Boletín de la Oficina de las Causas de los Santos. Prelatura del Opus Dei. España Nº 37 — Año XXIX El Siervo de Dios I sidoro Zor zano Año 2006 Hoja Informativa nº 10 Un deber de gratitud Se me pide una referencia de D. Isidoro Zorzano, una opinión sobre su persona, y yo con toda la lealtad, con la misma nobleza que él se portó no sólo conmigo, de quien fue Jefe en el Taller y maestro en la Escuela, cumpliendo un deber que es una alegría para mí pues me recuerdan años de juventud pasados al lado de este gran maestro de todos nosotros, tanto en el sentido profesional como moral, pues las dos cosas unía en sus lecciones, voy a contestar con la misma sinceridad que él nos hablaba. D. Isidoro era muy recto, pero con una rec‑ titud cariñosa. Tenía genio, pero, por decirlo así, parecía que tenía corazón de niño. Uno de los recuerdos que guardo de él fueron unas soberanas calabazas en matemáticas; él lo sintió más que yo, me dio toda clase de explicaciones y al final me convenció, teniendo que darle las gracias. Debido a su gran sabiduría en matemá‑ ticas desarrollaba las ecuaciones a una velocidad fantástica; a pesar de tener un gran encerado le faltaba espacio, dicién‑ donos en una ocasión [que] iba a colocar otro en otro tabique, sembrando el terror en la clase. Con este motivo de su gran ritmo en desarrollar los temas, en cierta ocasión varios alumnos se quejaron al Director de la Escuela que debido a esta velocidad no podían seguir sus explicaciones; D. Isidoro les reprendió primero y luego les pidió per‑ dón; algunos de los más exaltados, al ter‑ minar sus palabras no podían contener las lágrimas; desde entonces D. Isidoro hacía lo imposible por reprimir su paso. Estos son unos pequeños rasgos de lo que fue D. Isidoro para nosotros, un gran maestro en todos los sentidos y que dejó siempre entre nosotros un grato recuerdo, por un don que tenía que yo con la pluma no lo sé explicar, pero que se infiltraba dentro de nosotros y que hacía que a su clase, la más temida, fuera a la que concurriéramos todos con más alegría y cariño. El maquinista de RENFE José Gutiérrez Oficina para las Causas de los Santos en España. Prelatura del Opus Dei en España Diego de León 14. 28006 Madrid. E-mail: [email protected] www.opusdei.es FAVORES Muchas veces obtuve gracias por interce‑ sión de Isidoro. La necesidad de dar testimo‑ nio de ellas me llega a veces un poco tarde. Me referiré a una gracia particularmente importante, que me hizo caer en la cuenta de mi falta de agradecimiento. Me fue concedida hace un par de meses. Debía iniciar un viaje programado con esme‑ ro, y minutos antes de abordar me di cuenta de que me había olvidado el pasaje en casa. No había tiempo de ir a buscarlo y perdía la reser‑ va. Prácticamente resignado decidí plantear la cuestión en la empresa de transporte. Mientras me encaminaba recurrí espontá‑ neamente, como tantas veces, a la oración petitoria de Isidoro. La solución positiva fue sorprendente, aunque segundos antes de la oración me parecía imposible. La empresa atendió mi petición, tomó nota de unos datos, demoró unos minutos la salida del viaje, y dispuso que un oficial de la compa‑ ñía me acompañara hasta el embarque. Por mi parte, sólo debí asumir el compromiso de unos trámites administrativos, a mi regreso. Gracias a la intercesión de Isidoro fue un viaje memorable y feliz, con muy buenos resultados. C.V. Todos los problemas relacionados con má‑ quinas se los encomiendo a Isidoro Zorzano que, como buen ingeniero y santo, me los re‑ suelve siempre: ordenadores, coches, etc. Escribo este testimonio porque se lo pro‑ metí en el último favor que le pedí: encontrar un billete de avión muy difícil de conseguir. P.F.S. Cuando cumplimos 45 años de casados nuestra hija nos anunció que esperaba su séptimo hijo. Nuestro temor fue grande, pues dos de ellos habían nacido con disca‑ pacidad mental, y ella acababa de cumplir 43 años. Me encomendé a Isidoro Zorzano, y a su tiempo nació un varón espléndido, lleno de vida. Agradezco su intercesión y mando estas líneas pidiendo por su pronta beatificación. A.MªL.B. ORACIÓN Dios Todopoderoso, que llenaste a tu Siervo Isidoro de abundantes tesoros de gracia en el ejercicio de sus deberes profesionales en medio del mundo: haz que yo sepa también santificar mi trabajo ordinario y llevar la luz de Cristo a mis ami­ gos y compañeros; dígnate glorificar a tu Siervo y concédeme por su intercesión el favor que te pido... (pídase). Así sea. Padrenuestro, Avemaría, Gloria. De conformidad con los decretos del Papa Urbano VIII, declaramos que en nada se pretende prevenir el juicio de la Autoridad eclesiástica, y que esta oración no tiene finalidad alguna de culto público. Noticias de la Causa Se está terminando la redacción de la Positio sobre la vida y virtudes de Isidoro, para que la Congregación para las Causas de los Santos pueda determinar si el Siervo de Dios vivió en grado heroico las virtudes cristianas. Publicaciones • José Miguel Pero-Sanz: Isidoro Zorzano. Ed. Palabra, “Folletos Mundo Cristiano”, nº 570-571. Madrid 1993. • José Miguel Pero-Sanz: Isidoro Zorzano. Ed. Palabra, Madrid 1996. • Vídeo: Isidoro Zorzano. El sentido de una vida. Pedidos a Beta Films S.A.; c/ Pío Felipe, 12. 28038–MADRID. Agradecemos las limosnas que nos mandan para colaborar en los gastos de la Oficina para las Causas de los Santos de la Prelatura del Opus Dei, que nos llegan por giro postal; por trans‑ ferencia a la c/c número 0182‑4017‑57‑0018820005 en el BBVA, agencia urbana de la calle Diego de León, 16, 28006 Madrid; o por otros medios. Se publica con aprobación eclesiástica