Un Nuevo Intento de Derrocar el Gobierno Venezolano

Un Nuevo Intento de Derrocar el Gobierno Venezolano
Por José T. Guerra - 24 de febrero de 2014
Nuevamente Venezuela es la noticia del día. No hace poco se hablaba de Venezuela debido a la
trágica muerte de la actriz Mónica Spear y su esposo a manos del hampa. Aunque muy
lamentable, sorprende la manera cómo los medios hacen resaltar sucesos como estos como si
cosas trágicas similares no pasaran en ningún otro país de Latinoamérica. En estos días, sin
embargo, la noticia de la cual todos hablan es acerca de las protestas de ciertos grupos de
estudiantes y los hechos de violencia y muerte que han ocurrido como resultado de esas marchas
y manifestaciones en algunas partes de Venezuela.
Debido a la facilidad de las redes sociales, son miles las fotografías (muchas de ellas falsas o
montajes bien elaborados), videos y mensajes que han dado la vuelta al mundo para describir la
situación en Venezuela como caótica y al gobierno del actual presidente Nicolás Maduro como
un gobierno que está reprimiendo, matando y torturando a los estudiantes y sus opositores. Y
muchos, los cuales por distintas razones no simpatizan con Maduro ni la revolución bolivariana,
sin confirmar los hechos, simplemente retransmiten tales mensajes reforzando la impresión de
que en Venezuela sólo reina la anarquía y que su malvado gobierno está masacrando a su propio
pueblo.
El sábado 22 de febrero hubo manifestaciones y marchas en varias ciudades de los Estados
Unidos de venezolanos y otras personas simpatizantes para protestar la "dictadura" y los
"crímenes" del actual gobierno de Venezuela. Afortunadamente, también hubo marchas de
simpatizantes del gobierno del Presidente Maduro manifestando su apoyo a la revolución
bolivariana. Sin embargo, hay personas que en las últimas semanas no han descansado ni un
instante y se han dedicado a enviar y re-enviar mensajes por Facebook, Twitter, Instagram, etc.,
para hacer creer que Venezuela está incendiada y al borde del colapso. Lo mismo han hecho
personajes de la farándula, cantantes, actores y actrices, dando declaraciones y expresando su
preocupación por Venezuela no sólo para crear simpatía sino aun para pedir a la comunidad
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internacional que haga algo para ayudar a sacar al "malévolo" Maduro de la presidencia,
seguramente por medio de alguna intervención extranjera.
Como siempre, cada historia tiene dos caras. Una cosa es la que dicen estos medios y estos
venezolanos opositores y otra es lo que realmente está sucediendo. Es cierto que muchos
estudiantes y otras personas violentas, siguiendo las instrucciones y planes de Leopoldo López,
líder de una organización política de extrema derecha llamada Voluntad Popular, hicieron una
marcha en Caracas el pasado 12 de febrero para protestar contra el gobierno y pedir la renuncia
de Maduro, y que desde entonces muchos de estos grupos han estado protestando en las calles de
diversas ciudades del país, cerrando las vías de comunicación, quemando vehículos de transporte
público, quemando basura, atacando edificios del gobierno, etc. Esto es parte de un plan
elaborado desde mucho antes, después que los opositores perdieran de manera contundente en las
últimas elecciones que se tuvieron el pasado diciembre para elegir alcaldes. Después de esta
derrota, los elementos más extremistas de la derecha venezolana, dirigidos por Leopoldo López,
comenzaron a trazar un plan de salir del gobierno de Maduro mediante protestas callejeras y
usando a los estudiantes. López estuvo viajando a distintos lugares no sólo fuera de Venezuela
sino dentro de Venezuela organizando y promoviendo el alzamiento.
