. Estimula los factores nerviosos, aumentando la acción de los
receptores de los neurotransmisores. Transforma fibras musculares tipo II a
fibras de tipo IIB, más fuertes y con mayor capacidad glucolítica.
Acción indirecta. Estimula la liberación de GH y de somatomedinas, que
estimulan la síntesis de proteínas y los procesos de reparación. Inhibe el efecto
catabólico del cortisol.
El entrenamiento de fuerza produce elevaciones de testosterona y GH (respuesta
anabólica), aunque también hay una respuesta del cortisol (catabólica). En ocasiones
este aumento que ocurre en los primeros minutos después de haber finalizado el
ejercicio y se puede acompañar de una disminución a las 2 horas. El organismo puede
llegar a necesitar hasta una semana para recuperar los niveles sanguíneos iniciales si el
ejercicio ha sido excesivo debido a alteraciones funcionales de áreas del SNC debido
alteraciones y/o déficit en transmisores dopaminergicos, noradrenergicos o
serotoninergicos. La relación testosterona/cortisol (T/C) se correlacionan con los
cambios que aparecen en su fuerza máxima isométrica y el entrenamiento que produce
efectos globales positivos en el organismo debe acompañarse de un aumento en la
concentración de testosterona sanguínea en condiciones basales y/o de un aumento de la
proporción T/cortisol. Un entrenamiento excesivo suele mostrar una disminución de las
tasas sanguíneas de testosterona y/o de la proporción T/C.
ESTEROIDES ANABOLICOS EXOGENOS
El termino esteroide anabólico androgénico hace referencia a la hormona masculina
testosterona y a sus derivados sintéticos. La testosterona ingerida se absorbe con
facilidad hacia la vía porta de la circulación hepática, y se cataboliza rápidamente en el
hígado. Las preparaciones farmacéuticas de andrógenos, para tratamiento de
hipogonadismo por ejemplo, están diseñadas para evitar el catabolismo hepático.
Esteres de testosterona. La esterificación de un ácido graso al grupo hidroxilo
17β de la testosterona crea un compuesto más lipófilo como el enantato o
cipionato (ciclopentilpropionato) que se utiliza por vía intramuscular cada dos a
cuatro semanas. El éster undecanoato de testosterona se ingiere y se absorbe
hacia la circulación linfática, lo que evita la catabolia hepática inicial.
Andrógenos alquilados. Los andrógenos 17α-alquilados administrados por vía
oral poseen un catabolismo hepático disminuido aunque causan hapatotoxicidad.
Sistema transdérmico. Las preparaciones transdérmicas se aplican una vez al
dia. En principio se habían diseñado para aplicarse en la piel del escroto.
Actualmente existen parches para aplicarse en piel no escrotal. Todas estas
preparaciones producen concentraciones séricas dentro del límite normal en
varones hipogonadales.
Esteroides anabólicos en el deporte
Los esteroides anabólicos son sustancias utilizadas para incrementar el rendimiento
deportivo y/o la apariencia física. El objetivo se centra en lograr tres efectos principales:
1. Aumento en el tamaño y la fuerza muscular.
2. Efecto anticatabólico al revertir las acciones de los glucocorticoides en
general y del cortisol.
3. Efecto psicológico: producen euforia, agresividad e irritabilidad y/o
disminución de la fatiga.
Los esteroides incrementan la masa libre de grasa, efectos evidentes en dosis clínicas.
Son utilizados en deportes que exigen un alto grado masa muscular y/o un porcentaje
bajo de grasa corporal. Estas sustancias fueron suministradas, incluso dentro de algunos
programas gubernamentales, a hombres y mujeres que participaban en una gran
variedad de deportes, incluyendo atletismo, natación, gimnasia, handbol, tenis,
culturismo, kayac, remo y deportes de invierno.
Los esteroides anabólicos mas comúnmente utilizados son nandrolona, metenolona y
testosterona. Muchas veces se combina el uso de varios compuestos buscando
respuestas mayores que las del uso de una sustancia individual, así es que se han
utilizado casi todos los andrógenos producidos para propósitos humanos o veterinarios.
Fueron muy utilizados los andrógenos 17α-alquilados, que se consideraba que tenían
mayores efectos anabólicos androgénicos. Luego aumentó el uso de preparaciones que
incrementan la concentración sérica de testosterona, como los esteres de testosterona o
la gonadotropina coriónica humana. Actualmente también se utilizan precursores de
testosterona, como la androstenediona y dehidroepiandrosterona.
Esteroides anabólicos y otros fármacos relacionados más utilizados
Acetato de metenolona. Es un esteroide oral. Generalmente lo utilizan asociado
con otro esteroide de propiedades androgénicas moderadas.
