37 CONCEPCIÓN DEL DOCENTE SOBRE LOS PROCESOS DE ADQUISICIÓN DE LA LENGUA ESCRITA. ESTUDIO ETNOGRÁFICO EN LA PRIMERA ETAPA DE EDUCACIÓN BÁSICA DE LA U. E. “REPÚBLICA DEL PERÚ” (Trabajo presentado ante el Área de Estudios de Postgrado de la Universidad de Carabobo de Face, para optar al título de Magister en Lectura y Escritura; 2005) Autora: Mayela Rodríguez O .* Tutor: Luis Rodríguez. RESUMEN Este trabajo tuvo la finalidad de explorar la concepción que tienen los docentes sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita en la Primera Etapa de Educación Básica de la U. E. “República del Perú”. La investigación se enmarca dentro del paradigma cualitativo en la modalidad etnográfica. Para la recolección de información se acudió a la observación no participante y a entrevistas estructuradas. Para garantizar la validez se realizó una triangulación de técnicas, de análisis y de fuentes teorías. La actuación del docente y los alumnos se plasman en los registros de observación. La opinión de los docentes se registra en las transcripciones de las entrevistas. Del análisis de este material surgen las categorías de hechos u opiniones que conducen a la teoría que emerge de la actuación del docente en relación con los procesos de adquisición de la lengua escrita. La teoría emergente de los procesos de aprendizaje de la lengua escrita se manifi esta en que esta se aprende a través de habilidades aisladas, partiendo de las letras o los sonidos, pasando por las sílabas para llegar al aprendizaje de las palabras. Estas habilidades se aprenden a través de la repetición oral y escrita (caligrafía). Una vez ejercitadas y aprendidas estas habilidades, ya se está en capacidad de llegar al signifi cado. En esta investigación se llegó a la conclusión de que el docente mantiene como teoría subyacente de su acción los principios básicos del conductismo que se manifi estan en la concepción de lengua escrita como un objeto externo al individuo que se impone como estímulo frente al cual se * Mayela Rodríguez. Magister en Lectura y Escritura Facultad en Ciencias de la Educación Universidad de Carabobo. Docente de la Unidad Educativa República del Perú. Valencia, Estado Carabobo. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 38 Mayela Rodríguez O. deben adoptar determinadas conductas: la producción de emisiones orales según determinados patrones (lectura) y la reproducción de ciertos modelos caligráficos (escritura). Palabras Claves: Concepción del docente. Lengua Escrita. Etnografía. TEACHER BELIFES ABOUT THE PROCESSES OF READING ACQUISITION. AN ETHNOGRAPHIC STUDY IN AN ELEMENTARY SCHOOL “ U.E. REPÚBLICA DEL PERÚ” Abstract The purpose of this research was to explore the teachers’ beliefs about the process of reading acquisition in an elementary school “República del Perú” (Valencia, Carabobo State). The study was under the umbrella of qualitative paradigm where the ethnographic modality was used. Data collection was taken using non participant observation and structured interviews. In order to generate validity, a triangulation of analysis techniques and theoretical sources was used. Teachers and students´ performance were recorded in the observation registers. Teacher’s opinions were also registered in the interviews. As a result from the analysis, the fact categories or opinions emerged. They lead to the theory teachers have in relation to the processes of reading acquisition. The emerging theory of the processes of reading acquisition showed that reading is learnt through separate abilities which start from letters, syllables and words. These abilities are acquired through oral and written repetition. Once the student has acquired these abilities he/she is ready to gather meaning. As a conclusion, it can be said that the teacher keeps as a subjacent theory of his/her action the behaviorism theory, in which reading acquisition is seen as an external object form the individual and at the same time this external object works as a stimulus that generate an appropriate response: oral production according to the pattern (reading) and the reproduction of certain written patterns (writing). Key words: Teachers´ beliefs. Written language. Ethnography ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 39 PLANTEAMIENTO Las sociedades contemporáneas se caracterizan por el continuo cambio en todos sus ámbitos (social, cultural, ideológico, político, económico) y precisan de instrumentos facilitadores del mismo. En este contexto, la educación está llamada a jugar un papel esencial. Los procesos de enseñanza y de aprendizaje son, sin lugar a dudas, los núcleos fundamentales alrededor de los cuales se articula la práctica educativa en el aula. Desarrollarlos eficaz e inteligentemente constituye un reto difícil para el docente y obliga a poner en juego un conjunto de conocimientos, estrategias y opciones que deberán conjugarse en un marco de intervención complejo y cambiante. La didáctica en general trata de mejorar los aprendizajes escolares que son concebidos como el resultado de un proceso de intercambios funcionales que se establecen entre sus tres elementos básicos: el alumno que aprende, el contenido que es objeto de aprendizaje y el docente que ayuda al alumno a dotarse de significados y atribuir sentido a lo que aprende. Desde esta perspectiva, es importante estudiar lo que sucede con la lengua