Lección 25. Contaminación de origen urbano. Contaminación urbana difusa. Residuos sólidos urbanos. Aguas residuales urbanas. Problemas asociados a la reutilización INTRODUCCIÓN En primera aproximación, se puede estimar que hay cinco grandes sistemas ecológicos que soportan los efectos contaminantes de las diversas actividades industriales, agrícolas y urbanas. Estos cinco sistemas están interconectados y cambian continuamente. AIRE Deposición atmosférica CO2, NO2, SO2 MEDIO URBANO CULTIVOS Acidos Tóxicos Nutrientes Sedimentos Tóxicos Nutrientes Sedimentos Tóxicos Nutrientes Cenizas CO2 BOSQUES Sedimentación por deforestación AGUA El medio urbano recibe contaminantes de procedencia atmosférica y emite contaminantes a la atmósfera y al suelo, principalmente a través de las aguas residuales urbanas y los residuos sólidos urbanos. Tradicionalmente, la contaminación por lixiviación de vertederos mal controlados o por vertidos de aguas residuales se han considerado como fuentes puntuales de contaminación y, de hecho, así pueden considerarse en la mayor parte de los casos. Sin embargo, el medio urbano también origina cargas contaminantes de carácter difuso que por vía directa o indirecta puede afectar a la calidad de las aguas. CONTAMINACIÓN DIFUSA DE ORIGEN URBANO La contaminación difusa de origen urbano está relacionada con el incremento de la escorrentía superficial en los núcleos urbanos y con las pérdidas en los sistemas de alcantarillado. Las áreas urbanas están notablemente impermeabilizadas lo que da lugar a elevados coeficientes de escorrentía, que es la relación entre el volumen de agua de escorrentía y el volumen de agua de lluvia, para un área dada. Por otro lado, la respuesta hidrológica a la lluvia es muy rápida, es decir, de bajos tiempos de concentración, lo cual conduce a picos de escorrentía muy superiores a los normales, con el consiguiente riesgo de inundación. Otro efecto diferido de esta impermeabilización es la ausencia de recarga y, por tanto, es de esperar cierto grado de depresión del nivel piezométrico. Cuando existe recarga, puede tratarse de fugas de alcantarillado, en cuyo caso la recarga puede inducir contaminación a las aguas subterráneas. El alto grado de escorrentía puede tener elevada capacidad erosiva de las áreas permeables (no construidas), sobre todo en las regiones áridas y semiáridas, en las que las lluvias son muy intensas y esporádicas, y el suelo tiene escasa protección. En este caso, el agua de escorrentía puede arrastrar los fertilizantes y plaguicidas que se hubieran aplicado en estas áreas. Origen y magnitud de la contaminación urbana difusa Los usos urbanos del suelo incluyen zonas residenciales (de baja, media y alta densidad), zonas comerciales, zonas industriales, otras zonas urbanizadas (parkings, complejos deportivos,..), zonas no construidas (parques, campos de golf, jardines,..) y medios de transporte (aeropuertos, carreteras y tráfico). Cada uno de estos usos implica una carga contaminante específica, de manera que a grandes rasgos se puede establecer una clasificación que agrupa usos en función de carga: • Baja carga contaminante. Incluye zonas residenciales de baja y media densidad (menos de 125 habitantes por hectárea) y actividades industriales de baja intensidad (mayoristas, almacenes) • Mediana carga contaminante. Incluye zonas residenciales de alta densidad (más de 125 habitantes por hectárea) y zonas comerciales. • Alta carga contaminante. Zonas industriales de alta y media intensidad. • Bajo potencial contaminante. Incluye parques y zonas de recreo. En todo caso, la contaminación está originada por procesos contaminantes muy diversos, que son: Contaminación contenida en el agua de lluvia Erosión de suelos permeables Acumulación de partículas atmosféricas (polvo atmosférico) y suciedad en las calles, y el subsiguiente lavado en áreas impermeables. Las fuentes de estos contaminantes son la deposición seca, las emisiones de tráfico, acumulación de residuos en la calle, residuos orgánicos de vegetación y animales, etc. Acumulación de sólidos en alcantarillas Lixiviado de fosas sépticas o vertederos Aplicación, almacenamiento