UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES LICENCIATURA EN CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES "ANÁLISIS DE LAS ACCIONES DE CARACTER CIVIL Y ADMINISTRATIVAS CONTEMPLADAS EN EL DECRETO 57-2000 DEL CONGRESO DE LA REPÚBLICA PARA LA PROTECCIÓN DE LOS SIGNOS DISTINTIVOS REGISTRADOS EN GUATEMALA, DESDE UNA PERSPECTIVA JURÍDICA Y MERCADOLÓGICA" TESIS DE GRADO EDGAR ALFREDO O'MEANY CASTELLANOS CARNET 10062-00 GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JULIO DE 2014 CAMPUS CENTRAL UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES LICENCIATURA EN CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES "ANÁLISIS DE LAS ACCIONES DE CARACTER CIVIL Y ADMINISTRATIVAS CONTEMPLADAS EN EL DECRETO 57-2000 DEL CONGRESO DE LA REPÚBLICA PARA LA PROTECCIÓN DE LOS SIGNOS DISTINTIVOS REGISTRADOS EN GUATEMALA, DESDE UNA PERSPECTIVA JURÍDICA Y MERCADOLÓGICA" TESIS DE GRADO TRABAJO PRESENTADO AL CONSEJO DE LA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES POR EDGAR ALFREDO O'MEANY CASTELLANOS PREVIO A CONFERÍRSELE LOS TÍTULOS DE ABOGADO Y NOTARIO Y EL GRADO ACADÉMICO DE LICENCIADO EN CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JULIO DE 2014 CAMPUS CENTRAL AUTORIDADES DE LA UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR RECTOR: P. EDUARDO VALDES BARRIA, S. J. VICERRECTORA ACADÉMICA: DRA. MARTA LUCRECIA MÉNDEZ GONZÁLEZ DE PENEDO VICERRECTOR DE INVESTIGACIÓN Y PROYECCIÓN: DR. CARLOS RAFAEL CABARRÚS PELLECER, S. J. VICERRECTOR DE INTEGRACIÓN UNIVERSITARIA: MGTR. LUIS ESTUARDO QUAN MACK VICERRECTOR ADMINISTRATIVO: LIC. ARIEL RIVERA IRÍAS SECRETARIA GENERAL: LIC. FABIOLA DE LA LUZ PADILLA BELTRANENA DE LORENZANA AUTORIDADES DE LA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES DECANO: DR. ROLANDO ESCOBAR MENALDO VICEDECANO: MGTR. PABLO GERARDO HURTADO GARCÍA SECRETARIO: MGTR. ALAN ALFREDO GONZÁLEZ DE LEÓN DIRECTOR DE CARRERA: LIC. ERICK MAURICIO MALDONADO RÍOS DIRECTOR DE CARRERA: MGTR. ENRIQUE FERNANDO SÁNCHEZ USERA DIRECTORA DE CARRERA: MGTR. HELENA CAROLINA MACHADO CARBALLO NOMBRE DEL ASESOR DE TRABAJO DE GRADUACIÓN LICDA. IRMA PAOLA URQUIZU VASQUEZ TERNA QUE PRACTICÓ LA EVALUACIÓN LIC. VICTOR MANUEL BARRIOS GALVEZ Responsabilidad: “El autor es el único responsable del contenido y conclusiones de la tesis” ÍNDICE Introducción. 1 CAPITULO I SIGNOS DISTINTIVOS 1.1 Del porqué de la existencia de los signos distintivos. 2 1.2 Función económica y social de los signos distintivos. 8 1.3 Definiciones. 13 1.4 De la forma de adquisición del derecho sobre los signos distintivos. 21 CAPITULO 2 LOS RIESGOS QUE ENFRENTAN LOS SIGNOS DISTINTIVOS 2.1. Generalidades. 27 2.2. Debilitamiento de la fuerza distintiva de un signo. 30 2.3 Elementos de un signo distintivo fuerte. 31 2.4. Efectos del debilitamiento de un signo distintivo. 32 CAPITULO 3 MECANISMOS DE DEFENSA, ADMINISTRATIVOS Y CIVILES PARA PROTEGER LOS DERECHOS DE LOS TITULARES DE UN SIGNO DISTINTIVO 3.1 De la protección de los signos distintivos. 41 3.2 De las acciones administrativas y civiles establecidas en el Decreto 57-2000, ley de la Propiedad Industrial. 3.2.1 De los procesos administrativos. 3.2.2 De las acciones civiles. 45 47 51 3.2.2.1 De las providencias cautelares y medidas de frontera. 53 3.2.2.2 Cancelación de marca por generalización o falta de uso. 56 3.2.2.3 Nulidad y Anulación de Registro. 58 3.2.2.4 Competencia Desleal. 59 3.2.2.5 Acción civil por infracción y de reivindicación. 61 CAPITULO 4 PRESENTACIÓN, ANALISIS Y DISCUSIÓN DE RESULTADOS 4.1 Presentación de los resultados obtenidos en las entrevistas estructuradas a quince licenciados en mercadotecnia. 65 4.2 Presentación de los resultados obtenidos en las entrevistas estructuradas a quince abogados. 84 Conclusiones. 94 Recomendaciones. 95 Referencias. 98 Anexos. 108 RESUMEN EJECUTIVO La Propiedad Industrial fue creada como un mecanismo de los mercaderes para potencializar sus ventas mediante la diferenciación de sus productos dentro del mercado, ganar la lealtad de los consumidores y convertirse en un elemento esencial en la relación comercial; fue entonces regulado mediante disposiciones legales que establecieron parámetros comunes para el desarrollo de la materia y la protección de la misma. En el presente trabajo de investigación, como consecuencia de los aspectos mercadológicos de los signos distintivos, se utilizó un nuevo enfoque que buscó estudiar, no a la institución en sí, si no al impacto que la misma tiene sobre el bien jurídico tutelado; teniendo como marco de referencia los lineamientos que la mercadotecnia utiliza para trazar el valor de un signo distintivo. Los resultados obtenidos en el trabajo de campo enfatizaron la necesidad de fomentar la sinergia entre los profesionales de la mercadotecnia y el derecho, lo cual permitiría mejorar la comprensión tanto doctrinaria como legal de los signos distintivos y su relación con el mercado; así como una optimización de recursos por parte de los comerciantes y el Estado, ya que todos los esfuerzos para la protección tendrían un sustento tanto en los elementos mercadológicos como legales. Algunos aspectos interesantes como consecuencia del nuevo enfoque fueron la figura de los Peritos de Marcas, quienes se constituyen en auxiliares de las autoridades judiciales en la calificación de los signos distintivos, así como el “Libro de Marcas” elaborado por los mercadologos para definir los elementos que identifican a determinados signos distintivos. INTRODUCCIÓN La rama del derecho conocida como la Propiedad Industrial, ha sido objeto de numerosos estudios jurídicos, que han buscado explicar y razonar dentro del marco de la doctrina jurídica, al fenómeno comercial, que fue creado por los mercaderes, como un mecanismo para potencializar sus ventas mediante la diferenciación de sus productos en el mercado y así ganar la lealtad de los consumidores. En Guatemala, como reconocimiento y entendimiento de la trascendencia que tiene la Propiedad Industrial y con el afán de protegerla de manera adecuada, se han aprobado marcos jurídicos específicos para regular la materia, de esa cuenta fue emitido el Decreto 57-2000, del Congreso de la República, cuyo objetivo fue el modernizar la legislación e instituciones creadas en su momento mediante el Convenio Centroamericano para la Protección de la Propiedad Industrial (marcas, nombres comerciales y expresiones o señales de propaganda) suscrito por Guatemala en 1969. Esto con el afán de trascender de la doctrina jurídica existente en ese momento a una realidad estructurada, encausada con las tendencias modernas y con aplicabilidad a la realidad nacional. La constante modernización del mercado ha obligado al Estado a evaluar la normativa aplicable y los mecanismos de protección de los derechos en materia de propiedad intelectual. El presente estudio abarcó el análisis de las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República, para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde una perspectiva jurídica y mercadológica. El objetivo general del trabajo fue el de analizar las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde una perspectiva jurídica y mercadológica. Como consecuencia del enfoque se estudió no a la institución jurídica en sí, si no al impacto que la misma tiene sobre el bien jurídico tutelado, teniendo como marco de referencia los parámetros que la mercadotecnia utiliza para determinar el valor de un signo distintivo. Para realizar el análisis antes descrito se investigó sobre las generalidades de los signos distintivos y su función económica, se identificaron los elementos que los hacen distintivos, los métodos comerciales desleales que provocan su debilitamiento y los efectos, también se estudiaron las distintas acciones administrativas y civiles para la protección de los derechos de los titulares y finalmente con el trabajo de campo se obtuvieron resultados de profesionales del derecho y la mercadotecnia que enriquecieron la investigación. Dado que el estudio tomó sus bases en la ley vigente, se debe entender que el mismo únicamente se centró en la trascendencia que actualmente tiene la aplicación de la norma, por lo que se descartó del estudio todos aquellos tratados suscritos y ratificados en la materia por la República de Guatemala, así como las normas procesales vigentes. Por la naturaleza de los objetivos de la presente investigación se utilizaron dos grupos de estudio, siendo el primero el profesional del derecho experto en materia de la Propiedad Industrial y el profesional de la mercadotecnia, utilizando en ambos casos la entrevista como instrumento de análisis. El aporte que el presente estudio presenta, es el nuevo enfoque con que se estudia la materia, ya que el mismo permite arrojar nuevas luces sobre el tema, ya que como anteriormente se explicó, no se pretendió hacer un estudio sobre los signos distintivos, de conformidad con la jurisprudencia y doctrina legal, sino el efecto que el Decreto 572000, Ley de la Propiedad Industrial tiene sobre los signos distintivos y si la misma cumple con su función primordial. Los resultados obtenidos en base a la metodología y enfoque utilizados permitieron establecer la situación actual desde el punto de vista de los profesionales del derecho y los mercadólogos; también puso de manifiesto la brecha existente entre ambas ciencias y la importancia de su sinergia y complementariedad, considerando que finalmente ambas buscan satisfacer las necesidades de los comerciantes y consumidores en un mundo altamente globalizado y competitivo. CAPITULO I SIGNOS DISTINTIVOS 1.1 Del porqué de la existencia de los signos distintivos El hombre como ser social ha evolucionado desde un individuo hasta conformarse en una sociedad evidentemente mercantilista, donde la gran parte de las relaciones tienen que ver con el consumo de productos y servicios. Esto ha derivado en la creación y fortalecimiento de instituciones que permitan la sana interacción entre los miembros de la sociedad, entre ellas la propiedad privada. La institución de la propiedad privada se ha convertido en la punta de lanza del desarrollo del individuo dentro del entorno social, dicho individualismo en la persecución del desarrollo, conlleva de manera lógica, a buscar perfeccionar la manera de adquirir más y mejores propiedades, lo cual conlleva la necesidad de delimitar y distinguir los productos que existan en el mercado. En la vasta mayoría de mercados se tienen tendencias que buscan erradicar formas de monopolios, ya que para que una sociedad sea próspera se requiere que sus miembros tengan acceso tanto al mismo mercado como a los productos; Esto nos trae una diversidad de productos y servicios, la cual es la forma en que los comerciantes logran sobrevivir en el mercado, esta necesidad de sobrevivencia y/o superación se vienen a agravar en pleno siglo XXI donde la agilidad en las vías de comunicación, abren el mercado al mundo y como consecuencia, el mercado desborda al consumidor con “opciones”. Los signos distintivos son los elementos que como la autora Marisol Briceño Febres-Cordero en su escrito denominado “Temas Marcarios para la comunidad Andina de Naciones1”, dice: “En los sistemas económicos asentados sobre el principio de la libertad de competencia, la marca (signo distintivo) desempeña un significativo papel en la consecución de un adecuado funcionamiento y una efectiva transparencia del tráfico económico”. Lo cual implica que una sociedad donde se permita el libre mercado debe tener como base la protección de los activos intangibles conocidos como los signos distintivos. Sobre este sentido el autor Alberto Wilensky, en su obra “La promesa de la marca2” nos explica que: “En la economía “clásica” el número total de productos era limitado y cada uno tenía un rol claro en la vida del consumidor. Durante años el marketing estuvo basado en producto capaz encontrar alguna característica diferencial del de convertirse en su “unique selling propositión”(USP). Contrariamente, en la sociedad moderna la multiplicación del número y las infinitas variaciones de los productos hacen que todos resulten parecidos y pierdan su significado. Ante esta pérdida de diferenciación los productos buscan nuevas significaciones para que el consumidor pueda hacerlos “suyos” a través de las marcas. Una hamburguesa Mc Donald es mucho más que un trozo de carne con pan. Es una filosofía de alimentación que privilegia el “sabor”, una forma de valorar el tiempo que enfatiza la “rapidez” y una forma de “etiqueta” que permite comer con las manos. Y, por sobre todo, es la conjunción con los colores rojo y amarillo, el Bic Mac, los arcos dorados y Ronald Mc Donald”. Es claro entonces que el valor del empresario, que en este caso es Mc Donald no proviene únicamente del producto que vende sino de la proyección que tiene hacia su mercado y esto lo Briceño Febres-Cordero, Marisol. Temas Marcarios para la comunidad Andina de Naciones, Caracas Venezuela, VE/ LIVROSCA/ 1999, pág. 145. 1 TopBrands Argentina , Wilensky, Alberto, Camara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina y Topbrands, “LA PROMESA DE LA MARCA” Argentina, 2006, http://www.topbrandsargentina.com.ar/Wilensky/A.%20Wilensky.pdf accesible el 25 de abril de 2012. 2 logra con una serie de signos distintivos que van desde marcas, jingles comerciales hasta el nombre comercial. Es por ello que para quienes tengan como profesión el comercio tanto de bienes y servicios, deben entender que existe una relación simbiótica entre los signos distintivos como producto del marketing y como objeto de derecho en donde se depende intrínsecamente tanto de la una como de la otra para subsistir, pero por sobre todo, que ambas vienen en beneficio tanto de quien ofrece (comerciante) como de quien recibe (consumidor). Por lo que para poder sobresalir en cualquier mercado moderno debe atender no solo a las necesidades mercadológicas de sus signos distintivos sino también a sus necesidades legales. El autor David Velasco Pérez Velasco3, en su ensayo denominado “La función económica de los signos distintivos” desarrolla la importancia de los signos distintivos dentro del sistema económico mundial de la siguiente forma: “Cabe agregar que los signos distintivos coadyuvan a la internalización de los efectos positivos y negativos que genera la explotación de una actividad económica, ya que el titular de una marca posee un derecho exclusivo o monopólico respecto del signo registrado; es decir, que el titular de una marca se encuentra facultado para excluir a terceros del uso y explotación del elemento marcario, lo cual genera beneficios, tanto para el propio titular, como para los consumidores, ya que éstos últimos pueden identificar al proveedor de productos y servicios de buena calidad y precio, para preferirlos al realizar un acto de consumo, o para discriminar a los Función Económica de las Marcas. Velasco Pérez Velasco David, Universidad San Martin de Porres, Perú, febrero del 2012, Perú disponible http://www.usmp.edu.pe/derecho/centro_derecho_ economia/revista/febrero _2012/ LA_FUNCION_ECONOMICA_DE_LOS_SIGNOS_DISTINTIVOS_David_Velasco.pdf accesible 25 de abril del 2012. 3 proveedores que ofrecen productos o servicios deficientes, o que brindan precios poco competitivos, para no consumirlos; ergo, los signos distintivos generan un excedente de utilidad para el conjunto de agentes económicos que se interrelacionan en el mercado.” El autor al momento de exponer sobre la relevancia económica de los signos distintivos, hace mención de uno de los aspectos pocas veces considerado en la materia de los signos distintivos, esta es la parte social, donde existe un beneficio por parte de los consumidores el poder adquirir un segmento del mercado. Dicha apreciación del valor de los signos distintivos como elemento fundamental en la economía actual, también la comparten otras ciencias como la Mercadotecnia donde los autores Michael Czinkota y Illkka Ronkainen citan: “Las marcas (los signos distintivos) son importantes porque moldean las decisiones del cliente y, en última instancia, crean valor económico. La marca es un factor primordial en el que se basa la decisión de comprar tanto en situaciones de consumo como de negocio a negocio4”. Como relatan los autores, la importancia de los signos distintivos, radica en la capacidad de moldear la decisión de los consumidores hacia un grupo determinado. Sobre la diferencia de percepciones que puedan tener diferentes profesionales, el autor James Dimitrijevs en su artículo, “La Sinergia de las Marcas y la comercialización”, nos explica como esencialmente surge dicho distanciamiento sobre un mismo punto de la siguiente forma: “Cuando los estudiantes comienzan la facultad de derecho, se evalúa su capacidad de percibir los problemas, o sea de determinar qué problemas puede acarrear la acción que se proponga realizar un Czinkota Michael y Ilka Ronkainen. Marketing Internacional, Mexico, Cengagge Learning Editores, S.A., 2008, 8ª Edición. Pág. 489. 4 cliente. Esta capacidad de determinar los problemas demuestra la perspicacia jurídica del abogado, poniendo en evidencia la calidad de su formación jurídica así como la solidez de su experiencia profesional. A los clientes les complace que los abogados no sólo sepan determinar los problemas sino también proponer soluciones para resolverlos o para reducir al mínimo sus efectos. Los agentes de comercialización, por su parte, tienen otras preocupaciones. Su función es ayudar a los consumidores a comprender los beneficios de un producto. Los agentes de comercialización están más cerca de la competencia, dado que se ocupan de que buenos productos - y a veces algunos que no son tan buenos - tengan éxito a la hora de su comercialización 5”. El autor detalla que las funciones entre los profesionales es claramente distinta, por una parte la tendencia de los abogados es la protección del bien y garantizar su permanencia en el tiempo, en contraposición a los agentes de comercialización que van tras la pista de los consumidores adaptándose para lograr posicionarse, por lo tanto evolucionan cambian y se re direccionan para sobresalir. Tenemos entonces la concordancia de dos corrientes científicas distintas, que convergen al dejar en manifiesto la importancia de los signos distintivos en un mercado libre. Es por eso que la mercadotecnia y el derecho, trabajan en sinergia, con el objetivo de enriquecer y proteger a la propiedad industrial. El sistema de protección industrial ha sido también estudiado de manera distinta en años recientes, tratándola como una forma de monopolio que afecta el mercado, el autor Carlos Alberto Parra Satizábal en su artículo, Relación entre Propiedad intelectual y Derecho de la Competencia señala: “El ejercicio exclusivo de los derechos surgidos de la propiedad intelectual, ha sido tratado también como 5 Dimitrijevs James, “La sinergia de las marcas y la comercialización”, Revista de la OMPI, número quince, Estados Unidos de América, 15 de abril del 2006, INTA BULLETIN, pág. 10. un derecho de monopolio, ejercido en forma autorizada por el titular de los bienes intelectuales respectivos, en especial cuando se analiza la exclusividad derivada de una patente de invención.6” La opinión del señor Carlos Parra se basa en el principio que la propiedad industrial es un bien que el Estado otorga en beneficio exclusivo del propietario, dejando por un lado primero que el signo distintivo nace como producto de la inversión en tiempo y dinero por parte del empresario para sobresalir de la competencia, por lo que debe garantizarse una retribución económica y segundo que dicho monopolio también protege a los consumidores ya que les garantiza que el signo distintivo proviene de determinado origen empresarial y que por lo tanto ya tiene referencias sobre la calidad del mismo. 1.2 Función económica y social de los signos distintivos Vemos como los signos distintivos cumplen con una función económica, porque viene a ejercer su campo de acción dentro del ámbito comercial de la sociedad, o como el autor Velasco Pérez Velasco David, en su ensayo 7” dice: Los signos distintivos cumplen evidentemente una función económica, ya que por un lado la marca genera un derecho de propiedad como activo intangible; cabiendo señalar que desde el punto de vista económico, la Propiedad es el conjunto de relaciones 6 Parra Satizábal, Carlos Alberto, “Relación entre Propiedad intelectual y Derecho de la Competencia: Mucho más que asuntos de competencia desleal”, Revista la Propiedad Inmaterial, publicación número cinco, año 2002, Universidad Externado de Colombia, pág. 19. 