ACTUACIONES EN CAUCES NATURALES: COMPATIBILIZACIÓN CON EL DESARROLLO SOSTENIBLE D. José López Garaulet Jeje de Area de Actuaciones Especiales en Cauces. Confederación Hidrográfica del Júcar Ministerio de Medio Ambiente. Dña. Lourdes Ortega Santos Gerente de PyG, Estructuras Ambientales, S.L. RESUMEN Una de las principales preocupaciones de la CHJ es minimizar los efectos de las avenidas e inundaciones que de forma periódica afectan a nuestro territorio y que provocan numerosas daños. La idiosincrasia de algunas zonas del levante español, donde conviven la presión agrícola, urbanística e industrial, al mismo nivel que las demandas sociales y ambientales, supone retos crecientes en el diseño de éste tipo de obras, condicionando en gran medida la posterior ejecución de las actuaciones. Se expone en la presente comunicación los objetivos y condicionantes de dos obras emblemáticas para la zona del entorno metropolitano de Valencia, la “restitución y adaptación de los cauces naturales de los barrancos del Poyo”, y la “prolongación del encauzamiento del barranco del Carraixet”, bajo el prisma de la consecución de un desarrollo sostenible compatibilizando los criterios de diseño de las actuaciones con los tres pilares que lo sustentan: los aspectos sociales, económicos y los ambientales. Asimismo, se exponen cómo hay iniciativas que “suman”, que aportan un valor añadido a sus beneficios directos, y el desarrollo de éste tipo de infraestructuras bajo los condicionantes expuestos, devuelven a los cauces esa potencial línea de vertebración del territorio que nunca debieron perder. LAS ACTUACIONES HIDRÁULICAS SOBRE LOS CAUCES Introducción El control sobre los cauces ha sido objeto de estudio desde muy antiguo, con el fin de evitar los desastres naturales provocados por las crecidas en épocas de lluvia. Las ramblas son cauces abiertos típicos de los paisajes mediterráneos, cuyos nacimientos suelen ser poco definidos en forma de pequeños barrancos que van ganando anchura y perdiendo profundidad para, a través de las llanuras aluviales levantinas, llegar a la costa. A diferencia de los ríos, suelen mostrarse secas durante meses o incluso años y presentar grandes avenidas con carácter torrencial en tan solo unos minutos. Los escasos ríos mediterráneos, como el propio Júcar, también han demostrado a lo largo del tiempo su poder destructor que se guarda en la memoria de los habitantes de La Ribera, como las riadas históricas de 1571, 1864 y 1982, como las más representativas. El clima mediterráneo condiciona en gran medida el diseño de las actuaciones sobre los cauces. Es difícil entender obras de una gran envergadura sobre cauces “secos”, pero la historia nos dice que un episodio de gota fría puede significar la pérdida de bienes y de personas en muy corto periodo de tiempo. 1 La primera referencia sobre la necesidad de establecer un plan de regulación y aprovechamiento de los recursos del Júcar data de 1932, donde se definió un Plan de Estudios que concluyó con la construcción de las presas de Alarcón y Contreras, entre otras, así como el estudio inicial de la presa de Tous. La cuenca baja y media del río Júcar volvió a manifestarse con toda su fuerza en octubre de 1982 donde una avenida extraordinaria produjo la destrucción de la presa de Tous. Este hecho llevó a la redacción del Plan General de Defensa contra Avenidas del Júcar, finalizado en junio de 1985, cuyo objetivo fundamental era la laminación de avenidas para disminuir los caudales punta circulantes en la plana del Júcar. Posteriormente, la avenida extraordinaria de 1987, da un nuevo impulso a las actuaciones previstas en el Plan redactado, decretándose de urgencia la construcción de las presas de Tous, Bellús y Escalona, junto con otras obras necesarias para la protección de las poblaciones ribereñas, tales como motas y el encauzamiento de los ríos Albaida y Magro en la confluencia con el Júcar. Ya en éste año, al objetivo fundamental de laminación de las avenidas se incorporan otras visiones de las obras que la sociedad comienza a demandar como son la incidencia ambiental que las mismas generan en el medio. Las obras del Plan de Defensa mencionado anteriormente quedan prácticamente concluidas en la década de los 90 con la puesta en servicio de las presas de Escalona, Bellús y Tous, esta última en el año 1996, disminuyéndose notablemente el riesgo de inundación en la ribera del Júcar. No