y lavado de sustancias utilizadas para el deshielo, y otros compuestos químicos. Aplicación de plaguicidas y fertilizantes Descarga de contaminantes, tales como aceites de coche, detergentes y otros compuestos químicos Conexiones entre aguas residuales industriales y urbanas, y fallos en las fosas sépticas Fuentes de contaminación Deposición atmosférica La deposición atmosférica de contaminantes se puede dividir en seca y húmeda. Las fuentes de emisión de los contaminantes pueden ser local o distante, y están ligadas a la actividad doméstica, tráfico, industrias y agricultura. Los contaminantes pueden ser absorbidos por las gotas de lluvia. La deposición seca (polvo fugitivo) está originada por la erosión de los suelos, construcciones, vertederos y fuentes biológicas (polen, esporas y residuos orgánicos). 2 La carga contaminante de las grandes ciudades varía entre 7 y 30 toneladas/km /mes, que es 2 equivalente a gramos/m /mes, dependiendo de la densidad de población y de las industrias incluidas en el casco urbano. A título de ejemplo, las tasas de deposición atmosférica determinadas en una ciudad media norteamericana (Milwawkke) son: Deposición húmeda (características medias) Sólidos en suspensión 4.0 mg/l Orgánicos (VSS) 1.0 mg/l Orfgánicos (COD) 7.0 mg/l N total 0.9 mg/l P tptal 0.015 mg/l Pb total 0.012 mg/l pH 4.2 Deposición seca Sólidos totales 0.43 - 0.60 kg/ha/día COD 0.16 - 0.23 kg/ha/día P total 0.47 - 0.55 kg/ha/día Pb total 0.51 - 0.52 kg/ha/día Sulfato 20.0 - 25.0 kg/ha/día Residuos callejeros Engloba las partículas de tamaño mayor que el polvo (>60 µm), aunque normalmente se dividen en dos categorías en función de su tamaño: mediano (60 µm - 2 mm) y alto (> 2mm). Los desperdicios de tamaño alto contienen materiales tales como botes, latas, vidrios, botellas, tapones, papeles, materiales de construcción, plásticos, basura, vegetales, animales muertos, insectos, excretas de animales, etc.. Residuos de vegetación Un árbol adulto puede dar lugar a 15-25 kg de hojas /año, que contienen cantidades apreciables de nutrientes (0.04-0.28% de fósforo) Tráfico Los contaminantes originados por el tráfico incluyen hidrocarburos tóxicos, metales, asbestos y aceites. Las emisiones de los tubos de escape suelen ser de tamaño polvo (<60 µm), pero también hay otros contaminantes relacionados con el tráfico que pueden tener mayor tamaño (gomas, aceites, etc..). En la tabla siguiente se muestran valores de emisiones de tráfico en la ciudad de Washington. Contaminante Sólidos volátiles DBO DQO P total Nitratos Plomo Cobre Zinc Porcentaje del total de sólidos (en peso) 5.1 0.23 5.4 0.06 0.008 1.2 0.012 0.15 RESIDUOS SOLIDOS URBANOS (RSU) Se entiende por RSU todo material resultante de un proceso de fabricación, transformación, utilización, consumo o limpieza, cuando su poseedor o productor lo destina al abandono. Asimismo, se entiende por deshecho cualquier producto deficiente, inservible o inutilizado que su poseedor destina al abandono, o del que quiere desprenderse. Hay una notable diferencia entre los residuos domésticos que se producían hasta la primera mitad del presente siglo y los que actualmente se generan en zonas urbanas. Esta diferencia es tanto cualitativa cono cuantitativa: se ha pasado de pequeños volúmenes de residuos formados casi exclusivamente por materia orgánica, a la producción de enormes cantidades de residuos cuya persistencia es mucho mayor (envases, plásticos, etc...). PRODUCCION DE RSU La tasa de producción de RSU en España es (1986) : Comunidad Kg/hab/día Comunidad Andalucía 0,667 Extremadura Aragón 0, 652 Galicia Asturias 0, 694 Madrid Baleares 0, 974 Murcia Canarias 0, 756 Navarra Cantabria 0, 763 País Vasco Castilla La Mancha 0,620 La Rioja Castilla y León 0, 695 Ceuta Cataluña 0, 789 Melilla Com. Valenciana 0, 921 Kg/hab/día 0, 635 0, 644 0, 826 0, 751 0, 684 0, 705 0, 666 0, 890 0, 899 En los países europeos, la tasa de producción se aproxima a 1 Kg/hab/día, si bien alcanza valores extremos cercanos a 0,6 y 1,3 respectivamente, bastante alejados sin embargo, de los cerca de 1,8 Kg/hab/día que produce la ciudad de New York. En definitiva, la tasa de producción