7 Función Económica de las Marcas.Velasco Pérez Velasco David, Universidad San Martin de Porres, Perú, febrero del 2012, Perú disponible http://www.usmp.edu.pe /derecho/centro_derecho_economia/revista/febrero_2012/LA_FUNCION_ECONOMI CA_DE_LOS_SIGNOS_DISTINTIVOS_David_Velasco.pdf accesible 25 de abril del 2012. económicas y sociales que definen la posición de cada individuo respecto al uso de los bienes escasos” Como complemento de la función económica, tenemos la “función social”, esta sin apartarse ni desligarse de la parte económica viene como consecuencia de la misma, esto implica que al consumidor también le es útil la distinción ya que le permite tomar decisiones sobre la adquisición; la autora Claudia Iglesias Darriba8 lo explica de la siguiente manera: “En la actualidad la principal función social de cualquier marca es informar al consumidor acerca de los productos o servicios, su origen y características. En definitiva, evitar la confusión en el público consumidor.” Vemos como los signos distintivos no solo son útiles a los comerciantes sino que también a los consumidores, ya que los protege tanto en lo personal como en lo patrimonial. Un claro ejemplo de la protección física la vemos en el caso de los medicamentos, donde el médico en el momento de tratar a su paciente por una alergia al sol le receta la medicina denominada “alercina” ya que se trata de un medicamento que constituye un fuerte antihistamínico. Cuando el paciente se acerca a la farmacia podrá ver que existen diversos productos para la alergia al sol y aunque estos sean económicamente más accesibles, el paciente sabe que si no consume el producto denominado “alercina” no tendrá los resultados esperados. Los signos distintivos cumplen una doble función dentro de la sociedad mercantilista de consumo del siglo XXI, por una parte protegen a los comerciantes, pero también y de igual importancia protegen a los consumidores. Es por ello que Notas de actualidad legal, Iglesias Darriba Claudio. IURIS GEN, Marcas. Su función social, Costa Rica, 2010, disponible, http://www.iuris-gen.com/notas/notas/marcas-sufuncion-social.html accesible 25 de abril del 2012. 8 el ordenamiento jurídico es el encargado de construir, delimitar y proteger dichos derechos. Esto ha ocasionado que tanto la doctrina jurídica y como consecuencia el ordenamiento, implemente un régimen de causa y efecto de manera lineal. Como el autor Diego Espín en su libro sobre Manual de Derecho Civil Español9 establece: “En el Derecho Moderno se habla también de la propiedad industrial, para denominar los derechos que recaen sobre las respectivas creaciones intelectuales o industriales. Sin embargo, aunque tales denominaciones están muy extendidas y han sido consagradas legislativamente, no son exactas, como ya vimos, por lo que la doctrina moderna prefiere hablar de derechos sobre los bienes inmateriales, como categoría de derechos patrimoniales, de naturaleza análoga a los reales, pero con propias características.” Es por ello que se debe entender que si bien los signos distintivos son la consecuencia de la necesidad de los empresarios de diferenciarse en el mercado para poder competir, es el ordenamiento jurídico que le da forma y valor a las mismas. El autor español Enrique Martín, en su libro Como diseñar, seleccionar y proteger Nombres de marcas: Nominologia indica; “Las marcas son una realidad esencialmente empresarial: son esencialmente brand y no trademark 10”. El autor remarca como el entendimiento del mismo fenómeno se circunscribe al uso que al mismo le dé, en el presente caso vemos que el término “BRAND” utilizado por los mercadólogos y el “trademark” que es el utilizado por los abogados. Es en la Espín Diego. “Manual de Derecho Civil Español”, Madrid España, Editorial Revista de Derecho Privado. 1975, 4ta. Edición. Pág. 75. 9 Martin Enrique, Como diseñar, seleccionar y proteger Nombres de marcas: Nominologia, España, FC editores 2005, pág. 16. 10 dualidad interpretativa de una realidad inmaterial, que se forma un semillero de incongruencias que vienen a mermar el valor de cada una de las partes. Dicho de otra manera, la falta de puentes de comunicación entre las necesidades actuales de los empresarios (emprendedores del comercio) y los abogados (como catalizadores de las leyes y la realidad) que muestra un distanciamiento de enfoques, teniendo como consecuencia una inoperancia del marco jurídico. De igual manera el autor James Dimitrijevs menciona en su artículo que: “La responsabilidad de los abogados de marcas es determinar las repercusiones a largo plazo que puedan tener una campaña de comercialización sobre las marca. Sin embargo (…) con miras a satisfacer las expectativas de éxito a corto plazo de un producto de la empresa, un agente de comercialización podrá dejar de lado los efectos a largo plazo. Un agente de comercialización innovador puede decidir alterar el logotipo de una marca, por ejemplo quitándole toda peculiaridad. Aunque ese nuevo logotipo transmita un mensaje eficaz a corto plazo a los consumidores es contrario al principio de protección de una marca mediante su utilización constante”11. Como consecuencia de la discrepancia, los objetivos del producto pueden afectar el posicionamiento en el mercado ya que como el mismo autor James Dimitrijevs en su obra nos explica: “Un abogado de marcas de una importante empresa de productos de consumo explica que los agentes de comercialización prefieren utilizar marcas que son términos descriptivos porque son más fáciles de vender, mientras que los abogados de marcas insisten en seleccionar marcas únicas que puedan venderse. Sin embargo, Sondra Schol, consejera de marcas de la División Schick Shaving de la empresa Eveready Battery Company Inc. reconoce que, en algunos casos, como cuando un producto cuenta con un presupuesto ajustado de 11 Dimitrijevs James, Op cit, pág. 11. comercialización, o que se supone que no durará mucho tiempo, una marca que utiliza un término descriptivo o elogioso tiene más probabilidades de éxito que una marca que utiliza términos sugestivos, arbitrarios o extravagantes. Esto se debe a que las marcas que utilizan términos descriptivos o elogiosos tienen más probabilidad de transmitir rápidamente a los consumidores los beneficios del producto. La Sra. Schol advierte que uno de los problemas que pueden plantear las marcas que utilizan términos descriptivos o elogiosos en relación con un producto cuya duración se piensa será a corto plazo es que se transforme en un producto a largo plazo. Cuando un producto tiene éxito, otros fabricantes pueden querer competir con él o copiarlo. Si el titular ha decidido utilizar para su producto una marca a la que le falta carácter puede encontrarse en una situación en la que sea incapaz de frenar a los competidores que quieran utilizar marcas similares para productos similares12.” Es claro que una mala planificación o una precipitada participación en el mercado traen consecuencias a largo plazo para la empresa, ya que la deja en un estado de indefensión, donde su mismo éxito sea la razón de su fracaso. La importancia de mantener una relación entre ambas realidades (tanto la del mercado versátil como la del derecho como pilar que fundamente la certeza en las relaciones), es así como el autor James Dimitrijevs nos resalta en su obra: “los abogados de marcas comprendan que el cliente puede estar dispuesto a correr algunos riesgos con miras a obtener mayores ventas. Si el agente de comercialización insiste en que una marca que utiliza un término descriptivo para identificar un producto permite a los consumidores comprender de qué se trata con mayor facilidad, el abogado de marcas debería sugerir que se altere la marca propuesta o se añada algún otro elemento para que sea suficientemente distintiva. Richard Friedman, consejero principal para marcas de Pfizer Inc., recomienda que cuando un agente de comercialización acepta los riesgos y selecciona un término 12 Ibid., pág. 11. descriptivo, el abogado de marcas debería informarlo sobre la forma de utilizar el término correctamente como marca (por ejemplo, como un adjetivo que determina o modifica el término genérico del producto). El Sr. Friedman presenta la utilización de la marca PocketPaks para un producto de desinfección bucal (oral care strips) como ejemplo de cómo los esfuerzos combinados entre abogados y agentes de comercialización en la empresa Pfizer permiten desarrollar una marca eficaz susceptible de ser protegida13”. Promoviendo así el trabajo en conjunto para brindar el mejor provecho a las circunstancias. Otra tendencia mundial ya reconocida en algunos países es la formación de instituciones donde se agrupen tanto el sector público y el privado, con la finalidad de potencializar así el valor de los signos distintivos. Entre los ejemplos de estas asociaciones tenemos al Foro de Marcas Renombradas Españolas. 1.3 Definiciones: El universo entendido como los signos distintivos, abarcan: marcas, nombres comerciales, emblemas, señal de publicidad y denominación de origen. De lo mencionado signos, en el presente trabajo de investigación se desarrollaran únicamente: Señal de Publicidad, Nombres Comerciales y Marcas. Si bien en esencia los signos distintivos son uno, ya que cumplen la misma función dentro del campo de la percepción de las personas en favor de un tercero, para efectos de su estudio y manejo tanto la doctrina como las leyes, se han dado a la tarea de dividirlas. 13 Ibid., pág. 12. Sobre la estructuración de los signos distintivos la autora Laura Ries Al Ries en su libro “LAS 22 LEYES INMUTABLES DE LA MARCA”14 hace la siguiente observación: “Hicieron de su nombre una marca. ¿Qué significa esto? En realidad, no significa nada. En la mente del consumidor no existe diferencia alguna entre el nombre de una empresa o de un producto, y un nombre de marca comercial”. MARCA: La marca es el primer signo distintivo creado por el hombre, ya que fue así como los primeros mercaderes se diferenciaron entre sí, ahora cientos de años después dentro de la actual sociedad, la misma es definida por diversos autores de maneras distintas. El autor Manuel Ossorio en su diccionario de Ciencias Jurídicas Políticas y Sociales 15define marcas como “signos industriales o mercantiles, cumplen el fin de identificar y diferenciar los productos manufacturados y de circulación en el comercio. De ese modo se los señala a la atención del consumidor y se permite que el fabricante, o quien se encargue de la venta, los acredite o difunda. Son, en consecuencia, factures de desenvolvimiento económico y pertenecen, por ende, al ámbito del derecho comercial. Para su exclusividad se requiere su registro público.” En la presente definición el autor describe a la marca en cuanto a su función económica, siendo lo primordial el hecho que ya reconoce que la Al Ries Laura Ries, “LAS 22 LEYES INMUTABLES DE LA MARCA” Estados Unidos Mexicanos, McFraw-Hill Internemaricana editores, 2001, pág. 7. 14 Marca, Diccionario de ciencias jurídicas políticas y sociales, 27ª Edición Argentina, 2000, pág. 603. 15 exclusividad y propiedad de la misma se adquiere por la inscripción en un registro público. La definición que abarca de manera más amplia el concepto actual de lo que se maneja como marca lo provee el diccionario Jurídico Espasa de la Fundación Tomas Moro16 que define marca de la siguiente manera: “Es todo signo o medio, básicamente gráfico que distinga o sirva para distinguir en el mercado los productos o servicios de una persona, de productos o servicios idénticos o similares de otra.” La anterior definición, además de describir a la marca incorpora el elemento de la división y fraccionamiento de marcas según su producto o servicio. Dicha división se encuentra regulada por la Clasificación Internacional de Productos y Servicios para el Registro de las Marcas celebrada en Niza el 15 de junio de 1957 y que ha sido revisado en Estocolmo en 1967, Ginebra en 1977 y modificado en 1979. Actualmente desde el 1 de enero del 2012 entro en vigor la décima edición. La importancia de la clasificación es que permite un mercado más competitivo y libre al no limitar el registro de marcas similares que amparen productos distintos, esto se debe a que los legisladores entienden que un consumidor ordinario no vendrá a confundir una llanta de marca Firestone con un helado del mismo nombre, por lo que no existe riesgo de asociación entre las mismas, al extremo que los canales de distribución son totalmente distintos. Marca, Fundación Tomás Moro, Diccionario Jurídico Espasa, España, Editorial Espasa Calpe, S,A. 2005 pág. 931. 16 Una clara y evidente excepción a la limitación de la clasificación es la marca notoriamente conocida, la cual por su excepcional posicionamiento en la mente de los consumidores, la legislación tanto nacional como internacional provee de un estatus privilegiado. Pero dicha concesión de la marca notoria se restringe a casos extraordinarios y restringidos a cada país; la Asamblea General de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual aprobó en Ginebra en el año 2000 un documento titulado “Recomendación Conjunta relativa a las Disposiciones Sobre La Protección de las Marcas Notoriamente Conocidas” que permite a las autoridades nacionales, de manera unificada y estructurada determinar si una marca pueda ser privilegiada con la supra protección conferida a las notoriamente conocidas. Otro concepto importante de manejar es el que Luis Bassat en su obra, “EL LIBRO ROJO DE LAS MARCAS17”, expone: “La marca, en cambio, es algo inmaterial e invisible, que identifica, califica y, sobre todo, da un valor añadido. Es lo que el usuario o consumidor siente una vez ha satisfecho su necesidad con el producto”. Si bien las definiciones que la doctrina nos puedan dar nos sirven de estructura, el fundamento legal que constituye la base de lo que debemos conocer y entender como marca nos la brinda el artículo 4 del Decreto 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial definiéndolo como: “todo signo que sea apto para distinguir los productos o servicios producidos, comercializados o prestados por una persona individual o jurídica, de otros productos o servicios idénticos o similares que sean producidos, comercializados o prestados por otra18”. Bassat Luis, El libro rojo de las marcas, España, Ediciones Espasa Calpe, S.A. 2006 Pág. 28. 17 18 Congreso de la República, decreto 57-2000. SEÑAL DE PUBLICIDAD: El Decreto 57- 2000 del Congreso de la República “Ley de la Propiedad Industrial” en su artículo cuarto nos define a la expresión o señal de publicidad como: “toda leyenda, anuncio, frase, combinación de palabras, diseño, grabado o cualquier otro medio similar, siempre que sea original y característico, que se emplee con el fin de atraer la atención de los consumidores o usuarios sobre uno o varios productos, servicios, empresas o establecimientos mercantiles”. Es importante resaltar que como la UNESCO, declaró en 1978 que: “la publicidad es esencialmente una actividad de comunicación, que forma parte de proceso y del sistema de comunicación y que apunta a promover la venta de un artículo, producto o servicio; a fomentar una idea o a lograr cualquier otro efecto que se desee conseguir el anunciante”19 Existe un valor no necesariamente comercial sobre la publicidad. Es importante tomar en consideración que si bien las señales de publicidad son signos distintivos, los mismos son accesorios de un principal, ya que a diferencia de un nombre comercial o una marca, que subsisten por sí mismas, las señales de publicidad, caso contrario son accesorias, ya que por su naturaleza están íntimamente ligadas con una marca. La señal de publicidad o slogan, es ya un producto de la mercadotecnia moderna, toda vez que la misma surge para apelar a la identidad y percepción del Bloques temáticos, Ministerio de Educación del Gobierno de España, Media publicidad, España, 2011,acceso http://recursos.cnice.mec.es/media/publicidad/bloque2/pag8.html Consultado el 8/02/2011. 19 consumidor y dirigirla hacia el producto o servicio que promociona. Entendemos entonces que las marcas surgen como un primer paso dentro de la evolución natural del mercado y las señales de publicidad son un segundo paso para el mercado. Si bien las marcas las produjeron los primeros empresarios, para hacer valer su individualidad, son las señales de publicidad las que han permitidos a las marcas lograr alcanzar un mercado más amplio de manera más efectiva. El autor José Antonio Muñiz Velázquez en su artículo “El papel del eslogan en la actitud hacia la marca: Una tentativa de estudio experimental20”, nos define a la señal de publicidad como: “Una frase breve, simple, concisa, brillante y recordable, que expresa la ventaja principal del producto y que se repite a lo largo de una campaña publicitaria”. Vemos que como el autor Muñiz Velásquez nos dice, la señal de publicidad “expresa la ventaja principal del producto” es decir invita a los nuevos consumidores, que no han tenido contacto con la marca anteriormente, a probarlo, generándole una expectativa sobre la misma, creando ese primer acercamiento, empujando al consumidor indeciso a la toma de una decisión. Tenemos pues que el éxito de una señal de publicidad no radica en la marca con la que se vincula, sino con su capacidad de conectarse con el consumidor y generarle la necesidad de la marca. Una buena señal de publicidad podrá hacer Muñiz Velázquez José Antonio, El papel del eslogan en la actitud hacia la marca: Una tentativa de Estudio experimental”, Cuestiones Publicitarias, Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla, Volumen I, No 10, España, pág. 123. 20 que una marca débil, resalte dentro el mercado, pero una marca fuerte no puede hacer que la señal de publicidad sea exitosa. NOMBRE COMERCIAL: La legislación vigente, en su artículo 4 nos define a los nombres comerciales como: Un Signo denominativo o mixto, con el que se identifica y distingue a una empresa, a un establecimiento mercantil o una entidad. Dicho precepto también es acuñado en la doctrina Guillermo Cabanellas nos define al nombre comercial en su “Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual” como “El que sirve para diferenciar al comerciante en su tráfico. El que distingue a una casa o empresa de comercio, o un establecimiento agrícola o fabril.”21 El autor Manuel Ossorio en su “Diccionario de Ciencias Jurídicas Políticas y Sociales22” amplía un poco más al definirlo de la siguiente manera: “Designación que se utiliza respecto de una actividad económica, para distinguirla. Los derechos respecto de ella se adquieren a base de su uso, y normalmente están limitados a las actividades y zonas en las que tal designación o nombre comercial es conocido” La Organización Mundial de la Propiedad Industrial en su folleto informativo denominado “Principios básicos de la Propiedad Industrial” 23define a los nombres comerciales de la siguiente manera: “Nombres comerciales. Los nombres y las designaciones comerciales constituyen otra categoría dentro del ámbito de la Nombre Comercial Cabanellas Guillermo. Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual, Editorial Heliasta S.R.L. Buenos Aires, Argentina, 1979, 12a. Edición. pág. 560, 21 22 Nombre Comercial, Op cit. Pág. 648 Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, “Principios Básicos de la Propiedad Industrial”, Publicación de la OMPI N° 895(S), Suiza, 2005 Pág. 16. 