obstante, persiste en la actualidad el riesgo de crecidas, principalmente por las aportaciones de los ríos Magro (aguas abajo de la presa de Forata), Sellent (afluente del Júcar) y Cañoles (afluente del Albaida aguas abajo de la presa de Bellús). La gestión sobre las cuencas y los cauces Así, a finales de la década de lo 90, y con el fin de unificar el nivel de riesgo frente a las inundaciones, se comienza a trabajar en el Plan Global frente a inundaciones de la Ribera del Júcar con los objetivos básicos de las actuaciones a proyectar basados en tres ideas principales: - La defensa contra avenidas e inundaciones La integración en el territorio Conformar una herramienta de ordenación del territorio Dentro de estos objetivos, se tienen en cuenta diversos criterios de diseño, que podemos resumir en los siguientes puntos: - - Aprovechar e integrar aquellas obras de infraestructuras existentes no deficitarias. Compatibilizar las nuevas obras de fábrica y actuaciones en nuevos cauces con la red de drenaje existente, sentando además las bases para la futura ordenación del territorio. Garantizar que las condiciones de drenaje de los terrenos colindantes no se alteren, mejorando incluso su situación. Minimizar las superficies a expropiar. Optimizar el movimiento de tierras. Cuidar los aspectos de integración medioambiental, así como los paisajísticos y estéticos. 2 Para ello se proponen una serie de actuaciones estructurales y otras no estructurales, que se concretan en: • • Actuaciones estructurales: - Estructuras de laminación: Presa de Estubeny, sobre el río Sellent Presa de Montesa, sobre el río Cañoles Presa del Marquesado sobre el río Magro - Acondicionamiento de cauces: - Restauración Hidrológico-Forestal: En las cuencas de los cauces en sus tramos medio y alto para la reducción de la carga de sedimentos que las crecidas de los ríos y barrancos transportan y depositan en La Ribera. Actuaciones no estructurales: Adecuación barranco de Barxeta Adecuación barranco de Casella Adecuación barranco de Murta Acondicionamiento río Júcar hasta la AP-7 Mejora del drenaje del Marjal Sur del Júcar Mapas de inundabilidad de la zona Mapas de zonificación del riesgo de inundación Expropiaciones realizadas con criterios ecológicos Generación y gestión de suelo público Establecimiento de un Proceso de Participación En paralelo a éstos Planes que se han desarrollado en la zona de La Ribera del Júcar, la protección del área metropolitana de Valencia y las comarcas limítrofes también ha sido objeto de una planificación específica y con una concepción global. En éste caso se ha basado en el control de las tres cuencas vertientes que las engloban: - Zona Norte: Cuenca del Carraixet Zona Centro: Cuenca del Turia Zona Sur: Cuenca del Poyo Tras las grandes riadas del año 1957, el río Turia, cuyo cauce natural cruzaba la ciudad de Valencia era desviado por el sur de la misma, mediante una obra de enorme envergadura denominada “Solución Sur”. De este modo la ciudad quedaba protegida frente a grandes avenidas provenientes de la cuenca del Turia. No obstante, el crecimiento del área metropolitana de Valencia y el desarrollo cercano de grandes ciudades se veía aún inseguro las avenidas e inundaciones de dos barrancos cercanos, el Carraixet al Norte y el Poyo al Sur. Para recoger las necesidades de unas comarcas muy afectadas por las inundaciones se proyectaron las actuaciones necesarias para la realización de grandes obras hidráulicas cuyo objetivo primordial fue dar una respuesta eficaz y segura ante las posibles inundaciones, mediante el control de estos cauces temporales, y al mismo tiempo minimizar los efectos de las avenidas e inundaciones que periódicamente afectan a la cuenca de estos barrancos, incrementando con ello la seguridad de sus habitantes y bienes y posibilitando el desarrollo urbano e industrial, siempre con el máximo respeto al entorno. 