Como la oposición no ha podido ganar en los 19 procesos electorales que se han tenido durante
los 15 años que lleva el Chavismo en el poder, excepto en una sola ocasión, un número de sus
líderes más radicales, apoyados por gente y agencias en el exterior, cree que la única salida es
por medio de la violencia callejera, copiando modelos usados en otros países como Serbia,
Ucrania y algunos países árabes. Leopoldo López incluso llamó a su revuelta "La Salida". Su
idea era salir a marchar y protestar en varias ciudades de Venezuela, y provocar a las fuerzas del
orden público para que hubiera heridos y aun muertos, y así culpar al gobierno de tales sucesos.
Su plan era repetir en gran medida lo que ocurrió el 11 de abril de 2002 cuando los opositores
derrocaron por un par de días a Hugo Chávez e instauraron un breve gobierno de facto.
Afortunadamente esta vez, el gobierno actuó con rapidez poniendo preso a López por instigador
para que rinda cuenta de sus varios delitos contra la patria ante los tribunales.
Como venezolano, a mí me duele mucho lo que está sucediendo en Venezuela. Creo que la
violencia sólo conduce a más violencia. A pesar de los constantes llamados del gobierno a la paz,
estos elementos anárquicos continúan con sus acciones violentas para sembrar pánico y terror en
la población. Ya van más de 10 personas muertas, incluyendo una reina de belleza en Carabobo,
y numerosos heridos, muchos de ellos agentes de las fuerzas policiales y la guardia nacional a
quienes se les ha dado la orden de no disparar a los manifestantes. Algunos de los agentes del
orden público que han usado sus armas han sido apresados y de acuerdo, con el Presidente
Maduro, serán penalizados como corresponde. Sin embargo, entre los manifestantes hay
personas muy violentas que han usado armas de fuego, bombas molotov, alambres y clavos, y
otras armas caseras, y han causado mucho daño, no sólo personales sino quemando edificios,
vehículos transportando alimentos, autobuses con pasajeros, edificios públicos y cerrando las
vías de comunicación, y han dicho que no dejarán las calles hasta que Maduro se vaya. La
violencia ha sido más intensa en municipios donde gobiernan los opositores cuyas fuerzas
policiales en vez de detener a tales elementos desadaptados y violentos los aupan y apoyan
indirectamente no haciendo nada.
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Lo que está pasando en Venezuela no se entiende a menos que sepamos el contexto. Desde que
Hugo Chávez ganó las elecciones en 1998 y se aprobó una nueva Constitución en 1999, la
Revolución Bolivariana ha sido objeto de continuos ataques de parte de los grupos opositores,
tanto de adentro como de afuera de Venezuela. Durante todo este tiempo, los medios de
comunicación opuestos al gobierno, los cuales constituyen un 75% de las fuentes de
información, se han esforzado con algún éxito por mal informar y sembrar odio y repulsión hacia
el Chavismo. A ellos se les han unido poderosos medios extranjeros en una intensa guerra
mediática contra el gobierno socialista de tal manera que cualquier cosa que pasa en Venezuela
es relatada mayormente en forma exagerada o distorsionada con el fin de dejar mal al gobierno.
También el gobierno de los Estados Unidos ha jugado un rol determinante. Ya no es secreto que
en el golpe de 2002 el gobierno de George W. Bush estuvo muy interesado en sacar a Chávez del
poder. Estados Unidos, Colombia y España fueron los únicos gobiernos que aprobaron al breve
gobierno de facto del dictador Pedro Carmona, el cual anuló los poderes y se instaló a sí mismo
como presidente. Para los Estados Unidos, el gobierno de Hugo Chávez y ahora el de Nicolás
Maduro son como una piedra en el zapato, como un legislador estadounidense una vez dijera,
porque ya no tienen la misma entrada a Venezuela como la tenían antes para controlar el petróleo
y otras riquezas minerales con los que Venezuela ha sido bendecida. Así que aunque el gobierno
de Obama lo desmienta, se sabe que detrás de las actuales protestas y manifestaciones está el
apoyo del Departamento de Estado así como otras agencias como la CIA, la NED, la USAID,
por mencionar algunas, que han aportado millones de dólares para apoyar a estos grupos que,
según ellos, están promoviendo la democracia.
