9 I. Introducción En Latinoamérica y el Caribe (ALC), se considera que el aumento de la violencia constituye una de las amenazas más apremiantes para la salud y el desarrollo de los adolescentes. Las principales causas de muerte entre jóvenes de 10 a 19 años en la Región son el suicidio, los accidentes automovilísticos y los homicidios. De estos últimos, veintinueve por ciento de todos los que tienen lugar en ALC, ocurren en este grupo etario (Breinbauer y Maddelano, 2005). El alcohol suele ser un factor importante de causa de muerte y lesiones. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de alcohol provoca 3,2% de las defunciones anuales a nivel mundial (1,8 millones) - lo que equivale al 4% de la carga global de enfermedades- y existen relaciones causales entre el consumo de alcohol y más de 60 tipos de enfermedades y lesiones (WHO, 2002)1. El consumo de alcohol constituye también un factor de riesgo de muchos otros problemas graves, tales como traumatismos, ahogo por inmersión, quemaduras, delitos contra la propiedad, relaciones sexuales de alto riesgo, síndrome alcohólico fetal, intoxicación alcohólica y necesidad de tratamiento por abuso y dependencia etílica. La reducción del consumo nocivo de alcohol y de la violencia entre los jóvenes constituye una prioridad para muchos países de América Latina y el Caribe. Sin embargo, es escasa la investigación llevada a cabo en la Región en cuanto a la eficacia de las estrategias para prevenir o reducir la violencia juvenil relacionada con el alcohol. Como consecuencia, los funcionarios de salud pública y los profesionales dedicados a la prevención -especialmente a escala local- disponen de poca orientación para seleccionar estrategias que sean potencialmente eficaces. El objetivo de este documento es proporcionar un completo resumen de las estrategias y políticas obtenidas desde un enfoque ambiental, las que aportan evidencia en cuanto a la prevención o reducción de la violencia relacionada con el alcohol en los jóvenes a nivel regional. Las estrategias y políticas incluidas en este documento pueden clasificarse en dos grupos: 1) estrategias y políticas que tratan directamente de reducir el acceso de los jóvenes2 al alcohol, y 2) estrategias y políticas que intervienen en las condiciones de su consumo. Las primeras buscan prevenir o reducir la violencia relacionada con el consumo de alcohol a partir del supuesto de que los jóvenes tienen mayores probabilidades de incurrir en comportamientos violentos cuando están bajo la influencia del alcohol, por lo que la restricción al acceso a bebidas alcohólicas probablemente reduciría la violencia juvenil; y las segundas operan a partir del supuesto de que existe una mayor probabilidad de que los jóvenes (y los adultos) incurran en comportamientos violentos en ciertas circunstancias o condiciones en las que es probable que exista un alto consumo de alcohol, como en bares o acontecimientos deportivos. Este documento se divide en tres secciones: la primera trata de forma resumida el tema del consumo de alcohol en los jóvenes y su influencia en la violencia juvenil en ALC; también proporciona información 1 The World Health Report 2002 - Reducing Risks, Promoting Healthy Life. Geneva, World Health Organization, 2002. Available at: http://www. who.int/whr/2002/en/whr02_en.pdf 2 En este informe, se definen a los jóvenes como las personas de edades comprendidas entre los 10 y los 29 años, en concordancia con la definición señalada en el Informe mundial sobre la violencia y la salud (Krug, 2002). 10 Políticas para la reducción de la violencia relacionada con el alcohol en los jóvenes Introducción básica sobre la importancia de abordar la prevención del consumo del alcohol como un medio para prevenir o reducir la violencia; la segunda sección proporciona un resumen de las estrategias y políticas de prevención ambiental que se han mostrado como reductoras de la violencia relacionada con el alcohol en los jóvenes, e incluye algunos ejemplos llevados a cabo en la Región; y la tercera contiene recomendaciones sobre nuevas iniciativas y señala aquellas áreas que requieren investigación y evaluación adicionales.