GRECIA O LA TRAICIÓN DE LOS HOMBRES [email protected] 1 2 ESQUILO HOMERO HESIODO AQUILES ULISES AGAMENÓN EDIPO ZEUS APOLO DIONISOS PALAS ATENEA ORFEO HERMES EL HADES EL OLIMPO EL RÍO LETEO EL PARTENÓN Y FIDIAS ANAXIMANDRO PITÁGORAS HERÁCLITO PARMÉNIDES SÓCRATES PLATÓN ARISTÓTELES LA PITONISA DE DELFOS 3 4 PROLOGO YOGANANDA EXPLICA EL MUNDO DE LOS HOMBRES Y DE LOS DIOSES GRIEGOS LOS HOMBRES Grecia fue el lugar desde donde partirían los conocimientos al resto del mundo, y había sido elegida por su situación geográfica, por la calidad humana y por el nivel cultural que había alcanzado. Todo estaba preparado para que pudiera convertirse en centro de comunicaciones y desde ahí irradiar el conocimiento a los otros pueblos. Si mencionamos su calidad humana es porque Grecia tuvo tres generaciones de mentes brillantes, que tuvieron una gran percepción a nivel ético, social y religioso, como también una enorme sensibilidad estética. Pero como suele suceder en la historia, las comunicaciones fueron interferidas, el conocimiento oscurecido, la percepción debilitada y la religión contaminada; esto no hubiera sido tan grave de haber existido en aquellos hombres una fe más fuerte, convicciones más claras y un horizonte de sentido más estable. Estos griegos tomaron contacto con lo divino pero no pudieron ingresar en su interior. Los perdió la soberbia de saberse dotados de una inteligencia innata, y que todo lo que dijeran cundiría inmediatamente a los extremos más alejados del planeta. Sabían que todo lo que imaginaran se concretaría inmediatamente, y que eran capaces de establecer modos de pensamiento, leyes éticas y pautas sociales... y que todo esto les resultase inmensamente sencillo. Creyeron que eran una raza superior, y entonces lo mismo que los llevó a la cima los arrastró hasta el fondo ¿Cuál fue la causa de su caída? Creerse autores en vez de simples transmisores del conocimiento. Se adueñaron de lo que se les había dado, pero para que fuesen nada más que transmisores del Plan Divino. Todo se tergiversó, no reconocieron otro creador que a sí mismos, y se envanecieron al extremo de matar a sus propios dioses. 5 LOS DIOSES El Sol fue el dios principal de todas las razas, los hombres lo veneraron por su luminosidad generadora de vida, intuyendo la necesidad de su presencia para toda existencia en el planeta. El Mar fue también una representación importante como proveedor de alimentos y vía de comunicación entre los pueblos. Los demás dioses fueron extensiones de estas dos divinidades principales, así se vio al Rayo como una extensión del Sol, o a la Noche como su ausencia. Al Mar se lo simbolizó como embravecido, calmo, espumoso. A partir de estas creencias los seres luminosos que descendían para ayudar a los hombres adoptaban estas imágenes para de esa manera facilitar la comunicación a través de sueños y visiones, posibilitadas por la sensibilidad perceptiva en ese plano del pueblo griego de entonces. Así los hombres consideraron a los dioses como un nivel más de la realidad. De este modo en el origen, cuando los dioses comenzaron a manifestarse, se representaron con esas imágenes de la Naturaleza y a través de sus apariciones fueron configurando la cultura griega. Estos dioses hicieron su trabajo hasta donde pudieron, enfrentándose a dos limitaciones. La primera fue su propia característica, no eran seres que tuvieran demasiada energía, más bien eran mensajeros, y el poder que los hombres les atribuyeron no fue más que una proyección de sus propios deseos en seres que fascinaban por su mágica posibilidad de aparecer y desaparecer en las visiones humanas. El otro límite, que quedaron seducidos por los juegos de poder humanos, y quienes debían ser mensajeros de lo divino terminaron imitando aquello que su misión era transformar, y esa fue su caída. En el momento de decadencia de los dioses, coincidente con el apogeo de los hombres, los mensajeros divinos ya estaban vaciados en las vivencias humanas, y aunque eran usados como legitimación de poderes mundanos, conceptualmente no significaban mucho más que figuras literarias. En ese momento, la tarea se encomienda a los hombres más brillantes, aquellos que poseían alguna intuición de sabiduría, quedando en ellos la misión de transmitirla. A esta altura ya no hay dioses, estos ya habían abandonado su tarea. 6 ESQUILO (525-456 a.C.) Dramaturgo griego nacido en Eleusis, cerca de Atenas, fue el primero de los grandes trágicos de esta ciudad. En cuanto predecesor de Sófocles y de Eurípides, es el fundador de la tragedia griega. Combatió contra los persas en Maratón, el 490 a.C., en Salamina, el 480 a.C., y posiblemente, en Platea, el año siguiente. Hizo al menos dos viajes, puede que tres, a Sicilia, y allí murió, en Gela, durante su última visita. Posteriormente se erigiría en este lugar un monumento en memoria suya. Se ha dicho que Esquilo escribió unas noventa obras. Sus tragedias, representadas por primera vez el 500 a.C., se ofrecían como trilogías, o grupos de tres, unidas habitualmente por un asunto común, y cada trilogía venía seguida por un drama satírico (una comedia vulgar en la que intervenía un héroe mitológico, con un coro de sátiros). Se conocen los títulos de 79 de sus obras teatrales, pero sólo han sobrevivido siete. La más antigua Las suplicantes, un drama con poca acción pero con muchas canciones corales de gran belleza; se cree que es la primera obra de una trilogía sobre el matrimonio de las cincuenta hijas de Dánao, que incluía las obras Los egipcios y Las danaides. Los persas, presentada el 472 a.C., es una tragedia histórica sobre la batalla de Salamina, y la acción tiene lugar en Persia, en la corte de la madre del rey Jerjes I. Los siete contra Tebas, presentada el 467 a.C., se basa en una leyenda tebana: el conflicto entre los dos hijos de Edipo, Eteocles, y Polinices, por el trono de Tebas. Se cree que es la tercera obra de una trilogía, y que las dos primeras son Layo y Edipo. Prometeo encadenado, una obra de fecha incierta, retrata el castigo del rebelde Prometeo por parte de Zeus. Probablemente sea la primera obra de una trilogía prometeica, cuyas otras dos serían Prometeo desencadenado y Prometeo el que trae el anillo. Las tres obras restantes, Agamenón, Las coeforas y Las euménides, presentadas el 458 a.C., forman la trilogía conocida como La Orestiada, o historia de Orestes. En Agamenón, una de las más grandes obras de la literatura dramática, el rey Agamenón regresa al hogar desde Troya y es asesinado a traición por su infiel esposa Clitemnestra. En la segunda obra, Orestes, hijo de Agamenón, regresa a Argos y venga la muerte de su padre asesinando a su madre y a su amante Egisto. Este matricidio es castigado por las 7 vengadoras divinidades, las erinias. En Las euménides, las erinias persiguen a Orestes hasta que éste queda limpio de su sangre culpable y le declara inocente el antiguo tribunal del Aerópago gracias a la intercesión de Atenea, diosa de la sabiduría. Al introducir un segundo actor en la obra, Esquilo creó el diálogo dramático. También desarrolló la representación del drama, al introducir el vestuario y los decorados. Los argumentos de sus obras son profundos, referidos al mito, la religión y la pasión, y encuentran expresión en un lenguaje muy poético. La Orestiada, probablemente su obra más madura, proporciona una intensa visión de sus conceptos de justicia y piedad y de su creencia en una voluntad divina con ayuda de la cual la humanidad puede alcanzar la sabiduría a través del sufrimiento. Aparece con aspecto de un hombre anciano, luce una barba gris, viste una túnica de su época, y en su mano derecha lleva un aro de hierro del que cuelgan unas enormes llaves. Ante la convocación se encuentra desorientado, es como si se despertara de un sueño, mira sorprendido y no entiende lo que ve. YOGANANDA: ¿Qué es lo que te sorprende? ESQUILO: Veo el mundo y no entiendo la profundidad que ha alcanzado lo superficial, de que manera los temas importantes son tan sin importancia, y la gente corre como en la imagen del perro mordiéndose la cola. Lo que siento es un abismo en esta parte de la historia. [Mira hacia atrás y observa el abismo]. YUKTESWAR: Asómate a ese abismo, y trata de ver en qué consiste. ESQUILO: [Se asoma pero lo invade el terror, es que el él también hay un cierto abismo]. En ese abismo lo que veo es ignorancia, un agujero de nada, una pérdida de memoria. Pasar por ahí lo borra todo y no es posible descubrir que es un engaño, oscuridad, ignorancia, que en realidad no existe, y esa es la gran trampa la creencia de que existe y entonces se hace parte de la historia y ocurre el olvido. LAHIRI MAHASAYA: ¿Qué son esas llaves? ESQUILO: Es el recuerdo, la memoria. De alguna manera tenía que transmitir ese recuerdo, esas fueron mis obras. Sin embargo, para que pueda servir esta llave el hombre tiene que poder encontrar la cerradura, por si sola no basta. 8 YUKTESWAR: ¿Eres totalmente consciente del poder y significado de estas llaves? ESQUILO: Tengo una cierta percepción, pero no soy del todo consciente. No he alcanzado la iluminación. YUKTESWAR: ¿Qué pasó con los grandes Imperios? ¿Con las civilizaciones orgullosas de sí mismas? ¿Con el patriotismo que las movía? ESQUILO: Fueron la evolución perfecta del gran engaño, en ese momento era cuando este comenzaba a manifestarse. Era un patriotismo oscuro que cada vez más fue llegando al sinsentido, hasta que el plan de los demonios logró, en la época actual, su realización que puede visualizarse en la imagen del perro mordiéndose la cola. [Ahora mira a los maestros y puede intuir que vienen de Dios]. MAESTROS: ¿Qué significaron los dioses griegos? ESQUILO: Más bien podemos hablar de semidioses que se apartaron del Padre. Los venció la soberbia y cuando pensaron su autosuficiencia cortaron los lazos con la Divinidad Suprema. Sucumbieron a la ambición de poseer, y entonces el demonio se apoderó de ellos, y empezó su decadencia. MAESTROS: ¿Los hombres de tu época tuvieron conciencia de esto? ESQUILO: Hubo algún vislumbre, pero la oscuridad del demonio cubrió a los dioses y la percepción del hombre se nubló. Muy pocos tuvieron el registro de lo que ocurría, eran aquellos que en algún momento habían vivido a sus dioses divinos. Sin embargo, para quienes percibieron la caída, les era muy difícil transmitirla porque era muy fuerte el temor a los dioses. MAESTROS: ¿Tu quisiste transmitirla? ESQUILO: Sí, pero no sin temor. Además de la dificultad que presentaba esa transmisión, también una parte mía estaba en el abismo. [Muestra que guarda el conocimiento en un cofre que cierra con sus llaves para después entregarlo. En el mismo quedó encerrada la revelación. De ahí en más sus obras fueron un modo de transmisión velada]. [Esquilo aparece con un aspecto más joven que en la imagen anterior, en una caverna de piedra muy oscura. Camina agachado como entregado a esa oscuridad, pero simultáneamente una fuerza lo va llevando y lo provee de una antorcha con la 9 que ilumina toda la caverna. Esa luz no era propia, simplemente transmitió los mensajes]. MAESTROS: ¿Cuándo los hombres pudieron ver a los dioses divinos? ESQUILO: Eso fue antes que los dioses quisieran dominarlo todo, cuando dejaron de verse en su Unidad, como un todo en sus distintas manifestaciones. Entonces se acercaron en sus apetencias, a lo que eran los hombres, se humanizaron y cortaron el cordón con lo divino. MAESTROS: ¿La caída de la humanidad se debe, en parte, a esta “humanización” de los dioses? ESQUILO: Sí, definitivamente. [Se lo ve irse caminando, atravesando un desierto, y parece que está reflexionando]. HOMERO (850 a.C.) Nombre tradicionalmente asignado al famoso autor de la Iliada y la Odisea, las dos grandes epopeyas de la antigüedad griega. Nada se sabe de su persona, y de hecho algunos ponen en duda que sean de él estas dos obras. Sin embargo, los datos lingüísticos e históricos de que se dispone, permiten suponer que los poemas fueron escritos en los asentamientos griegos de la costa oeste de Asia Menor, hacia el siglo IX a.C. Las dos epopeyas narran hechos legendarios que supuestamente ocurrieron muchos siglos antes de la época en que fueron escritas. La Iliada se sitúa en el último año de la guerra de Troya, que constituye el telón de fondo de su trama. Narra la historia de la cólera del héroe griego Aquiles. Insultado por su comandante en jefe, Agamenón, el joven guerrero Aquiles se retira de la batalla, abandonando a su suerte a sus compatriotas griegos, que sufren terribles derrotas a manos de los troyanos. Aquiles rechaza todos los intentos de reconciliación por parte de los griegos, aunque finalmente cede en cierto modo al permitir a su compañero Patroclo ponerse a la cabeza de sus tropas. Patroclo muere en el combate, y Aquiles, presa de furia y rencor, dirige su odio hacia los troyanos, a cuyo 10 líder, Héctor (hijo del rey Príamo), derrota en combate singular. El poema concluye cuando Aquiles entrega el cadáver de Héctor a Príamo, para que éste lo entierre, reconociendo así cierta afinidad con el rey troyano, puesto que ambos deben enfrentarse a la tragedia de la muerte y el luto. La Odisea narra el regreso del héroe griego Odiseo (Ulises en la tradición latina) de la guerra de Troya. En las escenas iniciales se relata el desorden en que ha quedado sumida la casa de Odiseo tras su larga ausencia. Un grupo de pretendientes de su esposa Penélope está acabando con sus propiedades. A continuación, la historia se centra en el propio héroe. El relato abarca sus diez años de viajes, en el curso de los cuales se enfrenta a diversos peligros, como el cíclope devorador de hombres, Polifemo, y a amenazas tan sutiles como la que representa la diosa Calipso, que le promete la inmortalidad si renuncia a volver a casa. La segunda mitad del poema comienza con la llegada de Odiseo a su isla natal, Ítaca. Aquí, haciendo gala de una sangre fría y una paciencia infinitas, pone a prueba la lealtad de sus sirvientes, trama y lleva a efecto una sangrienta venganza contra los pretendientes de Penélope, y se reúne de nuevo con su hijo, su esposa y su anciano padre. Estas dos epopeyas están escritas en un verso formal y elevado, en un lenguaje jamás empleado en la lengua normal. Es imposible establecer una distinción entre estas dos obras en el aspecto estilístico. Sin embargo, resulta fácil comprender por qué, desde la antigüedad, muchos lectores las han atribuido a dos autores diferentes. La Iliada habla de las pasiones y plantea dilemas imposibles