9. costes de produccion - Ministerio de Agricultura, Alimentación y

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9.
COSTES DE PRODUCCION
9.1. CONCEPTOS Y FUE11iTES DE DATOS
Los conceptos básicos que constituyen el principio de los
costes de producción están relacionados con el origen de los datos
empleados, por lo que es necesario comenzar comentando este
aspecto.
Los datos empleados proceden de diferentes fuentes. La más
importante ha sido la encuesta efectuada a los productores en
el año 1979, que reunió datos técnicos y económicos qúe constituyen^ la base para la estimación de los costes. Sin embargo,
existen ciertas limitaciones en cuanto a los conocimientos que
abarcan, ya que desde el principio se decidió concentrar la recogida^ de información en los costes pagados y más concretamente
en los considerados como los más importantes de los costes
totales. Dada la dificultad de obtener datos económicos por encuesta al agricultor se decidió que el esfuerzo del entrevistador
fuera enfocado hacia los componentes fundamentales del coste,
como son el pienso y la mano de obra. El motivo es que éstos
muestran una particular diñcultad con respecto a la que presentan otros costes que se hallan más ligados a la pmducción
fisica, tales como la compra de lechones, compra-venta de reproductores, etc., que ofrecen una más fácil referencia para ser
correctamente contestados por el ganadero. En un pequeño número de explotaciones los datos recogidos procedían de contabilidades completas, que sirvieron como fuente de información
de casos especiales y como datos de algunos costes que no se
habían conseguido reunir en las explotaciones.
137
En general se han apreciado diferencias entre los costes procedentes de la encuesta con relación a los datos tomados de
las contabilidades, siendo menores los valores hallados en la
encuesta. Ello se debe a que el formulario se ceñía a los costes
directos de la producción porcina y por lo tanto podían quedar
ocultos los costes generales, sobre todo cuando se trataba de
empresas con actividades múltiples.
Otro tipo de costes pagados, como los pertenecientes a servicios veterinarios, vacunas, productos sanitarios, etc., no fueron
recogidos en la encuesta general, pero se realizó posteriormente
con este fin otra específica a una serie de explotaciones que
disponían de buena información sobre estos temas.
Si separamos de los demás costes, los correspondientes a
piensos y forrajes, ello nos permite manejar el concepto de producción neta por unidad, que se emplea en los resúmenes contables de la CEE 45, que es el resultado de deducir de la producción bruta del ganado porcino el conjunto de los gastos de
alimentación necesarios. Este concepto también es utilizado por
el IEA ^.
Dado el particular origen de ]as distintas fuentes utilizadas
es necesario insistir en que los datos en que se basa el cálculo
de costes, unos provienen de la encuesta, tales como los referéntes a piensos, forrajes, mano de obrá, compra de animales y
cama; mientras que el resto son de procedencia diversa, siempre cóntrolados con la información existente en la Réd Contable
Agraria Nacional ^ en el' capítulo correspondiente a ganado independiente del suelo, apartado ganádo porcino.
En definitiva se analizaron los datos de la encuesta exhaustivamente; posteriormente se hallaron los costes totales adicionando a los calculados por medio del formulario los obtenidos
en b.ase a la información bibliográfica.
Uno de los criterios que se han tomado en este capítulo es
que la explota^ ión porcina debe pagar todos aquellos costes
en que incurra, es decir, no debe ser suplementada por otra
actividad para ser rentable. Por ello los animales producidos
por el ganadero han sido valorados a los precios en que él podía
haberlos vendido en el mercado abierto. Los forrajes han sido
tasados al precio de su equivalente en heno séco.
45. Communaute Economique Europeen^e, 1979: aRéseau d'information comptable agricole de la CEE. - Résultats 1977». Direction Générale de 1'Agriculture.
46. Institut Economique Agricole. 1982: «La rentabilité de 1'exploitation agricole
en 1980-1981n. Ministere de 1'Agrici4ture, Bruzeiles.
47. Ministerio de Agricultura, 1979, 80 y 81: aRed contable agraria nacional.
Resultados empresariales años 78, 79 y 80». Secretarta General Técnica.
138
Toda mano de obra se ha equiparado al precio que se paga
a la a ^alariada, aun cuando como se ha expuesto sea la mano
de obra familiar la que realiza la mayoría del trabajo en la
explotación porcina. Todos los factores de producción se han
valorado a los costes actuales de adquisición.
Los presupuestos reflejan el conjunto de factores que indicaron los ganaderos haber empleado en 1978 y los precios a que
resultaron, diferenciados por tipo de explotación, tamaño y localización regional. Por lo tanto las economías o deseconomías
de escala en las compras reflejarán las condiciones en que se
desenvuelven las grandes o pequeñas explotaciones.
Tipos de explotaciones. - Los datos se separaron para los
tres tipos de explotación porcina que se han venido estudiando,
es decir, de ciclo cerrado, de cebo y de cria. En la práctica se
dan combinaciones de estos tres tipos. Así, explotaciones de ciclo
cerrado pueden vender lechones, un exceso de producción o los
animales que sean de poca calidad; las de cria pueden terminar
algunos cerdos hasta que alcancen su peso de matadero, y algunas de^cebo pueden guardar cerdas para cubrirlas y conseguir
parte,de los lechones que necesitan. ..