23 propiedad industrial. Por nombre comercial se entiende el nombre o la designación que permite identificar a una empresa. En la mayoría de los países, los nombres comerciales se registran ante las debidas autoridades gubernamentales. Ahora bien, según lo dispuesto en el artículo 8 del Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial, los nombres comerciales gozan de protección automática sin que exista la obligación de depósito o de registro, y formen o no parte de una marca. Por protección se entiende, por lo general, que el nombre comercial de una empresa no puede ser utilizado por otra, ya sea como nombre comercial o como marca de comercio de servicios y, en la medida en que ello pueda inducir a error al público, no puede utilizarse el nombre ni una designación similar al nombre comercial de que se trate”. Es importante resaltar que en nuestra legislación a los nombres comerciales se les otorga una especial protección, ya que la misma se concede con el simple uso en público, caso contrario con las marcas y las señales de publicidad, cuya protección únicamente se otorga en caso que se sigua el procedimiento de registro y este sea cedido. En este sentido El Diccionario Jurídico Espasa 24define el nombre comercial de la siguiente manera: “Signo o denominación que sirve para diferenciar a una persona física o jurídica en el ejercicio de su actividad empresarial y que distinguen su actividad de otras idénticas o similares. Según establece la vigente Ley de Marcas de 1988, pueden serlos los nombres patronímicos y las denominaciones sociales, las denominaciones de fantasía, las alusivas al objeto social, los anagramas y cualquier combinación de lo anterior, siendo ésta una enumeración sólo enunciativa. A diferencia de la marca, y aunque los preceptos relativos a la misma le son aplicables en lo que no resulte incompatible, su registro es protestativo, no 24 Nombre comercial, Op Cit.. Pág. 1030. puede transmitirse con independencia de la empresa, y para solicitar el registro es preceptivo acompañar la oportuna licencia fiscal de la actividad que se pretende proteger”. Si bien es cierto los tres tipos de signos distintivos que hemos estudiado, tienen sus propias características y atribuciones, se debe tener siempre en cuenta que al final el consumidor es el que validará la eficacia de cada uno de ellos al momento de tomar su decisión. Como la autora Laura Ries Al Ries25” nos dice: “Sin embargo cuando se mira dentro de la mente de los clientes, todas estas variantes desaparecen. Imaginémonos a un cliente diciéndole a un amigo: Que opinas de esta nueva marca de apoyo, No mucho. Prefiero las megamarcas y las submarcas. La gente no habla ni piensa así”. 1.4 De la forma de adquisición del derecho sobre los signos distintivos. El autor Federico Puig Peña en su obra Compendio de Derecho Civil Español establece que “el fundamento del derecho de propiedad está en la necesidades del hombre y de las agrupaciones humanas (familia y sociedad), que precisan la apropiación de las cosas del mundo exterior, útiles a la subsistencia y progreso de unos y otros”26. En el caso de los signos distintivos, vienen a ser los elementos que modifiquen la intención de los consumidores para la “apropiación” del producto 25 Al Ries Laura Ries, Op. Cit., pág. 7. Puig Peña Federico. Compendio de Derecho Civil Español, Madrid, España, Editorial Pirámide, S.A.1976, Tomo II, pág. 52. 26 o servicio, es requerido entonces que para su desarrollo se delimitan los derechos de las partes, tanto del consumidor como el del comerciante. En el campo de las delimitaciones de los derechos de las partes en una relación comercial, el elemento de la propiedad privada adquiere especial connotación. Esta permite determinar las formas de adquisición del derecho a la propiedad privada y a la transmisión de la misma. Este principio de la propiedad privada, sobre bienes materiales es hasta cierta manera sencillo de establecer y desarrollar, dado a su naturaleza material y fácilmente delimitado y entendido, a razón de su forma y dimensiones. Pero en el ámbito de los bienes inmateriales, donde se encuentran los signos distintivos, dicho desarrollo se vuelve más complejo, ya que para su creación, transmisión y tenencia se necesitan verificar elementos totalmente distintos a los que los bienes materiales necesitan, es decir que no hay una forma o dimensión que pueda determinar su valor. Los signos distintivos son derechos reales por su naturaleza y su elemento más importante es la propiedad que sobre la misma se puede ejercer contra terceros, y como el autor Puig Peña nos dice27, “Entre los derechos reales, ocupa un lugar preeminente –por su misma naturaleza y por los efectos que produce- la propiedad que es la más amplia y perfecta de las relaciones jurídicas que el hombre puede establecer sobre las cosas”. 27 Ibid. Pág. 7. Es así pues que en la naturaleza intangible de los signos distintivos, tanto la propiedad como el bien en sí, provienen, propiamente, de un acto administrativo, desarrollado como una declaración, caso contrario de los bienes tangibles que por su misma naturaleza están al contacto de los sentidos. El acto administrativo realizado por el Estado mediante el Registro de la Propiedad Industrial, es la forma que comúnmente se requiere para la creación del derecho. En este punto el trabajo realizado por los mercadologos y las horas de diseño no tienen valor sustentable legalmente así como comercialmente. Existe una excepción y la misma son los nombres comerciales donde el Código de Comercio, establece que el primer uso en público otorga el derecho sobre dicho nombre. Si bien, si existe un acto creador por parte del Estado, este es amplio ya que únicamente describe las circunstancias que se deben de dar para su otorgamiento, este no recae específicamente en cada caso, como las marcas y las señales de publicidad que requieren un procedimiento administrativo para constituirse como un derecho. Es importante resaltar que si bien se discute la constitución del derecho sobre el bien, el valor comercial del mismo es totalmente independiente de este aspecto ya que viene a estar supeditado a la percepción de los consumidores. Si bien la legislación actual así lo determina, la tendencia internacional se está abriendo a unas nuevas posibilidades donde figuras como la “distintividad adquirida”, buscan abrir nuevas posibilidades para la adquisición del derecho sobre el signo distintivo, el autor Jesús López Cegarra en su obra “Marcas: La distintividad adquirida en el Derecho Comunitario Andino28” nos describe: “el uso como signo distintivo de productos y servicios es lo que permite que el consumidor asocie la marca a una determinada fuente y por tanto establezca la conexión marca producto/servicio. En consonancia con lo anterior, la “distintividad adquirida” flexibiliza el régimen atributivo por el registro en materia de marcas, dándole valor al uso previo al registro y estableciendo excepciones a determinadas causales de irregistrabilidad de carácter absoluto”. Permite aunque sea en principio doctrinario únicamente darle valor registral a la asociación exclusiva entre la marca y el titular, permitiéndole apropiarse para su uso exclusivo un término que le hubiera sido negado. Lo más importante sobre esta nueva corriente, es que en la misma se refleja una concordancia entre la legislación y la mercadotecnia, en el sentido de que se incorpora y reconoce de cierta manera más completa el elemento de la percepción del consumidor dentro de la ecuación sobre los derechos intangibles de los signos distintivos. En el caso de Guatemala actualmente podemos ver entonces que la propiedad de los signos distintivos esta supeditados a la inscripción de los mismos en el Registro respectivo (Art. 35 y 70 del Decreto 57-2000 Ley de la Propiedad Industrial). Repositorio Institucional de la Universidad de los Andes, República Bolivariana de Venezuela, Jesús López Cegarra, distintividad adquirida, Venezuela, http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/28840/1/articulo2.pdf; Consultado 01/05/2012. 28 El autor Jorge Otamendi, en su libro “Derecho de Marcas29” explica brevemente en que consiste el sistema “atributivo” y su diferenciación con el “declarativo de la siguiente forma: “Nuestra ley ha adoptado el sistema atributivo para la adquisición del derecho exclusivo sobre la marca. Este sistema es el que "atribuye" el derecho a quien obtiene el registro de la marca. En el sistema atributivo no existe derecho de ninguna especie sobre la marca si no hay registro (…) El sistema declarativo es aquél en el que el derecho exclusivo nace con el uso y sólo después.” En Guatemala el sistema es evidente atributivo toda vez que no existe el signo distintivo sin el consentimiento expreso del Estado mediante el registro. El único caso del sistema declarativo contemplado en nuestra legislación lo constituyen los nombres comerciales, donde la ley les ha investido de una protección especial al facultar el dominio y en consecuencia la propiedad sobre el mismo con el primer uso en público. Esto se encuentra plasmado en el artículo 71 del Decreto 57- 2000 “ley de la Propiedad Industrial” que en específico dice “ARTICULO 71. DERECHO SOBRE EL NOMBRE COMERCIAL. El derecho exclusivo sobre un nombre comercial se adquiere por su primer uso público en el comercio y únicamente con relación al giro o actividad mercantil de la empresa o establecimiento que identifica.” El autor Gabriel Martínez Medrano, en su obra La protección de las marcas de hecho, hace una reflexión sobre los tipos de sistemas declarativo y atribuido, en el cual declara lo siguiente: “El sistema declarativo -con su variante de dar prioridad a la notoriedad- se presenta como más justo, sobre todo teniendo en cuenta que el Derecho de Marcas forma parte del Derecho de la Competencia Desleal, sin embargo este sistema se presenta como más inseguro por la falta de publicidad. 29 Otamendi, Jorge, Derecho de Marcas, México, LexisNexis-Abeledo-Perrot, 2003, Pág. 11. El sistema atributivo contribuye a la seguridad jurídica en la medida en que los derechos emergen de un registro público, pero puede dar lugar a situaciones injustas como los registros especulativos e inclusive de registros de buena fe efectuados sobre signos que vienen siendo usados por terceros en el mercado”30. El autor viene a validar la tendencia latina de buscar la certeza jurídica mediante el sistema atributivo para el registro de los signos distintivos. 30 Martínez Medrano Gabriel, La protección de las marcas de hecho, Argentina, Editorial Thomson, 2006, pág. 2. CAPITULO 2 LOS RIESGOS QUE ENFRENTAN LOS SIGNOS DISTINTIVOS 2.1. Generalidades Uno de los aspectos importantes que se deben tomar en consideración al momento de razonar sobre los riesgos que enfrentan los signos distintivos, es que no solo se está hablando acerca del riesgo de los comerciantes que imiten su producto y deje de percibir dinero, sino que el valor intangible de sus signos distintivos venga en detrimento, esto por la pérdida de apreciación en la percepción equivocada de los consumidores. El autor Jorge Otamendi, en su libro, desarrolla sobre el doble riesgo que corren los signos al ser confundidos ya que no solo afecta a los dueños sino también a los consumidores, o como señala: “Hace a la esencia del sistema marcario, que no existan marcas confundibles pertenecientes a distintos titulares. Ello no sólo perjudica al titular de la marca que puede perder clientela o ver afectado su prestigio, sino también al público consumidor que compra lo que en realidad no quería comprar”31. Porque si entendemos que como Michael Czinkotay Illkka Ronkainen en su libro32: “las marcas son mucho más que nombres y símbolos. Representan las percepciones y sentimientos que tiene los consumidores hacia un producto y su desempeño –todo lo que el producto o servicio significa para los consumidores-. En el análisis final, las marcas existen en las mentes de los consumidores”. Tenemos un elemento no considerado entre la legislación y esta constituye la 31 32 Otamendi, Jorge, Op Cit, pág. 116. Czinkota Michael y Ilka Ronkainen. Op. Cit, pág. 489. percepción y sentimiento de los consumidores que como hemos desarrollado anteriormente, el derecho también los ampara a ellos. Para entender lo que se entiende como percepción, el autor Rolando Arellano Cueva en su libro Marketing Enfoque América Latina 33lo define de la siguiente manera: “Si las sensaciones son la respuesta directa e inmediata a un estímulo simple de los órganos sensoriales, la percepción supone un paso adicional, pues en este caso el estímulo ha sido transmitido al cerebro, el cual interpreta la sensación. Tal interpretación dependerá en gran medida de las experiencias anteriores, con lo cual cabe decir que la percepción humana depende la experiencia de la sensación”. De tal cuenta que en definitiva al consumidor le permitirán discernir sobre su compra, la mezcla de sensaciones y experiencias. Tenemos entonces el primer avistamiento del sisma que hay entre lo que la ley determina y lo que la mercadotecnia entiende de los signos distintivos. Mientras que el Decreto 57-2000, del congreso de la república, en su artículo 185 enumera los elementos que debe contener la sentencia en materia, la misma no contempla de manera integral el valor que tienen los signos distintivos, en el sentido que cuentan con un valor material e inmaterial; es decir para proteger un bien intangible, el Decreto 57-2000 basa sus acciones en la materia, no así en las intangibles como lo sería la percepción. Esto claramente deja a un lado uno de los elementos fundamentales y la razón de ser de los signos distintivos la “PERCEPCIÓN” 33 de los consumidores. El Arellano Cueva, Rolando, Marketing Enfoque América Latina, México, Mcgraw-Hill, 2,000 Pág. 81. Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española34 en su página de internet, define Percepción como: “Sensación interior que resulta de una impresión material hecha en nuestros sentidos”. Vemos entonces el riesgo que existe en caso de una vulneración de los derechos de propiedad industrial, ya que pueden llevar a una disociación, un divorcio por así decirlo, entre el consumidor y la marca, donde la percepción es variada, lo que le trae un costo que no en todos los casos se puede resarcir o recuperar. Es así, que este riesgo de asociación y uso indebido de los signos distintivos constituyen la razón de ser de la ley específica, ya que como el autor Alberto Casado Cerviño, en su libro Derechos de Marcas y Protección de los consumidores35, dice “La existencia de un riesgo de confusión con otra y otras marcas es el parámetro fundamental que determina el ámbito del derecho subjetivo de marca”. Dentro del valor subjetivo del derecho, el autor Jorge Otamendi, en su libro36” hace la siguiente reflexión “Puede también hablarse de un daño a la imagen de la marca, provocado por dicha mala calidad en el producto infractor. La mayoría de las marcas representan algo para el público consumidor. Éste se forma una idea sobre una marca, que es la que determinará su reacción cada vez que se enfrente con 34 Percepción; Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, vigésima segunda edición, en la siguiente dirección http://lema.rae.es/drae/?val=persepcion, consultado el 27/09/2012. 35 Casado Cerviño Alberto, Derecho de marcas y protección de los consumidores, España, Madrid, Editorial Tecnos (Grupo Anaya, S.A.), 2000; Pág. 132. 36 Otamendi, Jorge, Op cit, Pág. 251. el producto o servicio que aquélla distinga, o con su publicidad. Esto es lo que se llama la imagen de la marca. Obviamente cuanto mejor sea la imagen, seguramente mayores serán las ventas. Pues bien, la mala calidad del producto o servicio en infracción puede modificar la buena imagen de la marca original. Sin duda este es un daño, a veces menor, a veces importante, y siempre difícil de evaluar hace un estudio sobre los diferentes perjuicios que puede tener los signos distintivos” 2.2. Debilitamiento de la fuerza distintiva de un signo Como se ha citado anteriormente existe una doble vulneración al patrimonio cuando se habla de la Propiedad Industrial, está la económica y la intangible. Sobre la primera la ley desarrolla como se protegerá y se resarcirá, mientras que el vacío legal de la segunda puede significar la eventual cancelación de su signo distintivo por convertirse genérica. De tal cuenta el artículo 65 del decreto 57-2000 habla de la cancelación por generización de la marca de la siguiente manera: “ARTICULO 65. Cancelación por generización de la marca. A pedido de cualquier persona interesada, la autoridad judicial competente podrá ordenar la cancelación del registro de una marca o limitar su alcance cuando su titular hubiese provocado o tolerado que ella se convierta en el nombre genérico de uno o varios de los productos o servicios para los cuales estuviese registrada. Se entenderá que una marca se ha convertido en nombre genérico cuando en los medios comerciales y para el público dicha marca haya perdido su carácter distintivo como indicación del origen empresarial del producto o servicio al cual se aplica.” Esto significa que hay un doble riesgo, un doble frente que pelear para el comerciante, ya que debe luchar por su interés económico y por la sobrevivencia de su signo distintivo, puesto que si su marca se debilita con relación a la precepción de los consumidores corre el riesgo que se convierta en genérica y en consecuencia la pierda. Para iniciar a hablar sobre lo que es el debilitamiento de la fuerza distintiva de un signo distintivo hay que entender propiamente las causas que lo ocasionan. Uno de los elementos fundamentales que producen la generalización de los signos distintivo es lo conocido como “LA DILUCION”: que el tratadista Frank Schechter en su obra “The Rational Basis of Trademark Protection37” desarrolla de la siguiente manera: “La dilución es el cercenamiento gradual o la dispersión de la identidad y retención de la marca o nombre en la mente del público, por su uso en productos no competitivos. Cuanto más distintiva o única es la marca, más profunda es su impresión en la conciencia del público, y mayor su necesidad de protección contra la corrupción o disociación del producto particular en conexión con el que se ha usado (*texto original en idioma inglés, traducido de manera libre por Edgar Alfredo O`Meany Castellanos)”. Este cercenamiento al que el autor Schechter hace mención, en la ciencia de la Mercadotecnia también se le conoce como perdida de posicionamiento, donde se pierde presencia dentro de la mente de los consumidores a causa de diversos factores. Sobre el posicionamiento, la autora Fabiola Mora y Walter Schupnik en su artículo “El posicionamiento: La guerra por un lugar en la mente del consumidor38” nos dice: “El posicionamiento se basa en la percepción, y en la 37 Schechter Frank, “The Rational Basis of Trademark Protection” Vol. 40 No. 6. Estados Unidos de América, Harvard Law Review, 1927 Pág. 813-833. 