Capitulo 4 La coordinación de la estrategia empresarial y las prácticas de gestión Muy bien. Después de toda la información del capitulo 2 y los ejemplos del capitulo 3, usted se ha convencido que implementar practicas de gestión de alto rendimiento es importante para el éxito competitivo de su empresa y cree en la relación entre la forma en que se gestiona el personal y los beneficios de la empresa. ¿Que hacer entonces? Como ya se ha dejado constancia, «si hay algo que pueda evidenciar el efecto de una buena practica, probablemente sea la "arquitectura" de un sistema 1." Pero el diseño de un sistema de trabajo de alto rendimiento debe sobrepasar las cuestiones de filosofía, arquitectura o disposición mental, por mas importantes que sean, para llegar a las cuestiones concretas sobre lo que debe hacerse y como. Aquí esbozaremos un proceso de diagnostico bastante directo que se puede usar para tratar este tema de la implementación. El marco del diagnostico se basa en la idea de la coordinación, es decir, que una organización realiza unas determinadas acciones para gestionar las relaciones de empleo y que estas practicas deben estar, en primer lugar, coordinadas entre si y en segundo lugar, deben ser coherentes desde el punto de vista externo, en el sentido de que los procedimientos de la organización producen los comportamientos y las capacitaciones necesarias para competir con éxito en su mercado. Es más fácil describir esta coordinación o alineación que lograrla, porque pocas son las empresas que han desarrollado un conjunto de prácticas coherentes. Además, cuando una empresa reconoce ejemplos de mala coordinación, la reacción mas frecuente es no estar dispuesta a hacer cambios (o al menos muchos o significativos). Por ejemplo, de todas las empresas que hablan de la implementación de equipos, solo una pequeña parte aplican un sistema de retribución por equipos y se alejan del sistema predominante de valoración y retribución individual. Solo algunas permiten que los equipos contraten a sus miembros, organicen su propio trabajo, tomen decisiones presupuestarias o de inversión y utilicen las evaluaciones entre compañeros como parte del proceso de gestión. Las empresas que contratan, retribuyen, asignan tareas y recursos y forman únicamente sobre la base del individuo tienen pocas posibilidades de crear una cultura de equipo o equipos que se autodirijan de forma efectiva. Aunque muchas empresas hablan de crear confianza, dar poder de decisión a los empleados y delegar responsabilidades, son muy pocas las que evalúan todas sus practicas considerando si son coherentes con estas ideas o las que están dispuestas a cambiar aquellas practicas que no lo sean. Una organización que actúa de forma coherente con sus valores y su cultura es AES, descrita en el capitulo anterior. En 1992 la AES Corporation tuvo que hacer frente a una prueba muy severa para una cultura que destaca la confianza, la descentralización y la delegación de responsabilidad como valores propios. Algunos de sus empleados de la planta de Shady Point en Oklahoma falsificaron algunos de los exámenes requeridos por la administración de protección de los medio ambientes relativos al vertido de aguas servidas. Después de hacerse publico este problema, el precio de las acciones de AES bajo de 26,50 dólares a 16,50 dólares, perdiéndose asi unos 400 millones de dólares para los accionistas. Dado que la empresa considera la integridad como uno de sus valores centrales y la preocupación por el medio ambiente como otro valor fundamental, esta violación de la ley también era una violación de la cultura de la empresa. Como respuesta, el personal de Shady Point decidió reorganizar la planta de forma de prevenir una repetición. Agregaron niveles de supervisión, asi como funciones y departamentos específicos, que aseguraran el cumplimiento de las reglas de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA). En otras palabras, empezaron a parecerse a la tipita empresa de servicios. Estas soluciones no estaban de acuerdo con el punto de vista del director ejecutivo, el Sr. Dennis Bakke, sobre la forma de resolver el problema. La cultura de AES mantiene firmemente que los sistemas que afectan al cien por cien del personal no se cambian o implementan para hacer frente al dos por ciento de empleados o situaciones que crean problemas. ¿Cual seria la reacción de Bakke? Había abogado con fuerza por la descentralización de la empresa y la autonomía de cada fábrica, pero ahora había una planta que había decidido aplicar un sistema de gestión que no concordaba con las creencias de Bakke sobre la eliminación de la burocracia y la implantación de sistemas que favorecieran la confianza. Cuando tuvimos los problemas en el '92, la gente de la planta decidió descartar todo el sistema. Volvieron a los supervisores de turnos, al departamento medioambiental, al supercomite de medio ambiente y al director de planta adjunto. Estaban tan asustados que se pasaron a una mentalidad de control total. Los abogados los acosaban por todos lados y ellos respondieron prácticamente despidiéndome. Me dijeron «Por favor no vuelva por la planta». He de reconocer que me dolió, porque yo soy dueño de esta empresa (al menos en parte). El hecho de casi perder mi trabajo global para AES hizo que me preocupara menos por el rechazo de una planta, pero fue una verdadera prueba de si retrocedíamos a la centralización o seguíamos adelante con la descentralización. Decidimos esto último. No puse el pie en la fabrica durante todo un ano, hasta que me llamaron y me dijeron «Nos gustaría que volviera, querríamos reingresar en la compañía». Fue una época sorprendente, pero ilustro un par de cuestiones. Una fue que éramos serios cuando hablábamos de descentralización y autonomía. La otra, que yo no tenia razón al decir que los principios eran bastante fragiles2.» Justamente porque es difícil, las empresas no siempre actúan de forma coherente con los principios que defienden. Piense como reaccionaria usted si un grupo de empleados causara un problema que, al menos temporalmente, le significara a su empresa una perdida de cientos de millones en valor de mercado. ¿Se mantendría usted fiel a los valores centrales, a la cultura y al conjunto de prácticas de gestión aunque aparentemente hubiesen fracasado? Muchos altos ejecutivos creen que la descentralización y la participación están muy bien para aquellos que están mas abajo en la empresa, pero no para ellos. Muchos directivos creen que delegar y anteponer a las personas está bien mientras las cosas vayan bien, pero cuando hay una crisis centralizan el control y reaccionan de forma brusca. Es importante seguir una línea y ser coherente en un cierto momento, pero probablemente sea igual de importante mantener esa consistencia con el tiempo. Veamos otro ejemplo, también extraído de AES. El mundo de la producción de energía eléctrica esta cambiando rápidamente. En muchos estados de Estados Unidos, esta industria que antes estaba regulada se enfrenta a una competencia cada vez mayor, con lo que potencialmente se interrumpe la práctica de vender energía con contratos a largo plazo. Muchos piases están privatizando los sistemas de suministro de energía y construyendo plantas, a veces en empresas conjuntas. La tecnología de la producción de energía eléctrica también sigue evolucionando, del mismo modo que los mercados financieros y las habilidades necesarias para tener éxito en los negocios. En otras palabras, se trata de un negocio dinámico que se enfrenta a rápidos cambios, algo que también sucede en muchos negocios del mundo de hoy. En un entorno asi, las empresas que son verdaderamente emprendedoras y sensibles a los cambios tienen una ventaja comparativa, especial-mente si sus empleados estan motivados y son multidisciplinarios. Por lo tanto, muchas organizaciones (incluso AES) hablan de crear una cultura empresarial, de reducir el tiempo necesario para tomar decisiones y ponerlas en práctica. La diferencia radica no en decirlo sino en tener la habilidad de aplicar de verdad las técnicas que permitan alcanzar unas metas tan altas. En AES, algunas acciones especificas que la empresa Ileva a cabo (y algunas que no) la ayudan a conseguir un comportamiento empresarial, rápido y habilidoso. En primer lugar, casi no tiene funciones departamentales centralizadas; por ejemplo, no tiene un departamento formal de compras ni de recursos humanos. Al preguntar a los directivos de AES sobre el tema y sobre el coste potencial en términos de perdida de especialización, me contestaron que la especialización tiene un precio. Después de haber negociado contratos de carbón de forma repetida, por ejemplo, uno se acostumbra al proceso y tiende a hacer cosas y a pensarlas de una determinada manera, pero esto es costoso en un entorno que cambia de forma constan-te. Por supuesto que se necesita mas tiempo para que la gente aprenda continuamente como hacer cosas nuevas que nunca han hecho antes, un proceso que en AES incluye hacer muchas preguntas y hablar con otras personas de la organización. Pero el resultado de este proceso aparentemente ineficaz es que más gente pueda hacer mas cosas, un resultado que esta de acuerdo con la meta de Dennis Bakke de que todos los empleados piensen como gente de empresa. Además, al lograr que otras personas realicen nuevas tareas, estos individuos tienen la oportunidad de descubrir