En todo caso- los presupuestos que • se presentan son representativos de lo que ocurre-en el sector, aun cuando las explotaciones se seleccionaron anteponiendo la condición de que pudieran clasificarse en uno de los tipos de manera inequívoca,
cual es que el 90 % de los animales vendidos debían. reunir las
características acordes a cada sistema de producción. Del muestreo general que se• realizó sólo . se rechazaron, por no cúmplir
dicho requisito, un 1% de las explotaciones.
^ A lo largo del trabajo se han venido comparando lós diversos -resultados técnicos- con otro factor diferenciailor como es
que sean ^ libres o integradas. Esta condición, que volverá a tenerse en cuenta al comparar los resultados económicos, no se
ha considerado para realizar un cálculo de costes por separado.
El criterio que se ha seguido ha sido el de asignar a los índices
técnicos de ias explotaciones integradas los valores económicos
(precios) obtenidos en las libres, quedando así sólo tres grupos
(ciclo cerrado, cebo y cría).
Piensos. - Los ganaderos, a través de la encuesta de 1979, informaron sobre el peso alcanzado por los cerdos y la cantidad
de pienso empleada para ello, lo que hizo posible el realizar
los cálculos de los índices de conversión. También los ganaderos
139
revelaron los precios a los que habían adquirido los piensos,
tanto si estos correspondían a compuestos preparados fuera de
la explotación como si se trataba de componentes parciales para
ser posteriormente formulados en la explotación. En todos los
casos se respetó el precio de adquisición, estimándose para los de
producción propia el de mercado que podría haber obtenido el
ganadero. En el caso de los forrajes, que se consumían en verde
y que en gran parte se trataba de alfalfa, se valoraron al precio
de heno de alfalfa equivalente.
Mano de obra. - El tiempo empleado por la mano de obra
se corresponde con la media de las horas declaradas en la encuesta de 1979. A1 tratarse, en la mayoría de los casos, de explotaciones ligadas a la agricultura se recogió en primer lugar el
total de horas trabajadas en la actividad agraria y de éstas las
que correspondían en particular al cuidado del ganado porcino.
Igual método se empleó para la evaluación económica del trabajo, se comenzó por recoger el total del coste del trabajo de
cada estamento de personal para, a partir de ello, retrotraer
lo correspondiente al porcino. La mayor parte del trabajo, como
anteriormente se ha expuesto, es realizado por el empresario y
su familia, los cuales, sólo en las explotaciones mayores, tenían
estipuládo un salario. En función de• los datos del coste de la
mano de obra asalariada se valoró la mano de obra familiar.
Este procedimiento, como hemos indicado, tiende a sobreéstimar los costes de las pequeñas, ya que las horas que se declaran
no son totálmente empleadas en trabajo efectivo. Por otra parte
el error que podíamos haber introducido al infravalorar la mano
de obra empleada en las explotaciones grandes, si se hubieran
hecho los cálculos asignando un salario medio (ignorando la
existencia de personal altamente cualificado y por tanto bien pagado), fue subsanado tomando en cada caso los salarios reales
pagados.
^
Ganado. - Las explotaciones de ciclo cerrado y cría producen
ellas mismas su reproductores. El tratamiento que se ha seguido
en este caso es el de darles el mismo valor cuando pasan a
formar parte del rebaño reproductor, como si se tratara de animales comprados fuera de la explotación
Para los productores que se dedican al cebo, el valar de los
lechones es el pagado por los ganaderos en su adquisición
140
Cama. - Cuando se ha utilizado en el suelo paja o serrín se
ha valorado según coste de adquisición o su equivalente si era
de producción propia.
Los cuatro puntos de costes, hasta ahora citados, corresponden a los recogidos por encuesta directa a toda la muestra. La
forma en que las explotaciones llevaban el control económico
figura en el cuadro 67.
CUADRO 67
CONTROLES ECONOMICOS QUE SE LLEVAN
EN LAS EXPLOTACIONES PORCINAS, SEGUN TAMAÑO
(%)
Número de animales vendidos al año
Tipo
de control econbmico
Contabilidad simple
o por partida doble
Control de ingresos
Y gastos ..............
Guardando facturas .
Ninguno .................
5011.000
1.0012.000
2.0013.000
> 3.000
Todos
los
tamaños
4,5
3,1
12,3
21,2
46,9
7
35,4
23
37,1
38
17,7
41,2
29,6
22,3
35,8
30,3
9,1
39,4
37,4
9,4
6,3
35
20,7
37,3
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Fuente: Encuesta 1979.
Otros costes directos. - En este capítulo se engloban los
correspondientes a veterinario, vacunas y medicinas, agua, electricidad y combustible, repa^ración de edificios y maquinaria y
los.generales atribuibles. Estos puntos de costes se han obtenido
sobre una muestra diferente y más limitada y se han utilizado
en la medida en que los datos eran suficientes para una correcta
estimación en cada tipo de explotación y/o de tamaño.
