¿CÓMO HAGO PARA REPARAR UNA TIENDA DE CAMPAÑA?

DOSSIER 2
¿CÓMO HAGO PARA REPARAR UNA TIENDA DE CAMPAÑA?
Nos encontramos despues de una acampada con una serie de tiendas de campaña a las
que eso de irse de acampada no les ha sentado muy bien.
Cremalleras rotas, descosidos, piquetas dobladas, vientos rotos, agujeros en el suelo,
etc...
Vamos a ver uno por uno todos los posibles desperfectos, y su solución.
Por regla general, se puede ser autosuficiente, pero hay otras ocasiones en las que es
inevitable el acudir a alguna tienda especializada para que te cambien el suelo de la tienda, o la
cremallera, por ejemplo.
Cremalleras rotas.
Depende del roto. Vamos a diferenciar
los rotos en dos tipos:
- Rotos en los que el tirador de la
cremellera se separa de uno de los
dos lados. (A1)
- Rotos en los que a pesar de pasar el
tirador, que une las dos partes, la
cremallera se queda abierta. (A2)
En los primeros, debemos intentar que la cremallera vuelva a unir los dos lados, y que
corra de nuevo. En caso de que no podamos, o que haya algún diente de la cremallera que
produzca problemas, demos por rota la cremallera y sólo queda cambiarla, Bien nosotros, bien
en una tienda especializada.
Para unir los lados, hemos de intentar unirla por el extremo de la cremallera dónde
empieza a cerrar.
En el caso de que logremos unir los lados y que corra, deberemos hacerle un tope,
para que no se vuelva a salir. El tope lo haremos cosiendo la cremallera como se muestra en la
fig siguiente.
En el caso de que terminemos de hacerle el tope y corra, pero no cierre, tendremos
entonces una cremallera rota de la segunda forma en la que antes clasificábamos.
¿cómo se arreglan estos "rotos"? Para
empezar necesitamos unas tenazas, que se
diferencian de los alicates en que la punta acaba
en pico hacia el interior (B1) y abrimos la
cremallera hasta el tope. Entonces,
presionaremos en el tirador de la forma en la
que nos indica la figura B2.
Atención, no se puede hacer en otras
zonas más hacia el borde del tirador, porque
rompe la cremallera y la rasga con el uso.
Descosidos.
Este es un tema relatívamente sencillo. Procuraremos coser nosotros mismos todos
los descosidos que haya, excepto que por la dificultad que impliquen, debamos dejarlos en
alguna tienda.
Los descosidos suelen darse en los lugares dónde se unen dos tipos de telas
diferentes (paredes-suelo, suelo-cremallera, doble techo-sujeciones, etc...).
Siempre debemos realizar el cosido doblándo las dos pares hacia dónde
originariamente estaban, es decir, hacia el interior de la tienda. Cuando podamos, haremos
doble costura, y utilizaremos el hilo más fuerte que encontremos.
Si el descosido es entre telas del doble techo, o telas del suelo (no confundir con una
rasgadura), es importante que nos ocupemos de la impermeabilización de la costura.
Lo ideal es usar pegamentos especiales de sellado de lonas, como por ejemplo
"vinilceys", y aplicar una capa tal y como indican las instrucciones.
En caso de no tener el producto anterior, de menor eficacia, pero a fin de cuentas
utilizable es cualquier pegamento para reparar pinchazos con parches (bicicletas, balones,
etc...) Tambien se venden en las tiendas sprays impermeabilizadores, pero esto es para
tejidos, y aunque se puede utilizar sobre la costura, la eficacia es mucho menor.
Cuando cosamos materiales especiales tales como cinta americana o plásticos duros
(sujeciones del doble techo) hemos de coser de una forma especial:
En el caso de la cinta americana,
debemos aprovechar al máximo los huecos del
trenzado, ya que si no, sería harto dificil y
muy duro el cosido. (C1)
En el caso de plásticos duros,
primero deberemos con un alfiler y un
mechero, hacerle agujeros al plástico en caso
de que se le hayan roto. Esto se hace con
unos alicates sujetando el alfiler (o clavo muy
fino) y calentándolo con el mechero hasta el
rojo vivo. Entonces, con el alfiler se perfora
el plástico. (C2)
Una vez hechos los agujeros, se
cose fuertemente.
Piquetas dobladas.
Es de lo más común, que despues de una acampada, sobre todo en terrenos de suelo
duro, se hayan doblado algunas piquetas. Esta es la razón por la que es aconsejable no ir de
acampada nunca con las piquetas justas, sino que es bueno llevar de repuesto alguna que otra.
Lo que hay que hacer claramente es desdoblarlas. Pero surge un problema: es muy
costoso desdoblarla sin que se nos gire, y a menudo nos llegamos a hacer heridas en las manos
intentándolo.
El truco está en sujetar por la doblez de la piqueta para que no se nos tuerza, y con
unos alicates doblar hacia la dirección necesaria.
Por ejemplo: cojemos una rama y le
trabajamos un pico para fijarla al suelo.
Posteriormente le hacemos una abertura modelo
tornillo (D1) y fijamos en el suelo. Ponemos una
piedra o sujeción en forma de "v" para que no
escurra, a la distancia que marque la piqueta.
Ponemos la doblez más o menos hacia arriba, y
con los alicates, o incluso con las manos,
desdoblamos.(D2)
Vientos rotos.
Esto es sencillísimo. Basta con utilizar hilo de pita o cualquier cordón que ofrezca un
mínimo de resistencia y a base de nudos utilizarlo tal y como se estaba utilizando el viento. En
caso de que fuesen vientos ajustables, es decir, que se pueden tensar por si sólos, se puede
recurrir a dos nudos. El as de guía o nudo simple con la cuerda doblada, y una vuelta de dos
cotes tras el tensado.(E1)
Agujeros o rasgaduras.
En el caso de que la rasgadura fuese en una tela, habría que coser lo más
estéticamente posible, y procurando que no se note mucho, ya que el cosido de un roto, hace
que la tienda parezca en pésimas condiciones.
El problema es en suelos y en dobles techos debido a la función impermeabilizante
que tienen.
El tema en suelos y en dobles techos es el mismo. El uso de parches que eviten la
entrada de agua.
El parche a utilizar en el suelo será de lona impermeable de un grosor parecido al
plástico, y en los dobles techos, con una tela fina impermeable basta. Procuremos por estética
que sean del mismo color.
El material necesario antes de ponernos manos a la obra será el siguiente:
- pegamento.
- Papel de lija.
- parche
El procedimiento es el siguiente: se limpia la superficie concienzudamente de manera
que no haya nada que impida la fijación. Después, lijaremos el roto de manera que los bordes
del roto pierdan el grosor de la lona para ser menos rígidos. Despúes, pegaremos las
superficies y el parche, y a ser posible, de manera que quede un poquito de pegamento en el
borde del parche para salvar el desnivel del grosor del parche y que del rozamiento, no se
despegue (si esto último del pegamento en el borde no se entiende, no le hagas caso, es una
pijadilla, lo importante es lo anterior).
Y ya nada más. Pero recuerda que estas medidas son para cuando existen
desperfectos. La obligación no es arreglar las tiendas, sino usarlas con cuidado, mantenerlas y
conservarlas en perfecto estado para que todas estas técnicas no sean en absoluto necesarias.
Aire Libre 1999