38 Mi Espacio, Mora Fabiola y Schupnik Walter, “El posicionamiento: La guerra por un lugar en la mente del consumidor”, Venezuela http://www.infosol.com.mx/espacio/cont/investigacion/guerra.html consultado el 28/09/2012. percepción es la verdad dentro del individuo. La percepción es el “significado que en base a las experiencias, atribuimos a los estímulos que nos entran por los sentidos”. Es por eso, que el titular de un signo distintivo, debe velar por sus intereses en Propiedad Industrial tomando en consideración tanto la parte económica como la parte intangible. Es sobre esta parte intangible que debe estar siempre atento, por ejemplo el Registro de la Propiedad Intelectual puede permitir la legitimación de marcas similares, lo cual genera un detrimento en el valor de la marca ya que la misma pierde su lugar privilegiado en la precepción de los consumidores, ya que como el tratadista Jorge Otamendi39, escribe en su libro “La dilución de una marca se produce toda vez que ésta coexista con otra idéntica o casi idéntica. La pérdida gradual del poder distintivo la sufrirá la marca, sea notoria o no. Pero es lógico otorgar esta protección sólo excepcionalmente, es decir, cuando se trate de una marca notoria. Lo contrario significaría borrar las clasificaciones de marcas, y el registro en una clase determinaría el registro en todas, lo que es absurdo”. Como referencia a este riesgo se describe el siguiente caso concreto contenido en la reseña de la revista PE.I .del fallo en Casación emitido por la sala 1ª del Tribunal Supremo en sentencia del 26 de febrero del 2004 40donde le otorgó el carácter de genérico al término “multiactive”, utilizado en productos de cosmética: …“La cuestión a resolver es, por tanto, si la palabra compuesta “multiactive”, registrada como marca por el demandante, tiene carácter genérico y, por tanto, debe declarase su nulidad y la posibilidad de que sea utilizada por cualquier persona. El Tribunal defiende este carácter genérico, en virtud de cuatro razonamientos. En primer lugar, el significado de la palabra es claramente perceptible por el 39 40 Otamendi, Jorge, Op cit, Pág. 179 Pe.i., España, número 17, edición de mayo-agosto 2004, Editorial Bercal, S.A. pág. 107/108. consumidor medio, ya que la unión de las palabras multi y active da cuenta de que el cosmético es muy activo, y aunque la palabra se exprese en lengua francesa e inglesa, ello no la convierte en fantasiosa o privativa del que la registra o del primero que la utiliza. En segundo término, la palabra se ha generalizado en el mundo de la cosmética, ya que según las pruebas aportadas es utilizada por diversas firmas de cosméticos. En tercer lugar, aunque el demandado haya registrado el término como marca, no tiene derecho a monopolizar su uso en caso de que sea genérico…” Vemos que el riesgo de los signos protegidos a pesar de estar debidamente inscritos, debe velar por mantener derecho vivo. Es decir proteger su valor intangible, el cual radica en la percepción de los consumidores y que siga en consecuencia siendo ese elemento diferenciador en el mercado. La generización de un signo distintivo en sí no es culpa del éxito del mismo, sino el mal manejo de los activos intangibles, ya que en lugar de orientar al consumidor sobre el origen empresarial y garantía de servicio, dejo por un lado el primero y se enfocó en la masificación del signo distintivo. La consecuencia final, golpea a los titulares con la pérdida de su signo distintivo a la colectividad del mercado. Otro aspecto importante en considerar es la fuerza distintiva de la marca, la cual se debe entender como la capacidad intrínseca de la denominación o grafía para que por sí misma sea novedosa y fantasiosa para hacia los productos o servicios que protege. Porque como observamos en el fallo anteriormente descrito, si bien se contaba con el registro de la denominación “multiactive”, la misma en el campo de la cosmetología se utilizaba comúnmente, razón por la cual fue declarada genérica y el legítimo titular perdió su derecho sobre la misma. 2.3 Elementos de un signo distintivo fuerte Como ya se discutió con anterioridad el valor de un signo distintivo lo constituye entre otros el posicionamiento dentro de la mente de los consumidores. Es por ello que para mantener el valor de los mismos, estos deben ser “TOP OF THE MIND (tenerlos siempre presentes)” y mantenerse ahí. El valor del posicionamiento de las marcas ha sido estudiado a tal grado que los autores Fabiola Mora y Walter Schupnik en su artículo41 comentan “A la hora de posicionarse en la mente del consumidor, el que lo hace primero, estadísticamente comprobado, obtiene el doble de la participación de mercado que el segundo y cuadruplica al tercero”. Para empezar debemos entender que un Signo Distintivo fuerte, es aquel que al ser sometido al escrutinio de los consumidores, es capaz de sobresalir del resto de productos y servicios, idénticos, de manera instantánea e instintiva. La importancia de un signo fuerte, es que sea capaz de generar una percepción positiva en el consumidor pero por sobre todo, mantenerla. De esa forma logra su posicionamiento y la lealtad de sus consumidores. El autor Rolando Arellano en su obra42, elabora un listado sobre las características de un signo distintivo bueno: 41 Mora Fabiola y Schupnik Walter, Op. Cit. Pág. 300. 42 Arellano Rolando, Op.Cit. pág. 219 “1. DEBE SEÑALAR LAS VENTAJAS DEL PRODUCTO: De esta manera el signo transmitirá, además de la identificación del producto, un mensaje publicitario permanente al público. 2. DEBE SER CORTA: Una marca corta es mucho más fácil de recordar. 3. DEBE SER FÁCIL DE PRONUNCIAR: Un signo fácil de pronunciar será mencionado mayor cantidad de veces que una difícil de hacerlo. 4. NO DEBE SER GENERICA: La ley no permite registrar como marca un nombre genérico del mismo producto. 5. DEBE SER ESTABLE EN EL TIEMPO: No deberá ligarse ésta a productos de moda o pasajeros. 6. DEBE SER DIFERENCIABLE: A menos que busque aprovechar el éxito de una marca líder, la marca deberá diferenciar al producto de los productos de la competencia. 7. DEBE SER REGISTRABLE: Deberá ponerse mucho cuidado en este aspecto, sobre todo cuando se trata de identificar productos que son destinados a un mercado internacional en el cual las palabras pueden tener sentidos muy diferentes de un país a otro. 8. DEBE SER FÁCIL DE DECLINAR: Finalmente, una marca que puede ser declinable, da muchas facilidades a la creación posterior de marcas secundarias, actuando como marca paraguas. Esta posibilidad disminuye mucho los costos de introducción de una nueva marca.” Muchos empresarios pretenden distinguirse mediante signos que lleven integrados elementos propios y descriptivos de sus productos o servicios. De esa cuenta la ley guatemalteca es muy tajante al prohibirlo por razones intrínseca, ya que un comerciante no puede atribuirse para si el uso de elementos comunes al giro de su negocio. Aunque existen, salidas legales que han permitido la utilización de ciertas raíces genéricas, las mismas son comúnmente utilizadas como un medio de comercialización ya que permite su publicidad a un coste menor. Un ejemplo común de estos casos son las farmacéuticas que trabajan con los medicamentos “genéricas43, si bien gozan de cierta protección, la misma se limita a los elementos no comunes de su denominación. Una de las razones por las cuales algunos empresarios se han inclinado a la utilización de ciertos términos de uso común para el comercio (los términos genéricos) en sus signos distintivos, es porque estos le permiten explicar al cliente de manera rápida y sencilla, sobre lo que trata el producto o servicio. El autor James Dimitrijevs en su artículo nos ejemplifica como se pueden sortear las dificultades que presentan el mercado al proponer una sinergia entre los abogados y los mercadologos. “Si el agente de comercialización insiste en que una marca que utiliza un término descriptivo para identificar un producto permite a los consumidores comprender de qué se trata con mayor facilidad, el abogado de marcas debería sugerir que se altere la marca propuesta o se añada algún otro elemento para que sea suficientemente distintiva.” 44 La disyuntiva con la utilización de este tipo de signos distintivos de limitada fuerza es que el mayor riesgo al permitir que exista confusión entre los consumidores, 43 44 Dicho de un medicamento: Que tiene la misma composición que un específico, y se comercializa bajo la denominación de su principio activo. Real Academia de la Lengua Española, vigésima segunda edición. http://lema.rae.es/drae/?val=gen%C3%A9ricas consultado el 27/03/2013. Dimitrijevs James, Op cit, pág 11. llega a repercutir ya no solo a las partes en conflicto sino que también a terceros (consumidores). En este sentido el autor Raizabel Mendéz Andrade en su libro Temas Marcarios: para la comunidad andina de Naciones45 expone “La determinación del riesgo de confusión cuando se trata de signos que pretenden distinguir productos farmacéuticos, merece un tratamiento especial pues están involucrados factores que afectan a la persona humana”. Para evitar perder su posicionamiento debe protegerse de elementos externos e internos, como el caso de WalkMan, Aspirina, Mejoral, kotex, Corn Flakes y próximamente “ipod” son marcas victimas de su propio éxito. Que si bien en su momento tanto Sony, Bayer y Apple han luchado porque ningún tercero se apropie de su denominación, las mismas fueron icónicas y el consumidor dejo de asociarlas con la casa productora, concentrándose únicamente en el producto, volviendo de esa forma “genéricas” o “de uso común”. El autor Rolando Arellano 46en su obra explica lo siguiente: “Por esta razón es importante que las empresas no solamente vigilen continuamente el estado de su marca para evitar copia de ésta por los competidores, sino también que deben vigilar sus propias estrategias para evitar que su marca se convierta en genérica. En algunos casos, las empresas incluso van a decidir realizar campañas publicitarias con el fin de evitar que el público use su marca como sinónimo del genérico, con el costo y el riesgo consiguiente de tal campaña”. 45 46 Mendez Andrade, Raizabel. Temas Marcarios: Para la comunidad Andina de naciones. Mexico. Editorial LIVROSCA, 1999, 3 edición. Pág. 7. Arellano Rolando, Op.Cit. pág. 212. Esta situación está relacionada con una de las premisas que manejan los mercadólogos el cual es “las marcas no son para siempre”. Surge un conflicto con lo que la ley permite, que es la consecutiva renovación por periodos de diez años de cada marca o señal de publicidad tal cual. Existen sus claras excepciones donde por ejemplo la empresa “Saint Gobain Glass” guarda un muy impresionante record de estar en el mercado desde 1665. Volviendo a los peligros propios de los signos distintivos Jorge Otamendi en su obra47 desarrolla el tema del daño especial a la imagen así: “Otra forma de dañar la marca en su imagen es a través de la dilución,(….) Se ha reconocido que "la pérdida de poder identificatorio de una marca -su debilitamiento o dilución- son factores causantes de un daño cierto, y no meramente hipotético o conjetural; carácter que no desaparece por el hecho de que su evaluación sea verdaderamente problemática". Si bien podemos hablar mucho sobre el posicionamiento, la fuerza distintiva, la cuantificación y calificación de las mismas son muy difíciles. Casi que se puede asegurar que las mismas se circunscriben a la calificación de un juez o a la interpretación de un estudio de mercado. Otamendi 48dice: “Si hay una característica común a todos estos daños es la dificultad de medir qué tanto se ha dañado la imagen, y la manera de cuantificar el daño. Pero, al igual de lo que sucede con los casos de daños por confusión, el daño existe y el juez deberá establecer prudencialmente el monto de la reparación.” 47 Otamendi Jorge, Op cit, pág. 234. 48 Ibid, Pág. 134. 2.4. Efectos del debilitamiento de un signo distintivo El efecto de mayor trascendencia es la pérdida del mismo; es decir cuando un signo deja de ser distintivo el misma pierde su razón de existir. Al ser incapaz de ser el elemento de distinción de productos de su misma especie el signo deja de tener valor para los empresarios y como el citado autor Otamendi 49nos dice: “La teoría de la dilución ha sido creada para defender la relación marca- producto, especialmente en cuanto aquélla implica el origen de éste. Si se permite que coexistan con ésta otras marcas iguales, el público consumidor ya no sabrá cuál es el origen de los productos. Pero si coexisten varias marcas, notorias o no, formadas por el mismo signo, el daño mencionado ya no puede producirse, puesto que la misma marca tiene orígenes diferentes.” Como elemento esencial que debemos considerar al momento de discernir sobre la distinción, es que la misma se basa en la percepción, es decir el elemento consumidor entra a la palestra y su entendimiento del signo distintivo en su entorno, por lo que si dicha percepción llega a ser alterada o modificada por elementos que la hagan mimetizarse con su entorno, la misma deja cumplir con su función tanto para el empresario como para el propio consumidor. Sobre el efecto fatídico, que se tiene con el debilitamiento de los signos distintivos El autor Garrido en su artículo “¿Marcas Diferencian? 50 comenta : ”Las marcas cada vez se igualan más, se podría decir que están perdiendo peligrosamente su cualidad más esencial, aquello que hace que sean marcas, su capacidad de 49 50 Ibid, Pág. 289-290. Garrido Rafael, “¿Las Marcas diferencian?” Investigación y Marketing Número 76, España, 2003 Pág. 9. discriminación y diferenciación. En algunos mercados es tan importante esta pérdida que existe el riesgo real de la desaparición de la marca, al menos tal y como la hemos entendido hasta ahora”. Es claro entonces, que todo signo que se pierda en el mercado, incapaz de captar la percepción del consumidor está condenado a morir. Junto con él toda inversión tanto económica como de tiempo se verá perdida. CAPITULO 3 MECANISMOS DE DEFENSA, ADMINISTRATIVOS Y CIVILES PARA PROTEGER LOS DERECHOS DE LOS TITULARES DE UN SIGNO DISTINTIVO 3.1 De la protección de los signos distintivos Toda norma para cumplir su función reguladora necesita compeler a su cumplimiento y vigilancia, ya sea mediante una gratificación o una sanción. En este sentido cuando hablamos de los signos distintivos la norma establece los derechos que se adquirieren al momento de su constitución, y promete la vigilancia del mismo derecho mediante sanciones que buscan proteger su integridad. La peculiaridad de la inmaterialidad del derecho que existe en los signos distintivos, hace que el enramado legal encargado de su protección se deba adecuar a las necesidades especiales que el caso amerita, y proveer el correcto disuasivo a quienes intenten violentar dicho derecho. En el sentido que debe proteger la inversión que el comerciante ha hecho para posicionarse en la mente de los consumidores, por lo que el elemento de la percepción de los consumidores entra en la ecuación, cuando a la protección de los signos distintivos se trata. El no tener la posibilidad de hacer valer los derechos debidamente adquiridos es equivalente a no tenerlos, lo que ocasionaría un estancamiento en el desarrollo de la humanidad y del mercado, Velasco Pérez Velasco David51 en su ensayo 51 Función Economica de las Marcas.Velasco Pérez Velasco David, Universidad San Martin de Porres, Perú, febrero del 2012, Perú disponible http://www.usmp.edu.pe/derecho/centro_derecho_economia/revista/febrero_2012/LA_FUNCION_ECONOMICA_ DE_LOS_SIGNOS_DISTINTIVOS_David_Velasco.pdf accesible 25 de abril del 2012. denominado “La función económica de los signos distintivos” nos dice: “ Si en un país se abolieran súbitamente los derechos de propiedad, un agricultor seguiría sembrando, por ejemplo, maíz, para su consumo personal, pero si todo el maíz maduro fuera tomado por su vecino que es más fuerte, el agricultor no tendría la posibilidad de recurrir a ningún remedio legal para solucionar ese problema, ya que el agricultor no sería propietario de la tierra que cultiva, ni del maíz que sembró, por lo que evidentemente se implantaría la ley del más fuerte y el vecino se impondría al agricultor. Pero el efecto principal que generaría esta situación, sería que el agricultor decidiría abandonar su actividad y finalmente aquella sociedad regresaría a una vida semejante a la del Paleolítico, es decir, dedicada a la caza y la recolección como medios de subsistencia, pues sin derechos de propiedad, no existiría ningún incentivo para incurrir en costos de inversión en tiempo, trabajo e insumos, porque no habría ninguna recompensa razonablemente asegurada para tal acción; no existiría la facultad de exclusión respecto de la riqueza que cada individuo produce”. Lo mismo sucede con las invenciones y sus patentes, los signos distintivos y sus productos, toda vez que la propiedad privada y la libre competencia son motores para el desarrollo porque incentivan la inversión, puesto que la misma viene con la promesa de una retribución económica. En el caso de los bienes intangibles, la ley nos define que es el bien jurídico tutelado, nos otorga una serie de herramientas para proteger los intereses de los propietarios o licenciatarios de los signos distintivos, contra cualquier aprovechamiento no autorizado, que pudiera poner en peligro su patrimonio económico (su inversión en el producto o servicio) como él intangible (el signo distintivo). Las herramientas establecidas en la legislación son de carácter reactivas, ya que actúa en base a acciones fijas y determinadas. Son a estas acciones las que ataca directamente, dejando por un lado el bien jurídico tutelado, buscando detener la infracción y restituir las cosas a su estado, previo a la infracción. Dentro de las acciones fijas y determinadas que actualmente la legislación tiene determinadas para la materia, el artículo 185 del decreto 57-2000,del Congreso de la República, Ley de la Propiedad Industrial, hace un listado sobre el alcance que la sentencia que en materia civil pueda contener. En el sentido que expresamente faculta a los juzgadores a desarrollar a tomar una serie de medidas paliativas en donde encontramos el comiso y/o destrucción del producto en contienda. Entre las acciones excepcionales y determinantes que la ley otorga se encuentra lo contenido en la literal c) del citado artículo que literalmente establece: “… c) Ordenar la destrucción de los materiales e instrumentos que se hayan utilizado en la producción de las mercancías infractoras, sin indemnización alguna para su propietario…” Es de esta forma como la ley da un paso hacia adelante en la búsqueda de la mejor protección a la propiedad industrial, como como consecuencia de una reacción esta disposición busca ser proactiva sobre futuros acontecimientos que pudieran ser contrarios a la ley en detrimento de la propiedad y valor de los signos distintivos. Siguiendo con la línea de acciones no solo reactivas sino proactivas del citado artículo el numeral f) establece literalmente lo siguiente: “ Ordenar que cesen los actos infractores o de competencia desleal y que se tomen las medidas necesarias para impedir sus consecuencias y recurrencia y ordenar resarcimiento por daños y perjuicios”; en este se faculta para que se “se tomen las medidas necesarias para impedir sus consecuencias y recurrencia”, la primera consecuencia sería el daño económico directo, que se tiene cuando se deja de percibir el ingreso directo, pero sobre el otro impacto negativo que la competencia desleal tiene, este impacto sobre la percepción de los consumidores la ley no habla nada, aunque la puerta está abierta a tomar cualquier acción, mientras no se tenga conciencia del daño inmaterial que se tiene, dicha puerta no se cruzara. En resumen, la mayoría de las acciones anteriormente descritas buscan restituir los bienes materiales a como se encontraban antes de la infracción o la destrucción de los mismos. Las mismas vinculan únicamente al infractor con el titular. No así sobre el daño inmaterial, el que recae sobre la percepción de los consumidores, la legislación no es clara con referencia a que acciones se tomaran para que las cosas (en este caso la percepción) vuelvan al estado anterior de la infracción. Czinkota Michael y Illkka Ronkainen en su libro nos explican que uno de los errores más comunes y que derivan en la pérdida del valor de los bienes intangibles es la “Batalla de percepciones. El error de no entender una verdad tan simple como que la batalla por el consumidor, es una lucha por las percepciones, hace fracasar a miles de emprendedores todos los años. No hay mejores productos; lo que realmente existe en el mundo del marketing son percepciones en la mente de los clientes actuales y potenciales. La percepción es la realidad. Todo lo demás es una ilusión”.52 Los autores son muy claros al establecer que el frente de batalla en la guerra de los signos distintivos no se disputa en los anaqueles de un supermercado, sino en la mente de los consumidores. 3.2 De las acciones administrativas y civiles establecidas en el Decreto 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. El valor de una norma está determinado en gran medida en su capacidad de hacerla valer ante terceros, de tal manera que nuestro ordenamiento está 52Czinkota Michael y Ilkan Ronkainen. Op. Cit, pág. 67. organizado de tal manera que permite al titular de un derecho acudir ante los órganos jurisdiccionales para hacerlo valer ante terceros. Para lograr dicho cometido debe primero “acudir” a los órganos jurisdiccionales competentes, por lo que debe para ello hacer uso tanto del derecho sustantivo (propiedad del derecho), en combinación del derecho adjetivo. Esta incursión al derecho adjetivo entra a ser regulado entre otras legislaciones al Derecho Procesal Civil El autor Lino Enrique Palacio en su libro nos brinda una definición del derecho procesal suficientemente clara al describirla como: el conjunto de normas que regulan el proceso, a éste como el “medio” o el “instrumento” tendiente a realizar la jurisdicción, y a esta última como aquella función mediante la cual el Estado, a través de sus órganos judiciales, asegura el cumplimiento de las normas generales de conducta cuando, sea por inobservancia de sus disposiciones, o per mediar un estado de incertidumbre acerca de los interés que tutelan la actuación espontánea de tales normas no resulta posible53” De igual manera el autor Vicente Gimeno Sendra define al proceso como “conjunto de derechos de naturaleza constitucional, obligaciones, posibilidades y cargas, a que asisten a los sujetos procesales, como consecuencia del ejercicio de la acción y cuya realización, ante el órgano jurisdiccional, origina la aparición de sucesivas situaciones procesales, desde las que, en un estado de contradicción, examinan las partes sus expectativas de una sentencia favorable y, con ella, la satisfacción definitiva de sus respectivas pretensiones y resistencias54”. 