[ PERÍODO 1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] CAPÍTULO III. EL 1. LOS ESCENARIO MARÍTIMO DE LA CONFIGURACIÓN CRISTIANO-MUSULMANA. NUEVOS INVASORES Desde el momento en que la primera oleada musulmana puso el pie en las orillas peninsulares, a las débiles estructuras visigóticas no les quedaba otro recurso que el del sometimiento. La ocasión material fue el enfrentamiento entre Rodrigo34 y los hijos de Witiza35, y la llamada que estos últimos hicieron a los musulmanes, que en principio poco quisieron arriesgar. El desembarco en la primavera del año 711 d. de C. en Gibraltar, de 7.000 bereberes36 al mando de Tarik-Ben-Zeyad37 y la muerte de Rodrigo en la batalla de Guadalete, marcó el comienzo de la invasión árabe, que en poco más de dos años se adueñaron de la Península, de la que sólo se salvaron algunos pequeños enclaves de Cantabria, Asturias y Galicia. La España invadida, fue dividida en 4 fracciones y comenzó a ser gobernada por emires dependientes del emir principal o wali, que tenía su residencia en Córdoba y que, a su vez, dependía del califa38 cuya sede estaba en Damasco, hasta que en el 755 fue proclamada España, por Abderramán I, como Imperio independiente, asegurado tras largas guerras en el 772, y dando entonces comienzo al califato de Córdoba. La historia naval de la Marina árabe-española comienza con Abderramán I39, su fundador, ante la necesidad de tenerse que defender de los ataques que por las costas de la Península lanzaba el califa de Damasco, que no se resignaba a perder su hegemonía. Durante los primeros años de su califato, Abderramán I, tuvo que rechazar varios ataques y conatos de invasión principalmente por las costas catalanas. Una vez pacificado el país se dedicó a consolidar la Marina, estableciendo atarazanas40 en Tortosa, ampliando las de Cartagena y creando una poderosa flota de buques —los mayores de la época—, con bases en Huelva, Cádiz, Tarragona y Almería, que aseguraban a la Península de las incursiones africanas al menos durante un buen período de tiempo. Así queda constituida la Marina de Guerra árabe, que los sucesores de Abderramán I habrán de conservar y acrecentar, dotándola de tal importancia que habría de ser solicitada en razón de su poderío por los emperadores de Oriente para sus conquistas. 2. LA MARINA DE AL-ANDALUS Ni Hixem I41, ni Alhaken I42, continuadores en trono del primer Abderramán, se ocuparon demasiado del fomento de la Marina, ya que bastante tuvieron con hacer frente a la inestabilidad política interna de sus reinados y a la conservación terrestre de sus fronteras. Será pues Abderramán II43, el que hace frente con medios navales (34) Don Rodrigo. Último rey visigodo, subió al trono en el 709 sucediendo a Witiza. Luchó contra los vascones y navarros sitiando Pamplona hasta que tuvo que ir a luchar contra los bereberes en la batalla de Guadalete, donde murió y su Ejército fue aniquilado. (35) Witiza. Rey visigodo que murió en el 710. Hijo de Egica, fue coronado en el 701. Durante su reinado, tuvo que sufrir algunas sublevaciones que reprimió con rudeza, sobre todo por su benevolencia con los judíos. (36) Bereberes. También llamados berberiscos, son los habitantes de los pueblos autóctonos del Norte de África, desde Egipto hasta el Atlántico. Antropológicamente hablando, se pueden considerar como un grupo de tribus, sedentarias unas y nómadas otras, distribuidas en su mayoría por las regiones Occidentales. (37) Tarik-Ben-Zeyad. Famoso cabecilla bereber del siglo VIII, que servía en los ejércitos del gobernador del Norte de África. Pasó a la península ibérica y venció a Rodrigo, conquistando Córdoba, Toledo, Valencia y otras ciudades. (38) Califa. Título de los príncipes sarracenos, que ejercieron la suprema potestad civil y