Clenbuterol. Es un agonista β2. Se lo utiliza por sus características
anticatabólicas y lipolíticas después de un tratamiento de esteroides. Los efectos
secundarios son ansiedad, temblores, cefaleas, sudoración, espasmos
musculares, presión sanguínea elevada y náuseas.
Clomifeno. Es un estrógeno sintético, pertenece al grupo de hormonas sexuales.
Se usa para activar la ovulación en mujeres con ciclos anovulatorios. También
influencia el eje testicular hipotálamo hipofisiario, estimulando la hipófisis para
liberar más gonadotropina y por lo tanto en hipotálamo una liberación más
rápida de FSH y LH. Es usado cuando se discontinua el uso de esteroides. Posee
un efecto antiestrogénico, ya que como estrógeno es baja su actividad pero
compite por los receptores androgénicos con otros compuestos más potentes.
Los efectos secundarios tuforadas y las perturbaciones visuales ocasionales que
pueden manifestarse en visión manchada, fluctuando o con flashes. Trastornos
hepáticos.
Decanoato de nandrolona. Inyectada cada 4 semanas posee efecto anabólico
lento. Utilizada por quienes se inician en estas actividades y por mujeres. que
estimula la síntesis de proteica y por tanto requiere un alto consumo de prótidos.
En mujeres produce virilización como acné, voz grave, hirsutismo, y aumento de
la libido. Puede elevar los valores de tensión arterial.
Enantato de metenolona. Efecto predominantemente anabólico combinado con
casi cualquier esteroide. Debido al efecto androgénico residual, los efectos
secundarios incluyen acné ligero, voz profunda o crecimiento de pelo
aumentado. Tiene una fuerte influencia negativa en la propia producción de la
testosterona endógena.
Enantato de testosterona. Es un éster del andrógeno natural testosterona. Se lo
utiliza para lograr fuerza, masa muscular y rápida ganancia de peso. Se lo
inyecta al menos una vez por semana. Esta sustancia tiene un efecto androgénico
muy fuerte, acompañado por un componente intensamente anabólico. La
ganancia de peso esta acompañada por una notable retención de agua y
electrolitos. La proporción de conversión a estrógenos es muy alta con
acumulación de grasa y signos de femeinización. Tiene una fuerte influencia en
el eje testicular hipotalamo hipofisial con influencia negativa en la producción
de testosterona y en la espermatogénesis. Muchos experimentan un fuerte acne
en la espalda, pecho, hombros, y brazos más que en la cara. En los atletas
jóvenes, además de la virilización, la testosterona también puede ocasionar un
crecimiento acelerado y maduración del hueso, con prematuro cierre de las
epífisis óseas. Otro posible efecto secundario es la atrofia testicular. Las altas
dosis, son en parte responsables de la conducta anti social de sus usuarios. En las
mujeres los cambios en la voz y alopecia deben ser clasificados como
irreversibles, y el hirsutismo e hipertrofia del clítoris como parcialmente
reversibles.
Espironolactona. Es un diurético ahorrador del potasio y antagonista de la
aldosterona, incrementa la eliminación de Na y agua. Las atletas femeninas lo
utilizan como antiandrógeno ante síntomas del virilización, en dosis de 50
mg/día durante 14 días. Los culturistas lo emplean durante la semana antes a una
competición. Sus problemas principales en hombres consisten en ginecomastia y
posible impotencia. Otros efectos secundarios pueden ser tensión arterial baja,
espasmos musculares, vértigo, dolor gastrointestinal, vómitos, pulso irregular y
fatiga.
Estanozolol. Precursor de la dihidrotestosterona, se utiliza en la fase de
preparación para la competición, se utiliza combinado con otros esteroides. En
la mujer produce síntomas de masculinización y tanto en hombres como en
mujeres son: dolores de cabeza, calambres, cambios en los valores del HDL y
LDL, aumento de la presión de la sangre y daño del hepático.
Etestrenol. Derivada de la 19-nortestesterona. Esta droga es popular entre las
mujeres. Tóxica a nivel hepático.
Laurato de nandrolona. Es un esteroide veterinario inyectable que queda activo
1 mes. Exhibe un efecto anabólico muy grande con efectos andrógenos
moderados.
Metandrostenolona. Es un esteroide oral con un gran efecto en el balance
positivo del nitrógeno y del calcio. Efecto anabólico y androgénico muy fuerte.