3 Plano 1: Llocalización de las tres cuencas vertientes de Carraixet, Turia y Poyo En los años noventa comenzarán las actuaciones más importantes en la cuenca del Carraixet, mediante labores de encauzamiento que garantizan la evacuación de caudales superiores a los 1.250 m3/s, frente a los 350 m3/s de capacidad del cauce original. En el 2002 comienzan las actuaciones en el barranco del Poyo, con el objetivo de duplicar la capacidad de drenaje del cauce, pasando de 400 a 800 m3/s de caudal máximo compatible con las infraestructuras existentes de todo tipo y con la Albufera, conformando la primera de un conjunto de actuaciones integrales para toda la cuenca. Para la consecución de los objetivos propuestos se proyectan diferentes soluciones según las zonas a tratar: - - En las zonas rurales se diseñan revestimientos flexibles y permeables (escollera, gavión, geosintéticos, revegetaciones). Los revestimientos rígidos (hormigón) son obligados por necesidades hidráulicas (aumento de la velocidad del caudal de desagüe), con el fin de evitar la erosión y evacuar el mismo caudal de diseño en secciones de menor capacidad. La integración ambiental y la restauración de las obras, independientemente de su tipología, constituyen una de las premisas de la Confederación Hidrográfica del Júcar en el desarrollo de las actuaciones que acomete. A continuación se exponen dos obras emblemáticas para la zona del entorno metropolitano de Valencia, la primera fase del proyecto de “Restitución y adaptación del cauce natural del barranco del Poyo”, y el “Encauzamiento del barranco del Carraixet”, bajo el prisma de la consecución de un desarrollo sostenible compatibilizando los criterios de diseño de las actuaciones con los tres pilares que lo sustentan: los aspectos sociales, económicos y los ambientales. 4 Finalmente, se comenta cómo se está planificando el Plan de Recuperación del Júcar, con el Proceso de Participación que se está iniciando y que hace que éste tipo de actuaciones bajo los condicionantes expuestos, devuelvan a los cauces esa potencial línea de vertebración del territorio que nunca debieron perder. Para ello se hallan en proceso de diseño las actuaciones correspondientes al Plan Global del Júcar, que comprenden el tratamiento del cauce del río en su tramo final que abarca desde Carcaixent hasta su desembocadura en el mar por Cullera, e integrando el Estany de Cullera como cauce auxiliar para avenidas superiores a los 1000 m3/s, capacidad actual del río. Ello incluye la construcción de las presas de Montesa y de Estubeny en los cauces de los afluentes Cañoles y Sellent. Todas estas actuaciones están enmarcadas dentro de la filosofía del Plan de Recuperación del Júcar EL BARRANCO DEL POYO Localización y problemática La parte final de la cuenca del barranco del Poyo la encontramos al sur del área metropolitana de Valencia. El cauce principal tiene 45 Km. de longitud aproximada y drena una superficie de unos 440 km2, con caudales del orden de los 800 m3/s para un periodo de retorno de 500 años. Su recorrido es el de una típica rambla mediterránea, con un nacimiento difuso en las estribaciones más orientales del sistema ibérico, surcando primero campos de agricultura de secano y después de regadío, para llegar finalmente a desembocar en el lago del Parque Natural de la Albufera. La idiosincrasia del territorio, donde conviven la presión urbanística e industrial (más de 150.000 habitantes en la comarca de L’Horta Sud, junto al área metropolitana de la ciudad de Valencia) con la existencia de un Parque Natural, ha supuesto un reto en el diseño de esta obra, y ha obligado a proyectar soluciones para el tratamiento del cauce que abarcan prácticamente la totalidad de las técnicas existentes. Se trata de un barranco muy condicionado por los habitantes de su entorno, cuya presión sobre el mismo nunca ha cesado. Desde los históricos aterramientos para ganar superficie agrícola, hasta los actuales para la expansión de polígonos industriales y las áreas urbanas. Esto, unido al sinfín de infraestructuras que intersectan con el cauce (ferrocarriles, autovías, carreteras, todo tipo de servicios,…), nos dejan un estado del cauce muy condicionado a la hora de ejecutar actuaciones hidráulicas. En este sentido, el tratamiento sobre el barranco se encuentra con un entorno complejo, y debe ser capaz de integrarse en el mismo. Objetivos y actuaciones Los objetivos específicos para esta cuenca son: - Protección frente a inundaciones. Ordenación hidrográfica y minoración de impactos futuros por cambios en uso del suelo y modificaciones en el direccionamiento de escorrentías. 