enfoques innovadores, algo que una persona que realiza una misma acción por enésima vez tiene menos posibilidades de hacer. La ausencia de un numeroso personal especializado también le permite a AES responder a las oportunidades del mercado más rápidamente. En segundo lugar, la corporación no Ileva a cabo una planificación ni un análisis estratégico muy formales, ni tampoco requiere aprobación previa de la alta dirección antes de que una determinada acción se realice. AES alienta la iniciativa individual a pesar de actuar en un entorno muy reglamenta-do, plagado de abogados y con gran intensidad de capital como es el del desarrollo y funcionamiento de plantas de energía eléctrica. Por ejemplo, un empleado que había visto una oportunidad para la empresa en América del Sur paso un ano, por iniciativa propia, tratando de negociar un acuerdo. Finalmente su jefe en la casa central le reclamo que volviera al tiempo que le comentaba si no era hora de darse por vencido. La respuesta fue: «Déme dos meses mas y si no logro resultados, volveré». En ese plazo, finalmente pudo negociar la compra de una central energética para que AES la gestionara. Este ejemplo no es único, como lo demuestra este pasaje extraído del informe anual de AES de 1996: Tal vez el logro mas sorprendente del ano sucedió cuando Scott Gardner, quien llego a nosotros hace unos anos procedente del Darmouth College, paso el verano previo a su vuelta a la universidad para sus estudios de pos-grado preparando, presentando y finalmente ganando una licitación para una instalacion de 288 megawatios en Mt. Stuart, Australia. Este proyecto reafirma nuestra creencia en la diferencia que significa una persona dedicada, creativa y responsable.3 ¿Cuantas empresas conoce usted que permitirían que alguien se fuera por su cuenta, pero cobrando su sueldo y usando todos los recursos de la empresa, a averiguar si es cierta una corazonada sobre una posibilidad comercial? ¿Cuantas empresas tendrían la paciencia de esperar mas de un ano para la fructificación del proyecto? ¿Y cuantas empresas aceptarían que un empleado relativamente joven se encargara del proyecto sin revisarlo y planificarlo exhaustivamente antes de aprobarlo? Lo que es mas, ^la empresa para la que usted trabaja haría algo asi? La trayectoria de AES indica que ha tornado la decisión correcta al favorecer la descentraliza ción y estimular la iniciativa, pero no muchas empresas aplicarían las medidas que acabamos de describir u otras similares para alcanzar un comportamiento y un aprendizaje innovadores y creativos. Muchas empresas hablan de iniciativa y capacidad aunque utilizan prácticas de gestión que destruyen el conocimiento y la perspectiva empresarial. Por otro lado, saber que se ha de hacer para lograr beneficios a través de la gente es insuficiente. He visto muchos directivos que, enfrentados a casos en los que las practicas aplicadas no eran coherentes con lo que se requería para lograr el comportamiento adecuado, seguían encontrando razones para continuar aplicándolas. A veces un determinado estamento se opone al cambio y la alta dirección de la empresa no contradice dicha actitud. En otros casos, prácticas que deberían cambiarse se han institucionalizado y se dan tanto por supuesto que hacer las cosas de forma diferente parece imposible. Casi siempre, los cambios requieren demasiado esfuerzo, un esfuerzo que quita tiempo y atención a otros problemas empresariales más acuciantes. Basado en mis experiencias con empresas que se enfrentaban a estas situaciones, he desarrollado lo que he dado en llamar «la teoría religiosa de la gestión». Una empresa que busque especializarse en una actividad pero que no este dispuesta a seleccionar, contratar, evaluar o medir en base a dicha actividad solo lograra su meta a través de alguna forma de intervención divina. Muchas empresas desean mejorar sin tener que cambiar los sistemas que dirigen y afectan el comportamiento, y esta miopía esta muy extendida. Las politicas y las prácticas tienen vidas propias y poderosos elementos constitutivos que respaldan el status quo. Muchos directivos quieren que las cosas cambien, pero solo si ellos mismos no tienen que hacer muchas cosas diferentes. Por lo tanto, queda usted advertido. Hacer el ejercicio enunciado mas abajo para ver hasta donde las practicas de su empresa están en línea con lo que se necesita para tener éxito dará resultado solo si se aplican el discernimiento y la comprensión obtenidos. Comprender pero no actuar no produce ningún resultado. Y otra advertencia mas: no solo será difícil cambiar las practicas, tampoco todos los directivos (en especial los profesionales de los recursos humanos) serán conscientes del alcance de la incoherencia de las practicas. Los directivos muy a menudo hablan mucho sobre alineación, coherencia o coordinación, pero no analizan el comportamiento. Consideremos la siguiente información. Como parte de un proyecto para el ejercito de Estados Unidos sobre la forma de cambiar sus técnicas de aprovisionamiento, Beth Benjamin y algunos de sus colegas de la Corporation RAND entrevistaron unas cuantas grandes empresas para averiguar lo que habían aprendido sobre cambios y lo que habían hecho para ser mas eficaces y productivas. He aquí lo que descubrieron: En cada una de las empresas que visitamos, la gente del departamento de recursos humanos intento explicarnos con detalle la importancia de la coordinación de prácticas. A continuación nos informaron sobre las practicas que ellos aplicaban, y ya se veía que no estaban coordinadas. Al hacer notar este desacuerdo, nos proporcionaron complicadas explicaciones sobre por que las practicas eran asi. En algunos casos, simplemente no aceptaron que hubiera descoordinación. En otros, admitieron que había problemas pero justificaron las practicas por tradición o cultura de empresa. En la mayoría de los casos, había «razones practicas y administrativas» que bloqueaban el cambio [...]. Los directivos se creen que porque reconocen la necesidad de alinear o coordinar las practicas y lo ponen por escrito, o porque realizan uno o dos cambios en un determinado momento, de pronto la coordinación ya se ha logrado.4 Es como si creer en la coordinación y desearla fuera suficiente para que por arte de magia las prácticas se volvieran coherentes con la gestión interna y con todas aquellas características necesarias para producir los comportamientos cruciales en la implementación de la estrategia de la empresa. Lamentablemente, los buenos deseos no sustituyen a la realidad y para producir diferencias en la forma que opera la empresa, no hay otra alternativa que llevar a cabo los cambios necesarios. Cuando las cosas van mal y los resultados sufren, a veces las empresas reconocen la importancia de su personal y la necesidad de coordinar sus prácticas de gestión. Los fallos a la hora de implementar una estrategia y los problemas con la calidad, el servicio a los clientes y la productividad son mas visibles cuando una empresa esta en dificultades que cuando esta creciendo y en apariencia progresando. Pero de hecho, prestar atención a la coordinación de las practicas de gestión entre si y con la estrategia básica de la organización es como mínimo tan necesario en tiempos de crecimiento como cuando la empresa se enfrenta a algún difícil reto competitivo. De otro modo, las organizaciones corren el riesgo de desarrollar problemas que pueden reaparecer mas tarde. Consideremos, por ejemplo, el caso de una de las seis grandes firmas contables del país. En la década de los noventa, esta firma en particular cambio su cultura de empresa y parte de sus incentivos con la meta de construir una mentalidad de crecimiento de las grandes ventas. Al contratar negocios mas importantes en decisiones de promoción y retribución, las ventas crecieron rápidamente, pero la empresa fracaso a la hora hacer algo con respecto a su infraestructura laboral. En un momento en el que simplemente dar el servicio que se había vendido significaba un gran reto, poca o ninguna atención se presto al desarrollo del capital intelectual de la empresa, de nuevos conocimientos o nuevos productos. Peor aun, se presto poca atención sistemática a la captación de nuevo personal, a su formación y dirección. ¿La razón? Simplemente no había tiempo. Los resultados de esta falta de atención eran predecibles. El personal se encontró sobrecargado de trabajo y la rotación se disparo. El sistema retributivo se veía como poco equitativo. La mayor carga de trabajo hizo que los empleados estuvieran mas sensibilizados con respecto a sus tareas y su retribución, sobre todo al ver que los mayores beneficios resultantes de estas grandes ventas iban a parar en general a los socios de la empresa y no a los muchos subalternos que se encargaban de hacer una gran parte del trabajo. Para complicar mas las cosas, el mercado laboral de las consultorías contables era muy rígido, porque las firmas de la competencia tan bien tenían mucho trabajo. Esto quería decir que irse de la empresa era fácil, porque había abundantes oportunidades fuera de ella. Mientras escribo todo esto, los resultados de este experimento que ignora los temas de personal y trata de funcionar con un sistema descoordinado todavía no se conocen en su totalidad. Pero las consecuencias negativas ya han comenzado a aparecer y la capacidad de la empresa de corregir sus problemas se ve limitada