CAPITULO 1 Antecedentes y marco teórico: 1.1. Diferentes etapas en la concepción del movimiento Es difícil pensar un mundo sin comunicación. Sobre todo si pensamos en el mundo de hoy, caracterizado justamente por la gran producción comunicativa que lo marca como una era especial y diferenciada. El deporte también se ha visto influenciado por este entorno, ya que ha comenzado a analizar los factores comunicativos como una variable de importante influencia en el logro de resultados eficientes. Pero antes de observar los factores comunicativos es necesario abordar desde una perspectiva histórica el concepto de movimiento humano como acción primordial en la estructura del juego deportivo. Históricamente el análisis del movimiento humano primero, y de las actividades físicas y deportivas después, se ha realizado comparando al hombre con una máquina capaz de moverse. Al respecto José Hernández Moreno (1989) siguiendo los tratados de praxiología de Pierre Parlebas, señala diferentes etapas: 1. Máquinas de primer género : o máquinas simples, Esta visión del movimiento humano está basado en un concepto mecanicista donde la descomposición de movimiento, la utilización de cargas, la localización de movilizaciones segmentarias, la complejidad progresiva, etc., son principios de una máquina simple o de la metodología para la 18 Análisis Praxiológico del Rugby enseñanza deportiva. En este aspecto, las prácticas deportivas están vistas desde una concepción biomecánica del movimiento. La gran mayoría de los tratados deportivos están comprendidos bajo esta perspectiva. 2. Máquinas de segundo género: El movimiento aquí es visto desde la producción de energía. Su origen puede situarse en la Revolución Industrial (Siglo XVIII) donde el concepto de energía comienza a desarrollarse (máquina a vapor - motor a explosión - electricidad - energía nuclear). Bajo este concepto energético comenzaron a hacerse los primeros estudios en el deporte y en la actividad física en 1914 (Dewey, G.) y 1925 (Berger, G.) donde el factor desencadenante y primordial deja de ser biomecánico para transformarse en bioenergético. Sobre todo en la última mitad del Siglo XX el deporte logró avances importantes en términos de rendimiento, merced a los estudios realizados en pos de determinar y cuantificar la producción y gasto energético referido a actividades deportivas. Se otorga valor a los conceptos médicos – fisiológicos referidos a los procesos producción energética, recuperación, hidratación, alimentación y todo lo que tenga que ver con los mecanismos celulares del cuerpo. 3. Máquinas de tercer género: Máquinas informáticas. La era de la informática es hoy y nació después de la II Guerra Mundial. Máquinas que tuvieron la capacidad de tratar con signos, se autorregulan a partir de sus propias acciones y que hace pensar en vez de transmisión de energía, en transmisión de información, que es el paradigma de nuestro tiempo. En los deportes con altos niveles de intercambio de signos o información, la importancia de los mensajes corporales a través del movimiento no ha escapado al interés de estudiosos del deporte. Sin embargo, son pocos Marco Teórico 19 los estudios bajo esta perspectiva que pareciera revestir gran importancia en los deporte de alta semiotricidad2. Actualmente la perspectiva de análisis del movimiento humano y en especial del movimiento en el deporte, exigen respuestas que trasvasan el encuadre biomecánico energético, que restringen su visión a un registro cuantitativo y que resulta insuficiente para hacer una aproximación en términos de análisis con una lógica cualitativa. El análisis del deporte desde otro punto de vista, estudiado por Cagigal (1979) en España, con una orientación antropofilosófica y los estudios de Parlebas (1989) con orientación praxiológica (estudio de las actividades físicas) dan lugar a la utilización de conceptos como acción motriz y conducta motora que incluye aspectos simbólicos y de significación del movimiento deportivo,. Es de destacar que la identificación entre energía y movimiento o energía y deporte en este caso es innegable y requiere un estudio diferenciado y profundo. De hecho, la actividad deportiva ha conseguido logros en términos de rendimiento, gracias al estudio y entendimiento de movimiento como modelo mecánico - energético. El planteo está lejos de negar esta sociedad (Energía-deportes), sin embargo, quiere ahondar en alguna medida, en el análisis de una lógica cualitativa, donde las aproximaciones al estudio del deporte no se quede con el universo de la producción y utilización de fuerzas, sino que llegue como dice Fernández Moreno, "al mundo de sentidos y significaciones", que son en definitiva las instancias que lanzan la intervención corporal en el deporte (“nada existe en la mente que antes no haya estado en los sentidos”)3. Y que nos darán la oportunidad de fundamentar el deporte, su enseñanza y hasta su entrenamiento, no en tareas o en gestos fragmentados, sino en estructuras o principios organizadores del movimiento. 