de resolver. No hay en ella auténticos villanos; Aquiles, Agamenón, Príamo y los demás personajes son víctimas de un universo trágico y cruel. En la Odisea, por el contrario, el mal es derrotado, triunfa la justicia y la familia, tristemente separada, se reúne de nuevo. El astucia racional, particularmente la de Odiseo, actúa como fuerza motriz a través de todo el relato. Junto a la Iliada y la Odisea figuran los llamados himnos homéricos, una serie de poemas relativamente breves, que celebran las hazañas de diversos dioses, compuestos en un estilo épico similar, y también atribuidos a Homero. Homero es, de manera directa, el padre de toda la literatura griega posterior: el teatro, la historiografía e incluso la filosofía, llevan la huella de los temas, cómicos y trágicos, planteados en estas epopeyas, así como de las técnicas homéricas. Lo cierto es 11 que desde los tiempos de Homero, ningún autor ha logrado reunir su genio épico y su erudición. Aparece con el rostro cubierto por un yelmo. YOGANANDA: ¿Por qué te cubres? HOMERO: ¿Tú quién eres para indagar lo que yo hago? YOGANANDA: Alguien que quiere ayudarte; porque tu pediste esta ayuda. HOMERO: No necesito ayuda. Déjame en paz, estoy con la inspiración. YOGANANDA: Ya ves que no estás en paz, y que ese yelmo es la inspiración que deforma y oculta tu Ser Real. HOMERO: Yo soy lo real, y no hay yelmo que enmascare sino sólo inspiración. [Continúa con el yelmo]. YOGANANDA: Si ese yelmo - máscara no es tal, como tu dices, sino que es tu inspiración, tu Ser Real, ¿cómo algo externo a ti mismo puede suplantarte en tu realidad? Te ordeno que te quites la máscara. HOMERO: [Al hacerlo aparece un rostro atormentado]. YOGANANDA: [Le muestra esa imagen, Homero asustado rechaza la visión]. Esta es tu imagen real, pero la escondes detrás de eso que llamas inspiración y no es más que el ocultamiento de tu real estado. Abandónala y entrégate a él. [Yogananda explica que la máscara le da la fuerza del guerrero, utilizándola para desarrollar aquello que no tiene. Es el símbolo del guerrero mítico que se enfrenta a los dioses. Homero es un ser que carece de esa fuerza, y en su proyección se apodera de ella para subsistir en la historia. Su error fue que no tenía necesidad de la misma, es como aquel que teniendo dos buenas piernas sobre las cuales sostenerse, usa un bastón que no necesita]. HOMERO: [Estuvo atento al relato de Yogananda y emotivamente participa del mismo]. Nunca pensé que necesitaría de algo para ser alguien. Siempre creí que la fuerza que inspira es a través de esa máscara a la cual llamo inspiración. YOGANANDA: [Le aclara]. La inspiración es tu propia mente y las fantasías inspiradas por fuentes ajenas a ti, y estas pueden ser de carácter oscuro o luminoso. 12 HOMERO:[Reflexiona, y mientras lo hace, la máscara se va fundiendo hasta quedar reducida a una moneda]. YOGANANDA: Ves... las cosas en este plano tienen las características de la dualidad, lo mismo que esta moneda. Siempre que observes una de sus caras, no olvides que está la otra presente. Así en tu creación podrás comprobar que todo lo que refleja tendrá su contrapartida, lo luminoso su sombra y la luz su oscuridad. HOMERO: Y bien, ¿qué haré entonces con todo lo que he hecho? YOGANANDA: Déjalo... eso es parte de la historia, y esta ya ha sido escrita, y sus consecuencias continúan rodando. Debes abandonarlas porque ese mundo ya fue. Ahora tienes que empezar de nuevo y no permitir que lo pasado influya en el presente. HOMERO: [Toma una moneda y se la entrega a Yogananda]. No me hace falta, he comprendido tu enseñanza. [Se da vuelta y se dirige a una fuente de luz que lo absorbe hasta desaparecer]. YOGANANDA: [Mostrando la moneda] ¡Qué pocos pueden comprender la dualidad! [Mientras pronuncia estas palabras la moneda desaparece y el maestro se retira]. HESIODO (siglo VIII a.C.) Poeta griego que ocupa un lugar de excepción en la literatura griega, tanto por sus preceptos morales como por su estilo coloquial. Hesiodo nació en Ascra, Beocia (hoy Palaioppanagia). Tras la muerte de su padre se estableció en Naupaktos. Allí pasó su juventud, cuidando de un rebaño de ovejas y realizando las tareas propias de un campesino. Se sabe muy poco acerca de su vida, salvo lo que el propio autor deja entrever en su obra. Los especialistas modernos lo sitúan en el periodo homérico de la literatura griega. Su primera obra, Los trabajos y los días, es el primer ejemplo de poesía didáctica, destinada a instruir más que a entretener. Esta obra relata las experiencias de Hesiodo durante su época de campesino, y está salpicada de episodios alegóricos y fábulas. En un estilo sencillo y moralizante, Hesiodo subraya la 13 importancia del trabajo y la rectitud. Ofrece consejos prácticos sobre cómo vivir, al tiempo que proporciona recetas y normas agrícolas, e incluye un calendario religioso con los días favorables y desfavorables para ciertas tareas del campo. El tema principal de la obra es la decadencia moral. Hesiodo relata la historia del mundo en cinco etapas, desde la edad de oro hasta la edad del hierro, que él considera dominada por el mal. También se atribuye a Hesiodo la autoría de la Teogonía, o nacimiento de los dioses, un poema en el que el amplio y amorfo corpus de los mitos griegos queda sistematizado y ampliado hasta incluir nuevas divinidades desconocidas en los poemas homéricos. La Teogonía narra la creación del mundo a partir del caos, el nacimiento de los dioses y sus hazañas. La última parte contiene una lista de las hijas de Zeus, padre de los dioses, así como de mujeres mortales. Esta lista es la introducción a un poema perdido, Catálogo de las mujeres, que narra las hazañas de los héroes nacidos de mujeres mortales. De su obra restante no quedan más que títulos y fragmentos, muchos de los cuales se atribuyen por los expertos a imitadores de Hesiodo, y que hoy se conoce como la escuela hesiódica. En este grupo se incluyen el poema didáctico ‘Consejos de Quirón’; el poema genealógico ‘Grandes eras’; y los poemas míticos ‘Boda de Ceix’y ‘Descenso de Teseo a los infiernos’. Aparece queriendo conducir un carro alado. Su figura es muy terrena y se manifiesta en un plano de oscuridad. El carro es luminoso pero está vacío, no hay nadie en él. Finalmente Hesiodo desiste su empresa, deteniéndose, agotado. HESIODO: Maldito carro ... no puedo deshacerme de él. A través suyo tengo que soportar todo lo que de él proviene. Mi vida no es mía. YOGANANDA: ¿No fue tu ambición querer ser lo que no eras, y por tal ambición quedaste pegado a un mundo que no era el tuyo, y que será tu cadena a perpetuidad, a menos que empieces de nuevo? HESIODO: ¿Cómo empezar de nuevo con toda esta carga que me agobia? YOGANANDA: Es muy simple. Olvídate de su contenido, ingresa en tu interior y busca el Yo Real que eres. 14 HESIODO: Eso es imposible, porque cada vez que ingreso en mi mismo, aparece todo ese mundo infernal de dioses. YOGANANDA: Ahí está el punto. Donde tu ingresas no es en tu interior, sino en el mundo de demonios donde has quedado atrapado. Mientras no te des cuenta de su irrealidad, tu tormento será eterno. HESIODO: Ya que en mi es tan fuerte y tan real la dependencia con este mundo te pido ayuda. Pídeme lo que quieras, y haré todo el esfuerzo por lograrlo. YOGANANDA: Te pido que te curves formando un círculo, tomando tus pies con las manos. [Hesiodo así lo hace y entonces comienza a girar muy rápidamente. En este giro centrífugo, se va despojando de todos los contenidos mentales que lo atormentan. Al ir girando su energía se va concentrando en un punto que termina estallando. Hesiodo ahora se ve convertido en un anciano]. HESIODO: ¿Este es el precio de mi conversión? YOGANANDA: No, no hay ningún precio, simplemente estás en un estado en el cual se acaba tu experiencia de vida. Pero por tu promesa has podido, por la Gracia Divina, quemar muchas etapas y limpiar sus contenidos, por lo tanto en tu nuevo nacimiento tendrás mejor oportunidad. [Hesiodo cae muerto y Yogananda se retira]. AQUILES En la mitología griega, el mayor de los guerreros griegos en la guerra de Troya. Era hijo de la ninfa del mar, Tetis, y de Peleo, rey de los mirmidones de Tesalia. Cuando era un niño su madre lo sumergió en el Éstige para hacerlo inmortal. Las aguas lo hicieron invulnerable menos en el talón, por donde lo sostenía su madre. Aquiles libró muchas batallas durante el sitio de diez años a la ciudad de Troya. Cuando el rey miceno Agamenón tomó para sí a la doncella cautiva Briseida, Aquiles retiró a los mirmidones de la batalla y se encerró encolerizado en su tienda. Los troyanos, envalentonados por su ausencia, atacaron a los griegos y los forzaron a una retirada precipitada. Entonces Patroclo, amigo y compañero de Aquiles, le pidió que le prestara su armadura y le dejara avanzar con los mirmidones a la batalla. Aquiles aceptó. Cuando el príncipe troyano 15 Héctor mató a Patroclo, el desconsolado Aquiles volvió a la batalla, mató a Héctor y arrastró su cuerpo triunfante detrás de su carro. Más tarde permitió a Príamo, rey de Troya, rescatar el cuerpo de Héctor. Aquiles peleó su última batalla con Memnón, rey de los etíopes. Después de matar al rey, Aquiles condujo a los griegos hacia los muros de Troya. Allí fue mortalmente herido en el talón por Paris. La disputa entre Aquiles y Agamenón, la batalla posterior y el rescate del cuerpo de Héctor son narrados en la Iliada. Se presenta con la imagen y la fuerza del guerrero. AQUILES: ¿Porqué me invocan? YOGANANDA: Queremos saber que has sentido en tu paso terrenal. AQUILES: Solo fui un mortal más, que obtuve de los dioses la posibilidad de estar en la guerra sin que puedan hacerme desaparecer. YUKTESWAR: ¿Por qué piensas que fueron los dioses quienes te dieron la inmortalidad? ¿Acaso tu alma no es por siempre inmortal? AQUILES: Solo recuerdo la historia de mi madre cuando me sumergió en las aguas de la purificación olvidando mi talón, y obteniendo con ello la inmortalidad. VIVEKANANDA: ¿Estás seguro que eso es la inmortalidad? AQUILES: El perpetuar la materia es trascender el tiempo y con ello el espacio, y cumplir el ciclo desde el origen al fin. Creo que esa es la inmortalidad. AUROBINDO: Te has olvidado de la conciencia. AQUILES: ¿Y eso qué es? AUROBINDO: El conectar tu plano interior con una parte del la Supraconciencia Divina. AQUILES: ¿Pero esa no es la morada de los dioses? CHIDANANDA: La morada de tus dioses se encuentra en un plano mitológico y mágico. La Morada Divina es donde se encuentra el Padre, Origen del Todo y de la Nada, más allá del tiempo y del espacio, de lo inmanente y de lo trascendente y punto de partida y de llegada del alma inmortal. AQUILES: ¿Quieres decir que la inmortalidad que yo poseía no servía de nada? KRISHNA: Te servía para perpetuarte en varias vidas, pero no para trascender tu estado, que debes transmutarlo a una energía sutil, totalmente conectado al Padre. 16 AQUILES: ¿Y cómo debería hacer eso? JESÚS: Despójate de tu armadura, parte por parte, y transita como un peregrino el camino del Amor. AQUILES: ¿Y qué hallaré en ese camino? BUDA: Dejarás de lado el sufrimiento y la compasión brotará en ti. AQUILES: ¿Aún estoy a tiempo? LA MADRE DIVINA y EL PADRE: Hasta tu último suspiro invócanos y la gracia será depositada en ti. ULISES En la mitología griega, héroe griego, gobernador de la isla de Ítaca y uno de los jefes del ejército griego durante la guerra de Troya. Homero, en la Odisea, narra las aventuras de Odiseo y su final regreso al hogar diez años después de la caída de Troya. Inicialmente, se le mencionaba como hijo de Laertes, rey de Ítaca, aunque en la tradición posterior se consideró a Sísifo, rey de Corinto, como su padre real. Su madre se habría casado posteriormente con Laertes. Al principio Odiseo se negó a acompañar a los griegos a Troya, y se fingió loco, sembrando sus campos con sal, pero sus compañeros pusieron a su hijo Telémaco a que arara los campos y, entonces, se vio obligado a admitir su engaño y se reunió con el ejército invasor. En la Iliada de Homero, aparece como un guerrero valiente, sagaz y astuto, y se le concede la famosa armadura del guerrero griego Aquiles cuando éste muere. Odiseo fue a buscar a Neoptólemo y Filoctetes para que participaran en la fase final del conflicto. En la Odisea se dice que él propuso la estratagema del Caballo de Troya, recurso mediante el cual se conquistó la ciudad. En las obras de los escritores clásicos posteriores, especialmente en las del poeta griego Píndaro, el dramaturgo griego Eurípides y el poeta romano Virgilio, Odiseo aparece caracterizado como un político cobarde e intrigante. Su nombre latino es Ulises. Se presenta con la imagen del viajero decepcionado. YOGANANDA: ¿Qué has sentido escribiendo tus relatos? 