por sus hábitos de gestión que no incluyen un enfoque basado en la consideración del personal. Este ejemplo ilustra un punto importante: la coordinación de las prácticas de gestión es frecuentemente pasada por alto en las primeras etapas de un plan de crecimiento. Como resultado, aparecen problemas que recortan severamente la capacidad de la empresa de lograr su verdadero potencial. Es mucho más fácil y menos costoso tratar de prevenir estos tipos de problemas que solucionarlos cuando ya se tienen encima. DIAGNOSTICO DE LA COORDINACION El proceso de diagnostico comienza con la consideración de la estrategia particular de la empresa y las capacidades características que pretende desarrollar. La mayoría de las empresas tienen un conocimiento razonable de su entorno y de lo que será necesario para tener éxito en el. El siguiente paso implica especificar aquellas capacidades o comportamientos clave para poder poner en práctica la estrategia y tener éxito en el entorno de la empresa. A continuación, el diagnostico le pide a los directivos que analicen con bastante detenimiento las diferentes practicas de gestión. El paso final es un sencillo control lógico para valorar en que medida estas practicas son internamente coherentes (o sea, la relación lógica entre ellas) asi como externamente coherentes, para asegurarse de que producen las habilidades y comportamientos fundamentales para la implementación efectiva de la estrategia de la empresa. Determinar la estrategia de la empresa o su intención estratégica El primer paso en la coordinación de las prácticas de gestión con la estrategia de la empresa es entender cual es la estrategia. Parece fácil, pero no lo es. En muchas empresas, cuando hago este ejercicio y le pido a la gente que trabaje en grupos, una gran parte del tiempo asignado a los grupos se va en tratar de descubrir cual es la estrategia de la empresa. Esta dificultad la tienen incluso grupos de altos directivos, aunque el problema se agrava si los grupos están formados por una muestra al azar de empleados de la empresa. En parte, este problema aparece porque algunas empresas ven su estrategia como un arma competitiva y son reacias a compartirla ampliamente, un ejemplo del miedo a divulgar información a los empleados discutido en el capitulo 3. Además, son bastantes las empresas que no piensan de forma muy estratégica sobre sus negocios, asi que la poca estrategia que se haya desarrollado no ha sido discutida ni perfilada lo suficiente como para ser conocida. Finalmente, algunas empresas confunden estrategia con una previsión financiera o un plan de financiación. No es ni una cosa ni la otra. La estrategia de una empresa es simplemente un piano de como competirá en su mercado, o sea, una declaración de los valores que la empresa ofrecerá que harán que los clientes la prefieran a la competencia. La pro-puesta de valores puede basarse en el precio, el liderazgo tecnológico, el ser-vicio al cliente o cualquier combinación de estos factores con otros. Una buena estrategia diferencia claramente a una empresa de su competencia y es difícil de copiar. Una mala estrategia hace una peor propuesta de valores y se copia fácilmente. Un ejemplo para ilustrar este punto. Muchas de las aerolíneas norteamericanas decidieron hace un tiempo competir sobre la base del precio y hacerlo eliminando «atenciones» (como las comidas) y poniendo mas asientos. De este modo seguían el modelo de Southwest Airlines, en la creencia de que el éxito de Southwest se debía a su servicio austero: asientos no numerados, comidas no, etcétera. El problema con este enfoque es que cual-quiera puede eliminar comidas. También es facil copiar una bajada voluntaria de precios, pero reducir costes es otra cuestión, por supuesto. Finalmente, copiar la falta de comodidades a bordo de Southwest sin copiar también su puntualidad y su excelente servicio de manipulación de equipa-je era una invitación a que los clientes dejaran de serlo. En rutas internacionales, esta estrategia de ofrecer menos le dio la oportunidad a Virgin Atlantic de ofrecer algo mas en cada categoría de precios (asientos mas grandes, mas atenciones, mejor trato al cliente) y por consiguiente de afianzar su negocio. En el mercado domestico, Alaska Airlines tuvo éxito con una política y una campana publicitaria basadas en la premisa «usted simplemente recibe más». Este libro no es sobre estrategia, asi que dejare el tema aquí. Pero al pensar en la organización de su empresa, es importante tener claro lo que sus clientes quieren, lo que su empresa quiere y lo que se puede ofrecer con una buena relación coste-resultados. También es importante recordar que encontrar alguna manera de ofrecer valores que no sean fácilmente reproducibles puede proporcionar una fuente más duradera de éxito que ofrecer algo que todo el mundo pueda dar. ¿Que habilidades y comportamientos se necesitan para implementar la estrategia? El segundo paso en el proceso de diagnostico requiere responder a la siguiente cuestión: dada nuestra estrategia particular y nuestro enfoque del mercado, que habilidades y comportamientos deberán tener nuestros empleados para aplicar con éxito nuestra estrategia? Una estrategia basada en ciclos rápidos y en ser los primeros en el mercado con nuevos productos o servicios requiere de los empleados un sentido de urgencia en el tiempo y la capacidad de innovar. Si la estrategia contiene algún elemento de servicio al cliente, un personal informado, interesado y comprometido con el servicio parecería ser fundamental. Cuando la base de la estrategia esta formada por costes y precios, la productividad y la ausencia de esfuerzos y recursos estériles son factores esenciales. Escriba en la parte superior de tantas hojas de papel como hagan falta todas las habilidades y todos los comportamientos que se requieren. Serán los factores que encabezaran las columnas de una tabla o una matriz. Al principio, concéntrese en no más de seis o siete comportamientos o capacidades, ya que es difícil concentrarse en mas. Reduzca la lista mas larga de características deseables y busque las dimensiones básicas que son comunes a los comportamientos y las habilidades. Este dispuesto a asignar prioridades: ,;cuales son las habilidades y los comportamientos mas críticos para que la empresa tenga éxito, dada su estrategia? Es importante destacar que las habilidades y los comportamientos dependen de la estrategia. Un servicio en oposición a una estrategia de precios requiere comportamientos y habilidades diferentes; vuele con Singapore Airlines y con United y vera la diferencia. El éxito puede tener diferentes bases. Lo que esta parte del ejercicio de diagnostico debería producir no es una lista genérica de las cualidades deseables en los empleados, sino los comportamientos y las habilidades cruciales para la implementación de la estrategia de la empresa. Refiriéndonos a un ejemplo anterior, la empresa AES, nos encontramos con que se trata de un negocio llevado cada vez mas por abogados.5 Como sabemos, AES desarrolla y gestiona centrales de energía eléctrica en todo el mundo. Su ventaja competitiva radica en su estructura descentralizada y en su mínimo personal corporativo, aspectos que combinados dan a la organización un sentido de actividad empresarial. Una de las metas de Dennis Bakke, su director ejecutivo, es lograr que cada individuo piense como una persona de empresa. La contratación de personal en la empresa es muy importante, y en opinión de muchos que ya están dentro, tal vez la más importante de todas sus actividades. AES sabe claramente las características de un buen empleado y las de uno malo. Una mala captación seria la de «alguien que se queja de forma crónica, que no esta contento, que culpa a los demás, que no se hace responsable de nada, que no es honesto, que no confía. Una captación desafortunada seria la de alguien que necesita instrucciones concretas y espera que se le diga lo que ha de hacer, alguien que no es flexible y que dice 'no es mi trabajo. Debemos notar que estos comportamientos están directamente relacionados con el estilo y la estrategia de la empresa y que no necesariamente serian los mismos en empresas con otros enfoques del mercado de la energía eléctrica. Describir las practicas de gestión de la empresa Para completar las columnas de la matriz o de la tabla hace falta describir lo que hace la empresa para gestionar su personal. Si lo prefiere, use una hoja para cada una de las categorías mencionadas mas abajo, pero si quiere hacer un análisis mas global, puede combinar las categorías con menor detalle en una sola hoja. A continuación haga una lista de lo que hace la empresa con respecto a los siguientes aspectos. 1. Como capta a su personal, las fuentes de captación que utiliza y lo que les promete a los posibles empleados. 2. Como selecciona a los candidatos, incluyendo exámenes, entrevistas y preguntas especiales; como decide a quien contratar. 3. Como paga a sus empleados, incluyendo (a) niveles de retribución y (b) cualquier programa de retribución por incentivos o bonificaciones. 4. Las actividades de formación que respalda directa o indirectamente. 5. Las diferentes salidas profesionales y las actividades que ofrece para desarrollarlas; como identifica y prepara al personal para que asuma más responsabilidades. 6. El grado de especialización y la división del trabajo. 