varía sensiblemente de unas regiones a otras en función del grado de industrialización, actividades primarias, costumbres y demás rasgos sociales y culturales. También el número de habitantes es determinante en la tasa de producción, de forma que que se estima que: 1. Las ciudades con más de 1.000.000 de habitantes, generan 0,9 Kg/hab/día 2. Entre 1.000.000 y 100.000, 0,75 Kg/hab/día 3. Entre 100.000 y 20.000, 0,65 Kg/hab/día 4. Menos de 20.000, 0,55 Kg/hab/día PRINCIPALES CONTAMINANTES DE LOS RSU - Contaminantes biológicos: bacterias transmisoras de tifus, gastroenteritis aguda, disentería, cólera, tuberculosis, etc... Virus de la polio, meningitis, hepatitis, gastroenteritis viral, etc.. Parásitos, tales como helmintes, acáridos, protozoos, et.. - Contaminantes orgánicos: Se entienden por tales los nitratos, nitrito, amonio y DQO. - Detergentes: catiónico, aniónico y no iónicos - Pesticidas: organoclorados, organofosforados, triacinas, carbamatos,.. - Hidrocarburos - Químicos minerales - Salmueras - Sustancias radiactivas - Aceites y grasas COMPOSICION DE LOS RESIDUOS SOLIDOS URBANOS La composición de los RSU es muy variable en función de factores tales como la climatología, situación geográfica, estación del año, nivel de vida, zona rural o urbana, etc, pero, en general, se distinguen tres grandes grupos de materiales: - Materiales inertes: metales, vidrios, tierra y cenizas, cerámica, reparaciones domiciliarias, otros - Materiales fermentables: materia orgánica - Materiales combustibles: papel, cartón, plástico, madera, trapos, gomas, cueros, textiles. A grosso modo, los inertes representan el 10 % del total (en peso), los fermentables el 50% y los combustibles el 40% restante. Parte de estos componentes pueden ser recuperados mediante reciclado o transformación. Sin embargo, un aspecto de notable interés para la preservación de la calidad del agua subterránea (y también la superficial) es la producción de lixiviados, cuya composición es distinta en función de la edad de los residuos: mg/l pH DBO5 DQO TOC Sólidos totales N (total) Fosfatos Cloruros Sulfatos Fe Na K Ca RSU de 2 años 5 - 6,5 5000 - 60000 10000 - 100000 1000 - 20000 8000 - 50000 100 - 1500 5 - 150 500 - 3000 50 - 2000 100 -2500 500 -3000 200 -1000 500 - 3000 RSU de 10 años 6,5 - 8,5 < 1500 100 - 800 < 200 1000 - 3000 < 100 <5 100 - 500 < 50 10 -400 < 500 50 - 400 100 - 500 Los principales gases que se producen en un vertedero son producto de la fermentación de la materia orgánica, si bien su composición puede variar en función de las condiciones aerobias o anaerobias, según los casos, del depósito, así como por la presencia de distintos componentes. Los gases más frecuentes son CO2, CH4 y compuestos nitrogenados y sulfurados. En los depósitos de RSU, la evacuación de gases está prevista por medio de chimeneas de desgasificación, que pueden ser macizas (a base de fragmentos groseros de roca) o huecas (tubería ranurada). SISTEMAS DE TRATAMIENTO 1. Descarga controlada. Para poblaciones de menos de 1000 habitantes. Relleno de zanjas abiertas en terrenos impermeables. 2. Vertedero de baja densidad. Relleno de huecos o creación de relieves en terrazas a base de una progresiva deposición de residuos que se recubren diariamente. Adecuada para unidades de producción que generen algunas decenas o unidades de toneladas al día. Los residuos alcanzan una densidad del orden de 0,4 - 0,5. 3. Vertedero de alta densidad. Depósitos de residuos extendidos en capas cuyo espesor no sobrepasa los 25-30 cm y sobre los cuales se realiza compactación y trituración. Los residuos fermentan de forma aerobia (en dos o tres meses) y alcanzan densidades del orden de 1 ó más. Adecuados hasta 100 Tm/día. 4. Plantas de recuperación. Son instalaciones industriales para recuperación de materias primas. Se suele obtener compost a partir de la materia orgánica y se recupera chatarra, plásticos duros, vidrio,... Adecuada a partir de 70 Tm/día. 5. Plantas de incineración. Transformación de los RSU en inertes (cenizas y escorias) con reducción del volumen de hasta el 90% y del peso entre 50 y 70%. Puede ser una fuente de energía aprovechable (es