LEGADO CULTURAL, PODER E IDENTIDAD EN LA EDAD MODERNA María López Díaz, Profesora Titular de Historia Moderna en la Facultad de Historia (UVigo), [email protected] Antonio Presedo Garazo, Profesor asociado de Historia Moderna en la Facultad de Historia (UVigo), [email protected] María Seijas Montero, Profesora asociada de Historia Moderna en la Facultad de Filología y Traducción (UVigo), [email protected] El poder, entendido como dominación o influencia que una institución, sujeto o grupo de individuos ejercen sobre una sociedad o un conjunto de personas dado, desempeñó un papel decisivo en la configuración de los distintos espacios en que estuvo dividido el territorio gallego durante el Antiguo Régimen. Globalmente esos espacios o demarcaciones configuraron un modelo que, basado en la yuxtaposición y diversidad, contribuyó a modelar la identidad de las comunidades (vecinos) que residían y/o estaban adscritas a cada una de ellas. Por supuesto, estas comunidades no permanecieron ajenas a las distintas instancias e instituciones que ejercían ese poder. Por ello, su legado cultural es el resultado de la interacción de todos estos elementos que, directa o indirectamente, condicionaron o influyeron en sus vidas (a nivel particular o privado y como integrantes de una o varias comunidad/es pública/s) así como de la progresiva evolución que experimentó su cultura en una dialéctica de continuidades y cambios que afecta a todas las sociedades. La presente línea de investigación trata de profundizar en las claves que permiten explicar esta influencia por parte del poder en la configuración de las identidades locales y, por ende, en la constitución del legado cultural procedente de las sociedades de Antiguo Régimen. Son múltiples los aspectos que a tal propósito se pueden estudiar y variados también los enfoques desde los que se pueden acometer. Como punto de partida, y a modo orientación, proponemos tres ejes que coinciden con vías ya ensayadas o en las que se trabaja con óptimos resultados. En primer lugar, en relación con el poder, quiénes lo poseen (titulares) y quienes lo ejercen (titulares o sus oficiales), cómo han llegado a controlarlo y cuáles son sus fundamentos, su ámbito de influencia tanto a escala geográfica (espacio o territorio que abarca) como política (personas y comunidades afectadas y grado de afectación), de qué mecanismos se valen para refrendarlo (atribuciones) y con qué límites objetivos se encuentran a la hora de ejercerlo tanto en el plano formal como informal. En segundo lugar, en la medida en que estas variables también interactúan en la configuración de la identidad de los distintos sectores e instituciones que gozan de poder y en su legado cultural, interesa conocer cómo se fue configurando esa identidad y los rasgos que la singularizan. Junto a ello, será objeto de investigación cómo o en qué medida la mencionada yuxtaposición de los distintos espacios generados en torno al ejercicio del poder contribuyó, por un lado, a la consolidación de la/s identidad/es de la sociedad gallega premoderna y, por otro, a generar un notable patrimonio con fuerte presencia en nuestro paisaje cultural actual. Y, enlazando con lo precedente, el tercer punto gira en torno a las claves de constitución de ese legado cultural de unas comunidades (la mayoría locales y rurales, pero también de radio más amplio) y unas instituciones (laicas y eclesiásticas, rurales y urbanas, civiles y militares) cuyos integrantes vivieron mientras tuvo vigencia dicho modelo político, atendiendo tanto a su ámbito material –asociado a las necesidades cotidianas– como a su intrínseco componente inmaterial-simbólico. Dentro de este marco amplio, la línea de investigación de la prof.ª M.ª López Díaz se orienta al estudio del poder y de las instituciones, los grupos de poder, la organización histórica del territorio y los procesos de identidad que generan en su interacción sobre las comunidades afectadas generan dichas variables. Por su parte, el prof. Antonio Presedo Garazo trabaja sobre todo en el estudio de la nobleza e hidalguía gallegas, los rasgos que los identifican y singularizan como grupo social (de y con poder) e individualmente (a las distintas familias), su hábitat y forma de vida, pero también su patrimonio material y simbólicoinmaterial. Finalmente, la profesora M.ª Seijas Montero dirige su investigación hacia las instituciones eclesiásticas, en particular hacia las comunidades monásticas, su economía, el entorno o medio en el que se asientan, su existencia y proceder y su legado cultural-patrimonial. Recientemente, desde el área que respalda esta línea de investigación, proponemos otra vía para observar nuestro pasado como sociedad histórica, volcada en el estudio de las instituciones capitulares y élites eclesiásticas gallegas, desde una triple vertiente que conecta con las tres anteriores; a saber: el estudio del poder y espacio (o territorio) sobre el que se asientan y/o ejercen dicho poder, su relación con la otras élites sociales, en particular con las élites políticas y familias de poder, y su presencia o arraigo dentro de la comunidad e instancias eclesiásticas.