7. La estructura organizativa básica que utiliza para canalizar el trabajo; cuantos niveles tiene y la naturaleza de las unidades básicas de organización 8. La distribución física del centro de trabajo y las comodidades que ofrece. 9. Lo que mide el proceso de valoración y con que frecuencia; quien realiza esta acción. 10. Lo que más se mide y lo que más se comenta en general en la empresa. Debe quedar claro que estas son solamente algunas indicaciones y que cada uno debe sentirse libre de incluir cualquier otra dimensión de importancia para su empresa. (Ver la Tabla 4.3 como ejemplo de una matriz para una empresa concreta). Esta parte del ejercicio suele ser tan esclarecedora como la discusión de la estrategia de la empresa. En muchas compañías ni siquiera los mas altos directivos saben o están de acuerdo como la organización gestiona al personal. He oído fuertes discusiones sobre las politicas de una empresa con respecto a los niveles de salarios y con respecto a si pagaba bien o pagaba poco; si se usaba el trabajo en equipo o no; he oído a personas que desconocían los sistemas de incentivos usados por sus empresas. La incertidumbre sobre las politicas de gestión de personal de una empresa no es una buena serial. Si los empleados no saben lo que esta pasando, probablemente quiere decir que las politicas y las practicas aplicadas no tienen el impacto que es de desear en el comportamiento. Valorar la congruencia externa y la coherencia interna El siguiente y ultimo paso en el ejercicio de coordinación requiere que los que Essen haciéndolo se hagan la siguiente pregunta: Por cada una de las acciones que la empresa lleva a cabo para gestionar las relaciones laborales, ^hasta que punto es lógico esperar que esa practica o programa produzca o no cada una de las habilidades y actitudes previamente identificadas como fundamentales? Se podría usar un sencillo esquema de valoraciones como el siguiente: 1-0 para indicar que la practica produce o no produce el comportamiento o la habilidad; +1, 0 o -1 para indicar, respectivamente, que la practica promueve el comportamiento o la habilidad, tiene un efecto neutral o produce lo opuesto de lo que la empresa ha indicado que necesita. También se podría utilizar una escala mas precisa. El objetivo de esta parte del ejercicio de coordinación es pensar lógicamente si las acciones específicas que se están llevando a cabo para gestionar al personal realmente generan las capacidades y los resultados que la empresa ha calificado como críticos para su éxito. Muchas empresas descubrirán incongruencias sustanciales y mas abajo dale un par de ejemplos concretos de como este proceso de diagnostico puede ayudar a ver claramente lo que una empresa debe cambiar para lograr una aplicación mejor de su estrategia. Por el momento, solo diré que algunos problemas se presentan con tanta frecuencia que son casi genéricos. Uno es la conexión entre las actividades de formación y las habilidades y actitudes requeridas. En muchas empresas la formación se centra en el desarrollo de conocimientos y habilidades individuales, que en lineas generales pueden ser muy útiles pero que no están necesariamente ligados a los objetivos principales de la empresa. ,;Su organización ofrece cursos genéricos sobre gestión de tiempos, negociación, liderazgo o informática? Sin lugar a dudas, todos estos temas son interesantes y valen la pena, pero la pregunta es si son necesarios para llevar adelante la estrategia concreta de su empresa. El tiempo y la atención son limitados y a menudo los comportamientos y las habilidades se dejan de lado en favor de una formación más general. Otro caso notorio de falta de coordinación lo tenemos en la retribución. En muchas empresas el sistema retributivo que se aplica tiene poco que ver con las habilidades y comportamientos calificados como esenciales para el éxito de la empresa. Aunque muchas empresas hablan sobre la importancia de la gestión de personal, comparativamente pocas miden su gestión como parte del proceso de valoración de resultados. He visto sistemas de retribución que prácticamente no tienen ningún efecto positivo en el desarrollo o en el refuerzo de habilidades y comportamientos críticos, y esta situación es demasiado común. Una segunda parte del ejercicio consta en pedir al grupo que haga una lista de las mismas practicas en forma de lineas y de columnas y preguntarle hasta que punto las practicas son consecuentes unas con las otras. Por ejemplo, ¿hasta que punto el proceso de valoración de resultados es coherente con los programas de formación y los esfuerzos de desarrollo profesional de la empresa? En muchas empresas la formación es una cosa y la valoración otra muy distinta. Pero si una empresa pone el énfasis en los comportamientos y habilidades clave, seguramente también tendrá que destacar estos factores en las actividades de gestión de los resultados. Otra pregunta podría ser: ¿Hasta que punto el sistema retributivo recompensa y es consecuente con la formación de la empresa y su organización del trabajo? En muchos casos, la formación incluye procesos de calidad y trabajo en equipo y los empleados están organizados en equipos autodirigidos, pero el sistema de condensación sigue basándose en el individuo y se olvida de destacar los comportamientos y los resultados incluidos en el proceso de gestión de calidad. El tema no es que un proceso determinado (como el de calidad total) sea bueno o malo, sino simplemente que si una empresa aplica un proceso de formación y luego no lo respalda con el sistema de evaluación y de retribución, crea confusión entre los empleados y la efectividad de sus practicas, tanto de formación como de compensación, se ve correspondientemente reducida. EJEMPLOS DE DESCOORDINACION Y SUS CONSECUENCIAS Para concretar el tema, he aquí dos ejemplos de organizaciones que hicieron este ejercicio y de lo que aprendieron. El primero es el de una empresa de Sillicon Valley dedicada a la defensa, con considerable experiencia en hardware y software para detectar señales y determinar, por ejemplo, si una serial de radar corresponde o no a un misil enemigo. Se trata de una empresa con verdadera fuerza tecnológica, pero cuya fuente de negocio era casi exclusivamente el estamento militar. Después de la caída del muro de Berlín (una referenda frecuente en la empresa), su personal generalmente reconoció que si la empresa quería no solo crecer sino simplemente seguir siendo viable, tendría que usar su experiencia para desarrollar aplicaciones comerciales. La empresa de la cual era una división tenía negocios comerciales y alentaba este punto de vista. Mucha gente me dijo que la empresa ciertamente poseía la experiencia necesaria para esta salida, especialmente si podía seguir desarrollando su tecnología y lograba comercializarla con rapidez. Cuando yo conocí la empresa, sin embargo, se había avanzado poco en esta dirección a pesar del apoyo y las exhortaciones de sus altos directivos. Se habían puesto en marcha nuevas estructuras, pero persistía la antigua cultura empresarial, orientada hacia las necesidades y los métodos del Departamento de Defensa norteamericano. Un grupo de directores generales y yo revisamos la coordinación entre estrategia y practicas de gestión área por área, comenzando por la formación. La Tabla 4.1 presenta una lista de sus cursos más importantes y el grado de contribución de cada uno de ellos a una prioridad empresarial clave. Se realizaron análisis similares con otros aspectos de sus prácticas de gestión (captación, selección y retribución de personal) con resultados parecidos. La Tabla 4.1 ilustra claramente por que la empresa tenía problemas para diversificar sus productos. Fijémonos que la columna debajo de diversificación del negocio esta vacía, debido a que ninguno de los cursos, a pesar de sus propios meritos, Tabla 4.1 Conexiona entre formación y necesidades del negocio de una empresa l d el Id cti ir vi de -o u a 3 u u & rens ion irtidel Camb iar a i ro empl Gesti ado n de e yd o Diver la s nego c Habili dade se Adec acio u n —< u n ■a 0 0 | Cursos de formacion O o u tfl De ocho horas para todos los X X X empleadosconcurrente Ingenieria X X X X Gestion de la actividad X X Liderazgo por facilitation X X X Gestion de programas X Ingenieria de sistemas X Cursos de adecuacion X X Diver idad s ti v o Prioridades X X X X X Fue juzgado por los altos directivos como relevante para la tarea de comercializar la tecnología de la empresa en mercados no relacionados con la defensa. Una ausencia similar de marcas bajo esta columna se dio en todas las otras tablas preparadas por el grupo. De pronto todo el mundo entendió por que no funcionaba la diversificación del negocio: ninguna de las practicas de gestión aplicadas a diario por la empresa estaba relacionada con la tarea de diversificar la base de negocio de la empresa. Dado que no había nada relacionado, los avances eran inevitablemente lentos. A pesar de que el ejercicio de diagnostico fue esclarecedor y valioso para la empresa, su enfoque no fue perfecto. Por ejemplo, las «prioridades» de la lista son bastante generales. Si en lugar de usar expresiones como «comprensión compartida», «habilidades específicas» y «gestión de la actividad», los directivos de la empresa hubieran hecho una lista de habilidades y comportamientos mas concretes, habrían ganado aun mas. Cuanto más específicos seamos, más fácilmente podremos valorar el