Costes indirectos. - Aquí se incluyen los costes del capital
representado por los edificios y la maquinaria, en los que hay
que tener en cuenta la amortización, los intereses, los impuestos,
los segt.u^os y los gastos generales no atribuibles. Estos costes
se han realizado, por elaboración propia, a partir de datos procedentes de bibliografía referente a cálculos de costes en porcino. Por la limitación en los datos disponibles se ha calculado
una cantidad fija por tipo de explotación, independiente del
tamaño de la misma. El efecto del tamaño sobre los costes
indirectos no conlleva una disminución de los costes unitarios,
141
puesto que la construción fragmentada permite acomodar en
cada caso las ^nidades de obra a precios semejantes, y por lo
tanto, dentro del intervalo normal de las construcciones porcinas
realizar inversiones por plaza de la misma cuantía. Aun en casos zxtremos se puede ampliar este efecto porque las explotaciones pequeñas acostumbran a poner mano de obra propia en
la construcción de sus naves, y las grandes, que buscan economías en el empleo de mano de obra, realizan instalaciones más
tecnificadas y por lo tanto más costosas.
La bibliografía consultada confirma esta suposición, así
ESCS ^^, al referirse al cálculo de costes de porcino, indica que
la diferencia de costes indirectos en explotaciones de distinto
tamaño era debida únicamente' al uso más intensivo de las instalaciones por parte de las grandes explotaciones, mientras que
las pequeñas, por razones de su ubicación en explotaciones
agrícolas, dejan más tiempo vacantes las naves. Ante- éstos comentarios y dado que en nuestro caso la tasa de ocupación en
todas las instalaciones es muy alta, sin diferenciación.por tamaños, podemos admitir como aceptable el asignar iguales costes
indirectos unitarios para los diferentes tamaños.
9.2.
ESTRUCTURA DE LOS COSTES
Para efectuar una representación de los costes, debidamente
estructurados en sus diferentes componentes, se ha revisado la
bibliografía existente sobre el tema de costes específicos de
explotaciones porcinas.
Los esquemas más completos que hemos hallado son los que
se recogen en ESCS48, ESCS49, que son informes sobre encuestas,
y en KRENZ ^, que presenta una definición de actividades y presupuestos de costes sobre la base de un banco de dátos de
ordenador. Pero contienen particularidades tales como el incluir
los costes generales atribuidos en los costes directos, cal •ular
el concepto de retribución del trabajo propiamente de direc •ión
del empresario (pocas veces preseñte en trabajos europeos) o
48. Economics Statistics and Cooperative Service, 1978: aCost of producíng
hogs in the United States. - 1976». Committee on Agriculture, Nutri[ion and Forestry.
U. S. Senate.
44. Economics Statistics and Cooperative Service, 1979: «Cost of producing
hogs in the United Sta[es. - Final 1977, preliminary 1978, and projections for 1979».
Committee on Agricultural, Nutrition and Forestry. U. S. Senate.
50. I{RErtz, R. D., 1978: «gudgets for hog producing in U. S.». Oklahoma
State University.
142
considerar en los costes directos sólo la mano de obra asalariada,
encuadrando la del empresario y la familiar en los costes indirectos. Por otra parte la división en costes directos e indirectos
es de menor interés que la de costes pagados y calculados, por
dos razones: la primera por coincidir mejor los datos disponibles, bien de encuesta bien de elaboración propia con los de la
clasificación pagados-caiculados, permitiendo mantener grupos
encasillados según conceptos de la misma procedencia; la segunda, porque tratándose de una producción con precios de
garantía e indicativo, la estructura sugerida permite apreciar
la parte de costes cubiertos.
A1 ob j eto de poder hacer comparaciones con los resultados
de la Red Contable Agraria Nacional o con los de la Red Contable de la CEE se ha tenido en cuenta el formato de presentación de resultados en estas publicaciones 47 y 45, encontrando
que los apartados son muy generales, al ser los mismos para
todos los tipos de explotación, por lo que ofrecen el inconveniente de no ser específicos para la producción porcina.
Por otro lado, en los resultados contables de la Red, lo que
se pretende es determinar los componentes de la renta de los
agricultores y no un cálculo de costes.
Estas razones han motivado el no aceptar el esquema de la
Red . como prioritario, pero sí se tendrá en cuenta cuando tratemos de adecuar, mediante agrupaciones, los puntos del cálculo
de costes que se utilicen con los empleados por la Red Contable
Agraria Nacional.
La bibliografía nacional, en los trabajos de RASArtnt,tb, Cl[ECl^i17
y Txos tl, presenta esquemas especíí'icos para el porcino, de
forma que en RASAi`l^u.16 y THOS 11 se asemejan a los resultados
de la explotación de la contabilidad general y en Cll^cui 17 se
ajustan más a los de costes, destacando como grupos más importantes el trabajo y las materias primas. Un planteamiento
similar se encuentra en otros trabajos como el de IEA ^, en
MUELLER 51 y Bnc[lE 5z, que tienen en común el recopilar los conceptos de los costes en grandes epígrafes que son los que constituyen los de mayor importancia (piensos, mano de obra, edi=
ficios y equipos, veterinario y medicinas, electricidad y combustible y gastos generales) y que se corresponden con la estructura
de los datos disponibles.