escrita dentro del salón de clases para interpretar lo que se observa con una visión más amplia que la que define las categorías didácticas. Es por ello que la acción pedagógica adquiere gran significación en la interpretación de las conductas que comporta el hecho educativo. Ahora bien, si enseñar a leer y escribir es misión original e irrenunciable de la escuela, es evidente que el docente juega un papel de primer orden que lo ubica en un escenario donde sus ideas, pensamientos y conceptos de la lengua escrita van a propulsar la producción de conocimientos. Lectura y escritura son prácticas sociales (Lerner, 1996). Enseñar a leer y escribir significa comunicar esas prácticas. Esta comunicación plantea complejos problemas: ¿Cómo definir el contenido de la enseñanza? ¿Cómo lograr que la lectura y la escritura conserven en la escuela el sentido que tiene fuera de ella? y ¿Cómo llevar a cabo proyectos de producción e interpretación de textos cuando los niños no saben leer y escribir en el sentido convencional del término? Ante estas interrogantes las concepciones o representaciones que tenga el docente sobre la lengua escrita puede propiciar una didáctica que le permita al niño hacer de esta área una verdadera práctica social que facilite los procesos de aprendizaje. Es de saber que en estos procesos intervienen múltiples factores entre los que existen una ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 40 Mayela Rodríguez O. constante interacción como lo son: el niño (centro del mismo), el medio que lo rodea y las personas especialistas para favorecer el proceso (docente). Esta investigación apunta hacia la búsqueda de información que contribuya, a dar respuesta a uno de los más graves problemas que enfrenta la escuela actualmente: el alto índice de fracasos en el aprendizaje de la lectura y la escritura con sus secuelas de repitencia y deserción escolar. De esta inquietud, se deriva una reflexión que conlleva a plantearse una interrogante ¿Qué concepción tiene el docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita? Partiendo del hecho de que el docente es el ente rector que orienta el proceso de aprendizaje en el aula, no se puede desvirtuar la relación y responsabilidad en la que descansa su práctica pedagógica. Por consiguiente, su rol como intermediario de aprendizaje, adquiere significados encaminados a encontrar respuestas a la situación planteada. Ahora bien, si la acción pedagógica es la que orienta esta búsqueda de información para la interpretación de la problemática que comporta el hecho educativo cabe preguntarse ¿Cómo concibe el docente el conocimiento que enseña? ¿Qué papel se concede a sí mismo en relación con la experiencia del que aprende? ¿Asume el control de los aprendizajes o los delega gradualmente en los alumnos? Encontrar respuestas a estas interrogantes y, tal vez, el preludio de posibles soluciones es entender que el conocimiento sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita se inserta en un proceso amplio. No significa desvalorizar el papel que cumplen los docentes en la adquisición del conocimiento; muy por el contrario, significa que para hacer efectivo el papel fundamental que desempeñan, la enseñanza debe tomar en cuenta la naturaleza del proceso de aprendizaje. OBJETIVOS Objetivo General Explorar la concepción que tienen los docentes sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita en la Primera Etapa de Educación Básica de la U. E. “República del Perú”. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 41 Objetivos específicos - Describir la acción pedagógica del docente en el contexto escolar - Obtener información sobre la lengua escrita a través de entrevistas realizadas a los docentes TIPO DE INVESTIGACIÓN Este estudio es eminentemente cualitativo que está orientado a comprender la significación de los comportamientos que se producen en un determinado contexto; por lo tanto, se fundamenta en un estudio etnográfico. Esta actividad supone vivir con los informadores, crear un texto con el resultado de la observación y analizar el escenario y las actividades realizadas. Este tipo de investigación se adscribe a modelos de investigación cualitativa que denotan procesos inductivos, generativos constructivos y subjetivos. Se diferencia de los modelos de investigación cuantitativos cuyos estudios son deductivos, verificativos, enumerativos y objetivos (Goetz y Le Compte 1998). RECOLECCIÓN DE LA INFORMACIÓN: TÉCNICAS E INSTRUMENTOS En relación con los procesos de recolección de datos, se estudian los fenómenos tal como ocurren en el aula sin acudir a ningún tipo de manipulación o disposición anticipada bajo condiciones controladas, excluyendo los controles de las denominadas variables. El punto de interés está conformado por la interrelación de todos los eventos presentes en la investigación. Técnicas La Observación no Participante Esta técnica sirve para recoger la información de la manera más fidedigna posible, ajena a juicios valorativos. En la observación no participante la investigadora no interviene en los procesos que se están realizando en el campo de investigación, su actuación se reduce a la de mero testigo que capta los eventos del medio en que se desarrolla la acción. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 42 Mayela Rodríguez O. La Entrevista Estructurada Esta técnica sirve para complementar la información que se deriva de las observaciones, a la vez que posibilita una relación directa entre la investigadora y el entrevistado. Estas entrevistas, que se han planificado previamente, tienen lugar en el aula después de haber terminado la clase y versan sobre aspectos relacionados con la lectura y la escritura: “¿Cree usted que la copia, ya sea del pizarrón o del libro favorece los actos de escritura en los niños?” “¿Considera usted el libro de lectura como única herramienta básica en el aprendizaje de la lectura?” ¿Cree usted que cuando el niño ingresa a primer grado, ya tiene conocimientos básicos sobre lectura y escritura?”. Instrumentos Diario de Campo El diario de campo, es una forma gráfica en la que se registra la información producida por la observación. Cuestionario El cuestionario consiste en una serie de preguntas focalizadas en el tema de la lectura y de la escritura. ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN La condición cualitativa de esta investigación sugiere un análisis de la actuación del docente en su práctica pedagógica dentro del aula. Este análisis se inicia ya desde los registros de observación y de las entrevistas. De ellos se extraen categorías que sirven de base para la teorización emergente final. Triangulación La triangulación consiste básicamente, en llegar al conocimiento del fenómeno estudiado mediante diferentes vías. En este estudio el contraste de técnicas de análisis y de teorías constituyen las vertientes de la triangulación. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 43 Teorización Se puede afirmar que el proceso de construcción teórica que orientó este estudio gravita en tres estadios de teorización de carácter descriptivo, producto del análisis y reflexión de las categorías tanto de los seis registros de observación (R1 . . . R6) como de las seis entrevistas realizadas (E1 . . . E6). Los mismos se identifican como: Teorización Individualizada por Registros y Entrevistas (1° Estadio), Correlación Teórica Duplex (2° Estadio). Este estadio como su nombre lo indica, es el resultado de la sumatoria de las teorías de los registros R1 . . . R6 más las teorías surgidas de las entrevistas E1 . . . E6 (R1+E1. . . R6+E6), lo que conduce a un resultado de otro nivel teórico (R1+E1=T1. . . R6+E6=T6) cuya sumatoria (T1+ . . . T6) da origen a la Correlación Teórica Séxtupla (3° Estadio). En este nivel se origina una gran teoría. La Teoría Fundamentada (T.F.) que generó este estudio microetnográfico. Ahora bien, los procedimientos analíticos en los que se construye esta teoría, conducen a desarrollar tres vertientes que permiten dilucidar finalmente la teoría a través de un proceso de Explicación (causalidad), Comprensión (significatividad) y Discusión (contrastación) con las teorías establecidas. TEORÍA FUNDAMENTADA, EXPLICACIÓN, COMPRENSIÓN Y DISCUSIÓN La teoría fundamentada es la resultante del tercer estadio de teorización en este estudio, que culmina en la Concepción de los procesos de adquisición de la lengua escrita de los docentes. Consiste en un análisis fusionador de las seis teorías parciales (T1+T2+T3+T4+T5+T6) presentadas en el capítulo anterior. A continuación se desarrolla este nivel de análisis seguido de su explicación (causalidad), su comprensión (significatividad) y su discusión (contrastación con otras posturas teóricas). Escritura La concepción de la escritura que surge del análisis de los registros se orienta a su consideración como habilidad motora lograda a través la repetición de movimientos de la mano con un lápiz, pluma, o tiza que presiona una superficie sobre la cual deja impresas las grafías. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 44 Mayela Rodríguez O. En este sentido, el proceso de adquisición de la escritura se reduce a la ejercitación continua que conduzca al dominio progresivo de la formación de letras en los soportes de escritura: Papel, pizarrón…. Esta consideración conduce al siguiente corolario: a mayor ejercitación mejor escritura. Este proceso se desarrolla en la escuela y de manera específica en el aula, dentro de cuyos límites queda atrapado entre una serie de actividades que se traducen en la imitación de modelos presentados por el docente. Por esta razón se privilegia la copia, que se ha convertido en el icono por excelencia para la enseñanza-aprendizaje de la escritura cuya máxima valoración se evidencia en la estética de las grafías. De acuerdo con esto, resulta claro que la medida de la grafía es la legibilidad, como expresión del dominio de la escritura por parte del niño al escribir. En el proceso de enseñanza de la escritura, el soporte fundamental para el docente dentro del aula es el pizarrón. Éste es el único espacio donde el maestro escribe y al cual el niño dirige su atención para captar el modelo de escritura. Es allí esencialmente donde radica la razón de ser de su enseñanza-aprendizaje. Otro factor condicionante en la escritura, de acuerdo con la opinión de los docentes, es la edad. El niño, para enfrentarse a la tarea de escribir debe haber llegado a un cierto nivel de aprestamiento. Resulta claro que la producción espontánea de textos en los niños se ve limitada, ya que su aprendizaje está condicionado por dogmas dentro de la cultura escrita. Ortografía La ortografía constituye uno de los rasgos lingüísticos más valorados por el docente. No obstante su práctica en clase obedece al cumplimiento de algún contenido programático o en su defecto a estrategias planificadas. La atención por la ortografía en la escritura conlleva a creer que escribir bien consiste en “traducir” los sonidos a letras. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 45 De allí pues, el docente asuma el papel de revisor en los textos porque focaliza más su atención en las reglas que en el producto textual. Esto conduce a que el alumno conciba también la ortografía como el aspecto más relevante de lo escrito. En síntesis, el docente concibe la ortografía como un saber básico, elemental que todo alumno debe aprender durante su escolaridad. Lectura Al igual que la escritura, la lectura resulta un proceso que es percibido como un acto físico, direccionado a través de una metodología basada en la dicción, vocalización, tono, pausas. El docente concibe que la enseñanza de la lectura está condicionada por métodos y que cada uno de ellos influye en su aprendizaje. La existencia de métodos como el silábico, el alfabético, el fonético y su aplicación en la escuela han influido en la concepción que tiene el docente sobre lectura. Ello evidentemente repercute en la forma como el niño se inicia en la lectura a través de una actividad de decodificación o desciframiento de signos aislados de naturaleza predominante pasiva. No obstante, esta práctica niega el carácter de reconocimiento y comprensión de signos lingüísticos integrados en un proceso mental de interpretación. Tal vez ello explique las razones por las cuales, la lectura se convierte en el aula en un acontecimiento fugaz y casual. De igual manera, el docente asume un papel activo de control y ejecución en la lectura. En las clases no se lee (ni para buscar información, ni para deleite o placer). Aparte del texto escolar son pocos los docentes que usan otro tipo de libro o material impreso. En este sentido el texto escolar se convierte en una herramienta como medio de información y apoyo en la actividad escolar. La lectura es vista como un proceso donde intervienen factores de naturaleza biológica como la edad, la cual representa la madurez que pueda tener el niño para el inicio en el aprendizaje de la lectura. Dentro de este marco conceptual la lectura se convierte en una actividad adscrita al ámbito escolar, donde sólo se lee lo que se necesita leer, para luego ser copiado. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 46 Mayela Rodríguez O. Lectura y Padres ¿Cómo percibe el docente el binomionlectura padres? Para el docente, la figura de los padres juega un rol muy importante en el aprendizaje de la lectura del niño. Esta importancia viene dada por el hecho de que los padres deben a través de una disciplina de orden familiar, reforzar lo aprendido en la escuela. Los maestros consideran que los padres determinan el tiempo en que el niño debe aprender a leer, dada su preocupación e interés por la lectura. En ningún momento se considera a los padres como promotores de un ambiente que favorezca la lectura, sino más bien como figuras de orden y control. Esta es la forma en que los docentes expresan la vinculación de los padres con la escuela aunada a su presencia en el aula para prestar algún tipo de ayuda en actividades de la rutina escolar. Docente y Actividad Escolar Los docentes que intervinieron en el estudio consideran que el maestro es un factor que genera y controla la actividad escolar y por ende está íntimamente ligado al aprendizaje de los alumnos. Él es el centro de acción donde gravita la atención del niño. En el docente se soporta toda la actividad académica, basada esencialmente en un discurso orientado a informar, dirigir, planificar y evaluar la actividad escolar. El Niño y la Actividad Escolar En el proceso de enseñanza-aprendizaje el niño juega un papel pasivo, donde recibe información de acuerdo a las pautas establecidas, es decir espera recibir órdenes para ser cumplidas. Así mismo el maestro es quien determina sus alcances en las competencias de perfil académico; lo que hace que el niño centre toda la atención en el docente. La escuela al igual que otros elementos culturales, es un espacio para la mediación. El niño trae conocimiento de la lengua escrita antes de llegar a la escuela y eso ha de tomarse en cuenta para establecer las pautas de trabajo y así optimizar la labor educativa. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 47 EXPLICACIÓN Una vez extraída la concepción de los docentes en los procesos de adquisición de la lengua escrita, conviene dar razones que expliquen la existencia de esta postura. Las concepciones sobre la lectura y la escritura que se revelan es este estudio tienen su origen y sustento en el conductismo cuyo predominio abarca casi todo el siglo XX. Esta teoría concibe el comportamiento como ente de estudio verdaderamente científico por su objetividad, ocurrencia y repetibilidad a través de los experimentos (Pozo, 1999). La conducta se percibe como un ente limitado por el tiempo y el espacio, que puede ser observado y manipulado. El principio básico de esta teoría lo constituyen las nociones de estímulo y de respuesta como fundamentos explicativos de cualquier tipo de conducta. Un elemento que influya sobre otro recibe el nombre de estímulo, y a la reacción concomitante se le llama respuesta o comportamiento. Este puede ser teóricamente