53 Palacio Lino enrique, Derecho Procesal Civil, Tomo I, Argentina, Editorial Abeledo-Perrot, 1994, Pág. 14. 54 Vicente Gimeno Sendra y otros. Derecho Procesal, España. Editorial Tirant Lo Blanch, 1988, tercera edición, pág. 184. También es relevante definir que dentro del Derecho Procesal hay procesos y procedimientos. El mismo autor Lino Enrique Palacio en su obra ayuda a esclarecer la diferencia entre proceso y procedimiento al establecer lo siguiente: “El proceso representa el conjunto de actos que son necesarios, en cada caso, para obtener la decisión de un caso concreto por parte de determinados órganos. El procedimiento, en cambio, constituye cada una de las fases o etapas que aquél puede comprender- Así, al procedimiento de primera instancia puede seguir, en caso de apelación, un procedimiento de segunda instancia, en cuyo caso el proceso se integra con dos procedimientos.”55 Los elementos del proceso son el subjetivo, objetivo y la actividad, el autor Lino Enrique Palacio desarrolla cada uno de los elementos dentro del proceso a efectos de su estudio: “el elemento subjetivo se halla representado por las personas facultadas para iniciarlo, impulsarlo, extinguirlo y decidirlo (…)El elemento objetivo del proceso puede hallarse constituido por una pretensión o por una petición extra contenciosa, según que la intervención del órgano sea requerida para resolver un conflicto o para constituir , integrar o acordar eficacia a una relación jurídica (…) La actividad, finalmente, comprende el conjunto de actos que deben cumplir los sujetos procesales desde el comienzo del proceso hasta la decisión que le pone término56” Otro de los términos que se utilizaran y que se deben de clarificar es la “sentencia” el autor Víctor Moreno Catena nos define la misma como “Las resoluciones judiciales se denominan sentencias cuando decidan definitivamente el pleito o 55 Palacio Lino, Enrique Op Cit, pág. 226. 56 Ibid., Pág. 227 a la 229. causa en cualquier instancia o recurso, o cuando según la leyes procesales, deben revestir esta forma.” 57 El autor Lino Enrique Palacio provee la definición de jurisdicción: “La aptitud o capacidad reconocida a un juez o tribunal para entender en una determinada categoría de pretensiones o de peticiones”58. En el presente apartado nos dedicaremos a estudiar como las actuaciones de los legítimos titulares de signos distintivos, son correspondidas por el Estado mediante sus jueces. 3.2.1 De los procesos administrativos El diccionario Jurídico Espasa 59define el proceso administrativo como: “el procedimiento de realización de la función administrativa, y, más concretamente, el modo de producción de los actos administrativos”. De igual forma, pero de manera más específica Manuel Ossorio lo define60como: El que no se sigue ante la jurisdicción judicial, sino ante los organismos dependientes del Poder Ejecutivo, cuyas resoluciones son generalmente impugnables ante los organismos del Poder Judicial”. Dicha definición se aplica de mejor manera al presente caso, toda vez que los procedimientos de carácter administrativo, se conocen en primera instancia ante 57 Moreno Catena victor y otros. Derecho Procesal, España. Editorial Tirant Lo Blanch, 1988, tercera edición, pág. 204 58 Palacio Lino enrique, Op Cit., Pág. 227 59 Proceso Administrativo, Diccionario Jurídico Espasa, Fundacion tomas Moro, 2005, Pág. 1172 60 Ossorio, Manuel, Op. Cit., pág. 803 el Registro de la Propiedad Industrial, órgano dependiente del Ministerio de Economía que a su vez forma parte del Organismo Ejecutivo. Una de las condicionantes para poder acudir a la presente instancia es que ocurra un Acto Administrativo, el autor Carlos García Oviedo, en su libro “Derecho Administrativo61”, nos define el acto administrativo como: “El Acto administrativo, rigurosamente considerado, es un acto jurídico, se propone la producción de un efecto de Derecho, pero no es sino una categoría especial del acto jurídico. Acto Jurídico es el género; acto administrativo, la especie. Para que el acto jurídico sea acto administrativo, precisa que el efecto jurídico se produzca para la realización de un fin administrativo”. En este caso dicho Acto administrativo sería la emisión del edicto para su publicación o el registro mismo del signo distintivo. Estos actos constituyen los derechos por sobre los cuales se pretende accionar, a efectos de proteger un derecho anterior o mejor. Como se mencionó anteriormente este tipo de medidas se solicita al ente especializado en la materia “El Registro de la Propiedad Intelectual” para que actué sobre una pretensión de un tercero de apropiarse total o parcialmente de elementos que estén protegidos. El Decreto 57-2000, del Congreso de la República, Ley de la Propiedad Industrial, establece una única acción administrativa, para que los legítimos propietarios de los signos distintivos protejan sus intereses como tales. Siendo esta la regulada en el artículo 27, denominada oposición a la solicitud de registro de un signo distintivo: 61 García Oviedo, Derecho Administrativo. Madrid, Editorial e.i.s.a., 1962 Pág.282 y 283. “ARTICULO 27. Oposición al registro. Cualquier persona interesada podrá presentar oposición contra la solicitud de registro de una marca dentro del plazo de dos meses contados a partir de la fecha de la primera publicación del edicto. El opositor deberá indicar los fundamentos de hecho y de derecho en que se basa, acompañando u ofreciendo los medios de prueba en que sustenta su pretensión y, además, cumplir con lo establecido en el artículo 5 de esta ley. De la oposición se dará audiencia al solicitante de la marca por el plazo de dos meses. La contestación a la oposición deberá satisfacer los mismos requisitos mencionados en el párrafo que antecede. Si fuere necesario recibir medios de prueba ofrecidos por el opositor o el solicitante, se decretará la apertura a prueba en el procedimiento por un plazo de dos meses comunes para ambas partes. El Registro a solicitud y a costa del interesado deberá compulsar las certificaciones y emitir los informes que sean ofrecidos como prueba de la oposición o de la contestación de la misma para agregarlos al expediente62.” Aunque si bien, la finalidad de la acción administrativa de la oposición busca evitar un daño la misma se limita al bloqueo de la solicitud de registro de un signo distintivo (y por ende su legalización). La misma se conoce y resuelve en el mismo Registro de la Propiedad Intelectual. La implementación de dicha acción, supone por parte del legítimo titular del signo distintivo, que el infractor o persona que pretende aprovecharse de sus valores de 62 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. propiedad industrial presente una solicitud ante el Registro de la Propiedad Industrial. Es claro pues que si bien es cierto la oposición es una valiosa herramienta para la protección de los activos de propiedad industrial, la misma tiene muy limitada su campo de implementación. Adicionalmente existe un procedimiento conocido como el contencioso administrativo, el cual busca revertir las decisiones que la administración pública a través en este caso del Registro de la Propiedad Industrial o el propio Ministerio de Economía, pero por su propia naturaleza no se va a desarrollar en el presente estudio. Por último existe otro procedimiento administrativo conocido como la objeción la cual se encuentra regulado en la citada ley en el artículo 2563 tercer párrafo que literalmente dice: “(…)Si al efectuar el examen el Registro encontrare que la marca solicitada está comprendida en alguno de los casos de inadmisibilidad establecidos en esta ley, notificará al solicitante las objeciones que impiden acceder a la admisión y le dará un plazo de dos meses para pronunciarse al respecto. Transcurrido dicho plazo sin que el solicitante hubiere contestado, o si habiéndolo hecho el Registro estimase que subsisten las objeciones planteadas, dictará resolución fundamentada rechazando la solicitud”. Este procedimiento no fue considerado como un medio de defensa en la vía administrativa, toda vez que para la interposición de la misma no interviene ningún tercero, sino únicamente el Registro como ente regulador y le corre audiencia al interesado. Por lo que al no intervenir un tercero interesado en esta instancia, la misma no puede ser considerada como medio de defensa ideal. 63 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. 3.2.2 De las acciones civiles El proceso judicial lo define el autor Lino Enrique Palacio64 de la siguiente manera: “Por ello, ateniéndonos a la actividad específica de los jueces y árbitros, cabe definir al proceso como el conjunto de actos recíprocamente coordinados entre sí de acuerdo con reglas preestablecidas, que conducen a la creación de una norma individual destinada a regir un determinado aspecto de la conducta del sujeto o sujetos, ajenos al órgano, que han requerido la intervención de éste en un caso concreto, así como la conducta del sujeto o sujetos, también extraños al órgano, frente a quienes se ha requerido esa intervención”. Si bien el autor nos brinda una idea general sobre lo que se debe de entender como un proceso, la misma deja por un lado elementos importantes a tomar en consideración. En este sentido el autor José Almagro Nosete, en su libro “Derecho Procesal65” nos amplía el concepto de proceso judicial, estableciéndolo de la siguiente manera: “Constituye objeto del proceso (o conjunto de temas) que debe resolver el órgano jurisdiccional (tema decidendi). Son los titulares del derecho a la jurisdicción-o derecho a la tutela judicial efectiva. En cuanto actúan como promotores de la actividad jurisdiccional, quienes producen estos temas al incoar el proceso mediante el ejercicio de aquel derecho (acción). Precisamente el contenido dela acción ( pretensión) se manifiesta en la petición dirigida al órgano jurisdiccional para que aplique la ley frente a quien resulte obligado a su observancia, conforme a ciertos acaecimientos que se estiman amparados por aquélla, en cuanto productos de unos efectos jurídicos determinados” 64 Palacio Lino Enrique, Derecho Procesal Civil, Tomo I, Argentina, Editorial Abeledo-Perrot, 1994, Pág. 221 65 Nosete José Almagro y otros, Derecho Procesal, España,Tirant lo Blanch, 1988. Pág. 282. Dentro de las acciones existentes en la llamada materia “judicial” las cuales se aplican fuera del campo administrativo, son por su naturaleza más agresivas y que se ejecutan en cualquier parte del territorio, estas llevan la “batalla de los signos distintivos” a la calle, salen del marco del procedimiento administrativo, para encontrarse con las acciones realizadas en el mercado. Como punto importante a resaltar dentro de las acciones tomadas dentro de esta materia es que la propia ley regula la vía que se debe tomar en este tipo de acciones, esto lo hace en el artículo ciento ochenta y dos 66de la siguiente manera: “ARTICULO 182. Procedimientos. Los procesos civiles o mercantiles que se promuevan en ejercicio de las acciones reguladas por esta ley se tramitarán de acuerdo con el procedimiento del juicio oral, establecido en el Libro Segundo, Título II, Capítulos I y II del Código Procesal Civil y Mercantil.” 3.2.2.1 De las providencias cautelares y medidas de frontera Dentro de las acciones que tenemos cuya “naturaleza” es judicial tenemos las medidas cautelares. El autor Luis Enrique Palacio en su libro nos definen los procedimientos cautelares de la siguiente manera: “Junto a las pretensiones procesales de conocimiento y de ejecución, el ordenamiento jurídico prevé todavía otro tipo de pretensiones, que revisten carácter complementario con relación a aquéllas y constituyen el objeto de una tercera categoría de procesos: los llamados procesos cautelares. El fundamento de éstos reside en la posibilidad de que, durante el tiempo que transcurre entre la iniciación de un proceso (de conocimiento o de ejecución) y el pronunciamiento de la sentencia que le pone fin, el derecho 66 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. cuyo reconocimiento o actuación se pretende en él se encuentra expuesto al riesgo de perder su virtualidad o eficacia.” 67 El autor es claro al establecer que la finalidad de este procedimiento no es en sí el de resolver la Litis, sino garantizar la integralidad de los derechos, que en este caso es la propiedad industrial. El Decreto 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial en su artículo 187 nos enumera el tipo de acciones que se pueden tomar en el campo de las medidas cautelares. Que a continuación se cite: “ARTICULO 187. Medidas. El Juez ordenará, según el caso, las providencias que prudentemente tiendan a la protección del derecho del actor o peticionario, tales como: a) La cesación inmediata del uso, aplicación, colocación y comercialización de los productos infractores y de los actos desleales; b) El comiso de los productos infractores, incluyendo los envases, empaques, embalajes, etiquetas, material impreso o de publicidad, maquinaria y otros materiales resultantes de la infracción o usados para cometerla y de los medios que sirvieran predominantemente para realizar la infracción; c) La prohibición de la importación de los productos, materiales o medios referidos en la literal anterior; d) La confiscación y traslado a los depósitos judiciales de los productos, materiales o medios referidos en la literal b); 67 Palacio Lino, Enrique, Op cit, Pág. 308. e) Las medidas necesarias para evitar la continuación o la repetición de la infracción o de los actos de competencia desleal, incluyendo la destrucción de los productos, materiales o medios referidos en la literal b) cuando los mismos causen un daño o constituyan un riesgo que atente contra la salud o la vida humana, animal o vegetal, o contra el medio ambiente; f) La anotación de la demanda sobre la inscripción cuya nulidad o anulación se pretende; y Ley de Propiedad Industrial 86 g) La suspensión de los registros o licencias sanitarias o de otra naturaleza, que resulten necesarios para la internación, distribución, venta o comercialización de los productos infractores. El simple retiro de las marcas usadas o colocadas ilícitamente no impedirá que las medidas establecidas en el presente artículo continúen vigentes ni será suficiente para que las mercancías o productos se introduzcan en los circuitos comerciales68.” La anterior acción judicial busca detener la continua incursión en el mercado de los productos que caen en infracción, haciendo que el Estado no solo declara valedero y justifique un derecho sino que ordena una acción determinante como lo es la remoción de los productos que caen en la infracción del mercado. Otra de las acciones primordiales que nuestra legislación nos faculta a utilizar, son las MEDIDAS DE FRONTERA, la cual se encuentra regulada en la citada ley en su artículo 190 que literalmente dice: “ARTICULO 190.69 Medida cautelar en 68 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. 69 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. frontera. El titular de un derecho protegido por esta ley relativo a marcas de fábrica o de comercio, o su licenciatario, que tenga indicios suficientes de una presunta importación o exportación de mercancías que lesionen o infrinjan sus derechos, podrá pedir a las autoridades judiciales que se ordene a la aduana respectiva suspender el despacho e internación o el proceso de exportación de las mismas.” Esta acción a diferencia de las anteriores es que permite actuar antes de que los productos entren al mercado, protegiendo de manera directa la percepción de los consumidores, en consecuencia el valor intangible de los signos distintivos. 3.2.2.2 Cancelación de marca por generalización o falta de uso Dentro de los riesgos que hablaban anteriormente se encontraba la generalización de un signo distintivo ya que la misma conlleva a la pérdida del mismo, en nuestra legislación se establece en el artículo sesenta y cinco cuando se debe entender como generalizada una marca de la siguiente manera: “ARTICULO 65. Cancelación por generización de la marca. A pedido de cualquier persona interesada, la autoridad judicial competente podrá ordenar la cancelación del registro de una marca o limitar su alcance cuando su titular hubiese provocado o tolerado que ella se convierta en el nombre genérico de uno o varios de los productos o servicios para los cuales estuviese registrada. Se entenderá que una marca se ha convertido en nombre genérico cuando en los medios comerciales y para el público dicha marca haya perdido su carácter distintivo como indicación del origen empresarial del producto o servicio al cual se aplica.”70 70 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. Sobre este sentido el autor Otamendi 71 nos habla lo siguiente: “Existe otra forma en la que un signo puede pasar al uso general sin que pase a ser indicativo de un producto o de sus características. Supuesto, quede claro, diferente del aquí comentado, pero con puntos de contacto muy cercanos, incluyendo la terminología. Se trata del caso en que su uso se ha generalizado de tal forma que se ha transformado en común. Este uso impide que el signo tenga la capacidad de distinguir un producto de otro. Se trata de un signo, que sin ser designativo o indicativo, está en el dominio público. Será irregistrable por carecer de capacidad distintiva. El caso puede darse con relación a envases de toda clase, idénticos, usados por quienes venden iguales o diferentes productos. También puede darse con las frases publicitarias, cuando muchos y variados comerciantes usan las mismas frases. El otorgar una marca a estos signos sería sacar algo que está en el dominio público, algo que pertenece a todo.” El autor claramente nos expone el fenómeno en donde la propiedad del signo se pierde toda vez que el uso de la misma se vuelve común y necesario para el comercio. Otro de los procesos civiles que se pueden llevar es el procedimiento de cancelación de registro por falta de uso, la misma se encuentra regulada en la citada ley en el artículo sesenta y seis 72de donde se extrae lo siguiente: “ARTICULO 66. Cancelación por falta de uso de la marca. A solicitud de cualquier persona interesada y previa audiencia al titular del registro de la marca, la autoridad judicial competente cancelará el registro de una marca cuando ésta no se hubiese usado durante los cinco años precedentes a la fecha en que se promueva la acción de cancelación”. 71 Otamendi Jorge, Op. Cit. Pág. 62. 72 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. La acción de cancelación de registro por falta de uso requiere para prosperar que se compruebe que durante el periodo de cinco años la misma no se hubiera utilizado. El autor Otamendi73 en su obra nos expone su opinión sobre el proceso en su obra de la siguiente forma: “Un caso que puede ofrecer cierta dificultad es el momento a partir del cual debe comenzar a computarse la falta de uso. ¿Es a partir del momento en que el producto desaparece del mercado o bien desde que el fabricante de la marca decidió dejar de usar la marca? Si el fabricante expresa o implícitamente ha decidido cesar en el uso de una marca, elimina los productos con ella de sus listas y deja de vender, es a partir de ese entonces que corre el plazo. Ante esa voluntad de no uso, poco importa que algún comerciante haya continuado vendiendo hasta su agotamiento los productos con la marca en cuestión. Fácil será burlar la ley instruyendo a dos o tres comercios que mantuvieran en stock algunos productos por un largo período. Si la intención de usar es fundamental para determinar si se cumple con el requisito legal, mucho más lo es la intención de no usar como determinante de su no cumplimiento”. El autor claramente nos expone sus inquietudes sobre la viabilidad del proceso dado lo complicado que sería probarlo fehacientemente en proceso judicial. 