17 ULISES: Se trató de un viaje astral para tratar de salir de este plano. YUKTESWAR: ¿Estás seguro que has hecho un viaje astral o simplemente un viaje onírico? ULISES: En él puse todas mis fantasías y mis sueños. VIVEKANANDA: ¿Tus sueños de qué? ULISES: De ser el mayor conquistador. De enfrentarme a cualquier tipo de situación y poder atravesarla. AUROBINDO: Pero te has equivocado, tu viaje fue puramente mental. ULISES: ¿Y de qué otro viaje debería haberse tratado? RAMANA MAHARSHI: Simplemente de aquel que te llevaría a conocerte y saber quién eres tú. ULISES: ¿Y crees que no me he conocido? Llegué muy cambiado de regreso a Grecia. KRISHNA: Has girado en torno a ti mismo como si estuvieras en un círculo, y de la misma manera que el giro de un trompo, te iba llevando a una profundidad más oscura que no te permitía ver la luz. ULISES: Pero tuve desafíos concretos. Vencer la locura de las sirenas demostró que puedo soportar lo que sea. CHIDANANDA: De sentirte tan seguro, no hubieras necesitado atarte para demostrar que eras capaz de resistir la tentación de las sirenas. Si tu ser se encuentra conectado aunque se encuentre en las situaciones más inverosímiles, podrá transitarlas sin ser abatido. BUDA: ¿Tomaste contacto con el sufrimiento en tu viaje? ULISES: He visto las peores masacres y las más alta destrucción. Todo eso aportó vejez a los surcos de mi cara y en mi conciencia. EL PADRE: ¿Qué conclusión sacas de toda esta experiencia? ULISES: En realidad sentí un gran vacío cuando retorné a mi casa donde ni siquiera mi propio perro me reconocía, y en la que encontré todo transformado. LA MADRE DIVINA: Ven y refúgiate conmigo. [Ulises se sienta a sus pies y La Madre Divina le acaricia el pelo]. Hijo mío, has desperdiciado tu vida yendo tan lejos cuando tu transformación la habrías logrado sin moverte de aquí. Tu esfuerzo ha sido válido, porque al reconocer tus padecimientos y que no te han servido 18 absolutamente de nada, te permitirán a partir de este momento transitar el camino hacia la Morada del Padre. Encomiéndate a Él, y tu vida será purificada. AGAMENÓN En la mitología griega, rey de Micenas y jefe de las fuerzas griegas en la guerra de Troya. Era hijo de Atreo y padeció la maldición lanzada sobre su casa. Cuando los griegos se reunieron en Áulide para su viaje a Troya, se vieron obligados a retroceder por los vientos adversos. Para calmar los vientos, Agamenón sacrificó a su hija Ifigenia a la diosa Ártemis. Su disputa con Aquiles sobre la princesa cautiva Briseida y las consecuencias de esa cólera forman buena parte del argumento de la Iliada de Homero. Después de un sitio de diez años, cayó Troya y Agamenón volvió victorioso a Micenas. Con él fue la princesa troyana Casandra, que le había sido concedida por el ejército griego triunfante. Clitemnestra, mujer de Agamenón, lo recibió con expresiones de amor, pero mientras él estaba en el baño, ella le tendió una trampa. Egisto, el amante de ella, golpeó a Agamenón con una espada y, mientras estaba inconsciente por el golpe, Clitemnestra lo decapitó con un hacha. Su muerte fue vengada siete años más tarde por su hijo Orestes. La historia de la muerte de Agamenón es contada en la primera pieza de la trilogía Orestíada, del poeta griego antiguo Esquilo. Aparece Agamenón dentro de un gran caldero cocinándose en el fuego del arrepentimiento. YUKTESWAR: Ya es suficiente, has pagado durante siglos tu error. Sal del caldero y reflexiona sobre el mismo, pero ahora con la luz de la sabiduría y no con el fuego del arrepentimiento. [Agamenón sale del caldero, pero el haber permanecido tanto tiempo en él, le ha consumido las piernas, por lo cual debe ser asistido por dos ángeles que lo depositan cerca de Yukteswar. Este parte su bastón, y coloca cada una de las partes en que ha 19 quedado dividido, donde antes tenía Agamenón las piernas e inmediatamente éstas se reconstruyen]. YUKTESWAR: Como misión purificadora, ve por el mundo y transmite lo que has aprendido. EDIPO En la mitología griega, rey de Tebas, hijo de Layo y Yocasta, rey y reina de Tebas respectivamente. Un oráculo advirtió a Layo que sería asesinado por su propio hijo. Decidido a rehuir su destino, ató los pies de su hijo recién nacido y lo abandonó para que muriera en una montaña solitaria. Un pastor recogió al niño y se lo entregó a Pólibo, rey de Corinto, quien le dio el nombre de Edipo (pie hinchado) y lo adoptó como su propio hijo. El niño no sabía que era adoptado y, cuando un oráculo proclamó que mataría a su padre, abandonó Corinto. Durante su travesía, encontró y mató a Layo, creyendo que el rey y sus acompañantes eran una banda de ladrones y así, inesperadamente, se cumplió la profecía. Solo y sin hogar, Edipo llegó a Tebas, acosado por un monstruo espantoso, la Esfinge, que andaba por los caminos que iban a la ciudad, matando y devorando a todos los viajeros que no sabían responder al enigma que les planteaba. Cuando Edipo resolvió acertadamente el enigma, la Esfinge se suicidó. Creyendo que el rey Layo había muerto en manos de asaltantes desconocidos, y agradecidos al viajero por librarlos del monstruo, los tebanos lo recompensaron haciéndolo su rey y dándole a la reina Yocasta por esposa. Durante muchos años la pareja vivió feliz, sin saber que ellos eran en realidad madre e hijo. Entonces descendió una terrible peste sobre la tierra, y el oráculo proclamó que debía ser castigado el asesino de Layo. Pronto Edipo descubrió que involuntariamente había matado a su padre. Atribulada por su vida incestuosa, Yocasta se suicidó y, cuando Edipo se dio cuenta de que ella se había matado y que se condenaba a sus hijos, se quitó los ojos y abandonó el trono. Vivió en Tebas varios años pero acabó desterrado. Acompañado por su hija Antígona, vagó durante muchos años. Finalmente llegó a Colono, un santuario cerca 20 de Atenas consagrado a las poderosas deidades llamadas Euménides. En este santuario para suplicantes murió Edipo, después de recibir la promesa del dios Apolo de que el lugar de su muerte permanecería sagrado y otorgaría un gran beneficio a la ciudad de Atenas, que había dado refugio al vagabundo. Aparece como un mensajero alado. Su apariencia es esa porque está ciego y no puede transitar por el camino de los hombres, y como ser alado puede orientarse en otra dimensión. [Edipo se posa en las ramas de un árbol, a cuyo pie está sentado Yukteswar. El rey ciego llora y sus lágrimas van bañando los pies del maestro]. YUKTESWAR: [Se muestra conmovido]. Deja de llorar, no es solución a tus penas, baja y hablemos. [Edipo desciende del árbol y se sienta al lado de Yukteswar]. YUKTESWAR: [Colocándole las manos sobre sus ojos]. Te devuelvo la vista, ya ha sido suficiente la oscuridad a la que te condenaste. El mundo es ilusión y te condenaste por una ilusión. Deja de sufrir porque no es justa tu pena ni el castigo que te impusiste... nada más que por una ilusión. [Edipo se refriega los ojos y se da cuenta por primera vez de la verdad que le transmite Yukteswar. Entonces se arranca las alas y emprende el camino de la Verdad, ahora con clara conciencia del mismo]. EDIPO: [Se detiene y se da vuelta mirando al maestro]. Gracias por lo que has hecho por mi. [Edipo continúa su camino, Yukteswar se pone de pie y se retira]. ZEUS En la mitología griega, dios del cielo y soberano de los dioses olímpicos. Zeus corresponde al dios romano Júpiter. Según Homero, se consideraba a Zeus padre de los dioses y de los mortales. No fue el creador de los dioses y de los hombres; era su padre en el sentido de protector y soberano tanto de la familia olímpica como de la raza humana. Señor del cielo, dios de la lluvia y acumulador de nubes, que blandía el terrible rayo. Su arma principal era la égida, 21 su ave, el águila, su árbol, el roble. Zeus presidía a los dioses en el monte Olimpo, en Tesalia. Sus principales templos estaban en Dódona, en el Epiro, la tierra de los robles y del templo más antiguo, famoso por su oráculo, y en Olimpia, donde se celebraban los juegos olímpicos en su honor cada cuatro años. Los juegos de Nemea, al noroeste de Argos, también estaban dedicados a Zeus. Zeus era el hijo menor del titán Cronos y de la titánida Rea y hermano de las divinidades Poseidón, Hades, Hestia, Démeter y Hera. De acuerdo con uno de los mitos antiguos sobre el nacimiento de Zeus, Cronos, temiendo ser destronado por uno de sus hijos, los devoraba cuando nacían. Al nacer Zeus, Rea envolvió una piedra con pañales para engañar a Cronos y ocultó al dios niño en Creta, donde se alimentó con la leche de la cabra Amaltea y lo criaron unas ninfas. Cuando Zeus llegó a la madurez, obligó a Cronos a vomitar a los otros niños, que estaban deseosos de vengarse de su padre. Durante la guerra que sobrevino, los titanes lucharon del lado de Cronos, pero Zeus y los demás dioses lograron la victoria y los titanes fueron enviados a los abismos del Tártaro. A partir de ese momento, Zeus gobernó el cielo, y sus hermanos Poseidón y Hades recibieron el poder sobre el mar y el submundo, respectivamente. Los tres gobernaron en común la tierra. Se manifiesta un plano donde se produce una gran descarga de fuerzas, como si arreciara una tormenta, anunciada por un incesante bombardeo de relámpagos. Zeus se presenta con una imagen de mucha violencia, enmarcando su presencia, ahora sí, con la tormenta desencadenada. El dios está parado sobre la rueda del tiempo que la hace girar a voluntad, tanto hacia atrás adelante. Dioses menores van apareciendo a medida que la rueda va girando, y estos son depositarios de sus rayos que lo van depositando sobre la Tierra. YUKTESWAR: Para de una vez y deja de hacer tanto ruido. ZEUS: [Desciende de la rueda y se acerca al maestro]. ¿Por qué interrumpes mi trabajo? YUKTESWAR: Aunque así yo lo quisiera tu trabajo continuaría. Simplemente pido tu desdoblamiento en el tiempo, y te presentes para dialogar. ZEUS: ¿Cuál es el sentido de la convocación? ¿Porqué he sido convocado? 22 YUKTESWAR: Zeus, como dios eres imperfecto. En eso radica el porqué de tu convocación. ZEUS: No encuentro en mi actuar imperfección alguna. Tu que conoces y tienes autoridad señálamela. YUKTESWAR: Tu grado de evolución es alto comparado con el de los hombres, pero te has quedado detenido en esa etapa de tu evolución y he aquí donde está tu imperfección. Debes continuar tu evolución y dejar el plano de los dioses. ZEUS: ¿A qué puedo aspirar si soy lo máximo en el campo de los dioses? YUKTESWAR: Justamente, has llegado al punto máximo de tu desarrollo en ese campo. Debes abandonarlo y fundirte en Aquel que te creó, así podrás devolver la energía que te fue dada y purificarte en su fusión. ZEUS: De tanto mirar hacia abajo olvidé que el arriba existe. Pido disculpas por mi error, que también es parte de mi ignorancia, y sabido es que en cualquier tipo de evolución el error como la ignorancia siempre están presentes. [Se descarga una fuerte luz, Zeus se funde en ella hasta desaparecer]. YUKTESWAR: Un trabajo más concluido con efectividad. Zeus fue convocado porque necesitamos de todas las fuerzas que están dispersas para concentrarlas en ese punto de energía que las va acumulando para la función final. Debemos rescatar todas las fuerzas que estén dispersas y concentrarlas para esta función. APOLO En la mitología griega, hijo del dios Zeus y de Leto, hija de un titán. Era también llamado Délico, de Delos, la isla de su nacimiento, y Pitio, por haber matado a Pitón, la legendaria serpiente que guardaba un santuario en las montañas del Parnaso. En la leyenda homérica, Apolo era sobre todo el dios de la profecía. Su oráculo más importante estaba en Delfos, el sitio de su victoria sobre Pitón. Solía otorgar el don de la profecía a aquellos mortales a los que amaba, como a la princesa troyana Casandra. Apolo era un músico dotado, que deleitaba a los dioses tocando la lira. Era también un arquero diestro y un atleta veloz, acreditado por haber sido el primer vencedor en los 23 juegos olímpicos. Su hermana gemela, Ártemis, era la guardiana de las muchachas, mientras que Apolo protegía de modo especial a los muchachos. También era el dios de la agricultura y de la ganadería, de la luz y de la verdad, y enseñó a los humanos el arte de la medicina. Algunos relatos pintan a Apolo como despiadado y cruel. Según la Iliada de Homero, Apolo respondió a las oraciones del sacerdote Crises para obtener la liberación de su hija del general griego Agamenón arrojando flechas ardientes y cargadas de pestilencia en el ejército griego. También raptó y violó a la joven princesa ateniense Creusa, a quien abandonó junto con el hijo nacido de su unión. Tal vez a causa de su belleza física, Apolo era representado en la iconografía artística antigua con mayor frecuencia que cualquier otra deidad. La imagen es de un hombre físicamente perfecto. Está desnudo sobre un carro de guerra, no lleva yelmo de protección, ni arma alguna, sólo puede observarse un escudo que sostiene con su brazo derecho. El carro en que se desliza es muy sutil, es como una representación esquemática de la energía que lo impulsa. En el momento en que se detiene aparecen Yogananda y Yukteswar. A diferencia de Apolo, que se manifiesta enorme y luminoso pero inconsistente, los maestros aparecen a su lado diminutos pero con gran peso y consistencia. El dios desciende del carro y se cubre con el escudo en señal de respeto. Por un momento la escena queda congelada, hasta que vuelve el movimiento que muestra la imagen de Apolo reducirse hasta alcanzar el tamaño de los maestros... Esto que ha ocurrido requiere una explicación. La manifestación de los maestros es en el plano binario, único modo de poder tener contacto con los hombres, mientras que Apolo desciende del mundo de los dioses, por eso la imagen que presentó. Ahora los tres están en el mismo plano. YUKTESWAR: ¿Cuál es la situación y el estado del mundo de los dioses adonde perteneces? APOLO: El estado es de infernal aburrimiento. Hay un cerco en el cual ha quedado la historia encerrada, reduciéndose entonces la posibilidad de acción, creándose entonces una situación de repetición infinita. 24 [Se va materializando una gran tijera de podar, cuyos extremos son sostenidos por Yogananda y Yukteswar. Acompañados por Apolo, los maestros llevando la tijera, se dirigen al lugar donde están los dioses. El círculo donde están encerrados tiene la característica de un cerco de jardín, cuyas raíces y follaje han crecido enormemente ahogando el espacio donde se manifiestan los dioses]. YUKTESWAR: [Dirigiéndose a los dioses]. Hay posibilidad de romper este cerco y nosotros tenemos la herramienta adecuada para hacerlo. Pero para ello deben hacer una honesta promesa: “liberar para ser liberados, y liberarse de aquello a lo que fueron atados”. LOS DIOSES: [Al unísono] Prometemos sinceramente que así lo haremos. [Yogananda y Yukteswar acercan la tijera al cerco, pero no lo cortan sino que van podando tanto su follaje como sus raíces. A medida que el cerco se va debilitando los dioses van sintiendo la sensación de liberación. El cerco se va reduciendo a tal punto que no queda nada más que un aro muy delgado de pequeñas ramas con sus raíces. En ese punto los maestros se detienen]. YOGANANDA: Por el acto de vuestra promesa y en función a la calidad y profundidad de la misma, que este círculo se disuelva. [Como la promesa de los dioses carecía de profundidad y calidad necesarias el círculo no se disuelve]. YUKTESWAR: El compromiso y la responsabilidad es de ustedes, nosotros cumplimos hasta la última etapa. [Los dioses comprenden la necesidad de una decisión más firme e internamente realizan el compromiso solicitado. Entonces Yukteswar y Yogananda toman las tijeras y cortan lo que queda del círculo. Se produce una explosión de energía, que reorganiza toda la vibración que emana de ella. Terminada esta tarea, por la parte inferior van cayendo carbonizados los restos del círculo, y por la superior se van desprendiendo las almas de los hombres en cautiverio, convertidos en ángeles. Cuando esta experiencia culmina los maestros se retiran al mismo tiempo que el mundo de los dioses se va esfumando]. 