2 Término usado por Parlebás para definir el campo y la naturaleza de las situaciones motrices, que ponen en juego un sistema de signos asociados a las conductas motrices de los participantes. 3 José Maria Cagigal. Pág. 62. 20 Análisis Praxiológico del Rugby Más allá de estos modos esquematizados de interpretar al movimiento humano es necesario aclarar que si queremos proceder al estudio de las situaciones y acciones motrices en los deportes, debemos considerar al cuerpo y su movimiento como un organismo biológico donde la significación de sus referencias sociomotrices desbordan y hacen insuficiente un análisis bajo las perspectivas antes nombradas y que son, en definitiva, un aspecto de su funcionamiento. 1.2. Semiotricidad o perspectiva semiótica Este nuevo enfoque que no reduce la acción motriz a un esquema mecanicista lógico es lo que Parlebas (1981) denominó como Semiotricidad o Perspectiva Semiótica. Por lo señalado anteriormente, es difícil decir que el Hombre se mueve de acuerdo a los postulados de una máquina. La configuración de las funciones motrices y los caracteres motrices en un juego deportivo pone en evidencia que no es suficiente hablar de eficiencia mecánica y energética, y aún más, no es posible reducir el análisis en términos de transmisión de información, sino que se debe atender también, y es objeto de este estudio, a las características que tiene un jugador durante un partido o juego. El jugador durante un juego es informado y también es informante, es comunicante y meta comunicante, es decir trasciende la dimensión de la información como elemento simple y entra al entramado espectro de la comunicación humana. Es preciso aclarar, que en el Rugby las condiciones de juego de oposición/cooperación están dadas de forma que el jugador se encuentra en un contexto complejo a la hora de las decisiones . Marco Teórico 21 El jugador está rodeado de estímulos que recibe, retiene, los interpreta y organiza con un sentido propio y en ese contexto debe responder. La información, la desinformación y el engaño se apropian del contexto, lo que sin duda cambia el registro de entendimiento, la comprensión y la interpretación. Estos cambios de registros que pueden darse en un gesto imperceptible, presentan sin duda un fenómeno muy complicado que a decir de Hernández Moreno, la noción de información es totalmente incapaz de traducir y ni siquiera de captar. En los niveles rugbísticos que se analizan en este trabajo, los jugadores son capaces de producir meta reglas , pueden crear un meta juego, es decir un juego propio dentro del partido, generando alternativas a la lógica de sus conductas. Los jugadores son capaces de cambiar el código, expresarse entre sí de una manera que trastorne y desordene la lógica habitual, poniendo en marcha los fenómenos de codificación espontánea en donde la fantasía puede ser ingrediente clave. Estamos hablando aquí de las sociedades dentro del campo de juego, de esos jugadores que tienen un precódigo, pero que son capaces de estructurar otros nuevos en búsqueda de soluciones. Estas sociedades que tienen responsabilidades tácticas dentro del juego, que comparten una misión preestablecida, son tanto más capaces cuando sus cualidades comunicativas entran en aquella dimensión de entendimiento pregestual, preverbal. El acoplamiento de las acciones de los socios que se entienden más allá de lo pactado, genera una infinidad de posibles soluciones a los problemas, y otra gran variedad de problemas para los oponente. Puede decirse que los grandes socios dentro de un partido de rugby, tradicionalmente, son el medio scrum y el apertura. Con el entendimiento de estas teorías, se fueron estructurando más sociedades entre jugadores, por ejemplo, el lanzador del line y el saltador y éste con los jugadores de apoyo, para los terceras líneas es imprescindible una buena comunicación para la defensa, al igual que los centros, o los tres de atrás, los pilares con su 22 Análisis Praxiológico del Rugby hoocker en el scrum y en esta misma formación el ocho con el nueve, en el movimiento general del juego, las sociedades se presentan en los apoyos cercanos. Así se podría continuar describiendo sociedades dentro de un juego hasta acabar las posibilidades numéricas. Como dice Parlebas (1989) estamos aquí en un punto lejos del análisis de información (pre-semiótica), para entrar al campo de la semiótica de las conductas lúdicas (semiotricidad). 