51. MuELCER, A. G., y KESLER, R. P., 1974: aHog production cost affected
by prices for feed, labor and buildingsu. University of Illinois.
52. B^cxE, D. M., y FosTFx, j. R.. 1976: ^Pork production systems with
bussiness analyses.. Cooperative Ez[ension Service. Purdue Universily.
143
9.3.
RESULTADOS Y COMENTARIOS
Los cuadros 68, 69 y 70 muestran los resultados del cálculo
de costes realizados de acuerdo con las hipótesis y conceptos
que se han comentado.previamente. La falta de datos procedentes de una contabilidad detallada y la realización de estimaciones en algunos aspectos, señalan las principales precauciones
a tener en cuenta al tratar los datos y utilizarlos como base
para otros cálculos. En todo caso, si los valores absolutos deben
tomarse con reservas, los cálculos nos permiten apreciar la
composición del coste total y las relaciones entre sus componentes.
Los costes de producción de un cerdo para matadero, con un
, peso vivo de alrededor de 94 Kg oscilan entre las 8.491 pesetas
en las explotaciones de ciclo cerrado y las 7.999 pesetas en las
de cebo, lo que se iraduce en un coste por Kg de peso vivo de
90,3 a 85,1 pesetas (cuadros 68 y 69). El peso de los animales
se ha calculado tomando en los de ciclo cerrado sólo el de los
engordados para matadero, excluyendo el de los animales reproductores.
Según la encuesta realizada, de los animales que van a matadero, dos tercios proceden de las explotaciones de cebo y un
tercio de las de ciclo cerrado. Así pues, los costes de producción
de las de cebo inciden en mayor proporción.
El coste de producción del lechón, de alrededor de 16 Kg, es
de 3.448 pesetas, presentándose algunas diferencias en los costes al variar el tamaño de la explotación, lo cual comentaremos
al tratar los diferentes componentes de los costes (cuadró 69).
La toma de decisiones en la producción de cerdos afecta a
diferentes horizontes de planificación en el tiempo, que van
desde los problemas diarios a los de inversión, que incidirán a
lo largo de un período de diez o más años. No se puede decir
que exista una única estimación de los costes que sirva de respuesta a todos los problemas que plantea la producción, por lo
que cada una será válida para resoluciones específicas, en función del objetivo del trabajo. En este caso el cálculo básicamente se ha orientado hacia una utilidad en las determinaciones
a corto y medio plazo, las cuales radican en los datos de encuesta, que son más significativos. Los principales usuarios serán,
por una parte,los ganaderos que tienen la explotación en plena
producción, ya que puede comparar sus costes con los aquí presentados, y por otra, los que recientemente se han iniciado en
144
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l4%
1a actividad o desean hacerlo a los que los datos les pueden
servir como ayuda para la confección de los análisis coste-benericios necesarios para una inversión racional. '1'ambién estos
c;alculos serán de interés para aquellas personas que toman
decisiones .políticas, puesto que dado el sistema de la regulación de las campañas del mercado de carne en España, pueden
encontrar ayuda en la estimación de lo que cubren los precios
de garantía y/o los indicativos.
Los nuevos productores suponen una parte muy pequeña de
la producción total, y su níunero se ha visto reducido como consecuencia de las medidas dictadas para controlar la peste porcina, que regula el tipo y la localización de las explotaciones.
Por esto precisamente, es particularmente interesante la división
que se ha hecho de los costes en pagados y calculados. Las decisiones de producción anuales, en las explotaciones ya instaladas,
se basan sólo en parte de los costes totales, únicamente aquellos
sobre los que el ganadero puede modificar algo.
Otros costes están fuera de su control. Por ejemplo, en tanto
existen edificios en uso, los costes fijos de estos capitales son
irrelevantes para una decisión de horizonte anual. Estos costes
no pueden ser eliminados y no serán afectados por el nivel de
producción alcanzado; para los propósitos prácticos de planificación son igual a cero. La forma en que se han presentado los
costes permite que los diferentes puntos sean incluidos o anulados según sea el propósito de la planificación.
Dada la división entre costes pagados y calculados la situación menos rentable, en la cual todavía puéde interesar producir, sería aquella en la que todavía quedan cubiertos los costes
pagados.
Estas situaciones, o cercanas a ellas, son a menudo frecuentes
en la profesión de ganadero que como señala OLANO 53 se ve obligado a producir en ocasiones con fuertes pérdidas. Conviene
recordar cómo, dentro de los costes calculados, se incluyen los
salarios del empresario y de otros miembros de la familia, que
constituyen la fuente del mantenimiento del nivel de vida del
ganadero.
Por lo que, junto a los costes pagados, habría que incluir
estos salarios para definir los costes mínimos a los que puede,
a corto plazo, seguir produciendo una explotación familiar.
53. OuNO Su^Casz, A., 1979: nLa eficacia económica de las explotaciones agrarias
españolas en la producción de cereales, leche y carne de cerdo». Rev. de Estudios
Agro-Sociales, núm. 108.