25 DIONISOS En la mitología griega, dios del vino y la vegetación, el cual enseñó a los mortales cómo cultivar la vid y cómo hacer vino. Era bueno y amable con quienes lo honraban, pero llevaba la locura y la destrucción a quienes lo despreciaban a él o a los rituales orgiásticos de su culto. De acuerdo con la tradición, Dionisos moría cada invierno y renacía en la primavera. Para sus adeptos, este renacimiento cíclico, acompañado de la renovación estacional de los frutos de la tierra, encarnaba la promesa de la resurrección de los muertos. Los ritos anuales en honor de la resurrección de Dionisos evolucionaron gradualmente hacia la forma estructurada del drama griego, y se celebraron importantes festivales en honor del dios, durante los cuales se realizaban grandes competiciones dramáticas. El festival más importante, las Grandes Dionisíacas, tenía lugar en Atenas durante cinco días de cada primavera. Para esta celebración los grandes dramaturgos griegos Esquilo, Sófocles y Eurípides escribieron sus magníficas tragedias. Después del siglo V a.C., Dionisos fue conocido para los griegos como Baco. Presenta una imagen de un dios desgastado, su expresión lo muestra enajenado, totalmente poseso. Aparece el mandala de maestros irradiando su energía, lo que conmociona a Dionisos. YOGANANDA: ¿Qué estás haciendo? DIONISOS: No he hecho más que dar y dar intensamente, y ya casi no me quedan fuerzas. Me siento asfixiado. YOGANANDA: Quedaste atrapado. Este opresión que sientes es el peso de la oscuridad y del mundo mágico que te rodea. DIONISOS: ¿Qué debo hacer para soltar estas ataduras? YOGANANDA: Eres el único que puede tomar la decisión. Solamente suéltalas. Con el solo deseo de obtener la libertad podrás desencadenarte y avanzar conducido desde la luz. DIONISOS: Esto es muy fuerte. 26 YUKTESWAR: [Toca su frente en el entrecejo]. Lo que te falta es discernimiento. En algún momento tuviste mucho poder, y no supiste administrarlo de manera correcta. En tu ambición quedaste atrapado y ciego no mediste las consecuencias. DIONISOS: Si hubiera sabido que debía pagar tal precio, hubiese sido más cuidadoso. Ahora me doy cuenta que por no estar centrado permití que los hombres me dieran y me quitaran el poder. AUROBINDO: Renuncia ya. DIONISOS: [Sacude sus manos liberándose de las ataduras, saliendo del estado opresivo en que se encuentra]. AUROBINDO: Ahora manifiesta con humildad tu deseo de liberarte. Si este deseo es sincero, ya nadie más podrá hacerte daño, y solo podrás ayudar desde la luz sin quedar comprometido con el mundo oscuro del cual eres partícipe. [A medida que Dionisos se va dando cuenta, los maestros lo elevan y lo llevan a su plano de vibración, y lo envuelven en un fuego de purificación]. EL PADRE: Ya estás listo, el proceso que sigue debes hacerlo tu, eres libre para elegir. PALAS ATENEA Una de las diosas más importantes en la mitología griega. En la mitología latina, llegó a identificarse con la diosa Minerva. Palas Atenea salió ya adulta de la frente del dios Zeus y fue su hija favorita. Él le confió su escudo, adornado con la horrorosa cabeza de la górgona Medusa, su 'égida' y el rayo, su arma principal. Diosa virgen, recibía el nombre de Parthenos ('la virgen'). En agradecimiento a que Atenea les había regalado el olivo, el pueblo ateniense levantó templos a la diosa, el más importante era el Partenón, situado en la Acrópolis de Atenas. Atenea, originariamente la diosa de las ciudades griegas, de la industria y de las artes, y, en la mitología posterior, de la sabiduría; era también diosa de la guerra. Atenea fue la defensora más firme, entre los dioses, del bando griego en la guerra de Troya. Después de la caída de Troya, sin embargo, los griegos faltaron el respeto debido al carácter sagrado de un altar dedicado a Atenea en el que la profetisa troyana Casandra 27 encontró refugio, y como castigo, unas tormentas enviadas por el dios del mar, Poseidón, requeridas por Atenea destruyeron la mayor parte de los barcos griegos que volvían de Troya. Atenea era también patrona del arte de la agricultura y de las labores femeninas, especialmente del hilado y el tejido. Entre sus dones al hombre estaban la invención del arado y la flauta y las artes de domesticación de animales, de construcción de barcos y de fabricación de zapatos. Se la asociaba a menudo con las aves, especialmente con la lechuza. Se presenta con una imagen poderosa y una apariencia muy bella. Está rodeada por un brillo de estrellas. YOGANANDA: [Se aproxima]. ¿Quién te ha denominado protectora? PALAS ATENEA: Nada más que los hombres que creen en mi, que están seguros que con mi protección obtendrán libremente lo que desean. VIVEKANANDA: ¿De qué los proteges? PALAS ATENEA: Los protejo del mal. VIVEKANANDA: ¿A qué te refieres cuando hablas del mal? PALAS ATENEA: Me refiero a las cosas que a ellos los hacen sufrir. YUKTESWAR: [Aparece en escena]. ¿No te has dado cuenta que no puedes proteger más a nadie, y que es todo una ilusión? Has sido víctima, has quedado atrapada, han puesto una venda a tus ojos. [Repentinamente todo ese brillo que la rodea se va desvaneciendo, y la diosa va perdiendo su poder mágico. Abre muy grandes los ojos y se asombra de lo que ve]. PALAS ATENEA: Si yo soy la protectora, creo que no he cumplido bien tal misión. Está todo destruido ¿A qué se debe todo esto? YUKTESWAR: Quedaste atrapada, y el tiempo en que creías cumplir tu misión se acabó hace rato. Debes permitir que te acompañemos hacia la luz liberadora, pero antes debes renunciar al poder de la magia y proteger desde la luz a quienes te necesiten, pero solo desde la luz. 28 Ya verás lo confundida que estabas. PALAS ATENEA: [Se entristece]. MATAJI: [La toma del brazo]. No estés triste, disuelve tu tristeza en la enorme felicidad que se experimenta en el encuentro con la Luz Divina. HAYDÉE: No te atemorices ni sientas vacío al renunciar a tu poder porque no es el poder que te corresponde. Reconoce que todo ello es demoníaco y te darás cuenta cuál es el verdadero camino. [La Madre Divina la transporta en un canal de luz, accediendo la diosa a transitar por él. Así, libre de esa magia, va siendo purificada, liberándose también la tristeza que experimentaba al perder el poder. El Padre lo recibe al final del camino y le da su bendición]. ORFEO En la mitología griega, poeta y músico, hijo de la musa Calíope y de Apolo, dios de la música, o de Eagro, rey de Tracia. Recibió la lira de Apolo y llegó a ser un músico tan excelente que no tuvo rival entre los mortales. Cuando Orfeo tocaba y cantaba, conmovía a todas las cosas, tanto animadas como inanimadas. Su música encantaba a los árboles y las rocas, amansaba las fieras y hasta los ríos cambiaban su curso para seguirlo. Orfeo es más conocido por su desafortunado matrimonio con la adorable ninfa Eurídice. Poco después de la boda, la novia sufrió la picadura de una víbora y murió. Abrumado por el dolor, Orfeo decidió ir al mundo subterráneo para buscarla y llevarla otra vez al mundo de los vivos, algo que nadie había hecho hasta entonces. Hades, el soberano del reino subterráneo, quedó tan conmovido por su música que le devolvió a Eurídice, con la condición de que él no volviera la cabeza hacia atrás mientras regresaban al mundo de los vivos. Orfeo no pudo dominar su ansiedad, y cuando alcanzó la luz del día giró la cabeza, por lo que Eurídice se desvaneció. Desesperado, Orfeo renunció a la compañía humana y vagó por el desierto, tocando su música para las rocas, los árboles y los ríos. Finalmente, un violento grupo de mujeres tracias, seguidoras del dios Dionisos, se encontraron con el delicado músico y lo mataron. Cuando ellas arrojaron su cabeza cortada al río Hebro, ésta continuó llamando a Eurídice y llegó finalmente a la costa de 29 Lesbos, donde las musas lo sepultaron. Después de su muerte, la lira de Orfeo se transformó en la constelación Lira. Orfeo se manifiesta caminando por un bosque que es surcado por un arroyo. Va ejecutando un instrumento de cuerdas que tiene un sonido parecido al del agua. YOGANANDA: Orfeo es el dueño de las energías del sueño que provienen del inconsciente. Este dios expresa la Verdad de manera velada para los ojos que todavía no están preparados para abrirse y soportar su luz. Por eso el sueño es una pantalla protectora que evita que esos ojos se lastimen. Se presenta en primitivos, en gente inocente y crédula que no puede organizar racionalmente los mensajes, por eso los muestra velados, fabulados, desde la metáfora y el símbolo, perteneciéndole los ritos, las leyendas y los cuentos. También se presenta en la niñez de los maestros, mostrándoles los primeros indicios de sus misiones y capacidades. [Los maestros van llegando y se acomodan alrededor de Orfeo, es como si entrañara un misterio, y algunos lo van reconociendo]. YOGANANDA: Recuerdo una noche de mi adolescencia en que tuve un sueño premonitorio, pero antes de salir del estado onírico, tuve un reflejo tuyo, y ahora te reconozco. No actúas desde la palabra sino es como si sembraras pequeñas imágenes. [A Ramakrishna, Orfeo le señala su necesidad de La Madre Divina, indicándole el camino Lahiri Mahasaya mediante el dios tiene la visión de las montañas e intuye la decisión de la renuncia. En otro momento de su vida se le presenta la experiencia que lo lleva a su primera levitación. La presencia de Orfeo les revela a los maestros dimensiones muy profundas del inconsciente, el sentido de esas vivencias manifestadas en el sueño]. ORFEO: Soy el encargado de llevar esa parte del Plan, esta es transmitir la chispa inicial que siempre es inconsciente. Por eso me expreso en la música, porque es algo de lo que nadie se sustrae, su manifestación es inconsciente y natural, por lo que nadie se 30 defiende ni se resiste, entonces la energía disimulada por los sonidos llega directamente al inconsciente, y produce el estado que conduce a mi reino, el sueño. [A Jesús, Orfeo le hizo comprender a los cinco años que debía estar cerca de los viajeros, de hablar con ellos porque iban a transmitirle importantes mensajes]. ORFEO: A medida que la humanidad fue evolucionando mi imagen se fue desdibujando, aunque sigue presente en pueblos míticos. Pero eso no significa que mi influencia haya menguado, lo que ocurre es que ahora se me llama inconsciente, subconsciente, de algún modo se crean conceptos que niegan las energías que yo manejo. Antes los nombres se acercaban más a las realidades que designaban. [Orfeo y Krishna pastor son muy semejantes. Los dos son infantiles y muy traviesos: uno en el reino del sueño y el otro en el de la vigilia]. YOGANANDA: Orfeo muestra el mundo del sueño, pero ahora esta realidad está mucho más invadida, es como si fuera otro mundo. En él también hay entidades oscuras, y se libra la misma lucha que en la vigilia, entre la luz y la oscuridad. La vibración del sueño no está restringida a este, también se encuentra en las intoxicaciones y en todo lo que tenga que ver con el inconsciente. En este plano, en la actualidad, hay una enorme densidad, al extremo que en ciertos casos este estado inconsciente se extiende a la vigilia. [Euridice es su contraparte femenina. Son como dos polos de una misma energía y no funcionan el uno sin el otro en el rango en que se manifiestan. Son como el padre y la madre]. ORFEO: [A los maestros]. Les agradezco porque todos ustedes hacen que la gente duerma más tranquila. A mí me gustaría que los hombres pudieran tener un sueño más apacible, y estén más abiertos a lo que tengo que decirles. YOGANANDA: Dormir es inevitable, no puede evitarse, pero la aceleración del tiempo provocada por la densidad de las energías, perjudica al hombre. 31 Este cada vez le da menos importancia al sueño, porque no comprende que las energías que se manifiestan en el mismo son la contrapartida de las energías de la vigilia. Si en el primero no hay un fluir natural, este desequilibrio termina afectando la totalidad de los estados psíquicos: entonces el hombre ya no puede escuchar los mensajes ni del sueño ni de la vigilia. De todos modos, aquel a quien le está destinado el mensaje, también está predeterminado a escucharlo. [Los maestros escuchan atentamente la música de Orfeo, y él les dice que ellos ya no duermen]. HERMES En la mitología griega, mensajero de los dioses, hijo del dios Zeus y de Maya, la hija del titán Atlas. Como especial servidor y correo de Zeus, Hermes tenía un sombrero y sandalias aladas y llevaba un caduceo de oro, o varita mágica, con serpientes enrolladas y alas en la parte superior. Guiaba a las almas de los muertos hacia el submundo y se creía que poseía poderes mágicos sobre el sueño. Hermes era también el dios del comercio, protector de comerciantes y pastores. Como divinidad de los atletas, protegía los gimnasios y los estadios, y se lo consideraba responsable tanto de la buena suerte como de la abundancia. A pesar de sus virtuosas características, también era un peligroso enemigo, embaucador y ladrón. El día de su nacimiento robó el rebaño de su hermano, el dios del sol Apolo, oscureciendo su camino al hacer que la manada anduviera hacia atrás. Al enfrentarse con Apolo, Hermes negó haber robado. Los hermanos acabaron reconciliándose cuando Hermes le dio a Apolo su lira, recién inventada. En el primitivo arte griego, se representaba a Hermes como un hombre maduro y barbado; en el arte clásico, como un joven atlético, desnudo e imberbe como puede comprobarse en el Hermes de Praxíteles, en Olimpia. VOZ DIVINA: En un tiempo la velocidad era desordenada y hubo que ordenarla, para ello llamé a Hermes y le conseguí un trabajo. En un principio, bien lo refleja el dicho: “no daba pie con bola”, justamente porque su naturaleza era de un nivel inferior. Lo ascendí colocando la naturaleza de su trabajo en sus pies, por eso el símbolo de 32 las alas en los tobillos, de esa manera estuvo siempre sobre la velocidad, y la velocidad es tiempo. Él maneja el tiempo, y realmente lo hace muy bien. Todo se produce ni antes ni después, porque el tiempo se registra internamente y se manifiesta externamente, pues no es posible su manifestación sin un previo registro. Hermes es muy cuidadoso, muy respetuoso y muy fiel. Aquello que se encuentra bajo su dominio funciona como corresponde, a pesar de los gustos y disgustos del hombre porque precisamente la principal dificultad que tiene es no someterse al tiempo, ya que adolece de una gran carencia de registro del mismo. Si el hombre pudiera volver a sus orígenes y registrar en su interior los tiempos del Tiempo, reinaría la paz en su conciencia, y su vida sería de perfecta armonía. EL HADES En la