religiosa en sus territorios. (39) Abderramán I. Príncipe árabe (731-788), que fundó el primer emirato independiente de Damasco y su reinado fue una continua lucha para mantener el territorio conquistado en la Península. Fue el fundador de la dinastía de los Omeyas en la Península, empezando la construcción de la mezquita de Córdoba, siendo un gran protector también de las letras y las ciencias. (40) Atarazanas. Lugar donde se construyen, reparan y conservan las embarcaciones. (41) Hixem I. Hijo de Abderramán I, vivió en Córdoba (757-796) y reinó entre los años 788 y 796. Conquistó más territorios a los cristianos en la Península y llegó a conquistar territorios llegando hasta la Galia. Terminó la mezquita de Córdoba empezada por su padre. (42) Alhaken I. Emir independiente de Córdoba, hijo y sucesor de Hixem I, que reinó en el Emirato entre los años 796 y 822 reprimiendo con dureza la rebeldía de los alfaquíes al perder éstos el trato de favor que tenían con su padre. (43) Abderramán II. Cuarto emir de Córdoba, hijo de Alhaken I reinó entre los años 822 y 852. Durante su reinado, hizo frente a multitud de sublevaciones y lucho además contra los francos y los normandos a los que venció después de que éstos saquearan Sevilla por sorpresa entrando por el Guadalquivir. Fomentó la industria, las ciencias, las letras y la agricultura. [ CENTRO DE AYUDAS A LA ENSEÑANZA DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] |35| El reinado de Mohamed I, supone también un esfuerzo marítimo de la Marina andalusí, que tuvo que rechazar un nuevo intento de invasión normanda, y su poderosa flota fue usada muchas veces contra las tropas cristianas, pero al llegar el imperio árabeespañol a su mayor grado de esplendor bajo el cetro de Abderramán III44, también tomó su Marina de Guerra capital importancia. La primera agresión del independizado monarca contra los fatimitas45, fue el apresamiento de una pertrechada galera de su pabellón en la ruta de Sicilia a Túnez, para de inmediato dirigir afortunadas expediciones contra las costas de África. Representación de los almorávides en el siglo (www.ed-dolmen.com). XI. a las invasiones normandas y funda, en Sevilla, un arsenal donde van a ser construidos una serie de buques, en cuyo manejo se adiestrarán para la lucha contra los cristianos. La estrategia naval de Abderramán, evidenció su valía con el establecimiento de tropas en Cartagena y Arcila lo que le proporcionaba un ventajoso dominio sobre el Mediterráneo. Sobre la base de tan aventajadas posiciones estratégicas, se llevó a cabo una expedición sobre Mallorca, que se había negado a pagar tributo, regresando con gran botín y demostrando ya en la acción los marinos árabes no sólo valor, sino también pericia. Los tiempos de la decadencia, se precipitaron tras el destronamiento de Hixen III46 (1031) y el derrumbamiento de la dinastía de los Omeyas47, dando entrada a los reinos de Taifas48. Las frecuentes y sangrientas luchas entre ellos, hicieron decaer la agricultura y el comercio y, por consiguiente, la Marina no volvió ya a tener su importancia anterior. Más tarde, con las nuevas invasiones, ni almohades49 ni almorávides50 se preocuparon por restablecer o favorecer su desarrollo, y aunque los benimerines51 mantuvieron respetables fuerzas marítimas, eran reclutadas y equipadas totalmente en África. Puede decirse, por tanto, que después de la caída de los almohades, ya no figura Marina militar en la historia de los moros españoles, cuya preponderancia marítima al disolverse el califato cordobés a principios del siglo XI, había pasado irremisiblemente a la isla de Mallorca. (44) Abderramán III. Octavo emir independiente y primer califa de Córdoba que reinó entre los años 912 y 961. Se hizo famoso por su afán de