5 - Protección del Parque Natural de la Albufera y de su entorno frente a procesos de colmatación y de pérdida de calidad en ecosistemas. Restauración ambiental del medio fluvial, creación de conectores ecológicos entre el litoral y las zonas de interior, e integración territorial de las actuaciones proyectadas. Restitución de las capacidades de drenaje de los cauces naturales. Dentro del PROGRAMA A.G.U.A. (Actuaciones para la Gestión y Utilización del Agua) se contempla la adecuación ambiental y drenaje de la cuenca del Poyo como una de las medidas de control de los procesos de aportación de sedimentos a la Albufera. En concreto, la fase 1 del proyecto de restitución y adaptación del cauce natural del Barranco del Poyo es la primera de las actuaciones previstas en el Programa. El Proyecto recoge todas las medidas necesarias para llevar a cabo el tratamiento del Barranco del Poyo en un tramo superior a los 7 km. en los términos municipales de Paiporta, Catarroja y Massanassa. El objetivo de restituir la capacidad del cauce, pasando de 400 a 800 m3/s, compatibilizándolo con la realidad del territorio por el que discurre. Foto 1: Vista del resultado de la actuación sobre el tramo del Poyo que discurre por el Parque Natural de la Albufera, en una zona limítrofe al cinturón industrial del Área Metropolitana de Valencia 6 A fin de compatibilizar tanto las necesidades hidráulicas y medioambientales, con la realidad del entorno y el estado de cauce en el momento de las obras, se diseñan diversos revestimientos para diferentes tramos, que consigan cumplir y adoptar los condicionantes y objetivos de partida. Finalmente son empleadas hasta seis secciones tipo diferentes: 1. Refuerzos localizados de escollera en estructuras existentes en el tramo urbano de Paiporta. 2. Cajeros de muro y coraza de gavión y lecho de escollera, en entorno agrícola. 3. Muros verticales de hormigón prefabricados y lecho de hormigón in situ sobre pedraplén, en zona urbana de Catarroja y Massanassa. 4. Losas prefabricadas sobre talud y lecho de hormigón in situ sobre pedraplén, en zona urbana e industrial. 5. Taludes revestidos con geoceldas rellenas de tierra vegetal e hidrosembradas y lecho de escollera, en zona industrial cercana al Parque Natural. 6. Taludes y lecho en terreno natural, y refuerzo de escollera en pie de talud. Foto 2: Los requerimientos de tratamientos “duros” no son incompatibles con la integración ambiental (Tramo 4) Asimismo, se han garantizado los servicios y servidumbres afectadas durante la obra, reponiéndose de manera satisfactoria. También se ha incrementado la permeabilidad entre márgenes mediante la creación de caminos de servicio de uso restringido y pasarelas peatonales. Foto 3: Sección en “U” de hormigón. La integración se ha basado en colorear el propio hormigón y revegetar la parte superior de las márgenes (Tramo 3) Foto 4: Pasarela peatonal en Paiporta 7 Las actuaciones de restauración ambiental han consistido en: - - Recebo de todos los revestimientos permeables y flexibles (escolleras, gavión, juntas entre losas) con tierra vegetal procedente de la propia obra, e hidrosiembra y plantación de estas superficies. Mejora del hábitat acuático y palustre, mediante la ampliación de la lámina de agua y la plantación de especies palustres (lirios, eneas, carrizo). Mejora del hábitat del martín pescador y de la avifauna propia de humedales. Mejora de la calidad de las aguas, mediante filtros naturales. Restitución de Vías Pecuarias y Vía Augusta. Revegetación de taludes y márgenes de caminos. Foto 5: Tras ensayar los posibles resultados del recebo e hidrosiembra de la coraza de gavión, se procedió a restaurar así todo el Tramo 2 Fotos 6 y 7: Adecuación del hábitat piscícola para martín pescador e instauración de un filtro verde para mejorar la calidad de las aguas 8 Las obras se han desarrollado entre el año 2002 y 2006, y su inversión ha sido de aproximadamente 32 millones de euros. Han sido cofinanciadas con Fondos de Cohesión de la Unión Europea. Las previsiones de inversión para el total de actuaciones a desarrollar en la cuenca, partiendo de reforestaciones en cabecera de cuenca hasta la mejora ambiental de la propia Albufera, pasando por la adecuación del cauce en diversos tramos y la creación de corredores naturales, está prevista que sea de 146,9 millones de euros. Las actuaciones realizadas en este cauce han compatibilizado la garantía de la seguridad de las personas y los bienes ante las inundaciones y el respeto al medio ambiente, especialmente al tramo que discurre por el Parque Natural de la Albufera, humedal emblemático de la Comunidad Valenciana. Foto 8: Cuando no se nota la mano del hombre y quedan mejorados los valores ambientales, podemos pensar