3.2.2.3 Nulidad y Anulación de Registro Otro de los procesos, regulados por la ley es el de Nulidad y Anulación de un registro marcario, dicha acción se encuentra regulada en el artículo 67 y la misma puede ser considerada como un hibrido entre la acción judicial con la administrativa. Esto porque la pretensión de la acción recae sobre un asiento registral, es decir ataca el registro del signo distintivo, no así como la anterior acción que su aplicación se encuentra en el mercado. 73 Otamendi Jorge, Op Cit. Pág. 171. Es importante resaltar que una de las diferencias fundamentales entre los dos procesos es el momento que nace el derecho o si nunca nació a la vida jurídica dicho derecho. De tal cuenta cuándo se tiene declara la NULIDAD sobre el registro, el mismo se tiene como que si nunca nació a la vida jurídica; contrario es el caso de ANULABILIDAD donde se interrumpe el registro desde el momento que es declarado dejando como valedero lo sucedido anteriormente a dicha declaratoria. El autor Otamendi en su obra nos habla sobre la nulidad de la siguiente forma “La declaración judicial de la nulidad de la marca extingue el derecho respectivo. Al igual que cualquier otro acto jurídico, una marca puede estar viciada por contener algún defecto de fondo o de forma que la condenan a su invalidez, es decir, la hacen nula74”. En Guatemala se traduce al hecho que la nulidad declarada sobre un signo distintivo, interrumpe cualquier derecho accesorio o consecuente de la misma. El mismo autor también señala75 “el problema de las nulidades marcarias exige un trato cauteloso afín con la seguridad de los derechos reconocidos por la ley de la materia a quienes, mediante actos regulares, se han encuadrado en ella, y que no corresponde consagrar la total frustración del sistema atributivo de aquélla, por vía de admitir que quien adquirió la propiedad de una marca con absoluta legitimidad, puede ser destituido de ese derecho sin motivo que le sea imputable, es decir, por la sola razón del uso anterior de un signo confundible que haya podido hacer un tercero indolente en sujetarse a los requisitos reglamentarios”. Es claro pues que al autor le preocupa como esta forma de protección de los signos distintivos afecta a aquellos legítimos propietarios quien en buena fe inscribió sus derechos. 74 Otamendi, Jorge. Ob Cit. Pág. 264. 75 Ibid, Pág. 268. 3.2.2.4 Competencia Desleal El proceso que en cierta medida goza de popularidad entre el vocabulario de los comerciantes es la “Competencia desleal”, esto se debe a que su campo de aplicación es más amplio que los anteriores y que su pretensión recae contra una persona y busca reprimir su accionar. Se dice que su campo de acción es más amplio ya que en el artículo 173 de la citada ley, se enumeran todos aquellos actos que constituyen competencia desleal siendo estos los siguientes: a) Todo acto u omisión que origine confusión o un riesgo de asociación o debilitamiento del carácter distintivo de un signo, con respecto a los productos, los servicios, la empresa o el establecimiento ajenos; b) La utilización, la promoción o la divulgación de indicaciones o hechos falsos o inexactos capaces de denigrar o de desacreditar los productos, bienes, los servicios, la empresa o el establecimiento ajenos o que puedan inducir a error con respecto a la procedencia, la naturaleza, el modo de fabricación, la aptitud para su empleo, uso o consumo, la cantidad u otras características de los productos o servicios propios o ajenos; c) La utilización indebida o la omisión de informaciones veraces, cuando las mismas sean susceptibles de inducir a error con respecto a la procedencia, la naturaleza, el modo de fabricación, la aptitud para su empleo, uso o consumo, la cantidad u otras características de los productos o servicios propios o ajenos; d) La utilización por un tercero de un producto que esté protegido por las leyes de propiedad intelectual para moldear, calcar, copiar o de otro modo reproducir ese producto a fin de aprovechar con fines comerciales los resultados del esfuerzo o del prestigio ajenos, salvo que el acto esté tipificado como delito; e) El uso de un signo distintivo cuyo registro esté prohibido conforme al artículo 20 párrafo uno literales i), j), k), l), m), n), ñ), o) y p) del decreto 572000 ley de la propiedad industrial ; f) El uso en el comercio de un signo cuyo registro esté prohibido conforme al artículo 21 literales b), c) y e) del decreto 57-2000 ley de la propiedad industrial; g) El uso no autorizado de un secreto empresarial ajeno, así como cualquier acto de comercialización, promoción, divulgación o adquisición indebida de tales secretos; y h) El uso no autorizado en el comercio de etiquetas, envoltorios, envases y demás medios de empaque o presentación de los productos o de identificación de los servicios de un comerciante o de copias, imitaciones o reproducciones de los mismos que puedan inducir a error o confusión sobre el origen de los productos o servicios.76 3.2.2.5 Acción civil por infracción y de reivindicación La ley en sus artículos 196 y 197 desarrollan las acciones de naturaleza civil por INFRACCIÓN y la de REIVINDICACIÓN, las cuales son distintas en su esencia, pero ambas buscan garantizar los derechos conferidos por la citada ley. La acción por INFRACCIÓN, es aquella que faculta al titular de un derecho protegido, para entablar acción judicial contra aquellos que infrinjan su legítimo 76 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000, Ley de la Propiedad Industrial. derecho, con el fin de garantizar y se restituya el ejercicio y goce de dichos derechos. La acción por REIVINDICACIÓN DEL DERECHO, es la cual que pretende transferir a su legítimo titular aquellos derechos concedidos a quienes no tenían dicho derecho. El caso común sobre esta materia y que nos ayudara a explicar el punto, son los distribuidores de productos que importan, usualmente se han atribuido para ellos mismos el registro de las marcas que ellos comercializan, cuando dichos registros corresponden a los productores de dichos productos. Si bien esta medidas son claras y evidentemente más visibles en el mercado. Se requieren para su ejecución de la consecución de una serie de procedimientos y de una autorización judicial para poder llevarlo a cabo. El objetivo primordial de la legislación de la Propiedad Industrial es asegurar la exclusividad de uso de los signos distintivos protegidos, conforme a las mismas prescripciones de la ley. Esto quiere decir que el ordenamiento jurídico busca a través de las acciones que regula, la protección de un bien intangible, previendo los casos que se pudiera ver vulnerada y las acciones que reinstaurarían y garantizarían su debida protección. La ley franquea la posibilidad de accionar civil o penalmente contra terceros infractores. El primero de los casos se producirá cuando la utilización se haya realizado sin fines claros de causar confusión, lo cual es bastante improbable ya que por norma general, la similitud no es obra de la mera casualidad sino de una actitud deliberada de producir determinados efectos; mientras que podrá acudirse a la esfera penal siempre que dicha utilización comprenda claramente los fines de la confusión y la apropiación indebida. Dichas medidas buscan restablecer el orden y garantizar que la propiedad privada de los signos distintivos se respete. Mediante acciones que buscan reducir la exposición del público consumidor a elementos falsos o alterados. Pero las mismas son reactivas, es decir responden a una acción preexistente, en ellas la legislación busca de una manera mantener el ”statuos quo”, anterior a la infracción sancionada. Dichas acciones no toman en consideración el impacto que la acción ilegal cometida tiene en los consumidores. En este sentido el autor Enrique Martín en su obra anteriormente citada “Las leyes pueden resarcir a las empresas por el daño económico causado y el lucro cesante, pero difícilmente pueden restaurar el *posicionamiento cesante* que experimentan las marcas son objeto de falsificación77”. Como bien dice el autor existe un doble riesgo a considerar cuando se trata de la vulneración de la Propiedad Industrial, la cual es difícilmente tomada en consideración pero no deja de significar un daño en la percepción del signo y en consecuencia dirimir su valor comercial. Es por este segundo o doble daño donde en el presente estudio se pretende hacer uso de la mercadotecnia para marcar el camino a efectos de determinar el impacto que se tiene con las medidas actualmente se encuentran reguladas sobre el daño intangible en el signo distintivo. 77 Martin Enrique Op. Cit, Pág. 17. El Estado, propiamente su ordenamiento Jurídico, debe mantener el equilibrio entre la libre competencia y la propiedad privada (de las marcas). Es por eso como el autor María José Segura García en su libro Derecho Penal y Propiedad Industrial dice “la función de tutela del estado sobre el orden económico de forma que, en la base de dicho orden, aparece la protección de la libre competencia en favor, no sólo de los intereses de los empresarios competidores, sino también del interés general y, especialmente en el de los consumidores78.” 78 Segura García, María José. Derecho penal y Propiedad Industrial. España, Madrid, pág. 227. CAPITULO 4 PRESENTACIÓN, ANALISIS Y DISCUSIÓN DE RESULTADOS El presente capitulo es la parte medular y consiste en la presentación de los resultados obtenidos durante el trabajo de campo, en la cual se entrevistaron a los diversos sujetos de estudio. Siendo que el objetivo principal de la investigación fue el de analizar las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde una perspectiva jurídica y mercadológica. Fueron elegidos como sujetos de la investigación dos grupos de profesionales de distintas ramas, el primer grupo fueron Abogados y Notarios especializados en Propiedad Industria y el segundo sujeto de estudio fueron mercadólogos. El objetivo que se tuvo al momento de contar con ambos sujetos de estudio, fue que ambos aportaran sobre su experiencia profesional a efectos de lograr desarrollar el análisis propuesto en los objetivos de la presente investigación. La perspectiva presentada por los diferentes profesionales de la mercadotecnia entrevistados, aunque de distintos y con diferentes niveles de complejidad, confirmó que existe cierta uniformidad en cuanto a los criterios de interpretación de la normativa y de la mecánica para su aplicación. Se solicitó el apoyo de quince licenciados en la Mercadotecnia, quienes fueron entrevistados a efectos de obtener sus impresiones sobre las experiencias en la aplicación de los mecanismos de defensa contemplados en el decreto 57-2000 a efectos de proteger sus intereses con respecto a los signos distintivos registrados. 4.1 PRESENTACION DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS EN LAS ENTREVISTAS DIRIGIDAS A QUINCE LICENCIADOS EN MERCADOTECNIA. A los sujetos entrevistados, les fueron presentadas las mismas preguntas base y conforme se fue realizando la entrevista de conformidad con las respuestas proporcionadas se fueron incorporando diferentes cuestionamientos a efectos de enriquecer el aporte de los entrevistados. Dado que el área de experiencia de los entrevistados en este segmento se centralizó en el posicionamiento en la mente de los consumidores de los signos distintivos así como el mantenimiento y evolución de los mismos, la primera interrogante que se les planteo a todos los entrevistados fue que en base a su experiencia brindaran una descripción básica de los elementos que debe tener un signo distintivo para que sea exitosos y logre posicionarse exitosamente en la mente de los consumidores. De las preguntas de la entrevista: 1. ¿En su experiencia, que elementos debe poseer un signo distintivo para tener éxito y ser posicionado en la mente de los consumidores en Guatemala? Entre los entrevistados el primer elemento que presentaron y que concordaron sobre los elementos que deben coincidir en los elementos para lograr su cometido, fue que en nuestra realidad, dichos signos deberán ser fácil de leer y pronunciar. La importancia de este extremo radica en el hecho que si el consumidor lo puede leer, entender y sobre todo pronunciar tal como se debe hacer esto permitirá que los consumidores tengan la confianza de enfrentarse con los vendedores y solicitar el producto sin temor de ser avergonzados por una mala pronunciación o a malos entendidos. La licenciada Luisa Carranza de Guerra79, durante su entrevista, explicaba que para las empresas transnacionales esto constituye uno de los mayores retos para el posicionamiento de sus signos distintivos, toda vez que en cada país se tiene diferentes acepciones sobre los términos, por lo que al momento de evaluar la incorporación de un nuevo signo distintivo en el mercado mundial, se debe tomar en consideración las interpretaciones que se tienen en cada mercado individual. El siguiente elemento que fue presentado por los diferentes entrevistados es que el mismo se asocie al producto o alguna característica del mismo. La base para el anterior criterio consiste que al incluir un elemento descriptivo al signo, lo inviste de dicha cualidad automáticamente en la percepción del consumidor. Esta auto investidura permite al comerciante obtener una ventaja competitiva, toda vez que el consumidor asume por cierto lo establecido en la denominación, sin necesidad de comprobarlo. El licenciado Diego Flores, 80nos explicaba que este elemento es transcendental en algunos segmentos de la población porque permiten una asociación directa con el producto y el consumidor. Esto a mi criterio contradice con una de las prohibiciones que regula la ley nacional, la cual literalmente establece el numeral j) del artículo 20: “ARTICULO 20. MARCAS INADMISIBLES POR RAZONES INTRINSECAS. No podrá ser registrado como marca, ni como elemento de la misma, un signo que esté comprendido en alguno de los casos siguientes: j) Que pueda causar engaño o confusión sobre la procedencia geográfica o cultural, la naturaleza, el modo de fabricación, las cualidades, la aptitud para el empleo o el consumo, la cantidad o alguna otra característica del 79 Carranza de Guerra Luisa, Licenciada Docente de Dedicación Completa de las facultad de Mercadotecnia y Publicidad, Ciencias Económicas y Empresariales Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 17 de septiembre del 2013. 80 Flores Alvarado, Diego Licenciado en Mercadología y Publicidad de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. producto o del servicio de que se trate;” 81En este aspecto se puede ver como existe discrepancia entre lo que el mercado requiere para el posicionamiento, rápido y efectivo en la mente de los consumidores y lo que permite la ley, ya que esta última viene a proteger no solo los intereses de los comerciantes sino también de los consumidores, quienes podrían verse afectados en su economía o salud por una falsa indicación que algún signo distintivo proclame. Por su parte el licenciado Luis Alberto Castillo Aguilar, 82nos explicaba que al final, toda la estrategia y planeación con los signos distintivos, era una lucha de percepciones donde el consumidor normalmente se centra en un signo distintivo, para que sea lo suficientemente llamativo, informativo y por sobre todo que logre influir en la decisión del consumidor. El código de ética publicitaria de Guatemala, (Documento creado por el Consejo Nacional de la Publicidad, por lo tanto no es una ley, no tiene fuerza coercitiva), en su artículo seis, clara y específicamente declara que la publicidad debe abstenerse de: “formular declaraciones o presentaciones visuales que directamente o por implicación, omisión, ambigüedad o menciones exageradas, puedan engañar al consumidor respecto a las características del producto anunciado, su valor, término de la garantía y reconocimientos oficiales, tales como aprobaciones, distinciones o premios83”. Es claro entonces que las falsas atribuciones o características otorgadas a los signos distintivos, son evidentemente reconocidas como elementos prohibidos como estrategia de mercadeo. 81 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000 82 Castillo Aguilar, Luis Alberto, Licenciado en Mercadología y Publicidad de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. 83 Consejo Nacional de la Publicidad, Una entidad de la iniciativa privada, febrero 1999. Cabe mencionar que si bien el Código de Etiqueta promulgado por el Consejo Nacional de la Publicidad no tiene carácter coercitivo, existe el Decreto número 6 2003 Ley de Protección del Consumidor y Usuario, que si tiene fuerza coercitiva. Otro de los elementos que los entrevistados coinciden es que los signos distintivos “tengan connotaciones positivas”, ya que como el entrevistado Mib. Guillermo Cleaves84 nos explicaba la imagen positiva alimenta el interés de los consumidores al producto, mientras que los impulsos negativos alejan a los consumidores del mercado. El último de los elementos que coincidieron los entrevistados es que el signo distintivo “sea fácil de reconocer y recordar, o como la licenciada Mejía 85 establecía que el signo distintivo sea memorable. Por ello el signo para ser exitoso debe evocar un significado superior y que evoque en el consumidor un sentimiento capas de exaltar sus emociones. Si bien los anteriores elementos fueron compartidos por los entrevistados el licenciado Julio Cardona86, planteó un elemento totalmente distinto a los anteriores en cuanto a su naturaleza, pero que debido a su experiencia como Perito en Marcas ha visto que es de suma importancia en el mercado que los signos distintivos puedan registrarse para protegerse legalmente. Esta calificación obedece, a que según su experiencia, 84 Mib Cleaves, Guillermo, Docente de Dedicación Completa y Perito en Marcas de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 11 de septiembre del 2013. 85 Mejía, Pilar, licenciada en Mercadotecnia y publicidad, entrevista realizada en marzo 2013. 86 Cardona, Julio, Director de Mejora continua de la Universidad Rafael Landívar y Perito de Marcas, entrevista realizada el 11 de septiembre del 2013. el éxito de un signo distintivo no es nada para la empresa si no la pueden asociar con el origen comercial, o que según se ha visto dicho posicionamiento sea aprovechado por terceros a su beneficio. La debilidad de algunos es que se centran en la publicidad y en la exposición del signo distintivo, sin haber iniciado el trámite para su protección. Esta última acepción, presentada únicamente por una de las personas entrevistadas, demuestra que no existe una cultura entre los mercadologos, de buscar en primera medida proteger su inversión mediante el registro de los signos distintivos. Ellos deciden obviar dicho paso, buscando prematuramente el posicionamiento del signo distintivo en el mercado, esto aunque se puede justificar mediante una primicia en la posición en el mercado, la cual es un riesgo que le puede significar al comerciante no solo el posicionamiento prematuramente adquirido sino un fuerte golpe económico. El hecho que una de las personas entrevistadas calificara como parte de los elementos que ayudan al éxito de un signo distintivo el aspecto legal, refuerza la poca cultura legal que se maneja en el medio, lo que lleva a problemas a largo plazo, por la falta de prevención. 