alcance de los distintos procesos en crear las capacitaciones empresariales necesarias y mas exacto será la evaluación de la coordinación. La Tabla 4.1 también ilustra otro aspecto. Consideremos el curso ingeniería de sistemas». Aunque indudablemente era un curso excelente, muy bien impartido y con un contenido sofisticado, no tiene conexión con casi ninguna de las prioridades básicas de la empresa, sino que simplemente imparte algunas habilidades específicas. Una forma de evaluar cursos de formación o cualquier otro conjunto de actividades es ver cuantas habilidades y cuantos comportamientos importantes afecta cada uno de ellos. Un curso que reciba una excelente valoración, tenga buen contenido y este bien impartido pero que no afecte las capacitaciones básicas de la empresa es un lujo, especialmente si los comportamientos y habilidades necesarias no se desarrollan en ningún otro. Si vamos a la Motorola University y hacemos el mismo ejercicio de diagnostico, observaremos un resultado muy diferente. Motorola esta inmersa en un proceso de calidad total y los diferentes cursos que ofrece están prácticamente diseñados para impartir la formación relevante y necesaria para lograr los diferentes aspectos de esa calidad total. Como he dicho anteriormente, el problema en este caso particular no era solo con las actividades de formación. Las estrategias de la empresa para captar y seleccionar personal no habían cambiado a medida que cambiaba la estrategia general. Por ejemplo, seguían con la tendencia a captar personas con certificado de absoluta garantía respecto a la seguridad de los altos secretes. Esta era una practica absolutamente lógica cuando la empresa solo tenia tratos con el Departamento de Defensa, porque contratar a alguien sin ese certificado de garantía significaba pagarle el sueldo durante todo el tiempo necesario para obtenerlo aunque la persona no pudiera desarrollar su trabajo. Pero esta practica ya no tenia sentido cuando la empresa necesitaba personas que pudieran comercializar tecnología y crear productos y mercados para usuarios no gubernamentales. El personal de la empresa simplemente había pasado por alto u olvidado revisar y ajustar sus criterios para reflejar la nueva orientación de la compañía. Las prácticas retributivas de la empresa también presentaban problemas. Como contratista de temas de defensa, la empresa había llegado a parecerse al gobierno en muchas de sus politicas, en parte por el contacto frecuente y en parte porque estaba sujeta a inspecciones y auditorias, ya que el cliente pretendía que la empresa funcionase según sus sistemas. Por consiguiente, las recompensas se lograban principalmente a través de los ascensos en el escalafón; la retribución no corría riesgos; la evaluación de los resultados se basaba mucho en los logros y comportamientos individuales; las recompensas estaban poco diferenciadas; y los empleados tenían una mentalidad de derechos ganados, por lo que esperaban que las subidas de sueldo reflejaran los aumentos del coste de la vida y que hubiera subidas salariales todos los anos. Estas politicas, en general, no estimulaban un comportamiento empresarial. Sin retribución variable, aunque sea en parte, los empleados no tenían incentivos para correr riesgos comerciales: la tendencia ascendente estaba limitada y si las cosas no funcionaban, la persona arriesgaba su trabajo. Las recompensas por resultados individuales no orientaban a los empleados hacia el trabajo en equipo y no propiciaban un gran interés en el excito de la empresa. La localización de la empresa en Silicon Valley intensificaba este desapego, porque la cultura individualista de la zona y la gran cantidad de competencia hacia pensar a los empleados que si las cosas iban mal donde estaban, siempre estaban a tiempo de cambiarse. Considerando esta obvia descoordinación entre retribución y lo que la empresa necesitaba, apareció el conjunto de recomendaciones que presenta la Tabla 4.2. Lamentablemente, mientras que la empresa reconocía la descoordinación y tomaba algunas medidas para remediarla, ya era demasiado tarde para que se recuperase. Primero redujo su tamaño considerablemente y finalmente fue absorbida por otra división de la empresa central. ¿E1 problema fue la absoluta imposibilidad de comercializar la tecnología? Hay evidencia de lo contrario, pues la empresa genero algunos negocios nuevos que luego funcionaron independientemente o fueron desarrollados por otras empresas. Consideremos otro ejemplo más, en esta ocasión el caso de una exitosa empresa que dominaba el mercado de los servicios sanitarios en California. Este mercado se ha vuelto muy competitivo en Estados Unidos y la competencia de las organizaciones dedicadas al mantenimiento de la salud se ha intensificado de forma considerable con la entrada de nuevas empresas y con muchas fusiones y consolidaciones. La empresa de este ejemplo se daba cuenta de que su ventaja competitiva se iba erosionando y puso en práctica una serie de remedios. Cambio su marketing y su distribución, aceptando vender sus servicios a través de intermediarios (como los agentes de seguros) además de por su propia fuerza de venta directa. Intensifico la formación de dicha fuerza de venta para asegurarse de que sus vendedores Tabla 4.2 Diferencias entre las practicas actuales de retribución y las necesarias para alcanzar los Recompensas futuras Recompensas anteriores Basadas en los desarrollos laterales Basadas en los ascensos Sueldo variable en función del éxito del Principalmente sueldo base, negocio determinado por el mercado Usadas como una forma de comunicar Consideradas como resultado comportamiento Basadas individual en valores del Basadas en el trabajo del equipo (unidad) y el el trabajo Diferenciadas Distribuidas equitativamente entre todos Basadas en el coste de la vida y el mercado laboral de la empresa Basadas en los resultados de la empresa Basadas en resultados de la actividad Correlacionadas con la antiguedad tuvieran las mas modernas tecnicas de negotiation y venta. Se reorganizo unas cuantas veces, cambiando las lineas de mando y de responsabilidad en la esperanza de que unas lineas mas directas de responsabilidad mejorarian los resultados. Recorto gastos, lo que en los servicios sanitarios casi siempre significa menos personal. Incluso cerro instalaciones y comenzo a hacer lo mismo que muchos de sus competidores: comprar por contrato servicios hospitalarios y otros, algo que no habia hecho nunca. Pero ninguno de estos remedios parecia traer alivio, ni siquiera temporal, a esos problemas que se reflejaban en la perdida de mercado y en su incapacidad de crecer. Durante un programa ejecutivo llevado a cabo en la empresa, un grupo de directivos de alto nivel realizo el diagnostico de coordinacion descrito en este capitulo. La Tabla 4.3 muestra los resultados que obtuvieron asi como los problemas de la organization: su sistema de recursos humanos y los valores y capacitaciones que su personal considera fundamentales para tener exito en el mercado de atencion sanitaria no presentan casi ningun tipo de coordinacion. Ademas, ninguna de las acciones que acabamos de describir (mejorar sus ventas y su marketing, reorganizar, recortar personal) trata los problemas basicos de descoordinacion entre su forma de captar, formar, pagar y organizar su personal y las habilidades y actitudes necesarias para ejecutar la estrategia planificada. Esta transformation en operaciones del ejercicio sobre alineacion o coordinacion tiene ventajas y desventajas sobre el ejemplo previo. Las habilida- Tabla 4.3 Coordinacio una empresa de n en atencion sanitaria Habilidades fundamentales a •0 Reclutamiento Seleccion Retribucion Formacion Desarrollo profesional Uso de ayuda contractual Autoridad Direction e i q p u o Concentr io en ac cliente n el Habilidad or es ma Comprom c is Resolucio n problema Interes s Trabajar mu Flexibilida d Valores io soci (mis n al) t*5 0 V B B AB B I I I-B I I I I B I I A-B 0 u Trabaj o en Practicas ------ A I IB I-B BOI N* BA I 1 I I-B I I I B-O B I I I I I BO BA B I I I I I I B I I I I B I-B I BO I I I I B B-O I I I I I I I I I I A =Alta B =Baja I = Inexistente N = No aplicable des y las conductas requeridas son algo mas especificas; los directivos mencionaron aspectos como «concentración en el cliente» y «orientación hacia el servicio» que tienen implicaciones y referentes de conducta mas concretos. Pero por la premura de tiempo del ejercicio, la lista de practicas no ofrece mucho detalle. Sean cuales sean los problemas que afectan al proceso de selección y contratación, no aparecen aquí con ninguna especificidad. Sin una documentación muy detallada de lo que la empresa hace o no hace, es difícil saber exactamente que cambiar o como. Al contrario que en nuestro primer ejemplo, en el que la empresa hacia algo pero cuando ya era demasiado tarde, esta empresa no ha sabido actuar sobre las implicaciones de la descoordinación entre sus practicas de gestión y las conductas y capacitaciones que busca producir. En su lugar, ha hecho una serie de despidos y reorganizaciones, pero debemos entender que simplemente despedir gente (con la consiguiente reducción del coste base de la organización) no produce las habilidades y los comportamientos necesarios para obtener éxito competitivo. Reordenar el organigrama tampoco. Casi ninguna de las «soluciones» de la empresa se centra en su verdadero