autocombustible) y pueden recuperarse metales y vidrios. IMPACTO AMBIENTAL DE LOS RSU Aunque con diferente gravedad, se puede dar impacto ambiental en todas las fases del proceso que sufren los residuos: prerrecogida, recogida, transporte y depósito, eliminación o recuperación. Sin duda, en la fase de tratamiento y depósito los riesgos de afección al medio ambiente son mayores, pudiendo destacarse los siguientes aspectos: - Contaminación de aguas superficiales - Contaminación de aguas subterráneas - Formación de gases que pueden originar incendios de los vertederos y de áreas forestales próximas - Incendio provocado o producido por los residuos, dando lugar a contaminación atmosférica - Presencia de animales trnsmisores de enfermedades: aves, roedores, reptiles y mamíferos - Contaminación estética y paisajística - Molestias por olores, humos y dispersión de materiales sueltos - Aterramiento de cauces de drenaje, provocando inundaciones. MAPAS DE ORIENTACION AL VERTIDO DE RSU Son mapas de carácter orientativo en los que se considera exclusivamente la protección de la calidad de las aguas subterráneas, especialmente las destinadas al abastecimiento urbano. Esto no quiere decir que estos mapas no puedan ser utilizados para otros fines, ya que, en todo caso, se pone de manifiesto la vulnerabilidad de los acuíferos frente a la contaminación iniciada en la superficie del terreno. La escala es un factor determinante en estos mapas puesto que habitualmente se requieren estudios de detalle, especialmente en aquellos sectores en los que, inicialmente, la construcción de un vertedero de residuos puede ser aceptable. En la confección de mapa se tienen en cuenta criterios tales como: estudios piezométricos, isoespesor no saturado, permeabilidad horizontal y vertical, litología, geomorfología y geotecnia. Normalmente, en el mapa se diferencian zonas desfavorables para el vertido y zonas que requieren estudios complementarios. En estas últimas se hace una primera diferenciación entre zonas desfavorables en principio y favorables en principio. METODOLOGIA PARA EL ESTUDIO DE UBICACION DE UN VERTEDERO CONTROLADO DE RSU Se deben contemplar los siguientes aspectos: a) Estudio geológico b) Estudio ecológico c) Estudio socio-económico d) Estudio de gestión del vertedero e) Evaluación de impacto ambiental En el estudio geológico se debe prestar especial atención a: - Geomorfología: Topografía, capacidad, exposición, altura - Geología: Litología, fracturación, karstificación - Geotecnia: Estabilidad, resistencia de materiales - Edafología - Hidrogeología: Permeabilidad, transmisividad, espesor de la zona no saturada, inventario de puntos de agua Climatología: Precipitaciones, viento, humedad, evaporación, evapotranspiración En la Evaluación de Impacto Ambiental se pretende identificar, interpretar y prevenir las consecuencias o efectos que la ubicación de un vertedero puede causar sobre el entorno y la salud pública. Existen muchos métodos de evaluación pero quizás la más ampliamente utilizada sea la matriz causa - efecto, tal como la de Leopold. En ella se relacionan las acciones a realizar (recogida, transporte, depósito, lixiviados, humos, ruidos, etc...) con los factores ambientales (aguas superficiales, subterráneas, aire...) y se pondera (entre 1 y 10) la magnitud y la importancia de cada una de las interacciones. AGUAS RESIDUALES URBANAS En cuanto a las aguas residuales urbanas, el Plan Director de Saneamiento y Depuración incluye que para el año 2005 existan estaciones depuradoras en todas las poblaciones superiores a 500 habitantes, con objeto de conseguir lo estipulado en la Directiva Europea 91/271 CEE Los objetivos de calidad son los siguientes: PARÁMETRO DBO5 DQO (1) SS (2) Fósforo total (2) Nitrógeno total CONCENTRACIÓN mg/l 25 125 35 1-2 10 - 15 REDUCCIÓN MÍNIMA % 70 - 90 75 90 80 70 - 80 1.- Requisito optativo 2.- Vertidos a zonas sensibles propensas a eutrofización. 