2. ¿En su experiencia, que herramientas mercadológicas se deben implementar para que un signo distintivo se mantenga en la mente de los consumidores? Los entrevistados coincidieron al afirmar que la publicidad del signo distintivo le permite exponerse a los consumidores, de esa cuenta posicionarse en la mente de ellos; la publicidad posee la facultad de persuadir, informar las características de los productos y de esta forma apelar por el gusto del grupo objetivo. Uno de los aspectos más relevantes que los entrevistados establecieron fue la uniformidad en el manejo de los signos distintivos, para que la asociación sea más fácil, la licenciada Pilar Mejia 87nos explicaba que mantener la uniformidad permite enfocarse en el grupo objetivo y captar su atención por medio de la presentación de caracteres claros. Para lograr dicha uniformidad los entrevistados mencionaron el “Manual de Marca”, el cual establece los parámetros de uso de los signos distintivos, a efecto de poder optimizar los elementos visuales de la misma y que sea explotado de manera correcta por los empresarios. Dicho manual como explicaba el licenciado Guillermo Cleaves, 88es creado para que los empresarios puedan enfocar sus recursos en la campaña publicitaria o en la presentación de su empresa. El concepto de Manual de Marcas se asemeja en cierta medida a las reivindicaciones que se hacen al momento de inscribir una marca en Guatemala, ya que en ellas se hace una serie de acepciones de las pretensiones que se tienen con el signo distintivo. Si bien el Manual de Marcas es mucho más desarrollado, este elemento vuelve a ser un punto de encuentro entre las realidades mercadológicas y las legales, evidenciando así la sinergia que debe existir entre ambas ciencias; aunque como el mismo licenciado Marcos Cifuentes López89 nos explicaba el manual de marca es un proceso continuo que se debe seguir para lograr el objetivo del signo distintivo, por lo que comprende una serie de pasos y presentaciones, mucho más complejo que las reivindicaciones. 87 Mejía, Pilar, Op Cit. 88 Cleaves, Guillermo, Op Cit. 89 Cifuentes López Marcos, licenciado en Mercadotecnia y publicidad, entrevista realizada el 20 marzo 2014. Nos explicaba la licenciada Luisa Carranza90 que otra de las herramientas necesarias para mantener el posicionamiento era que todo signo distintivo es creado con un propósito y que responde a las necesidades del ciclo de vida de un producto, donde un producto nuevo tiene necesidades distintas a las de un producto totalmente posicionado en el mercado. De esa cuenta los signos distintivos deben evolucionar para mantenerse en el lugar que el comerciante necesita que se encuentre, para ello se debe de basar de datos estadísticos de mercado para tener un panorama real del mercado de su producto y en consecuencia de ello adecuar la publicidad /signos distintivos/ a las tendencias. Por último en este punto el licenciado Julio Cardona91, adicionaba que existe otros elementos que influyen, literalmente dijo: “Sin embargo, bajo el concepto holístico de la Mercadotecnia, el producto, el precio y su estrategia de distribución, tienen un impacto también para el posicionamiento de los productos o servicios.” Explicando su postura, refería que si bien la publicidad y las estrategias de mercadeo marcan tendencias, hay otros elementos externos que también influyen, como eventos sociales o políticos, que dejan su marca en la población. 3. ¿Qué riesgos considera usted que pueden generar el debilitamiento o pérdida de un signo distintivo en Guatemala (ejemplo, falsificaciones o competencia desleal)?. En esta pregunta a los entrevistados se les solicitó su opinión sobre los riesgos que más comúnmente se encuentran expuestos los signos distintivos en Guatemala, esto basado en su experiencia. 90 Carranza de Guerra Luisa, Op Cit. 91 Cardona Julio, Op Cit. Como primer punto la licenciada Pilar Mejia92, nos hablaba sobre la copia de cacofonía de la marca, por ejemplo expreso el caso de: pollo pinulito, pollo pirulino, pollo campesino, donde con la finalidad de aprovecharse de un buen posicionamiento la competencia utilizo elementos alegóricos permitidos por la ley para hacerse de un lugar en el mercado; estos casos se ven más comúnmente entre pequeños y medianos empresarios quienes pretenden asegurarse un lugar en el mercado mediante la utilización de elementos que conocen que funcionan para fundamentar sus elementos distintivos. En mi opinión no obstante lo comentado por la licenciada Pilar Mejía, este tipo de copias se hacen dentro de los límites de la ley, porque cuentan con el amparo de un registro otorgado por el Estado, considero que las mismas son una consecuencia de una pobre aplicación de las herramientas legales, ya que el registro de dichas aplicaciones y en consecuencia de dichas aplicaciones pueden ser rebatidas a favor del propietario original, o el impulsador del concepto, esto al tenor de lo que en los numerales a) y b) del artículo 29 del decreto 57-200093, que literalmente dice así: ARTICULO 29. REGLAS PARA CALIFICAR SEMEJANZA. Tanto para la realización del examen de fondo como para la resolución de oposiciones, nulidades y/o anulaciones se tomará en cuenta, entre otras, las reglas que se indican a continuación: a) Deberá en todo caso darse preferencia al signo ya protegido sobre el que no lo está; b) Los signos en conflicto deben examinarse en base de la impresión gráfica, fonética y/o ideológica que producen en su conjunto, como si el examinador o el juzgador estuviese en la situación del consumidor normal del producto o servicio de que se trate; (resaltado propio) 92 Mejia Pilar, Ob. Cit. 93 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000 La razón por lo que citó la anterior norma es porque en base en mi experiencia, en la fase administrativa del proceso de registro de marcas se puede hacer una defensa preventiva de la distintividad de los signos, ya que la ley permite hacer un estudio de las similitudes en conflicto de conformidad no solo con la impresión gráfica y fónica sino que también incorpora la posibilidad de hacerlo en cuanto a su impresión ideológica, de tal forma que el espectro de protección es ampliado. Continuando con los riesgos que los entrevistados los signos distintivos pueden enfrentar, el Licenciado Julio Cardona94, planteó otro aspecto, la disociación o falta de apoyo mercadológico en la maduración del signo distintivo y en su consecuente mantenimiento; el licenciado nos explicaba que, “en primera instancia, podría pensar que se trata de una falta de apoyo mercadológico al producto. Pero cuando un producto llega a su etapa de madurez (saturación en el mercado y una alta fragmentación de la industria), los aspectos mercadológicos, tales como la promoción de ventas, publicidad y el desarrollo de productos, parecieran ser determinantes para poder permanecer en la mente del consumidor”. El nos habla de elementos internos de la empresa que influencian la sobrevivencia de los signos distintivos en la mente de los consumidores y en consecuencia del producto o servicio en el mercado. Por su parte la licenciada Luisa Carranza95, expuso otro elemento, basado en que todas las empresas necesitan estar en constante comunicación con su mercado objetivo, para recibir la retroalimentación necesaria para que los signos distintivos puedan cumplir su cometido. De dicha cuenta la entrevistada nos enfatizaba la importancia de sondear constantemente mediante redes sociales las opiniones que los consumidores tuvieran a bien hacerles saber, ya que como ella misma dice, de 94 Cardona Julio, Ob Cit 95 Carranza de Guerra Luisa, Op Cit. nada vale una campaña publicitaria multimillonaria si no logra llegar a su objetivo, llegando a la desestimación de los signos distintivos y la inversión realizada. Todos los entrevistados concurrieron en decir que uno de los factores de mayor importancia, está el cumplir la “PROMESA DE MARCA96” es decir llenar la expectativa que los signos distintivos crearon en los consumidores. Entonces cuando en el mercado se presenta productos adulterados o falsificaciones, se daña el prestigio del empresario y se pone en peligro la propia vida de los consumidores, haciendo que la decisión de consumo se vea alterado por elementos externos a los del empresario pueda tener control preventivo, únicamente reactivo de conformidad con lo que detecte en el mercado. Es importante resumir el presente punto en el sentido que los signos distintivos se ven afectados por factores intrínsecos y extrínsecos, donde corre por cuenta en el interés del empresario emprender la inversión económica a efecto de tomar las medidas necesarias para prevenir y proteger sus signos distintivos y en consecuencia su economía. 4. ¿Conoce algún caso en Guatemala en donde una acción legal haya logrado evitar el detrimento de un signo distintivo? Aunque por cuestiones de confidencialidad de sus clientes, los detalles de las operaciones efectuadas fueron omitidos, algunos entrevistadores pudieron presentar sus experiencias como Peritos de marcas, donde llevaron el acompañamiento en el 96 TopBrands Argentina , Wilensky, Alberto, Camara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina y Topbrands, “LA PROMESA DE LA MARCA” Argentina, 2006, http://www.topbrandsargentina.com.ar/Wilensky/A.%20Wilensky.pdf accesible el 25 de abril de 2012. campo, al momento de efectuarse diligencias judiciales promovidas para proteger los intereses de los legítimos titulares de signos distintivos. Al plantearles la pregunta sobre si conocían alguna acción legal tomada en Guatemala donde se hubiera evitado el detrimento de un signo distintivo, se tenía la expectativa que dicho conocimiento fuera desde el exterior o de algún caso de estudio doctrinario, pero la grata sorpresa fue que la participación en dichos casos fue directa para los Peritos de Marcas. Como antecedente los licenciados Julio Cardona y el licenciado Guillermo Cleaves son Peritos en Marcas por que han sido certificados por una empresa, para que tengan la capacidad de identificar la originalidad en el etiquetado de sus productos; dicha certificación es para productos específicos y la necesidad de certificar a profesionales para la identificación de los productos falsificados, radica en la obligación de realizar un peritaje para determinar si existen productos falsificados o de contrabando. Por su parte la licenciada Fabiola Juárez 97, quien es la encargada de certificar a los peritos de marcas en la empresa donde labora, nos explicaba que se certifica como perito de marcas a los profesionales de la mercadotecnia o abogados, para que al momento de realizar un allanamiento puedan verificar o validar la originalidad de sus productos y en caso estos no lo fueran certificar dicho extremo a efectos que el Ministerio Publico solicite la confiscación de los productos falsificados o de contrabando. 97 MBA Juárez Montoya, Fabiola Lissette, Quality Assurance Head empresa transnacional, entrevista realizada el 19 diciembre del 2013 Al consultarle cual es el procedimiento que su empresa posee para establecer que en cierto lugar existen indicios de productos falsificados y para realizar la gestión ante el Ministerio Publico a efectos de obtener una autorización judicial y realizar el allanamiento, explicó que el proceso de control que utilizan en su empresa consiste en realizar de manera constante monitoreo en diversos lugares, como mercados y puntos de venta en lugares apartados, con el objeto de recolectar muestras de sus productos, para luego examinarlas y de esa forma determinar si dichos productos son falsificaciones, contrabando o adulteraciones. Si en virtud del peritaje que se realice en los productos se determina que los mismos son de dudosa procedencia, se inicia la gestión legal conjuntamente con la prueba recabada y se solicite una orden de allanamiento, a efectos que se comise los productos falsificados, adulterados o introducidos al mercado guatemalteco mediante el contrabando. La licenciada Juárez explicó que inicialmente los peritos logran determinar si un producto es falsificado, adulterado o contrabandeado mediante la verificación del número de lote y fecha de vencimiento, ya que como distribuidores exclusivos en la República tienen un control estricto sobre los productos que entran al mercado. Una vez verificado el número de lote ya se procede a la verificación y estudio de los elementos distintivos de la etiqueta, esto se verifica con el Manual de Marca. Adicionalmente los entrevistados comentaron que en aquellos casos donde el producto requiera un registro sanitario, no solo se debe confirmar que el número del mismo sea acorde a la inscripción sino el etiquetado del producto esta de conformidad con su registro en el Departamento de Regulación y Control de Productos Farmacéuticos y Afines del Ministerio De Salud Pública y Asistencia Social. Por su parte el licenciado Julio Cardona 98 que actualmente es Perito de Marcas para productos de consumo masivo, como productos de limpieza personal y de ropa, nos explicó que su labor inicia en el momento que es citado para acompañar en el allanamiento y realizar un peritaje en el campo para determinar sobre la autenticidad de los productos, ayudando a determinar la procedencia de la mercadería. Dentro de las experiencias que nos presentaba los licenciados Cardona y Guillermo Cleaves99, nos hablaban que han visto como la industria de la falsificación es sumamente avanzada en Guatemala, al extremo que ha presenciado como los centros de procesamiento son tecnificados, pero reconocen el peligro de dichas falsificaciones porque dentro del rubro de los productos de limpieza, se encuentra el cloro cuya presentación más pequeña es utilizada para esterilización del agua para consumo humano y que en los allanamientos realizados en el suroccidente del país encontraron un centro de producción donde evidenciaron que en los productos falsificados la densidad del cloro eran totalmente dañinos para el consumo humano. Tanto el licenciado Cleaves como Cardona, explicaron que parte de la capacitación que recibieron en la certificación como peritos de marcas, estaba una copia del “MANUAL DE MARCAS” (O reivindicaciones, como la asociación en el ámbito legal), la cual les sirve de guía para estudiar los elementos distintivos de los signos en cuestión. Un punto importante que se resaltó en las entrevistas fue que las acciones legales se limitaron al comiso y no una persecución a los delincuentes ya que como ellos mismos 98 Cardona Julio, Op. Cit. 99 Cleaves Guillermo, Op. Cit. nos explicaban, el objetivo de las mismas era la de sacar del mercado aquellos elementos que fueran perjudiciales a sus interés y desmotivar a terceros. En cuanto al contrabando, dado que los productos son como se dice coloquialmente “originales” por lo que los parámetros de revisión de los mismos son distintos a los de las falsificaciones. Los mismos se deben centrar en si dichos productos ingresaron al mercado nacional por medio de los canales de distribución destinados para ello y fundamentalmente si los impuestos respectivos fueron cancelados de manera correcta. Un tema que se discutió con los entrevistados fue el “AGOTAMIENTO DEL DERECHO” ya que este no se debe confundir con el delito penal denominado “CONTRABANDO” ya que si bien son figuras en su naturaleza muy similares, ya que en ambos casos se tiene una importación no realizada bajo el control o supervisión del empresario y comerciante, pero la diferencia entre ambas radica en que AGOTAMIENTO DE DERECHO la mercadería ingresa al país de manera legal, es decir, mediante el puesto aduanal respectivo pagando el impuesto correspondiente. El artículo 37 del decreto 57- 2000 100nos define que significa el agotamiento del Derecho del legítimo titular de un signo distintivo registrado en Guatemala de la siguiente manera: “ARTICULO 37. AGOTAMIENTO DEL DERECHO. El registro de la marca no confiere a su titular el derecho de prohibir la libre circulación de los productos que la lleven legítimamente y que se hubiesen introducido en el comercio, en el país o en el extranjero, por dicho titular o por otra persona con 100 Congreso de la República de Guatemala, decreto número 57-2000 consentimiento del titular o económicamente vinculada a éste, a condición de que esos productos y los envases o embalajes que estuviesen en contacto inmediato con ellos no hubiesen sufrido ninguna modificación, alteración o deterioro. A los efectos del párrafo anterior, se entenderá que dos personas están económicamente vinculadas cuando una pueda ejercer directa o indirectamente sobre la otra una influencia decisiva con respecto a la explotación de los derechos sobre la marca, o cuando un tercero pueda ejercer tal influencia sobre ambas personas.” 5. ¿En su opinión, existen en Guatemala los medios legales suficientes para proteger a los signos distintivos? El consenso general de los entrevistados es que en Guatemala si existen legislación suficientes que debería de garantizar la debida protección de los signos distintivos, el problema es el acceso a los mismos y lo engorrosos que resultan ser lo trámites para dichas gestiones. El licenciado Cardona 101 nos hablaba que en su experiencia había visto como una vez se realizaba el allanamiento era sencillo realizar el comiso y por ende proteger el signo distintivo, pero que entendía que el llegar a dicho extremo significaba una ardua labor por parte de la empresa a efectos de lograr que extendiera la orden judicial, coordinar con los agentes fiscales y policiacos para que se conjuntamente se lleve a cabo dicho allanamiento. 101 Cardona Julio, Op Cit. Así mismo el licenciado Cleaves102, nos explicaba que en su experiencia aunque si bien los allanamientos son buenos, el no conoce de otros medios de protección de los signos distintivos y que entiende que dichos procedimientos son complicados ya que requieren de diferentes gestiones ante el Ministerio Público y ante los tribunales por que las mismas no son de manera expedita, lo que ocasiona que en el mercado se sature de producto no autorizado, mientras se libera la orden de allanamiento. La licenciada. Juarez 103 nos explicaba durante su entrevista que los procesos llevados por su empresa, son constantes y buscan explotar los procedimientos establecidos por la ley a efectos de garantizar la protección de sus intereses en cuanto a los signos distintivos se refiere, pero que los mismos son gestiones que requieren constante monitoreo y supervisión para lograr una pronta resolución, lo que los hace extremadamente engorrosos, aunque necesarios. Adicionalmente el licenciado Cardona, nos hablaba que en sus procedimientos de peritaje de los signos distintivos se fundamentaba no solamente en la Ley de Propiedad Industrial sino también en las normas COGUANOR número 30 034 (COMISION GUATEMALTECA DE NORMAS, adscrita al Ministerio de Economía de Guatemala, que regula lo concerniente al etiquetado y rotulado. 6. ¿Estima usted que es necesaria la sinergia entre el ámbito legal y mercadológico? 102 Cleaves Guillermo, Op Cit. 103 Juárez Montoya, Fabiola Lissette, Op. Cit. Por unanimidad los entrevistados acordaron que efectivamente para cualquier ámbito comercial de Guatemala se hace necesario comprender que tanto la asesoría en el ámbito legal prestada por profesionales de la rama y la planificación mercadológica son las herramientas que los empresarios deben utilizar para el éxito en su empresa. La experiencia de los entrevistados les ha enseñado que los pequeños y medianos comerciantes únicamente utilizan una de las dos herramientas ya que por motivos de ahorro de costos deciden no tomar ambas; el problema que han visto es que pueden invertir en una estrategia de mercadeo agresiva pero no la pudieron implementar por complicaciones legales, o existen casos donde un empresario protege sus activos pero no implementar una campaña publicitaria para posicionarla en la mente de los consumidores y en consecuencia sus activos carecen de valor. La licenciada Pamela Gómez104, comentó que en su opinión dicha sinergia si existe, pero esta es de una manera no tan evidente o abierta, pero el hecho que la relación sea tan evidente y necesaria crea en sí dicho vínculo. 7. ¿En su experiencia, es frecuente que se planifiquen las campañas publicitarias y mercadológicas conjuntamente con la asesoría de un abogado experto en Propiedad Industrial? El único entrevistado que ha tenido dicha experiencia es el licenciado Cardona 105 quien nos comentaba que dicha sinergia la ha visto en las grandes empresas transnacionales, las cuales debido a su experiencia en mercados internacionales sumamente competitivos, y su poder financiero, utilizan la asesoría de un abogado 104 Pamela Gómez, Licenciada en Mercadotecnia y Publicidad, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. 