Realmente yo lamento lo que está pasando en Venezuela. El gobierno de Maduro está librando
una intensa lucha en varios frentes. Una es contra la criminalidad desbordante que existe y de la
cual fue víctima Mónica Spear y su esposo. Luego está el desabastecimiento de alimentos,
medicinas y artículos de primera necesidad mayormente provocada por comerciantes y dueños
de fábricas que inescrupulosamente acaparan estos enseres con el fin de causar zozobra y
malestar en la población para que le echen la culpa al gobierno. Es una estrategia similar a lo que
sucedió en Chile cuando se propusieron sacar al Presidente Allende del poder en 1973. Además,
el gobierno ha tenido que hacerle frente a innumerables saboteos en las redes eléctricas y hasta
una terrible explosión en 2012 en la refinería de Amuay en el Estado Falcón que puso en peligro
la industria petrolera.
Y uno se pregunta por qué tanto ataque a un gobierno que lo único que ha hecho es desviar una
gran parte de las ganancias del petróleo que antes llenaban las cuentas y bolsillos de una minoría
oligárquica para ahora ayudar a la población mediante programas sociales de salud, vivienda,
educación, por mencionar algunos. Durante este gobierno se le han concedido pensiones a
personas mayores que antes no eran tomadas en cuenta. También se le ha dado su lugar de
importancia a las mujeres, los indígenas, los discapacitados, y se ha inculcado valores como el
amor a la patria y su soberanía. También con Chávez y ahora con Maduro, se le ha extendido la
mano a países hermanos del continente americano y se han formado alianzas de cooperación
como el ALBA y últimamente la CELAC. Venezuela ha sido considerada como un país libre de
analfabetismo y su índice de pobreza ha disminuido considerablemente. Esto no quiere decir que
no haya problemas y grandes retos. El gobierno reconoce que todavía hay mucho por hacer y
mejorar, pero todo el que quiera ver podrá ver las buenas intenciones del gobierno hacia la
población.
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Además, no es necesario recurrir a la violencia para cambiar el gobierno. Venezuela es un país
extremadamente democrático y la gente tiene completa libertad de votar y escoger a quien le
parezca en elecciones libres. Si el Presidente Maduro no está dando la talla, como dicen, a mitad
de su período se puede convocar a un referendo revocatorio y si la mayoría así lo decide a través
del voto, él dejaría la presidencia. Venezuela es tal vez el único país en el mundo que tiene en su
Constitución este mecanismo del referendo revocatorio del presidente. Los que creemos en la
democracia respetamos las instituciones y participamos de acuerdo a las reglas establecidas. El
gran problema con los opositores ha sido que cada vez que pierden no aceptan los resultados y
claman fraude, pero se quedan calladitos cuando ganan. Ahí está el candidato presidencial
opositor Henrique Capriles que ganó por un margen estrecho la gobernación del Estado Miranda
y es reconocido como gobernador. Y como él, hay varios otros gobernadores opositores en otros
estados del país. Y en diciembre pasado, los alcaldes opositores que ganaron fueron reconocidos
y no se cuestionó su victoria. Sin embargo, el trato no ha sido igual de parte de los opositores
hacia los chavistas que han ganado. Parece que para ellos sólo es democracia cuando ganan.
Para mí, no hay duda de que la principal razón por qué Venezuela está continuamente en la
mirilla y a cada rato oímos noticias de Venezuela es porque ya no responde a las órdenes de
Washington y cualquier gobierno que se atreva a hacer eso sufrirá las consecuencias. Yo deseo
que pronto los opositores alzados entren en razón y abandonen su plan de derrocar al gobierno
por estos medios violentos que sólo han causado muertes y destrucción. Me llamó la atención la
foto de un grupo de estos muchachos "pacíficos" en una avenida del este de Caracas, trancando
esa avenida, y uno de ellos tenía un letrero que decía: "Ayúdenos a construir un mejor país" y yo
me dije: "¿Quieren construir un mejor país destruyendo el país?" Es realmente difícil entender la
lógica y la mentalidad de estos jóvenes opositores.
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