Produce rápida ganancia de peso por hipertrofia de las fibras musculares y
retención notable de fluidos. Aromatiza fácilmente, lo que obliga a utilizar
drogas como tamoxifeno o clomifeno. a través de la orina continúa por más
tiempo. Reduce la producción de cortisona endógena es reducida en un 50 – 70
%. Potente componente androgénico, en mujeres pueden ocurrir considerables
síntomas de virilización. Causa una reacción tóxica en el hígado. Puede originar
presión sanguínea elevada y taquicardia. Reduce los niveles de testosterona
endógena en un 30 – 40 %. En dosificaciones altas se puede observar una
conducta agresiva.
Metiltestosterona. Es una testosterona oral. Más androgénica que anabólica.
Aromatiza fácilmente y es tóxica para el hígado, causa acné, ginecomastia y
retención de líquidos. Se usa por atletas para aumentar la intensidad y
agresividad.
Oxandrolona. Se asocia a otros esteroides para su uso.
Oxymetolona. Alto efecto androgénico y anabólico. La retención de agua es
considerable. Su uso esta limitado a 6 semanas y luego se continúa con enantato
de testosterona. Es un esteroide oral (17α-alquilado) peligroso por su toxicidad
hepática después de unas pocas semanas de uso. Como fácilmente se convierte
en estrógenos causa síntomas de feminización (ginecomastia). Quienes lo
utilizan lo acompañan de anti estrógenos y diuréticos. Se presenta acné severo,
dolores de cabeza, náuseas, vómitos, dolores del estómago, falta de apetito,
insomnio, y diarrea. La agresividad elevada es causada por el alto nivel de
andrógenos resultantes. Aumenta el nivel de colesterol y LDL, mientras que los
valores del HDL disminuyen. Tiene un efecto inhibición en el hipotálamo, el
cual a su vez, reduce o detiene completamente la liberación de GnRH. Por ello
se acompaña de HCG y clomifeno. En mujeres produce acné, hipertrofia del
clítoris, voz gruesa, distribución masculina de la pilosidad (piernas, barba),
menstruaciones irregulares o amenorrea, libido elevada, y calvicie.
Propionato de drostanolona. Es un derivado sintético de la dihidrotestosterona.
Esteroide con fuertes características antiestrogénicas. Se utilizan inyecciones
frecuentes y regulares.
Propionato de testosterona. Es una testosterona de acción rápida basada en
aceite. Causa algunos efectos secundarios: ginecomastia, retención de agua, y
agresividad. Parches de testosterona. Son diseñados para liberar testosterona
durante 24 horas. Se usa principalmente en andropausia. Liberan
aproximadamente 2.5 mg en cada aplicación de 24 horas y suelen emplearse 2
parches, abdomen y parte posterior de muslo o brazo. Los atletas pueden
encontrar esta dosis insuficiente.
Undecanoato de testosterona. Es un éster ácido graso de la testosterona, y se
transforma en dihidrotestosterona. Lo utilizan por su baja aromatización en
forma previa a las competiciones. Por su vida media corta es utilizado en
grandes dosis diarias aumentando la conversión del compuesto a estrógenos y la
retención de agua.
Undecilinato de boldenona. Esteroide de uso veterinario. Utilizado por humanos
por su efecto anabólico relativamente alto, unido a un efecto androgénico
moderado. En hombres provoca retención de agua y sodio, acné, ginecomastia,
aumento de agresividad y la fiebre de esteroide que ocurre al usar esteroides
veterinarios. En mujeres puede causar síntomas del virilización como voz
profunda, producción aumentada de las glándulas sebáceas y acné, la libido
aumentada y en algunos casos el crecimiento de pelo aumentado en la cara y
piernas.
Figura 67.12: Esteroides. Algunos de los andrógenos disponibles para uso terapéutico.
Efectos secundarios
Los andrógenos exógenos suprimen la secreción de gonadotropina suprimiendo la
función testicular endógena, lo que resulta en un decremento tanto de la testosterona
endógena como de la producción de espermatozoides. Pudiendo incluso disminuir el
tamaño testicular. Los andrógenos que pueden convertirse en estrógenos, como la
testosterona misma, causando ginecomastia. Otros cuyo anillo A se ha modificado de
modo que no puede aromatizarse, como la dehidrotestosterona, no causa ginecomastia
incluso a dosis altas.
Los andrógenos 17α-alquilados causan hepatotoxicidad, y también afectan las
concentraciones séricas de lípidos, disminuyendo un 30 % las lipoproteínas de alta
densidad HDL-colesterol y aumento de lipoproteínas de baja densidad LDL-colesterol.