en que la ingeniería civil y la integración ambiental son compatibles y debemos tenerlo siempre como objetivo 9 EL BARRANCO DEL CARRAIXET Localización y problemática La cuenca del barranco del Carraixet la encontramos al norte del área metropolitana de Valencia, entre las cuencas del Turia y del Palancia. El cauce principal es de aproximadamente 33,5 Km. de longitud y drena una superficie superior a los 300 Km2, con caudales del orden de los 1.250 m3/s para un periodo de retorno de 500 años. La población potencialmente afectada por el riesgo de avenidas e inundaciones de esta área limítrofe a Valencia, en la comarca de L’Horta Nord, es de unos 200.000 habitantes. Se caracteriza por ser una rambla de carácter típicamente mediterráneo que, excepto en la zona de su desembocadura al mar, permanece seco durante todo el año, a expensas de lo que las precipitaciones puedan aportar. Recibe las escorrentías de la parte sur de la Sierra Calderona, de la cual se aleja por llanuras agrícolas de secano, de escasa densidad poblacional, hasta acercarse a la fructífera costa, donde el desarrollo urbanístico e industrial compite con la agricultura intensiva. Es esta zona final donde, junto a las características climatológicas del levante español, se unen todos los factores que condicionan en mayor parte al diseño de las actuaciones: - Fuerte desarrollo urbanístico e industrial. Elevada densidad poblacional. Mayor desarrollo de infraestructuras (carreteras, ferrocarriles,…). Terrenos por debajo del nivel del mar. Objetivos y actuaciones Los objetivos específicos para esta cuenca son: - Restitución de las capacidades de drenaje de los cauces naturales. Defensa de las poblaciones cercanas al barranco. Evacuación de las aguas de zonas cuyo drenaje ha disminuido con el paso del tiempo. Adecuación de las incorporaciones de afluentes. Como primer paso es redactado un proyecto de actuación integral para el cauce, conformando distintas fases que abarquen los tratamientos necesarios para cubrir todas las necesidades. El desarrollo de estas actuaciones de gran envergadura, ejecutadas en parte, se esta llevando a cabo mediante las siguientes fases: Fase 0: Defensa de las riberas mediante la formación de las motas de defensa e integración de las numerosas infraestructuras existentes (intersección con autovía, carreteras y ferrocarriles). Obras finalizadas a mediados de los años noventa. Fase1: Adecuar el tramo superior del Carraixet para así garantizar la fase 0 y la defensa de las poblaciones adyacentes, y drenaje de la cuenca del Palmaret mediante la apertura de dos cauces de nueva creación, Palmaret Alto y Palmaret Bajo. Obras finalizadas en el año 2006. Fase prevista: Defensa de las poblaciones de mayor peligro mediante el tratamiento de otro tramo del Carraixet y adecuación de las incorporaciones de los afluentes más importantes. Está en fase proyecto y se prevé que las obras finalicen antes del 2011. 10 Fase 0, 1992 a 1996: Las características principales de este tramo son dos: - Terrenos colindantes por debajo del nivel el cauce y necesidad de drenaje hacia el mismo, lo que supone que la solución elegida sea crear unas motas de contención en los márgenes con un revestimiento lo más permeable posible. - Intersección del cauce con infraestructuras de paso que limitan la sección hidráulica en la zona más cercana a la desembocadura al mar. Se actúa sobre una longitud aproximada de 3,5 km., entre la zona urbana de Tavernes Blanques y Almássera y la desembocadura al mar, en Alboraya. La integración de las estructuras de paso afectadas (ferrocarriles, autovía, carreteras,…), evitando el corte de las servidumbres eleva la complejidad del desarrollo de las obras, que se desarrollan sobre un lecho con presencia continua de agua. El tratamiento del cauce se basó en dos tipos de revestimiento: - Una sección trapezoidal formada por lecho de escollera y cajeros de muro y coraza de gavión para el entorno agrícola. - Una sección en “U” de hormigón armado en las zonas urbanas y en las intersecciones con infraestructuras. En este primer proyecto de encauzamiento no se contemplaba la restauración ambiental de las obras y fue más adelante, con un proyecto específico, cuando se acometió esta integración ambiental del tramo en cuestión, revegetando las márgenes de los caminos de servicio y el entorno de la desembocadura. Foto 9: Vista sección de gavión y lecho de escollera, con lámina