simple, en cuyo caso correspondería a una respuesta frente a un estímulo determinado, como pudiera ser el caso de los movimientos físicos de las moléculas, que son objeto de estudio de la fisiología y la medicina (Pozo, 1999). Cuando se trata de comportamientos más complicados, éstos se pueden descomponer en sus elementos hasta llegar a sus reacciones más simples, como en el caso de las emociones, que se construyen a partir de las respuestas primarias frente al ambiente como lo son el miedo, la rabia y el amor. En esa consideración de la conducta se descarta el estudio de la conciencia como objeto de la psicología en un afán de aproximación a las ciencias naturales, para lo cual se vale de la manipulación (experimentación) del entorno y de la determinación de los efectos (observación) como método básico. Bajo esta concepción la lectura y la escritura se conciben como conductas objetivas y medibles. En la lectura predomina la decodificación de los signos escritos, manifestada en la sonorización de las grafías, las pausas y la entonación. A su vez, la escritura se muestra como un conjunto de trazos que corresponden a los sonidos del habla, la cual a su vez conforma una respuesta sonora ante estímulos del mundo de los objetos. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 48 Mayela Rodríguez O. Desde la visión conductista, los procesos de adquisición de la lengua escrita tanto en su aspecto de lectura como en el de la escritura son pasos progresivos de dominio de ciertas habilidades motoras de carácter oral o de carácter manual. De ahí que en la escuela se privilegien los ejercicios de pronunciación y entonación como medios que permiten consolidar las habilidades de la lectura. Lo mismo sucede con la escritura, cuya adquisición se inicia con ejercicios que favorecen la motricidad fina y culmina con el dominio del trazado de letras legibles, marcación de tildes, adjudicación de espacios, y colocación de los signos de puntuación. La escuela, por su parte, se concibe como el medio que proporciona los estímulos para que los niños adopten los comportamientos programados, que se pueden observar, medir y repetir hasta que la nueva conducta quede conformada. En ellas, el docente juega el papel de dispensador de estímulos que propicien el ejercicio de las habilidades de lectura y escritura, a la vez que se muestra como un ente que supervisa y evalúa los actos de lectura bajo parámetros de conducta observable. Es conveniente aludir al concepto de reforzamiento que implica el apuntalamiento o la anulación la nueva conducta. En el primer caso recibe el nombre de reforzamiento positivo; y consiste en estimular la repetición de la conducta obtenida por medio de una recompensa. Si no se logra la conducta deseada, el refuerzo va originando aproximaciones sucesivas hasta lograr su ejecución en el grado deseado (Skinner, 1990). El refuerzo negativo, por su parte, busca la eliminación del estímulo desfavorable, haciendo que el individuo se retire de la situación indeseable que origina el comportamiento no deseado. Otros conceptos concomitantes con la idea del refuerzo negativo son la supresión y el castigo. En el primer caso se elimina el comportamiento no deseado de una manera pasiva: No se ofrece la recompensa. En el segundo, se elimina el comportamiento imponiendo un hecho que el sujeto considera negativo. En el caso del castigo, éste puede servir de estímulo adverso en el sentido de que sirve de disuasión para los observadores, quienes evitarían de caer en un comportamiento similar al que se castiga. Cuando se administra correctamente, el refuerzo puede modificar con éxito el comportamiento y estimular el aprendizaje. La escuela es el medio por excelencia donde se da el aprendizaje ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 49 por la imitación de conducta conocido también como aprendizaje social Bandura (citado por Guillén, 1999). Según esta concepción, el aprendizaje se basa en la observación de los modelos conductuales de otras personas: maestros, padres… La influencia sobre los individuos se desarrolla en cuatro fases: - Atención: proceso de focalización en una conducta valorando sus características. - Retención: Proceso de recuerdo del modelo que influye la acción. - Reproducción o ejecución: Proceso de conversión de la observación en acción. - Reforzamiento: Proceso de consideración de las consecuencias de la reproducción de la conducta modelo: si recibe incentivos o recompensas o por el contrario, castigos que llevan al fracaso de la imitación. Así pues esta vertiente teórica es la que ha caracterizado la práctica tradicional de la enseñanza que descansa en la concepción de un esquema pedagógico donde el maestro como poseedor del saber presenta un modelo a los niños y realiza junto con ellos las actividades necesarias para que esto lo logren reproducir en los términos en que fue presentado. COMPRENSIÓN Frente a la teoría que se deriva de este estudio y la explicación considerada, se hace necesario explicitar su comprensión por medio de un conjunto de reflexiones que revelen el significado que adquiere la concepción sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita y el telón teórico que le subyace. Para responder a esta inquietud es necesario partir de los valores que tiene la investigadora. A través de mi formación concibo la educación como un proceso de aprendizaje integral e interactivo con el medio, por medio del cual el alumno adquiere conocimientos, valores y actitudes que le permiten desarrollarse como ente activo dentro de la sociedad. En ese proceso el docente ejerce el papel de mediador en el sentido de que facilita las situaciones de aprendizaje. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 50 Mayela Rodríguez O. Dentro de estos valores, los docentes sujetos de la investigación presentan un perfil no acorde con las exigencias que plantea la normativa vigente Currículo Básico Nacional (CBN) ni con la información académica que ha adquirido la investigadora en sus estudios de pregrado y de postgrado. Los resultados de la investigación considerados aisladamente muestran una coherencia entre la doctrina y la acción del docente: Un pensamiento conductista y una actuación docente coherente con esa concepción. Pero visto a la luz de las exigencias educativas del Estado y del progreso de la teoría esa coherencia adquiere la connotación de desfase. Ha habido un progreso en el campo de la teoría, hay un surgimiento de teorías humanistas en el campo de la psicología y de la educación. Este cambio se muestra en los lineamientos teóricos que subyacen en las reformas educativas del estado; sin embargo no se ha visto en la práctica educativa de estos docentes, a pesar de que el estado ha dedicado recursos a su implantación. Frente a la consideración de que el conductismo ha muerto, este estudio muestra que aún sigue vigente (Pozo, 1999). Desde mediados del siglo XX ha habido una progresión en el pensamiento educativo, que sienta sus bases en la concepción humanista de la educación y que se expresa en el constructivismo. Este avance conforma la base teórica de la reforma educativa expresada en el Currículo Básico Nacional (CBN, 1997); y sobre el mismo, el docente ha venido recibiendo información a través de cursos y talleres de actualización. Este hecho obliga a reflexionar sobre la efectividad de las políticas de formación docente. ¿Cómo se explica que existiendo una normativa que favorece a una determinada corriente del pensamiento educativo, en cuya expansión se han invertido recursos, subsistan los paradigmas que se han tratado de erradicar? La reflexión conduce naturalmente a considerar elementos que han llevado al fracaso de esas políticas de cambio establecidas en el Currículo Básico Nacional. Uno de esos elementos es la implementación incompleta del CBN. A pesar de que se ofrecen cursos, talleres de formación y dotación de material didáctico a las escuelas, no hay seguimiento, control, evaluación y supervisión. Se ofrece la información teórica, pero en ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 51 la práctica se sigue con los paradigmas anteriores, reforzados por el ambiente de trabajo. Además no se orienta la implementación práctica de los conocimientos dados en los cursos de formación, que en la realidad se limitan a la información de tipo académico. A esta falla se debe agregar la normal resistencia al cambio que caracteriza el comportamiento de cualquier institución, el cual se encuentra reforzado por el enraizamiento del paradigma conductista en la actuación de los docentes y directivos de la educación. Otro factor que se debe tener en cuenta está conformado por la ausencia de incentivos económicos y sociales que promuevan el cambio de la práctica docente. Todas estas reflexiones conducen a la siguiente afirmación: el conductismo sigue vigente en el ambiente escolar y permea todos los actos de la escuela como normativa subyacente, como comportamiento del docente y del alumno, como espíritu que habita en los espacios físicos de la escuela. Es señal de cierto grado de ineficiencia de los organismos creadores, ductores e implantadores de las políticas del Estado en materia educativa en general y consecuentemente de la políticas relacionadas con la lectura y la escritura. Estos organismos han realizado reformas que de acuerdo con los resultados, por lo momentos se han quedado en el papel. Los cambios no se pueden dar drásticamente. Para que sea integral debería corresponder en los dos niveles, en el pensamiento y en la acción, y para que se den tiene que darse en todos los factores: el docente, el medio, el ambiente. DISCUSIÓN Sobre la base de las consideraciones anteriores se tiene que la ideas o concepciones que acompañan la teoría fundamentada encuentra expresión de su razón de ser en el paradigma conductual. Existe un punto de coincidencia entre la teoría fundamentada como en la teoría establecida del conductismo. Analizadas esta línea conceptual de contraste, se hace necesario abordar otros escenarios de investigación con la finalidad de ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 52 Mayela Rodríguez O. comparar las concepciones sobre lectura y escritura derivadas de la teoría fundamentada del estudio con las surgidas de la concepciones constructivistas centradas en el alumno como eje central del proceso de aprendizaje. A este respecto, es necesario afirmar que Piaget no formula ninguna teoría relacionada con la lectura y la escritura. Sin embargo, se pueden sugerir algunas ideas a partir de los principios por él establecidos. Al enfrentarse el niño con el lenguaje escrito en cualquiera de sus dimensiones, ejecuta un acto de aprendizaje en el cual se deben darse los procesos de adaptación y de