problema, que es un conjunto de prácticas que no le permiten producir lo que necesita para tener éxito dado su enfoque estratégico del mercado en el que actúa. No se sorprenda ni se deprima por estos ejemplos de conocimiento de la situación pero de falta de acciones decisivas. Recuerde que en el primer capitulo yo decía que una de las razones por la cual es posible generar beneficios a través de las personas es que no son muchas las empresas que reconocen la relación entre estos factores, y cuando la reconocen, no hacen nada al respecto. Si todas las empresas tuvieran practicas de gestión perfectamente coordinadas, este tema ya no seria una fuente potencial y significativa de ventaja competitiva. Pero no las tienen, asi que aquellas organizaciones que desarrollen un claro conocimiento de sus problemas y realicen los cambios necesarios pueden esperar grandes rendimientos. COORDINACION ES DE VERDAD ALGO BUENO? Algunos ejecutivos expresan su preocupación sobre la coordinación. Des-pues de todo, si las practicas de gestión que aplica la empresa son tan congruentes desde el punto de vista interno es esa misma congruencia y la interconexión entre los elementos lo que dificulta el cambio? Gran parte de la ventaja de coordinar prácticas de gestión radica en la consiguiente mayor efectividad en la implementación de la estrategia de la empresa. ¿Pero que pasa si la estrategia es incorrecta o se ha de cambiar debido a los cambios en el entorno competitivo? ¿No serian esos cambios más difíciles debido a la consistencia interna de los diferentes aspectos de la organización? Tengo dos respuestas para esta preocupación. La primera, que no he observado que los cambios organizativos fundamentales para responder a nuevas demandas del mercado se hagan sin fricción o demora aun en empresas con una pobre coordinación de sus practicas de gestión de personal. Todavía ha de demostrarse empíricamente que las empresas con practicas de gestión interna y externamente inconsistentes sean mas flexibles o se adapten mejor que las empresas con un mayor grado de coordinación. La segunda, que la premisa de la pregunta parece confundir caos con cambio. Una organización que de formación para el trabajo en equipo pero que no tenga incentivos basados en los equipos, que tenga poca presencia de equipos autodirigidos y que no comparta toda la información necesaria para utilizar la formación en trabajo conjunto no esta necesariamente mejor capacitada para el cambio. Dicha empresa simplemente tiene muchos procesos funcionando con propósitos opuestos y de forma incoherente con la obtención de beneficios a través de las personas. La desorganización, la inconsistencia y los mensajes confusos sobre los que la empresa valora y como funcionara no facilitaran el cambio. Por el contrario, dificultaran cualquier actividad, incluso la transformación. VALORAR LA PERSONAS COORDINACION Y ANTEPONER A LAS Varias razones avalan la utilidad de averiguar como medir la coordinación empresarial y hasta donde llegan sus medidas de gestión basadas en el personal. En primer lugar, dicha información le permite a los directivos comprobar como va la empresa y si avanza hacia una mayor congruencia entre sus prácticas de gestión y lo que debe hacer para tener éxito. En segundo lugar, las organizaciones que siguen las indicaciones de este libro funcionan mejor que las que no las siguen, asi que a largo plazo a una empresa le con-viene invertir en la aplicación de dichas indicaciones. De hecho, es lo que me dijo un alto ejecutivo de la empresa U.S. Trust responsable de la dirección de una de sus mutuas y de supervisar varias grandes carteras. Este alto directivo, acostumbrado a estar en el cuartil superior de los gestores profesionales del dinero, tuvo la perspicacia de tratar de encontrar empresas que siguieran lo prescrito en este libro, pero para ello era necesario viajar mucho y hacer una gran tarea de investigación. Se pregunto entonces si podría encontrar la forma de discernir lo que estaban haciendo las empresas en relación a estas dimensiones a través de una información financiera estandarizada. Lamentablemente, en estos momentos la respuesta a esa pregunta es no. Digo «en estos momentos» porque la profesión contable esta interesada en obtener datos sobre las practicas de gestión de personal para que los inversores tengan una mejor información sobre este importante aspecto de la gestión empresarial. El esfuerzo se esta realizando pero todavía no ha dado frutos. En la actualidad hay que crear indicadores propios y luego medirlos. ¿Como se puede valorar en que medida una empresa pone por delante a su personal? Si usted cree en la utilidad de las siete dimensiones descritas en el capitulo anterior, ¿por que no probar con una encuesta que le pregunte a empleados de todos los niveles sobre las practicas que ellos creen que caracterizan a su empresa? Si participar de la información es importante, pregunte si conocen la estrategia de la empresa, como van las cosas financiertamente o sobre la aplicación de indicadores clave de efectividad operativa. Si lo importante es la seguridad en el trabajo, pregunte a los empleados si creen que la empresa esta comprometida a proporcionar oportunidades de trabajo a largo plazo. Pregúnteles si trabajan en equipo, si el equipo hace reuniones y si han sido formados en procesos de grupo. Pero también se pueden usar medidas no basadas en encuestas. Motorola esta muy comprometida con la formación y controla si su personal tiene un compromiso semejante y organiza su formación en un centro de desarrollo de gestión, con programas básicos que «son obligatorios y están planificados secuencialmente cursos que el personal debe hacer a lo largo de diferentes etapas de su carrera en la empresa».7 Otra medida de la gestión basada en las personas es la rotación, especialmente la rotación entre empleados a tiempo completo que están en momentos clave de su carrera profesional. Gordon Bethune, el director ejecutivo de la empresa Continental Airlines y la persona que restableció su cultura de servicio, encuentra datos mutiles en las compras que hacen los empleados en la tienda de la empresa de artículos que llevan el logotipo de Continental. Según el, son particularmente informativos los cambios en los niveles de esas compras, y tiene razón. Los empleados de empresas donde se motiva la lealtad tienen una mayor tendencia a querer identificarse con la organización mediante el uso de camisetas, bolígrafos o tazas con el logotipo de la empresa. Las sugerencias sobre las mejoras realizadas pueden ser un indicador útil, asi como el número de los que solicitan un puesto de trabajo comparado con el número de trabajadores. Una organización que pone por delante a su personal se encontrara con que sus empleados anteponen a la empresa, considerándola un lugar de trabajo que pueden recomendar a sus amigos y colegas. Las medidas de valoración que a usted le resultaran útiles obviamente defenderán de sus circunstancias específicas; no todas las empresas venden objetos con su insignia. El esfuerzo por determinar y hacer el seguimiento de tales medidas se ve recompensado con los medios para valorar las mejoras organizativas y para juzgar el éxito de varias iniciativas dedicadas a implementar sistemas que generen beneficios a través de las personas. ¿Como se puede saber si una organización esta eficazmente coordinada? O dicho de otra manera, ¿cuales son las consecuencias empíricas de la coordinación? Una manera obvia es hacer el ejercicio descrito en este capitulo y examinar la matriz resultante. Si usted y su equipo hacen el ejercicio con regularidad, podrán medir el progreso o la falta del mismo a través de la proporción de factores que son coherentes con las habilidades y conductas requeridas. Después de los hechos, la operación de un sistema coordinado es fácil de valorar. Si un sistema relaciona los diferentes aspectos de las operaciones de la organización, los resultados empresariales deberían ser relativamente constantes en el tiempo e invariables en su sucesión ejecutiva. La ordenación organizativa, con su lógica y consistencia interna, garantiza niveles persistentes de resultados con independencia de quien dirija la empresa y de las diversas condiciones competitivas. Esto ilustra lo que significa tener un sistema. Un sistema es un conjunto de medidas independientes de un liderazgo ejecutivo concreto que produce resultados de forma casi inevitable simplemente a partir de la aplicación de prácticas de gestión. Como ilustración empírica de este efecto, consideremos un estudio sobre diferencias de productividad en la industria del automóvil hecho por Marvin Lieberman y algunos colegas con información que cubre desde principios de los arios cincuenta hasta finales de los ochenta. El estudio define la productividad como «la eficacia con que los elementos físicos entrantes se convierten en resultados físicos salientes».8 Mediante el uso de información publicada y técnicas econometritas habituales para estimar mano de obra, capital y crecimiento total de la productividad, Lieberman y sus colegas estimaron de forma estadística las fuentes del crecimiento de la productividad asi como los efectos sobre ella de los cambios de altos ejecutivos en las diferentes empresas automovilísticas. Los resultados indicaron que la mejora de la productividad en el tiempo, algo esencial para la industria del