148
Costes de pienso. - De todos los costes es el concepto más
elevado en todos los tipos de explotación, con un valor de
5.337 pesetas, lo que representa el 84,1 % de los costes pagados
en las de ciclo cerrado. En las de cebo el valor fue de 4.227 pesetas, el 62,2 % de todos los pagados. Los mayores costes se deben
a los piensos comprados, pero cabe destacar que los elaborados
en las explotaciones de ciclo cerrado suponían, en valor, la mitad de aquéllos. Los ^ostes de piensos por forrajes eran inapreciables. Las conversiones halladas, de pienso a carne, fueron similares en las de ciclo cerrado y cebo, dentro de unos coeficientes que muestran el alto nivel técnico conseguido.
El año 1978, al que se refieren los datos, fue favorable para
• los productores, ya que los precios del cerdo ascendieron, mientras que los del maíz y la cebada, ambos regulados, se mantuvieron alrededor de los precios base de garantía a la producción
y los de la soja fueron favorables, todo lo cual motivó que el
índice anual de precios del pienso de cebo de terminación subiera
en un 6,58 %, mientras que el índice de precio de porcino para
abasto lo hizo en un 14,15 %^: Es cierto que los precios de la
carne oscilaron ampliamente, por lo que el hecho de conseguir
un mejor o peor resultado dependió sobre todo de ?a distribución de las ventas durante el año.
Trabajo.-Los costes totales de mano de obra fueron de
950 pesetas por animal, en las explotaciones de ciclo cerrado,
y de 414 pesetas, en las de cebo. En las primeras esto repre •enta
un 15 % de los costes pagados y un 11 % de los totales de producción, y en las de engorde sólo supone el 5% de los totales.
El coste del trabajo es especialmente importante en las de cría
donde se dedica mucho tiempo a cuidado de las madres y de
los lechones, por lo que llega a ser el 21 % de los costes totales
de producción,
El coste de la hora de mano de obra asalariada resultó a
174,3 pesetas, y a partir de él se calculó el coste del trabajo familiar.
Aunque los costes del trabajo hayan ^ido, en buena parte,
calculados con la idea de la necesidad de que las percepciones
deben de cubrir el mantenimiento del nivel de vida familiar, lo
cierto es que el empresario y su familia pueden ganar una cantidad inferior a la del salario existente en el mercado en tanto
54. Ministerio de Agricultura, 1979: gBOletín mensual de Estadística Agrarias,
^
núm. 7.
l49
no encuentren una mejor alternativa en la que emplear su
trabajo.
Renovación o compra de animales. - Este concepto de coste,
motivado por la necesidad de renovar reproductores, suponía
en las de ciclo cerrado 410 pesetas por cabeza, es decir, un
4,8 % de los costes totales 'de producción. Para las de cría, los
valores córrespondientes eran de 201 pesetas y el 5,8 %. En las de
cebo, la compra de lechones para engorde supuso 2.280 pesetas
por cada animal, siendo el concepto mayor después de los piensos, pues llega a ser un 28,5 % de los costes totales.
Resto de coste^ pagados. - Estos suponían 516 pesetas eri las
de 'ciclo cerrado, el 6,1 % áe los^ costes Eotales, y en las de cebo, •
278 pesetas, es decir, un 3,5 % de los costes totales. Los datos
manejados en este capítulo proceden de la encuesta de 1979, y
de elaboración propia sobre datos de éxplotaciones individuales.
En los de elaboración propia se ha hecho él estudio por tipos
de explotación, pero sin tener en cuenta la dimensión, por faltá de información a este respecto_
Otros costes calculados. - Los restantes costes calculados (exceptuando la mano de obra empresarial y familiar) fueron de
1.200 pesetas en las de ciclo cerrado y de 800 pesetas en las
de cebo, lo que supone un 15 %, y un 10 % de los costes totales
respectivamente.
Para el estudio de. estos conceptos también se acudió a la .
elaboración propia e igualmente los resultados se establecieron
por tipo de explotación, independientemente del tamaño: En
cualquier caso estos costes, en lo que afectan a las instalaciones,
sP presentan independientemente del nivel de producción e incluso aun cuando no haya producción. La existencia de ganado
v el capital circulante empleado determinarán unos costes variables pára estos dos conceptos según el nivel de producción.
Efecto del tamaño de Ia explotación sobre los costes unitarios.
Los cuadros 68, 69 y 70 recogen la evolución que experimentan
los costes al au_ mentar el tamaño de las explotaciones, desde
•nas ventas de 100-500 cabezas hasta 3.000. Según indican los
valores de la última fila de los cuadros (costes totales), no existe
modificacióti apreciable de los costes al variar la dimensión de
la explotación. BnuMnrr y colaboradores ^ comentan a este res55. BAUMAN, R. H.: EiSGRUBER, L. M.; PARTENHEIMER,. R. E., y POWEEN, P. A.,
t969: aEconomíes of size and economic efficiency in the Hog enterprise». Purdue
University Research Bulletin, nGm. 699.