organización. En este acto es fundamental la acción del individuo, que de acuerdo a sus condiciones de desarrollo va asimilando la lengua escrita como objeto externo. Frente a él realiza un acomodo de sus estructuras internas que van alterando su organización experiencial del objeto de conocimiento. Esta postura concede al alumno un papel fundamental en el proceso de aprendizaje en el sentido de que el aprendiz se constituye en el centro de la actividad de aprendizaje que se adueña del objeto de acuerdo con su grado de desarrollo. En tal sentido, la concepción que emerge de la observación y respuestas de los docentes otorga a la acción del objeto el papel primordial en el aprendizaje de la lectura y de la escritura. Es el objeto el que se impone al sujeto como estímulo que provoca una determinada respuesta que se erige en aprendizaje. Si se pronuncian bien lo sonidos, si se hacen las inflexiones de voz apropiadas y si se realizan la pausas en los momentos adecuados, se sabe leer. Si se tiene una buena caligrafía, acentuación y ortografía correctas, se sabe escribir. Ferreiro y Teberosky (1979) desarrollan las líneas piagetianas en el campo específico de la lectura y de la escritura y logran determinar el proceso de adquisición de la lengua escrita a través de varias etapas: presilábica, silábica, silábica–alfabética, alfabético. Por su parte, la concepción que subyace en la actuación y testimonio de los docentes de este estudio admite una gradualidad física que va desde la discriminación individual de las letras, su unión en sílabas y luego en palabras hasta culminar en la lectura de frases y oraciones. De acuerdo con las unidades que se tomen como base surgen diversos métodos de aprendizaje de la lectura, el alfabético, el fónico, el silábico o el método global. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 53 Kauffman (1992), por su parte, resta importancia a los métodos en la enseñanza de la lectura y de la escritura y otorga prevalencia a la acción mediadora del docente para quien los errores constructivos en la adquisición de la lengua escrita deben ser señales del grado de progreso en que se encuentra el niño. En relación con el aspecto social, la teoría que subyace a la acción y pensamiento de los docentes de este estudio concibe al alumno como un sujeto pasivo que recibe las directrices del docente que se presenta como director, planificador, informador y director de la actividad escolar. Vygotsky (citado en Blonsky, 1993), por el contrario, aunque da gran importancia al docente como mediador de aprendizajes, coloca al niño en el centro de la actividad escolar. Para él es básica la relación social o interpersonal, que luego se hace personal: Se va de lo interpsíquico a lo intrapsíquico. En este proceso es fundamental la mediación docente en el aprendizaje, que progresa en la medida en que el maestro considere las zonas de desarrollo próximo del estudiante. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES El análisis e interpretación que se derivan de este estudio en las concepciones de los docentes sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita, conducen a las siguientes conclusiones: • Con respecto a la lectura y la escritura, el docente concibe la lengua escrita como un objeto cultural externo al individuo que se impone como estímulo frente al cual se deben adoptar determinadas conductas. En el caso de la lectura, tales conductas se expresan en la producción de secuencias de sonidos según determinados patrones de pronunciación, acentuación y entonación que traducen unidades gráficas en unidades sonoras. La escritura, por su parte, corresponde a la reproducción de ciertos modelos caligráficos que codifican unidades sonoras en unidades escritas. • En relación con el aprendizaje de la lengua escrita, de acuerdo con los datos obtenidos, la lengua escrita se aprende a través de habilidades aisladas, partiendo de las unidades más simples — las letras, los sonidos — luego ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 54 Mayela Rodríguez O. las sílabas para llegar al aprendizaje de las palabras. Estas habilidades se aprenden a través de la repetición oral y escrita (caligrafía). Una vez ejercitadas y aprendidas estas habilidades, ya se está en capacidad de llegar al significado. • Con respecto al niño como sujeto de aprendizaje de la lectura y de la escritura; de acuerdo con el modelo emergente, aquél es considerado como ente pasivo que debe reproducir las conductas modelos. El alumno se convierte en un receptor de información, oyente de las exposiciones de los docentes, repetidor de la información “recibida” y “copiador” de contenidos. • La actividad docente, por su parte, se encuentra marcada por el ofrecimiento de estímulos que planificados previamente deben generar conductas preestablecidas, a las cuales se puede llegar a través de acercamientos progresivos. En consecuencia, el docente actúa como autoridad frente al conocimiento, garante de la conducta esperada, que determina la planificación, supervisión y control de la actuación dentro del salón de clase. • Con respecto al papel de la escuela en el proceso de adquisición de la lengua escrita, ésta constituye un medio generador de estímulos que propicia la producción de respuestas planificadas. Ella se muestra como la matriz del conocimiento letrado, fuera de ella no hay saber o, si existe, es de menor calidad. Como Institución se ha convertido en custodia de la lengua escrita y exige al niño en proceso de aprendizaje una actitud contemplativa frente a este objeto. En este sentido, la escuela estructura todos sus componentes en una sinergia que se focaliza en el logro de las conductas esperadas. Las normas, los directivos, los docentes, la organización de las aulas se orientan al cumplimiento de los objetivos conductuales propuestos. • El papel de los padres se sitúa dentro de ese gran marco conceptual de la escuela. Los padres vienen a constituirse apéndices de la institución en el sentido de que pueden, con su autoridad y preocupación, reforzar lo que ella ofrece y se propone. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 55 • En relación con el papel de lo compañeros de clase, no hay ningún tipo de referencia. Dentro de su modelo, lo máximo que se puede deducir es que los mejores sean tenidos como modelos de actuación lectora y escritural frente a los que no logran los objetivos propuestos. Revisados los elementos en que se orienta la acción educativa de los docentes de este estudio se ofrecen las siguientes recomendaciones. • Presentar a los docentes otras concepciones sobre la lectura y la escritura actualizadas de acuerdo con los adelantos teóricos que han surgido a partir las concepciones constructivistas que las consideran como procesos de creación de significados a partir de la interacción con los textos escritos. • Superar las concepciones de aprendizaje de carácter conductista por teorías integrales, que incluyan dentro de sus contenidos los procesos que se dan en los individuos en su confrontación con el objeto de aprendizaje. En este caso, la lectura y la escritura deben constituirse en el eje del proceso escolar de apropiación por ser el conocimiento inicial más importante y el instrumento de aprendizaje de otros conocimientos. • Adoptar concepciones que consideren al educando como sujeto activo que se apropia del lenguaje escrito de acuerdo con su grado de desarrollo, su personalidad, experiencias y conocimientos previos. • Propiciar entre los docentes el perfil de facilitador de situaciones e interacciones que permitan al niño desarrollarse como sujeto responsable de su propio aprendizaje. En tal sentido, es necesario que el maestro promueva un ambiente lector en el que se produzcan verdaderos actos de lectura y escritura como actividad cotidiana. El docente debe conectar la escuela con la vida, romper el divorcio entre los contenidos de los textos y lo que los alumnos perciben y adquieren en el contacto con la realidad. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 56 Mayela Rodríguez O. • Convertir la escuela en un verdadero espacio de vida, en el que se puedan establecer las relaciones humanas que hagan posible el desarrollo biológico, emocional e intelectual del niño. En este medio, el alumno puede construir su propio conocimiento y apropiarse del conocimiento de los demás (Ferreiro, E., 1982). Para ello es indispensable la creación de un contexto que facilite la práctica de la oralidad y de la comunicación escrita como expresión del quehacer cotidiano de la escuela. • Establecer lazos entre la escuela y los padres de manera que éstos se conviertan en participantes activos del proceso de socialización y aprendizaje de los niños en general. En este cometido, su labor como promotores de la lectura y de la escritura los convierte en soportes fundamentales de la misión de la escuela. • Promover las relaciones entre los compañeros de clase que posibiliten la creación de textos formales y espontáneos a partir de sus propias experiencias en los diferentes ámbitos sociales: la escuela, la familia, el juego, el contacto con la naturaleza. Las conclusiones y recomendaciones surgidas de este estudio se convierten en temas de reflexión para todos los involucrados en el campo de la educación, que busca la formación de las nuevas generaciones. Estas reflexiones se convierten así en anhelo de transformación de un mundo en el que se respeten todos los actores de los procesos de socialización y en especial los que conforman el ámbito educativo. En este medio, la lectura y escritura se erigen en instrumentos básicos para la creación, intercambio y consolidación de significados en la formación de un individuo bio-psico-social. ARJÉ Revista de Postgrado FACE-UC. Vol. 2 No. 3. Julio-Diciembre 2008 Concepción del docente sobre los procesos de adquisición de la lengua escrita. Estudio etnográfico en la primera etapa de educación básica de la U. E. “República del Perú”. 57 REFERENCIAS Blonsky, L. (1973). Vigotsky. Psicología y Educación. Madrid. Bruner, J. (1984). Acción pensamiento y lenguaje. Madrid: Alianza. Da Viña, L. R. (1999). Adquisición de la lectoescritura. Revisión crítica de métodos y teorías. Bogotá: Homo Sapiens. Ferreiro, E. y Gómez P.(1982). Nuevas perspectivas sobre los procesos de lectura y escritura. México: XXI. Ferreiro, E. y Teberosky, A. (1979). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México: XXI. Goetz, J. y Le Compte, M. (1998). Etnografía y diseño cualitativo en investigación educativa. Madrid: Morata (orig. 1984). Guillén, O. (2000). Psicología. Editorial Salesiana. Kaufman, A. M. (1992). Leer y escribir. Un enfoque constructivista de la enseñanza y del aprendizaje. 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