reorganizar su Ejército, sobre todo la Marina, y hacer de Córdoba una gran ciudad científica y artística. Fundó la primera academia de Medicina y representó la culminación del poderío árabe en la España musulmana. (45) Fatimitas. Familia de príncipes mahometanos que aseguraban descender de Fátima, hija de Mahoma. Reinaron en el Norte de África, Egipto y Siria. (46) Hixen III. Último califa de Córdoba de la dinastía Omeya que reinó entre los años 1027 y 1031. Supuso el final del poderío árabe en la Península, tras la revolución que le llevó a su destronamiento y encierro en una fortaleza. (47) Omeyas. Dinastía que tuvo su origen en Mohawia I. Reinaron en Oriente, hasta Meruán II, el cual pereció junto a su familia, a manos de los califas abasíes. Solamente se salvó Abderramán I, que siguió con la dinastía hasta su finalización con Hixen III. (48) Reinos de Taifas. Período de fraccionamiento político y territorial después del derrocamiento de Hixem III, dando origen a veintitrés Estados o reinos de Taifas en que se dividió el califato de Córdoba, favoreciendo con ello la Reconquista por parte de los cristianos. (49) Almohades. Representan un movimiento religioso y político que aparece en Marruecos a principios del siglo XII y cuyo fundador fue un berebere del Atlas marroquí, llamado Ibn Tumart. Para mantener esta nueva comunidad, no duda en recurrir a la fe y a la fuerza. Proclama la obligación de seguir estrictamente las enseñanzas coránicas y proclamar la Guerra Santa, además de enfrentar a los cristianos contra los musulmanes. (50) Almorávides. Son hombres del Ribat, monasterios donde los guerreros se preparaban para la Guerra Santa, a semejanza de las órdenes militares de la cristiandad. Cubrían su rostro con un velo o litam. El movimiento almorávide, se remonta a la fundación de uno de dichos monasterios a orillas del Atlántico y, mantenía una división de poderes entre el político y el religioso. La reforma religiosa que ocasionó, se limitó a suprimir los impuestos y a predicar la más firme ortodoxia religiosa persiguiendo a aquellos infractores de la misma. (51) Benimerines. Pueblo perteneciente a la tribu berebere de los zanatas, creador de un imperio en el Norte de África durante los siglos XIII y XIV. Eran musulmanes ortodoxos y no crearon ninguna reforma religiosa. Para combatir a los almohades, buscaron el apoyo de otras tribus, logrando conquistar el Norte de Marruecos; territorios que fueron reconquistados, posteriormente, por los almohades los cuales, llegaron incluso a someter a los propios benimerines. |36| [ CENTRO DE AYUDAS A LA ENSEÑANZA DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] [ PERÍODO 1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] 3. LA hasta Alfonso VII de Castilla53 con cuyo reinado sentó el obispo Gelmírez las bases de la Marina de Castilla, construyendo galeras que defendieron las costas de Galicia de agresiones e invasiones piratas, y con Ramón Berenguer III, el Grande54 de Barcelona (1114), fundador de la Marina catalana, base de la del reino de Aragón. RECONQUISTA MARÍTIMA LOCUCIÓN: LA RECONQUISTA MARÍTIMA. No es un término que parezca ciertamente adecuado. Ocupados como estaban los cristianos en la reconquista del territorio, poca fue la atención que prestaron, en principio, a la Marina, y esto unido a no ser atacados en sus costas septentrionales que eran las únicas que en parte poseían, hizo que consideraran inútiles la aplicación de medios navales en sus campañas contra los musulmanes. Los comienzos de la Reconquista, serán pues exclusivamente terrestres, pues liberada Asturias y elevados a la categoría de reinos, los condados de León y Castilla, acabarán por reunirse, definitivamente, bajo la corona de Fernando III, el Santo. Sin embargo, las incursiones