Ramón Delgado www.ramon-astronomia.es – [email protected] Objetos celestes para fotografiar Todos los objetos que podemos fotografiar con nuestros telescopios de aficionados pertenecen a nuestra la Vía Láctea, excepto otras galaxias. Describo a continuación qué son cada uno de ellos. Cúmulo Abierto (también llamado Galáctico) Grupo de estrellas formadas juntas en los brazos de nuestra galaxia. Tiene normalmente formas irregulares y contienen desde unas pocas decenas hasta varios centenares de estrellas relativamente jóvenes en un volumen de hasta 50 años luz (a.l.) Están más sueltos que los cúmulos globulares, aunque pueden tener una densidad de estrellas en su centro unas 10.000 veces mayor que la existente en la vecindad del Sol. Se conocen más de 1.000 cúmulos abiertos, todos en el disco galáctico. Sus edades varían entre unos pocos millones hasta varios miles de millones de años, y los más jóvenes están todavía rodeados por trazas de la nebulosa a partir de la cual se formaron. Los menos densos son disgregados gradualmente por la interacción gravitacional con el resto de la galaxia. Cúmulo Globular Grupo aproximadamente esferoidal de estrellas viejas en el halo de la Vía Láctea. Contiene entre decenas y miles de millones de estrellas, y tiene diámetros entre 100 y 300 a.l. En el centro del cúmulo, donde se encuentran concentradas la mayoría de las estrellas, la densidad puede ser de más de 250 estrellas por año luz cúbico. Se conocen en nuestra galaxia alrededor de 140 cúmulos globulares. Son muy viejos, de unos 1010 años, habiéndose formado en las etapas tempranas de la historia de la galaxia. Se encuentran alrededor de todas las grandes galaxias, aunque son más abundantes alrededor de las galaxias elípticas gigantes. Excepcionalmente, algunas galaxias que han sufrido fusiones recientes contienen un gran número de cúmulos globulares jóvenes. 1/4 Ramón Delgado www.ramon-astronomia.es – [email protected] Objetos celestes para fotografiar Nebulosa Nube de gas y polvo situada en el espacio. Existen tres tipos principales de nebulosas gaseosas: de emisión, de reflexión y oscuras o de absorción. Las nebulosas de emisión se caracterizan por que brillan por luz propia, generalmente como resultado de quedar expuestas a una fuente de radiación ultravioleta. Se caracterizan por su color rojo. Las nebulosas de reflexión brillan porque reflejan o difunden la luz estelar. Suelen aparecer junto con las nebulosas de reflexión en las regiones de formación estelar reciente. Se caracterizan por su color azul. Las nebulosas oscuras o de absorción se caracterizan por absorber la luz que incide sobre ellas, de manera que parece negra frente a un fondo más brillante. Ejemplos típicos de nebulosas son la Trífida (en la foto) o la Nebulosa de la Cabeza de Caballo. Nebulosa Planetaria Brillante nube de gas y polvo luminoso que rodea a una estrella muy evolucionada. Se forma cuando una gigante roja eyecta sus capas exteriores a velocidades de unos 10 km/s. El gas eyectado es entonces ionizado por la luz ultravioleta procedente del núcleo caliente de la estrella. Tienen típicamente 0,5 a.l. de diámetro y la cantidad de material eyectado es de 0,1 masas solares o incluso mayor. Dura unos 100.000 años, tiempo durante el cual una fracción apreciable de la masa de la estrella es devuelta al espacio interestelar. A medida que pierde materia, el núcleo queda progresivamente expuesto, convirtiéndose finalmente en una enana blanca. 2/4 Ramón Delgado www.ramon-astronomia.es – [email protected] Objetos celestes para fotografiar Remanente de Supernova Nebulosa difusa consistente en los restos de las capas externas de una estrella que han sido expulsados hacia el espacio por una explosión de supernova, junto a la materia interestelar barrida por dicha explosión. La velocidad de expansión puede ser una pequeña fracción de la velocidad de la luz. Los remanentes de supernova son intensas fuentes de rayos X y de ondas de radio, y en algunos casos pueden ser energizadas por un púlsar central. La nebulosa más conocida es la del Cangrejo, en Taurus (en la foto). Galaxia Sistema de estrellas acompañadas a menudo con gas y polvo interestelar, unidas por la gravedad. Son las principales estructuras visibles del Universo, y varían desde las enanas, con menos de un millón de estrellas, a las supergigantes con más de un billón, con diámetros que van desde uno pocos cientos hasta más de 600.000 a.l. Aparecen en dos formas principales: espirales (con brazos) y elípticas (sin brazos), aunque también existen las denominadas galaxias irregulares. Su distancia a la Tierra va desde la Galaxia de Andrómeda (en la fotografía), situada a unos 2,5 millones a.l., en adelante, siendo posible fotografiar con nuestros telescopios galaxias situadas a distancias de hasta 100 millones de a.l. 3/4 Ramón Delgado www.ramon-astronomia.es – [email protected] Objetos celestes para fotografiar Objetos del Sistema Solar Se incluyen aquí todos los objetos fotografiables pertenecientes a nuestro Sistema Solar: el Sol, la Luna, los planetas, los asteroides y los cometas. De todos estos objetos, los más lejanos son los cometas, planetesimales helados compuestos de hielo y polvo, restos de la formación de los planetas exteriores. Se piensa que proceden de la denominada Nube de Oort y del Cinturón de Kuiper, ambas más allá de Plutón. Desde ahí, los cometas pueden ser perturbados por la influencia gravitacional de las estrellas próximas, modificando su órbita hacia el Sistema Solar interior, donde se vuelven visibles desde la Tierra. En la actualidad, se piensa que la mayor parte de los cometas no periódicos proceden de la alejada nube de Oort (franja de objetos situada desde 10.000 hasta 100.000 UA), mientras que los cometas periódicos procederían del más cercano Cinturón de Kuiper (franja situada desde 30 hasta 1.000 UA). 4/4