Sábado 22 noviembre 2014 Expansión 27 ECONOMÍA / POLÍTICA OPINIÓN Juan Pedro Marín Arrese ay que felicitarse de que la formación Podemos, llamada según las encuestas a jugar un papel político destacado, haya decidido dotarse de un programa económico. Se echaba en falta. Sobre todo cuando su líder aspira abiertamente a transformar el país desde responsabilidades de gobierno. Que no es poco. Con independencia del ideario, toda oferta electoral debe aclarar a los ciudadanos cómo se piensa enfocar la actual situación, cuya gradual mejoría afronta todavía retos de tanta magnitud como la reducción del serio desajuste en el mercado de trabajo. Por eso, cobra importancia que Podemos enseñe sus cartas en este ámbito. Tampoco resulta baladí el gesto para la estabilidad de nuestra economía. Una fuerza emergente de tal capacidad de convocatoria no pasa desapercibida para los inversores. Podemos nos promete un programa sometido a la más amplia discusión de los expertos. Sin duda. Pero cabe temer que prevalezcan las tesis avanzadas hasta ahora, convenientemente limadas sus aristas para re- H sultar mínimamente vendibles. Cierto que no faltan quienes están dispuestos a comprar cualquier cosa, por utópica que resulte. Pero hará falta algo más que un simple proceso de edulcoración. La plataforma económica de Podemos no mueve de momento a la tranquilidad. Un factor que, de no corregirse, corre el riesgo de afectar a nuestro crédito país. Algo serio. Baste recordar su reiterado empeño en auditar la deuda como paso previo a una reestructuración. Puede bien ahorrarse la molestia del escrutinio, palmariamente inútil al tratarse de obligaciones contraídas por el Tesoro sin una adscripción particular a gastos concretos. Pero bastaría su anuncio para que surja el fantasma del impago, arrastrando en su caída al endeudamiento exterior privado. Un roto de alcance inconmensurable. Que no piensen sus dirigentes que el daño se ceñiría a los especuladores foráneos. Los pequeños ahorradores domésticos se verían arruinados, al invertir los fondos de pensiones y de inversión masivamente en deuda. Por eso, cuanto an- Podemos no mueve a la traquilidad, y eso puede afectar seriamente a nuestro crédito país tes entierren tan peregrina idea y se limiten a exigir al BCE que compre soberanos, tanto mejor le irá a nuestra prima de riesgo. Factor clave de nuestra recuperación por más que algunos la consideren como un subproducto del capitalismo rapaz. Como no cabe imaginar que nadie desee transformar el país en un erial, todavía cabe confiar en una rectificación en toda regla por remota que parezca. Claro que resulta difícil renunciar al empeño de poner la casa patas arriba cuando las velas de este movimiento se hinchan con denuncias de sal gorda a la casta política y cantos de sirena en materia social. Puro humo pues, si falta dinero, los compromisos se convierten en mera calderilla. Pensemos, por ejemplo, en la renta garantizada vagamente inspirada en el wage credit británico. Con la fundamental diferencia de que este último mecanismo se limita a complementar las rentas del trabajo, evitando desincentivar el empleo. Qué duda cabe que existen amplias necesidades sociales. Pero la mejor forma de atenderlas consiste en generar puestos de trabajo y una mayor renta, en lugar de eliminar todo atisbo de competitividad. Que se opte por incrementar los impuestos, resulta una opción legítima. Pero que nadie piense que elevando la fis- Efe Ni podemos ni debemos Los dirigentes de Podemos Juan Carlos Monedero, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón. calidad de los pudientes se obtendrá la cuadratura del círculo. Como siempre, el pato lo pagarían las clases medias y las rentas del trabajo, penalizando todavía más al empleo. Desde luego, la lucha contra el fraude fiscal bien poco aportará si se abre un boquete en las cuentas. Algunas promesas como el cierre del grifo a la educación concertada constituyen mero wishful thinking ante la incapacidad de la enseñanza pública para acoger al número de alumnos que previsiblemente optarían por migrar. Otras rezuman un tufo intervencionista, como las nada veladas amenazas de nacionalización de banca o eléctricas que sólo pueden provocar un elevado daño a millones de pequeños accionistas, un agujero en las arcas del Estado y una vuelta a los tiempos de la autarquía. Si de verdad se apuesta por estas metas, lo más consecuente sería promover una salida del euro, y si me apuran de la UE, antes incluso que de la estructura militar de la OTAN. Aunque en las urnas no prevalezcan tales ocurrencias, bastaría un sondeo otorgando a Podemos un lugar destacado al acercarse las elecciones para que nuestra economía acuse el golpe. Que nadie albergue duda alguna que los inversores no se cruzarán de brazos de acechar el peligro. Ni podemos ni debemos permitirnos tales alegrías y menos con las cosas de comer. Economista 5 días Vuelo + Hotel desde 850€ Precio por persona, válido para determinadas fechas de enero a marzo 2015. Incluye: vuelos (desde Madrid), tasas aéreas y 3 noches en hotel turista. Gastos de gestión (9€ por reserva) no incluidos. Plazas limitadas. Consulta condiciones. (1) Descuento ya aplicado en el precio publicado. Reservando un mes antes de la fecha de salida. Gastos de gestión financiados 9€. Intereses subvencionados por Viajes El Corte Inglés S.A. Financiación sujeta a la aprobación de Financiera El Corte Inglés E.F.C. S.A. Recibo mínimo de 30€. Ejemplos a 10 meses sin intereses: Importe: 300€, TIN 0%, TAE 6,69%, gastos de gestión 9€, importe total adeudado 309€. Importe: 1.000€, TIN 0%, TAE 1,98%, gastos de gestión 9€, importe total adeudado 1.009€. C.I.C.MA 59, HERMOSILLA 112 – MADRID