sarracenas por las costas del Norte, movieron a Diego Gelmírez, arzobispo de Santiago, a impulsar la actividad naval y, al no contar con hombres peritos en las ciencias náuticas, envió a Arles, a Génova y a Pisa unos comisionados para que trajeran de estos pueblos artífices muy diestros en naves. Puede decirse, por tanto, una vez conseguido su propósito, que el obispo gallego es el auténtico iniciador de la reconquista marítima, porque Castilla como pueblo tiene mentalidad de secano, y el poder naval aragonés gira en principio sobre el impulso de los condes catalanes. Hasta los albores del siglo XII, no surgen en Cantabria y Cataluña los primeros indicios de una actividad naval militar. Aumentados los efectivos de la Marina creada por Gelmírez, la incipiente Marina castellana colabora en el cerco y bloqueo a la ciudad de Bayona por Alfonso I de Aragón, el Batallador55 en 1131, y también contribuyeron a la efímera conquista de Almería por Alfonso VII de Castilla, ayudados por galeras de Génova y Aragón que el monarca solicitó para poder neutralizar aquella madriguera de corsarios. Alfonso VIII56, extendió los limites de Castilla por la costa, con todos los territorios de Vitoria, Álava y Guipúzcoa, antes pertenecientes a la corona de Navarra de donde fueron segregados, fortificando en dicha costa Fuenterrabia, Guetaria y San Sebastián y acrecentó las villas de Laredo, Santander y Castro Urdiales, que contribuyeron también con sus industrias marítimas y sus buques al aumento del poder naval de la corona de Castilla, cuyos primeros triunfos compartieron con Fernando III57 en la conquista de Sevilla. Para los nacientes reinos cristianos que, por la fuerza de sus armas, comenzaban a formarse y tener vida propia e independiente, Asturias con Pelayo52 en 718, León con García en el 900, Castilla con Fernán González en 970, Barcelona con Wilfredo, el Velloso en el 874, Navarra con Sancho Abarca en el 905, y Aragón con Ramiro I en 1035, puede hablarse de historia naval También, el desarrollo de las Marinas de Cataluña y Aragón en su primeros hechos militares, hablan de su predisposición para las empresas marítimas, tanto por su carácter activo y comercial, como por su continuos roces con las repúblicas de Génova y Pisa entonces potencias navales preponderantes. Cabe a Ramón de Berenguer III, el Grande, los triunfos de la flota catalana, (52) Pelayo. Primer rey de Asturias, muerto en Cangas de Onís en el 737. Hijo de Fávila, portaestandarte de las huestes del último rey visigodo, en cuya Corte ostentó Pelayo la dignidad de espatario. Inició la Reconquista en las montañas de Covadonga, por lo que fue nombrado rey. (53) Alfonso VII de Castilla. Hijo de Urraca y Raimundo, subió al trono en 1126. Dueño de Castilla, Toledo, León y Galicia. Recibió el título de emperador sometiendo a la Nobleza. Conquistó Almería a los almorávides (1147), gran centro mercantil y nido de piratas que hostigaban el comercio en el Mediterráneo. (54) Ramón de Berenguer III, el Grande. Hijo de Ramón Berenguer, conde de Barcelona. Nació en Rodez en 1082 y murió en Barcelona en 1131. Hijo de Ramón Berenguer II. Durante su reinado, la Marina catalana adquiere prestigio en el Mediterráneo Occidental. Intentó declarar una cruzada contra los infieles, con la ayuda del Papa Benedicto VIII, y ratificar las alianzas con Génova y Pisa (1118). Luchó en el Norte y en las islas Baleares, pero fue derrotado por los almorávides en Corvins. (55) Alfonso I de Aragón, el Batallador. Hijo de Sancho I y Felicia de Roucy, accedió al trono en 1104, al morir sin descendencia su hermano Pedro I. Llamado el Batallador por sus incensantes campañas militares. Tuvo una desafortunada intervención en los asuntos de Castilla, y una intervención decisiva en la