automóvil, «se ha logrado principalmente a través de una utilización mas eficaz de la mano de obra; el crecimiento a largo plazo de la productividad del capital fue casi cero en la mayoría de las empresas».9 Si bien no se detecto una determinada tendencia en el tiempo, si que se descubrió que las diferencias de productividad dependían mucho del director ejecutivo del momento. En la Ford Motor Company, por ejemplo, el nivel de productividad del «primer ano de Petersen como director ejecutivo fue el 21 por ciento mas alto que la media para igual periodo de todos los otros directores que había tenido Ford», mientras que otros resultados indican que «su tasa anual de crecimiento de la productividad fue el 3,1 por ciento mas alta que la media de todos los directores de Ford».10 Aunque algunos directores tuvieron efectos positivos y otros negativos, la diferencia de resultados medida en términos de productividad existía en todas las empresas excepto Toyota.11 iQue quiere decir esto? Pues simplemente que el Toyota Production System o TPS (sistema de producían Toyota) descrito en el capitulo 2 es lo que su nombre indica: un sistema. Como sistema, en este caso funciona para producir unos resultados económicos superiores (entre 1950 y 1987, el crecimiento de la productividad de Toyota fue casi el doble del de cualquier empresa del automóvil de Estados Unidos) con independencia de quien sea el director, de los cambios en el gusto de los consumidores y de las condiciones económicas y competitivas. Ahora ya tenemos otra perspectiva de las dificultades de las prácticas empresariales coordinadas, al menos desde el punto de vista de la alta dirección. Debido a su lógica interna y a su adecuación a lo que se requiere para aplicar la estrategia de la empresa, dichos sistemas no dependen de las acciones o decisiones heroicas de algún directivo. Justamente esa es la fuerza de un sistema, no depender de unas «mentes privilegiadas» o de unas grandes ideas, sino de una actividad eficaz y de las ideas de toda la organización pues-tas en marcha a través de un conjunto coherente de prácticas de alto rendimiento. Solo que justamente también esa es la debilidad del sistema. En una cultura que venera el liderazgo, en un mundo en el que salvar empresas en crisis y realizar cambios profundos significa mucha publicidad y altas retribuciones económica ¿quien quiere establecer y luego supervisar un sistema coordinado que reduce o elimina la necesidad de héroes? Desde el punto de vista de la inversión, un sistema coordinado significa que no hay que preocuparse por la salud o la edad del alto ejecutivo. El sistema sobre vivirá por eso mismo, porque es un sistema. Los líderes que quieran crear una organización que mantenga su éxito competitivo en el tiempo harían bien en aprender del ejemplo de Toyota. Yo creo que una de las principales funciones del liderazgo empresarial es construir un sistema que pueda aprender, desarrollar y producir resultados superiores en el tiempo y tambien que sea fuerte ante los cambios en la competencia o la sucesión de directores. Después de los hechos, entonces, la evaluación de la existencia de un sistema coordinado es cuestión de estimar la existencia o la ausencia de efectos sobre la productividad causados por la «sucesión ejecutiva». Un sistema coordinado no debería mostrar prácticamente ningún efecto debido a cambios en el nivel ejecutivo. Antes de los hechos, se puede hacer un ejercicio mental utilizando básicamente la misma pregunta: ^Hasta que punto dependen nuestras operaciones de las decisiones y del comportamiento de algunos altos directivos? Como alternativa, se puede preguntar hasta que punto lo que hacemos continuaría igual con independencia del cambio de nuestro liderazgo o de la competencia. Un sistema coordinado es robusto y lo es simplemente porque sus diferentes elementos (desde como se contrata al personal hasta como se le forma, retribuye u organiza) están todos diseñados para asegurar que las practicas de gestión aplicadas producen las habilidades y conductas necesarias, permitiendo asi que la puesta en practica de la estrategia sea clara y concisa. En mi opinión esta es una receta que produce éxitos, no problemas. LA CREACION DE SISTEMAS LABORALES DE ALTO RENDIMIENTO Un capitulo dedicado a la coordinación y al cambio también debe considerar los aspectos prácticos de la implementación. Cuando una empresa detecta una descoordinación, empieza la tarea de cambiar cosas. Cuando una empresa decide seguir la conexión entre personal y beneficios, empieza a realizar las acciones necesarias para crear capacitación y eficacia a través de la gestión de las relaciones laborales. Es más fácil hacer las cosas bien desde el principio que cambiar actitudes y comportamientos después. Muchas empresas citadas en este libro, como Southwest, AES, Virgin Atlantic, ServiceMaster o Singapore Airlines lo hicieron bien desde el principio. Pero para muchos ejecutivos la tarea que implica el cambio es descorazonadora, y en algunos aspectos lo es. Dicha afirmación puede llevar a la tentación de decir «no lo podemos hacer», y eso no es cierto. Este libro contiene muchos ejemplos de organizaciones que han realizado profundos cambios, empresas como Magma Copper, el Correo de Nueva Zelanda y Norwest. El cambio requiere básicamente la disposición a considerarlo de forma seria seguida de una aplicación sensata. En la mayoría de transformaciones que yo he observado de un sistema tradicional de trabajo a otro de alto rendimiento aparecen tres principios comunes: 1. Crear confianza 2. Estimular el cambio 3. Medir los elementos adecuados y coordinar sistemas de incentivos con nuevas practicas A continuación los analizare por orden. El principio primero y fundamental -y debería agregar que el violado con mas frecuencia- es el de crear confianza. La esencia de los sistemas de trabajo de alto rendimiento es la confianza en todos los integrantes de la empresa, en sus ideas, su inteligencia y su dedicación a lograr el éxito empresarial. Dichos esfuerzos no existirán si no hay confianza. A veces se oye decir que los incentivos o la supervisión y control (o alguna combinación de ambas cosas) pueden sustituir la confianza afectando el entorno de modo que el personal haga lo correcto, pero se trata de una visión ingenua, dado que los incentivos y controles funcionan solo para comportamientos que se pueden especificar por adelantado. Además, estas técnicas para producir determinados comportamientos son invariablemente más caras que las basadas en la confianza y el respeto. Por consiguiente, la primera pregunta que los directivos deberían hacer sobre cualquier práctica propuesta es si creara y mantendrá relaciones de confianza. Si la respuesta es no, la práctica no debería ser instituida, punto. Una forma de crear confianza es compartir información con todos los empleados, incluyendo proyectos y estrategias. Esto es algo que no siempre se hace porque un incentivo que los altos directivos parecen apreciar es saber cosas que los demás no saben. El conocimiento es poder, y conocer secretos puede ser una fuente de privilegios. De todos modos, he de decir que se trata de un incentivo muy caro. Si la empresa mantiene secretos, el mensaje que transmite es que no confía en sus integrantes. Por el contrario, compartir proyectos, estrategias e información operativa transmite la idea de que todos los miembros de la empresa son socios en la tarea de conseguir mejores resultados y de que todos juegan un papel importante en estos esfuerzos. Una parte de la creación y el mantenimiento de la confianza es el trato justo de los que no pueden o no quieren cambiar, o de los que pierden su empleo debido a cambios en la tecnología o en las condiciones del negocio. En la división de vehiculos pesados de la empresa Rockwell Automotive, el presidente de la división, Larry Yost, dedico dos anos a explicar una y otra vez la necesidad de cambiar los procesos a los directivos de la división. Durante este periodo, el personal lo clasificaba invariablemente como «paciente». Pero a los ojos de una fuerza de trabajo en la que había gente con toda una vida laboral desarrollada en Rockwell, esa paciencia le significaba a Yost su aceptación como líder, a pesar de que procedía de fuera de la división. Como me dijeron varios directores: «Se nos han dado amplias oportunidades de comprender y aceptar la nueva forma de hacer las cosas». Los miembros de la organización apreciaron el tiempo concedido para cambiar. En la división de comunicaciones de la Siemens Corporation, los empleados que perdían su trabajo recibían una generosa indemnizacion y tenían la oportunidad de despedirse de sus compañeros. En comentarios de Bonnie Hathcock, la directora de recursos humanos: «Tratamos a los empleados con respeto. Nada de guardias de seguridad acompañándolos hasta la salida». Por que algunas empresas usan guardias de seguridad para escoltar rápidamente hasta la puerta de salida a los empleados que han sido despedidos? Porque temen que estos se lleven información confidencial listados de clientes, especificaciones técnicas, planes para productos- o peor aun, que por venganza saboteen bases de datos, por ejemplo. Pero unos guardias y una salida rápida no son necesariamente la mejor manera de prevenir tales comportamientos. En la era de Internet, el sabotaje puede hacerse desde fuera. De hecho, tratar a los empleados