3 Al final del Plan Director se depurarán en la provincia de Castellón unos 85 Hm /año. En los municipios costeros ha sido práctica tradicional la emisión del agua residual al mar, con mayor menor grado de depuración, lo que a veces ha dado lugar a problemas de contaminación del medio litoral. En otros caso, estas aguas, normalmente sin depurar, eran vertidas a cauces públicos. En la actualidad hay dos factores que modifican el impacto ambiental causado por las aguas residuales: uno de ellos es la mejora de los sistemas de depuración (mayor número de depuradoras y mayor intensidad de tratamiento), y el otro es la tendencia a la reutilización de aguas residuales, especialmente para el riego. Desde hace años, las aguas residuales de la ciudad de Castellón y de otros municipios de la Plana están siendo utilizadas para el riego de cítricos. En el Plan de Cuenca del Júcar se enfatiza en la necesidad de la reutilización exhaustiva de esta agua y el Plan de Regadíos incorpora la necesidad de mejorar las infraestructuras necesarias para llevar a cabo esta actuación. En primera aproximación, estas líneas de actuación son coherentes con la optimización de los recursos hídricos pero conviene no olvidar que en la mayoría de los casos (si no en todos) las aguas residuales tienen una carga contaminante específica cuyo destino se tiene que conocer. Resulta sorprendente que en los presupuestos destinados a la reutilización de aguas residuales (miles de millones de pesetas) no se destine una partida (porcentualmente insignificante) a estudiar los efectos secundarios o colaterales que pudieran derivarse de esta práctica. Aunque no existe una legislación adecuada sobre los requisitos de calidad de las aguas regeneradas para el riego agrícola, la escasa normativa sólo atiende a criterios sanitarios y a las posibles afecciones a los cultivos. Pero nada hay estipulado (ni casi conocido) sobre la afección al suelo o las aguas subterráneas. El destino de los diversos contaminantes existentes en las aguas residuales puede ser muy diverso en función del tipo de medio físico en el cual se apliquen, y su conocimiento requiere estudios rigurosos de los procesos físicos, químicos y biológicos que sufren. PROCESOS FÍSICOS, QUÍMICOS Y BIOLÓGICOS Los fenómenos físicos y químicos más frecuentes que dan lugar a la depuración del agua infiltrada son: filtración, adsorción, absorción, cambio iónico, precipitación, coprecipitación de metales pesados con carbonatos, sulfuros e hidróxidos, hidrólisis y descomposición microbiológica aerobia y anaerobia. Los procesos que contribuyen más a la mejora de la calidad del agua son los aerobios pues son más eficaces, rápidos y no suelen dar lugar a sustancias indeseables. Los suelos que ofrecen mejores condiciones para contribuir a la depuración del agua son los que presentan un perfil con una zona superior formada por arenas más o menos finas y una inferior compuesta por material más grosero con suficiente permeabilidad y con una ligera presencia de arcillas para permitir procesos de cambio iónico; por el contrario, los suelos con capas permeables, compuestos por arenas muy gruesas o gravas y los formados por rocas fracturadas no son eficaces (Bouwer, 1985). Comportamiento de algunos contaminantes Sólidos en suspensión y disueltos La concentración de sales del agua en la balsa de recarga suele ser mayor que la original, alrededor del 1.5 % a 2.5 % más alta, debido a la concentración por evaporación. Los sólidos en suspensión son eliminados casi completamente por filtración a través del terreno. Las partículas más gruesas se depositan en la superficie del suelo o son retenidas a cierta profundidad; si el tamaño de las partículas es 0,07 veces menor que el de las partículas del medio, se moverán a través del terreno, sin ser retenidas. En varios proyectos de recarga con aguas residuales depuradas utilizando la técnica SAT se han alcanzado reducciones de sólidos en suspensión del 100 %. Metales pesados y elementos traza En el suelo, los metales pesados intervienen en reacciones de intercambio iónico con arcillas y materia orgánica, reacciones de adsorción con minerales y también en reacciones con moléculas orgánicas; todo ello da lugar a que se fijen en el suelo. Los metales de alto peso molecular son eliminados por filtración mecánica por el suelo y por intervención en reacciones de adsorción. El