Reconquista, consolidando el reino de Aragón y el cristianismo en los territorios conquistados a través de diversos fueros. (56) Alfonso VIII. Rey de Castilla, muerto en Ávila (1155-1214). Sucedió a su padre Sancho III, con tres años de edad pero, por disposición paterna, no adquirió la mayoría de edad hasta el año 1169. Reconquistó gran cantidad de territorios sobre todo a partir de la batalla de las Navas de Tolosa (1212), que fue una victoria decisiva para los cristianos. (57) Fernando III. Rey de Castilla y León (1199-1252), después de la unión definitiva de ambas en 1230. Fue un gran impulsor de la Reconquista, llegando a aislar el último reino musulmán en Granada. Reunió Cortes por primera vez en Castilla (1250) y fue canonizado en 1671 por el Papa Clemente X. [ CENTRO DE AYUDAS A LA ENSEÑANZA DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] |37| 4. BUQUES, Jofre Tenorio. almirante de Castilla. (Códice de la Biblioteca de Mr. Laurent. Museo Naval. Madrid). en esta ocasión aliada de Pisa, en las expediciones a las islas Baleares, auténtico nido de piratas y corsarios musulmanes. También conquistó Tortosa y rindió Lérida, aumentando sus reinos merced a sus naves y a las alianzas con las coronas de Castilla y Aragón, cuyos monarcas comprobaban los provechosos efectos de los iniciales latidos de vida marítima en sus Estados. El advenimiento a los tronos de Aragón y de Castilla de Jaime I en 1213 y Fernando III en 1217, marca el comienzo de los grandes hechos navales del siglo XIII, que tendrán su tratamiento en capítulos posteriores. ARMAS E INSTITUCIONES No puede decirse que fueran los árabes un pueblo de navegantes, porque de las inmejorables condiciones que poseían las costas de la península, no sacaron el rendimiento que debieran haber obtenido. Se encontraban a gusto en el Mediterráneo y parecían esquivar el Atlántico que nunca les fue ventajoso. Tampoco aportaron grandes enseñanzas marineras, si bien, sí que supieron aprovecharse de los conocimientos prácticos de otros pueblos. Por vía musulmana llegaron a Hispania a través de Bagdad y Damasco las ciencias y las técnicas náuticas orientales, pero hasta que surgen los astilleros y atarazanas del siglo XI, no puede establecerse una clasificación racional de los buques, aunque se inicia una clara evolución hacia la galera o la nao. Los barcos son de madera escogida y cortada, en previsión de la clase de pieza que se piensa construir en cada caso. Hierro, cobre y plomo aparecen para clavazón58, zunchos59, grapas60, anclas, cadenas y refuerzos estructurales menores. La fibra básica para la cabullería y jarcias es el esparto que, junto al lino y las pieles, se aplican a toldos, velas y forros. Grasas y resinas dan las breas para el calafateo61. La carpintería de ribera62, es el sistema fundamental tanto para la acción privada como para la Marina estatal. Los árabes utilizaron el tipo de buque ligero. El buque de combate emplea velas63 y remos, y el comercial tiene un mayor componente bélico. Entre los tipos de embarcaciones típicas destacaban el sambuk de dos palos, la baghia parecida a la carabela y la ghaja de tres palos. Estaban diseñadas para correr, dar caza o evitar ser cazadas, más que para resistir tormentas o pruebas de océanos desconocidos. El fanatismo y la ferocidad de la época, se manifestaba, muy particularmente, en la guerra marítima y en ella, el vencido pagaba con su vida el infortunio. En cuanto a su tamaño, los barcos siguen hasta el final del califato la línea antigua. El timón, (58) Clavazón. Conjunto de clavos, pernos, tornillos, etc., empleado en la unión de tablones y otras piezas de madera de los buques. (59) Zunchos. Abrazadera de hierro que servían para reforzar ciertos cañones o para el sostenimiento de algún palo de