150
pecto que el tamaño ^rande no es el remedio pará unos altos
costes-de producción, y que lo conveniente está en la mejora de
la eficiencia del pienso. Por lo tanto el coste de producción no
puede tomarse como determinante del tamaño óptimo, dependiendo éste de la situación de la explotación. Así, cuando lá actividad porcina se halla ubicada en una explotación agrícola pequeña, la mano de obra, que es sólo una parte poco importante
de los costes, puede llegar a tener influencia en el proceso de
decisión. También TsFFErtE 7 indica cómo a partir de un cierto
tamaño, rápidamente alcanzado, la magnitud tiene un efecto muy
pequeño sobre el precio de coste y mantiene que la dimensión
óptima varía en cada situación en dependencia de nizmerosos
factores como mano de obra, posibilidád de añtofiilanciación o
disponibilidad de- edificios o cereales. BROUSSO>s.$ ^, desde un
modelo teórico, plantea la relación entre demanda global a nivel
de un sistema y la dimensión' de- las unidádes • de producción
que lo constituyen. Para una situacióli de deséquilibrib se- próducir'a' desperdicio de capital y poca estabilidad, pero la diversificacióñ estructural da a los sistemas una elasticidad que • le
uermite ádaptarse mejor a'las fluctuaciones de la demanda: Al
contemnlar separadamente los costes pagados y los calculados
se puede observar cómo en estos últimos existe una disminución al crecer la explotación. Esto es debido a la disminución
de los costes del trabajo empresarial y familiar, ya qpe la cantidad empleada de' mano -de obra por unidad fue mayor en las
explotaciories pequeñas, en parte por falta de mecanización; pero
sobre todo por el uso ineficiente del trabajo.
Los otros conceptos impórtantes de costes, como los piensos,
y lo_que hemos denominado resto de costes pagádos y otros costes calculados; permanecen constantes, en este caso por hipótesis de partida en el cálculo. En las- de ciclo cerrado el coste de
la renovación de reproductores presenta disminución al aumentar el tamaño, al haber tasás de renovación más altas en las
pequeñas. En las explotaciones dé cebo la • compra de lechones,
el segundo apartado coste más ^importante, no presenta variaciones con la dimensión.
En la •tabla correspondiente a las explotaciones de cría; el
efecto es el' mismo, apenas varian los costes totales, mientras
que los pagados permanecen más o menos constantes y los
calculados descienden por el efecto de la mano de obra empre56. BROUSSOLLE, L., 1976: aDemande de pores et dimension de unités de productionm. Journées de la Recherche Porcine en France.
151
sarial y familiar. En estas explotaciones la renovación de reproductores presenta variación, aumentando con el tamaño y el
resto de los componentes no se ve afectado por la dimensión.
En general se producen algunas discontinuidades y explotaciones de tamaño intermedio, a veces tienen costes unitarios
más altos que otras más pequeñas, lo que puede explicarse por
cambios de técnicas introducidas por el ganadero que toda^vía no
se han ajustado a la dimensión de su explotación.
No hay datos suficientes para apreciar si los precios de los
medios de producción se han visto afectados por el tamaño.
Así, por ejemplo, de hecho, muchas explotaciones disponían de
información sobre las cantidades de piensos empleados, pero no
de los precios de adquisición, y en estos casos se calcularon
los costes adjudicándoles los precios medios de los piensos adquirido por las explotaciones del mismo tipo. Pero e ^ usual que
se aplique algún descuento en los precios cuando la cantidad
demandada de pien ^o es importante.
En cuanto a los costes de la mano de obra, según la información dé los productores, hay que hacer constar que en las explotaciones de menor capacidad probablemente parte del tiémpo
que ha empleado en el cuidado de los cerdos no hubiera sido
utilizado en caso de tenerlo que pagar. Prácticamente todo e]
trabajo realizado en éxplotaciones de ciclo cerrado con ventas
menorés a 500 animales se llevó a cabo con mano de obra no
pagada. En el caso de las explotaciones de cebo este comentario
es válido para las que venden menos de 1.000 animales al año.
Los costes y las prioridades en ei control. - A la vista de los
componentes del coste total se pueden señalar como prioridades
a corto plazo, a la hora de controlar los gastos de Ias explotaciones, el pienso en todos los tipos y la compra de lechones en
las de cebo. E1 trabajo es el factor de coste que tiene especial
importancia en las éxplotaciones de cría, pero al ser la mann
de obra mayoritariamente familiar, la mejór gestión del mismo
estará condicionada a la existencia de otrás alternativas de
trabajo.
A medio y largo plazo, es decir, para los ganaderos aue
vayan a tomar decisiones acerca de crear nuevas instalaciones
o amnliar las va existentes, otro factor de importancia a tener
en cuenta sería: los cóstes de las instalaciones y del equipo.
especiamente en las explotaciones de ciclo cerrado.
152
9.4.
ESTIMACION DE COSTES HASTA 1981
E1 hecho de que los resultados expuestos sean únicamente válidos para 1978, dado que los datos empleados se refieren a ese
año, plantea el problema de la actualización de los mismos si
queremos efectuar cálculos económicos de un momento más cercano. Para ello creemos que pueden ser nuevamente utilizados
los mismos datos aceptando la hipótesis de que la técnica de
producción es prácticamente la misma y que tampoco ha habido
apreciables cambios en la estructura de producción.