mitología griega, dios de los muertos. Era hijo del titán Cronos y de la titánide Rea y hermano de Zeus y Poseidón. Cuando los tres hermanos se repartieron el universo después de haber derrocado a su padre, Cronos, a Hades le fue concedido el mundo subterráneo. Allí, con su reina, Perséfone, a quien había raptado en el mundo superior, rigió el reino de los muertos. Aunque era un dios feroz y despiadado, al que no aplacaba ni plegaria ni sacrificio, no era maligno. En la mitología romana, se le conocía también como Plutón, señor de los ricos, porque se creía que tanto las cosechas como los metales preciosos provenían de su reino bajo la tierra. El mundo subterráneo suele ser llamado Hades. Estaba dividido en dos regiones: Erebo, donde los muertos entran en cuanto mueren, y Tártaro, la región más profunda, donde se había encerrado a los titanes. Era un lugar oscuro y funesto, habitado por formas y sombras incorpóreas y custodiado por Cerbero, el perro de tres cabezas y cola de dragón. Siniestros ríos separaban el mundo subterráneo del mundo superior, y el anciano barquero Caronte conducía a las almas de los muertos a través de estas aguas. En alguna parte, en medio de la oscuridad del mundo inferior, estaba situado el palacio de Hades. Se representaba como un sitio de muchas puertas, oscuro y tenebroso, repleto de espectros, situado en medio de campos sombríos y de un paisaje aterrador. En posteriores leyendas 33 se describe el mundo subterráneo como el lugar donde los buenos son recompensados y los malos castigados. Aparece un ave magnífica con las alas desplegadas. En su vuelo se van desprendiendo plumas de sus alas, y cada pluma de que se desprende es el nacimiento de un dios que va poblando el Hades. En un principio los dioses eran puros, almas de un alto proceso evolutivo, pero la coexistencia entre ellos fue creando espacios de poder. De este modo el poder fue la sombra que proyectó los límites entre un espacio y otro, y terminó tejiendo una estructura en forma de telaraña, que a su vez fue adquiriendo un poder independiente. Los dioses al darse cuenta de esta manifestación quisieron ponerla a su servicio. |Esta estructura de poder se fue apoderando sutilmente de la energía de los dioses, y alimentándose de ellos a través de sus actos. Así creció la estructura y se debilitaron los dioses, hasta que todo se convirtió en un caos del cual quien sacó mayor fruto fue el poder. Este se repartió alternativamente entre unos y otros dioses creando la competencia, cuya consecuencia fue una gran inestabilidad y la consiguiente caída del mundo de los dioses. EL OLIMPO Montaña de 2.917 m de altitud, la más elevada de Grecia, situada en la frontera de Tesalia y Macedonia, cerca del mar Egeo. En la antigua mitología griega se creía que era el hogar de los dioses. En la cima se encontraban sus palacios, construidos por Hefesto, dios de la metalurgia. La entrada al Olimpo era una puerta de nubes protegida por las diosas conocidas como las Estaciones. Zeus tenía su trono en el Olimpo, y los dioses festejaban con néctar, ambrosía y las serenatas de las musas. Las doce grandes deidades del Olimpo eran Zeus y su esposa Hera; los hermanos de Zeus, Poseidón, dios del mar, y Hades, dios del infierno; su hermana Hestia, diosa de la tierra, y sus hijos: Atenea, diosa de la sabiduría; Ares, dios de la guerra; Apolo, dios del sol; Artemisa, diosa de la luna y de la caza; Afrodita, diosa del amor; Hermes, mensajero 34 de los dioses, y Hefesto. Los posteriores escritores griegos trasladaron el hogar de estas deidades a una región celestial libre de nieve y tormentas y llena de luz. Configura un gran escenario donde a través de un libreto que ya había sido escrito se representó toda la historia de los dioses. En realidad nada escapó al orden establecido, entendiendo este no como un acto armónico sino a la consecuencia de reflejar la vida conflictiva de los dioses. El Olimpo aparece como una gran esfera transparente y los dioses como su contenido. Al girar esta esfera polarizaba, positiva o negativamente, de acuerdo a los actos que los dioses realizaban. En la esfera había dos puertas, que tenían únicamente la función de salir. Una hacia los espacios del Dios Supremo, y la otra hacia los mundos oscuros e infernales. La primera nunca fue abierta. EL RÍO LETEO El Río Leteo aparece como la cinta de Moebius, fluyendo constantemente sin ir a ningún lado. Es lo que en la cultura cristiana llamamos el limbo. También es un espacio más de silencio donde las almas abandonan sus torturas con la oportunidad de replantear y purificar su energía. Es también el filtro donde se diluye todo lo innecesario, pero que también tiene el riesgo de que se diluya lo bueno que se ha adquirido, y esta posibilidad dependerá del grado de convicción y firmeza espiritual con que se haya fijado la experiencia. De todos modos, el Río Leteo funciona como un aletargador que si bien obnubila el estado, no lo borra y se puede recuperar la experiencia. Es un río donde gustaban jugar los dioses, sumergiendo en él a los hombres que querían premiar o castigar. EL PARTENÓN Y SU ARQUITECTO FIDIAS EL PARTENÓN Templo dórico dedicado a Atenea Parthenos, diosa griega de la sabiduría, situado en el lugar más destacado de la Acrópolis de Atenas. Se construyó en el siglo V 35 a.C. a partir del proyecto de los arquitectos Ictinos y Calícrates, aunque su concepción se relaciona a menudo con la figura del escultor Fidias. Es uno de los edificios más importantes de la historia y la obra culminante de la arquitectura griega. Se muestra en lo alto de la ciudad, de aspecto espléndido, emana una luminosidad y radiación muy fuertes. La imagen que presenta contrasta con las ruinas que lo rodean. Sin embargo, su presencia es fantasmal y fría su gran luminosidad. No hay existencia ni humana ni divina en su interior, sin embargo, él existe como un ente especial. Esto significa que en sí mismo es un ente, entendido este como un campo de energía, y que inspiró a quienes lo construyeron. Lo que queda en la actualidad del Partenón es un débil registro vibratorio de lo que fue en su momento, un punto muy importante de canalización de energía cósmica, por eso presenta la figura de un espectro deslumbrante. Cuando el Partenón se construyó, los dioses ya se habían alejado de la Energía del Padre. El intento erigirlo consistió en brindar una ayuda para unificar el mundo de los dioses y otorgarles nueva fuerza y poder divino, pero esta ya se encontraba en su decadencia y el proyecto no pudo cumplirse. EL ARQUITECTO FIDIAS (c.490-c.430 a.C.) Escultor griego del periodo clásico, destaca por su exquisita perfección en el tratamiento de la forma, el volumen y la expresión de sus esculturas. Alcanzó también fama como arquitecto y pintor. Dado que la mayor parte de sus trabajos originales han desaparecido, el conocimiento de su obra es posible gracias a las descripciones que de la misma hicieron los escritores antiguos. Su primer encargo conocido fue un monumental grupo escultórico en bronce representando a los héroes nacionales con el general Milcíades el Joven como figura principal. El estadista ateniense Pericles le encomendó tanto la supervisión de todas las obras públicas como la realización de cuantas estatuas debían erigirse en la ciudad. Fidias dirigió las obras de construcción de los Propileos, que eran la entrada monumental a la Acrópolis, y del Partenón. Para el 36 interior de este último edificio realizó, en oro y marfil (criselefantina) la monumental estatua de Atenea, diosa de la sabiduría y protectora de Atenas. La colosal estatua de Zeus, padre de los dioses, que estaba ubicado en Olimpia, está considerada como su obra maestra. Los últimos años de la vida de Fidias están plagados de conflictos. Los enemigos de Pericles le acusaron de apropiarse del oro que había recibido para levantar la estatua de Atenea. Al parecer murió en prisión o según otra versión, en el destierro. Una tercera fuente de información afirma que le fue levantado el cargo de malversación, pero se le condenó sin piedad por haber esculpido su retrato y el de Pericles en el escudo dorado que portaba la estatua de Atenea. Tanto los críticos antiguos como los modernos coinciden en afirmar que las obras de Fidias, junto con las tragedias del dramaturgo griego Sófocles, constituyen la expresión más perfecta del espíritu del más noble periodo de la civilización griega, en el que las formas artísticas se utilizaron para reproducir la belleza ideal más que la realidad natural, primando la plasmación de las características esenciales e intemporales por encima de las individuales y transitorias. El Partenón fue el canal de donde partió la enseñanza de la geometría perfecta. Fidias absorbió el eco de toda esa información y fue un brillante traductor del mensaje de este ente. [Fidias hace una reverencia y se retira sin pronunciar palabra]. YOGANANDA: Fidias fue el ejemplo del perfecto discípulo que respondió a una energía superior. Tuvo la honestidad de no interferir, por eso pudo recepcionar con total claridad todo lo que le fue comunicado, y esto solo de por sí le valió su evolución. Sin embargo, Fidias tuvo muchas dificultades en llevar a cabo dicha obra. Estas no eran del orden económico o político, aunque se manifestaron por esos canales, sino que la gran oposición fue de las fuerzas oscuras. El lugar elegido fue varias veces boicoteado, pero gracias a su firme decisión triunfó la tarea que le había sido encomendada. } 37 ANAXIMANDRO (c. 611-c. 547 a.C.) Filósofo, matemático y astrónomo griego. Nació en Mileto (en la actual Turquía). Discípulo y amigo del filósofo griego Tales de Mileto, Anaximandro está considerado el descubridor de la oblicuidad de la eclíptica, que es el ángulo que forman el plano de la eclíptica y el plano del ecuador celeste. También se le considera introductor del reloj de sol en Grecia y fundador de la cartografía. La contribución más relevante de Anaximandro fue elaborar la más temprana obra en prosa en relación al cosmos y los orígenes de la vida, por lo que también es mencionado como fundador de la cosmología. Concebía el Universo como un número de cilindros concéntricos, de los cuales el más exterior es el Sol, el del medio la Luna y el más interno contiene las estrellas. Dentro de estos cilindros está la Tierra, sin base firme y en forma de bombo. Anaximandro postulaba una teoría del origen del Universo que defendía que éste era el resultado de la separación de opuestos desde la materia primaria. Así, el calor se movió hacia fuera, separándose de lo frío y, después, lo hizo lo seco de lo húmedo. Además, Anaximandro sostenía que todas las cosas vuelven con el tiempo al elemento que las originó. Está sentado en una llanura. La expresión de su rostro revela una terrible soberbia. Concibe que el conocimiento del mundo tiene por propósito su dominio, que en última instancia es el poder sobre los hombres. YOGANANDA: ¿Dónde quedó la inocencia del principio? ANAXIMANDRO: Dejo la inocencia para los ignorantes. YOGANANDA: Es posible que sean ignorantes de palabras, pero no de verdades profundas ¿Puedes decir lo mismo? ANAXIMANDRO: No debo nada a nadie, el saber que poseo lo logré por mi mismo, y la manera como lo use es un asunto absolutamente mío. YOGANANDA: [Se ríe]. Úsalo como quieras, pero lo que no veo es con quien. [El lugar donde se encuentra Anaximandro está desierto, no hay nadie]. Ese es tu castigo, no tener a quien dominar. 38 ANAXIMANDRO: [Recién advierte la situación en que se encuentra]. No me importa, entre que llegan o no llegan, yo sigo perfeccionándome. YOGANANDA: En tanto, ¿para qué te sirve ese conocimiento? ANAXIMANDRO: Ya verás los resultados cuando lleguen. YOGANANDA: ¿Y si no llegan? ANAXIMANDRO: Eso no es posible. YOGANANDA: ¿Cuánto hace que esperas? ANAXIMANDRO: [No tiene conciencia del tiempo] Tu has llegado. YOGANANDA: No te veo poner en práctica todo tu saber. ANAXIMANDRO: Mi saber no es para mostrarlo, porque entonces te adueñarías de él. YOGANANDA: ¿Entonces para qué quieres que venga nadie, cuál es el sentido de tu espera si cuando viene alguien no trasmites lo que aprendiste mientras esperabas? ANAXIMANDRO: No tiene porqué tener un sentido. YOGANANDA: [Se levanta] Entonces sigue esperando. [Comienza a retirarse]. ANAXIMANDRO: [Lo detiene]. Espera. YOGANANDA: ¿Me vas a decir algo interesante? ANAXIMANDRO: No había visto mi contradicción, ¿qué voy a hacer ahora? YOGANANDA: Lo que debes hacer es levantarte y salir a buscar a quien trasmitirle tu saber, humildemente, sin agregarle ni un punto ni una coma, porque ese saber ni es tuyo, sino que pertenece a todos. Te advierto que en el momento que quieras apropiarte de este saber, vas a volver a quedar aislado. Esta es una oportunidad de redimirte. PITÁGORAS (c. 582-c. 500 a.C.) Filósofo y matemático griego, cuyas doctrinas influyeron mucho en Platón. Nacido en la isla de Samos, Pitágoras fue instruido en las enseñanzas de los primeros filósofos jonios Tales de Mileto, Anaximandro y Anaxímenes. Se dice que Pitágoras había sido condenado a exiliarse de Samos por su aversión a la tiranía de Polícrates. Hacia el 530 a.C. se instaló en Crotona, una colonia griega al sur de Italia, donde fundó un movimiento 39 con propósitos religiosos, políticos y filosóficos, conocido como pitagorismo. La filosofía de Pitágoras se conoce sólo a través de la obra de sus discípulos. Los pitagóricos asumieron ciertos misterios, similares en muchos puntos a los enigmas del orfismo. Aconsejaban la obediencia y el silencio, la abstinencia de consumir alimentos, la sencillez en el vestir y en las posesiones, y el hábito del autoanálisis. Los pitagóricos creían en la inmortalidad y en la transmigración del alma. Se dice que el propio Pitágoras proclamaba que él había sido Euphorbus, y combatido durante la guerra de Troya, y que le había sido permitido traer a su vida terrenal la memoria de todas sus existencias previas. Entre las amplias investigaciones matemáticas realizadas por los pitagóricos se encuentran sus estudios de los números pares e impares y de los números primos y de los cuadrados, esenciales en la teoría de los números. Desde este punto de vista aritmético, cultivaron el concepto de número, que llegó a ser para ellos el principio crucial de toda proporción, orden y armonía en el universo. A través de estos estudios, establecieron una base científica para las matemáticas. En geometría el gran descubrimiento de la escuela fue el teorema de la hipotenusa, conocido como teorema de Pitágoras, que establece que el cuadrado de la hipotenusa de un triángulo rectángulo es igual a la suma de los cuadrados de los otros dos lados. La astronomía de los pitagóricos marcó un importante avance en el pensamiento científico clásico, ya que fueron los primeros en considerar la tierra como un globo que gira junto a otros planetas alrededor de un fuego central. Explicaron el orden armonioso de todas las cosas como cuerpos moviéndose de acuerdo a un esquema numérico, en una esfera de la realidad sencilla y omnicomprensiva. Como los pitagóricos pensaban que los cuerpos celestes estaban separados unos de otros por intervalos correspondientes a longitudes de cuerdas armónicas, mantenían que el movimiento de las esferas da origen a un sonido musical, la llamada armonía de las esferas. Está en un jardín rodeado de un grupo de hombres a quienes les está impartiendo su enseñanza. PITÁGORAS: En primer lugar, tengan cuidado donde pisan, porque todo vuelve. En segundo lugar, adviertan que todo es un número. 