105 Cardona Julio, Op Cit. para definir la protección del concepto creativo que dará diferenciación a la campaña; pero no ocurre en la mayoría de empresas locales; éstas utilizan los servicios de un abogado en actividades de promoción de ventas (rifas, concursos, etc.) para poder cumplir con todo lo requerido por la ley. Como el común denominador encontramos que los entrevistados establecieron el factor económico como el principal disuasivo para realizar una planificación de este tipo, prefieren utilizar a personal no profesional para reducir costos. 4.2 PRESENTACION DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS EN LAS ENTREVISTAS ESTRUCTURADAS REALIZADAS A QUINCE ABOGADOS. La siguiente presentación de datos es meramente estadística y se pretendió contar con la perspectiva de los profesionales del derecho especializados en el área de la propiedad industrial. Entre los elementos evaluados se encontraron la dinámica de la relación que se tiene con los clientes, la forma como es llevada la misma así como los mecanismos que frecuentemente utilizan en el ejercicio de su profesión como especialistas en Propiedad Industrial, así como los resultados que han tenido por parte de la Administración Pública en cuanto al tiempo de respuesta y la idoneidad de sus actuaciones. El siguiente muestreo sobre las opiniones que dichos profesionales tienen sobre las herramientas existentes establecidos en el Decreto 57-2000, del Congreso de la República, Ley de la Propiedad Industrial, a efectos de proteger los intereses de los titulares de los signos distintivos en Guatemala; los siguientes resultados fueron tomados de las entrevistas estructuradas dirigidas a quince abogados que se dedican al derecho de la propiedad industrial. ¿ES FRECUENTE EL SER REQUERIDO PARA INICIAR ACCIONES ADMINISTRATIVAS PARA PROTEGER LOS DERECHOS DE SUS CLIENTES EN ESTA MATERIA? NO 24% SI 76% En este primer recuadro se puede apreciar como una amplia mayoría de abogados son requeridos a efectos de brindar su asesoría en materia de defensa de la Propiedad Industrial. Un fenómeno que se presentó en los resultados obtenidos es que un porcentaje significativo, de los entrevistados, comenta que alguna veces funciona a la inversa, ya que son ellos son los que contactan a los titulares de la Propiedad Industrial ante el riesgo de infracción a sus derechos, estos casos son más comunes para la presentación de oposiciones de registro. ¿ES FRECUENTE EL SER REQUERIDO PARA INICIAR ACCIONES CIVILES PARA PROTEGER LOS DERECHOS DE SUS CLIENTES EN ESTA MATERIA? SI 2% NO 98% La anterior gráfica nos demuestra que, aunque existe la posibilidad de iniciar acciones del tipo judicial en el ámbito civil, estas no son tan comunes como lo son las acciones administrativas, a efectos de proteger a los signos distintivos. ¿QUÉ ACCIÓN HA EJERCIDO MÁS COMÚNMENTE? 90.00% 80.00% 0.8 70.00% 60.00% 50.00% 40.00% 30.00% 20.00% 10.00% 0.05 0.07 0.03 0.02 0.00% 0 0 0.03 Oposición al Providencias Medida Juicio oral Juicio oral de Juicio oral de Juicio oral de Juicio oral de registro de cautelares cautelar en por infracción reivindicación nulidad de anulación de competencia una signo (Art. 187 frontera. a la del derecho. registro. registro desleal distintivo decreto 57propiedad 2000). industrial. La presente gráfica demuestra que la acción que más comúnmente se utiliza, es en la vía administrativa, la oposición al registro de un signo distintivo, en la misma el legítimo titular de un derecho sobre un signo distintivo requiere al Registro de la Propiedad Industrial que no inscriba y en consecuencia autorice a un tercero utilizar un signo distintivo, en virtud de un derecho previamente adquirido. ¿SEGÚN SU EXPERIENCIA EL TIEMPO DE RESPUESTA (RESOLUCIÓN) POR PARTE DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA, EN CASO HABER PLANTEADO UNA ACCIÓN ADMINISTRATIVA FUE? SATISFACTORIO 30% NO SATISFACTORIO 70% La anterior gráfica, demuestra que el nivel de aceptación de la celeridad de los procedimientos administrativos en la materia no es satisfactorio. Nuevamente los abogados demuestran su molestia por el tiempo que tienen respuestas de sus procedimientos legales. ¿SEGÚN SU EXPERIENCIA EL TIEMPO DE RESPUESTA (SENTENCIA) POR PARTE DE LA ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA EN CASO HABER PLANTEADO ACCIONES CIVILES FUE? SATISFACTORIO 17% NO SATISFACTORIO 83% Al igual que la gráfica anterior el nivel de satisfacción en cuanto al tiempo de respuesta de petición a la administración de justicia es alarmantemente baja; hay que tomar en cuenta que la presente gráfica solo refleja la opinión de los encuestados en cuanto al tiempo en que se procesa y se resuelve la petición de la parte actora, esta no entra a estudiar sobre los resultados de fondo obtenidos en dicha resolución. ¿SEGÚN SU EXPERIENCIA LOS RESULTADOS OBTENIDOS CON LA ACCIÓN EN RELACIÓN A LO QUE SU CLIENTE NECESITABA FUE? NO SATISFACTORIO 14% SATISFACTORIO 86% Esta gráfica demuestra que a pesar que el tiempo de respuesta de parte del Estado en cuanto a la petición, es evidentemente no satisfactoria, una vez se logre solventar la gestión en cuanto al tiempo, los resultados a percepción de los abogados especializados en la materia, es que el cliente queda generalmente satisfecho con lo logrado en cuanto a la acción que sí prospera. Hay que tomar en consideración que se tiene como premisa que la petición fue aprobada por parte de la autoridad (ya sea judicial o administrativa) y que se logró la correcta ejecución de dicha resolución de conformidad con lo requerido. ¿De conformidad con su experiencia qué elementos de los que a continuación se enumeran, considera usted son los más importantes para determinar el éxito de una acción en materia de propiedad industrial? 6, 6% 17, 17% 77, 77% El tiempo de respuesta por parte de los funcionarios al momento de conocer sobre una acción El conocimiento que los funcionarios del Registro de la Propiedad Intelectual/Ministerio de Economía tienen sobre la materia El conocimiento que los jueces tienen sobre la materia La forma como se encuentran reguladas en el decreto 57-2000 y sus reformas. La anterior grafica demuestra la importancia que a criterio de los profesionales, tiene el tiempo de respuesta sobre las peticiones, volviendo a resaltar lo insatisfecho que sobre este tema se encuentran dichos profesionales. ¿Estima que es necesario que exista sinergia entre la propiedad intelectual y la mercadotecnia? El 100% de los encuestados coincidieron al afirmar que debería de trabajarse conjuntamente con el departamento creativo de las campañas publicitarias y el departamento legal, en este aspecto tanto los profesionales de la mercadotecnia como los profesionales del derecho especializados en la propiedad industrial coinciden sobre la necesidad de trabajar en conjunto. ¿EN SU EXPERIENCIA, ES FRECUENTE QUE SE PLANIFIQUEN LAS CAMPAÑAS PUBLICITARIAS Y MERCADOLÓGICAS CONJUNTAMENTE CON LA ASESORÍA DE UN ABOGADO EXPERTO EN PROPIEDAD INTELECTUAL? SI NO 1% 99% En nuestra última gráfica se puede evidenciar lo poco común que es el trabajo en conjunto entre los creativos y mercadologos y los abogados, lo cual contrasta con la intención de ambas partes que se debería de trabajar juntamente para obtener mejores resultados. Conclusiones El valor que tienen los signos distintivos radica en su capacidad de lograr posicionarse en la mente de los consumidores. Dicho posicionamiento se debe a que el signo distintivo genera una expectativa, conocida como la “promesa”, pero que finalmente en la ecuación económica, es la que motiva la intención de compra. Con la intención de mantener y proteger la percepción de los consumidores sobre los signos distintivos, es que los empresarios deben, en primera instancia, apropiarse con la exclusividad de sus signos, mediante la inscripción de los mismos ante el Registro de la Propiedad Industrial. En segunda instancia, con igual importancia que la primera, es que se debe mantener una defensa activa de sus intereses, ya sea mediante medidas de carácter administrativas (oposiciones) o judiciales, que busquen evitar el debilitamiento de la fuerza distintiva (percepción de los consumidores). Los signos distintivos deben protegerse de terceros que busquen aprovecharse indebidamente de su prestigio y también por elementos internos, que le hagan perder su valor, como lo sería la generalización de la misma. Los mecanismos creados por el Estado y regulados en el Decreto 57 – 2000 del Congreso de la República, con la intención de garantizar la Propiedad Industrial, de conformidad con el trabajo de campo son eficientes, pero de igual forma se hace la anotación que los mismos siguen con la corriente burocrática (entendiendo la burocracia como la administración ineficiente a causa del papeleo, la rigidez y las formalidades superfluas). El problema radica en que el dinamismo de las relaciones comerciales actuales requiere de acciones Estatales más expeditas, para que las mismas puedan ser efectivas y le sigan el paso al comercio. Los resultados presentados por las entrevistas evidencian que la percepción de las personas está, en que el problema no es que no existan leyes ni procedimientos, sino más bien que el problema radica en la aplicación de los mismas ya que una vez se logra concluir la gestión (juicio o procedimiento de oposición, según sea el caso) los resultados obtenidos son apropiados a sus necesidades. Se cumplió con el objetivo principal de la investigación ya que se analizaron las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el Decreto 57 – 2000, del Congreso de la República, para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde una perspectiva jurídica y mercadológica. Se determinaron los elementos que hacen distintivo a un signo distintivo en el mercado y su protección conforme lo regulado en el decreto 57-2000 Ley de la Propiedad Industrial, gracias al aporte que el enfoque mercadológico brindó. Así mismo se lograron identificar los métodos comerciales desleales que provocan el debilitamiento de la fuerza distintiva de un signo distintivo, pudiendo ser estos externos e internos de la empresa. El trabajo de campo nos permitió identificar cuáles son las acciones civiles y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República comúnmente ejercidas en la práctica. La experiencia presentada por los entrevistados, demostró que la intención que se tiene en la mayoría de casos, es el de expulsar del mercado a aquellos elementos que sean perjudiciales a sus signos distintivos, dicha pretensión usualmente no busca un resarcimiento de los daños y perjuicios, no por que no sean merecedores de dicho extremo, pero reconocen lo engorroso y costoso que esto significaría, para lo que el mercado guatemalteco les representa en términos económicos. Se pudo determinar que es de suma interés e importancia que se genere una sinergia entre los profesionales del derecho especializados en la Propiedad Intelectual y los mercadólogos. RECOMENDACIONES La optimización en los procesos legales donde se garanticen los derechos de la propiedad industrial, mediante la eliminación de la excesiva burocracia le representaría a Guatemala convertirse en foco de inversiones extranjeras, lo que se traduce en desarrollo. Un elemento que mejoraría la gestión de la administración pública, sería la creación de una carrera del funcionario público, donde se establezca un sistema basado en la meritocracía, que promueva la excelencia en el servicio de los funcionarios. Este sistema obligaría a que se respeten los plazos legales agilizando los procesos. El fortalecimiento de la política de protección al consumidor, mediante la creación una fiscalía penal especializada, Fortalecimiento de la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor -DIACO, traerían consigo una revalorización de los signos distintivos ya que les traería mayor credibilidad a los comerciantes. Se promueva a través de los colegios profesionales la creación de seminarios interinstitucionales que involucren temas propios del Derecho como de la Mercadotecnia, lo cual ayudaría a construir puentes que faciliten la “SINERGIA” entre ambos campos. Se incorpore en el pensum de estudios en la carrera de derecho, cursos que promueven en los estudiantes y futuros profesionales, la capacidad de asociarse y apoyarse de diferentes ramas de la ciencia para la defensa del Derecho, rompiendo así paradigmas que impiden la sinergia con diferentes campos de la realidad económica. REFERENCIAS REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS 1. Al Ries Laura Ries, “Las 22 leyes inmutables de la marca” Estados Unidos Mexicanos, McFraw-Hill Internemaricana editores, 2001. 2. Arellano Cueva, Rolando, Marketing Enfoque América Latina, México, Mcgraw-Hill, 2,000. 3. Bassat Luis, El libro rojo de las marcas, España, Ediciones Espasa Calpe, S.A. 2000. 4. Briceño Febres-Cordero, Marisol. Temas Marcarios para la comunidad Andina de Naciones, Caracas Venezuela, VE/ LIVROSCA/ 1999. 5. Casado Cerviño Alberto, Derecho de marcas y protección de los consumidores, España, Madrid, Editorial Tecnos (Grupo Anaya, S.A.), 2000. 6. Czinkota Michael y Ilka Ronkainen. 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Cardona, Julio, Director de Mejora continua de la Universidad Rafael Landívar y Perito de Marcas, entrevista realizada el 11 de septiembre del 2013. 2. Carranza de Guerra Luisa, Licenciada Docente de Dedicación Completa de las facultad de Mercadotecnia y Publicidad, Ciencias Económicas y Empresariales Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 17 de septiembre del 2013. 3. Castillo Aguilar, Luis Alberto, Licenciado en Mercadología y Publicidad de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. 4. Cifuentes López Marcos, licenciado en Mercadotecnia y publicidad, entrevista realizada el 20 marzo 2014 5. Consejo Nacional de la Publicidad, Una entidad de la iniciativa privada, febrero 1999. 6. Dimitrijevs James, La sinergia de las marcas y la comercialización, Revista de la OMPI, número quince, Estados Unidos de América, 15 de abril del 2006, INTA BULLETIN. 7. Flores Alvarado, Diego Licenciado en Mercadología y Publicidad de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. 8. MBA Juárez Montoya, Fabiola Lissette, Quality Assurance Head empresa transnacional, entrevista realizada el 19 diciembre del 2013 9. Mejía, Pilar, licenciada en Mercadotecnia y publicidad, entrevista realizada en marzo 2013 10. Mib Cleaves, Guillermo, Docente de Dedicación Completa y Perito en Marcas de la Universidad Rafael Landivar, entrevista realizada el 11 de septiembre del 2013 11. Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, “Principios Básicos de la Propiedad Industrial”, Publicación de la OMPI N° 895(S),Suiza, 2005 Pag 16 12. Pamela Gómez, Licenciada en Mercadotecnia y Publicidad, entrevista realizada el 20 de marzo del 2014. 13. Parra Satizábal, Carlos Alberto, “Relación entre Propiedad intelectual y Derecho de la Competencia: Mucho más que asuntos de competencia desleal”, Revista la Propiedad Inmaterial, publicación número cinco, año 2002, Universidad Externado de Colombia”. 14. Pe.i., España, número 17, edición de mayo-agosto 2004, Editorial Bercal, S.A. ANEXOS UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR TIPO: Expertos FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y SOCIALES (Abogados especializados en Propiedad Intelectual) Guatemala. ENTREVISTA Estimados Señores: A efecto de optar al grado académico de Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales, se está realizando la investigación titulada " Análisis de las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República, para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde el punto de vista mercadológico y jurídico", y con el objeto de recabar opiniones sobre este tema se están efectuando entrevistas a profesionales del Derecho que tengan conocimientos en materia de propiedad intelectual. Por tal motivo, se requiere su colaboración para dar respuesta a las siguientes preguntas, lo cual no le tomara más de 10 minutos. La información proporcionada se manejará con discreción y con finalidad estrictamente académica. 1) ¿Es frecuente el ser requerido para iniciar acciones administrativas para proteger los derechos de sus clientes en esta materia? _________ SI _________ NO 2) ¿Es frecuente el ser requerido para iniciar acciones civiles para proteger los derechos de sus clientes en esta materia? _________ SI _________ NO 3) Si su respuesta fue afirmativa, ¿Qué acción ha ejercido más comúnmente? Oposición al registro de una signo distintivo Providencias cautelares (Art. 187 decreto 57-2000). Medida cautelar en frontera. Juicio oral por infracción a la propiedad industrial. Juicio oral de reivindicación del derecho. Juicio oral de nulidad de registro. Juicio oral de anulación de registro Juicio oral de competencia desleal Otro:__________________________________________________________________ 4) ¿Según su experiencia el tiempo de respuesta (resolución) por parte de la administración pública, en caso haber planteado una acción administrativa fue? Muy Satisfactorio; Satisfactorio; No Satisfactorio 5) ¿Según su experiencia el tiempo de respuesta (sentencia) por parte de la administración de justicia en caso haber planteado acciones civiles fue? Muy Satisfactorio; Satisfactorio; No Satisfactorio 6) ¿Según su experiencia los resultados obtenidos con la acción en relación a lo que su cliente necesitaba fue? Muy Satisfactorio; Satisfactorio; No Satisfactorio 7) ¿De conformidad con su experiencia qué elementos de los que a continuación se enumeran, considera usted son los más importantes para determinar el éxito de una acción en materia de propiedad industrial? El tiempo de respuesta por parte de la Administración Pública El tiempo de respuesta por parte de la Administración de Justicia El conocimiento que los funcionarios públicos/Registro de la Propiedad Intelectual/Ministerio de Economía tienen sobre la materia El conocimiento que los jueces tienen sobre la materia La forma como se encuentran reguladas en el decreto 57-2000 y sus reformas. 8) ¿Estima que es necesario que exista sinergia entre la propiedad intelectual y la mercadotecnia?________ SI _________ NO 9) ¿En su experiencia, es frecuente que se planifiquen las campañas publicitarias y mercadológicas conjuntamente con la asesoría de un abogado experto en Propiedad Intelectual? __________________________________________________________________ UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y SOCIALES Guatemala. TIPO: Expertos (Mercadólogos) ENTREVISTA Estimados Señores: A efecto de optar al grado académico de Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales, se está realizando la investigación titulada " Análisis de las acciones de carácter civil y administrativas contempladas en el decreto 57-2000 del Congreso de la República, para la protección de los signos distintivos registrados en Guatemala, desde el punto de vista mercadológico y jurídico", y con el objeto de recabar opiniones sobre este tema se están efectuando entrevistas a profesionales de la mercadotecnia. Por tal motivo, se requiere su colaboración para dar respuesta a las siguientes preguntas, lo cual no le tomara más de 10 minutos. La información proporcionada se manejará con discreción y con una finalidad estrictamente académica. Para efectos de la presente entrevista se entenderá como signo distintivo: toda marca, nombre comercial, emblema y señal de publicidad utilizado para atraer la atención de los consumidores. ¿En su experiencia, que elementos debe poseer un signo distintivo para tener éxito y ser posicionado en la mente de los consumidores en Guatemala? ¿En su experiencia, que herramientas mercadológicas se deben implementar para que un signo distintivo se mantenga en la mente de los consumidores? ¿Qué riesgos considera usted que pueden generar el debilitamiento o pérdida de un signo distintivo en Guatemala (ejemplo, falsificaciones o competencia desleal)? ¿Conoce algún caso en Guatemala en donde una acción legal haya logrado evitar el detrimento de un signo distintivo? ¿En su opinión, existen en Guatemala los medios legales suficientes para proteger un signo distintivo? ¿Estima usted que es necesaria la sinergia entre el ámbito legal y mercadológico?_________ SI _________ NO ¿En su experiencia, es frecuente que se planifiquen las campañas publicitarias y mercadológicas conjuntamente con la asesoría de un abogado experto en Propiedad Intelectual? ¿Por qué?