Las patologías hepáticas documentadas y asociadas al consumo de esteroides anabólicos
incluyen colestasis, peliosis hepatitis, y varias formas de cáncer hepático. Los
andrógenos 17-alquil-sustituidos como la metiltestosterona y la fluoximesterona pueden
producir ictericia colestásica, caracterizada por ictericia, acumulación y espesamiento
de la bilis en los canalículos biliares de los lobulillos hepáticos. La ictericia se
acompaña de hiperbilirrubinemia, aumento de transaminasa glutámico-oxalacética
(GOT) y fosfatasa alcalina. La incidencia de adenocarcinoma hepático aumenta
significativamente en pacientes que han recibido tratamientos con andrógenos 17-alquilsustituidos, durante largo período de tiempo (1 a 7 años).
Mujeres y niños experimentan virilización, hirsutismo facial y corporal, calvicie y acné.
La atrofia testicular e infertilidad (generalmente reversible) son efectos comunes del uso
de esteroides anabólicos en hombres. Los efectos sobre próstata (hipertrofia, tumores)
dependen de la estructura química y androgenicidad de las sustancias utilizadas.
En mujeres las dosis altas de andrógenos disminuyen la circulación de FSH y las
concentraciones de la globulina ligadora de hormona (SHBG). La menstruación esta
disminuida o ausente. Es común el diagnostico de ovario poliquístico.
Los niños experimentan agrandamiento del falo, y las mujeres agrandamiento del
clítoris. Los niños y las niñas cuyas epífisis todavía no se han cerrado tienen cierre
prematuro y suspensión del crecimiento lineal.
Las alteraciones del sistema inmunitario son la disminución de inmunoglobulinas
(especialmente Ig A) y aumento de la actividad de células NK (natural killers).
Los efectos psicológicos adversos incluyen ansiedad, psicosis, irritabilidad, incrementos
en la agresión y comportamiento violento y antisocial. Además de dependencia,
síntomas de abstinencia y depresión.
Debido a los numerosos efectos adversos, el uso indiscriminado de andrógenos
anabólicos ha sido prohibido por el Comité Olímpico Internacional.
Lo importante…
Las principales hormonas que favorecen la síntesis de proteínas son la hormona
del crecimiento (GH), la insulina, las somatomedinas y la testosterona.
Estas hormonas anabolizantes tienen una participación importante en los
mecanismos de adaptación al entrenamiento de fuerza porque sus efectos son
similares a los que se producen tras el entrenamiento de fuerza y su secreción se
estimula durante las sesiones de entrenamiento.
La disminución de las tasas sanguíneas de testosterona se acompaña de un
empeoramiento de la marca deportiva.
La testosterona puede actuar en forma directa al unirse al receptor de andrógenos
o de modo indirecto, mediante conversión en DHT o como un estrógeno por
medio de su conversión en estradiol.
La testosterona desarrolla los genitales internos. Estimula la espermatogénesis
en los túbulos seminíferos y la maduración de la espermátida en espermatozoide.
Maduración de los espermatozoides en su paso por el epidídimo y los conductos
deferentes.
Produce crecimiento del músculo estriado y de los huesos largos en la pubertad,
con aumento de estatura. Aumento de la síntesis de proteínas. Incremento de la
retención de nitrógeno y balance positivo de nitrógeno. Retención de sodio,
cloro, agua, fósforo y potasio. Estimula la eritropoyesis. Comportamiento más
agresivo.
La testosterona y la DHT inhiben en el hipotálamo la producción GnRH. Efecto
anticatabólico al interferir sobre el receptor de cortisol.
La dihidrotestosterona produce diferenciación de los genitales externos durante
la gestación y maduración durante la pubertad, crecimiento del escroto, pene y
glándulas secretorias sexuales. Aumenta el peso y crecimiento testicular.
Crecimiento y aumento de folículos pilosos durante la pubertad. Proliferación de
las glándulas sebáceas. Engrosamiento de la piel. Hipertrofia de la laringe y
producción de una voz grave permanente. Distribución del vello masculino en:
pubis, tronco, extremidades y barba.
El estradiol estimula la libido. Produce el cierre de las placas epifisarias y
cartílago de conjunción. Si el varón carece de la enzima aromatasa el
crecimiento de los huesos largos continúa por tiempo indefinido,
desarrollándose osteoporosis.
En tratamientos prolongados con andrógenos exógenos se suprime la secreción
de gonadotropinas que provoca hipotrofia testicular, disminución del peso de los
testículos y supresión de la espermatogénesis. Debido a los numerosos efectos
adversos, el uso indiscriminado de andrógenos anabólicos ha sido prohibido por
el Comité Olímpico Internacional.
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