la embarcación. (60) Grapas. Pieza de hierro, cuyos dos extremos se encuentran curvos y afilados, para unir dos tablas o cualquier otro elemento. (61) Calafateo. Operación de cubrir con estopa las juntas de las tablas de los fondos, costados y cubiertas poniendo, posteriormente, una capa de brea para evitar la entrada de agua. (62) Carpintería de ribera. Lugar donde se trabajaba o labraba las piezas de madera, que se empleaban para la fabricación de un bajel u otra embarcación menor. (63) Vela. Pieza o conjunto de piezas, cosidas de lona o lienzo fuerte, que se sujeta a una antena, palo, pico o estay; según el tipo de vela servirá para recibir el viento y poner en marcha un buque o embarcación, así como para hacerlo evolucionar. (64) Brújula. Instrumento compuesto por una aguja imantada, que se encuentra suspendida por su centro, colocada sobre un limbo graduado que le sirve de soporte. Su invención se atribuye a los chinos en el siglo III. Este instrumento de orientación, se basa en las propiedades magnéticas de la Tierra, con su Polo Norte próximo al Polo Norte geográfico, y sitúa la aguja según las líneas de fuerza de este campo. Hay que tener en cuenta la declinación magnética, que es el ángulo que forma la dirección del Polo Norte magnético con el Polo Norte geográfico. (65) Corredera. Aparato destinado a medir la velocidad de un buque. (66) Astrolabio. Instrumento de metal, que se usaba para observar en la mar la altura del Polo y de los astros. |38| [ CENTRO DE AYUDAS A LA ENSEÑANZA DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] [ PERÍODO 1. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] la brújula64, la corredera65, el astrolabio66 e incluso la vela de cuchillo67 que permite ceñir68, no aparecerán hasta que se establezca la competencia mercantil de las incipientes burguesías medievales. El armamento musulmán, no difería mucho del que usaban sus enemigos los cristianos; malla, lanza, maza, escudo o adarga69 (de piel de antílope y resistente a los golpes de sable), lanzas y flechas. Como era costumbre en las contiendas medievales, fueron frecuentes los combates entre jefes principales en presencia de los ejércitos alineados en orden de batalla. Eran también, conocedores de las máquinas de guerra y asedio necesarias para rendir fortificaciones, y en sus combates disponían sus ejércitos por cuerpos en flancos. En el centro, se hallaba el sultán70 flanqueado por dos cuerpos a derecha o izquierda. Las campañas se realizaban,fundamentalmente, en primavera. En su faceta naval, el comandante de una flota recibía el nombre de amir al bahr, de donde se cree que parece proceder la palabra almirante71, el señor del mar. Cada buque estaba bajo las órdenes de un marino con el título de caid, cuya misión era la guerra y el combate. Otro jefe llamado arráez72, dirigía la navegación. A los barcos acudían hombres que embarcaban con la esperanza de volver victoriosos y con un rico botín, pero las tripulaciones se formaban principalmente con esclavos y cautivos cristianos, a los que ataban sin contemplaciones al duro banco de las galeras. (67) Vela de cuchillo. Aquellas velas envergadas en la dirección del plano longitudinal del buque o en botavaras con el punto de giro en él. (68) Ceñir. Navegar contra la dirección del viento, formando con ésta el menor ángulo posible. (69) Adarga. Escudo de cuero, ovalado o de figura de corazón. (70) Sultán. Título de soberano, que se daba al emperador de los turcos. (71) Almirante. El que en las cosas de mar tenía jurisdicción con mero mixto Imperio y con mando absoluto sobre las Armadas, navíos y galeras. (72) Arráez. Capitán de embarcación árabe o morisca. También se usó antiguamente en Andalucía. [ CENTRO DE AYUDAS A LA ENSEÑANZA DE LA ARMADA ESPAÑOLA ] |39|