problema de los metales pesados es que su acumulación en el suelo puede alcanzar niveles indeseables para su uso en actividades agrícolas. El boro es adsorbido por hidróxidos de Fe y Al, hidróxidos de Mg, óxidos de Fe y Al y minerales micáceos, aunque si se encuentra como ácido bórico no es retenido por el suelo, lo que implica un notable riesgo de toxicidad para los cultivos. El Fe y Mn, si aparecen como óxidos, son insolubles; pero si existe un medio reductor con presencia de sulfuros pueden precipitar. Los precipitados de Fe y Mn son uno de los causantes de los procesos de colmatación que se dan en pozos, por lo que estos elementos deben ser eliminados con un pretratamiento. El Cu, Li, Ni, Zn y Cr suelen ser adsorbidos por el terreno, pero en algunos casos es necesario un largo recorrido del agua para ser eliminados. El Hg es poco soluble; los compuestos de As son muy insolubles en medio aerobio pero existen algunas formas solubles; el Ba está afectado por cambios iónicos pero tiene movilidad; el Sr es de movilidad moderada y el Be no sufre variaciones. La mayoría de metales se quedan retenidos en los primeros centímetros de penetración en el terreno por lo cual son fácilmente eliminables en el caso de las balsas de infiltración ya que sólo hará falta retirar la franja superior del terreno durante las operaciones de mantenimiento. En experiencias realizadas en Arizona se comprobó la reducción de Zn (de 193 a 35 µg/l en el agua recuperada), cobre (123 a 16 µg/l), cadmio (7.7 a 7.2 µg/l) y plomo (88 a 66 µg/l) después de que el agua residual depurada infiltrada circulase unos 3 metros por la zona no saturada y 6 metros en el acuífero. Compuestos orgánicos Los mecanismos más importantes que afectan a los microcontaminantes orgánicos son la adsorción, la volatilización y la biodegradación. La distribución de un microcontaminante orgánico entre el agua residual y el suelo se puede expresar mediante una isoterma (Langmuir o Freundlich), en la que el coeficiente de reparto sea Koc, dependiente del contenido en materia orgánica, que afecta a la adsorción de los compuestos orgánicos hidrofóbicos. La tasa de volatilización se puede expresar mediante el Kw, coeficiente de reparto entre el agua y el aire, definida como el cociente entre las concentraciones, en estado de equilibrio, de esa sustancia en el agua y la correspondiente en el aire a 25 ºC, medidas en µg/ml. Un valor bajo de Kw indica una gran tendencia del compuesto a volatilizarse. La biodegradación es la descomposición de los compuestos orgánicos mediante reacciones bioquímicas (oxidación-β, rotura del enlace de tipo éter, hidroxilación bencénica, rotura del anillo bencénico, hidrólisis de los ésteres, deshalogenación, n-desalquilación) potenciados por ciertos enzimas. La velocidad de biodegradación en el suelo depende del tipo de microorganismos (bacterias, actinomicetos y hongos), de las características del suelo y de la estructura molecular del compuesto en cuestión. El proceso de absorción por las raíces (bioacumulación) de compuestos orgánicos no está bien conocido, aunque debe tratarse de flujo másico. Los microcontaminantes orgánicos de valor elevado de Kow quedarán depositados en las raíces de las plantas, una vez asimilados por estas (Iwata y Gunther, 1976), debido a su naturaleza hidrofóbica. Los compuestos orgánicos se destruyen por oxidación en el terreno o por degradación en medio anaerobio. Esto queda reflejado en la reducción de la DBO (demanda biológica de oxígeno), DQO (demanda química de oxígeno) y COT (carbono orgánico total) a medida que el tiempo y el espacio recorrido por el agua sea mayor. En estos procesos de oxidacióndegradación se produce CO2 que, al incorporarse al agua, le confiere mayor agresividad que puede incrementar la dureza y la alcalinidad del agua. Se han cuantificado reducciones de la DBO5 del 90 %, e incluso del 100%, de la DQO entre el 85 y el 92 % y del COT del 84 %; ésta menor reducción del COT indica que no todos los compuestos orgánicos son biodegradables. Los detergentes biodegradables se eliminan en el terreno en presencia del suficiente oxígeno, sobre todo si existe actividad biológica