1.3. Educación Física y Praxiología Los conceptos expuestos anteriormente estructuran en conjunto lo que la comunidad científica identifica hoy como “praxiología motriz”. Esta incipiente disciplina científica impulsada por los tratados de Pierre Parlebas ha tomado vigor en los últimos tiempos en el contexto de estudio de la educación física y el deporte, generando postulados epistemológicos que justifica el cambio de paradigma dentro de la educación física enfocada como ciencia. La praxiología motriz surge como consecuencia del análisis de situación de la educación física y su pretendido carácter de ciencia. Este análisis concluye en que la educación física está en crisis y que ésta se debe fundamentalmente a dos problemas identificados por el autor como: 1- La división y 2- La sumisión . 1- La división está referida a la gran fragmentación de técnicas, conocimientos y de la formación, en que la educación física se encuentra actualmente. Esto genera una gran cantidad de concepciones que se tienen acerca de la educación física que se presentan en forma desordenada y yuxtapuesta. Marco Teórico 23 2- La sumisión de sus contenidos: al no haber alcanzado su madurez científica, la educación física queda sumida a los principios de las ciencias biológicas y de las ciencias humanas, perdiendo de esta forma identidad propia y quedando bajo la tutoría epistemológica de otras disciplinas externas. A partir de esta postura crítica, Parlebas propone que la educación física debe tener un cambio de objeto de estudio. Justifica el autor: Creemos que la educación física encierra un objeto original que le permite afianzar su identidad: su objeto no es otro que la conducta motriz. Querámoslo o no, la noción de movimiento reduce la acción física a las características de desplazamiento de la máquina biológica e hipervaloriza de modo abusivo la descripción técnica. Por el contrario, el concepto de conducta motriz coloca en el centro de la escena al individuo en acción y a las modalidades motrices de expresión de su personalidad. Con estas afirmaciones el autor propone que la conducta motriz permite el estudio objetivo y subjetivo de la actividad física, pretendiendo diferenciar de otras ciencias el objeto de la educación física. A partir de esta propuesta, se discriminan las categorías de conductas motrices, sus características y los correspondientes procesos de aprendizajes, lo cual le confiere a la educación física un orden a la diversidad planteada inicialmente. Este nuevo orden lo infiere el poder aglutinador y unificador del nuevo objeto propuesto como común denominador de las actividades físicas. Por el hecho de constituir una teoría de reciente aparición, provocó, sin dudas, adeptos y detractores, o al menos críticos de la misma. El corpus de conocimiento de esta nueva disciplina está en crecimiento. Las producciones científicas y sus comunicaciones son 24 Análisis Praxiológico del Rugby producto de interés en la comunidad de profesionales de la educación física y el deporte. Muchas universidades e institutos de formación de profesionales en el área de la actividad física de países como Francia, España, Brasil y Cuba han incorporado a su curricula, asignaturas, talleres, temas referidos a la praxiología motriz; o bien han creado institutos, laboratorios o grupos de estudio o investigación para hacer aportes a esta nueva disciplina. Los intentos de aplicación de los postulados que sustentan la praxiología motriz a los diferentes aspectos y variedad de actividades de la educación física y el deporte no se hicieron esperar. Se consultaron infinidad de trabajos relacionados a, por ejemplo, la iniciación deportiva, análisis de deportes individuales y de equipo, aplicaciones didácticas a los niveles de educación física escolar, estudios relacionados a los juegos tradicionales regionales, etc. Hay además una preocupación por definir permanentemente un paradigma praxiológico que reafirme el objeto , las clasificaciones, el campo y la ideología de la disciplina. Este marco conceptual nos proporciona el andamiaje necesario para estructurar la investigación en curso. La posibilidad de soportar cuestionamientos que surgen de la pesquisa, en teorías solventes sostenidas por Pierre Parlebas primero y los posteriores estudios de numerosos autores que continuaron la tarea de afianzar el campo de estudio de la Praxiología, es un paso imprescindible para la validación metodológica de esta tesis.