de agua en lecho (Fase 0) 11 La consecución de esta fase inicial de las actuaciones previstas para la cuenca ha significado, una vez garantizadas la seguridad de sus riberas, el desarrollo urbanístico e industrial de las poblaciones cercanas. De este modo, polígonos industriales de poblaciones como Alboraya y Almássera, han crecido a la vera del propio barranco, en una zona históricamente presa de avenidas e inundaciones. Asimismo, la creación de caminos de servicio con circulación de vehículos restringida unido a la adecuación del entorno mediante revegetaciones y mobiliario urbano, hacen del cauce un lugar idóneo para expansión, ocio y deporte. Fotos 10 y 11: Vista desarrollo urbanístico junto a las riberas del Carraixet Fase 1, 2002 a 2007: La evolución de las técnicas unido a la sensibilidad por los valores medioambientales, quedan constatadas en los tratamientos realizados a los cauces afectados por esta reciente fase de actuación. La sección tipo empleada en más del 90 % de los revestimientos está basada en el empleo de geoceldas, elemento geosintético alveolar, tipo “panel de abejas”, que permite incrementar los rendimientos tanto en transporte como en instalación, minimizando además la explotación de canteras y la colmatación de vertederos, dado que por su escaso espesor, requiere poca excavación y por lo tanto menor cantidad de tierras sobrantes. Como el relleno de las mismas se ha realizado mayoritariamente con tierra vegetal proveniente de la propia obra, no es necesario el aporte externo de áridos y el balance medioambiental del movimiento de tierras mejora considerablemente. En los tramos con mayor riesgo de erosión hidráulica estas geoceldas, en la parte del lecho o bajo las estructuras, se han rellenado con hormigón, haciendo las veces de armadura. Para aquellos tramos con mayores exigencias hidráulicas o debido a la interferencia con otras infraestructuras o limitaciones de espacio, se ha optado por una sección de “U” de hormigón armado, garantizando la respuesta del conjunto de la actuación. Esta Fase 1 ha consistido en la prolongación del encauzamiento del Barranco del Carraixet a lo largo de otros 3,9 Km., y la apertura de dos nuevos cauces, Palmaret Alto y Palmaret Bajo, de 3,7 y 2,1 Km. de longitud respectivamente, cuya función es drenar la subcuenca del Palmaret y evacuar sus aguas hacia el Carraixet. De este modo queda garantizada la anterior fase, además de solucionar el problema continuo de inundaciones del Palmaret debido a su carácter casi endorreico, pues su drenaje natural se ha ido colapsando con el paso de los tiempos. 12 Foto 12: Vista sección de geoceldas hidrosembradas, lecho sin caudal permanente (Carraixet Fase 1) Fotos 13 y 14: Restauración de la sección basada en geoceldas mixtas y reposición de servidumbres (Palmaret Alto y Bajo, Fase 1) Entre las tres fases se habrá tratado una longitud de casi 16 km. de cauces, incluyendo su integración ambiental, con unas inversiones aproximadas de 65 millones de euros. Una vez asegurado esta parte del territorio, el desarrollo de las poblaciones, a nivel urbanístico e industrial, se ve incrementado a ojos vista, sobre todo al formar parte del cinturón de la capital. 13 EL RIO JUCAR Tal y como ya se ha comentado en la introducción, el Plan de Recuperación del Júcar marca las líneas maestras en las que se están basando las soluciones a adoptar en los proyectos del Plan Global del Júcar. Entre estas líneas, queremos destacar el Proceso de Participación que se está llevando a cabo de forma paralela a la redacción de los documentos técnicos. La importancia de los Procesos de Participación pública consiste en tener en cuenta a las personas para influir sobre los resultados de los distintos planes, así como en el proceso de trabajo ligado a la elaboración de los mismos. Es lo que denominamos una planificación participada, debiéndose implicar a los ciudadanos en la toma de decisiones. Con ello se pretende una mayor implicación de la ciudadanía al aumentar la información, educación y sensibilización de la opinión pública sobre la recuperación y gestión sostenible del río Júcar. Para cumplir las exigencias de la Directiva Marco del Agua (DMA) sobre la participación de los agentes sociales en el establecimiento del Plan de Recuperación del Júcar (PRJ) ha sido necesario planificar un proceso que permita tener operativa una mesa de participación que coordina una serie de