en el fondo de la balsa. Organismos patógenos En experiencias de riego con vinazas y aguas residuales en Daimiel se estudió el comportamiento de los coliformes totales, que pasan de 1.600.000 col/100 ml a 300.000 col/100 ml a 1,8 metros de profundidad cuando se trata de vinazas y de 500.000 col/100 ml a 5.000 col/100 ml a 2,4 metros, cuando se riega con vinazas mezcladas con efluentes urbanos. En un ensayo de infiltración forzada de aguas residuales urbanas en el acuífero aluvial de la Vega de Granada y controlaron la llegada al acuífero de coliformes fecales y totales, enterococos, bacterias aerobias, clostridios sulfito-reductores y salmonelas mediante control en un pozo situado a 23 metros de la balsa de recarga y en el sentido del flujo subterráneo. En este pozo, la elevación piezométrica se empezó a manifestar a las 40 horas de iniciada la experiencia y alcanzó el máximo a las 68 horas con una elevación de 108 cm. Los microorganismos alcanzaron la captación con diferentes tiempos de retardo; así, los coliformes totales y coliformes fecales se comenzaron a detactar al cabo de 9 horas, los enterocos a las 21 horas, las bacterias aerobias a las 33 horas (coincidendo con los nitritos), las salmonellas a las 140 horas, mientras que los clostridios sulfitoreductores no llegaron a aislarse durante el periodo de control (550 horas). El mayor grado de persistencia se encontró para las bacterias aerobias. Los factores más importantes que afectan a la supervivencia de las bacterias entéricas son, entre otros: Factor Efectos Humedad del suelo A mayor humedad, mayor supervivencia Temperatura A mayor temperatura, menor supervivencia pH Valores inferiores a 6 o superiores a 8 afectan desfavorablemente a la mayoría de las bacterias Insolación La luz solar es letal sobre las bacterias (desecación y rayos ultravioleta) Materia orgánica Los nutrientes orgánicos son la fuente de carbono de las bacterias heterótrofas Organismos antagónicos Protozoos, bacterias parasitarias, hongos y actinomicetos producen enzimas líticos y antibióticos Los factores que determinan la eliminación de los virus en el suelo son: Factor Observaciones pH Un pH bajo favorece la adsorción de los virus ; sin embargo, un pH elevado favorece la inactivación de los virus Cationes Los cationes neutralizan o reducen el potencial electrostático de repulsión de las partículas virales (cargas negativas) y los componentes del suelo, favoreciendo así la adsorción Arcillas Incrementa la adsorción de los virus Contenido de materia orgánica Incrementa la adsorción de los virus Capacidad de intercambio de cationes Una CIC elevada promueve la adsorción de los virus Cargas hidráulicas Una carga hidráulica baja, <0.6 m/día, favorece la eliminación de los virus Materia en suspensión La materia orgánica soluble compite con los virus por los puntos de adsorción de las partículas coloidales del suelo y dificulta la inactivación de los virus en el agua residual Agua de lluvia Promueve la liberación de los virus previamente adsorbidos En una experiencia de recarga por medio de balsas y con aguas residuales urbanas se consiguió una reducción de virus y bacterias patógenos casi del 100 % a 70 metros del área de recarga. En otra experiencia parecida realizada en Israel se obtuvo una disminución de los coliformes de un 100 %. Características organolépticas En medio aerobio se suele conseguir una mejora de las características organolépticas del agua, mientras que en anaerobio esta mejora es menor e incluso puede empeorar la calidad del agua. La intermitencia en la recarga suele perjudicar estas características ya que provoca la removilización de los compuestos; así, por ejemplo, en pozos de uso dual el agua extraída al inicio del bombeo debe ser desechada. A veces es necesario un postratamiento del agua con el que se trata de corregir algunas características en función del uso al que va a ser destinada este agua. Generalmente este postratamiento está ideado para conseguir su potabilidad. Normalmente se realiza cloración u ozonización para garantizar la total eliminación de virus y bacterias y un ajuste del pH, si el agua reextraida es agresiva.