40 En tercer lugar, sepan que no hay número para el Todo. YUKTESWAR: Si todo es número y no hay número para el Todo, deja de contar. PITÁGORAS: ¿Quién eres? YUKTESWAR: El Todo. PITÁGORAS: Entonces el Todo es Uno. YUKTESWAR: Si eso realmente lo dices con el corazón, ya no hay nada mas que aprender, y nada más que enseñar. PITÁGORAS: ¿Hay música en el Todo? YUKTESWAR: En la pregunta está la respuesta. PITÁGORAS: [De alguna manera comprende el diálogo con el maestro, pero está muy apegado y su enseñanza, a las matemáticas y a su música. YUKTESWAR: Debes desenamorarte de los números para enamorarte del Uno, del Todo. Ya descubriste el secreto pero no te dejes fascinar por él, y continúa tu trayecto hacia la Verdad. Ya vendrá alguien detrás de ti a enseñarlo a quien lo necesite, pero debes dejar esta etapa. PITÁGORAS: [Mira a un perro]. Siempre temí un renacer en algo así. [Pitágoras se muestra decidido a continuar el camino aunque tenga una gran vocación a la enseñanza y apego a sus discípulos. Abandona todo y se va con Yukteswar]. HERÁCLITO (c. 540-c. 475 a.C.) Filósofo griego, quien sostenía que el fuego era el origen primordial de la materia y que el mundo entero se encontraba en un estado constante de cambio. Nació en Éfeso, una antigua ciudad griega en Asia Menor, que ahora pertenece a Turquía. Debido a su vida solitaria, y a la oscuridad y misantropía de su filosofía, es llamado algunas veces el oscuro. En cierto sentido, Heráclito fue uno de los iniciadores de la metafísica griega, aunque sus ideas se derivan de las de la escuela jónica de la filosofía griega. Consideraba el fuego como la sustancia primordial o principio que, a través de la condensación y 41 rarefacción, crea los fenómenos del mundo sensible. Heráclito incorporó a la noción de "ser" de sus predecesores el concepto de "devenir" o flujo, al que consideró una realidad básica subyacente a todas las cosas, incluso a las más estables en apariencia. Para aclararlo, afirmaba que una persona no podía bañarse dos veces en el mismo río. En ética, Heráclito introdujo un nuevo énfasis social, manteniendo que la virtud consiste en la subordinación del individuo a las leyes de una armonía razonable y universal. Aunque su pensamiento estaba influido por la teología popular, atacó los conceptos y ceremonias de la religión popular de su tiempo. Sólo una obra, De la Naturaleza de las cosas, se puede atribuir a Heráclito, aunque algunos autores sostienen que también escribió un libro sobre las leyes. Numerosos fragmentos de su obra fueron preservados por escritores posteriores y se pueden encontrar recopilaciones de estos fragmentos en diversas ediciones modernas. Está absorto sentado al lado del río. YUKTESWAR: Tu misión era descubrir la dualidad, no encubrirla, y para eso la expresaste en forma oscura. La encubriste para aparecer ante los demás como más sabio, y lo hiciste apropiándote de la verdad que se te había encomendado transmitir. Entonces usaste esa apropiación para crecer en tu ego y ser venerado como sabio de Occidente. Ocultaste lo que debías descubrir. HERÁCLITO: El río que fluye incesantemente, y que en su fluir cambia de manera constante, es sin embargo el mismo río. YUKTESWAR: Te volviste sordo. Te ensoberbeciste tanto en lo que conocías que decidiste no revelarlo claramente, y así quedaste ensimismado en repetir, ahora sin sentido, esa verdad que debías transmitir. Hablaste herméticamente y te volviste sordo, no sólo para lo que debías transmitir sino para lo que debías aprender. [Heráclito no ve, no puede percibir nada. Está encerrado en sí mismo, atrapado como un autista en un único discurso se adueñó de una verdad y quedó esclavo de la misma. Hasta que no la suelte no va a poder abandonar el estado en que se encuentra]. UN ALMA QUE PRESENCIA LA ESCENA: ¿De qué manera puede soltarla? 42 YUKTESWAR: Sabe que si la suelta desaparece. Habla de un río que desconoce porque se quedó en la superficie, pero nunca se adentró en el mismo, por eso no conoció su profundidad. ALMA: ¿Hay alguna manera de despertarlo? YUKTESWAR: Solo cuando consuma su castigo. ALMA: Dicho así, me hace acordar a Dante. YUKTESWAR: Dante tiene el suyo propio. PARMÉNIDES (vivió sobre el 500 a.C.) Filósofo griego, considerado por muchos eruditos como el miembro más importante de la escuela eleática. Se dice que visitó Atenas a la edad de 65 años, y que en tal ocasión Sócrates, entonces un hombre joven, le oyó hablar. Parménides expuso su filosofía en forma de versos y su única obra que ha perdurado se nutre de extensos fragmentos de un poema didáctico, Sobre la naturaleza. En esta reflexión aboga por la existencia del Ser Absoluto, cuya no existencia Parménides declaraba resultar inconcebible, pero cuya naturaleza admitía ser también inconcebible, ya que el Ser Absoluto está disociado de toda limitación bajo la cual piensa el ser humano. Parménides mantenía que los fenómenos de la naturaleza son sólo aparentes y debidos en esencia al error humano; parecen existir, pero no tienen entidad real. Mantenía también que la realidad, Ser verdadero, no es conocida por los sentidos sino que sólo se puede encontrar en la razón. Esta creencia le convirtió en un precursor del idealismo de Platón. La teoría de Parménides de que el ser no puede originarse del No Ser, y que el Ser ni surge ni desaparece, fue aplicada a la materia por sus sucesores Empédocles y Demócrito, que a su vez la convirtieron en el fundamento de su explicación materialista del universo. Se encuentra en un templo escribiendo al lado de la estatua de la diosa. Yogananda se le acerca. PARMÉNIDES: [Levantando la vista] ¿Tu quién eres? ¿Qué haces aquí? 43 YOGANANDA: Soy un enviado del Padre y de parte de Él vengo a decirte que confíes en tu percepción interna. Aquello que percibiste, realmente era el Ser, aquella chispa divina que se desprende del Padre. [Yogananda, ahora sin palabras, le explica a Parménides las leyes de este plano que manifiestan la polaridad del Ser y del No Ser. Le aclara acera de la intuición del devenir, que éste no es un plano chato, un mero fluir, sino que tiene que ver con el origen kármico, e incluso con el Origen Divino. Asimismo le advierte que la estatua de la diosa en realidad era una visión de La Madre Divina]. PARMÉNIDES: Me siento agradecido, y ahora reconozco la naturaleza de La Madre Divina en esa visión. LA MADRE DIVINA: [Se manifiesta en la imagen de la estatua de la diosa con una presencia luminosa y viviente]. Hijo mío, confía en ti y en el mensaje. Pásalo a tus hermanos, afiánzate en el Ser, en el Padre y deja fluir, a través tuyo, sus aguas de luz. Así, tus hermanos, bañándose en esas aguas, ya no serán los mismos. [Parménides es envuelto en luz]. SÓCRATES (c. 470-c. 399 a.C.) Filósofo griego fundador de la filosofía moral, que ha tenido gran peso en la filosofía occidental por su influencia sobre Platón. Nacido en Atenas, hijo de Sofronisco, un escultor, y de Fenareta, una comadrona, recibió una educación tradicional en literatura, música y gimnasia. Más tarde, se familiarizó con la retórica y la dialéctica de los sofistas, las especulaciones de los filósofos jonios y la cultura general de la Atenas de Pericles. Al principio, Sócrates siguió el trabajo de su padre; realizó un conjunto de estatuas de las tres Gracias, que estuvieron en la entrada de la Acrópolis hasta el siglo II a.C. Durante la guerra del Peloponeso contra Esparta, sirvió como soldado de infantería con gran valor en las batallas de Potidaea en el 432-430 a.C., Delio en el 424 a.C., y Anfípolis en el 422 a.C. Sócrates creía en la superioridad de la discusión sobre la escritura y por lo tanto pasó la mayor parte de su vida de adulto en los mercados y plazas públicas de Atenas, 44 iniciando diálogos y discusiones con todo aquel que quisiera escucharle, y a quienes solía responder mediante preguntas. Un método denominado mayéutica, o arte de alumbrar los espíritus, es decir, lograr que el interlocutor descubra sus propias verdades.. Sócrates fue obediente con las leyes de Atenas, pero en general evitaba la política, contenido por lo que él llamaba una advertencia divina. Creía que había recibido una llamada para ejercer la filosofía y que podría servir mejor a su país dedicándose a la enseñanza y persuadiendo a los atenienses para que hicieran examen de conciencia y se ocuparan de su alma. No escribió ningún libro ni tampoco fundó una escuela regular de filosofía. Todo lo que se sabe con certeza sobre su personalidad y su forma de pensar se extrae de los trabajos de dos de sus discípulos más notables: Platón, que atribuyó sus propias ideas a su maestro y el historiador Jenofonte, un escritor prosaico que quizá no consiguió comprender muchas de las doctrinas de Sócrates. Platón describió a Sócrates escondiéndose detrás de una irónica profesión de ignorancia, conocida como ironía socrática, y poseyendo una agudeza mental y un ingenio que le permitían entrar en las discusiones con gran facilidad. Aunque fue un patriota y un hombre de profundas convicciones religiosas, Sócrates sufrió sin embargo la desconfianza de muchos de sus contemporáneos, a los que les disgustaba su actitud hacia el Estado ateniense y la religión establecida. Fue acusado en el 399 a.C. de despreciar a los dioses del Estado y de introducir nuevas deidades, una referencia al daemonion, o voz interior mística, a la que Sócrates aludía a menudo. También fue acusado de corromper la moral de la juventud, alejándola de los principios de la democracia y se le confundió con los sofistas, tal vez a consecuencia de la caricatura que realizó de él el poeta cómico Aristófanes en la comedia Las nubes representándole como el dueño de una “tienda de ideas” en la que se enseñaba a los jóvenes a hacer que la peor razón apareciera como la razón mejor. La Apología de Platón recoge lo esencial de la defensa de Sócrates en su propio juicio; una valiente reivindicación de toda su vida. Fue condenado a muerte, aunque la sentencia sólo logró una escasa mayoría. Cuando, de acuerdo con la práctica legal de Atenas, Sócrates hizo una réplica irónica a la sentencia de muerte del tribunal proponiendo pagar tan sólo una pequeña multa dado el escaso valor que tenía para el 45 Estado un hombre dotado de una misión filosófica, enfadó tanto al jurado que éste volvió a votar a favor de la pena de muerte por una abultada mayoría. Los amigos de Sócrates planearon su huida de la prisión pero prefirió acatar la ley y murió por ello. Pasó sus últimos días con sus amigos y seguidores, como queda recogido en la obra Fedón de Platón, y durante la noche cumplió su sentencia bebiendo una copa de cicuta siguiendo el procedimiento habitual de ejecución. Estaba casado con Jantipa, una mujer de reconocido mal genio y tenía tres hijos. El escenario en el plano de manifestación es el mundo griego de la polis. Sócrates con la figura de un hombre joven, vestido con túnica y sandalias, aparece caminando en una calle cualquiera de Atenas. Yogananda, que viene en sentido contrario, lo detiene. La escena es presenciada por todos los maestros del mandala. YOGANANDA: Hablaste del conocimiento y de la forma del conocimiento, pero no pudiste experimentar el conocimiento en sí mismo. SÓCRATES: Yo soy el conocimiento y de la forma del conocimiento, soy el que hace el mundo entendible. YOGANANDA: Tu respuesta muestra tu total ignorancia. VIVEKANANDA; Dijiste que no sabías y dices ahora que eres el conocimiento ¿Cómo puedes explicarlo? SÓCRATES: Soy pura reflexión, y la reflexión es Nada. VIVEKANANDA: ¿Comprendes entonces? SÓCRATES: Tu tienes que comprender, saber que esta verdad me convierte en sabio. VIVEKANANDA: Te convertiste en sabio de Nada, cuando hubieras podido convertirte en sabio de Todo. SÓCRATES: ¿Nada y Todo no es lo mismo? VIVEKANANDA: Ahí está tu error. Como sólo puedes conocer que no hay nada cognoscible, crees que no hay Nada, en vez de creer que tus limitaciones te impiden conocer el Todo. 46 AUROBINDO: El Todo es el Ser, para conocerlo no basta la mera reflexión, a decir verdad, el pensamiento te aleja. El Ser es esa experiencia que intuiste y no pudiste realizar. SÓCRATES: Preferí quedarme en la seguridad del conocimiento imposible. CHIDANANDA: El conocimiento imposible es una tontería y la seguridad también. Hay un conocimiento que es el conocimiento del Ser, hay un método que es la reflexión en el silencio y una sola seguridad que es comprender la verdadera naturaleza de las cosas una vez que se accede a la vibración del Padre. Todo lo demás es una pérdida del tiempo. SÓCRATES: Tiempo sobra ¿Qué hay de malo en desperdiciar el tiempo? CHIDANANDA: ¿Qué hay de bueno? Cada momento desperdiciado, cada hora perdida, cada segundo sin espiritualidad son millones de toneladas de peso y de sufrimiento para tu alma. En el mundo demoníaco todo tiene un precio, el tiempo no se pierde gratis. SIVANANDA: Tenías una capacidad extraordinaria, creímos que habías podido recibir el mensaje y divulgarlo. Sin embargo, lo recibiste y voluntariamente lo dejaste de lado ¿Por qué? SÓCRATES: Soy estudiado hasta hoy en día, más de dos mil años después, precisamente porque no hice caso a ese mensaje. SIVANANDA: ¿Se te ocurrió pensar que de haberlo aceptado no te importaría para nada ser estudiado o no en estos tiempos’ RAMANA MAHARSHI: Debes arrepentirte y pedir que se te vuelva a dar una oportunidad de servir a Dios. YUKTESWAR: Tenías el don de la reflexión y pediste la gracia del discernimiento, y pudiendo discernir, te acobardaste. SÓCRATES: Me ofrecieron la inmortalidad. YUKTESWAR: Nadie puede ofrecerte la inmortalidad, es una engaño porque no hay muerte en el Padre. Te ofrecieron algo que ya tenías, y por eso dejaste de lado lo que todos necesitan y muy pocos tienen la capacidad de obtener. 