Mujeres trabajan más que los hombres y les pagan menos

COLUMNAS DE OPINION
Mujeres trabajan más que los hombres y les
pagan menos
POR: PAOLA ROLDÁN
Tradicionalmente ha existido en nuestra sociedad una marcada división del rol de los
padres al interior del hogar, en la cual lo doméstico incluido el cuidado de niños, adultos
mayores y discapacitados se considera tarea de la mujer, mientras que el hombre es visto
como el proveedor de los recursos económicos.
Esto llevó a que durante muchos años las mujeres se dedicaran a las tareas domésticas y
dejaran de lado la posibilidad de capacitarse e insertarse en el mercado laboral. Si bien,
actualmente esta situación ha cambiado y las mujeres hoy participan cada vez con más
frecuencia en el mercado laboral, hay varios aspectos preocupantes.
Por un lado, para muchas mujeres el tener una actividad económica remunerada no
significa estar exentas de realizar la mayoría de labores domésticas en sus hogares
(incluidas las de cuidado), lo cual ha llevado a que las mujeres deban someterse
diariamente a extensas jornadas laborales en detrimento de su propio cuidado y bienestar.
Por otro lado, a pesar de contar con jornadas laborales generalmente mayores que los
hombres, la brecha salarial entre hombres y mujeres es significativa. Es decir, las mujeres
trabajan más horas que los hombres y ganan menos.
En este sentido, las políticas públicas no solo deben reconocer la importancia del trabajo
que las mujeres realizan en el hogar. Es necesario crear condiciones para la igualdad
salarial por género, así como ayudar a las mujeres a conciliar la vida familiar y profesional,
para ello se requiere incrementar la oferta institucional de servicios de cuidado, pues
actualmente es insuficiente.
Las familias necesitan lugares que cuiden de manera adecuada y a un costo que esté a su
alcance a los miembros del hogar que requieren especial atención. Una mayor oferta
institucional para este fin, y sensibilización a la sociedad acerca de las responsabilidades
en el hogar de cada uno de sus miembros, de manera que se logre una distribución
equitativa de las cargas, hará posible que las mujeres cuenten con más tiempo de calidad
para sí mismas y para los suyos.
*Profesor del IEEC, Uninorte.
Las opiniones expresadas aquí son responsabilidad exclusiva de los autores y no
comprometen la posición de la Universidad ni de El Heraldo.