Bajo estas suposiciones las cantidades empleadas de los
medios de producción serán las mismas, variando únicamente
los precios, y el problema de la actualización de los costes quedaría así reducido a la actualización de los precios. Para esta
operación nos basaremos en los índices de precios pagados por
los agricultores, que publica el Ministerio de Agricultura en
su Boletín Mensual de Estadística Agraria. Ante esta decisión
de utilizar índices para lograr estimar datos de 1981- en base
a los de 1978, y dado que no había para todos los conceptos, ha
habido que adaptarse a los existentes haciendo que encajaran
con el desglose de costes que hemos venido utilizando. Los costes totales constan finalmente de cinco puntos:
1.
Piensos.
2.
Trabajo.
3. Renovación de reproductores (en las de ciclo cerrado y
cría) y compra de ]echones (en las de cebo.)
4. Otros costes pagados.
'
• 5. Costes calculados (excepto mano de obra empresarial y familiar).
Una clasificación similar para ensayar un método objetivo
en la actualización de los precios agrarios ha sido presentada
por OtAxo ^.
En el punto trabajo se incluyen tanto el desarrollado por los
asalariados como por el empresario o familiares. En otros costes pagados se incluyen los de veterinario y medicinas, cama,
pólizas de seguro, luz, energía, agua, desinfección, contribución
e impuestos. En costes calculados (excepto mano de obra), entran la amortización, reparación de edificios y equipos, intereses
de ganado, capital circulante, edificios y equipo.
57. Ouc^o SUÁREZ, A., 1980: .Estructura de costes. por naturaleza, de explotaciones agrarias coñ ventas comparables en el ejercicio 1479.. Revista de Estudios
Agro-Sociales, núm. 1t3.
153
La relación de los índices empleados en la actualización de
los puntos de coste se incluyen en el cuadro 71.
CUADRO 71
RELACION PUNTOS DE COSTE
Puntos de coste
E INDICES
ACTUALIZADOS
Indlce
1. Piensos.
Piensos. Precios pagados por los agricultores.
2. Trabajo.
Porquero. Salarios agrarios.
_,
3. Renovación de reproductóres Porcinó para abasto. Precios percibidos
por los agricultores.
o compra de lechones.
4. Otros costes pagados.
Medios de producción corrientes. Precios pagados por los agricultores.
5. Cóstes calculados exceptuan^
do mano dé obra.
Inversiones. Precios
agricultores:
pagados por los
^
^
Fuente: Ministerio de Agricultura. Boletín mensual de Estadístlca Agraria.
Las estadísticas no recogen índices que puedan ser claramente aplicados en los puntos 3 y• 4, tal como ocurre en los
otros componente^ del coste. En el punto 3 se ha recogido para
los dos tipos de animales precio del porcino^ de abasto, lo que
presupone que el de los reproductores de renováción y el de
los lechones evolucionan en relación a él. Para el punto 4, que
engloba una serie de conceptos muy heterogéneos, se ha tomado
el índice de medios de producción corrientes que abarca a todos exceptuando trabajo, contribuciones y gastos financieros e
inversiones.
La evolución del valor de los índices, en los tres años de
^
estudio, figura en el cuadro 72.
Aplicandb estos índices a los cosfes •alculados en los cuadros 68, 69 y 70 obtenemos los valores evaluados para 1981, cuya.
relación se presénta en el cuadro 73.
E1 cuadro muestra las proyecciones de los costes hasta 1981
para los tres tipos de explotaciones.^ La subida de costes ha
afectado en primer lugar a las de cría, a continuación á las de
ciclo cerrado y por último a las de cebo. Esto ha sido debido
154
CuAnRO 72
EVOLUCION . DE LOS INDICES DE LOS PUNTOS DE COSTE
( %)
Punto de coste
G 79/78
1. Pienso ........................................
2. Trabajo .......................................
3. Renovación de reproductores o compra de lechones ...........................
4. Otros costes pagados .....................
5. Costes calcul:ados exceptuando mano
de obra .......................................
9,6
17,8
10,1
15,8
16,1
14,5
7,4
15,6
- 2,5
22,5
13,2
22,6
l 5,9
12,7
12,2
Fuente:
A 80/79
A 81/80
Ministerio de Agricultura. Boletín mensual de Estadística Agrarta.
a que los mayores incrementos de costes han correspondido a
los capítulos de trabajo y otros costes pagados que, en las explotaciones de cria, son los más importantes, descontando los de
pienso.
Las explotaciones de cebo se han beneficiado de la caída del
precio del porcino para abasto en 1980, lo que provocó una disminución en el valor de los lechones. El incremento en más del
16 % de los costes de pienso en 1981, por el contrario, ha tenido
más repercusión en las de ciclo cerrado y cebo que en las de cría.
9.5.
COSTES DE PRODUCCION Y PRECIOS DE GARANTIA
Anualmente se regula la campaña de la carne por medio de
reale^ decretos de presidencia del Gobierno. En ellos se especifica el nivel de precio de garantía, de intervención inferior,
indicativo y de intervención superior. El objetivo de la regulación es ajustar los precios de mercado a los niveles establecidos
por el precio indicativo. Las medidas preven compras al precio
de garantía cuando el precio testigo se sitúe en un nive] inferior
al 103 % del precio de intervención inferior y se constate una
tendencia a la baja.