47 LAHIRI MAHASAYA: Pudiste ser recordado sentado a la derecha del Padre, y preferiste ser recordado hablando con otros hombres, y todavía pretendes dar lecciones acerca de la necedad. SÓCRATES: Fui un gran necio, pude haberlo tenido Todo y me quedé con la magia. BABAJI: Eras un sabio en la tierra que despreciaba los conocimientos terrestres, pero no llegaste a ser un sabio en el cielo que conociera los movimientos astrales. Parece que sólo podías ser un charlatán. SÓCRATES: Realmente me convertí en un charlatán. Yo siempre supe que esas discusiones no tenían sentido. BABAJI: ¿Para qué las hacías? SÓCRATES: Para buscar el sentido. BABAJI: Cuando tuviste el sentido frente a los ojos le diste la espalda. MATAJI: Tantas veces consolé tu sufrimiento, y tantas veces te aconsejé que acallaras tu mente y me dejaras entrar. Hoy te ofrezco nuevamente mi consuelo. SÓCRATES: [Se acerca a Mataji, y comienza a llorar]. JESÚS: Tuviste toda la intuición y ninguna percepción sobre la vibración correcta. Tus pensamientos iban alto y tus percepciones muy bajas, nunca pudiste levantar del suelo. BUDA: [Le muestra una rosa que se marchita y florece continuamente, pero siempre es la misma rosa]. No puedes llamarte sabio si no entiendes un proceso tan simple como este. SÓCRATES: Lo entiendo, una rosa nace, muere y nace otra en su lugar. BUDA: [Sonriendo] No entiendes, es siempre la misma rosa. SÓCRATES: [Intenta escapar] MILAREPA: Has estado huyendo demasiado tiempo. Es hora que te quedes quieto. Es hora que asumas tu responsabilidad. Una vez que lo hagas podrás deshacerte de ella, quemarla, empezar tu camino de purificación en otro plano. SANKARACHARYA: Le diste todo a tu cabeza y nada a tu corazón. El amor te habría salvado. SÓCRATES: Amé el conocimiento. 48 SANKARACHARYA: Estás equivocado, nunca conociste el conocimiento y nunca amaste. Si lo hubieras hecho lo habrías reconocido. SÓCRATES: Había muchas limitaciones en la época en que me tocó vivir. SANKARACHARYA: Las limitaciones de los hombres no tienen nada que ver con el calendario. KRISHNA: [Toca una melodía y las notas se deshacen en el aire]. Este es el conocimiento más puro. Todo el pensamiento que sustancializa lo irreal es demoníaco. Sabías esto, y a pesar de ello actuaste. SÓCRATES: Pensé que podía darle sustancia al pensamiento. KRISHNA: Y se la diste, solo que no para los hombres ni para el Ser. Muchos demonios engordaron con esa sustancia que le diste al pensamiento. RAMAKRISHNA: El camino es uno solo. Si renuncias a la carga lo podrás transitar, en caso contrario, es imposible. SÓCRATES: Quiero renunciar a la carga. RAMAKRISHNA: [Manifiesta un gran fuego de purificación, y se va quemando el mundo griego como un bollo de papel]. Así de sustancial era el mundo que creaste. HAYDÉE: Ahora que estás más liviano debes continuar aceptando la purificación, para así poder escuchar claro y fuerte el silencio del Ser. LA MADRE DIVINA: Meditarás en Mí, hasta experimentar el Amor. Sólo de esta forma podrás experimentar la Verdad. EL PADRE: [Permanece en silencio y le irradia su luz]. .............................................. REFLEXIONES DE SÓCRATES DESPUÉS DEL DIÁLOGO CON LOS MAESTROS SÓCRATES: Estoy reflexionando lo que me han dicho los maestros, pero no me animo a dejar de ser lo que fui. Eso me asusta. ............................................... 49 Mi inmortalidad quedó en los otros. Quería ser un dios, por eso me duele mucho romper mi imagen de infalibilidad divina, de creer que lo sabía Todo, haber llegado a la cúspide, que no había nada más. ............................................... Ahora me doy cuenta que soy un grano de arena y eso me asusta, haber encontrado esta revelación. ............................................... Quisiera decir todo lo errado que está el hombre al concebir el mundo como lo concibe. Ese mundo caótico, surge de la concepción errada que tiene el hombre de sí mismo y de la realidad. Mientras perdure esta concepción, esto es, la sustancialización de lo irreal, no habrá posibilidad de cambio. ............................................... Quizás mi percepción sufrió, a pesar de la iluminación que pude haber tenido, las consecuencias de este proceso erróneo. Es como si se hubiese impregnado en mi alma y no fui lo suficientemente fuerte para resistir esta imantación. SÓCRATES SE SOMETE A LA DECISIÓN DEL MANDALA DE MAESTROS SÓCRATES: [Al mandala de maestros] No sólo quisiera liberarme de este concepto erróneo, sino poder regresar al mundo de alguna forma y esclarecer y revertir este error. MANDALA DE MAESTROS: [Se manifiestan los maestros y todas las voces se expresan en una sola voz]. Tu oportunidad ya la tuviste, y ahora vemos que el deseo que expresas es para ti mismo. Otros ya están trabajando en esa dirección. Tu trabajo es purificarte, aprovecha para eso la energía que te otorgamos. SÓCRATES: [Acepta la determinación del Mandala de Maestros y entra en el mar de la purificación]. 50 PLATÓN (c. 428-c. 347 a.C.), Filósofo griego, uno de los pensadores más creativos e influyentes de la filosofía occidental Platón nació en el seno de una familia aristocrática en Atenas. Su padre, Aristón, era al parecer, descendiente de los primeros reyes de Atenas. Perictione, su madre, estaba emparentada con el legislador del siglo VI a.C. Solón. Su padre murió cuando aún era un niño y su madre se volvió a casar con Pirilampes, colaborador del estadista Pericles. De joven, Platón tuvo ambiciones políticas pero se desilusionó con los gobernantes de Atenas. Más tarde se proclamó discípulo de Sócrates, aceptó su filosofía y su forma dialéctica de debate: la obtención de la verdad mediante preguntas, respuestas y más preguntas. Aunque se trata de un episodio muy discutido, que algunos estudiosos consideran un metáfora literaria sobre el poder, Platón fue testigo de la muerte de Sócrates durante el régimen democrático ateniense en el año 399 a.C. Temiendo tal vez por su vida, abandonó Atenas algún tiempo y viajó a Italia, Sicilia y Egipto. En el año 387 Platón fundó en Atenas la Academia, institución a menudo considerada como la primera universidad europea. Ofrecía un amplio plan de estudios, que incluía materias como astronomía, biología, matemáticas, teoría política y filosofía. Aristóteles fue su alumno más destacado. Ante la posibilidad de conjugar la filosofía y la práctica política, Platón viajó a Sicilia en el año 367 a.C. para ser tutor del nuevo gobernante de Siracusa Dionisio el Joven. El experimento fracasó. Platón regresó a Siracusa en el año 361 a.C., pero una vez más su participación en los acontecimientos sicilianos tuvo poco éxito. Pasó los últimos años de su vida dando conferencias en la Academia y escribiendo. Murió próximo a los 80 años en Atenas en el año 348 o 347 a.C. Los escritos de Platón adoptaban la forma de diálogos, donde se exponían ideas filosóficas, se discutían y se criticaban en el contexto de una conversación o un debate en el que participaban dos o más personas. El primer grupo de escritos de Platón incluye 35 diálogos y 13 cartas. Se ha cuestionado la autenticidad de algunos diálogos y de la mayoría de las cartas. 51 Los diálogos se pueden dividir en tres etapas de composición. La primera representa el intento que hizo Platón de comunicar la filosofía y el estilo dialéctico de Sócrates. Dentro de este grupo de diálogos se encuentran Cármides (un intento por definir la templanza), Lisis (una discusión sobre la amistad), Laques (una búsqueda del significado del valor), Protágoras (una defensa de la tesis de que la virtud es conocimiento y que es posible aprenderla), Eutifrón (una consideración sobre la naturaleza de la piedad), y el libro I de La República (una discusión sobre la justicia). Los diálogos de los periodos intermedio y último de la vida de Platón reflejan su propia evolución filosófica. Las ideas de esas obras se atribuyen al propio Platón, aunque Sócrates sigue siendo el personaje principal en muchos diálogos. Los escritos del periodo intermedio abarcan los de Gorgias (una reflexión sobre distintas cuestiones éticas), Menón (una discusión sobre la naturaleza del conocimiento), Apología (la defensa que hizo Sócrates de sí mismo durante el juicio en el que fue acusado de ateísmo y corrupción de la juventud ateniense), Crátilo (la defensa de Sócrates de la obediencia a las leyes del Estado), Fedro (escena de la muerte de Sócrates, en la que discute sobre la teoría de las ideas, la naturaleza del alma y la cuestión de la inmortalidad), El Banquete (destacada realización dramática de Platón que contiene varios discursos sobre la belleza y el amor) y La República (máxima obra filosófica de Platón, que es una detallada discusión sobre la naturaleza de la justicia). Entre los trabajos del último periodo se encuentran Teeteto (una negación de que el conocimiento tiene que ser identificado con el sentido de percepción), Parménides (una evaluación crítica de la teoría de las ideas), Sofista (una reflexión posterior sobre las ideas o las formas), Filebo (discusión sobre la relación entre el placer y el bien), Timeo (ideas de Platón sobre las ciencias naturales y la cosmología), y Leyes (un análisis más práctico de las cuestiones políticas y sociales). En el centro de la filosofía de Platón está su teoría de las formas o de las ideas. En el fondo, su idea del conocimiento, su teoría ética, su psicología, su concepto del Estado y su perspectiva del arte deben ser entendidos desde esta perspectiva. Se manifiesta en un lugar de una blanca transparencia, en que se experimenta en una sensación de vacío. 52 PLATÓN: Estoy en el mejor de los lugares, es el mundo ideal ¿Qué más puedo querer que habitar el lugar donde todo nace, donde todo tiene principio? Este es el lugar de las ideas puras, sin él nada existiría. YUKTESWAR: ¿Dónde está la idea de ti mismo? PLATÓN: [Muy serio porque no le agrada la pregunta]. Si no existiera la idea de mi mismo, yo mismo no existiría. YUKTESWAR: Responde la pregunta [El maestro sabe que Platón conoce la respuesta pero no la puede asumir]. PLATÓN: Si no encuentro la idea de mí mismo es porque esta idea está en mí mismo, pero no soporto la idea de ser una idea más. YUKTESWAR: No sólo eres una idea más, sino que eres la idea de Alguien más. PLATÓN: [Con ironía] ¿De Zeus? YUKTESWAR: En todo caso de Deus, pero eso viene después. PLATÓN: [Enojado] ¿Quién eres para venir a mi mundo ideal? YUKTESWAR: ¿Deseas seguir en ese mundo ideal, siendo una idea más, o prefieres pasar a compartir el mundo Real con alguna de las otras ideas de aquel otro Alguien? [Yukteswar se refiere a todos los hombres como ideas de Dios y lo invita a compartir el mundo Real de esas ideas]. PLATÓN: ¿Acaso hay algo más perfecto que el mundo que habito? YUKTESWAR: Si, el que lo contiene. PLATÓN: Pero esto es mío. YUKTESWAR: ¿Se puede poseer una idea? O peor ¿una idea puede poseer otras ideas? Dime ¿cuál es la intención de toda tu filosofía. PLATÓN: [Adoptando un aire académico]. No me iba a conformar con explicar el mundo, sino que quise explicar lógicamente lo que se ve del mundo a través de lo que no se ve, y que este mundo invisible es inmensamente más rico y más real que el mundo empírico. YUKTESWAR: Sin embargo muestras un mundo lógico vacío. PLATÓN: No entiendes nada, no podemos hablar de un mundo vacío, si es el que crea el mundo empírico. 53 YUKTESWAR: ¿Te liberaste o quedaste atrapado en ese mundo de ideas? [Platón lo mira a Yukteswar como aceptando que esa es la verdadera disyuntiva. El tema es reconocer que está atrapado en ese mundo, pero cuando el maestro le dice hay otro que lo contiene, el filósofo no puede resistir a su deseo de saber más. Si hay otro lo quiere conocer, pero no se decide a dejar el que conoce]. PLATÓN: [Permanece en silencio, está desconcertado] YUKTESWAR: Creaste una jaula y le pusiste lo que te hubiera gustado que la jaula tuviera, acomodaste las cosas y te metiste adentro. A partir de ese momento crees que no hay otra cosa que la jaula y lo que contiene, sin saber que eso tiene que estar apoyado en algo más, salvo que te creas Dios. PLATÓN: Sé perfectamente que este mundo no lo creé yo, sólo lo descubrí. Si me creyera Dios sería un loco. YUKTESWAR: Que otra cosa puede ser alguien que creyendo haber descubierto el principio del mundo, y por ese mero hecho cree poder manejarlo a placer y ser el dueño de ese lugar. Aquí las causas y los efectos responden a tu capricho. PLATÓN: Es posible que sea cierto que el mundo no funciona así, que las cosas tengan otra explicación. [Se muestra confundido]. YUKTESWAR: Debías hacer ver al mundo que las cosas emergen de una Energía Divina, que se manifiesta como una especie de cascada. PLATÓN: [Permanece reflexionando en silencio] YUKTESWAR: Pero tranquilízate, que no todo lo que escribiste es producto de tu imaginación, por ejemplo, el mito de la caverna nació de una intuición verdadera. Pero lo que ocurrió es que te adueñaste del conocimiento y lo armaste como te pareció, y de ahí no hubo más que un paso para convertir esa construcción en una verdad absoluta, fue la consecuencia inevitable. Ahora es el momento de reconocer el error, o pasar miles de años prisionero de tu fantasía. PLATÓN: Bueno, no todo fue producto de mi fantasía, todavía hay algo Real en mí. Acepto tu ayuda. YUKTESWAR: La prueba de que tu aceptación es sincera, es que destruyas ese fantasioso mundo de las ideas. [Le ofrece una bola de fuego para que lo queme]. 