con tan poco respeto y consideración puede incrementar su enfado y también el de los compañeros de trabajo que se quedan, por lo que dicha actitud solo logra más actos de hostilidad hacia la empresa. Esta forma de tratar al personal indica una profunda desconfianza y falta de respeto, asi como dificulta el compromiso y la motivación de los que se quedan en la empresa. Para establecer un clima de confianza hace falta que los altos directivos se reúnan con los empleados, preferentemente en pequeños grupos, para explicar lo que esta pasando y para escuchar. El Correo de Nueva Zelanda es una organización que paso de la típica burocracia gubernamental a ser una empresa rentable de propiedad estatal y el mejor servicio postal del mundo. Su director ejecutivo, Elmar Toime, hizo (y hace) el esfuerzo concreto de reunirse con pequeños grupos de empleados de toda la organización. Esta comunicación mas personalizada significa que la dirección otorga importancia a los empleados y da una sensación de respeto y consideración que un video o una publicación periódica no pueden dar. En Southwest Airlines, los empleados tienen los teléfonos particulares de todos los altos directivos. En Virgin Atlantic los empleados tienen el teléfono de la casa de Richard Branson. Dudo que muchos llamen y si lo hacen, probablemente sea por temas importantes sobre los que los directivos querrían estar informados de todos modos. La importancia del gesto de la alta dirección de ponerse a disposición estriba en el mensaje de que se valora al personal y se confía en que hará un uso discrecional de tal disponibilidad. Finalmente, crear confianza también implica trabajar de forma cooperativa con los representantes de los empleados, por ejemplo con los líderes sindicales en aquellas empresas que cuenten con dicha organización. ¿Que mensaje reciben los trabajadores si lo primero que sucede en una situación de cambio es que sus representantes son ignorados o desafiados? Cómo puede una empresa crear un entorno laboral participativo y de alta dedicación si sus acciones indican que la dirección no confía en los representantes de los empleados ni espera que actúen de forma responsable o que entiendan los cambios de practicas? El segundo principio que parece ayudar a implementar sistemas de trabajo de alta dedicación es hacer varias cosas para estimular el cambio. Es más fácil lograr cambios en la forma de trabajar si al mismo tiempo también hay cambios en otras áreas, porque esto descongela el sistema. Por ejemplo, cuando NUMMI se hizo cargo de la planta de General Motors en Fremont, además de cambiar la relación con los empleados, la empresa cambio el sistema de producción implantando principios de economía. También pinto la planta, logrando una apariencia nueva y fresca que animaba al personal a ver la empresa de modo diferente y a sentir mas enteres por la calidad del producto. En el Correo de Nueva Zelanda, la institución aplico su propia versión de la política de economía, en este caso la «política de suelo limpio», que consistía en que toda la correspondencia que llegaba a un centro de clasificación o a una subestación en un determinado turno tenia que ser pro-cesada en su totalidad durante dicho turno, sin acumulaciones. Se redistribuyeron los espacios físicos de los centros de trabajo para facilitar la detección de correspondencia sin procesar al acabar un turno. Cuando el centro de clasificación de correspondencia internacional se traslado a unas instalaciones cercanas al aeropuerto de la ciudad de Auckland, el jefe de la división, Bill Osborne, aprovecho para rediseñarlas de tal forma que representaran también el cambio en las practicas de trabajo. Según observaciones posteriores, el cambio físico de las instalaciones actuó como impulsor de los demás cambios, porque descongelo los procesos operacionales.12 Los cambios físicos -en la apariencia y la distribución del centro de trabajo- proporciónan una evidencia tangible y siempre a la vista de que la organización esta cambiando, cosa que facilita el cambio en las formas de trabajar asi como en las relaciones laborales. Otra manera de alentar cambios en el trato de las personas es modificar las denominaciones y las formas de dirigirse a los demás, ya que son aspectos que tanto pueden limitar como exacerbar las diferencias de categorías o situación entre los integrantes de una empresa. Si se eliminan títulos y otras distinciones del lenguaje diario, se estimulan la familiaridad y la colegialidad. «Muchas corporaciones de las mas grandes, como Mars, Corning,Walt Disney, General Electric, UPS, Electronic Data Systems, Hewlett-Packard y Xerox, han adoptado politicas formales de "uso universal del nombre de pila", lo que significa que a todos los empleados de la empresa se les llama explicitamente por su nombre propio.13 Cambiar los nombres de los puestos de trabajo también puede ser útil. Se necesita algo mas que llamar a alguien «asociado» o «miembro del equipo» para crear un ambiente de trabajo colegiado, pero el lenguaje tiene un pro-fundo efecto sobre la percepción que los empleados tienen de su trabajo. Utilizar «líder del equipo de trabajo» en lugar de «supervisor» ayuda a establecer las expectativas de lo que debería ser el papel y el comportamiento del individuo, unas expectativas que pueden tener un efecto potente y satisfactorio en las conductas. En el Correo de Nueva Zelanda, Bill Osborne se dedica a trabajar de un modo diferente y a transformar la gestión de la correspondencia internacional, en la que trabajan 160 personas, en un modelo para el resto de la organización. Una de las cosas que ha hecho es cambiar la denominación «Director del Centro de Correspondencia» por la de «Director de Operaciones y Desarrollo (del personal)» Los cambios en el organigrama son otra manera de estimular los cambios en general. La eliminación de estamentos jerárquicos imposibilita la supervisión y estimula la participación. Bill Osborne los redujo de cinco a tres en la división de correspondencia internacional del Correo de Nueva Zelanda. NUMMI elimino un nivel directivo En AES se agregan niveles solo después de severos análisis, y esta corporación dedicada a generar energía eléctrica solo tiene cinco niveles para unas ventas de 800 millones de dólares. En el Correo de Nueva Zelanda, desde su creation como empresa estatal en 1987, ha habido numerosas reorganizaciones basadas en la línea de producto o de base funcional o matricial. Cuando pregunte la razón para implementar estas variadas estructuras, los directivos de más alta responsabilidad coincidieron en decir que el principal objetivo de la reorganización era reactivar el negocio. Otorgar nuevas funciones a los empleados y por consiguiente establecer nuevas responsabilidades y relaciones de dependencia allanaba el camino para que otros cambios también se produjeran. Ya no era posible hacer las mismas cosas de la misma manera porque las reorganizaciones no lo permitían. En la aplicación de practicas de gestión de alto rendimiento es importante que todos los departamentos y todos los directores sean un modelo a seguir de los comportamientos deseados. En una empresa, por ejemplo, el departamento de recursos humanos contaba con cinco niveles de jerarquía, situación que hacia menos creíble sus argumentos a favor de eliminar estamentos jerárquicos. Por contraste, Whole Foods aplica su cultura de equipo constantemente en toda la organización: la alta dirección es un equipo, los directores regionales son un equipo, cada departamento en cada tienda es un equipo y asi sucesivamente. En el Correo de Nueva Zelanda, Bill Osborne dirige el equipo directivo de las instalaciones de correspondencia internacional como un equipo de trabajo autodirigido. Los que dirigen una organización deben adoptar aquellas prácticas que se han de aplicar si se espera que el cambio arraigue. Además de crear confianza y estimular el cambio, el tercer principio que he visto aplicado por su utilidad en la implementación de prácticas de trabajo de alto rendimiento es la coordinación de medidas e incentivos con comportamientos deseados y cultura. Muchas prácticas y sistemas de medidas hacen evidente su desconfianza a través del énfasis en la supervisión y el control. Muchas medidas tienen como meta un nivel de observación diferente al que predican (por ejemplo, miden resultados individuales cuando el principio básico de la empresa es el equipo). Es crucial medir lo que real-mente importa y no solo lo que se puede medir fácilmente y parece ser una medida «dura». No me interesa la distinción entre medidas «duras» y «blandas». Los costes, considerados medidas duras, son frecuentemente poco indicativos por problemas de asignación y al final no se sabe si la empresa realmente complace a sus clientes, desarrolla nuevos productos o servicios y atrae y retiene al personal con talento. Hay otras medidas, por ejemplo las actitudes de los empleados, la satisfacción del cliente o los resultados operativos, que pueden ser mucho mas significativas para saber como le va a la empresa y donde necesita mejorar. Es fácil hablar de la aplicación de prácticas de gestión de alto rendimiento y luego no hacer nada. Medir el progreso reflejándolo en tablas para cada dimensión y actualizar las medidas periódicamente es una de las mejores maneras de asegurarse de que el objetivo de implementar una gestiona de alta dedicación se toma en serio.