comisiones temáticas de trabajo conformadas por los agentes sociales invitados desde las más distintas esferas: Confederación Hidrográfica del Júcar, Administración General del Estado, Sociedades Estatales, Administración Autonómica, Administración Local, Usuarios de Abastecimiento, Usuarios de Riego, Usuarios hidroeléctricos, Organizaciones empresariales, Organizaciones sindicales, Consumidores y Usuarios, ONGs, Invitaciones específicas o actores estratégicos en temas específicos. Así, la presencia en el proceso de los distintos participantes ha sido entendido también como un proceso integrador de agentes, no estanco, y justificado en la aspiración de aportar un valor añadido al PRJ desde la participación ciudadana, entendida a su vez desde la concertación y el consenso, alimentado todo ello desde la percepción cualitativa de los participantes. Las comisiones de trabajo creadas y sus objetivos correspondientes son: - - Caudales ecológicos: establecimiento de las bases para alimentar el Plan Hidrológico de Cuenca en relación con la implantación de caudales ecológicos. Calidad de Aguas: establecimiento de líneas de actuación para alcanzar el buen grado ecológico de las masas de agua establecidas a lo largo del río. Restauración de Riberas: recuperación de los ecosistemas de ribera en base a la visión de la conectividad longitudinal y transversal de la vegetación. Revalorización socio-cultural del paisaje: acondicionar los espacios fluviales de acuerdo con sus valores ambientales y patrimoniales posibilitando un uso público del espacio fluvial acorde con dichos valores. Protección frente a inundaciones: integración de las actuaciones de protección a inundaciones desde la visión del Plan de Recuperación del Júcar. Se puede considerar la receptora de las conclusiones del resto de las Comisiones, al objeto de integrarlas en la soluciones a adoptar. con las siguientes funciones asignadas: - Alimentar al PRJ desde los ámbitos temáticos y los objetivos de referencia propuestos por la Mesa de participación. Definir los objetivos propios de la Comisión Establecer un Plan de Trabajo propio 14 - Centralizar aquella información generada en el marco del trabajo de la Comisión, así como aquella que pueda ser requerida por la Mesa de participación Proponer a la Mesa de Participación las conclusiones y propuestas de actuación en la temática que les atañe. El alcance de éste Proceso de Participación, a desarrollar a lo largo del año 2007 por las distintas Comisiones, redundará en un enriquecimiento del diagnóstico del estado actual del río, añadirá valor a la Imagen Objetivo final elaborada en el Plan Global de Inundaciones, ponderará de igual manera la viabilidad técnica, social y económica y ambiental de las actuaciones y, finalmente, elaborará una serie de propuestas para la realización de un Plan de Seguimiento que confirme las distintas estimaciones realizadas. CONCLUSIONES Con la descripción de las obras desarrolladas en los barrancos del Poyo y del Carraixet, hemos pretendido mostrar la importancia y la necesidad de compatibilizar actuaciones de gran envergadura en cauces de tipología mediterránea, con el territorio en el que se desarrollan. Las fases de proyecto y de ejecución de las obras deben estar abiertas de cara a incluir las necesidades que surgen de manera continua, y uno de los objetivos clave es la integración de la actuación en el entorno, de ahí el gran papel de los cauces como vertebradotes del territorio. Asimismo, con la inclusión de los procesos de participación pública se pretende una mayor implicación de la ciudadanía en el desarrollo de los planes de actuación, al aumentar la información, educación y sensibilización de la opinión pública sobre la recuperación y gestión sostenible de cuencas como la del río Júcar. Consideramos que las actuaciones comentadas han sido diseñadas y desarrolladas de acuerdo con las demandas de tipo social y medioambiental que en cada momento ha pautado el territorio influenciado, con lo que estamos seguros que se enmarcan dentro de las directrices del desarrollo sostenible. Un ejemplo claro de ello está en el hecho de que las poblaciones afectadas por las actuaciones descritas han desarrollado de forma muy notable sus nuevas fachadas mirando a estos barrancos, prueba no solo del incremento de la protección frente a las avenidas, sino también al potenciamiento de los valores ambientales de estos cauces. 15