Cuando el precio testigo alcance un nivel superior al 97 %
del precio de intervención superior, el FORPPA podrá poner a la
venta carne de regulación.
155
CUADRO 73
COSTES ESTIMADOS, POR TIPOS DE EXPLOTACION
(pesetas)
Costes
CICLO CERRADO
1. Pienso .........................
2. Trabajo .......................
3. Renovación de reproductores o compra de
lechones ......................
4. Otros costes pagados .....
5. Costes calculados exceptuando mano de obra ....
CEBO
1. Pienso .........................
2. Trabajo .......................
3. Renovación de reproductores o comprá de
lechortes ......................
4. Otros costes pagados .....
5. Costes calculados exceptuando mano de obra ....
1980
1981
5.848
1.117
6.438
1.294
7.473
1.482
440
596
429
731
486
896
1.484
1.673
1.878
9.485
0 79/78 =
11,7 p. 100
10.565
0 80/79 =
11,4 p. 100
12.215
^ 81/80 =
15,7 p. 100
4.632
488
5.099
565
5.918
647
2.448
321
2.388
393
2.703
482
927
1.045
1.173
9.490
0 80/79 =
7,6 p. 100
10.923
J 81/80 =
15,1 p. 100
1979
8.816
A 79/78 =
10,2 p. 100
CRIA
1. Pienso .........................
2. Trabajo .......................
3. Renovación de reproductores o compra de
lechones ......................
4. Otros costes pagados .....
5. Costes calculados exceptuando mano de obra ....
Fnente: Elaboración propia.
156
1.514
849
1.667
983
1.935
1.126
216
422
211
517
239
634
869
980
1.100
5.034
3.870
4.358
a 79/78 =
n 80/79 =
e sl/so =
13,2 p. 100
12,6 p. 100
15,5 p. 100
Para el ganadero tienen especial importancia el precio indicativo, que es el que se pretende que se aproxime al del mercado, y el de garantía, puesto que es al que en el caso de una
situación difícil de mercado podrá siempre vender sus animales.
Por esta razón parece oportuno, después de haber estudiado los
costes de producción, el relacionar éstos con los precios de
garantía.
Para ello se ha preparado el cuadro 74 con los costes de producción por Kg canal, producido en las explotaciones de ciclo
cerrado y cebo, que son las que venden animales sujetos a regulación, y el precio de garantía. Respecto a éste es necesario
hacer una precisión y es que el precio de garantía que se fija
cada año es el promedio del calculado para ese año y publicado
el año anterior. Este cálculo ha sido necesario instituirlo al
establecer como período de campaña del primero de julio de un
año al treinta de junio del . siguiente, por lo que el año natural
queda bajo dos regulaciones.
CunnRO 74
RELACION ENTRE COSTE Kg CANAL Y PRECIO DE GARANTIA,
POR TIPO DE EXPLOTACION
Coste Kg canal (pesetas)
1978
1979
1980
1981
Explotaciones ciclo cerrado ...............
Explotaciones cebo ...........................
112,7
106,7
126,5
117,5
140,9
126,5
] 62,9
145,6
Precio de garantía, pesetas/Kg canal ...
94
102
116,5
121,5
% Precio de garantía/coste Kg canal ...
- Explotaciones ciclo cerrado ............
- Explotaciones cebo ........................
83,4
88,1
82,7
92,1
74,6
83,4
Fuente:
80,6
86,8
Presidencia de Gobierno. Regulación de las campañas de carnes 77-78,
78-79, 79-80, 80-81, 81-82. BOE 1977, 1978, 1979, 1980 y 1981 y elaboración
ptopia.
Las dos últimas filas del cuadro 74 muestran una mayor protección de los costes en las de cebo que en las de ciclo cerrado,
así como una tendencia a la disminución en el porcentaje de
costes.
Una pregtulta que aflora de estos comentarios es, ^ que parte
de los costes se cubre con estos porcentajes? Recordemos que
157
hemos agrupado los costes en cinco puntos: pienso, mano de
obra, renovación de reproductores o compra de lechones, otros
costes pagados y costes calculados (excepto mano de obra). Los
cuatro primeros son todos costes pagados, incluyendo la retribución de la mano de obra familiar.
La relación entre estas cuatro puntos respecto al cóste
total es del 84 % en las de ciclo cerrado y del 89 % en las de
cebo. Estas cantidades resultan en los años 1978, 1979 y 1980
cercanas a las del porcentaje del precio de garantía respecto a
los costes totales, pero en 1981 las diferencias se separan hasta
diez puntos en las de ciclo cerrado y cinco puntos en las de
cebo. Parece conveniente que la fijación del precio de garantía
trate de respaldar los gastos de los cuatro puntos de costes,
que son los que a corto plazo permitirán el continuar la producción en la posición denominada punto muerto (se cubren los
costes variables) y con ello .la supervivencia de la familia que
depende económicamente de la explotación.
^
158
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