54 PLATÓN: Esto va a ser una verdadera prueba, porque si ese mundo es Real no podrá ser destruido. [Lo arroja al fuego y se quema como si ese mundo de las ideas fuera de cartón]. ARISTÓTELES (384-322 a.C.) Filósofo y científico griego que comparte junto a Platón y Sócrates la distinción de ser los filósofos más destacados de la antigüedad. Nacido en Estagira (Macedonia), hijo de un médico de la corte real, Aristóteles se trasladó a Atenas a los 17 años para estudiar en la Academia de Platón. Permaneció en esta ciudad unos 20 años, primero como estudiante y más tarde como maestro. A la muerte de Platón, acaecida en el año 347 a.C., Aristóteles partió para Assos, ciudad de Asia Menor en la que gobernaba un amigo suyo, Hermias, al que Aristóteles sirvió de asesor, casándose además con su sobrina e hija adoptiva, Pitia. Tras ser capturado y ejecutado Hermias a manos de los persas en el 345 a.C., Aristóteles se trasladó a Pella, capital de Macedonia, donde se convirtió en tutor del hijo menor del rey, Alejandro, que para la historia sería conocido como Alejandro III el Magno. En el año 335 a.C., al acceder Alejandro al trono, regresó a Atenas y estableció su propia escuela: el Liceo. Debido a que gran parte de las discusiones y debates se desarrollaban mientras maestros y estudiantes paseaban por el Liceo, este centro llegó a ser conocido como escuela peripatética. A raíz de la muerte de Alejandro en el año 323 a.C. creció en Atenas un fuerte sentimiento antimacedonio, con lo que Aristóteles se retiró a una propiedad familiar en Calcis, en la isla de Eubea, donde moriría al año siguiente. Lo que ha llegado hasta nuestros días, sin embargo, son las notas de clase que Aristóteles elaboraba para sus cursos, delimitados con gran esmero y que cubrían casi todos los campos del saber y del arte. Los textos en los que descansa la reputación de Aristóteles se basan en gran parte en estas anotaciones que fueron recopiladas y ordenadas por sus editores posteriores. Entre los textos existen tratados de lógica llamados Organon ('instrumento'), ya que proporcionan los medios con los que se ha de alcanzar el conocimiento positivo. Entre las obras que tratan de las ciencias naturales está la Física, que recoge amplia 55 información sobre astronomía, meteorología, plantas y animales. Sus escritos sobre la naturaleza, alcance y propiedades del ser, que Aristóteles llamó primera filosofía, recibieron el nombre de Metafísica en la primera edición publicada de sus obras (c. 60 a.C.) debido a que en dicha edición aparecían tras la Física. A su hijo Nicómaco dedicaría su obra sobre la ética, llamada Ética a Nicómaco. Otras obras esenciales son Retórica, Poética (que ha llegado a nosotros incompleta) y su Política (también incompleta). La influencia de la filosofía de Aristóteles ha sido general, contribuyendo incluso a determinar el lenguaje moderno y el denominado sentido común, y su concepto del "Primer Motor" como causa final ha tenido un importante papel dentro de la teología. Antes del siglo XX decir lógica significaba en exclusiva hacer referencia a la lógica aristotélica. Hasta el Renacimiento, e incluso después, tanto poetas como astrónomos ensalzaron el concepto aristotélico del Universo. El estudio de la zoología estuvo basado en la obra de Aristóteles hasta que, en el siglo XIX, el científico británico Charles Darwin cuestionó la doctrina de la inmutabilidad de las especies. En el siglo XX se ha producido una nueva apreciación del método aristotélico y de su relevancia para la educación, el análisis de las acciones humanas, la crítica literaria y el análisis político. El filósofo aparece como un hombre joven, vestido con túnica y descalzo. Se calza unas sandalias toma una rama como bastón, y empieza a caminar. De trasfondo aparece el escenario del mundo griego. Se detiene frente a una fuente y se sienta al borde. Del otro lado está Yogananda, vestido con túnica naranja y sandalias. ARISTÓTELES: [Lo reconoce como un filósofo de otra cultura, observándolo intrigado] ¿Qué te trae a mi ciudad? YOGANANDA: El deseo del filósofo. ARISTÓTELES: ¿Y qué desea el filósofo? YOGANANDA: Desea recordar cual es el único deseo que el filósofo olvidó. ARISTÓTELES: [Sonríe sorprendido] ¿Eres un mago? ¿Lees las mentes? YOGANANDA: Soy un maestro y acudo a quien me convoca. ARISTÓTELES: ¿Yo te he convocado? YOGANANDA: Sí. 56 ARISTÓTELES: ¿Cuándo? Ni te conozco. YOGANANDA: Dormido en tu frustración, despierto en tu frustración. ARISTÓTELES: ¿Qué me frustra? YOGANANDA: Comenzaste con un deseo, era originalmente bueno, tu deseo era conocer al Padre. Luego lo olvidaste y lo cambiaste por deseos pequeños y mezquinos. Sufriste y tu alma llora. ARISTÓTELES: [Llorando cae a los pies de Yogananda]. He causado todo el mal, he roto con mi maestro y he abjurado de mi origen. Fui tentado y acepté la tentación. ¿Cuánto sufrimiento necesito para redimirme? YOGANANDA: Ninguno, es el sufrimiento lo que te impide la redención. Naciste para ser otra cosa, pero abandonaste al Padre ¿Qué sufrimiento puede ser peor? ARISTÓTELES: Sé que rompí con la tradición, con los sabios y con los dioses. Aplasté mi intuición y fui para el lado contrario. He hecho mucho daño. Sabía que mis pensamientos y mis escritos causarían un daño aún mayor en el futuro, más rompí con el orden divino, y negándolo potencié mis investigaciones sobre el mundo material. YOGANANDA: Tu caso es el de los filósofos, la diferencia con los demás no es la inteligencia ni la capacidad de especulación, es que se condenan voluntariamente. ARISTÓTELES: ¿No tengo salvación? YOGANANDA: Mientras sigas creyendo que el mundo material es la realidad no te salvarás nunca. ARISTÓTELES: ¿Qué he hecho? [Desesperado tiene la visión de su vida, de su obra, de las proyecciones que ésta ha tenido en la historia del pensamiento]. YOGANANDA: Una ilusión. [El escenario griego donde se desarrolla la escena comienza a quemarse, y se esfuma la ilusión de su consistencia, quedando reducido a cenizas de papel quemado. Mientras Aristóteles llora desconsolado lo rodean Haydée, Mataji y La Madre Divina, lo envuelven en su energía y lo llevan al fuego de la purificación donde olvidará todo y permanecerá congelado largo tiempo]. 57 EPILOGO LA PITONISA DE DELFOS Delfos es una antigua ciudad de Grecia, emplazamiento del famoso oráculo del dios Apolo, situada en la ladera suroccidental del monte Parnaso, en la región de Fócida, a 9,5 km del golfo de Corinto. Considerada por los antiguos griegos el centro de la tierra, Delfos fue sede del oráculo de la diosa de la tierra Gaya. Según la leyenda, Apolo derrotó a la monstruosa serpiente Pitón, que custodiaba a Gaya y la expulsó del santuario, el cual después compartió con el dios Dionisio. Los sacerdotes délficos desarrollaron un complicado ritual, centrado en la sacerdotisa principal llamada Pitia. Sus manifestaciones eran consideradas las palabras de Apolo y el oráculo era consultado tanto por ciudadanos particulares como por oficiales públicos. El camino sagrado al templo estaba alineado con ricas casas construidas con las ofrendas dadas por las ciudades-estado griegas. Presenta la imagen de una diosa, que se manifiesta como una estatua viviente con varios brazos dorados en movimiento constante, a través de los cuales emite una fuerte energía. YOGANANDA: ¿Sabes porqué te invocamos? PITONISA: Para purificar la oscuridad de aquellos que me invocaron antes. YOGANANDA: ¿Cuánto tiempo hace que estás sumida en la oscuridad? PITONISA: Hace demasiados siglos quedé envuelta en las ambiciones de poder de los hombres, en su deseo insano de destrucción y sometimiento de los pueblos. YUKTESWAR: ¿Cómo podemos ayudarte a salir de esa oscuridad? PITONISA: Cargo con los incalculables pactos realizados, y solo es posible salir de la oscuridad a través de la gracia purificadora de todos los maestros. A medida que cada uno de los dioses vayan despertando, la conciencia pura se irá haciendo presente y modificando las vibraciones no sólo de esta cultura, sino también de la civilización actual, porque las violencias y las guerras del presente provienen de las invocaciones oscuras del pasado. A medida que la purificación vaya operando 58 se irá disolviendo la oscuridad del plano humano, expresada en ese fragmentado y divido mundo social, cultural y religioso. VIVEKANANDA: ¿Crees que el pueblo griego terminará superando el plano en el que actualmente se encuentra sumido en esa oscuridad? PITONISA: Nuestra cultura quedó sometida a esos poderes, pero en la purificación se irán liberando de los mismos. AUROBINDO: Tu pueblo, prisionero de las invocaciones, deberá trabajar internamente su propia oscuridad. PITONISA: La oscuridad del pueblo es la que nosotros invocamos con la magia. A medida que lo hacíamos iban surgiendo canales de poder a través de los cuales se manifestaban las jerarquías de la oscuridad, luego representadas por símbolos. Y así quedamos encadenados por una gran cadena construida a través de los siglos. En los últimos diecisiete siglos esta cadena de poder fue aumentando y se incrementaron las matanzas, fueron batallas de la oscuridad contra la oscuridad, bajo la apariencia de lo bueno contra lo malo. SIVANANDA: Volviendo a tu época, ¿rescatas alguna dimensión mística de los devotos que pudieron seguir un camino de purificación? PITONISA: El mío es sólo un pueblo de ambiciones de riqueza a costa de la miseria de los otros. Los medios han sido la fuerza física, la hechicería, la magia, la pasión. Todo es muy oscuro. CHIDANANDA: ¿Entonces el estado de ese pueblo era de una enorme densidad? PITONISA: El estado de oscuridad los fue llevando cada vez más a pactar para lograr fuerzas más intensas de poder. Se generó un escenario donde las jerarquías demoníacas combatían entre sí, usando a los hombres para sus propósitos de dominio. CHIDANANDA: ¿Alguna vez hubo un discernimiento real sobre esas batallas? PITONISA: Era imposible porque fueron pactos muy profundos con los demonios. BUDA: ¿Quiénes eran los sabios de esa época? PITONISA: Hubo algunos sabios como pequeñas estatuas de luz, que permanecieron escondidos hasta que fueron tapados por la oscuridad. También los devotos de los dioses luminosos terminaron sometidos por el poder. 59 BUDA: ¿Porqué lo cuentas? PITONISA: Porque llegó la época para empezar a abrirnos y la oscuridad a purificarse y el pueblo podrá empezar a recorrer el camino del discernimiento, e ir emergiendo de esa cultura de destrucción. Es la hora del retorno de los dioses luminosos que otorgan la sabiduría al pueblo. LA LIBERACIÓN DE LOS DIOSES LUMINOSOS En el centro de una intensa vibración se van manifestando los dioses luminosos, aquellos que por mantenerse fieles al Plan Divino, fueron capturados por la oscuridad. Se va observando como se van liberando de los demonios que los tenían inmovilizados, abriendo canales muy arcaicos. Estos dioses tienen una gran conexión con los Rishis y son guiados en este proceso por Veshashi, un sabio dios, maestro de dioses, completamente luminoso que adquiere una forma bellísima de manifestación. Los dioses entran en contacto con el mandala de maestros, y se va potenciando el estado de vibración abriéndose el canal donde la cultura griega estaba atrapada, disolviéndose los magos y los poderosos que la tenían dominada, y purificándose las consecuencias kármicas de todo el mal producido. En el plano de manifestación puede observarse a La Madre Divina, al Padre, y a Haydée participando junto con los dioses en la liberación de las almas prisioneras de la oscuridad de esa cultura. Los dioses oscuros y los hombres que pactaron apropiándose del poder, van devolviendo a la Gran Conciencia la luz que robaron, y al tomar conciencia de lo que está ocurriendo, en medio de su asombro quedan congelados en los planos astrales. VESHASHI: Los dioses luminosos purificaremos esta cultura, y este será el comienzo de la purificación de toda la humanidad. YUKTESWAR: Esta purificación será lograda. 60 PROLOGO. YOGANANDA EXPLICA EN MUNDO DE LOS HOMBRES Y DE LOS DIOSES GRIEGOS............................................................................................. 5 ESQUILO......................................................................................................................... 7 HOMERO .......................................................................................................................10 HESIODO .......................................................................................................................14 AQUILES........................................................................................................................16 ULISES ...........................................................................................................................18 AGAMENÓN..................................................................................................................20 EDIPO .............................................................................................................................21 ZEUS ...............................................................................................................................22 APOLO ...........................................................................................................................25 DIONISOS ......................................................................................................................27 PALAS ATENEA ...........................................................................................................29 ORFEO ...........................................................................................................................30 HERMES ........................................................................................................................33 EL HADES......................................................................................................................34 EL OLIMPO ...................................................................................................................35 EL RÍO LETEO..............................................................................................................36 EL PARTENÓN Y SU ARQUITECTO FIDI ...............................................................37 ANAXIMANDRO...........................................................................................................39 PITÁGORAS ..................................................................................................................41 HERÁCLITO..................................................................................................................43 PARMÉNIDES ...............................................................................................................44 SÓCRATES ....................................................................................................................46 PLATÓN .........................................................................................................................52 ARISTÓTELES ..............................................................................................................60 EPÍLOGO. LA PITONISA DE DELFOS......................................................................68 61 62