La evaluación sumativa - Salesianos Las Palmas

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La evaluación
sumativa
La evaluación sumativa o final puede convertirse en una opción adecuada
para ayudar al alumno en su aprendizaje, haciéndole que analice y
reflexione el proceso que ha llevado a cabo, siendo consciente de esta
forma de los errores cometidos y de las posibles soluciones.
Definición y tareas de la evaluación sumativa
Al finalizar un proceso de Enseñanza–Aprendizaje, se debe llevar a cabo un proceso
de evaluación, que nos permita valorar el progreso que se ha dado en el
aprendizaje de cada alumno/a y del grupo en su conjunto.
Aquí hablaremos concretamente de la evaluación sumativa, que es aquella que
tiene la estructura de un balance, realizada después de un período de aprendizaje
en la finalización de un programa o curso. Este tipo de evaluación tiene
básicamente dos funciones, una es de acreditación social y otra es educativa, que
es la más importante, es decir, pretende servir para tomar decisiones que
favorezcan determinados objetivos que los alumnos/as no han alcanzado o que han
alcanzado y deben progresar en su aprendizaje. Lo que se busca, en definitiva,
es que el alumno/a se implique en el aprendizaje, logrando que pueda
hacerse y se haga responsable de su propio aprendizaje.
Para conseguir que la evaluación sumativa tenga una función educativa tanto el
alumnado como el profesorado deben llevar a cabo una serie de tareas:
Alumnado
Tienen que saber con antelación qué se espera de ellos: cómo deben realizarla y
con qué objetivos o finalidad. Concretamente para esta evaluación necesita:
Tener una idea clara del aprendizaje que ha realizado durante la
formación.
Š
Š
Planificar el estudio de aspectos no aprendidos o la revisión de errores y
dificultades, mediante la organización y previsión de materiales, tareas y
ayudas necesarias.
Para lograr esto conviene que:
Š
Sepa qué tipo de actividad se le va a pedir para aplicar los aprendizajes
realizados.
Š
Tenga tiempo para preparar adecuadamente dicha “prueba”.
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En definitiva la finalidad de la evaluación sumativa con los alumnos es que ellos
evalúen su grado de aprendizaje y puedan realizar tareas diferentes y,
progresivamente, autónomas para mejorarlo.
Profesorado
Deben conocer el proceso de aprendizaje que ha seguido el alumnado para
orientarle y conseguir que el alumno/a pueda implicarse en la realización de las
tareas. Concretamente el profesor en esta evaluación debe encargarse de:
Š
Š
Lograr que, al finalizar la secuencia formativa, el alumno/a tenga la posibilidad
y la orientación necesaria para realizar la revisión y detección de dificultades.
Determinar el tipo de prueba aplicativa que va a proponer (examen,
demostración de hipótesis, estudio de caso, etc.).
Š
Proceder, tras la realización de la prueba, a la regulación final del proceso
(recuperación/ampliación) y a la calificación del alumno según su grado de
aprendizaje.
Algunos instrumentos de evaluación sumativa.
En la evaluación sumativa pueden
expondremos algunos de ellos:
emplearse
diversos
instrumentos,
aquí
Æ Examen: este es el instrumento más conocido y utilizado. En el caso de
emplear esta opción, es aconsejable no limitarse a dar las notas una vez
realizada la prueba, si no que se puede plantear actividades como:
Š
Corrección en pequeño grupo a partir de los criterios compartidos, con la
revisión final del profesor.
Š
Partiendo de la corrección del profesor/a, pedir a cada alumno/a que
puntúe sus respuestas.
Š
Proporcionar al alumno un listado de posibles causas de un error y pedirle
que analicen cuales creen que han sido las causa de los errores cometidos
en cada cuestión del examen.
Æ Guión de estudio: se trata de un listado de los principales contenidos
conceptuales estudiados, de manera que el alumnado pueda resumir los
conceptos estudiados y en caso de no poder hacerlo sepa cuales son los
contenidos que debe repasar. Además de los contenidos se puede añadir
información sobre tipos de ejercicios, tiempo, materiales de los que dispone.
Æ Mapa conceptual: pedirle al alumnado que represente gráficamente, de
manera esquemática, las ideas o contenidos.
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Æ Estudio de caso: plantearles un caso para su estudio o un problema para
resolver.
Æ Dossier/artículo: sobre un tema concreto relacionado con la materia o
contenidos tratados.
Æ Investigación: sobre algún tema y presentación de un informe con los
resultados obtenidos.
En relación al uso de instrumentos, también se debe tener en cuenta la importancia
de la implicación del alumnado en el proceso de revisión sumativa y detección de
dificultades; por lo que el profesorado debe plantearse los diferentes grados de
autonomía. En principio el alumno/a suele ser dependiente en su aprendizaje y
tienden a depositar la responsabilidad y el control en el profesorado, pero poco a
poco debe pasar de forma gradual al alumnado.
Calificación y decisiones
El profesorado debe valorar en relación al grado de aprendizaje del alumno/a en
relación a los objetivos y la capacidad o competencias, teniendo en cuenta la
repercusión de la decisión respecto a las expectativas y a la propia imagen del
alumno/a.
En definitiva, el proceso de evaluación, no puede desligarse de la toma de
decisiones. Esto debe tenerse en cuenta desde tras puntos de vista el de las
decisiones del profesorado, el de las repercusiones de estas decisiones en el
alumnado y el de la perspectiva del protagonismo del alumnado en su propia
evaluación, ya que esto es indispensable para favorecer el desarrollo de su
autonomía de aprendizaje y de su capacidad de aprender a aprender, algo capital
en todo proceso educativo.
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